Este Fic no es para niños, en él se trata temas relacionados a los adultos, muerte, temas sexuales, desmembramientos gráficos, si usted lo lee, está bajo su propio riesgo, además de que contará con Lemon y soy explicito.

Descarga de responsabilidad: No soy dueño de Naruto ni de Fairy tail, solo soy un escritor novato que desea compartir sus historias con el buen público.

Personaje hablando: "Esto es guerra"

Personaje pensando: (Me pregunto que habrá de comer)

Técnica/Jutsu/Hechizo: "Suiton: Mizu Taisan Sakuru (Círculo Acuático Explosivo)"

Comienza.


[Crocus; Palacio Mercurius]

Naruto mantuvo su cabeza inclinada, hincado en su rodilla derecha en muestra de respeto. Yelmo en mano y ojos cerrados, al servicio del hombre que actualmente ocupaba el trono frente a él. Cualquier gracia anterior fue borrada de su ser tras relatar los hechos que próximamente podrían ser desencadenados en su nuevo y amado hogar.

"E..estás seguro de esto, Naruto-san" pidió el pequeño hombre llamado Thoma E. Fiore, sentado en el gran trono, con su esposa a la derecha; sosteniendo la mano de ella en un intento de encontrar consuelo.

Naruto levantó ligeramente su rostro "Me temo. Mi informante en las naciones elementales me lo confirmó ayer" incluso su voz reflejaba la seriedad de la ocasión.

Thoma miró una vez más a los ojos azules de Naruto, luego al gran mapa desplegado justo detrás del Uzumaki. Los cuatro grandes continentes que conforman el mundo dónde viven podían ser apreciados en el papel.

Pero lo que preocupo a Thoma no fue la demostración territorial. Fue el hecho de que en varios puntos de las naciones elementales señalaban la incursión del mismo continente que años atrás trató de invadir Ishgar.

Arakitashia

El continente del oeste parecía no haberse quedado de brazos cruzados tras su fallida invasión. El mapa marcaba diversos avistamientos de personas poderosas vistas a lo largo de las cinco grandes naciones, normalmente no le prestaría atención a tales rumores sí ellos no vinieron de boca de Naruto.

Naruto Uzumaki, el joven desde su llegada a sido un buen asesor, ayudando a lentamente mejorar su ejercito personal y no depender solo de los caballeros de la Runa. Una posición dada a él en secreto.

Ahora, el mismo joven que ha entrenado a sus soldados le dice que los antiguos enemigos de su país se armaban, uniéndose en alianzas con cada una de las grandes naciones elementales, desde Konoha hasta Iwa.

Por el momento están en simples negociaciones, pero con cada día transcurrido; la incertidumbre crece. ¿Que pasa si se terminan aliando? ¿Los ninjas atacaran su hogar? ¿Face siquiera surtirá efecto en shinobis? Tantas preguntas y tan poco tiempo.

"¿No podemos evitar que surja una alianza?" preguntó la reina de Fiore, Elizabeth E. Fiore.

Levantándose, Naruto se cruzó de brazos, su mano derecha acariciando su barbilla en consideración "No lo se. Es muy difícil considerando que Iwa y Konoha son acérrimos enemigos. El que llegaran a trabajar juntos me parecería un milagro" dijo antes de mirar al gran mapa a su espalda "Kirigakure es otra variante, con su guerra de líneas de sangre; el loco Mizukage puede intentar usar la alianza para dar caza a todos los usuarios renegados".

"Sunagakure seguirá a Konoha, como la aldea más débil solo le queda obedecer a su aliado más fuerte." Naruto detuvo su mirada en el país del rayo, sus ojos reflejaron un sentimiento de culpa al ver una x marcada en rojo en cierto pequeño pueblo en el borde de Konoha y Kumo.

"¿Naruto-san?".

"¿Eh? oh, lo siento. Decía; no se que pasaria con Kumo, es posible que lleguen a una alianza, pero no estoy seguro" dijo, sinceramente no sabía en qué situación se encontraba la aldea oculta entre las nubes actualmente.

