Después de haber obliveteado a casi treinta y cinco personas Albus regresó a casa. Al principio le intrigó el olor a comida pero después de abrir la puerta y ver que era Dennis el que estaba frente a la estufa moviendole a sabrá dios que guiso sintió bastante bonito en el estómago aunque había una obvia tensión, pero por lo menos no había huido de él.

— Hola. — Dijo quitandose su chaqueta y recogiendo la de Dennis del suelo para después atravesar la habitación y guardarlas en su ropero.

— Hola, hice pescado empapelado y sopa de setas para cenar ¿Cómo te fue en tu salida al callejón?

— Bien, compré algunas cosas mientras Scott estaba en la tienda de varitas. Libros principalmente, hay algunos que puedes leer, sin embargo hay otros que son meramente técnicos y otros que no vas a poder abrir ya que no eres un mago.

— ¿Es magia negra?

— ¿Qué?

— Estuve ojeando algunos de tus libros y no todos son...¿Cómo decirlo? Libros de estudiante, a menos de que en la escuela te enseñen...Hechizos para arrancar la piel del cuerpo de otras personas, pociones acidas que deshacen la piel. Venenos que se pueden impregnar en un arma para que la herida no pueda sanar. Y los retratos que compraste y que tienes en el baúl no dejan de hablar de métodos de tortura eficaces para obtener información.

— Supongo que algunos libros que son algo fuertes...hay varios que pedí prestados de la casa de los Malfoy...pero los retratros no pueden evitar ser como son. Así es como era la gente antes. Guardan un pedazo del alma de aquellos que fueron retratados.

— Ya...Albus ¿si te pregunto algo incomodo serás completamente honesto conmigo?

— Sí...

— ¿Has matado a alguien? Quiero decir...esta mañana lucías muy seguro de ti mismo amenzando de muerte a alguien por maltratar a tu lechuza...y no sé si era tu capacidad de actuar o si estoy saliendo con un enfermo que disfrute matar.

Albus abrió la boca ligeramente sorprendido y luego miró hacia un lado buscando las palabras correctas para decir. Luego miró a su novio.

— Sientate. Porque éstas conversaciones sobre la moral...son algo dificil de llevar cuando la gente es tan diferente entre sí.

Dennis asintió, apagó la estufa y tomó asiento en la cama mientras Albus hacía que la magia le trajera una de las sillas que estaba junto a la ventana.

— Dennis yo jamás he asesinado a nadie...He visto a gente morir, claro, la primera persona a la que vi morir fue un chico de mi edad cuando yo tenía 14 años, y la verdad es que no he sentido nada por ellos, ni siquera tristeza, pero tampoco he sentido gusto, salvo una vez pero era porque...era uno de mis clientes cuando yo trabajaba de chapero y algo estaba muy mal dentro de mi en ese tiempo. Sin embargo tampoco puedo decirte que no va a suceder, los últimos días han estado ocurriendo una serie de sucesos en los que nuestra seguridad y nuestra vida puede estar en peligro y esas son cosas que te hacen actuar como no deberías. Jamás he disfrutado haciendo daño a la gente, jamás me ha gustado burlarme de la gente, ni siquiera hacer sentir mal a alguien a proposito, por el contrario, en el colegio yo era la victima de todos esos comportamientos, yo sé cómo se siente ser molestado por cosas que tu no puedes cambiar como la familia a la que perteneces o mi homosexualidad y tal vez es por eso que soy cerrado hacia los demás, me cuesta confiar en la gente por todo el daño que me hicieron pero a mi me gusta pasarla bien, bailar con Tristán, comer contigo o con Sam, escuchar música a solas, hacer ejercicio. Joder si es que renuncié al mundo mágico para no tener nada que ver con la violencia. De verdad que no lo estoy buscando. Yo sólo quiero vivir mi vida tranquilo.

— ¿Entonces porque tienes todos esos libros horribles sino te gusta hacer daño a la gente?

