Oberyn, como su padre

Disclaimer: todo pertenece a George R. R. Martin.

Esta historia participa en el reto 91 del foro Alas negras palabras negras.

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Ellaria observó al bebé en sus brazos. Apenas hacía unas horas que su pequeño había llegado al mundo y aún estaba agotada por los esfuerzos del parto, pero su felicidad era absoluta. Había dado a luz a un niño fuerte y sano que mamaba con ganas de su pecho, un niño hermoso de piel morena y ojos oscuros con una pelusilla negra en la cabeza. Incluso Obara, poco dada a las muestras de afecto y a las palabras corteses, había reconocido que era un niño muy guapo.

Toda la familia había pasado ya a ver al recién nacido y ahora solo Doran y ella quedaban en la habitación. Su cuñado se encontraba sentado al lado de la cama observando al bebé con una sonrisa. Finalmente levantó la cabeza para mirar a Ellaria y preguntó:

–¿Cómo le vas a llamar?

Ella no lo dudó un instante:

–Se llamará Oberyn, como su padre.

"Como el padre al que nunca llegará a conocer" se abstuvo de añadir.