Hola lectores UwU

Esta historia ya la había subido en un grupo de facebook pero decidí ponerla aquí, siempre he sido fiel a FanFiction cuando hago una xD

Disfruten de la lectura :)

Capítulo 1.- Tu llegada.

Desperte a la par del sol que se asomaba por mi ventana, abrí los ojos con algo de pesadez y mire el reloj de mesa. A penas y tenía tiempo de ir a la escuela.

Me levante casi corriendo, me bañe en menos de 5 minutos mientras le hablaba a Tikki

-¡Tikki!- Le grite mientras cepillaba mi cabello - ¡Tikki vamos!- Corria de un lado a otro para recoger mis libros, hechaba lapices y todo lo que creía necesario. Era la misma historia de todos los días.

Mi nombre es Marinette, vivo en la maravillosa Paris, hace un tiempo que me volví Ladybug y desde ese momento mi vida nunca fue la misma. Los días y las tardes se me iban luchando contra villanos que iban apareciendo, gracias a los akumas de Hawk moth Pero aun con todo eso amaba ser la heroína de Paris.

Sin embargo y sin desearlo llego algo que amaría todavía más.

Ese día fue común por completo, en la escuela mi mejor amiga Alya me entretenia con pláticas, nos la pasabamos muy bien y los días en los que no tenía akumas que derrotar ella ayudaba a que no fueran tan aburridos. Era una lástima que no pudiera decirle mi secreto, la debía de proteger.

Paso la tarde y nada. Ningún robo, disturbio, deparecido, akumatizado... Absolutamente nada.

Iba camino a mi casa, pase la tarde haciendo tarea en el parque con Alya aunque fue raro que al comprar un helado, los mas famosos de Paris por unir parejas, el que atendía me dijera que pronto conocería a la persona perfecta para mi.

-Uhhhh- Las burlas de Alya no se hicieron esperar- Vaya Mari, ya era tiempo de que consigieras novio- Me pegaba con el codo mientras mi cara se sonrojaba levemente

Suspire - Alya, ya te he dicho que no me interesa tener novio- Tome el helado y me dispuse a pagar, no sin antes recibir una palabras

- Esta persona cambiará tu forma de pensar- El señor me dirigio una mirada extraña de interpretar, no por nada unía parejas sin problema...Vaya tipo raro.

Pero no iba a ser descortés

- Este...Gracias- Pense un poco en mis palabras - Espero que así sea- Claro, no quería que tuviera razon pero preferí darle por su lado.

- Deberías creerlo enserio- Me dijo Alya cuando ya estuvimos mas lejos de él

La mire y baje la mirada poniendo más atencion en el helado - ...Tal vez algun día- Pero no en ese momento.

La noche llego y con ella mis recorridos nocturnos, con mi yoyo recorría los techos y subía edificios. Ningún akuma en todo el día... Eso debería ser una ocasión para celebrar pero no podía estar feliz de estar aburrida.

Después de un rato de dar vuelta tras vuelta decidí sentarme en la torre Eiffel. Mis pensamientos siempre se bloqueaban al ver las hermosas luces de la ciudad, tanta gente que se le veía feliz, niños, ancianos, adultos... Era un hermoso espectáculo para mi.

Entonces me ponía a pensar, ¿algun dia dejaría de ser Ladybug? ¿Que iba a pasar conmigo entonces?

Sabía que Alya decía las cosas por mi bien, cuando todo eso terminace estaría sola. Mis padres tarde o temprano morirían y mis amigos tendrían familia.

Ignorando esas ideas como siempre me calme, negue de nuevo que tal vez estaba equivocada y que no necesitaba querer a alguien.

En eso estaba cuando de pronto ante mis ojos paso una sombre negra, tan rápida que apenas y pude notarla.

Me levante rápidamente y puse toda mi atención en mi alrededor.

"Por fin...un akuma..." pense hasta con alivio, no era normal que no hubiera. Pero me alegraba.

Segundos después de silencio total la sombra paso nuevamente, esta vez con dirección a un lugar más alto en la torre. Arriba de mi.

Inmediatamente subi y fue entonces que lo vi por primera vez. Se encontraba de pie frente a las luces de Paris.

