Es muy tarde para estar despierta, pero que pedo FANRUBIUS ARMY, te dejo esto :v

Era una mañana fresca en la prestigiosa escuela secundaria Crypton. A pesar de estar tenuemente nublado no impedía a los alumnos ingresar por esas enormes rejas negras para recibir clases, lo cual para muchos era una maldición.

Eran las 7:30 de la mañana, tal vez se deberá a eso el mal humor colectivo… o tal vez porque las vacaciones acabaron y tenían que volver a clases.

Después de una extensa y malditamente aburrida charla de inicio de clases, los directivos ordenaron a sus alumnos ingresar a sus alumnos a sus respectivos salones.

Por más raro que suene, los alumnos vestían su ropa de gimnasia, debido al frío mortal de ningún modo iban a permitir que las chicas (que usaban falda) se enfermaran y faltara...

..

Los alumnos que llegaron temprano ya tenían sus bancos acomodados en fila con sus respectivos grupos, los cuales destacaban totalmente los populares...

Y como en todos los salones, los profesores iniciaron sus clases. Mientras que en un salón de tercero, el profesor ingresó al salón y dio un rápido saludo a los alumnos y estos rápidamente se levantaron de sus asientos en señal de respecto

- Bien chicos, como todos sabrán, es el inicio de clases y tenemos mucho que hacer, recuerden que es su tercer año en el secundario y deben dar lo mejor de sí para aprobar y ser mejores ciudadanos y conseguir trabajo- habló el profesor, un hombre de edad más o menos 30 años trajeado y con cabello castaño y en su rostro unos lentes de marcos negros – En fin, ahora voy a anunciarles que tendrán una alumna nueva, viene desde Londres hasta aquí Japón para estudiar con nosotros, por favor quiero sean respetuosos con ella, debido a que es nueva y a ustedes no les gustaría que los traten mal el primer día, ¿Verdad?– Sin más preámbulos, acércate… Luka san-

De la puerta de clases, ingresó una chica peli rosa de alrededor de 16 años, con algo de dificultad logró quedar frente a sus nuevos compañeros.

La joven atrajo la atención de todos, en especial la mirada atenta de una peliacua, quien desde el asiento del fondo enarcó ambas cejas interesada.

- Bien, Luka san… preséntate ante tus compañeros- la peli rosa asintió y obedeció al profesor

- Hola a todos, soy Megurine Luka y…- la chica dejó de hablar al notar que el profesor le había puesto ambas manos en sus hombros, girándola a trescientos sesenta grados, quedando frente a frente de sus compañeros.

- ¿Qué pasa, no viste que le hablabas a la pizarra?- murmuró en voz baja, un peli azul, pero por el silencio del salón todos lograron escuchar.

Y pronto el aula se inundó de carcajadas de chicos y chicas con bastante actitud desubicada

- L-lo siento…- se disculpó la nueva chica. Atrayendo más y más curiosidad entre sus compañeros.

- Kaito, vuelve a decir eso y te daré una amonestación- el peli azul asintió haciéndose el inocente, cosa que era todo menos real… - En fin, Luka san, ¿Puedes volver a empezar la presentación?-

- Sí… hola, soy Luka Megurine, tengo 16 años y nací en Londres, la capital de Inglaterra y…-

- ¡Aburrido!- dijo un compañero al fondo, atrayendo la mirada de cansancio del profesor, primer inicio de clases y ya algunos se hacían los payasos

- En fin, Luka san… que gusto tener una alumna extrajera aquí- expresó el profesor con genuina alegría –En fin, veamos donde puedes sentarte…-

El profesor pasó su mirada sobre sus alumnos y rápidamente notó que una alumna levantaba su mano, en señal de que la alumna nueva se sentara junto a ella

- De acuerdo, Luka san ¿Te gustaría sentarte junto a Miku san?- inquirió el profesor refiriéndose a la única alumna que tenía levantada la mano. Luka no pareció pensarlo y asintió con una pequeña sonrisa –Muy bien, déjame llevarte hasta ella-

El profesor colocó una mano en el hombro de la Megurine y la guió cuidadosamente entre los bancos de los demás alumnos.

Pero todos al instante quedaron boquiabiertos cuando vieron que Luka tanteaba el suelo con un bastón, dando la conclusión que la alumna nueva… era ciega.

- Muy bien, Miku san. A partir de hoy te encargarás de llevar a Luka san contigo y enseñarle el lugar- la peliacua asintió con una sonrisa.

El profesor regresó a la pizarra a dictar ejercicios de matemáticas mientras que algunos alumnos escribían y otros ignoraban la clase, como cierta peliacua que se hallaba sentada al lado de la chica nueva.

Vaya que en solo pocos segundos ya había atraído su atención, ¿Y cómo no? Tenía un rostro atractivo y de apariencia delicada, su cabello caía como una cascada perfecta por dejado de sus hombros hasta mitad de la cadera, y unos ojos azules y profundos como el océano y unos carnosos labios rosados, sin contar su maravillosa voz, suave, aterciopelada… cosas que la resaltaban de los demás.

- ``Y sin olvidar el físico´´- sonrió la peliacua para sí misma.

Aunque lo que más intrigaba a la peliacua era que el apellido por una extraña razón, le parecía conocido... pero no recordaba por donde...

Y sin darse cuenta, pasó las dos horas de clase admirando a su nueva compañera de clase.

