-Traducción autorizada-

En la edad del internet, computadoras y teléfonos celulares ya no era tan difícil encontrar a tu alma gemela, si tú de verdad quieres. Durante el cumpleaños de tu alma gemela, de alguna manera –como magia–, las primeras palabras que te dirá, se escribirán en tu piel. Hay personas que todavía tienden a mantener esas bellas marcas en su piel como un secreto, prefiriendo dejar al destino tomar curso del suyo. Shinichi siempre ha mantenido en secreto sus grabados, solo mirándolos en privado y esperando encontrar a su alma gemela. Es como un misterio con una gran recompensa al final.
Kaito ha visto sus grabados como un rompecabezas, pero satisfecho en todo caso.

Bueno, él había estado asustado de acabar con Hakuba en algún punto, por suerte ese barco ya había zarpado. Aun así esperaba encontrar a su pareja.

Entonces, ¿cómo ellos dos encontrarán a su alma gemela?

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¡Holaaaaa! Primero que todo le quiero dar muchísimas gracias a RavenShira por dejarme traducir su bella historia "Beautiful Carvings" que puedes encontrar en Archive For Our Own, es muy bella y divertida. Espero les guste c:

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Shinichi no sabía cómo habían logrado convencerlo de formar parte de esta locura. Era un detective de homicidios, a quien la policía a menudo confiaba y consultaba. A pesar de todo de alguna manera sus amigos (léase: Sonoko) se las habían arreglado para molestarlo tanto que finalmente se rindió y accedió. Ahora estaba de pie en medio de un montón de policías que parecían vivir para atraparlo, mirando en silencio y siendo observado por formar parte de algo que –aunque interesante– no caía en el área de su experiencia. No es que él tuviera algún problema con resolver un acertijo para el evento o algo así. Era sólo que… ¿un pequeño ladrón? Los asesinos eran más importantes a los ojos de Shinichi.

Bueno, al menos parecía que sería un reto. Incluso diría que podría ser divertido.

En todo caso la culpa era de Sonoko. Ella y su obsesión con Kaito KID, además de la competitividad de su tío por vencer a ese irritante y rápido ladrón. Esa era la razón por la que estaba aquí, en vez de sus planes originales que consistían en pasar el día entero en su casa, con una buena taza de café y su libro favorito de Sherlock Holmes. O esa nueva novela de misterio. Un lugar tranquilo y relajante estaría bien recibido después de la horrible semana que paso. Había tenido una semana tan llena de criminales que incluso había comenzado a cuestionar a la humanidad, todos los días se encontraba envuelto por un caso. Un día incluso lo había estado en dos y uno había sido un suicidio doble.

Siendo las cosas como son, hubiera amado tener un descanso, estar seguro en casa en donde naturalmente no ocurrían asesinatos o crímenes. Su propio cielo.

Pero cuando Sonoko se había decidido, utilizó su injusta ventaja: Ran.

Y Ran probablemente podría hacerlo raparse y convertirse en monje, si quisiera.

Así que ella sólo tenía que mirarlo suplicante a un lado de Sonoko, con sus ojos ligeramente grandes e inocentes. Para Shinichi ella era una especie de hermana, además de que rara vez parecía querer algo de él, cedió instantáneamente (en la vista de Sonoko parecía como si quien rompiera sus defensas fuera un perrito maestro del karate).

Suspirando volteó a ver el reloj y rodó los ojos. Cinco minutos más para que el evento empezará. Comenzó a caminar repasando todo lo que sabía acerca del ladrón, tenía que capturarlo sin entregarlo a la policía. No debía hacerlo, pues su "patrón" era Sonoko, así que con ella era donde debía entregar al ladrón. No tenía muchas posibilidades. Pero "trataría", fallaría y ya.

O si lo atrapa, estaba completamente seguro de no entregarlo a la misericordia de Sonoko Suzuki. Él sí tenía corazón.

Miro las mesas que estaban alrededor de la habitación y frunció el ceño. ¿Qué era eso que brillaba debajo de las mesas?

