~ Limerencia ~

Estado mental involuntario, propio de la atracción romántica por parte de una persona hacia otra.

No vuelven a cruzar palabra desde que el beso tiene lugar y Cersei siente un vacío enorme en el pecho. Catelyn ni siquiera se atreve a cruzar una mirada con ella cuando se encuentran cenando y la esquiva de todas las formas posibles. Hasta no acude a la sala a tocar el arpa por miedo a toparse con ella. Su comportamiento esquivo produce una profunda decepción en Cersei, quien quiere encontrar la manera de interceptarla y no dejarla ir sin una explicación.

Consigue hacerlo cuando los hombres del castillo se encuentran entrenando en el patio de armas, estando segura de que Catelyn no podrá negarse a su pedido de una conversación cuando sus familiares están de por medio. Ella duda antes de aceptar su invitación pero su tío la apremia a no hacerla esperar, por lo que se sitúan en la privacidad del pequeño jardín.

—Me debes una explicación, Cat. Me siento abandonada por ti —Cersei dice con sus ojos lo que sus labios no consiguen decir por ella—. Si no encuentras palabras adecuadas para decirme que no sé besar, te abstengo de ello y me disculpo por hacerte pasar un momento incómodo.

Ella no encuentra mejor modo de acallarla que fundiendo sus bocas en un dulce roce. Una mariposa extiende sus alas a lo lejos y emprende vuelo como símbolo de un buen augurio. Al menos, es lo que quiere creer Cersei.

—Te casarás con Edmure. No tengo conocimiento de cuándo será el matrimonio, pero tendrá antes de que finalice el año —lo dice con la voz quebrada y no se atreve a sostenerla la mirada. De repente, todas las piezas comienzan a encajar en su correspondiente lugar—. ¿Ahora lo entiendes? No puedo siquiera soñar contigo porque no estamos destinadas.

Por primera vez en mucho tiempo se queda sin palabras.

—¿Cómo lo…?

—Yo estaba escuchando cuando mi señor padre se lo dijo a Edmure la otra noche. Llegó una carta de Roca Casterly, diciendo que una comitiva se dirige hacia Aguasdulces para negociar los términos de la alianza —dice, dejando entrever sutilmente que Tywin Lannister va con sus abanderados—. Conjeturo que te lo comunicarán cuando arriben los representantes de tu casa.

—¿Es por eso que me estabas evitando? —Catelyn asiente con un movimiento de cabeza y se muerde el labio inferior—. No tienes idea del profundo dolor que me causaste, pero ahora tengo los ojos más abiertos que nunca. ¿No te das cuenta? Si me caso con Edmure significa que viviré para siempre en Aguasdulces, estaremos siempre juntas. Ya no existirá el temor de que mi padre me lleve a Roca Casterly de vuelta.

La muchacha se siente tonta por no verle el lado ventajoso a la unión y haberse sumido en la más pronta desesperación. Cersei tiene razón. Si se casa con Edmure serán hermanas —la palabra suena extraña, ajena a su boca, pero tiene entidad— y no tendrá que privarse de la felicidad que le produce estar en su compañía.

—No puedo soportar la idea de perderte.

—No me perderás, Cat. Suelo ser constante en la vida de aquellos que resultan ser especiales para mí —asegura y le besa cariñosamente los nudillos—. Y tú tienes un lugar de privilegio dentro de mi corazón.

Los Siete Reinos cantan sobre el rapto de Lyanna Stark a manos de Rhaegar Targaryen, pero en Aguasdulces solamente hay lugar para las fantasías que nacen del más puro amor.

Un pequeño paraíso que entrama los más grande sentimientos.