El Rey cayó en su asiento, sentía que un millar de ladrillos le caían encima, ¿que reinó le iba a dejar a su amada hija? ¿Como podria defender a sus ciudadanos? Puede que sean del mismo continente, pero sus paises vecinos no saltarian a la guerra, e ir a solicitar el apoyo de Pergrande Kingdom. El país más grande del continente; significaba arriesgar a su hija a otro intento de alianza por matrimonio..

"Sin embargo, tengo un plan".

La esperanza iluminó el rostro de Thoma, alzando sus ojos al sonriente rubio de mejillas marcadas, "¿Un plan?" preguntó, su esperanza se solidifico al verlo asentir.

"Sí nuestros enemigos hacen alianzas ¿que nos impide hacer las nuestras?"

La enigmática pregunta confundió al viejo Rey. El rubio desenfundo un kunai del interior de su capa, lanzandola con precisión; incrusto el metal en el cuarto continente que conforma el mundo.

"¿F..Frostland?" pregunto no muy seguro.

"Así es, Frostland, el continente del norte. No se mucho, pero de la información que recabe es que a diferencia de Ishgar, solo existe un gran regente que gobierna todo el continente" dijo Naruto con su clásica sonrisa.

"Naruto-san, se que no eres de Ishgar, pero debes saber que es casi imposible comunicarse con Frosland".

"¿Por qué?" pregunto Naruto, "Si recuerdo bien, su puerto más cercano debería estar a menos de una semana en mar" medio mintió Naruto, realmente se trataba de tres días sí de alguna manera encontraba la forma de cruzar el océano sin subirse a un bote, maldita enfermedad de mareo.

Fue el turno de la Reina de hablar, "Naruto-san, Frostland es el segundo continente más grande del mundo. Y es verdad que solo existe un único líder" dijo la hermosa mujer "Pero también es el más paranoico".

Al ver alzar una ceja rubia, el Rey trató de explicarse "Frostland no se encuentra en buenos términos con el reino más grande de Ishgar" dijo Thoma "Hace aproximadamente 50 años atrás, Pergrande Kingdom trato de expandir su territorio tomando las tierras del norte"

"Fue una total masacre, Frostland no solo evitó la invasión ganando la corta guerra. En venganza, el regente del norte se apoderó de varias ciudades pequeñas en el borde del reino" continuó la Reina. De esa manera el reino más grande de Ishgar se había reducido a su tamaño actual.

Naruto medito la nueva información, si bien, el hecho de que los habitantes de Frostland no tuvieran una muy buena primera impresión de Ishgar y viceversa; no lo desalentó en lo absoluto.

"Quizás sea dificil" admitió Naruto "Pero no lo sabremos sí no lo intentamos" cualquiera tenía una segunda oportunidad en opinión de Naruto, claro que tenía excepciones.

Sin aliados y con un antiguo enemigo agrupando fuerzas, el Rey de Fiore no encontraba salida alguna a sus problemas. Vio a Naruto, el joven rubio de mejillas marcadas lo miraba expectante, alegre como su carácter le precede pero con un cierto aire de seriedad casi imperceptible. Durante el corto tiempo que el Uzumaki a vivido en su reino, le a tomado cariño, casi toda la familia real lo hizo de inmediato. No solo por ser ahijado de la mujer que salvó la vida de su esposa ya hace tantos años atrás. Pero por sus propios aportes al reino.

"¿Puedes hacerlo? ¿Puedes asegurarme Frostland aceptara una alianza?" preguntó el hombre, una seriedad que su esposa no había visto en su marido desde aquel intento de invasión.

Naruto dejó salir una pequeña sonrisa, "No puedo asegurar que acepten" tanto como era persuasivo, no podía someter a otros a su voluntad."Pero haré todo lo que está a mi alcance para proteger Fiore de cualquier invasor" dijo golpeando la palma derecha contra su corazón "Es una promesa de por vida".