Cuidadosamente camino hacía ellas y agachó su cabeza un poco. En efecto, un pequeño y blanco aparato estaba pegado debajo de la mesa. Hecho un rápido vistazo al reloj, sólo faltaban 5 segundos para el atraco, así que salió rápidamente de la habitación. Justo cuando acababa de cruzar el límite del cuarto, eso explotó en colores, humo y otras sustancias. Volteo a ver la habitación otra vez y pestañeó varias veces al ver la habitación multicolor y a varios miembros de la policía con el mismo color que los alrededores, tosiendo y moviendo sus manos para dispersar el humo. Nakamori estaba furioso, pero nadie parecía ser capaz de moverse bien, la extraña y pegajosa sustancia hacía difícil moverse, parecía pegamento pero no lo era. Y pintaba de colores neón.

Suspiro sin palabras ante la imagen de destrucción masiva de lo que había sido hace unos segundos, un salón limpio e impecable. Shinichi abrió y cerró su boca mientras que observaba al hombre vestido de blanco, la figura del ladrón haciendo una reverencia en medio del salón y el aspecto de su blanco traje que de pronto era la única cosa limpia entre todo ese caos, pero además era lo más radiante en medio de todos esos colores.

Una sorpresiva joven voz anunció su triunfo, levantó la gema como si esperara que le aplaudieran por su logro, casi logrando que a Nakamori le diera un paro, luchando para moverse cerca de su objetivo el cual bailaba fácilmente lejos de su alcance y desaparecía de su vista, riendo y corriendo a lo que Shinichi suponía que sería a el techo.

Su corazón latía emocionado, mientras recordaba la forma más rápida de subir y se preparaba para correr lo más rápido que podía, sintiendo una oleada de adrenalina mientras comenzaba su persecución. Nunca pensó en que él no quería estar allí, sin embargo estaba tratando de averiguar porque se sentía así en contra del elusivo ladrón fantasma.

Cuando comenzó a subir las escaleras podía ver la parte final del traje de Kid sobre él. Tenía demostrárselo, estaba en perfecta forma, por eso tenía que moverse alrededor de los policías con la misma facilidad que él había exhibido antes.

La puerta de la azotea se abrió con un fuerte clang y un crujido cerrándose otra vez. Unos cuantos segundos después Shinichi llegó y salió sin aliento al frío viento de la noche, su mirada se paralizó cuando miro a la silueta parada en la cornisa del techo. Con una recta pose y la gema sostenida sobre él.

Por unos cuantos segundos Shinichi se congeló con la imagen. Parecía irreal de alguna manera y no estaba seguro de porque dudaba en respirar por momentos.

"Una bella noche…" Kaito Kid suspiro, sin voltear a ver a Shinichi, pero obviamente dirigiéndose a él al no haber nadie más a quien le pudiera estar hablando "... para una bella gema".

Fuego ardió a través del brazo de Shinichi, sus ojos se ampliaron al darse cuenta y sin creer. Estaba sorprendido, absolutamente y completamente aturdido, incluso mareado sobre esta ocurrencia. Sí, había estado esperando conocer a su persona destinada, a su alma gemela algún día. Imaginando cómo se conocerían, soñando con diferentes escenarios, porque en alguna parte era un romántico. Pero, ¿¡Descubrir que era el más enigmático ladrón fantasma del siglo?! Shinichi boquiabierto trato de mantenerse bajo control, por mucho que había imaginado lo que su primer encuentro sería, esto nunca hubiera pasado por su cabeza. Sólo por un pequeño momento cerró sus ojos y tomó un respiro profundo para calmarse.

Cuando finalmente encontró su voz otra vez y abrió sus ojos, la azotea estaba vacía. Solo estaba la azul gema brillando radiante debajo de la luz de la luna.

Esa noche fue difícil de conllevar, sus dedos pasaban sobre sus marcas una y otra vez.

Una bella noche para una bella gema.

Le pareció divertido como nunca había pensado que esas palabras tuvieran un significado literal. Presionó sus labios contra sus marcas mientras su mente formaba una solución. Atraparía a Kid. No por Sonoko o la policía, pero por sí mismo. Era divertido como se había negado antes a atrapar al ladrón y ahora parecía como lo único importante por hacer. E iba a hacerlo, porque atrapar a Kid era la única forma de conseguir a su alma gemela.

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Hasta aquí el primer capítulo pronto subiré los siguientes c: