"Quien ha perdido la esperanza ha perdido también el miedo"

-Arthur Schopenhauer.

¿Qué pasa cuando pierdes la esperanza?

Quizá una de las preocupaciones más profundas del hombre es su futuro. ¿Qué tan incierto podría ser? Y al decir futuro me refiero al día de mañana, al año siguiente, a los 30 años e inclusive después de la muerte. Es por ello que el ser humano a lo largo de su vida decide dar constante importancia de tomar muy en cuenta al presente, ya que de esa forma dependería como seria su futuro, y de no perder la esperanza de que en la medida que viva un presente a conciencia, podemos tener la seguridad y la esperanza de que tendremos un excelente futuro. Y al decir excelente no me refiero a que nos sacaremos la lotería todos los días, los acontecimientos seguirán siendo buenos y malos, pero uno los lleva sabiendo que al final de todo el balance será positivo y por ende el resultado final favorable. ¿Pero qué pasa cuando el hombre llegue a un punto de quiebre? Uno en donde decide tirar la toalla, donde decida mandar al carajo todo.

Existe un sinfín de explicaciones que podrían dar una definición a algo tan complejo como eso. Se dice que cuando un ser humano esta desesperanzado pierde todo, los valores espirituales, la fe en la protección de Dios e incluso se cuestiona porque motivo está vivo. En esta fase de debilidad el hombre pierde una de sus trincheras frente a la desventura, como es la esperanza y con ella, su propia razón. Seria exacto suponer que cuando un hombre esta devastado pueda deberse a la angustia y desesperación que más adelante puede desencadenar la tragedia, el apego exagerado a las cosas materiales y la falta de fuerza espiritual, lo cual aunado al temor a perderlas desvirtúa la realidad y hace caer en un mundo nebuloso y gris de especulaciones negativas, que al magnificar las posibles consecuencias de cualquier situación inconveniente, afecta la mente de forma tal, que presa del terror, se pierde todo valor, espíritu de lucha y se refugia en la peor de las opciones: la muerte.

¿Y porque muchas personas pueden llegar a tomar una decisión tan drástica como esa?

Nuestro modo de pensar puede enfermarnos. Y una de las ideas claves de los Modelos Cognitivos que pueden llevar a la desesperanza es la Depresión, tal como lo han demostrado incontables investigaciones científicas, nuestra manera de pensar puede modificarse en el sentido de la salud.

La Depresión es definitivamente uno de los flagelos de nuestro mundo moderno. Algunos sostienen que se trata de una epidemia silenciosa pues más de la mitad de la población experimentará en algún momento de su vida un episodio depresivo lo suficientemente grave como para requerir asistencia profesional. El problema se revela mucho más serio si se toma en cuenta formas menores del cuadro, como por ejemplo, la Distermia, un diagnóstico caracterizado por un estado de ánimo depresivo pero crónico. Muchas personas pasan toda su vida padeciendo dicha enfermedad, sin nunca si quiera saberlo.

Dada su envergadura, la conceptualización y el tratamiento de la Depresión es uno de los objetivos de cualquier sistema psicoterapéutico. Naturalmente, la Terapia Cognitivo Conductual posee un amplio programa de tratamiento para la Depresión, cuya eficacia ha sido claramente contrastada reiteradas veces en estudios empíricos.

Y a pesar de ser un poderoso ghoul, Kaneki había despertado al fin de ese sueño engañoso, y por esa razón no pudo salvarse de aquella enfermedad mortífera y ese pensamiento de vacío que trajo la desesperanza a él y yace en su interior, tal despertar le hizo recordar aquellas malas experiencias que su mente inconscientemente quiso suprimir en un intento vago por engañarse a sí mismo, lamentablemente dicha revelación le hizo ver que su vida siempre ha tenido un inicio y un intermedio bastante trágico. El tan solo recordar que su propias madre lo maltrataba para desahogar sus frustraciones debido a la sanguijuela que tenía por hermana.

Desde niño nunca supo el verdadero concepto de amor, y es que puedes llegar a ignorarlo, desconocerlo totalmente cuando toda tu vida desde principio lo único que recibes son gritos y golpes. Siempre se preguntó cómo sería el amor de una madre, como sería enamorarse de alguien, como amar a esa persona especial, procurarla. Y sobre todo encontrar la felicidad con ella.

Tal vez por eso cuando conoció a Rize, quedo encantado por el trato amable y el interés que la joven ponía en su persona; un trato que Ken de alguna manera deseaba y ambicionaba con locura. Sin saber que la aquella joven de aspecto amable, cariñoso y sobre todo atenta; escondía un terrible secreto que arruino su vida. Claro que el joven tímido y retraído inconscientemente superpuso el ideal de mujer o más bien lo que deseaba que su madre fuese en realidad. De hecho el casi morir por causa de su primer amor, puso en perspectiva la visión que tenía sobre el mundo que conocía o más bien desconocía.

Claro que también descubrió otro mundo en el proceso, uno mundo más cruel y despiadado que Ken Kaneki de alguna manera logro sobrevivir.

Anteiku, fue el lugar que llamo hogar. Un lugar donde fue aceptado en su nueva condición como Ghoul, donde criaturas como él trataban de pasar desapercibidos en medio de una sociedad que si se descuidaban les darían caza hasta hacerlos desaparecer, claramente los ellos eran superiores, pero los humanos normales había logrado tener las armas para combatirlos y darles caza. CCG, era la organización que el gobierno había creado como contramedida para aquellas criaturas que gustaban de antropofagia. Y sus heraldos… los investigadores especiales, aquellos agentes armados con armas creadas con la carne de los Ghoul y las únicas capaces de darles muerte. Aun así fue capaz de llevar una existencia casi tranquila y normal, fue por eso que de alguna manera le dio las fuerzas para protegerlo sin importar el sacrificio que tuviera que hacer.

Nunca se imagino que sus acciones tendrían la suficiente fuerza como para repercutir en el mundo, que de alguna manera buscó la compensación necesaria para que el joven Ghoul Hibrido pagara.

Esa compensación se llamó Aogiri… la contraparte de Anteiku y también donde Ken Kaneki tuvo su primer despertar. La tortura, la humillación y sobre todo saber que su cordura se iba rompiendo a través del juego enfermo de uno de sus miembros hizo que el joven abrazara el deseo de morir. Pero obtuvo la voluntad necesaria para oponerse y sobrevivir, pero enterrando al chico tímido y retraído que solía ser. Para dar sacar al exterior toda la crueldad y odio que tenia guardados por años.

Y es que solamente se necesita un mal día para perder la cordura…

En ese momento se separó del único lugar que considero un verdadero hogar, con la esperanza de garantizarles un futuro, decidió ir de frente y plantarles cara a la CCG para que los dejase en paz, claro que decirlo era una cosa lograrlo era otra, pues claramente fracaso en su cometido. Fue entonces cuando le conoció por primera vez, fue la primera vez que vio a la muerte de frente, fue la primera vez que deseo morir. Arima Kishou era sin duda la fuerza de la naturaleza que se oponía a los Ghoul, el depredador que la naturaleza había preparado como verdugo de aquellas criaturas que no debían existir. Si Kaneki era considerado un monstruo; entonces ¿Qué era Arima?

Nunca supo la respuesta, como tampoco del porque le permitió vivir como Haise Sasaki.

Aquellas dos palabras eran el nombre de una mentira, de la cual el ghoul de un solo ojo considero verdad; su "yo verdadero" dormía profundamente en su mente, pero para nada era una mala vida, tenía nuevos amigos y subordinados; un trabajo estable y sobre todo dos figuras a las que podría llamar "padres". Era una hermosa mentira si le preguntaban ahora, un rol que disfruto en su momento, a pesar que tras esa nueva mascara que portaba, tuvo que cometer actos atroces en contra de los que alguna vez fueron los amigos y aliados de Ken Kaneki.

Cada batalla que libró en nombre de CCG, cada vida que sesgo como "Haise", ayudaron a romper las ataduras de contenían a la bestia durmiente que realmente era, pero cuando logro por fin ver la luz del día… se había dado cuenta del daño que había causado y supo de antemano que cada acto que había hecho hasta ahora había sido un error.

