Hola amigos de la pagina, bueno aquí les presento un nuevo proyecto que pondré a marchar cuando termine mi actual fic "Los Ninjas Son" este a diferencia del antes mencionado iniciara una vez terminado el que llevo, lo que pasa es que no quiero saturarme llevando varios fics al mismo tiempo para después tardar en actualizar y esas cosas además que me tendré que ver el anime de Fairy Tail para llevar a cabo la idea, ya que no lo he visto [No sé, personalmente no me atrae mucho Fairy Tail pero eso cambia cuando ves las posibilidades de escritura con la cantidad de chicas que hay jaja xD] ya con los primeros dos capítulos vistos más o menos pensé el capítulo 1 de este fic pero bueno eso ya es para otra. Este capítulo introductorio es solo para poner en "arranque" lo que pasara, espero les guste por que según sus comentarios decidiré de forma definitiva si continuarlo una vez que termine Los Ninjas Son o por el contrario dejarlo en el "limboooo de ficsssss" jajajaja. Se despide su amigo SaiyajinSannin deseándoles una feliz lectura. Espero sus observaciones, nos vemos.


-Dato interesante-

Harem Único: Son Gohan [Saga de Magin Buu] x Erza [Pareja "oficial"], Lucy, Mirajane, Cana y… Esa aun no la decido si quieren escogerla ustedes, lo leeré en sus reviews. Saludos y nos vemos.


Renuncia de derechos: Ni Fairy Tail ni Dragon Ball Z me pertenecen, les pertenecen a Hiro Mishima y Akira Toriyama respectivamente, más esta historia si tiene toques pertenecientes a mi persona. cuya historia no se hace con fines de lucro o plagio, es de un fan para fans. Enjoy!


Fairy Dragón


Capitulo introductorio: Rumbo al gremio.

Subconsciente de Gohan:

¿Creen en la magia…? Tal vez se preguntan por qué les pregunto esto de una forma tan repentina, bueno siéndoles sinceros se los pregunto por qué a mí me paso algo que me hizo cambiar de parecer con respecto a esto. Desde pequeño mi padre me había consentido bastante, mi madre me trataba como un niño mimado y hubieron momentos en los que mis amigos no me tomaban tan en serio, ni si quiera mis enemigos, fui un cobarde, claro que luche pero ¿A qué precio? A costa de perder a todos los seres que amaba, arrastrarme por el barro y la tierra mientras intentaba de forma desesperada salir y saber si ellos seguían hay… Me llene de ira, dolor, estalle, pelee y vencí pero... A hora no sé por qué estoy aquí, todas estas cosas han sido tan nuevas para mi, tan diferentes pero a la vez siento que debo, protegerlos, sobre todo a ellas, esas chicas que siendo diferentes me han enseñado lo que significa proteger a alguien, por que estoy dispuesto a todo por ellas y por ellos… ¡Mis compañeros de Fairy Tail!


Meses antes: Reino de Fiore.

Sus ojos pesaban, no sabía dónde estaba, su cuerpo estaba postrado sobre algo suave, no sabía qué pero la sensación era sutil y clemente, intento moverse pero fue en vano, sintiéndose hostigado por una presencia intento levantar sus débiles parpados, pero al aun no tener suficientes fuerzas le era imposible no obstante poniendo todas sus ganas en el acto logro abrirlos tan despacio como el caminar de una tortuga, giro el cuello pero un fuerte dolor le ataco de repente "Tsk…" se quejo, su cuerpo estaba completamente vendado, podía escuchar como algo daba pasos fuera de la pequeña y oscura habitación en la que se encontraba, quiso volver a mover el cuello pero fue inútil otro maldito dolor lo ataco cuando menos se lo esperaba. -Donde… ¿Dónde estoy?- musitaba con un esfuerzo sobre humano, las manos le temblaban, no sabía por qué solo sabía que lo hacían, su pecho y cabeza especialmente le dolían, su pecho ardía mientras sentía como una especie de sustancia se calentaba en sus pectorales, fue cuando la puerta de la habitación se abrió, otro intento más por parte de él para ver quién era la persona o cosa que lo tenía en aquel estado tan deplorable pero fue en vano, no podía, sus dolencias no se lo permitían.

-Como veo ya despertaste…- una voz femenina llamo su atención, esta estaba un poco gruesa lo que le daba entender al joven que quien le hablaba era una mujer de tal vez ya una edad considerable, fue cuando con sus ojos apenas abiertos noto como aquella mujer se dejaba ver en frente de él, era una señora de avanzada edad con una capa roja, su cabello era rosa pálido y contaba con un par de ojos rojizos, el chico se le quedo mirando por unos instantes hasta que sintió como la mujer posaba una de sus manos sobre su frente. -¿Me escuchas?- pregunto la mujer confundiendo al chico que no sabía que responder, ya que aun estaba muy débil como para poder hablar con una voz apenas comprensible.

-S… Si- dijo con dificultad pero con la fuerza tan vaga que la mujer apenas pudo escuchar un susurro por parte del joven adolescente.