Finalmente llegó el recreo, y Miku se levantó de su silla y le habló a su compañera

- Ne, Luka chan, ¿Te gustaría venir conmigo a un sitio divertido?- la Megurine ni lo pensó dos veces y aceptó. Cosa que alegró a la peliacua –Vamos entonces- la menor tomó la mano de la peli rosa y la llevó a quién sabe dónde…

Luka sintió como Miku caminaba pacientemente delante de ella, mientras que tenía su mano aferrada suavemente a la de la peliacua. Y pudo comprobar lo suave y pequeña que era,...

Aunque tambien estaba atenta al camino que tomaban, al parecer habían pasado el largo pasillo de la escuela y ahora se hallaban subiendo las escaleras...

...

Y pronto, Miku se detuvo y soltó su mano.

Miku abrió una puerta de metal con facilidad ingresando a un lugar bastante iluminado, seguida por la peli rosa Luka

- ¿Dónde estamos? No escucho a nadie más aquí- habló la Megurine

- Claro,.. porque estamos en la azotea- la peliacua rió un poco, cautivando a Luka. Esa voz, suave, aniñada, melódica,… era música para sus funcionales oídos

- ¿Cómo te llamas?- dijo la peli rosa, mientras que dirigía su pobre vista hacia su mano la cual seguía aferrada a la de la peliacua

- Miku, Hatsune Miku- contestó la menor, mientras que sin que Luka lo notara, apretaba suavemente el agarre de sus manos –Y tú eres Megurine Luka, de Londres… ha de ser lindo, he visto muchas películas en donde pasan algunos paisajes de ese lugar, y es realmente hermoso- habló Miku con tono melancólico, a lo que Luka asintió

- Según me dijo mi padre, lo es- al instante se hizo un silencio pequeño para dejarlas a ambas respirar

- En fin, ya que seré tu guía ¿Qué te gustaría hacer?- Luka lo pensó mucho, no sabía que responder… en realidad, no sabía mucho qué podría disfrutar

- No lo sé,… sorpréndeme…- la Megurine se encogió de hombros sin saber realmente qué hacer, Miku posó su mano libre en su barbilla pensando en la siguiente actividad.

- ¡Ya sé! ¿Te gustaría ir conmigo al parque?- Luka palideció a la idea, no la conocía y ya iban a ir a un lado que no conocía, cabe recalcar que era nueva en Japón y con su ceguera no veía ni su propia nariz

- No lo sé,… deberías pedirle permiso a mi padre… si él sabe me dejará- Miku sonrió fascinada, la mayor lucía insegura y el hablar lento la hacía ver bastante adorable

- ¡No te preocupes! De eso me encargaré yo,… la pasarás genial, ya lo verás-

Luka sonrió. Aunque no conocía el aspecto de Miku, no podía dudar que le caía bastante bien.

El día de clases finalizó más rápido de lo que hubieran planeado, pero aunque fue corto los recreos los cuales pudieron hablar, no podían negar que no les ha parecido agradable.

Finalmente la hora de ir a casa, y Miku le indicó a Luka que la esperara un momento en uno de los bancos y espera en el patio.

Miku se dirigió a la sala del Concejo Estudiantil, siendo recibida por una rubia muy amiga de ella...

- ¡Lily Senpai!- exclamó la menor emocionada al ver a su senpai rubia. La aludida reconoció la voz de la persona que la llamaba y al instante dibujó una alegre sonrisa

- Miku chan,… qué bueno verte, ¿Cómo fueron tus clases?- inquirió la mayor al ver a su kohai delante de ella, al parecer muy emocionada.

- Me fueron genial ¡Y también hay una alumna nueva!- Lily enarcó una ceja y esbozó una sonrisa incrédula

- ¿Ah, sí? ¿Cuál es su nombre?-

- Megurine Luka, ¡Y viene de Londres! ¿Puedes creerlo?- Lily largó una ligera carcajada, su kohai lucía muy emocionada y era de recalcarlo...

- Jajaja, ya veo… ¿Y qué vas a hacer ahora? ¿Vas a tu casa?- Miku negó con la cabeza

- Voy a ir al parque con Luka chan…- Lily palideció ante su idea

- ¿Segura que estás bien? ¿No vas a tener problemas con ``ya sabes quién´´?-

- No, mi corazón está bien… supongo, mientras que no me de un infarto frente a Luka chan todo estará bien…- habló calmadamente la Hatsune mientras se llevaba una mano cerca de la zona baja del pecho izquierdo, donde se hallaba precisamente su corazón

- ¿Segura?... Miku chan, no quiero que hagas nada peligroso, quiero que te cuides y si tienes problemas llámame, no lo dudes- respondió la rubia visiblemente preocupada mientras le extendía un sobre de papel de cartón, con quién sabe qué clase de contenido tenga…

- No te preocupes, lo tengo todo bajo control…- dijo la menor recibiendo el sobre y guardándolo en su mochila –Además el médico me dijo que haga ejercicio, pero que no me sobre esfuerce... nos vemos Lily senpai- se despidió la menor de la rubia.

Y se dirigió a Luka, quien luego de hablar con su padre y pedirle permiso, y se dirigieron al parque…

Solo que la Hatsune esperaba que ningún percance arruinara su tarde junto a su nueva amiga…

Ningún percance que pusiera en riesgo su salud…

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