No había marcha atrás en la cadena de errores y mentiras que había realizado con respecto a su situación como investigador, solamente le quedaba buscar la manera de enmendar la situación de alguna forma. Fue momento de poner sobre la balanza que era importante para él, nombres como Kuki Urie, Saiko Yonebayashi, Tooru Mutsuki y Ginshi Shirazu aparecieron en su mente. Nombres que no debían de tener un peso en comparación de aquellos que valoraba en su pasado pero que al final lo orillaron a cometer una acción completamente arriesgada.

Fue entonces que preparó el escenario de su último acto como Haise Sasaki y regresar al mundo como Ken Kaneki. Para poder redimirse tuvo que capturar a Eto y a liberar a esa dulce niña llamada Hinami, una vez cumplido aquellos dos objetivos sintió que su trabajo había terminado, por lo tanto no tenía sentido seguir con vida, ya no tenía nada que hacer en este mundo tan cruel.

Tal vez la vida se encargó de arrebatarle muchas cosas, pero al fin el actuaría como un completo egoísta sin importarle las consecuencias de su decisión, pues el solo tenía un objetivo en claro.

¿Podría darse el lujo de tener una muerte digna?

No lo sabía y no le importaba, ya no tenía sentido permanecer con vida y por primera vez en toda su patética vida él podía darse el lujo de cumplir con su capricho. Él lo había decidido, el día de su muerte seria el día de hoy.

Ahora, en este preciso instante, veía la cosa algo diferente. Se puso en el lugar de Amon, y creyó comprender un poco mejor el motivo que le empujó a tomar esta decisión, teniendo al alcance otra opción.

¡Eres un completo idiota! – una voz resonó en su mente reprendiéndolo de sus acciones

Sí, quizás Touka tuvo toda la razón. Tenía que admitirlo fue bueno conocerla, con sus virtudes, defectos y esos arrebatos de agresividad, pero se arrepentía de haberla abandonado cuando más lo necesitaba. En definitiva, ella tenía razón. A fin de cuentas solo era un bastardo egoísta que se esconde tras las faldas de un héroe trágico queriendo ganar más poder con el pretexto de proteger a los demás e irónicamente una vez más iba a abandonarla.

Esto me trae recuerdos Arima-san – la voz de Kaneki sonaba tranquila a pesar de estar enfrentando a quizás la muerte misma.

El aludido solo lo observaba estoicamente mientras veía como se quitaba su chaqueta negra, dejando a relucir sus marcados músculos.

Me engañaste por completo, me convertiste en un desconocido y gracias a ti viví estos dos últimos años en una vil y estúpida mentira. ―Continúo el ex investigador hablando con una extrema parsimonia mientras se quitaba las gafas―.Pero no te culpo ni te odio, porque también disfrute vivir así y en realidad te veo como mi salvador.

Arima se mantuvo en silencio ante los reclamos de su antiguo discípulo e indudablemente su "hijo", la animosidad entre ambos era similar, por un lado Ken no deseaba esta batalla, era un sentimiento que solamente había aflorado cuando se enfrentó por primera vez a Amon, claro que en esos instantes tenía otra manera de pensar, de alguna manera deseaba mantenerse "humano" a los ojos de los demás, pero esta vez era completamente diferente en todo los sentidos.

El compartía un lazo con la persona con la que combatiría a muerte por segunda ocasión, "Haise" de alguna manera aún continuaba dentro de él, estaban presente los recuerdos de cuando portaba esa mascara que el "Shinigami de la CCG" le había otorgado.

Pero recordó la cosa más importante que Kishou Arima la había enseñado, jamás hables con los Ghoul y el haría lo mismo con el, tal vez era la mejor idea para sobrellevar la carga de esta pelea.

No pudo ocultar una escueta sonrisa, al menos sabía una cosa, que Hinami y Touka estarían a salvo.

Con ese pensamiento, pronto su kakugan se manifestó en su ojo izquierdo, seis extremidades aparecieron en su espalda baja, Arima miraba impávido aquella transformación, un deje de decepción apareció en sus facciones, afianzó el portafolio en sus manos, se acomodó levemente los anteojos como si la amenaza frente a él fuese tan peligrosa como lo sería algo cotidiano, el portafolios dio paso a su quinque, un arma que Ken conocía perfectamente ya que un tiempo fue su arma. El filo de "Narukami" se mostró amenazante en las manos del Segador de la CCG, un Aura que ni el propio Kaneki era capaz de emitir cuando aquella arma estaba en su posesión. La prueba definitiva que su maestro y padre le había puesto estaba a un nivel mucho mayor que el Segador Negro.

Encorvándose levemente el Ghoul de un solo ojo se preparó para arremeter con sus seis extremidades, las cuales apuntaron amenazadoramente hacia Arima Kishou, quien imito la acción con su quinque, esperaron uno instantes para desatar su furia, haciendo estremecer hasta los cimientos de la fortaleza de Cochlea. Acortó la distancia que había entre ellos dos sus rinkakus trataron de cortar la carne del investigador con ferocidad y brutalidad, solamente para ser detenidos por el filo del quinque de Arima, Ken no se mostraba sorprendido por la férrea defensa de su mentor, decidió variar sus ataques con la experiencia ganada con sus prácticas que sostuvo tanto con Arima como con Akira Mado. Dos de sus rinkakus se afianzaron sobre los barrotes de la protección de aquel puente para simplemente hacer que el joven volara por el aire mientras que los otro cuatro extremidades se endurecieron en extremo como si fuesen lanzas, gracias a la aceleración sus tentáculos, se clavaron en el metal, pero desgraciadamente su presa previo ese movimiento alejándose de con rapidez, a distancia que el Segador había creado fue recorrida por el mismo hombre.

Kaneki estaba sorprendido y sobre todo abrumado por la inminente respuesta de Arima, el investigador mantenía una expresión tranquila, cosa que su discípulo decidio imitar, pero sus facciones se tensaban traicionándolo. Los rinkakus dieron varios latigazos para tratar de lastimar al investigador, el filo de Narukami se movio a velocidades vertiginosas rechazando cada golpe que el hibrido trataba de dar sin éxito, la diferencia entre ambos era bastante clara. Ken sabía que tenía la mejor mano, gracias a la evolución de su poder, debido a que había canibalizado a Eto, pero Arima continuaba defendiéndose sin mucho esfuerzo. Danzando a través de ellos, traspasando la defensa impenetrable que debían de ser, pero que el investigador perforaba con una tranquilidad inhumana.

El monstruo que debía ser Ken Kaneki en esos instantes mostraba más humanidad que el humano llamado Arima con sus habilidades que lo hacían un monstruo.

El segador negro desistió en su embate, sopeso sus oportunidades. La única manera de tener una posibilidad de ganar era utilizando todo su poder para sobrepasar al monstruo que era Kishou Arima, pero no sabia cuanta ventaja le daría en contra de su mentor, suspiro tratando de aclarar su mente, el negro de sus extremidades extra se mezclaban con la sombra que generaba esa sección de la fortaleza, dando una sensación de amenaza, pronto estas empezaron a agitarse con violencia, señal que el siguiente ataque será devastador. El segador de CCG mantuvo el agarre en su quinque, el filo de Narukami solto leves chispas. Pronto ambos se lanzaron frente a frente destrozando el puente donde combatían.


Irónico, ese era el pensamiento del Ghoul de un solo ojo al mirar a su alrededor, en el punto más bajo de Cochlea, se encontraba un campo de flores, el mismo escenario donde lo derrotó la última vez, su cuerpo estaba realmente maltrecho y difícilmente podía considerarse humano, un término que encontró desagradable en su boca.

No tenía brazos, ni tampoco piernas; sabía que su mentor era una clase de persona metodista que sabía cómo superar con su fuerza a sus oponentes, pero de alguna forma no sintió odio provenir de él, de hecho un sentimiento de nostalgia embargo el corazón de Ken, mientras que en silencio el Shinigami se acercó hasta encontrarse de pie frente a él.

So rostro se mostraba impasible y estoico como si ese acto no hubiese tenido importancia alguna, pero el deje de tristeza aparecía levemente en los ojos del albino.

