Summary: Adrien ha estado demasiado asustado ante la posibilidad de tomar una decisión difícil, así que comete un par de errores, en primer lugar; como Chat Noir, finge su muerte.
Disclaimer: Todos los derechos están reservados a sus respectivos creadores, ninguno de estos personajes me pertenece. Fanfiction sin fines de lucro ni pretensiones de infringir derechos de reproducción, realizado sólo con fines de entretenimiento.
Capítulo 8: Planes.
Siempre tenía ese sueño como mi padre antes que yo.
Así que empecé a escribir canciones, empecé a escribir historias.
Algo acerca de la gloria, simplemente parecía aburrirme siempre,
porque solo aquellos a los que realmente quiero me llegarán a conocer de verdad.
Lukas Graham- 7 years.
.
Adrien no puede recordar la última vez que despertó tan ridículamente temprano. El sol no ha salido y todo está en un inquietante silencio. No puede recordar lo que soñó, pero no está muy seguro de querer recordarlo. Probablemente fue otra pesadilla.
Adrien se levanta lentamente de su cama, intentando no hacer ruido para no despertar a Marinette. Marinette, aquella agradable compañera de clase suya que al final resultó ser una total sorpresa. Nunca le había prestado mucha atención, tan solo había asumido que Marinette era demasiado tímida como para hablar con personas fuera de su círculo social, Adrien antes había sido entre amable y distante con ella, pensando que sólo estaba respetando los deseos de ella. No estaba seguro si se había equivocado, pero eso carecía de importancia ahora.
Amigos. Tan sólo pensar en la palabra le sube el ánimo. A parte de Nino no estaba seguro de poder llamar alguien más de esa manera. Siempre se había sentido solo cuando a la única persona que más o menos caía en esa clasificación era Chloé. Pero ahora también tiene a Marinette, y no le importan las extrañas circunstancias en las que se volvieron cercanos, porque ahora son amigos.
Una sonrisa curvea sus labios mientras observa el bulto durmiente de Marinette. Desde que ella llegó ahí ha pensado que la forma en que duerme es muy curiosa, en sentido vertical y hecha bolita, luciendo como si sólo fuera las sabanas concentradas en un solo punto. Lo único que puede distinguir de ella es su pelo desparramado sobre la almohada. Desde que ella afirmó que eran amigos se siente diferente, un persistente deseo de querer seguirla a todas partes para llamar su atención no lo ha dejado desde la tarde anterior. Se ha resistido, pero todavía no sabe lo que significa.
Le da una especie de miedo.
Al igual que el sentimiento de lealtad recién adquirido, que le hace sentir como un niño perdido. Ha pasado tanto tiempo sin un pilar donde apoyarse que al conseguir uno no está seguro de que hacer.
Apoyar. Es lo que mejor puede hacer, y es por ello que aceptó con increíble facilidad la petición de Marinette la noche anterior.
Ayudarla a escapar va a ser un dolor de cabeza, pero si lo consigue al menos estará haciendo algo.
El colchón en donde Marinette duerme se hunde ante el peso de Adrien. El rubio no duda una vez sentado, poniendo toda la fuerza que puede reunir la empuja fuera de su cama al suelo. El chillido de sorpresa no tarda en aparecer en cuanto el sonido de ella cayendo al suelo suena.
"¿Tenías que despertarme así?" Marinette le pregunta furiosamente en un susurro, levantándose del suelo.
Adrien le sonríe. "Me pediste que te despertara temprano, nunca especificaste como."
A él no le importa si ella luce enojada, el enojo es mucho mejor que el vacío emocional en el que la ha visto inmersa. La distracción es la mejor táctica que tiene para desviarla de los pensamientos oscuros y acciones robóticas, no es bueno intentando hacer cosas buenas por las personas que le importan -como lo del falso suicidio- pero hace todo lo que puede con tal de protegerlos.
Ha cometido tantos errores que ha llegado al punto de cuestionarse todas sus decisiones, está aterrado de que algo más salga mal. Si Marinette quiere escapar de esa institución mental él está dispuesto a ayudar sin cuestionarla mucho, desde la noche anterior donde Marinette le pidió prestado su celular para ponerse al corriente con el resto de París su decisión se ha solidificado. No sabe porque ella está tan desesperada por salir, pero parece importante.
Ambos se preparan para el día en silencio, todo está oscuro y por alguna razón siente que el sol todavía va a tardar en salir. Se miran a los ojos, Marinette asiente y de repente, todo está decidido.
Salir de la habitación es la parte más fácil, la puerta se abre con facilidad, pero el pasillo oscuro se extiende ante ellos de manera amenazante. No conocen lo suficiente bien el edificio y eso es un riego, un riego que están dispuestos a correr. Caminan con los hombros pegados, como si fueran una sola persona, despacio y silenciosamente. Para su suerte no hay nadie en los pasillos hasta que hacen su camino al comedor.