Sus cabellos se movían a la par del aire, rebeldes, despeinados y aun con buena apariencia, tanta que llamaban la atención.

Sus ojos verdes brillaban con fuerza y su presencia era imponente.

Fueron segundos en los que perdí noción del tiempo completamente sorprendida Luego de reaccionar segundos después arregle mi postura lista para atacar

"¿En verdad es un akumatizado?"

Fue lo primero que pense pero antes de poder hablar el se adelanto

-¿No piensas decir nada?- Se comenzo a reir, en cierto modo parecía una risa burlona - ¿O me seguirás viendo?-

Quize responder con rapidez pero mis palabras se trabaron y mis mejillas enrojecieron

"CALMATE MARINETTE"

- E-este...- Trataba de pensar en que responder, ¿porque me hacia estar así? Era un completo desconocido.

- ¿Qué preciosa? ¿Te deje sin habla?- De nuevo sonrio, esta vez de manera...seductora.

Otra hubiera sido mi reacción si no me hubieran molestado sus palabras - ¡¿Preciosa?! ¡¿Que te pasa?!- Con mi yoyo lo quise tirar al piso pero lo esquivo con tanta facilidad que solo me hizo enojar más

-Te liberare ya de ese akuma-

De repente me miro con seriedad, una que duro muy poco antes de que comenzará a reir...Otra vez

- Jajaja, ¿en verdad piensas que me akumatizaron?-

"¿Que..? ¿No es un akuma?"

- No me compares- La seriedad volvio - Yo no soy un akuma-

-¿Como puedo saberlo?Pregunte

Me miro rodando los ojos - ¿Siempre eres así?, no puedo probartelo- Se encogio de hombros,la situación parecía no estresarlo o al menos afectarlo

- ¿Asi...?- Mis ojos se abrieron un poco más - Espera, ¿Asi como?- Ya estaba comenzando a dudar, tal vez decía la verdad

- No lo se- Comenzo a caminar por el filo de una viga - Así, como Ladybug -

"Definitivamente no entiendo a este tipo"

- Mira- Por fin me dio la cara como debía ser - Si quieres probarlo ven y trata de encontrar donde esta el akuma- Me estaba retando

Y yo acepte ese reto.

Enseguida comenzamos una batalla, el con un bastón se defendía y lo hacía muy bien, esquivaba mis ataques y yo los suyos. Nunca nadie se me había dificultado tanto para vencer.

- ¡Vamos mi Lady!- Grito atacandome - Golpeame, quiero que me duela-

-¡¿Te sigues burlando?!- Logre empujarlo, casi cae pero se reincorporo

- Uff, muy cerca, te felicito- Hizo una pequeña reverencia, luego volvio a atacar en un movimiento tan veloz que logro poner su largo bastón en mi garganta, me tenía acorrada. - Pero te hace falta mucho- Comenzo a ejercer presión a mi cuello y con sus piernas separaba las mías evitando que pudiera patearlo, sin embargo, eso me puso roja

- Que tierna- Me comio con la mirada- ¿Que?- Pego mas sus piernas a mi - Ya veo- Dijo cuando cerre los ojos con fuerza y mi tono color rojo aumento - Te gusta-

A penas pude susurrar debido a la presion en mi cuello - ...Estúpido- Eso era lo que era

- Ja, esto te pasa por no creerme- Hizo más presión, me estaba ahogando - Escucha porque no lo dire dos veces- Sus ojos estaban enfocados en los míos- No soy un akuma-

Me solto por fin, caí sobre mis rodillas y tosi, podía sentir la sensacion asfixiante en mi garganta, trataba de recuperar el aire con desesperación pero el no parecía inmutarse

- Pero no te confíes mi Lady, no soy tan bueno- Se recargo en su bastón alzando una ceja con esa sonrisa confiada - Y me verás mas seguido por aquí, así que vete acostumbrando- Me dio la espalda pero antes de irse giro levemente su cabeza y me dedico una sonrisa

-Que interesante eres- Dijo y se fue con ayuda de su bastón.

Yo me quede allí, tirada aun en lo alto de la torre Eiffel

¿Que demonios había sucedido?

Aturdida era poco para definir como se sentía.