— Por que el hecho de que no me guste hacerlo, no significa que los demás no lo hagan. Dennis, te voy a decir una cosa que seguro ya sabes porque lo has leído en mis libros, pero no todos los magos son buenos. No todos se tocan el corazón, no todos conocen el amor, no todos fueron críados en familias de buenos valores. Yo sí, pero también conozco la crueldad del mundo y la realidad de muchas familias. Esas personas puede que un día intenten hacernos daño, no tan lejos, a principio de semana estuve a punto de ser apuñalado aquí...por un mago que no conocía, al que nunca le hice nada y que ni siquiera hablaba el mismo idioma que yo y eso no le detuvo para intentarlo.

— ¿Aquí? — Albus asintió.

— Por eso te digo que puede que estemos en peligro.

— ¿Eso era de lo que hablabas con ese chico japonés? — Preguntó el rubio y el pelinegro asintió de nuevo.

Entonces el refrigerador se abrió al tiempo que lo hacían las puertas del mueble de la cocina y salieron una naranjada y dos vasos sirviendo al tiempo en que las puertas del mueble se cerraban. Después la jarra de naranjada se volvió a guardar en el refri y los vasos fueron hacia ellos.

— ¿Recuerdas que una vez, cuando fuimos a pasar el año nuevo con tu familia usé un hechizo para entrar a tu cabeza?— El rubio asintió cogiendo uno de los vasos del aire. — Después de desarmarlo revicé su cabeza y no me gustó nada lo que vi. Sentí como si hubieran violado nuestro hogar, el tipo tenía recuerdos incluso de nostros haciendo el amor y también había recuerdos de mi hermana cuando paseaba con su marido en Londres. Así que decidí llevarselo a mi cuñado.

— El tan famoso Malfoy...

— Así es, como puedes ver ese apellido aun después de tanto tiempo sigue representando la maldad, probablemente sea lo correcto porque sí, no te voy a decir que ese hombre es un santo. Me cae muy bien, pero sé que no es enteramente una buena persona, es más alguien de intensiones grises y que actúa según su conveniencia. Toda su gente es así, pero eso no es necesariamente malo. En este caso fue muy beneficioso ya que él se hizo cargo del trabajo sucio. A él tampoco le agradó que siguieran a su esposa. Lo que haya hecho o no con ese individio no lo sé, probablemente lo asesinó y como dije, no me da pena, pero tampoco me alegra, son sólo cosas que pasan. Es parte del codigo. Tú simplemente no debes molestar a la esposa de alguien, sobre todo si es alguien poderoso, porque entonces le estás retando a ver cuanto daño puede hacerte.

— ¿De verdad hay un código?

— Un código no escrito y no dicho, es algo que se ve, y hay dos, el de la apariencia y el otro donde convergen más las situaciones de poder y el cual sólo utilizan los adultos de las casas de mags más antiguas y...— De repente el chico se vio interrumpido por el sonido de su teléfono personal. Miró a la pantalla ya que muy pocas personas tenían ese número y frunció el ceño con extrañeza. — Disculpa. — Le dijo a Dennis. — Lo pondré en altavoz ¿Qué pasa Scott? ¿Scott?

— Ho...hola ¿Albus?

— Sí...¿Qué pasa Scott? ¿Estás bien? Hace rato nos dejaste muy preocupados a Victoria y a mi.

— mmm...bueno, tu dijiste que podía llamar sí te necesitaba.

— Sí...¿Necesitas algo?

— ammm ¿Có...cómo me deshago de un cuerpo?

— Disculpa ¿qué? Preguntó con una risa nerviosa ¿Qué sucedió Scott?

— ammm...Mitchy me llamó hace un rato porque un hombre...no sé si era un metamorfomago o estaba bajo los efectos de la multijugos pero alguien tomó mi aspecto para entrar a mi casa y Mitchy estaba solo, pero se dio cuenta de que no era yo, entonces le disparó y...

— A ver, a ver, a ver...¿Le disparó?

— Sí, tener un un arma es algo común en Texas y...

— ¿Le disparó a un mago?

— Siii Albus, eso no es lo importante. — Dijo con voz aniñada. — Lo importante es que me comí su cuello y ahora está aquí y no quiero que comience a apestar. Quiero sacarlo de mi habitación...

— ¿Te comiste...su cuello? — Preguntó extrañado.

— ¿Sí? No sé Albus, cuando me transformo no recuerdo bien lo que hago, sé que lo mordí pero no sé, está todo feo y ya no quiero verlo. Mitchy me dijo que lo limpiara mientras se está bañando pero no sé cómo hacerlo.