-Veo que te dieron una buena golpiza- volvía a hablar la mujer mirando todos los vendajes que ella misma había puesto en el cuerpo del muchacho. -¿Te llamas Gohan, cierto?- preguntaba de nuevo la anciana mientras se acercaba a una mesa pequeña en uno de los extremos de la habitación, el muchacho arqueo una ceja en confusión, no sabía a lo que la señora se refería con ese nombre. -"Gohan… ¿Ese es mi nombre?"- pensó consternado al darse cuenta que no recordaba nada, lo único que alcanzaba a ver en su mente era el momento en el que chocaba contra el suelo, nada más eso, solo eso…

-¿Por qué no respondes? Te he hecho una pregunta- la anciana decía sin si quiera voltear a ver al adolorido azabache. -No… No r-recuerdo, n-nada- decía con muchísimas fuerzas quien supuestamente su nombre era Gohan, realmente no recordaba nada.

La señora de pelo rosa suspiro, sabía que no debía presionar al chico que recién despertaba, pues este había aparecido cerca de su casa de forma repentina el mismo día que una feroz tormenta azoto a Magnolia, de eso ya hacia una semana aproximadamente.

-Do… ¿Dónde estoy?- preguntaba mientras un nudo en su garganta se quería formar, estaba tan confundido mientras hacía trizas su mente intentando recordar algo pero nada, absolutamente nada llegaba a su cabeza, solo recuerdos entre cortados, una casa, rayos, una persona que lo levanto del suelo, era lo único que su mente atormentada podía generar, algo de lo más frustrante se debe decir.

-Estas a las afueras de Magnolia…- la señora respondía mientras continuaba preparando un extraño brebaje verde.

-Magnolia…- definitivamente era la primera vez que escucho ese nombre. -Al parecer perdiste la memoria… No me sorprende…- la mujer de ojos rojizos decía acercándose de nuevo hacia la cama en donde estaba el adolorido Gohan con un frasco en la mano con aquella sustancia que a simple vista se miraba asquerosa. -Anda tomate esto…- la anciana se sentó en uno de los bordes de la cama y con un poco de descuido tomo por la cabeza a Gohan poniéndola sobre su regazo, con cuidado acerco la bebida a la boca del Saiyajin y espero a que este la abriese para poder vaciar el contenido del vaso, Gohan por su parte dudo un poco, no sabía si aquello que le daban era beneficioso para su salud pero no podía negar que al parecer la mujer aquella le había cuidado y curado las heridas, con una leve y casi imperceptible expresión de asco comenzó a engullir la sustancia verde, hubieron momentos que quiso vomitar pero se aguantaba con todas sus fuerzas al levantar la mirada en más de una ocasión y ver aquellos ojos de un rojo imperturbable que le miraban de forma seria, casi amenazante, los segundos pasaron y por fin el chico se había tomado todo el contenido del vaso, un poco asqueado y con un sabor de boca nada agradable. La mujer de cabellos rosas le dejaba de nuevo sobre la almohada de la cama.

-Cuando te encontré estabas todo lleno de moretones, cortes, heridas hechas con un tipo de magia que no logro identificar, no me explico si quiera como es que estabas vivo, cualquier otro humano hubiera muerto con el sin fin de lesiones que tenia tu cuerpo…- la anciana con capa comentaba mientras dejaba el vaso de antes sobre aquella mesa de la habitación.

Gohan por su parte solo escuchaba atento desde la cama, su cuerpo comenzaba a reaccionar a la sustancia que se había tomado, pues ya sentía un poco de sus fuerzas restauradas, lo suficiente como para ya no sentirse como un inútil que no se podía mover.

-Gracias…- decía un poco mas repuesto el joven Saiyajin levantando a hora si el cuello con más facilidad, pero no la suficiente como para levantarse aun.

-Cuando te sientas mejor te podrás marchar…- eso saco de onda al chico, aun que ya lo había supuesto, la anciana solo lo estaba ayudando por lo débil que estaba, nada mas por eso. -Por a hora descansa- termino de decir mirando al chico después para darle una sonrisa que aun que no tenía alguna emoción Gohan sintió la calidez de la mujer.

-Antes de que se vaya… Me podría decir su nombre- Gohan pedía a la mujer mayor impresionándola un poco. -Mi nombre es Porlyusica…- decía está respondiendo a la petición del muchacho que había salvado. Después de esas pequeñas formalidades e intercambios de palabras la maga salía de la habitación para dejar descansar a un mal trecho Gohan que al poco rato se volvió a quedar dormido sobre la cama teniendo en mente solo una pregunta: "¿Dónde estoy?"


3 Semanas después:

El sol brillaba fuerte en la casa de Porlyusica, ya habían pasado rápidamente 3 semanas desde que aquel extraño chico que la maga medica había rescatado despertara de su aparente "coma", durante ese tiempo que el chico se recuperaba en su casa se conocieron muy bien o mejor dicho ella se permitió conocerlo a él y él a ella, varias veces habían salido con malos entendidos lo que provocaba que la mujer le diera unos escobazos muy a su estilo.

También estaba el hecho de que el muchacho al parecer había perdido la memoria, no recordaba nada, lo único que tenia era una fotografía en donde salían su padre, madre y quien parecía ser su hermano menor, detrás de esta se podía leer un pequeño escrito: "Los quiere su hijo, Son Gohan". El chico había llorado hasta la resignación, no recordar a sus padres y a su hermano era algo que lo atormentado desde que lo supo, pero pasados los días fue resignándose y aun que continuaba teniendo una actitud amable y un poco ingenua no podía negar que sentía ese vacío en su pecho al intentar recordarlos o ver esa foto. Se sentía destrozado por dentro, no tenía una identidad clara, solo sabía que algo le había pasado y alejado de su familia.

