Disclaimer:
Todo lo que aquí reconozcáis le pertenec Rowling.
Yo no gano beneficio económico ni lucrativo al escribir esto.
Solo lo hago porque me gusta.
Aviso: Este fic parteicipa en el Amigo casi invisible del foro Hogwarts a través de los años.
Elegí una de las peticiones de Anelem.
Quería un Bill/Remus.
Espero que te guste.
Epílogo.
Un pequeño de once años estaba durmiendo plácidamente en su cama.
Su habitación estaba decorada con múltiples animales:
Lobos por su padre, ciervos por su tío James, una cierva por su tía Lily, un perro por su tío Sirius, un dragón por su tío Charlie y leones de montaña por parte de su papi Bill.
También tenía un lince que representaba a su madre.
-Era su patronus antes de haberse convertido en lobo. -Le explicó Remus una tarde.
Cuando se despertó, escuchó como sus padres preparaban el desayuno.
Se desperezó, fue al baño y bajó a la cocina en pijama.
Los fuertes brazos de su padre Bill le atraparon en el tercer escalón y Teddy se colgó del pelirrojo como un monito.
Su padre Remus se unió al abrazo segundos más tarde.
Teddy tenía once años pero aún le encantaba que sus padres le mimaran de aquella manera.
Mientras desayunaban, una lechuza parda entró por la ventana de la cocina posándose frente a él.
Miró al ave con perplejidad.
-¿Será? -Se preguntó.
Cuando desató el sobre y lo miró tras haberle dado una tira de tocino al animal, soltó un gritito de alegría.
-¡Es mi carta de Hogwarts!
por suerte, Teddy no había heredado la licantropía si no que era metamorfomago como su madre cosa que había aliviado a Remus de manera increíble.
llevaba viviendo con Bill casi once años y no se arrepentía.
lo último que escuchó de aquella voz que sonaba como la de su amigo fue:
-Te lo dije.
Nota: Y esta historia ha llegado a su fin. He de decir que me ha encantado escribirla.
Y lo siento si tiene faltas ortográficas, pero he tenido que escribir los últimos capítulos deprisa y corriendo.
Aún así, espero de corazón que te haya gustado.
Te regalaré algunos extras a medida que se me vayan ocurriendo.