Arima también había sufrido heridas leves. A decir verdad era la primera vez que un ghoul lo había herido de esa manera, una parte del investigador sentía orgullo por el pequeño logró que su discípulo había logrado en esos dos años que estuvieron juntos. Alzo levemente su quinque para tratar de eliminar lo que tal vez fue su único error.

¡Arima–san! ―Un sujeto irrumpió en el lugar, entrando como desesperado a la plaza principal y avanzando hasta el herido investigador con urgencia.

¿Qué quieres? ― el investigador no se dio la vuelta manteniendo su atención en el moribundo ghoul que estaba tirado frente a sus pies.

¡Un grupo de desconocidos nos está atacando! ―Le informó alarmado y lleno de pánico―. ¡Debemos irnos, señor Arima!

No hubo más explicaciones, una parte de las instalaciones explotó por completo frente a sus ojos, haciendo añicos su supuesto material indestructible. La fortaleza comenzó a congelarse. Como la invasión de los ghoul en la base en la que se encontraba se había encargado de diezmar a la mayoría de los investigadores, no había nadie que pudiese contrarrestar aquel grupo que venía entrando.

¡Hay que salir de aquí!, debemos resguardarlo pronto ―Aquel hombre no lo pensó dos veces, tomó del brazo al cegador de la CCG y comenzó a correr en dirección a la zona de escape central en donde un helicóptero de la CCG ya los esperaba.

Kaneki miró desde el suelo el pánico en todos y las enormes flamas alzándose con sus colores naranjas y rojos por todos lados, los agentes de la CCG. Caer uno a uno frente a él y los sobrevivientes correr de un lado a otro sin saber qué hacer. Pero entre todas las cosas que pudo olfatear, detecto el aroma de un chico aproximadamente de unos 17 años, uno que salía de entre el fuego completamente ileso, portando una chaqueta oscura y cabello castaño, y en su brazo derecho yacía un guante rojo metálico con una esfera verde en el centro de la mano, no sabía quién era, pero había algo en su rostro que se la hacía demasiado familiar.

¡Aquí hay un herido! ―El muchacho gritó, dirigiéndose rápidamente al cuerpo en el suelo―. ¡Kiba, Koneko-chan sigan a esos bastardos y no dejen que escapen! ―Indicó a sus amigos, quienes no muy convencidos asintieron y volaron con presura tras Arima y sus hombres―. ¡Oh carajo! ―El castaño se hincó al lado de Kaneki, observándolo con pánico y alteración. Kaneki alcanzó a toser un poco y entonces Issei notó que el chico que estaba tendido en aquel campo de flores, solamente era el torso ya que las extremidades habían sido cortadas―. ¡Resiste, resiste amigo estarás bien! ― Le prometió, mirando de un lado a otro sin saber qué hacer, apretando fuertemente la quijada ante el panorama tan tétrico que se mostraba frente a sus ojos.

H…Hide. ―habló Kaneki forzadamente, llamando la atención del joven castaño.

¿Hide? Quién es… ―Issei no termino de hacer su pregunta ya que Kaneki volvió a vomitar sangre, recuperándose de esa bocanada que le restaba más de su líquido vital carmesí, volvió a tomar aire, no sabía para cuanto más le alcanzaría la vida.

El… rey… de un… ojo...―Tosió, ensuciando el brazo de Issei con la sangre que se derramó entre sus labios, pero este sólo lo sostuvo de la cabeza con más fuerza. Issei estaba totalmente desorientado, ese chico estaba sufriendo mucho y aun así ni con el twilight healing de Asia podría salvarlo.

¡¿El rey?! ¡¿De qué hablas?! ― Issei pidió más información, y Kaneki, se obligó a permanecer con vida.

Aogiri… el rey. ―El ex segador negro miraba a la nada, mientras que su cuerpo empezaba a convulsionarse con violencia

No hables… ―Dijo con una mirada llena de lastima mezclada de confusión y shock, mirando a una de sus amigas y llamándola para auxiliar a Kaneki quien sentía su muerte muy cerca.

No dejes… vivo al rey… por favor… ―Rogó, mirando posando esos ojos vacíos en la figura de Issei

Tranquilo… yo me haré cargo lo prometo…―Respondió suavemente, mirando también a Asia quien derramaba lagrimas por la desgarradora escena. Sabía que el chico iba a morir, pero de alguna forma se aferraba en una vaga esperanza por ayudarlo, no sabía porque lo hacía, pero lo que si sabía es que solo se estaba engañando a sí misma.

Issei-san. ―La ex monja hablo con un tono de voz apenas audible, Issei comprendió bien, tomo ambas manos de la joven rubia y las bajo lentamente deteniendo la magia de Asia en el proceso, lo único que podían hacer por el joven, era acompañarlo en sus últimos minutos de vida.

Sin embargo, Kaneki tocando la agonía, encontró en esa voz y personalidad del castaño el rostro de quien le resultaba parecido, la única persona que lo había salvado de su soledad, la única que se atrevió a hablarle justo cuando ningún otro niño lo hacía, la única luz que había aparecido en ese mundo lleno de mierda, y sin más la menciono confundiéndose entre sus delirios.

H… Hide, n-no te vayas. ―Issei frunció más el rostro al escuchar aquel nombre, era claro por la mirada perdida carente de cordura y la voz ansiosa indicaba que esa persona era muy importante para ese muchacho. El emperador rojo se inclinó y tomo su cabeza con mucha delicadeza sosteniéndola firmemente - Estoy aquí.

Te extraño. ―Issei sintiendo un nudo en la garganta cuando los ojos vacios del joven le miraron con cariño, sin más remedio asintió correspondiéndole con una amarga sonrisa. Asia definitivamente lloraba debido a los delirios del pelinegro además la situación era demasiado trágica para ella. Queriendo parecer maduro y capaz de controlar la situación el Sekiryuutei dando un apretón al cuerpo de Kaneki para reconfortarlo, y éste comenzó a llorar fuertemente a pesar de no tener ojos, cargado de sentimientos de nostalgia y culpa que llevaba arrastrando por años enteros, por el arrepentimiento, por mirar una vez más ese rostro que dejó morir hacía muchos años―. Perdóname… por dejarte solo. ―Dejó salir entre un par de labios secos y grietados, soltando lágrimas que desfilaban sin fin al mencionar aquellas palabras que nunca tuvo el valor de decirlas.

No te preocupes, amigo todo está bien, todo está bien…―Le respondió Issei para calmarlo con voz apenas audible como el si fuese aquella persona, haciéndolo justo a tiempo, pues Kaneki dio un último respiro un segundo después, finalmente las lágrimas cesaron, al igual que su pulso.

¡N-no respira! – fue la amarga confirmación que solto la portadora del Twilight Healing

El tiempo pasaba y la sacerdotisa continuaba obcecada en la infructuosa resucitación, hasta que una mano cálida se posó firmemente en su hombro. Levantó la cabeza y miró a Issei, quien le negaba con los ojos cerrados y la cara descompuesta en tristeza. La voluntad de Asia desfalleció, por completo y pese a saber perfectamente las cosas que contemplaría ahora siendo un demonio ésta muerte le dejó un sinsabor particular y fue incapaz de contener varias lágrimas de dolor. Le mataba la impotencia y la ansiedad.

¡Issei! ― Rías finalmente llegó junto a Rossweisse y Sona a auxiliarlo, pero el mencionado negó, indicándole que no había más que hacer, el chico estaba muerto. Dejó caer suavemente su cuerpo en el suelo, poniéndose de pie y mirando con odio puro el firmamento.

¡Malditos bastardos! ―Gritó enfurecido, estaba a punto de liberar su balance Breaker y salir disparado en dirección al área de despegue, sin embargo la delicada mano de Rias se lo impidió. Sin más remedio y observando con frustración, miró la nave elevarse en el aire.

Oye… Un pequeño Hide de siete años de edad, vestido con un short y una playera amarilla con negro se acercó sonrojado y nervioso en la orilla de un parque de juegos en medio de un hermoso atardecer, se atrevía a preguntar. ¿Tú eres ese niño que siempre anda leyendo libros en la escuela verdad?