-Gohan, aquí tienes- le daba un pequeño plato con sopa Porlyusica al chico, este le miro un poco sorprendido ya que la mujer por lo general no le daba de comer, algo en ella había cambiado aun que no sabía que exactamente.

-Gracias, señorita Porlyusica- daba las gracias haciendo una leve señal de agradecimiento con sus manos, eso era muy apreciado por la mujer, pues ella admiraba que a pesar de no recordar nada el muchacho se portaba como todo un caballero.

-No hay de que… A pesar de ser un humano eres muy decente y me siento a gusto contigo aun que no entiendo por qué- decía la mujer de ojos rojos sentándose en la mesa de su casa para comenzar a comer.

Pasado un rato de desayuno los dos habían terminado sus raciones, aun que el chico se había servido cerca de casi 6 platos supuso que era por que el joven estaba en esa edad cuando más crecían los "chamacos".

-¿Que aras a hora, Gohan? ¿A dónde iras?- Porlyusica preguntaba al chico al ver detrás de él una pequeña mochila llena de cosas que fue adquiriendo en las tiendas cercanas con lo que ganaba al hacer trabajos pequeños, en poco más de una semana el chico ya se sentía lo suficientemente fuerte como para hacer todo trabajo que le encargaran, pues no era consciente de su poder.

-No lo sé, tal vez vaya a Magnolia o a Hargeon, tal vez hay me haga a la mar- respondía el chico ilusionado, espera poder comenzar pronto su búsqueda, estaba decidido a encontrar a sus padres y a su hermano, al menos tenía que intentarlo.

-¿Aun quieres buscarlos?- la maga medica le pregunto con una voz un tanto suave, algo raro en ella.

-Tengo que intentarlo al menos señorita Porlyusica-

Esas palabras causaron un pequeño instante de silencio, mismo que fue cortado cuando un suspiro del chico se escucho. -Eres consciente que tal vez ellos…- no termino su frase pues el chico que tenía en frente claramente sabía a lo que se refería.

-Vivos o… Muertos los encontrare…- dijo con una voz triste Gohan. -Debo saber en donde esta mi hogar- era la misma sensación que Porlyusica sentía cuando recién llego a Earth Land, quería regresar a Edolas pero llegado un punto de su vida decidió quedarse aquí junto a su equipo, conocidos y amigos de Fairy Tail.

-Es tu decisión y la respeto…- la anciana decía parándose de su silla.

Gohan le siguió en su acción, una vez levantado de su asiento se acomodo la mochila en su espalda y se ajustaba la camisa azul oscuro que portaba, el traje con el que había aparecido en ese lugar estaba según Porlyusica, destrozado por lo que no tubo de otra que comprar ropa nueva, la anciana había sido tan amable que le había comprado esa camisa azul con un pantalón gris, en sus pies aun se podían ver las botas azules que había traído recién llegado aquí, fue lo único que había sobrevivido junto a un par de muñequeras azules y la foto de su familia.

-¿Ya te vas?- la pregunta de la mujer saco de su mente al chico Son que le miro, esta estaba de espaldas en frente de varios frascos de medicina.

-Creo que ya llego la hora… - decía con una sonrisa que intentaba transmitir alegría pero en sus adentros era todo lo contrario, la tristeza le invadió en esos momentos de nuevo, se estaba despidiendo de la persona que lo salvo, se había ganado su aprecio y respeto, pero había llegado la hora de aventarse a la aventura y encontrar a sus padres, debía hacerlo. -Nunca olvidare lo que hizo por mí, señorita Porlyusica- Gohan hacia una reverencia agradeciéndole todo a la mujer, sabía que con eso no alcanzaría pero un día le pagaría con creces todas sus molestias.

Porlyusica se giro lentamente para ver al chico, había algo en el que no le desagradaba, era como si… No, era imposible, como si él no fuera completamente humano como ella misma… Esa había sido la razón principal de que le aguantara y le dejara quedarse, una vez que se levanto de la cama y se pudo sostener por si mismo comenzó ayudar, en ningún momento se sintió como una carga, al contrario era de total utilidad para la mujer, recogiendo hierbas, servir como compañía, escucharla, entenderla, incluso le había enseñado el valor de ser amable considerando como es ella con los extraños.

-Le prometo que le pagare algún día, se lo juro señorita Porlyusica- Gohan decía contento mirando con atención a la anciana que sin aguantar más le abrazo, no quería mostrarse débil frente a un "humano" ese no era su estilo, su forma de ser, pero al sentir que Gohan había sido el único que la supo entender durante esas semanas le fue suficiente para darse cuenta del cariño que le había tomado al semi-Saiyajin.

-Cuídate mucho, chico tonto- le dijo Porlyusica con una sonrisa nerviosa mientras paraba lo más que podía las lágrimas que amenazaban con salir de sus ojos rojizos.

Gohan dejándose abrazar por la anciana de cabello rosa solo asentía mientras en su rostro se reflejo una leve sonrisa llena de satisfacción, Gohan era único, era capaz de ablandar a personas antes duras como roca, aun que él no lo sabía ya lo había hecho muchas veces antes.