— amm...¿Sabes qué? Voy para allá.

— Sí, pero no te aparezcas, la casa tiene un hechizo anti-aparición, y sólo yo puedo hacerlo. Tienes que hacerlo en la calle.

— De acuerdo.

— Te espero...— Dijo de nuevo con tono infantil.

Dennis le miró pidiendole una explicación.

— No sé, no sé porque tiene un cadaver en su cuarto...¿Quieres venir? Te juro que no es mal tipo, ni peligroso, del muggle que vive con él no puedo decir nada porque...le disparó a un mago...a un mago que tenía la cara de su novio ¿Qué clase de enfermo es?— Preguntó volviendo a sacar las chaquetas del aramario y la varita que le había quitado al mago griego.

o-o-o-o-o

La pareja llegó cogida de la mano y caminaron en silencio hasta la casa que tenía las luces del portón encendidas. Tocaron el timbre y de pronto salió una voz de él asustando a Albus.

— ¡Hola!

Dennis miró a Albus y luego rodó los ojos hacia arriba acercandose al interfon.

— Hola. Buenas noches...ammm aquí estamos.

— ¿Quienes?

— Albus Potter y compañía.

— Tu no suenas como Albus...

— Aquí estoy. — Dijo con poca confianza el pelinegro al aparato.

— Se ha asustado con el interfon. — Aclaró el rubio

— Ohh ya, yo también me asustó a veces...amm pero primero. Dime Albus ¿De qué material está hecha mi varita nueva?

— De 310 galeones de cuerno de unicornio y pluma de fénix.

— Ohh, sí eres tú. — Se escuchó su risa. — Espera un momento.

Dennis miró a Albus.

— ¿Dijiste que tenía nuestra edad?

— Es algo particular. Es muy dulce, Vico lo ama, deberías verla.

Entonces se escuchó una especie de engranaje en la puerta, a Albus le sonaba como si se estuviera abriendo una boveda de Gringotts pero mirando a Dennis pudo darse cuenta de que el sonido sólo podía ser percibido por magos. Scott había puesto un hechizo muy poderoso en la puerta. De verdad que no quería ser encontrado.

— Hola. — Dijo el alto rubio abriendo la puerta. — Aww ¿Él es tu novio Albus? ¿Es Dennis?

— Sí, hola. — Le saludó Dennis.

— Aww...ven aquí. — Dijo el rubio dandole un abrazo que paralizó al más bajo de los rubios. — Albus me habló mucho de ti hoy.

Albus se rió ante el cuerpo petrificado de su novio.

Scott entonces le soltó y abrazó a Albus.

— Pensé que vendrías con Vico. — Le dijo el chico dejandoles pasar.

— Vico vive muy lejos.

— Ohh ya. — Scott cerró la puerta y entonces Albus pudo notar de nuevo aquél sonido.

— ¿El hechizo en la puerta y el de anti-aparición lo pusiste hoy o lo pusiste antes?

— Los puse cuando llegué a Reino Unido, no quiero que mi padre o alguno de sus hombres me encuentre o que pueda entrar a éste lugar, podrían lastimar a Mitchy. Sólo los nomaj y yo podemos abrir la puerta de la casa.

— ¿Los nomaj?

— Por supuesto, Mitch vive aquí y es la casa de Fabio, no podía tenerla totalmente sellada, me sigue gente mágica así que la gente nomaj no me preocupa.

— Es un hechizo impresionante. Eso quiere decir que el mago entró a la casa porque Mitch le dejó entrar. — El rubio asintió.

— Tenía mi aspecto así que le dejó entrar, pero pronto se dio cuenta de que no era yo.

— ¿Cómo se dio cuenta de que no eras tu?

— Porqué conozco a Scott y le entrené bien para no que no regresara a casa sino terminaba sus listas. — Escucharon todos una voz casi femenina. Todos voltearon arriba para ver a un pequeño castaño que llevaba una bata de baño color vino y una toalla en la cabeza del mismo color.

— ¿Entrenar? Scott no es un perro. — Dijo Albus apretando los puños

— Pero tiene el cerebro de uno. — Dijo sin importarle herir los sentimientos de su rubio quién se sonrojó. — ¿Qué hacen ellos aquí Scott? — Preguntó el chico bajando las escaleras.