La pregunta tomó desprevenido el pequeño Kaneki, quien abandonó su relajada postura y bajo su libro de golpe. Miró al con mucho nerviosismo, quizás era otro niño que también lo molestaría.

¿E-esta m-mal? - Hide le sonrió tranquilizando un poco al chico tímido.

No quise decir eso. ―el chico rápidamente se sentó junto a él. ―Me mude recientemente aquí por lo que no tengo amigos, ¿quisieras ser mi amigo?

El chico estaba nervioso, nunca antes le habían preguntado eso, por lo general en su escuela era molestado por otros niños más grandes que él, cada día que pasaba siempre hallaban la forma de humillar al pequeño Kaneki, ya sea tirando sus libros al escusado o humillándolo en frente de todos los niños de formas comúnmente usadas por los abusivos del colegio.

Etto. E-esta b-bien – el pequeño Ken mostraba un poco de vergüenza ante la petición pero no pudo ocultar su alegría

¡Genial! ―Hideoshi no pudo evitar esbozar una sonrisa de alegría, tanto así que el efusivo joven tomo una de sus manos mientras se presentaba formalmente.

Mi nombre es Hideoshi, Hideoshi Nagachika ¿Y el tuyo cuál es?

K-kaneki. Ken Kaneki ―El chico unas vez más le sonrió mientras ambos estrechaban sus manos formando así un vínculo muy fuerte de amistad.

Oye Kaneki… ¿Qué harías si te dieran una segunda oportunidad? ― Hide hizo una extraña pregunta tomando por sorpresa a un mayor Ken Kaneki

La luz era demasiado molesta, tanto que tardo en abrir sus párpados, y no le permitía respirar. Las fuerzas comenzaron a volver a su ser. — ¿La aprovecharías? Todos merecemos una segunda oportunidad.


La visión de Kaneki estaba aclarándose. Había recuperado la consciencia, cuando por fin abrió los ojos:

Despierta. Una voz femenina pero imponente se escuchó en su cabeza,

Una luz delicada comenzaba a iluminar aquel lugar lleno de tinieblas, abrió pesadamente uno de sus parpados solo para contemplar aquel polvo brillante que estaba materializándose frente a el, Kaneki creía que se trataba de alguna idiotez o algún sueño muy raro, pero entonces fue cuando pudo comprobar realmente que todo aquel mal rato que paso fue real.

Despierta. —Una vez más insistió la voz femenina…

Cuando por fin abrió los ojos pudo observar a una hermosa joven, aparentemente de la misma edad de Hinami, de cabello negro y corto, y de ojos violetas. Ella lleva un par de gafas de color rojo y el uniforme escolar distintivo de las chicas de la Academia Kuoh. Eso causo extrañeza en el joven ghoul, por el hecho de que esa escuela estaba casi del otro lado del Japón.

Bienvenido al mundo de los vivos. — Dijo la chica con voz solemne—. Ken Kaneki.

Kaneki intentaba sopesar una y otra vez lo que pasaba a su alrededor, se suponía que debía estar en los confines más profundos del infierno, se suponía que al fin había obtenido la paz que tanto deseaba, de hecho ese fue su maldito plan desde que recobro sus recuerdos, pero entonces.

*¿Porque diablos sigo con vida?*

¿Quién mierda eres tú? —Pregunto sin el más minino tacto en su tono de voz—. ¿Que hago aquí?

La joven no hizo nada, solamente observaba completamente a su nueva torre, ella misma había presenciado todo el alboroto que había ocurrido en las instalaciones de la CCG, evidentemente sabía quién era el, que clase de criatura era y sobre todo por qué le apodaban el segador negro. Las clases estaban a punto de terminar como normalmente pasa en cualquier día normal. Ambos se miraban fijamente tratándose de descifrar todo con la mirada, duraron así más de 5 minutos hasta que alguien decidió ceder. Ajustándose un poco las gafas al fin la chica decidió hablar.

No deberías dirigirte así a tu ama. – había un tono de molestia en la voz de la señorita frente a Ken - ¿Acaso no te enseñaron modales?

¿Ama?,—Kaneki creyó que era una clase de chiste barato y sin gracia, así que sin pensarlo dos veces se levantó del pupitre y se dirigió a la salida, se detuvo un instante tratando de comprender lo que sucedía – No sé de qué "Ama" estás hablando… - el ghoul miro de soslayo – Al menos deberías presentarte –

Perdon, mi error – la joven se ruborizo por el pequeño desliz que había tenido – Mi nombre es Sona Sitri… Y soy tu nueva ama

¿Sitri?¿Ama? – el pelinegro se mostraba cauto ante esas palabras – Vaya me ha tocado una loca con síndrome de octavo grado… al menos decidiste usar algo inteligente – Sona abrió levemente los ojos ante el evidente insulto del ghoul – Bien por ti por leerte el Ars Goetia

El joven investigador ignoro levemente a la jovencita mientras revisaba su cuerpo, noto que sus ropas había sido cambiadas, lógicamente no vestia los harapos en que se habían convertido su traje de combate, vestia una camisa de camida larga y un pantalón de vestir negro, zapatos negros. Ken noto la calidad de las ropas, una de las pocas cosa que Arima le había enseñado aparte de como combatir ghoul de manera eficiente era escoger la ropa apropiada para un investigador de la CCG, por eso supo que lo que ropas eran bastante caras.

La sorpresa en los ojos del ex investigador no se hizo esperar, suspendido en el aire, con un brillante azul pálido, noto como un extraño símbolo impedía su salida de aquella sala, dio unos paso atrás llevando una de sus manos a la cabeza, tenía la misma amarga sensación de cuando supo que había sido convertido en Ghoul en corta de su voluntad, claro que esa vez era una persona completamente diferente pero ahora la situación era otra. Sentia como la ira empezaba a llenar sus pensamientos, una mirada despectiva se asomó por sus dos ojos, lentamente su ojo izquierdo empezó a cambiar de color, la esclera se ennegreció por completo y el iris se volvió de un rojo brillante.

No sé qué carajos estés haciendo pero detente. —Kaneki observaba a Sona con su kakugan, después de todo al cometer canibalismo y al comerse la coraza de Eto este había desarrollado un kakugan más escalofriante así como también perfeccionar su kakuja de una forma realmente monstruosa—. Mi paciencia se agota.

No iras a ningún lado. —Respondió de forma monótona. —Debemos hablar.

Kaneki observo a la presidenta del consejo estudiantil con una mirada llena de incredulidad y de sarcasmo.

¿Hablar? —Le pregunto una vez más con esa voz acida y carente de emociones. —Yo no tengo nada que hablar contigo.

Te equivocas, tenemos mucho de qué hablar – Sona se cruzó de brazos manteniendo su postura de superioridad

El segador negro observo como aparecían los miembros del concejo estudiantil uno a uno, a pesar de todo podía ver un atisbo de temor en los ojos de los presentes, en especial de los miembros del sexo femenino, quienes mantenían una distancia bastante prudente, inclusive la vise presidenta se veía algo abrumada de la imponente presencia del nuevo miembro. El ghoul les mandaba una mirada despectiva a los presentes e indudablemente el salón estaba cubierto con un aroma bastante familiar para él. No eran ghouls, pero tampoco humanos, no sabía qué clase de criatura eran y comprendió por qué no podía salir del aula de clases.

No lo repetiré… déjame irme – la voz de Ken mostraba era bastante amenazante –

Es algo que no puedo permitirte – la joven se mostró tranquila ante la peligrosidad que denotaba su nueva adquisición – Estas confundido y es mi deber como tu ama – Sona camino tranquilamente hasta un escritorio que estaba frente a ella para sentarse sobre el – aclararte ciertas dudas

El ghoul relajo su postura levemente, el resto de los recién llegados imitaron la acción pero sin dejar de mirar fijamente al pelinegro quien se mantenía atento a sus alrededores, Sona cruzo las piernas dándole un aire de arrogancia y una sonrisa que denotaba su estatus frente al joven, ese tipo de comportamiento estaba crispando los nervios de Kaneki, no era por la evidente falta de respeto que tenía con él, sino que físicamente le recodaba a la Touka de hace dos años. Solto un bufido de exasperación, ya empezaba a comparar esa joven irrespetuosa con su vieja amiga.