Luego, las cosas se complican.
El comedor tiene salida a seis pasillos, uno de ellos es de donde ellos vienen, del que sí conocen. Todavía tienen bastante tiempo. Marinette dobla al pasillo a la derecha sin vacilar, Adrien la sigue sin saber que esperar. No hay carteles, no hay señales ni indicaciones, todo es como un gigante laberinto.
El pasillo en el que entran resulta ser la zona de los chicos con problemas alimenticios. Adrien no cree que Marinette haya notado cuando abrió la puerta de una habitación al azar y miró a las personas huesudas dentro. Hay una salita con estantes altos y sillones de aspecto cómodos, pero aparte de ello el resto son habitaciones hasta que se topan con la pared y tienen que regresar. Adrien considera salir por alguna ventana, pero después de echar un vistazo a otras se da cuenta de que es imposible.
Todas tienen barrotes y están cerradas con llave.
Es una pena.
Los siguientes dos pasillos son básicamente lo mismo. Los problemas comienzan cuando entran al quinto. Adrien sabe que debió de haber estado al pendiente de la salida del sol, pero antes de darse cuenta el amanecer ha llegado, y con ello, la institución cobra vida.
El quinto son pasillos llenos de cuartos de materiales y mostradores. En ese si hay carteles; Sala de proyección, habitación de materiales, centro de enfermería, indicaciones y sala de descanso. Y Adrien reconoce los pasillos de inmediato, después de todo, él no estaba inconsciente cuando lo llevaron a la habitación en la que ha pasado la última semana- aunque si un poco desorientado y aterrorizado.
Al entrar al quinto tienen que entrar a la primera habitación que encuentran, hay personas en los pasillos, doctores, enfermeras y personas hablando con ellos.
La realización le golpea mientras murmura lo obvio. "Día de visita." Correcto.
Marinette luce nerviosa mientras espía desde la puerta, dos enfermeras se están acercando a la habitación y no parecen querer detenerse a chalar fuera de la puerta.
"¿Qué hacemos ahora?"
Adrien tiene una idea, una muy mala idea. Pero extrañamente no está en contra, y ella necesita su ayuda. Su padre va estar decepcionado con él, y probablemente sólo va a dañar más la relación que tienen, pero vale la pena intentarlo. Su imagen y la de su padre será dañada, pero eso ha dejado de importarle desde hace mucho.
Con un suspiro le sonríe, haciendo una señal para que guarde silencio y se quede quieta. Marinette no tiene tiempo de preguntar lo que está haciendo cuando las enfermeras entran hablando animadamente. Dos golpes en rápida sucesión y los cuerpos están en el suelo.
Algunos conocimientos de cuando era Chat Noir nunca lo abandonaron.
Bastante conveniente.
"¡¿Eres idiota?!" Marinette luce -una vez más- furiosa con él.
Adrien la ignora mientras le quita a una su bata y un suéter mientras se los lanza a Marinette.
"Las enfermeras también tienen pantalones blancos." Adrien reflexiona mirándolas. "Ponte el suéter, la bata y amárrate el pelo en una coleta... ¡Oh! ¡Y ponte ese cubre bocas!"
Marinette se aprieta el puente de la nariz, como si necesitara juntar toda la paciencia del mundo.
"Adrien, tengo 16 años, yo definitivamente no puedo pasar como una enfermera." A pesar de que Marinette le gruñe se coloca la ropa y el cubre bocas. "Además, esto es poco ético." Ella agrega en un murmullo descontento.
Adrien lo sabe, la segunda parte de su plan está destinado en cubrir esa parte.
Vuele a sonreír.
"Bueno… ahí es donde entro yo."
Y mientras Adrien se explica y Marinette se agarra el pelo en una coleta una sensación de nostalgia lo invade.
Es casi como si volviera a tener una aventura como héroe.
Y para él, es suficiente.
Estuve viendo lo de los betas ¡Gracias AlbaSky! :D Sabía que había perfiles para ellos, pero no tenía idea de que se podían buscar de esa manera. De los que había sólo tres cubrían las características que más o menos necesito, pero sigo dudando mucho. No sé si es mi naturaleza como procrastinadora pero no he contactado a ninguno.
En fin, lamento mi ausencia. Pero desde que salí de vacaciones no me he sentido estresada y tiendo a escribir más cuando lo estoy. Es extraño, y poco beneficioso para mí. Saqué ese diez que quería.
En cuanto a la historia, estuve toda la semana anterior intentando construir y escribir algo pero nada venía a mi mente cuando lo hacía. Mirar la hoja en blanco de Word me terminó estresando tanto que -irónicamente- comencé otra historia que definitivamente no voy a subir. Soy mala intentando ser responsable.
¡Los amo a ustedes y a sus comentarios, seguidores y favoritos!
Hasta la próxima.
Me. :D