— Albus vino a ayudarme a desaparecer el cuerpo.

— Ahh...ok, iré a calentar la comida china para cenar, pero lamento decir que sólo es para nosotros dos, así que después de terminar haganme el favor de retirarse.

— Wow. — Dijo Dennis en voz alta. — ¿Tu sí que eres un cabrón verdad?

— mmm...sí, se podría decir. — Dijo antes de entrar a la cocina.

Dennis no se esperaba esa respuesta pero bastó para que se le subiera la bilis a la garganta.

— Lo siento. — Dijo el más alto de los tres apenado. — Él es...malhumorado por naturaleza...mmm ¿Podemos ir arriba?

— No deberías dejar que te hable así. — Dijo Albus en voz baja.

— Yo sé...yo sé...pero él...yo le amo mucho, y además es lo único que tengo en el mundo ahora. — Dijo comenzando a subir las escaleras. — Y no es...tan malo, ésta vez me ha dejado conservar la varita, eso es nuevo, a él no le gusta la magia.

— ¿No le gusta la magia pero vive contigo? — Preguntó Dennis siguiendole por las escaleras.

— Él sólo me quiere porque puedo hacer música que a él le gusta cantar. — Dijo bajito.

— Entonces ¿Eres animago? — Preguntó Albus al ver el cuerpo del hombre con toda la parte del cuello siendo una masa sanguineolenta. — Estoy seguro de que te comiste algo.

Dennis abrió los ojos de la impresión, era la cosa más horrible y asquerosa que jamás hubiese visto y no pudo evitar las arcadas mientras Albus y Scott parecían estar de lo más normal.

Ahí mismo, recargado sobre uno de los libreros estaba el rifle que había usado Mitch para inmovilizar al hombre.

— Esas cosas me dan miedo. — Dijo Albus dandole la espalda.

— Ya lo sé, cuando tenía catorce audicioné para el equipo de Quadpod de mi casa y estuve practicando todo un verano. Un día decidí volar fuera de los terrenos de mi mansión y alguien casi me derriba de un disparo creyendo que yo era un ave o algo, no sé en otros estados, pero las armas son realmente comunes en Texas, incluso en las que no son estados fronterizos. Le dije a Mitch que me asustaba y por eso la mantiene guardada debajo del fregadero de la cocina pero...supongo que tiene razón al decir que es para su protección.

— Es de salvajes.

— No, es de nomajs. Es cómo la electricidad...ellos los necesitan porque no pueden hacer magia. No hay que temerles sino compadecerles por haber nacido sin magia.

— Tienes razón. — Respondió Albus mirandolo a los ojos compartiendo entonces una creencia de corazón a corazón. El momento se rompio cuando Dennis comenzó a reirse detrás de ellos tratando de hacer lo mejor para no carcajearse, tapandose la boca.

— Lo siento, lo siento. Continuén. Ignorenme. Yo me sentaré en la cama. — El rubio más alto se sonrojó.

— No está muy limpia.

Dennis sin embargo no le hizo caso y fue a sentarse encontrandose con las sábanas ligeramente manchadas de sangre, y había otro fluído extraño de un color blanco aunque ya en algunos lugares tomaba un tono amarillento debido a que estaba secandose. Dennis por curiosidad lo tocó y tras observarlo de cerca cerró los ojos e hizo una mueca de asco.

— Realmente espero que sea tuyo.

— No creo que lo sea. Siempre me pide que me venga dentro.

— ¿Qué cosa? — Pregunto Albus.

— La cama, tiene las sabanas llenas de semen y al parecer algo de sangre. — Dijo moviendo las cobijas para cubrir la cama y después sentarse. Mientras lo hacía se encontró con la botella de lubricante y la puso en la mesita de noche. — Usamos la misma marca. — Mencionó.

Después miró a los chicos que estaban en cunclillas rodeando al cuerpo, a Dennis le recordó a un par de niños picando a una paloma muerta.

— ¿Exactamente qué tanto le están viendo?

— Su ropa. — Dijo Albus. — No creo que sea de Norteamerica. Creo que se tratra de la misma gente que nos está siguiendo a todos.

— ¿Eso significa que mi padre no nos ha encontrado? — Albus asintió y Scott dio un suspiro de alivio. — Gracias a Merlín.