Al menos Touka las tenía más grandes – un comentario sarcástico salió de los labio del hibrido –

Hare como que no escuche eso – Sona se sonrojo levemente comprendiendo a que se refería su nuevo sirviente – Lo primero que te diré que es que moriste

Esa última revelación hizo que Ken diera perdiera levemente el equilibrio, se agarro fuertemente la cabeza, varios flashazos de recuerdos inundaron su mente en ese instante, su respiración se agito y sus ojos temblaban ante la ansiedad de la que estaba siendo presa, miro sus brazos y piernas, indudablemente habían sido regeneradas, pero aun con sus capacidades como Ghoul eso le tomaría tiempo, quizás un par de días, una risa empezó a salir de su garganta, tal vez estaba en el inframundo y este era su infierno personal. La risa de Kaneki hizo que los jóvenes a su alrededor se mostraran tensos ante la reacción del su nuevo compañero, no muchos reaccionaban de esa manera, un ejemplo eran Issei y Asia quienes tomaron la situación con mayor naturalidad.

Ya veo – el ghoul recupero la postura mientras su respiración se normalizaba – entonces estoy en el infierno… e imaginar que seria una escuela

Primero dije que moriste – Sona continuaba serena ante el desplante del ex investigador – Mas nunca dije que estuvieras muerto

¿A que te refieres? – el pelinegro miro fijamente a la joven sentada en el escritorio - ¿Qué me reviviste?... Vamos no bromees – el joven esbozo una sonrisa cargada de ironia

De hecho es verdad… Ken Kaneki – nuevamente la sonrisa en el rostro de Sona hizo su aparición – Lo hice porque vi tu potencial como mi sirviente –

La tensión y la temperatura cambiaron drásticamente alrededor de la figura de Ken Kaneki, pronto la sonrisa de su rostro se borró por completo, camino con lentitud hasta donde se encontraba sentada Sona, olvidando toda delicadeza en su persona tomo del cuello del uniforme a la que debía ser su salvadora, el resto de los jóvenes se tensaron preparándose para arremeter contra del Ghoul, pero una simple mirada de la joven de lentes les hizo desistir de cualquier acción.

¿Sirviente? – el ghoul miraba con despecho a los ojos violáceos de Sona – Acaso te crees una persona de la nobleza…

No me creo… lo soy – de nueva cuenta la superioridad en las palabras de la joven hizo acto de presencia - Soy la heredera de la noble casa Sitri, una de las 72 familias fundadoras de la inframundo y una demonio de clase alta

¡CORTA CON EL ACTO DE CHUUNIBYOU! – el pelinegro se molestó por las palabras de la joven – ¡LOS DEMONIOS NO EXISTEN!

¿En serio? – Sona ladeo la cabeza mientras sonreía encantadoramente - ¿Cómo explicas la barrera que no te deja ir? – ambos sostuvieron las miradas uno contra el otro – O piensas decir que es tecnología de CCG… - la arrogancia en la voz de la Sitri continuaba molestando al hibrido – me imagino que diras que esto es un kakugan

De la espalda baja de la joven brotaron dos alas de murciélago negras, un leve deje de sorpresa y la repentina aparición de aquella extremidades extra hizo que soltara a la chica, dio unos pasos hacia atrás, pronto noto que el resto de los jóvenes a su alrededor imito la acción de Sona Sitri, Kaneki se dejó caer al suelo, visiblemente perturbado por la situación enferma en la que estaba metido, no se comparaba en nada cuando Touka amablemente le hizo ver la realidad de su situación o de alguna manera el mismo bloqueo sus reacciones en esos momentos.

Como te dije anteriormente – Sona se arregló su uniforme mientras se acercó al perturbado joven – Moriste hace unas horas, tu cuerpo estaba prácticamente destrozado y diste tu ultimo respiro en esos momentos – la suavidad con la que narraba los eventos enfermaron en demasía al joven arrodillado – Hace poco tiempo la facción demoniaca se enteró de la existencia de los Ghoul en el mundo, pero extrañamente solamente es una especie endémica dentro de los distritos de Tokyo – Ken puso atención en las explicación de Sona – El número de tu especie es reducido y se puede considerar en extinción, no sabemos si son una evolución natural de la humanidad o una mutación – el ghoul miraba fijamente al rostro de la joven – Tu especie llamo nuestra atención para reclutarlos en nuestras fuerzas… era una lástima que cuando llegamos al lugar donde estaba siendo confinados no pudimos hacernos de ustedes

¿Qué me estas tratando de decir? – Kaneki aun no coordinaba correctamente sus ideas

Estoy tratando de decir que nosotros teníamos planeado reclutarlos a ustedes como miembros principales en nuestras fuerzas. No cabe duda que unas criaturas excepcionales como ustedes servirían bien en nuestras filas – La frialdad en las palabras de Sona enhervó la sangre del ghoul pero logró disimularlo

Sin duda, la frialdad de Kaneki para manejar la situación era realmente increíble. Cualquier otra persona estaría confundida y hasta aterrada de tratar de si siquiera pensar en las palabras de aquella joven impertinente, pero entonces, si esa chica decía que pertenece a un noble clan de demonios entonces le daba la completa impresión, prácticamente la chica le estaba dando a entender que esclavizarían a los ghouls capturados. Furia, una creciente furia comenzó a emerger dentro de su ser, sintió que en lugar de sangre la propia lava corría de forma salvaje por sus venas.

Maldita perra – leves espasmos estaban manifestándose en el cuerpo del ghoul, de tan solo pensar como aquellas criaturas usarían a la pequeña Hinami como una simple herramienta, le calaba en lo mas profundo de su ser.

No hubo necesidad de más charla, en menos de un segundo dos extremidades tan rojas como la sangre emergieron de la espalda baja del ghoul apuntando de forma amenazadora a la presidenta del consejo estudiantil.

Debería hacerte pedazos ahora mismo – la ira estaba manifestándose en las acciones del antiguo investigador

¿Porque la molestia? – a pesar del evidente peligro Sona no se mostraba asustada – Tu no hacías lo mismo con los humanos que se volvieron tu alimento – Kaneki abrió levemente los ojos pero su dos extremidades extra se mantenían firmes – En nuestro caso imagina que serían nuestros sirvientes, no tendrían que preocuparse por la sociedad y ser cazados por la CCG

¡ESO NO CAMBIA EL HECHO DE SER SIMPLES HERRAMIENTAS! – todo el cuerpo del híbrido se tensaba - ¡Al menos el cazar humanos es parte de nuestra naturaleza...!

!Un pretexto para justificar sus crímenes! – la Sitri cerró sus ojos ignorando completamente el arrebato del ghoul- Las demás facciones habían decidido intervenir para exterminarlos, pero debido a que estaban concentrados en una sola región facilitó el postergar esa acción- Ken apretaba los puños ante la verdad – el problema radicó en las armas que nacieron de sus cuerpos... los quinques se volvieron valiosos, imagina que son como los elefantes y los rinocerontes, cazados y destazados por su marfil – un segundo par de extremidades nacieron de su espalda - Al menos estarían protegidos por la eternidad

Esa última palabra resonó en cada recoveco de la mente de Ken Kaneki, el joven había pasado por alto la "milagrosa" manera en que había sido devuelto al reino de los vivos, pronto empezó a atar cabos para comprender su situación actual, solamente necesitaba confirmar algo antes de dar el siguiente paso.