Después de separarse la maga le pidió que esperara por un momento, cosa que el chico hizo al pie de la puerta, él le obedecía como un soldado a su general, ya la conocía enojada y era lo menos que quería provocar. Una vez que se miro a Porlyusica salir de su cuarto se dirigió hacia el chico con una pequeña bolsa en mano. -Toma, esto te servirá en tu viaje- la mujer tomo la mano derecha de Gohan y con su otra mano dejaba la pequeña bolsa sobre esta, el chico arqueo una ceja y ladeo un poco la cabeza al no tender lo que la peli rosa había hecho.

Con suma curiosidad el chico abrió la bolsa encontrándose con un buen manojo de joyas o Jewel como común mente se le conoce, esto sorprendió al chico, pues estaba claro que ese dinero era bastante. -Pero… señori…- Porlyusica no lo dejo terminar, sabía que el chico al ser tan noble no iba a permitir que le diese dinero incluso él durante su último trabajo le había dado a ella en vez de ella a él. -Gohan, toma esas joyas y vete… Te ayudaran mucho en tu viaje- argumento ella al joven chico que no sabía que decir. -Está bien…- el Son recapacito dándole una sonrisa nerviosa a Porlyusica que le miraba serena. -Pero que conste que algún día se las regresare ¿Entendido?- preguntaba el muchacho.

-Si lo quieres ver como un préstamo por mi encantada, mocoso- dijo mientras reía un poco, otra cosa casi nunca antes vista por alguien.

-Bueno, nos vemos señorita Porlyusica, cuídese mucho- Gohan se despedía de forma definitiva de una Porlyusica que se quedo en la puerta de su casa mientras miraba a un chico de cabellos negros erizados alejarse, estaba contenta de haber conocido a ese chico que había hecho un cambio en ella. -"Serás un gran mago, Gohan…"- Porlyusica pensó al saber del gran poder latente en el chico, no era una magia que haya visto alguna vez o si quiera sentido ya que era rara, pero sabía que si el Son era consciente de esta incluso podía llegar a superar a los mismísimos reyes celestiales de Ishgar.

Cerrando la puerta de su casa se despedía por última vez del chico azabache deseándole lo mejor en su búsqueda.


Al día siguiente: Puerto de Hargeon.

Gohan por fin había alcanzado la ciudad portuaria de Hargeon, mucha gente caminaba por las calles mientras el chico seguía por su propio camino -"Creo que mejor hubiera entrado a Magnolia antes de haber estado caminando por horas hasta aquí"- el joven Son pensó un poco fastidiado por aquello, desde que salió de la casa de Porlyusica había estado caminando por los senderos de Fiore para poder llegar a Hargeon y poder subirse a un barco, pero a la final se estaba arrepintiendo de aquella acción.

En eso el muchacho agachando la mirada saco de uno de sus bolsillos la foto de sus padres, la miro por unos instantes queriéndose grabar en su memoria las caras y las expresiones de los tres miembros de la familia que aparecía, uno de esos miembros era un hombre de cabello negro y ojos del mismo color, este portaba un traje naranja con una camisa azul por debajo del Keikogi, en sus manos usaba unas muñequeras muy parecidas a las que él en esos mismos momentos estaba usando, su rostro reflejaba una gran sonrisa y alegría, a su lado estaba quien sería su madre, sus ropas parecían muy tradicionales junto a las de su padre, esta también sonreía mientras abrazaba uno de los brazos del padre de Gohan, a un lado de estos se miraba a un pequeño con el mismo pelo que su padre, desordenado y puntiagudo, este también tenía en su rostro una gran sonrisa que denotaba una inmensa felicidad por algo, aun que triste por no recordar aun que fuese sus nombres también se sentía feliz de ver a cada uno de sus familiares sonrientes y contentos. -Los encontrare…- dijo levemente el chico mientras alzaba la mirada pero en eso… -*PUM*-

Un pequeño golpe le dio de lleno pero él no cayo, en su lugar solo escucho como otro bulto caía al suelo, volviendo a agachar la cabeza para ver qué pasaba pudo ver a una chica rubia tirada en el suelo mientras se tocaba su cabeza la cual tenía una pañoleta atada a un mechón de su pelo de color azul, tal vez se había lastimado por el choque.

-Oye ¿Estás bien?- Gohan pregunto al ver lo torpe que era, con rapidez se guardo la foto de su familia en el bolsillo trasero y se dispuso a ayudar a la chica caída.

-¿A caso choque contra un poste o una pared?- la rubia decía mientras aun se frotaba la parte lateral izquierda de su cabeza, de verdad que le había dolido aquel repentino golpe, pero fue cuando escucho la voz de un chico hablándole lo que provoco que alzara la vista para ver quien le había hablado o golpeado para ser precisos.

-Perdóname, no te vi y cuando alce la vista fue cuando…- Gohan se quedo callado al ver como la chica de unos preciosos ojos marrones le miraba. -"¿Él me está hablando a mi…? ¡A mí!"- pensó la chica ganando un rubor muy claro en su rostro, cosa que no hizo si no confundir aun mas al semi-Saiyajin que se inclino un poco para ver mejor a la muchacha. -Perdona pero, ¿Te sientes bien?- volvía a preguntar con inocencia Gohan al no saber que exactamente decir o hacer, se había puesto nervioso al ver que la chica no apartaba la mirada de él.