Thoma continuó mirando a los ojos del rubio, su rostro reflejando completa seriedad. El chico frente a su trono tenía todo para ser un buen Rey, lo vio en sus ojos, esa pasión por proteger lo preciado, ese fuego creciente que era su voluntad.

"Muy bien" dijo Thoma, dando un pequeño salto al suelo desde que su trono era un poco grande para él "Confío en ti, Naruto Uzumaki".

El rubio fue sorprendido, Thoma sacó una pequeña espada de su cadera. Un complemento de su vestimenta real más que un arma. Con ella señaló a Naruto "Por la presente te nombró el embajador de Fiore; ve y encuentra a nuestros amigos en el norte, esa es tu misión".

"...".

"...".

"...¿Demasiado dramático?".

"Solo un poco" dijo Naruto mientras se rascaba ligeramente apenado la parte posterior de su cabeza, no ayudaba que la reina hubiera sacado un ventilador de mano para cubrir su boca en un intento para disimular sus risas.

Tosiendo en su puño, el Rey desvió su mirada a la ventana para no ver al par a los ojos. En su mente parecía una buena idea "¿Y cuando te vas?" preguntó Thoma, guardando su espada mientras intentaba cambiar la conversación.

"Se que su discurso no fue el mejor, pero no me tiene que correr" dijo el ofendido Naruto.

"¡A la misión-kabo!" dijo el corto hombre antes de taparse la boca con ambas manos, fue muy difícil mantener su tic verbal junto al rubio.

"Jejeje, es broma" dijo el Uzumaki, ganando unas cuantas risas de la Reina y un suspiro del Rey "Pensaba ir en un par de semanas, tengo algunos pendientes que arreglar y necesito estar concentrado".

"Se que eres lo bastante fuerte para defenderte, Naruto" dijo el hombre que ostentaba el cargo más importante del país, ganando la atención del Uzumaki "Pero me sentiría mejor si no fueras solo a un territorio tan peligroso y desconocido como Frostland".

Naruto se cruzó las manos detrás de su cabeza, agradeciendo la preocupación brindada por el pequeño hombre, "No se preocupe Thoma-jiji, no pienso ir solo".

Sonriendo ligeramente por el mote, Thoma negó. El chico podía actuar muy bien como un adulto, pero en el interior seguía siendo un joven "Si no te molesta que pregunte. ¿A quienes piensas llevar? Escuche grandes cosas de los miembros de Fairy tail" dijo el hombre.

Por lógica el joven llevaría a miembros de su gremio. Personas en las que confiaba y sabía cómo trabajaban, sin mencionar que podían guardar el secreto pues una incursión a Frostland no era una acción que a muchos países vecinos les agradece.

"Tengo en mente un par de personas, a Sif" dijo Naruto, levantando un dedo "Y a alguien muy fuerte que debería estar regresando al gremio en un par de semanas" dijo Naruto misteriosamente.

El Rey no tuvo que preguntar más, confiaba en el chico y en su juicio. "Me alegro" dijo mirando como Naruto comenzaba a guardar el gran mapa a su espalda y ponerse el yelmo en su cabeza "Supongo que te vaz".

"Sí, tengo que conseguir un gran pastel de fresa antes de irme" dijo Naruto con su voz denotando ligero miedo, "Sin mencionar que es difícil separar a Hisui-chan de Sif".

"Lamento que mi hija sea un poco mimada" dijo la Reina soltando una pequeña y femenil risita,

"Nha, a Sif le encanta" dijo el rubio en armadura antes de dar una reverencia, "Gracias otra vez por confiar en mi"

"Ni lo menciones, oh, por cierto. Saluda a Mikoto-san de nuestra parte" dijo el pequeño hombre con un asentimiento de su esposa.

Dando una afirmación a la petición, Naruto se giro a las grandes puertas dobles. Al girar la manija de la puerta; una serie de matrices de sellado que llenaban cada pared en la sala del trono se mostraron; rompiéndose en fragmentos y posteriormente desvaneciendose en el aire una vez su uso ya no fue requerido.