¿Qué fue lo que me hiciste? – el cambio repentino de personalidad fue sorpresivo, la tranquilidad en las palabras del ghoul hizo que la pelinegra de cabello corto parpadeara confundida –

Te reencarne como un demonio de clase baja - la joven explicaba con calma – Era la única manera de devolverte la vida, de este momento y por el resto de tu existencia me perteneces como mi leal sirviente

Que te jodas – Sona se sobresaltó por el insulto del ghoul - ¿Quién te dio el derecho? – un nuevo par de rinkakus hicieron acto de presencia - ¡¿QUIEN CARAJOS TE DIO EL DERECHO?! –

Espera un momento... – Saji se atrevió a hablar llamando la atención del joven – Deberías de estar feliz de estar en este mundo con una nueva vida

Sin ninguna advertencia, Genshirou Saji salió volando vertiginosamente hacia una de las paredes, el resto miro mudo como su compañero y amigo golpeaba con fuerza la pared de aquel salón, Ken ni siquiera miro al chico quien con dificultad trato de comprender que lo había golpeado, Sona apretó su mandíbula al mirar como uno de los rinkakus estaba donde segundos atrás se encontraba su peón, cuando su hermana le dijo que mantuviera cuidado con su nuevo sirviente comprendió la razón de sus palabras. El ghoul frente a ella era peligroso, aún teniendo a toda su corte reunida la habilidad del joven frente a ellos era mucho mayor que la suma de toda su fuerza.

Yo quería morir – esa frase hizo que todos en el salón tragaran saliva – Ya estaba harto de esta maldita existencia y de este pútrido mundo – Ken bajo la mirada agotado – Yo no pedí ser así, no soy como Touka o Hinami-chan quienes nacieron como ghouls– los ojos del ex investigador se colocaron sobre Sona – no como Saiko o Tooru quienes aceptaron convertirse en unos para combatirlos – los seis rinkakus se colocaron amenazantes sobre la figura de Sona – Nuevamente alguien tiene que joderme la existencia

¡Tranquilizate!- Tsubaki se interpuso entre ama y sirviente – ¡Se que suena arbitrario pero debes de entender que la situación puede ser mejor!

El ghoul de un solo ojo empezó a proferir carcajadas desequilibradas, enfermas, dementes. Por primera vez, todos los presentes le veían reír de esa forma tan siniestra, y se arrepentían de la experiencia: los pelos se les pusieron de punta.

¡¿Puede ser mejor dices?! ¿Cuál crees que sea la razón que pueda macar la diferencia? –Comenzó a acercarse lentamente a la vise presidenta, quien estaba preparada por si una vez más decide atacar la nueva torre de Sona−. ¿Sabes? Lo que me causa gracia es que defiendas con tanto esmero a esta ¿cómo decirlo? Ah sí, de esta chica, porque al final de cuentas las cosas no cambian. La señorita proveniente de la realeza demoniaca solo los ve como unos esclavos que no valen nada y ustedes tan enceguecidos por las palabras bonitas que ella les dedica, sin duda hacen que besen el suelo por donde ella camina. –Sonrió con sorna, cuando vio la impresionada expresión de Tsubaki, una que denotaba mucha consternación y confusión−. Simplemente no lo entiendo. Observar las caras de todos ustedes y ver las acciones que difieren de sus palabras me ponen de nervios. — Esta vez poso su mirada en Meguri quien escondía un objeto.

¿Creíste que no lo notaria? ¿Qué harás? ¿Usaras mi propia quinque en mi contra? —Efectivamente, Meguri tenía en sus manos la quinque mejor conocida como Yukimura 1/3, la misma que le había regalado Arima Kishou cuando portaba la máscara llena de mentira conocida como Haise sasaki.

¡¿Tengo otra opción?! ¡Tenemos que tomar precauciones contra ti! –Gritó Meguri algo nerviosa, alzando los brazos en posición de guardia mientras empuñaba la quinque.

En cuestión de milisegundos se escuchó un poderoso estruendo, el impacto fue tan monstruoso como corpóreo. Otro de los rinkakus golpeaba sin clemencia a Tsubaki quien estaba a punto de atacarlo cuando detecto que las facciones corporales de Kaneki nuevamente se mostraron amenazantes, haciendo que saliera despedida en retroceso a una velocidad increíble dando vueltas sin control y golpeando con su cuerpo un estante de libros que se encontraba en el salón en cuestión.

—¡Arrg! ¡D-demonios! –De entre sus dientes apretados, salían pequeñas gotas de sangre. Cuando reunió fuerzas para abrir los ojos, divisó a Meguri que sin poder soportar más había decidido a atacar al ghoul con la quinque, quien sin mayor esfuerzo era detenido por los tentáculos rojos

¡Imposible! ¿Cómo pudo anticipar mi golpe a esta distancia?—La conmoción del caballero de Sona representada en una fiera mueca de dientes apretados, era mil veces mayor. Al ver de lo peligroso que era el ghoul, no dudó un segundo más en volver a atacar, tenía que acabar con él, usar la quinque para detener a una amenaza como la que suponía el ex investigador y pese a todos los factores que jugaban a su favor, una vez más erró el ataque por completo.

—Por tu postura, supongo que practicas alguna disciplina que implica el manejo de espadas. —Observo con desdén a la chica quien se mantenía en posición de guardia mientras temblaba levemente, comprendiendo que la situación se les había salido de las manos, los miembros restantes de la corte de Sona se posaron al lado de Meguri—. Supongo que era de esperarse que las cosas iban a terminar así. En fin, ¡Vamos a hacer algo bueno!, como cortesía, les daré la ventaja de atacar primero.

iSuficiente! – la voz de la joven noble hizo que todos le miraran fijamente - ¡Deben de guardar calma... Aunque no lo creas, no deseo verlos pelear entre ustedes!

Ken miró con molestia a Sona, estudio cada mensaje que su cuerpo mandaba, descubriendo que era verdad sus palabras, se agarro la cabeza exasperado, no podía creer el terrible atolladero en el que estaba metido y mucho menos lo estupido que resultaba. Demonios rondando en el mundo, tenía que tragarse esa realidad nuevamente.

Tomate tu tiempo para calmarte y tratar de aceptar tu situación – la heredera de los Sitri se dio la vuelta para irse – De momento pasaré por alto tu agresion en contra de nosotros... Pero la próxima vez no seré tan tolerante

¡CÁLLATE! – el ghoul tomó el escritorio con una mano arrojándolo hacia la ventana - ¡NO HE DICHO QUE ACEPTABA SERVIRTE!

No tienes opción- Sona miro de soslayo – Alégrate por tu nueva vida

Cegado por la ira, los rinkakus arremetieron contra la figura de Sona Sitri, de la nada emergieron varias espadas del suelo deteniendo el avance de las extremidades del ex investigador, caminando casualmente la figura de una pelirroja atravesó la puerta del salón, la mirada que le dirigió a Kaneki fue de desaprobación completa, no necesito ser un genio para comprender que la nueva persona era alguien de la misma naturaleza que los chicos allí reunidos, un segundo grupo se fue reuniendo alrededor del ghoul híbrido, lo que más le sorprendió fue que la mayoría de los miembros de ambos grupos eran mujeres, suspiro con molestia al notar la sugerencia de la castaña.

Te dije que era mala idea reencarnarlo como tu Torre – la pelirroja hablaba con cierta molestia – Eres terca Sona

Lo dices porque tú no lo puedes tener – Una sonrisa de autosuficiencia adorno el rostro de Sona – es una lástima que yo le quedará con el premio

Si tú lo dices – ambas jóvenes conversaba ignorando al joven ghoul – Deberías de reprenderlo por sus actos

Hay que ser pacientes, es normal que este molesto – de alguna manera había cierta empatía en esas palabras – No todos reaccionan igual

Kaneki apretaba sus puños al ver como el par ignoraba por completo su situación, como si él fuese algo secundario, sin decir nada golpeo cada una de las espadas que escudaban a Sona, la pelirroja se sorprendió por la repentina acción, con fuerza el ghoul acortó la distancia entre el y el par de jóvenes, una pequeña jovencita albina se interpuso entre él y el par de demonios. Ignorando la apariencia de la pequeña, usó sus tentáculos para sacarla del camino.

La sorpresa fue doble ante la acción, la primera fue que el híbrido no tuvo reparo en ignorar la apariencia de la chica y la segunda fue con la facilidad con la que apartó a Toujo Koneko de su camino.