En ese momento la chica de cabello rubio se dio cuenta del nerviosismo del muchacho cosa que delataba lo obvia que era al verlo sin pestañear, rápidamente fingió que no pasaba nada y se dispuso a hablar. -No pasa nada, estoy bien enserio…- decía con nerviosismo en su voz, estaba claro que ese chico estaba guapísimo y ella había sido la afortunada de encontrárselo por ahí. -Bueno, toma mi mano y de nuevo lo siento- decía con pena el joven Son mientras le ofrecía su mano para ayudar a la chica rubia a levantarse, esta aun un poco ruborizada la aceptó para después sacudir el poco polvo que había en su mini falda azul claro. -Mucho gusto, mi nombre es Lucy- ella se presento con una sonrisa ganándose otra por parte del chico azabache. -Hola yo soy Gohan…- decía sin dejar de sonreír el chico. -"Este chico es muy lindo"- pensó la chica sin perder de vista el cuerpo de Gohan, el cual claramente se notaba con músculos.

-Y dime Gohan ¿A dónde ibas?- pregunto Lucy a Gohan que dejaba de reír para ver a la chica.

-Bueno la verdad es que quería abordar un barco pero a hora que lo pienso es mejor que de media vuelta de regreso a Magnolia- el chico respondía rascando su nuca, en cierto modo se sentía un poco tonto por haber primero pensado en subir a un barco para después arrepentirse.

-¿Eres de Magnolia?- Lucy pregunto curiosa a las palabras del joven Son.

-Bueno se podría decir que si… Estuve viviendo a las afueras de la ciudad, nunca fui realmente ahí…- la respuesta del pelinegro solvento en cierto modo la duda de la maga celestial.

Pero en lo que los dos chicos platicaban un alboroto cercano llamo su atención, cerca de donde estaban ellos una gran aglomeración de chicas se estaba dando. -¡Es Salamander!- se escucho entre la multitud de chicas que se acrecentaba.

-¿Salamander…?- decía Lucy mientras pensaba, hasta que un pequeño foco se le prendió en la cabeza -¡Salamander! ¡El tipo de magos que usan fuego!- la chica chillo de repente aturdiendo a Gohan, el cual sin darse cuenta estaba siendo jalado por la chica hacia la multitud.

Una vez que el par de chicos estuvieron lo suficientemente cerca del tumulto pudieron ver a un tipo muy raro con una capa purpura en su espalda siendo su atuendo compuesto por una camisa blanca a botones con una línea café en medio y unos pantalones color arcilla a rayas, este sonreía de forma seductora a todas las chicas que le miraban fascinadas, hasta Lucy comenzó a sentir como su corazón se acelero y un par de enormes corazones aparecieron en sus ojos, esto extraño enormemente a Gohan que no entendía que le había pasado a la chica rubia que de repente y sin previo aviso estaba igual que el resto de chicas, pues todas estaban embelesadas mirando al supuesto mago de fuego.

De repente un chico de un cabello rosa pálido se presento en el lugar con un pequeño gato azul que caminaba a dos patas, esto extraño a Gohan ya que nunca había visto algo así.

[Nota del autor: Claramente el pobre no recuerda a Puar. Fin de nota.]

-¿Quién eres tú?- pregunto el chico que portaba una bufanda blanca con rayas alrededor de su cuello, un par de sandalias y un pantalón corto color caqui. -¡¿Qué?!- el otro chico que decía ser mago se sorprendió por la repentina aparición del chico, el cual se había desilusionado al ver que no era quien él esperaba.

Lucy por su parte de un de repente y sin previo aviso dejo de sentirse emocionada por ver aquel sujeto, en vez de eso miro al chico peli rosado y al pequeño gato azul que le acompañaba. -Oye, Lucy ¿Estás bien?- Gohan que se acerco a la rubia pregunto un poco preocupado al ver la extraña actitud de la muchacha momentos atrás.

-Si, Gohan…- respondía la chica con una sonrisa sincera en su rostro cosa que tranquilizo al muchacho.

Tan de repente como antes los dos chicos miraron como un grupo de chicas furiosas arremetían en contra del chico de antes, a este lo dejaron tendido sobre el suelo con su cabeza toda llena de moretones y chichones.

-Bueno chicas no se enojen…- decía el mago de fuego. -Además lamentablemente ya me tengo que retirar- terminaba de decir ganándose la atención de todas las chicas con ojos de corazón. -¡Ya se va!- decían todas las chicas al unisonó mientras miraban al mago. -Alfombra roja- decía aquel extraño de nuevo con una sonrisa en su rostro solo para después chasquear sus dedos y hacer que un círculo mágico apareciera en frente de él.

Una gran cantidad de magia se hizo presente alzándolo en el viento como una especie de transporte o algo parecido. -Si gustan venir hoy a una fiesta en mi barco se los agradeceré mucho. ¡Están todas invitadas!- decía el mago para después salir lanzado por los cielos tras recibir un "Si" unánime por parte de las chicas que se comenzaron a dispersar tras ver partir a su ídolo.

-¿Y ese loco quien era?- preguntaba el peli rosa mirando hacia el cielo en la dirección en la que se había ido el sujeto.