[Iwagakure]

"Los deje entrar en mi pueblo, accedi a tener una audiencia; perdonando incluso la falta de respeto al tratar con un par de embajadores y no el Emperador en persona" dijo una voz vieja, un tinte de tranquilidad que amenazaba con romperse.

Onoki frunció el ceño, furia como nunca antes había visto reflejado en sus ojos. "Pero trabajar con esos bastardos de la hoja, esos malditos oportunistas" gritó de furia el Tsuchikage mientras golpeaba con su puño la superficie de madera "Prefiero que me hiervan en aceite" escupió Onoki al suelo en asco

En la gran sala de reuniones, cinco personas se vieron alrededor de una mesa circular, Dos de ellas de pie detrás del líder de su aldea, usando los uniformes de Jounin de Iwa. Ambos siendo los encargados de la seguridad de su kage. Mientras tanto, los encargados de plantear esta alianza se mantuvieron sentados al otro extremo de la mesa.

"¿Comprendo no mantienen una buena relación con Konoha?" pregunto una voz que denotaba experiencia, suave y relajada.

"Eso es un eufemismo. Konoha es el responsable directo de nuestra derrota en la tercer guerra shinobi, y su actual Hokage es enemigo jurado para cada shinobi de Iwa" el viejo kage se cruzó de brazos.

El hombre de cabello blanco sentado lejos del Tsuchikage cerró los ojos, como el hombre más viejo y experimentado de los doce escudos de su majestad, era el candidato perfecto para tratar con un hombre del temperamento de Onoki "Los enemigos del ayer son los aliados del mañana, Tsuchikage-dono" dijo provocando que a Onoki le saltara una vena de la frente "Estancarse en penas pasadas es perjudicial al desarrollo de una nación".

El Tsuchikage golpeo ambas palmas contra la mesa, casi sacando espuma de la boca, incluso sus dolores de espalda recurrentes fueron ahogados por la adrenalina corriendo en su sistema "No hable con tanta superioridad".

Sin inmutarse, el hombre que no era más que un anciano de largo cabello blanco se frotó su larga barba y espeso bigote. vestido con ropa rústica: Una túnica blanca que posee símbolos romboidales en las mangas que se entrecruzan, esta se ata con un cinturón a la vez recubierto con una capa negra que posee varias puntas hacia arriba- siete para ser exacto- justo a las espaldas del hombre el símbolo del Imperio Alvarez. Para complementar usa botas también oscuras como su capa y que se dejan vislumbrar apenas por la túnica ya que esta tiene patrones de rasgaduras en ellas.

Imperio Alvarez.

August La Calamidad

Líder de los Spriggan 12.

El conocido como Rey de la magia tamborero sus dedos en su báculo, un artilugio con una esfera negra en el centro. Su señor le hizo hincapié en mantener la compostura al momento de hablar con el viejo Tsuchikage. Conociendo de antemano el rencor de Iwa con Konoha, era bien sabido e incluso sin ser de las naciones elementales podía deducir que la humillante derrota sufrida no sólo les costó ninjas y recursos, sino que golpeo duro en su orgullo.

"Me parece que es usted quien no comprende a quien le habla, Tsuchikage-san".

Los tres ninjas de la roca se giraron a ver al acompañante de August, Dos de ellos sonrojándose levemente mientras que el propio líder parecía querer arrancarle la cabeza a la mocosa por su impertinencia.

August movió sus ojos a la derecha, frunciendo ligeramente el ceño a su acompañante "No es momento de ser grosera, Brandish".

Brandish era una mujer alta y delgada, de corto cabello color verde en un estilo bob con un flequillo cortado en forma recta hasta por encima de los ojos. En las laterales de su cabeza lleva dos objetos con forma de cruz como si fueran un par de cuernos, también un par de aretes en forma de cruz. Sus ojos son color verde similares al de su cabello

Imperio Alvarez.

Brandish μ

Teniente del ejército real.

La joven de cabello verde hizo una ligera mueca, bajando su cabeza como un niño lo hace al ser regañado por su padre, pero en su mente, el viejo y decrépito kage le debía respeto al más fuerte de los escudos de su majestad.

