Disclaimer: nada relacionado con x-men me pertenece.


Prólogo

En el momento en el que me encontré de cara y chocando con un hombre alto, vestido de negro, un sweater cuello de tortuga e intensos ojos cuyo color no pude describir debido a la sorpresa que provocó en mí la colisión, supe definitivamente que el traerme a la mansión no había sido la idea más brillante de Moira. Ella me dijo: "tranquila, no vas a encontrarte con nada sobrenatural, Charles es muy accesible y probablemente será lo primero que veas en esa mansión, sin embargo Hank McCoy será quien estará para ti en todo momento y problemas no habrán durante tu estadía", pero la mirada repleta de molestia de aquel sujeto me dijo algo distinto, quizás no era bienvenida, quizás ese hombre —probablemente uno de ellos— me asesinaría en ese mismo instante, no lo sé, necesitaba encontrar a uno de mis tres conocidos y escapar de él con rapidez.

Lo que hice, en realidad, fue quedarme paralizada en el suelo hasta que él, tras desvariar por segundos que parecieron eternos, extendió uno de sus brazos y abrió su mano hacia mí, invitándome a tomarla. Atolondrada y con un poco de dolor en el trasero, supuse que no podía rechazar el gesto y accedí imitando su gesto hasta alcanzar su mano, la cual era bastante suave, para mi sorpresa, y me puse de pie gracias a su fuerza al jalarme.

— Lo siento mucho —murmuré por lo bajo, esperando que me disculpara.

— ¿Quién eres? —preguntó, o quizás demandó a través de ese tono y aquella voz profunda, ronca.

Abrí la boca, contrariada.

— Mischa Grienstern, genetista —respondí—. El profesor Xavier requirió mi presencia hoy.

El hombre soltó una pequeña risa, algo extrañada.

Profesor —repitió, mirándome.

— Yo… —balbuceé.

— Supongo que eres Mischa, la genetista que sugirió Moira —una voz me hizo saltar y separarme mucho más del hombre alto. Miré hacia un lado y tras él se encontraba Xavier, mirándonos con severidad, era primera vez que lo veía en persona pues nos habíamos comunicado con anterioridad, pero solo por teléfono—. No sigas intimidando a los invitados, Erik.

Erik se volteó a verlo y tras unos segundos volvió su mirada hacia mí.

— Yo no hacía tal cosa —se defendió—. Profesor —repitió como si le hiciera gracia, observé a Charles y lo vi negar con la cabeza con un gesto que delataba algo así como entretenimiento fusionado con algo de molestia.

¿Acaso dos personas tan distintas podían ser amigos?

Luego de aquello, el tal Erik se movió hacia un lado y el profesor me indicó con un gesto que lo siguiera, lo cual hice enseguida y no perdí tiempo en mirar atrás, aún sentía vergüenza por aquella tonta manera de haber conocido a uno de los suyos y esperaba no topármelo nunca más.


¡Hola! Si llegaste hasta aquí tengo algunas notas sobre esta historia:

* Antes de llegar a escribir esto realmente odiaba emparejar a Erik con cualquier humano/mutante (a excepción de Charles, para ser honesta) pero llegué a imaginar un escenario en donde una OC podría encajar en su mundo y bueno, es esto lo que salió. Abordaré su infancia muchas veces y eso significa abordar el tema del holocausto, el cual para mí es muy delicado pero lo estoy intentando.

* Es mi primera historia en el fandom y está radicada solo en un periodo breve de First class, por lo que será un fic corto (que puede contener una segunda parte ubicada en los eventos que pasan en Days of future past o Apocalypse, lo cual dudo porque bueno, me hicieron un plot twist enorme en la última -no spoilearé nada, por seguridad-)