Una de las dos cosas que más molestaban a Rias Gremory era que lastimaran a sus sirvientes, la segunda era un secreto y Ken Kaneki había logrado enfurecer a la joven, pero también al grupo que la rodeaba. Sona intentó calmar la situación pero inclusive sus propios siervos se abalanzaron sobre el ghoul. Pronto la pared del salón se rompió en pedazos, la figura de una joven voló por los aires, detrás de ella y cubierto por el polvo de los escombros salió el autor de tal destruccion, Tsubasa cayo pesadamente al suelo, mientras que Kaneki lo hacía con bastante facilidad.

Dentro del salón las tambaleantes formas de aquellos jóvenes estaba sorprendidos por lo irreal que era la fuerza de ese joven. Momentos atrás todos los demonios se habían molestado por el trato que la pequeña Torre de Rias había recibido por parte del ghoul, creyendo que podían cobrarse tal insulto, el grupo de Rias y el los miembros del grupo de Sona trataron de someter sin éxito al perpretador.. Con gráciles pero también brutales movimientos el joven ghoul fue el que sometió al numeroso grupo.

Las primeras en caer fueron Tomoe Meguri y Xenovia Quarta, quienes sacaron sus espadas para tratar de intimidar al híbrido, pero la dureza del Kagune del segador negro logró resistir la potencia de Durandal y el filo de Yukimura 1/3 de la caballero de Sona, una vez descolocadas por la sorpresa fueron golpeadas con fuerza por el kagune, las siguientes fueron Hanakai Momo y Kusaka Reya. Aún cuando ambas eran excelentes alfiles, se vieron sobrepasadas por la velocidad que usó el ghoul sobre ellas, golpeando sus abdómenes con sus puños, no esperaban que una Torre fuese tan rápida para reaccionar, pero una vez que el aire abandonó sus cuerpos cayeron al suelo abatidas.

Yuuto Kiba aprovechó la distracción e invocó su Sword of Betrayer, con rapidez rompió la distancia que le separaba del su oponente, el problema con era que Ken estaba acostumbrado a combatir con oponentes más rápidos que el, así que la ventaja de Kiba se esfumó cuando el joven intercalaba sus propios puños y patadas con el uso de sus extremidades extra. Gasper por su parte no sabía si unirse a su compañero pero al notar como este era abrumado con la habilidad del ghoul intentó detener el tiempo de Kaneki, quien sintió como sus nervios se crisparon al sentir la amenaza provenir del pequeño damphir. De alguna manera logró cegarle al tomar a una desprevenida Tsubasa y arrojarla contra la pared destrozandola, levantando bastante polvo. Todo eso ocurrió en un lapso corto de tiempo.

Rias estaba anonadada, mientras que Sona se mostraba complacida por las habilidades de Kaneki, puede que para los ojos de la pelirroja la situación era bastante complicada por no decir peligrosa, pero ese arrebato de furia que presentó su nueva adquisición. No nubló la objetividad que el joven ex investigador demostraba a la hora de pelear. Por un instante miro a la única persona que no había realizado ninguna acción en contra del ghoul Ruruko estaba más preocupada por la salud de Genshiruo que por tratar de defender el honor de la torre de Rias.

Por cierto, Rias – la calma en la voz de Sona sacó de la sorpresa en la pelirroja - ¿Dónde está tu otra torre?

¿Eh?... Ocupada con unos exámenes – la Gremory ladeo su cabeza confundida por la extraña pregunta-

¿Y tu otro alfil y tú peón?- Rias entrecerró los ojos tratando de comprender lo que pensaba su amiga de la infancia-

Están en club- la joven contesto de manera monótona – No entiendo tus preguntas

Con la sonrisa en los labios, Sona simplemente negó con la cabeza, la situación era de la más interesante, un solo demonio había sometido a dos séquitos completamente compenetrados, sabía que algunos demonios se especializaban en diferentes estilos de combate para los rating games, alguien como su nueva torre dejaría en alto su nombre en los registros del inframundo, solamente necesitaba tranquilizarlo un poco y negociar con él.

No me arrepiento de reclutarlo – el pensamiento de Sona era un poco desubicado ante la situación – Muéstrame un poco más Ken Kaneki


Issei estaba un poco preocupado por el joven que había sido rescatado por Sona Sitri, pero más que nada por la impresión que dejó el tipo en la mente del Sekiryuutei, nunca había visto morir a alguien de esa manera, había decidido olvidar sobre su muerte y en el caso de Asia logro superarlo con el trato de la rubia. Cuando el resto decidió ver qué pasaba con el nuevo siervo de la Sitri decidió quedarse atrás para ordenar sus ideas, aún se preguntaba quién era el "Rey de un solo ojo", debido a la preocupación e importancia que el joven había imprimido en sus palabras. Asia quien estaba caminando a su lado decidió que lo mejor era acompañarlo, aunque ella también sentía curiosidad por ver al nuevo aliado y compañero; para ella era más importante el castaño a su lado.

Issei-san, ¿Qué es lo que piensas?- la joven alfil estaba preocupada por el rostro que tenía el Sekiryuutei –

Es sobre lo que dijo ese tipo – el futuro rey del harem se mostraba preocupado – No dejo pensar en ese "Rey de un solo ojo"

¿No se referirá a Odin-sama? – la portadora del Twilight Healing ladeó la cabeza un poco confundida

No creo que sea eso, Asia-chan – Issei se rasco la cabeza un poco al notar lo tonto que era pensar que se trataba de Odin

Bueno, tal vez le puedas preguntar después- la chica sonrío cálidamente mientras que Issei asintió con fuerza

Tienes razón Asia – el castaño sonrío ante al sugerencia

La pareja iba tranquila hasta que un enorme estruendo les alertó que algo iba mal, sin decirse palabra alguna, comenzaron a correr en dirección del sonido, fue entonces cuando arribaron al edificio donde debían de estar tanto sus amigos como el consejo estudiantil, lo que vio Hyodou Issei hizo que se molestara completamente, parado sobre una inconsiente Tsubasa Yura, se encontraba el joven que habían sacado de la fortaleza de Colchea. Asia se llevó las manos a la boca para tratar de ocultar su asombro y terror al notar el Kagune que sobresalía de la espalda baja, el rostro de Kaneki denotaba la molestia que sentía en esos momentos. Detrás de él aparecieron una molesta Rias y una tranquila Sona.

Kaneki-san, creo que debes calmarte un poco – la condescendencia en la frase de Sona crisparon los nervios del ghoul – no necesito que te enemistes con el grupo de Rias

¡Sona! – la pelirroja miro molesta a su amiga de la infancia - ya es muy tarde para eso

La mirada desafiante en los ojos de Ken Kaneki, estaba puesta en Sona, no podía evitar sentirse humillado por la actitud que la joven demostraba a pesar de que claramente el ghoul se negaba a aceptar lo que ella dijera. Solamente esperaba que la pelirroja a su lado no actuara de manera imprudente, pero al notar como Rias nunca la decepcionaba se limitó suspirar agotada.

Decir que la heredera de los Gremory era joven pasional era quedarse corto, el notar como sus queridos siervos fueron rebajados y sometidos de una manera poco decorosa, pico el orgullo que la joven tenía en alto, antes de que Rias alcanzara al segador negro, un relámpago y el filo de una naginata hicieron que la Torre de Sona cambiará de posición.

Tsubaki se había reincorporado del artero y ruin golpe que el ghoul de un solo ojo le había dado, por su parte Akeno se encontraba muy molesta por el daño que profirió a sus kohai, cosa que la sacerdotisa del relámpago no perdonaría fácilmente. La mirada de Sona analizaba la postura que su sirviente estaba poniendo, llevo una de sus manos a sus lentes en voz baja comentó la posible estrategia que utilizaría su Torre.

Primero someter a Akeno, para evitar que lo sorprenda con sus relámpagos – Sona mantuvo su atención en Kaneki

Ara… Ara – Akeno no ocultaba su molestia pero su sonrisa indicaba que disfrutaba la situación – Eres muy malo, ghoul-chan… debería castigarte por tu mal comportamiento

Creo que paso – el ex investigador respondio con tranquilidad – De hecho no me gustan las de tu tipo

Es una lástima – la reina de Rias fingia tristeza – Que no estes a la altura de Issei-kun, al menos el es un caballero

Me alegra escuchar eso – el ghoul miro con frialdad mientras sus rinkakus apuntaron en la dirección de la sacerdotisa.