Nuevamente August centró su atención al Tsuchikage. Brandish podía ser muy impulsiva algunas veces. Un poco vaga en otras, pero sabía dentro de él que con disciplina y trabajo duro la chica sentada a su lado podría llegar a ser una de los Spriggan 12.

"Una disculpa. Brandish es muy fuerte, pero a la vez tiene la maldición de la juventud" dijo August refiriéndose a la poca experiencia política que la joven mostraba.

Resoplando por las fosas nasales, Onoki decidió ignorar el arrebato anterior. No ganaría nada con borrar a la niña de la existencia con su amado elemento polvo. "Es definitivo, Iwagakure no entrara en esta alianza suya".

Brandish frunció el ceño, ¿Acaso el viejo hombre era tan arrogante para despreciar una alianza con un continente entero? ¿Su odio es mayor que el bienestar de su pueblo? La joven de cabello verde estaba apunto de hablar nuevamente. Sin embargo, una mirada a August la detuvo de confrontar al Tsuchikage.

"Una decisión apresurada la que está tomando, Tsuchikage-dono" dijo August su tono de voz, no siendo alterado por la negativa "Le ruego lo reconsidere. Seria una lastima no contar con la presencia de Iwagakure en la cumbre Kage".

"¿Cumbre kage?" pregunto Onoki entrecerrando los ojos.

Una casi imperceptible sonrisa apareció en los labios de August, bien oculta por su larga barba "Así es, recibí esta mañana las respuestas afirmativas por parte del resto de los embajadores de Alvarez" el viejo hombre de barba metió la mano al interior de su bata, tensando al par de ninjas de Onoki que llevaron sus respectivas manos al porta kunais atado a sus piernas.

Pero en vez de un arma como esperaban los ninjas, el viejo hombre sacó cuatro sobres blancos con el sello del imperio Alvarez roto. "Hokage, Mizukage, Kazekage y Raikage. Los cuatro accedieron a sentarse en una mesa y plantear el futuro de las naciones elementales durante la reunión, también se tratará el tema de la alianza de las cinco grandes naciones con el imperio Alvarez".

Onoki entrecerró los ojos, una cumbre kage nunca se había visto en sus tiempos. La única reunión que llegó a involucrar a los cinco ninjas más fuertes del mundo fue durante el mandato del Shodaime, cuando las cinco naciones discutieron los términos de no agresión propuestos por Hashirama Senju.

Incluso durante el final de la tercera gran guerra shinobi, los Kages no se reunieron; ahora estos extranjeros proponen una época de paz para las naciones elementales… ¿A que estaban jugando?

"¿Qué pasa con los Daimyos?" pregunto Onoki, el voto de los señores feudales siempre fue decisivo. No lo admitiría en voz alta, pero fue por la insistencia del Daimyo de su país que Onoki se reunió en primer lugar con los extranjeros.

"Han sido notificados. Los cinco Daimyos están al corriente con las intenciones de nuestro hogar" habló el viejo hombre, sacando un nuevo sobre; los ojos de Onoki se ampliaron al notar el sello del señor feudal adornando la carta.

"También, el Daimyo de su nación fue muy amable dando a nuestro Emperador su palabra que Iwagakure se presentaría en la reunión" no era un hecho que aceptaran, pero la palabra del Daimyo les hacía saber que Iwa por lo menos estaría presente en la cumbre..

Onoki aceptó la carta extendida por el embajador. Corto el lado derecho del sobre para sacar el papel expedido por su señor. Los ninjas a su espalda, curiosos, trataron de ver disimuladamente por sobre sus hombros mientras Onoki leía la carta.

"Si cuentan con la aprobación del Daimyo ¿Por qué perder el tiempo en esta ridícula reunión?" preguntó el líder, había comprobado la veracidad de la carta. Años de servir al señor feudal le permitieron notar cualquier detalle que un falsificador; incluso el más apto podría pasar por alto.