-Era un idiota- se escucho una voz que se acercaba a un lado del muchacho que voltio un poco la mirada para encontrarse con un par de chicos de su edad, uno era Gohan y la otra era Lucy. -Gracias por liberarme- le daba las gracias la maga por que gracias a la intervención del muchacho la chica había salido del aparente hechizo mágico en el que había caído.

-¿Eh?- el muchacho no entendió el por qué de aquel agradecimiento pero no pudo decir nada al ver como los dos chicos se acercaban más a él. -Hola mi nombre es Lucy…- la chica rubia se presentaba con una sonrisa y haciendo la señal de victoria con sus dedos. -Y yo soy Son Gohan, un gusto- a hora el Saiyajin se presentaba ante el chico de cabello rosa que se volvía a poner de pie.

-Mucho gusto, mi nombre es Natsu- el muchacho regresaba la cortesía con una sonrisa -Y el…- el chico apunto al gato azul que le acompañaba. -Es Happy, mi compañero- termino de decir Natsu aun con su sonrisa.

-¡Aye!- el pequeño felino decía contento y levantando una de sus patas a los presentes.

-¡Mira qué lindo!- Lucy decía mientras quería abrazar al pequeño gato que dio varios pasos hacia atrás tras ver las intenciones de la chica de grandes pechos.

Mientras la chica rubia aun seguía enternecida con el pequeño gato, Natsu miro con detenimiento a Gohan, el cual ya sentía que era hora de proseguir su camino. -Oye…- le llamo el peli rosa al azabache. -¿Si, que pasa?- pregunto con intriga el semi-Saiyajin.

-¿Eres un mago?- le pregunto mientras una sonrisa retadora se presento en su rostro -¿Qué?- a hora la confusión invadió al chico.

-Un mago, no, no soy- le respondió casi con prisa el chico. -No mientas, puedo sentir poder en ti- el verdadero Salamander decía mientras se acercaba para encarar a Gohan que se ponía nervioso.

-Debes estar equivocado, yo no soy un mago- volvía a decir el chico mientras comenzaba a sudar de nervios, lo que menos quería era meterse en problemas.

-¡Vamos pelea conmigo, gallina!- Natsu decía quitándose su equipaje de encima lo que provoco que Gohan se alterara un más. -"¿Qué le pasa a este chico? ¿Por qué quiere pelear conmigo?"- el pobre de Gohan se preguntaba de forma mental mientras miraba como el chico de ojos grises se quitaba la chaqueta que llevaba encima, al ver esto Lucy se asusto pero también por ver el estado tan alterado de Gohan, ella no había sentido ese poder del que hablaba Natsu por lo que decidió interferir para evitar que este lastimara a su nuevo amigo.

-Oye Natsu, déjalo en paz, si dice que no es un mago, es que no lo es- Lucy decía mirando con un poco de enfado al chico.

-Tú no te metas, Lesy- Natsu no hacía caso a las palabras de la rubia que a hora si se había molestado con el por haberle llamado "Lesy".

-¡Mi nombre es Lucy!- decía con molestia la rubia moviendo sus brazos de arriba hacia abajo.

-¡Estás listo, por que aquí voy…!- Natsu ya estaba listo para atacar mientras Gohan retrocedió un poco por la mirada agresiva que el chico de cabello rosa había tomado. -Na-Natsu cálmate…- pidió el Saiyajin, pero fue tarde…

-¡Puño del dragón de fuego!- un circulo mágico se formo al momento en que Natsu choco sus puños y los encendió, estaba claro que el azabache no podría escapar de la pelea, pero en eso Lucy sin previo aviso se entre puso entre Natsu y Gohan. -¡Detente idiota!- grito la chica pero Natsu ya se encontraba "encendido" como él decía.

-"No tengo opción, este tonto va a lastimar a Lucy…"- Gohan pensaba poniendo una expresión seria en su rostro la cual fue vista por el Dragón Slayer de fuego y sonrió con más ganas, a hora menos se detendría al ver que Gohan al final si estaba dispuesto a pelear con él.

En un parpadeo Gohan apareció por detrás de Natsu con Lucy entre sus brazos, la chica se sonrojo al ver y sentir a Gohan tan cerca de ella pero esto rápidamente se le paso al notar lo que acababa de pasar, Natsu se quedo con la mano estirada buscando con la vista a Gohan pero no lo encontraba. -¡Detrás de ti! ¡Aye!- grito Happy a su compañero que se giro para encontrarse al joven Son dejando de pie a Lucy. -Así que eres mago de tipo viento, lo único que sentí cuando te moviste fue una leve briza, ¡Eres sorprendente Gohan y por eso mismo te voy hacer morder el polvo…! ¡Estoy ardiendo!- Natsu gritaba mientras su puños se cubrían por una llamarada de fuego aun mayor. -¡Natsu cálmate! ¡No quiero lastimarte!- Gohan exigía ya un poco molesto mientras tomaba a Lucy de su vientre y la alejaba un poco para que no resultara herida por las tonterías del Dragón Slayer. -¡Demuéstrame el poder de un mago con magia de tipo viento!- Natsu se volvió a lanzar con sus puños encendidos a Gohan que al igual que la otra vez desapareció apareciendo detrás del peli rosa, el cual se fue de bruces contra un muro cercano destruyéndolo.