— ¿Por qué tu padre no sabe dónde estás? ¿Por qué no quieres que te encuentre? — Preguntó Dennis.

— Dennis, a veces la gente simplemente no se lleva bien con sus padres.

— Está bien Albus, no me apena decirlo. Él no sabe dónde estoy porque escapé de casa. Mis elfos domesticos me ayudaron a escapar. Espero que estén bien, papá no es muy gentil con ellos.

— ¿Elfos domesticos? ¿Como en Hogwarts? — Preguntó Dennis.

— Los elfos domesticos son esclavos de los magos. Sólo los tienen aquellos que pertenecen a familias muy ricas ya que son costosos. — Le dijo Albus. — No puedo creer que los elfos de tu familia te hayan ayudado a escapar, normalmente siguen una jerarquía para obedecer ordenes.

— Mis elfos tenían miedo de mi padre, pero ellos ayudaron a criarme y no querían que mi padre me cambiara.

— ¿Cambiarte? — El rubio asintió.

— Debido a que mi sangre es muy pura nací con una especie de retardo. Realmente no sé a qué se refiera, yo siento que soy normal, sin embargo a mi padre mi retardo siempre le ha molestado. Normalemente no nos veíamos ya que el es el presidente de MACUSA y vive con mi mamá y mis hermanas en Nueva York, yo siempre me quedaba solo en Texas, de dónde proviene mi familia. Ahí fue dónde conocí a Mitchy y hemos estado juntos por mucho tiempo. Un día papá fue a Texas por alguna razón y nos encontró a Mitchy y a mi. Sólo nos estabamos besando. Mitchy había roto conmigo porque se iba a venir a Londres con Fabio y yo le había pedido que se quedara conmigo al menos hasta que partiera pero papá enloqueció porque Mitchy es hombre y es nomaj. Apenas pude ayudarle a escapar pero cuando regresé a casa papá me aplicó "un castigo ejemplar". Creo que encontró la excusa perfecta para torturarme sólo porque me odia. Después me dijo que iba a cambiarme, que iba a hacer que un medimago reparara mi cerebro y que el "único riesgo" era que muriese con un 50/50 de probabilidad y que si tenía éxito entonces me buscaría una esposa. Yo no quiero cambiar, no quiero ser reparado, y no quiero a una mujer como compañera de vida, yo quiero a Mitch. Mis elfos estaban aterrorizados y me ayudaron a escapar; cuando Mitch vio lo que me hizo mi padre le pidió a Fabio que me dejara venir con ellos.

— ¿Y aceptó? — Preguntó Albus, — ¿quién dejaría a su 'pareja' vivir con otro chico más joven, que también es gay y que además es guapo? Ese Fabio debía ser un idiota.

— Fabio no sabe que soy gay, sólo cree que Mitchy me protege porque tengo retraso. Eso le hace pensar que Mitchy es buena persona.

— Me alegra que sepas que Mitch no es una buena persona. — Dijo Dennis. — No te conozco de nada Scott, pero puedo decirte que tu novio es un patán.

— Al principio yo no quería venir...me bastaba quedarme en Texas y que mi padre no me encontrara pero Mitch insistió, yo no quería porque amo a Mitch, y ver a Mitch con otro hombre me duele, verle con Fabio me duele pero a él no le importa...así que al principio le dije que no...pero entonces Mitch me dijo que sólo estaríamos así unos cuantos años hasta que él terminase la carrera en el conservatorio...me dijo que entonces le dejaría y se casaría conmigo porque los nomaj gay sí pueden casarse.

— ¿Quieres casarte con eso? Dios mío, debes estar muy enamorado. — Dijo Albus revisando los bolsillos del cadaver sacando un cuchillo exactamente igual al de su atacante de hace unos días. Entonces se puso algo serio. — Scott...dime, cuando escapaste de casa ¿Trajiste algo contigo propiedad de tu padre o de tu familia que pudiera ser de interés para otros?

— ¿Algo? No realmente, tuve que huir por la noche y mis elfos empacaron por mi, sólo ropa y algunos libros. — Albus miró al sujeto otra vez, el hombre estaba tirado justo a un lado del librero y Scott sólo había traído libros de Estados Unidos.