August se levantó de su asiento, así lo hizo Brandish "Como líder y ninja más fuerte de Iwagakure, deseo presentar mis respetos al solicitar su presencia personalmente" dando una ligera reverencia August guardo las cartas de sus compatriotas nuevamente en su capa "Le dare todos los detalles de la reunión en otro momento, buenas tardes".

Brandish miró por última vez al Sandaime antes de seguir el ejemplo de August y salir.

Cuando ambos magos cerraron la puerta detrás de ellos, no se sorprendieron al escuchar una explosión, seguido por un temblor que sacudió la torre del Tsuchikage.

"Ese viejo es un cascarrabias" dijo Brandish antes de dar un pequeño gritó de dolor tras recibir un ligero golpe del báculo de August. "¡Ach! ¿Porque fue eso?" preguntó la joven sobándose el chichón en su cabeza.

"No te dejes engañar por las apariencias" la ojiverde miró la seriedad reflejada en el rostro del Rey de la magia "Onoki de las dos escalas. No a sido el Sandaime Tsuchikage por tanto tiempo solo por no encontrar un reemplazo".

Limpiando las lágrimas en el borde de sus ojos, Brandish se cruzó de brazos, mirando a otro lado mientras bufaba "¿Que puede hacer un hombre como él contra usted August-sama? A mi ver, es un viejo fósil que no quiere dejar a mejores ninjas reemplazarlo" dijo sin detenerse de caminar.

August sacudió ligeramente la cabeza en desaprobación. Brandish necesitaba aprender a no juzgar un libro por su portada. Siendo sinceros, el Rey de la magia se encontraba escéptico en derrotar a Onoki fácilmente. Puede ser viejo, pero la vejez conlleva a la experiencia y Onoki tenía mucha, es un hombre que a vivido durante tres grandes guerras, se ha batido contra leyendas de la talla de Madara Uchiha y sobrevivido para contarlo.

"¡Oh! Por cierto. Invel-sama se ha comunicado, el país del Hierro accedido a ser la sede para la cumbre kage" dijo Brandish. Sacando de sus apretadas togas una libreta. Además de ser la embajadora junto al Rey de la magia, también servía como secretaria y estudiante.

August asintió en reconocimiento. No tenía duda uno de los escudos de su magestad terminará su misión sin otro resultado que satisfactorio.

"Muy bien".

"También hay un mensaje de la señora Belserion, August-sama" dijo la peliverde ganando la atención del viejo hombre "La primer princesa y segundo príncipe se dirigen al país del fuego a reunirse en Konoha con la señora Belserion y la tercer princesa".

August entrecerró los ojos ante la mención de la 'Familia real' Irene fue considerada nobleza junto a sus tres vástagos. Herederos sin derecho al trono desde el punto de vista del Rey de la magia. Puede ser la pelirroja ayudó a fundar el gran imperio Alvarez. Pero fue una razón aún mayor el que su Magestad Springer permitiera a la mujer y sus hijos ser considerados nobleza.

¿Por qué el repentino interés de estar reunidos? Se preguntó. Vagando en sus recuerdos, trato de encontrar algún motivo relacionado a este repentino cambio de escenario. El segundo hijo de Irene estaria con Jacon en Kiri. Mientras que la primogénita se quedo en Kumogakure sola desde que fue lo suficientemente fuerte para ostentar el título de escudo Springer. Aunque como estaba Kumo actualmente era más una visita de cortesía a un trabajo de embajada.

Sus ojos se abrieron de golpe, si mal no recordaba hoy era primero de julio. August no pudo hacer otra cosa más que maldecir, era obvio que la pelirroja y sus hijos irían a Konoha solo por una razón. Una que envuelve a la familia Belserion con la aldea Shinobi.

'Incluso si es él, Irene se está arriesgando demasiado' pensó August.

"Está bien" dijo al fin, no era capaz de controlar a la pelirroja, siempre fue una mujer férrea que hacía lo que quisiera cuando quisiera "Irene ya es grande para saber a lo que se arriesga" dijo el viejo hombre, reanudando su caminata a la salida. Un segundo después Brandish le siguió, confundida por las palabras de su maestro.