-"Es muy rápido, no lo puedo ver… ¡Esto es asombroso!"- Lucy pensaba emocionada mientras había intentado seguir con la vista a Gohan pero le era imposible, el chico había demostrado tener un poder tremendo.

[Nota del autor: Aun que Gohan haya perdido la memoria debo aclarar que su cuerpo aun recordara como pelear, algo así como la "memoria muscular" así como que también este podrá realizar esferas de Ki pero ya estando consciente de esto lo mismo con volar. Fin de la nota.]

Natsu salía de entre los escombros que el mismo había provocado, con una mirada molesta el chico estaba listo para volver a lanzarse. -¡No te burles de un Dragón Slayer!- gritaba Natsu volviendo arremeter en contra de Gohan pero este solo se hizo a un lado dejando pasar a Natsu como si nada. -¡Aye! Natsu está en problemas- decía Happy mirando la facilidad con la que Gohan esquivaba los golpes ardientes del Salamander. -¡¿Por qué no puedo golpearte?!- la frustración en el chico de mirada gris era evidente.

-¡Ya Natsu! ¡Basta!- Gohan ya arto de esto se poso detrás de nuevo de Natsu y dándole un "ligero" codazo en la espalda lo mando a dormir contra el suelo, Lucy y Happy abrieron los ojos completamente al ver como el Dragón Slayer caía inconsciente al suelo.

-Lo siento pero tenía que calmarlo…- Gohan decía un poco más tranquilo mientras ponía a Natsu boca arriba.

Happy sin perder tiempo se acerco a su compañero caído y después voltio a ver a Gohan. -Tranquilo, solo esta inconsciente, despertara en unos minutos- el Saiyajin le dijo con una sonrisa que provoco que el felino se sintiese más tranquilo. -"Eso te pasa por retar a todo el mundo"- pensó Happy al ver el rostro apacible de su compañero humano.

-¡Eso fue increíble!- Lucy hablaba con sus dos manos en su pecho, estaba realmente emocionada al ver el poder del chico que recién había conocido hoy. -"No solo es guapo, es protector y caballeroso, además de fuerte"- la chica saco un libro pequeño de su bolsa de mano donde anoto el nombre de Gohan y las cualidades que hasta el momento había descubierto en él, ese libro era el "libro del novio perfecto", el chico al ver esto no pudo evitar no acercarse para ver qué era lo que la rubia anotaba con tanto esmero. -¿Qué haces, Lucy?- pregunto el Son espantando a la muchacha mientras tomaba el libro con fuerza, lo cerraba y se lo llevaba detrás de su espalda con una sonrisa nerviosa. -Nada, Nada- dijo mientras una gota de sudor recorría una de sus mejillas.

-Bueno…- fue lo único que atino a decir el muchacho tras ver la extraña acción de su amiga rubia. De repente el muchacho se llevo sus manos a sus bolsillos traseros pero no encontró lo que estaba buscando. -¡¿Dónde está?!-

-¿Qué pasa?- preguntaba con curiosidad Lucy a un Gohan que se había puesto pálido.

-¡No! ¡¿Donde está la foto?!- Gohan comenzó a buscar por todas partes para ver si la encontraba, era el único recuerdo que le quedaba, lo único que lo mantenía atado a ese pasado que no recordaba, tenía que encontrarla a como diese lugar.

-¿Foto? ¿Qué foto?- Lucy continuo con sus preguntas al ver la desesperación con la que el chico de pelo negro buscaba por todos lados aquella desdichada foto.

-¡La foto de mi familia!- dijo sin pensar el Saiyajin, estaba tan concentrado en encontrar ese preciado artículo que se le había salido un poco de su verdad.

-¿La foto de tu familia? Yo no he visto que traigas alguna encima- Lucy también miraba hacia el suelo intentando encontrar la foto que mencionaba el azabache. -¡Es la única foto de mi familia que me queda!- volvía a decir sin pensar el chico, estaba completamente mortificado por encontrarla, Lucy le miro, su mirada se había entristecido un poco al ver al chico, ¿A caso Gohan no tenía a nadie en ese mundo? Eso se pregunto la maga de las llaves sin dejar de observar al Son buscar su fotografía sin parar hasta que por fin la encontró tirada cerca de unos arbustos plantados como adorno. -¡Aquí estas!- decía aliviado Gohan mientras la acercaba a su pecho.

Lucy quiso preguntar pero en eso, Natsu comenzó volver a reaccionar. -¿Qué paso?- preguntaba Salamander al no saber qué diantres había pasado de un momento a otro, lo único que alcanzo a vislumbrar en su mente fue que Gohan estaba esquivando sus ataques y después. -*PUFF*- Nada.

Gohan con su foto recuperada se la guardo en la mochila para evitar que se le cayese de nuevo, una vez hecho esto miro como Natsu se levantaba mirándolo. -Oye, velocímetro, ¿Qué pasó? ¿Quién gano?- Natsu preguntaba a Gohan que no sabía que responder. -¡Aye!- Happy intervino jalando de su pantalón a Natsu que le miro curioso. -Tú perdiste, Natsu ¡Aye!- decía el felino haciendo que el Dragón Slayer abriese los ojos por haber escuchado eso.