— De nada nos sirve tener esto aquí.— Dijo apuntando el cadaver con su varita haciendo un movimiento ligeramente circular de arriba hacia abajo.— Evanessco.

Al decir estas palabras el hombre desapareció y los ojos de Dennis se abrieron.

— Fregoteo. — Las manchas de sangre se fueron también tras ser lavadas por una fuerza invisible.

Así...así de facil Albus había desaparecido la existencia de una persona.

Con un movimiento de varita.

o-o-o-o-o

Los chicos aparecieron justo a un lado de la cama y Albus sujetó fuerte a su novio para que éste no perdiera el equilibrio. Sin embargo el moreno, al estabilizar a Dennis lo dejó caer en la cama y después se dejó caer a él mismo sobre el suelo vaciando el contenido de su mochila, que en realidad era la mochila de Scott y que había sido encantada para llevar por el rubio con un hechizo indetectable de expansión.

— ¿Por qué has traído eso? — Preguntó Dennis depués de haber recuperado la sensación de realidad.

— Por qué siento que lo que quieren, o algo de lo que quieren puede estar aquí. Además estos libros puede darme una idea de cómo es la familia de Scott y por lo tanto me dará una idea de quién es realmente Scott Hoying.

— Bueno, él te lo dijo.

— Me dijo sólo lo que quiere que yo sepa, lo que él quiere que el resto de los magos sepan...

— ¿A qué te refieres?

— Para empezar un mago jamás, ni siquiera si fuera un retrasado mental como Scott dice que es, jamás prestaría los libros pertenecientes a su familia. Los libros familiares están escritos por los miembros más poderosos, sabios y narcisistas de la familia. Todos los textos son valiosos porque contienen hechizos o rituales originales que desde su creación cientos de años atrás hasta la actualidad sólo pasan de padres a hijos. Todos los miembros de ancestrales casas de magos enseñan a sus hijos a preservar, aprender y proteger estos conocimientos. Los magos prefieren quemarse vivos con los libros antes que dejar que otros se apoderen de estos conocimientos.

— ¿Y por qué te los dio entonces?

— Para probar su inocencia supongo, no hay forma de que haya muchos hechizos serios en estos libros. De haber tenido libros así probablemente los guardó en otro sitio, es demasiado sospechoso que haya dicho que no sabía que libros tenía.— Dijo abriendo un tomo grueso con tapa de piel.

— ¿Por qué?

— Por qué estaban acomodados en ordén alfabetico, lo que quiere decir que Scott tuvo que haberlos acomodado personalmente, dado a que Mitch repudia la magia, dudo que lo haya hecho él. Lo que sea que ese hombre estuviera buscando ni siquiera estaba ahí. Además viendo la escena del crimen en vivo te puedo decir que Scott no es quién dice ser tampoco, creo que ni siquiera Mitch tiene idea de quién es y de verdad creee que Scott es un retardado al que puede maltratar. Puede que en realidad Scott sea una muy mala persona.

— De acuerdo, siento que me he perdido un poco ¿Por qué dices eso? Tu dijiste que era confiable.

— Es porque recién lo estoy analizando D. Si Scott fuera el pequeño y retardado sangre pura atormentado por su padre por ser un eslavón debil de la familia...Scott no podría ser capaz de...Es músico y compositor, su mente tiene conexiones neuronales que una persona normal no desarrolla. En su cuarto había una escoba para quatpodd, un deporte muy rudo derivado del quidditch, sólo para jugadores muy habiles, rápidos y fuertes, Scott realiza la aparición sin problema y es animago, esas son dos cosas muy dificiles de lograr para magos normales, sobre todo la segunda, ni siquiera mi padre ha podido convertirse en animago.

— Pero...tu utilizaste hechizos muy sencillos que él no sabía usar.