[Magnolia horas más tarde]

"¡Ah! ¿Hueles eso Sif? Es el olor a hogar" dijo Naruto mientras contemplaba su modesta casa. Atrás quedo la pesada armadura, el rubio la cambio en pos de usar algo más modesto, siendo unos pantalones negros, camisa blanca con el logo de fairy tail en naranja y sus confiables sandalias ninja de color negro

"...".

"...¿Hueles e-?".

"¡Te escuche la primera vez!" ladró el gran lobo gris.

"Entonces ¿por qué no respondes?".

El lobo le dirigió una mirada plana la cual Naruto ignoró mientras continuaba contemplando su hogar "¡Oh! no lo se, quizás es el hecho de que caminamos todo el recorrido de Crocus a Magnolia".

"Te hace falta, ya no me puedes engañar con que es pelaje extra" dijo Naruto 'Sin mencionar que así dejo que a Erza se le baje el coraje' pensó.

Ignorando el jab verbal, Sif respiro un par de veces tratando de reinar en su temple "Tal vez es la misión suicida que aceptaste al ir a Frostland" los caninos del lobo comenzaron a aflorar.

"¿Suicida? Tal vez ¿Necesaria? Sin duda" dijo el sonriente rubio. No veía el gran problema de ir a tocar a la puerta de este Emperador/Rey/Daimyo quien sea que gobierne las tierras del norte. Puede ser un nuevo mundo que explorar, pero que era indispensable para logra frenar la campaña de sus enemigos de reunir fuerzas e invadir su nuevo hogar.

"Touche" dijo el gran lobo gris, lo admitió; el rubio era el único capaz de lograr tal proeza. Y no por su fuerza física "Quizás tienes razón..." el lobo repentinamente perdio cualquier sentido del autocontrol, salto en sus patas traseras dando un tremendo cabezazo al Uzumaki que demasiado distraído fue tirado al suelo.

"¡Pero no tenías derecho a dejarme con esa mocosa!" gritó mientras miraba a su forma con una mezcla de odio y vergüenza "Esa niña es un monstruo".

Naruto se sostuvo en sus codos desde el suelo contemplando a su amigo. Fallando miserablemente de contener las risas. Ya no podía llamar a Sif 'el gran lobo gris' ahora - y hasta que su amigo lobuno consiga un buen baño- sería conocido como 'El gran lobo arcoiris' Palabras de Hisui no suyas.

De pies a cabeza, desde las uñas pintadas en rojo, el pelaje del lobo fue bañado en pintura de diversos colores, por ejemplo, la cola se tiñó de verde, mientras las patas delanteras eran azul y rojas las traseras. Pero sin duda la guirnalda en el pastel fue la cara naranja de su amigo, desde un poco atrás del cuello hasta el hocico con labial; el como la niña consiguió todos esos tintes y maquillaje, seguía siendo un misterio.

"¿De qué hablas? Te ves adorable" dijo burlonamente Naruto, antes de verse obligado a rodar fuera de una andanada de senbons de hielo.

"Pudrete" sollozo el lobo "Me paso demasiadas horas cuidando mi pelaje; como para que una mocosa decida que el color naranja me conviene más que el gris".

"Mhe, tiene buen gusto" comento Naruto. Definitivamente Hisui fue una de las pocas personas que apreciaban el color naranja. Lamentablemente su discurso fue rápidamente cortado por su amigo que prenso su poderosa mandíbula contra su pierna derecha.

"¡Ahhh! Maldita bola de pelos" gritó, usando sus manos para presionar un punto específico detrás de las orejas del lobo. Provocando al compañero de Naruto caer en un lío feliz, lentamente dejando de morder para gruñir de los cuidados de su amigo.

"N...no, bas...oh...bastardo" trato de resistirse, pero las manos de Naruto presionaron todos sus puntos sensibles, cayó al suelo sin fuerzas mientras jadeaba, rodando por el piso mientras el Uzumaki le frotaba la barriga.

Naruto continuó acariciando a su fiel compañero, sonriendo mientras miraba al gran lobo feliz de sus atenciones.