La hija de Baraqiel, empezó a lanzar rayos a quemarropa, ignorando por completo el lugar donde se encontraban, Ken comenzaba a moverse con rapidez dificultando la puntería de la sacerdotisa, Rias, Sona y Tsubaki miraban atónitas la habilidad del joven ghoul, demostrando que podía adaptarse con facilidad al oponente enfrente de él, una cualidad de los relámpagos era su dificultad en predecir su trayectoria debido al complicado comportamiento de los arcos eléctricos, pero Kaneki tenia experiencia de sobra al enfrentarse a la Narukami de Arima, experiencia que fue demostrando al notar la desesperación en la mirada de la Reina de la Princesa Ruina Carmesí, continuo esquivando dando brincos laterales, pronto el sudor hizo presencia en la frente de Akeno, con fuerza los tentáculos golpearon el suelo haciendo que le joven ganaral altitud, girando sobre si mismo, hizo que su kagune rompiera la distancia que separaba a ambos contendientes, el latigazo fue tremendo al igual que el castigo en el cuerpo de la jovencita.

El cuerpo de Akeno reboto en el frio piso, Rias apretó sus puños al ver como su amiga había sido herida por el ghoul.

Una vez inutilizada cuidar la distancia de la naginata... medir el tiempo entre cada golpe para tener una idea de su reacción- Tsubaki arremetió en contra del joven una vez que Akeno había caído, el ghoul esquivaba con algo de dificultad los estoques y cortes que daba la joven reina de Sona.

Veo que tienes habilidad para combatir a gente armada – la joven Shinra comentaba tranquilamente – es una lastima que no puedas seguirme el ritmo –

¿Eso crees? – la mirada del ghoul mostraba desinteres absoluto – si te comparar con mis subordinados eres tan solo una novata

La situación fue cambiando ha medida que los golpes de la joven Shinra iban fallando, con uno de sus rinkakus desarmó a Tsubaki mientras que dos de ellos tomaron la cintura de la joven lanzándola por los aires.

Sona no pudo ocultar una mueca de dolor ante la estrepitosa caída de su amiga y confidente, pero todo lo que estaba presenciando, le ayudaba a reafirmar la idea de convencer al ghoul que le sirviera, Rias mantuvo la distancia entre ellos, quizás empezó a comprender el porque de la obsesión de Sona con el ex investigador, levanto una de sus manos y repentinamente se trono uno de los dedos, aquel sonido fue perceptible a los finos oídos de los demonios, pero el solo hecho de hacerlo causo cierta repulsión en las jóvenes herederas, justo cuando Rias iba a hacer su primer movimiento, cierto castaño irrumpio en el campo sin previo aviso.

¡SI SERAS CABRON! – el Sekiryuutei intento golpear sin éxito a Kaneki - ¡¿PORQUE LASTIMASTE A AKENO-SAN Y A TSUBAKI-SEMPAI?!

¿Por qué no debería hacerlo? – el ghoul miraba con desprecio a las figuras caídas de las dos jovencitas – No se debe tener compasión en una batalla… eso fue lo que me enseñaron

¡NOSOTROS SALVAMOS TU TRASERO… DEBERIAS SER AGRADECIDO! – Issei lanzaba golpes y patadas buscando lastimar a Ken –

Yo no pedi que me salvaran – Issei miro sorprendido a Ken mientras este simplemente creo distancia entre ellos – Estaba dispuesto a morir… de hecho eso era lo que quería – el castaño corrió tratando de alcanzar al ghoul – Pero el simple capricho de alguien que me ve como una herramienta, estoy aquí

¡QUE TIENE DE MALO ESO! – el ex investigador ahora era el que estaba sorprendido al castaño - ¡MIENTRAS PUEDA SER EL REY DEL HAREM! – el puño de Issei golpeo el rostro del ghoul, al mismo tiempo que su guante aparecía en su antebrazo - ¡Y PUEDA PROTEGER A MIS AMIGOS… NO ME IMPORTA SER UNA HERRMIENTA!

Ya veo que eres un idiota – el segador negro sacudió levemente su cabeza – Solamente para confirmar… ¿Es importante tener un harem?

Claro que sí estar rodeado de pechos es el mayor paraíso que existe – Rias no pudo ocultar su vergüenza ante los idiota que podía ser el Sekiryuutei – Los pechos es el mayor legado del mundo

Te equivocas – Kaneki se levantó mientras corrió en contra de Issei – Lo importante es… olvídalo… alguien como tú no lo entendería

¡PENDEJO… NO TE HAGAS EL CHULO! – Issei imito la acción del ghoul para encontrarse frente a frente

Rias esperaba lo peor para el castaño, sorpresivamente el ex investigador descarto su kagune, el puño de Issei paso de largo, las manos de Kaneki tomaron el brazo del chico, girando sobre si mismo hizo que el cuerpo del castaño fuese elevado por encima de Kaneki haciéndolo caer pesadamente sobre el suelo, el golpe desoriento a Issei lo suficiente para que el ghoul rodeara con sus piernas el cuello de este y jalara el brazo en el cual estaba el boosted gear, la opresión que ejercio fue diezmando la circulación de la sangre, el castaño forcejaba sin mucho éxito, hasta que por fin perdió la conciencia. La pelirroja quedo muda por lo sencillo que había sido someter a Issei, Ken por su parte miro con cierta nostalgia al chico, había tomado esa decisión de dejarlo fuera de combate porque le recordó un poco a su amigo Hide.

El ex investigador se levantó del suelo, la ropa que tenía puesta estaba visiblemente sucia, pero esta no había recibido mucho daño, nuevamente el kagune se manifestó en el cuerpo del ghoul, camino con lentitud hasta estar frente a Rias y Sona.

Preguntare amablemente – la voz sin emociones de segador negro hizo estremecer levemente a la pelirrojo - ¿Puedes deshacer esto?

Sona miraba sin animos a su torre, suspiro con cansancio antes de responder a sabiendas que el humor del joven frente a ellas iba estar peor que hace unos momentos.

No se puede deshacer – la Sitri se cruzó de brazos mientras sostuvo la mirada a los ojos negros de Kaneki – Eres un demonio y mi sirviente… por el resto de la eternidad deberas obedecerme

Entiendo – los rinkakus del ghoul apuntaron a la figura de Sona – Entonces debo solamente matarte para ser libre

Todos enmudecieron ante la siniestra declaración de Ken Kaneki, Sona Sitri por su parte mantuvo su actitud tranquila ante la inminente amenaza que cernía sobre ella, cuando el ghoul estuvo a punto de realizar acción para ultimar la vida de su "ama", sintio detrás de él una sed de sangre y una aura de muerte tan grandes que hacia palidecer a la presencia que Eto Yoshimura emitia contra sus enemigos.

Sabe si haces eso me entristecería mucho – una voz jovial y alegre crispo los nervios del cegador negro – ¡No puedo permitir que lastimes a So-tan!

Lo ultimo que vio Kaneki antes de que su mundo se volviera negro fue la radiante sonrisa de una hermosa joven. Internamente empezó a culpar al destino y su suerte con las mujeres.


¡Hola a Todos! Aquí Aeretr con un nuevo proyecto... bueno no tan nuevo, mas bien una adopción de un trabajo previo. Cuando recibí la noticia de que Bellzador abandonaría sus trabajos por causas personales, decision que se respeta y se apoya; me puse en contacto con él para salvar alguno de sus proyectos en los que tenía interes.

Oblivion sin duda era un buen trabajo y valía la pena salvarle del olvido (notesé la ironia del comentario), amablemente Bellzador acepto mi propuesta y haciendo una reedicion completa del capitulo 1 nacio esta nuevo trabajo, es un esfuerzo conjunto mío y del autor original llevarles esta nueva historia, logicamente espero continuar con el apoyo de Bellzador para continuar con este proyecto y esperando que entre en su agrado.

Bueno sin mas por el momento me despido de ustedes y que pasen buen fin de semana. Nos vemos en la actualizacion de Left Behind- espero... -_-U