-¿De verdad me ganaste?- preguntaba sin creérselo el chico de pelo rosa. -¡Debes ser muy fuerte para haberme vencido!- exclamaba con clara exageración. -Perdón por haberte noqueado pero es que no podía dejar que siguieras haciendo destrozos- Gohan decía señalándole a Natsu la pared destruida por uno de sus ataques.

-jajaja Siempre que peleo tengo que destruir algo jajaja- reía el mago de fuego por su comentario. -Se nota- dijo Lucy acercándose al par de chicos.

-Oye Gohan…- Natsu llamo más calmado al Saiyajin. -¿Por qué no te unes a nuestro gremio?- preguntaba con esperanza el Dragón Slayer, sabía que si Gohan aceptaba tendría más posibilidades de pelear con él en el futuro.

-Es verdad…- Lucy se acerco a Natsu mirando con detenimiento el tatuaje que tenía en uno de sus hombros. -Ese tatuaje es de…- Natsu interrumpió a Lucy mientras sonreía.

-¡Fairy Tail! ¡Claro que sí!-

-¿Entonces tu eres el verdadero Salamander de Fairy Tail?- preguntaba esperanzada la chica.

-¡Por supuesto!- Natsu afirmaba sin retirar su sonrisa de su rostro. Pero una vez que respondió la duda de la rubia se dirigió de nuevo a Gohan. -¿Entonces qué dices? ¿Te quieres unir a Fairy Tail?-

-"Si me uno a ese gremio que menciona Natsu estaré desviándome de mi búsqueda"- Gohan pensaba en esa posibilidad, no podía desviarse de su objetivo, buscar y encontrar a su familia.

-Lo siento Natsu, pero, no puedo…- Gohan se rascaba la nuca al decir aquello, Lucy al escuchar al chico rechazar la oportunidad de unirse a Fairy Tail, sintió ira, ella había anhelado todo ese tiempo unirse a Fairy Tail y a otro que se lo proponen va y rechaza la oportunidad como si nada.

-¡¿Acaso estas tonto o qué?!- Lucy decía molesta mirando al Saiyajin que se había exaltado al ver a su amiga rubia en ese repentino estado.

-¿Por qué…?- pregunto un poco temeroso el chico Son.

-¿Cómo puedes rechazar la oportunidad de unirte a Fairy Tail? Es el gremio más poderoso de toda Fiore- la maga decía con brillos en sus ojos, realmente deseaba con todas sus fuerzas pertenecer a ese gremio.

-Lo siento, Lucy pero yo tengo un objetivo más importante que unirme a un gremio…- miro a Natsu. -Sin ofender- termino de decir para no caldear de nuevo al mago de fuego.

-Se podría saber ¿Cual es ese objetivo?- pregunto Natsu al ver la cara que había puesto Gohan al decir "objetivo".

-Buscar a mi familia…- dijo a secas el Saiyajin, haciendo que Natsu abriese los ojos, fue cuando su pecho sintió una presión sobre el, Happy noto esto, Natsu entendía lo que Gohan decía, lo sentía. A hora Lucy miraba a Gohan con un poco de vergüenza, ella y su bocota. -Perdón, yo… - quiso excusarse la chica de mini falda pero Gohan no la dejo. -No te preocupes, Lucy…- el Son miro hacia el cielo notando como el atardecer se comenzaba hacer presente. -Se que están hay… En algún lugar, esperándome- las palabras del chico denotaban tristeza, realmente quería recordar, saber que sus padres le querían, que tal vez estaban buscándolo por cielo, mar y tierra mientras el seguía perdido en aquel extraño lugar, sin recuerdos, sin nada.

-Por eso quiero explorar el mundo entero y encontrarlos, debo hacerlo por ellos… Además mi hermanito debe estar esperándome también- claramente Gohan se refería a Goten.

-Yo también busco a alguien…- Natsu agacho la mirada al pronunciar aquellas palabras que llamaron la atención de los dos chicos. -Pero también tengo amigos y un hogar al cual volver- terminaba de decir el Dragón Slayer. -¿No quieres un hogar también, Gohan?- Natsu volvía hablar mirando con un poco de tristeza a Gohan que inmediatamente conoció esa mirada, era la mirada que el mismo tenía desde que supo gracias a esa foto que tenía una familia.

-Está bien Natsu… Llévame a ese hogar- Gohan dijo con sinceridad ganándose una sonrisa llena de afecto por parte de Salamander. -¡Claro que si, amigo…! ¡Fairy Tail nos espera!- Natsu sin perder tiempo tomo de las manos ambos chicos, tanto Gohan como Lucy solo se dejaron arrastrar por un contento Natsu que había hecho ya a otros dos amigos, sin saber que uno de esos dos amigos seria alguien determinante en su vida a partir de ahora y no solo para él, si no para el resto de magos de Fairy Tail, especialmente para cinco señoritas que pelearían con uñas y dientes por él y su bondad...

¿Continuara…?


Bueno les veo en los reviews, si quieren que continúe esta historia después de terminar mi otro fic, espero leerlo en estos, además de escoger la ultima chica para el harem de Gohan, no quiero más de 5 chicas, sigo siendo novato en los harem y no quiero echar a perder la historia añadiendo más por el momento, aclaro, tal vez en el futuro lejano agregare a más, ya se verá cuando la historia tenga aceptación. Su amigo SaiyajinSannin se despide. Hasta luego.