— Porque vengo de una familia que aunque es adinerada es costumbres humildes, esos son hechizos de limpieza, en mi casa abunda ese tipo de magia. Pero Scott...él no viene de una familia así, él probablemente no haya limpiado con magia nunca en su vida, los magos sólo aprenden los hechizos que utilizan. La pregunta es ¿Qué clase de mago tienes que ser para tener como prioridad hechizos para anti-aparición? y el hechizo de la puerta...ese tipo de hechizos de seguridad no se usan en cualquier lugar, probablemente se use en bancos de alta seguridad o cámaras secretas familiares. Su personaje está mal estructurado, se contradice una y otra vez...Scott dice que está huyendo de su padre pero su padre podría rastrearlo ya que si vino de forma muggle tuvo que usar documentos muggle y esos son muy faciles de rastrear por los ordenardores, su padre hubiera estado aquí un día después de que Scott llegó, tuvo que haber llegado aquí de manera ilegal y para hacer eso, en el mundo mágico necesitas de conexiones poco respetables, sobre todo con países con leyes migratorias tan estrictas como lo es en el caso de Estados Unidos. Entre más analizo las cosas menos tienen sentido. Esa sumisión ante un muggle y su yo dominante en la intimidad...sus elfos, los elfos no pueden desobedecer a su amo nunca, bajo ninguna circunstancia, a menos de que...el poder de su magia cambie la jerarquía a ojos de los elfos. Eso significaría que Scott es mucho más poderoso de lo que dice y decir que es más poderoso que el actual presidente de la MACUSA es bastante impresionante.

— Así que es un mentiroso.

Albus sonrió.

— Pienso que dice las verdades a medias. No está mintiendo del todo, pero oculta cosas. Lo que más me asusta es que su sumisión ante ese muggle sea real. Es un mago poderoso Dennis, pero besa los pies de un muggle y no de cualquiera, sino de uno perverso.

o-o-o-o-o

— Ellos aún están aquí. Casí puedo sentirlos. — Dijo Mitch mirando hacia la ventana.

El rubio estaba escribiendo en uno de sus cuadernos pautados.

— Ellos están ahí, pero no podrán pasar, de ahora en adelante tendremos que entrar y salir de la casa con aparición...es la primera vez que te veo tener miedo. — Le contestó su amante borrando un acorde de su cuaderno.

— Casi me engañan y dejé entrar a uno de esos anormales a mi casa. Realmente odio a los magos. No me gusta la forma en que piensan que son los dueños del mundo, de que pueden engañarme y hacer su voluntad. O que sean como tu padre y piensen que pueden alejarte de mi. Nunca voy a permitir algo como eso, voy a volarle la tapa de los sesos a quién sea que lo intente. — El chico asintió leyendo su obra desde el primer compás. — Tú...¿Me odiarías si asesino a tus padres? ¿A tus hermanas?

El rubio negó con la cabeza.

— Mañana pondré aún más barreras si así lo deseas. — Dijo anotando otras notas en el último pentagrama.

— Tampoco quiero tener a ese tal Albus cerca. Oculta algo.

— No lo creo, es muy transparente y sabe transmitir bien lo que quiere.

— ¿Ah sí? ¿Y qué es lo que quiere?

— Lo mismo que nosotros Mitchell y, que le dejen en paz. Además, al parecer tenemos un enemigo en común, y dice que hay más como nosotros, lo más inteligente es aprovecharnos de su compañía para permanecer seguros. Los lobos solitarios somos más faciles de matar, sin embargo en manada somos más fuertes.

— Yo realmente odio cuando hablas así. Me gusta más cuando eres Scotty. Llevas siendo Richard toda la tarde. Quiero que lo traigas de vuelta.

El rubio sonrió.

— ¿En serio? A veces tengo la impresión de que nos llevamos bien. Sobre todo durante el sexo.

— Me da morbo, eres rudo, me tratas como tu puta y eso me pone caliente pero realmente no me gustas, cuando estoy con Scott siempre me siento protegido y amado, cuando estoy contigo siento estoy en peligro, siento que tu serías capaz de asesinarme en un ataque de ira.

— Probablemente...yo te deseo Mitchell, sabes que sí, y sabes lo posesivo que puedo llegar a ser, pero deberías considerar ser más amable con Scott de ahora en adelante, aquí en Londres hay gente muy agradable, gente a la que le gusta Scott por quién es, puede que él encuentre alguien más, lo metiste a un conservatorio, tarde o temprano encontrará a alguien con una mejor voz, y en cuanto él deje de amarte lo primero que haré será romper tu cuello. Tu no eres necesario para mi, aún no me has dejado marcarte así que no eres irremplazable.