"Parece que le gusta" dijo una voz femenina detrás del rubio.

"Oh, sí. Sif puede ser gruñón de vez en cuando. Pero es masilla al más ligero toque" respondió Naruto, antes de que lentamente comenzara a bajar el ímpetu de sus cosquillas. Sudor se formó en su frente, mientras que sus ojos se llenaban de miedo al ver frente a él una sombra con nueve mechones bailando de furia.

'¿Mamá?' se preguntó Naruto mirando por sobre su hombro. Sabía la persona a su espalda no era su madre, pero la sensación y el pavor fueron similares. Su miedo escaló nuevas escalas pues detrás de él; una sonriente Erza se cruzó de brazos. Dato curioso; su cabello no se movió en ningún momento. Lo que provocó al rubio ver nuevamente la sombra de su novia para descubrir que fue solo su imaginación.

"...".

"...".

"...Te traje pastel" dijo Naruto jugándose su más fuerte carta. Pero Erza no reaccionó "Es de fresa" agregó cantarinamente.

"...¿Que tan grande?" preguntó la mujer aún con sus brazos cruzados pero visualmente menos molesta. En realidad no pensaba reclamarle su huida, comprendía sus deberes y obligaciones con el Rey… pero como Uzumaki, la cabeza roja buscaba algún tipo de retribución. Ya sea dulce o por medio de un par de huesos rotos. Dependiendo de su humor.

Sonriendo, Naruto saco un rollo atado a su cintura. Después de desenvolver y aplicar chakra, el papel escupió en una bocanada de humo un gigantesco pastel de tres pisos. La tarta de fresa era enorme, llegando a ser la mitad de alto que la pelirroja quien con los ojos muy abiertos, leyó el mensaje escrito en merenge.

'Perdon, te ama; Naruto.'

Al lado de las letras; un igualmente hecho de merengue chibi Naruto derramaba ríos de lágrimas. Erza vio cada detalle presente en la tarta, cada fresa jugosa y roja brillaba en contraste con la capa de betún blanco. En la cima del pastel, ondeando con el viento; una pequeña bandera rosa con un corazón rojo y en medio una chibi Erza sonriendo.

"E...es un comienzo" tartamudeo Erza, mirando a otro lado con sus mejillas sonrojadas. Puede ser ruda, fuerte y madura, pero en cuestiones románticas, seguía siendo una adolescente. Y ver tal desplante de amor solo ayudaba a reafirmarlo.

"Muy bien, entremos. El pastel sabe mejor recién horneado" dijo el Uzumaki, dándose la vuelta para encaminarse a su hogar, pero un guantelete crujiendo su hombro lo detuvo.

"Dije que es un comienzo" susurro Erza. El sudor regreso a la frente del rubio, que con ojos llenos de miedo miraban los fríos orbes de Titania.

"¿Q...que puedo hacer por ti… Erza-sama?" dijo Naruto, antes de sentir un grillete encadenar su muñeca derecha. Siguiendo los eslabones, pudo ver el otro extremo de la cadena unida con un grillete en el brazo izquierdo de Titania.

"M..me ayudaras a quemar todas las calorías" dijo Erza.

Parpadeo confundido y estaba a punto de afirmar que lo haría; unas cuantas horas extras entrenando le vendrían bien. Pero, al mirar a su rostro, se sorprendió de ver un sonrojo espolvoreando las pálidas mejillas de Titania. En ese momento fue que comprendió cómo ella planeaba 'quemar' esas calorías.

"¿Quieres hacerlo otra-?" pero su boca fue repentinamente cubierta por el brazo libre de Erza. Haciéndolo probar la sangre con la fuerza del golpe. La pelirroja miró a sus costados por algún tipo de persona indeseada -llámese Mirajane, Juvia- antes de empujar al rubio a la entrada de la casa.

En Fairy tail. muchos miembros se cuestionaron la repentina falta de un par de miembros rango S, solo un segundo antes de regresar a pelear.

Fin del capitulo 21.