Disclaimer: Este es una historia dedicada especialmente a todos y todas los fans tanto del mundo de Percy Jackson, como de Rick Riordan.

No pertenece nada de aquí. (Solo la historia, claro)

Pero todo lo demás, es propiedad de Rick "El Genio Malvado" Riordan.

Yo solo tome prestados a los personajes para pasar un buen rato escribiendo.

Nota: Este fic participa del reto "Diez años con Percy Jackson", del foro El Monte Olimpo.


Percy Jackson no era un genio como Albert Einstein. Y la mayoría de sus amigos diría que es demasiado despistado y flojo para su propio bien, solo a veces, y hasta él lo aceptaba.

Pero en extraordinarias ocasiones tiene lo que él denomina "la idea del siglo", algo de proporciones épicas y de buenos resultados (por sorprendente que fuera) algo de lo que se enorgullecía.

Este era "la idea del siglo", al menos de este año.

Todo comenzó con un café.

Para tristeza de él, al crecer se dio cuenta de que no aparte del divertido hecho de ser mayor de edad, tener licencia para conducir, tenía "indeseadas responsabilidades" como el resto de la humanidad.

Y pensaba en eso dado que había entrado en la universidad cerca de ocho mesas atrás. Se había formado de hábitos como: levantarse temprano, hacer la tarea y hacer limpieza. Algo que le agradecía a su novia, Annabeth "la responsable" Chase.

Pero remarcando uno de entre tantos hábitos aprendidos de ella, era el tomar café y pastel. Amargo y revitalizante café acompañado por un delicioso y dulce pastel.

Así fue como se dio cuenta.

Pasaba tranquilamente por su dosis diaria, pero al momento de tomarse un momento de paz antes de continuar con su día, se topó con algo que lo hizo sonreír y empezar a mover los engranes de su cerebro en busca de recuerdos lo cual no hacía sino aumentar su sonrisa.

Trato de no parecer tan obvio solo dirigió una mirada más hacia el objeto de su atención, sonrió, le dio un sorbo a su café y decidido reanudó su camino a la universidad.


En la cafetería de la universidad estaba con sus amigos (Piper, Jason, Leo y Annabeth) y decidió anunciar su próximo plan.

—Tengo algo importante que decir—dijo Percy deteniendo la conversación en la mesa.

—No vamos a pedir que hagan café azul—gruñó Annabeth con diversión.

—Es algo más importante—comentó Percy con suficiencia.

Eso atrajo aún más la atención.

— ¿Te vas a cambiar el nombre? ¿Serás estrella porno? ¿Te volviste gay?—preguntó leo sin parar, sonriendo cada vez más como un duende malvado.

— ¡Leo!-gritaron todos a lo que este solo se encogió de hombros.

Fue en eso momento en que Percy pensó que sus amigos no serían de tanto ayuda como él pensaba, pero por otra parte necesitaba de ellos al menos por un tiempo.

Así que decidido a lograr su cometido, lo dejo pasar. De una manera discreta y silenciosa, lo que no quería decir que se había rendido, solo que su plan cambió de rumbo.

—Olvídenlo. ¿Vamos por un café? Yo invito-ofreció sonriendo y suspirando.

—Nos ibas a contar algo-recordó Jason mirándolo expectante.

—Puede esperar, después de todo no es gran cosa—defendió Percy sonriente.

Tenía que ser discreto como un espía y un ninja.

Si. Un ninja-espía. Sonaba genial.

Solo tenía que conseguir un traje negro y nombre clave.

No era mala idea.

Seria…Percy "El ninja-espía" Jackson.

Dubidubidubi Dubidubiduba… Dubidubidubi Dubidubiduba.

Percy "El ninja espía"

Genial.