— Realmente no me importa morir bajo tu pata, pero no quiero que Scott ame a otra persona, ni que haga música para alguien más ¿Si dejo que tu me marques Scott me pertenecerá para siempre?

El rubio asintió.

Mitch se acostó en la cama y se abrió el pijama.

— Entonces hazlo. — El hombre rubio sonrió y dejó su cuaderno sobre la almohada de Mitch gateando hasta llegar al castaño.

— Si lo hago la magia te rodeará para siempre, entrará en tu sangre y te convertirás parte de nuestro mundo hasta que mueras, te convertirás en parte de mi ¿Quieres vivir con nosotros dos para siempre?

Los ojos de Mitch lagrimearon un poco. Sobre todo cuando el hombre rubio se posicionó sobre él.

— Tu estarás ahí porque no hay otra opción, eres un daño colateral, yo sólo quiero que Scott me pertenezca a mi y esta es la única forma. — El hombre se rió.

— Eso significa que no habrá más Fabio, Mitchell, la próxima vez que le vea Scott va a abrirle el pecho y a comerme su corazón porque él será tu dueño y si no nos deshacemos de nuestro padre puede que ni siquiera puedas volver a ver a tu familia.

Mitch comenzó a llorar pero no se movió. Richard siempre le ha aterrorizado, desde que tenían quince años.

— Yo sólo quiero que él sea mío...— Dijo el castaño mirando a las pupilas del rubio que pasaban de ser azul obscuro a rojo.

— Tu y Scott están cortados por la misma tijera. Completamente obsesionados. Se merecen el uno al otro no importa cuanto sufrimiento se causen a ustedes mismos, sería irresponsable dejarlos ir separados por el mundo, así que supongo que debe ser él quién realice éste acto tan especial. — Dijo pasando su pulgar por los labios del castaño. Los ojos del rubio volvieron a ser azules. Ese azul oscuro tan característico que sólo los miembros de su familia tenían.

— ¿De verdad quieres hacer esto Mitchy?

El castaño miró el rostro hermoso de Scott y acarició su barbilla. Después asintió limpiándose las lágrimas.

Entonces Scott puso sus ojos en rojo, abrió su boca y sus dientes, especialmente sus caninos, comenzaron a crecer.

— Va a doler un poco. — Le dijo al oído para después clavarle los dientes en el cuello.

Hubo dolor, por supuesto que lo hubo, pero también hubo placer, Mitch incluso tuvo una erección. Scott desencajó sus dientes y miró el cuerpo de Mitch temblar, primero era un temblor muy débil y después parecía más especie de convulsión. Scott pudo ver como la magia recorría el cuerpo de su amado, parecían pequeños insectos corriendo debajo de su piel.

Entonces los ojos de Mitch se tornaron azules. Un azul fosforescente.

Scott cubrió su boca porque iba a comenzar a gritar de felicidad.

Su nomaj ya no era un nomaj común y corriente.

Ahora iba a tener algo de magia, e incluso iba a vivir tanto como él.

Ahora era su compañero, su omega.

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Aclaraciones:

Esto es un fanfic y hago con las reglas de jk lo que me salga de mis reales nalgas, yo sé que el úniverso de los magos no trabaja así, que tienes que nacer mago para ser un mago pero digamos la familia de Scott es especial, son únicos en su tipo.

Su familia no es sólo de magos, sino que tienen sangre de lobos, no vendrían siendo como Lupin ya que este se convertía sólo en luna llena, esta no es una enfermedad como el resto de los hombres lobos, sino que son lobos con forma humana, si están algo relacionados con el omegaverse sabrán que muchas veces los personajes tienen dos personalidades, las de su yo humano y las de su yo lobo (no en todos los casos es así)

Scott es así, tiene dos personalidades, su yo mago es Scott y su yo lobo es Richard, es la misma persona y por lo general es Scott quién está al frente de su cuerpo, a Richard casi no le gusta salir, no es sociable, esto no quiere decir que Scott sea menos inteligente que Richard, es sólo que su personalidad es diferente y ambos están obsecionados con Mitch, es sólo que a Richard no le gusta le idea de dejarselo saber, ya que generalmente es la parte del lobo quién elige al compañero.

Scott se obsecionó con Mitch porque Richard se obsecionó con Mitch primero, fue su instinto quién lo eligió, amor a primera vista.