Hola a todos, ¿Como estan? espero que esten teniendo una excelente mañana, tarde, noche, madrugada... lo que sea :v

Esta vez les traigo una nueva historia ambientada en los años 1996, !Si! ambientada en los 90's, cuando la musica aun era buena, los videojuegos estaban en auge y eran de calidad y no cosas repletas de DLC's innecesarios (En la mayoria de casos) y microtransacciones, la internet era algo destinado a empresas y gente fifirisnais, Nickelodeon y Cartoon Network eran los reyes en lo que respectaba a animaciones y el mundo se preparaba para recibir al siglo 21

esta historia es un LincolnxOC, y es experimental, asi que la aceptacion de este capitulo dependera de si la continuo o no...

Antes que nada unos Tips:

-Como en mi historia anterior; Los eventos de NSL y Brawl in the Family NO EXISTIERON

-La imagen que se esta usando (Al momento de publicar este capitulo) es temporal mientras dibujo la portada.

-Me pregunto si alguien habra vivido en los 90's aqui...

-Cualquier duda, Critica, Tip o concejo que me quieran dar, es bienvenido :D

Aclarado todo, comenzemos :D


Corría el año 1996 en el pintoresco pueblo de Royal Woods, el sol calentaba las calles en horas de la tarde y un chico peliblanco de trece años caminaba rumbo a su hogar, Lincoln Loud había tenido un día muy extraño ese día en la escuela.

-"Esa chica… No puedo creer que haya alguien más que tenga el cabello blanco… O bueno, en su totalidad"- Pensó el chico mientras caminaba.

Había pasado algunas horas desde que el conoció a esa misteriosa chica de cabellera blanca, era muy tímida pero al mismo tiempo muy adorable, aunque algo que le pareció curioso es que no había oído nada de ella, muy pocos eran los que habían hablado con ella, al parecer no tenia amigos… Es raro, es como si fuera un fantasma en la escuela.

Lincoln decide dejarse caer en una tienda en donde compra unas papitas fritas y un refresco de botella, se sienta en una de las bancas que habían fuera de la tienda y allí se pone a consumir lo que compro, recordando el adorable rostro de esa niñita de personalidad introvertida.

Ese día Lincoln estaba distraído, hace días que Ronnie Anne se había ido del pueblo con rumbo a su país de origen, México, específicamente al estado de Veracruz, dentro de si cargaba con un dolor inmenso, de todas las chicas, Ronnie era la mejor de sus amigas, a pesar de sus juegos rudos ella lo comprendía, lo consolaba, le extendía la mano cuando mas lo necesitaba… Pero se fue hacia el extranjero, solo esperaba que le estuviera yendo bien…

Quizás fue el destino, quizás fue el capricho… Nunca lo sabrá, pero ese día se le paso por su joven mente el pasar por un lugar que no solía recorrer de a mucho, el área de las cercanías de la biblioteca, no es que el fuera ajeno de ir a la biblioteca, es que casi nadie pasaba por aquel pasillo, normalmente entraban a la biblioteca por el acceso del pasillo del comedor.

Mientras caminaba por allí se denotaba que no muchos pasaban por allí, podía ver que las paredes estaban rayadas con dibujos mal hechos y palabras obscenas que fácilmente ganarían en un concurso de bocas sucias.

En un punto vio algo que le llamo la atención, mirando hacia el horizonte había una chica de tez blanca, se asumiría que es de la misma edad de Lincoln, Usaba una chaqueta azul marino con blanco, pantalones gris oscuro, zapatillas negras… Lo que más le impacto al peliblanco fue el color de su cabello, ¡Era blanco! Si, blanco como la nieve, blanco como las nubes de un día soleado, blanco como la leche que da la vaca marrón. Por un momento creyó estar alucinando, pero no, ante el había otro ser con nieve en el tejado, aunque existía la posibilidad de que fuera artificial su color, pero ¿Qué importaba? Al fin y al cabo sea natural o no, compartían el mismo color de melena.

Ese color de cabello no es muy común de ver… Pero entonces, ¿Por qué no la habría visto en otras ocasiones? O mejor aun, ¿Por qué no había escuchado nada de ella?

Pero de algo estaba seguro, no iba a perder la oportunidad de conocerla… No se, quizás le hacia falta hablar con alguien diferente para distraerse un rato…

El chico peliblanco se acerca a ella lo suficiente como para que lo escuche sin tener que alzar mucho la voz, quizás Lincoln era tímido, pero algo dentro de si le decía que de verdad quería conocerla… Solo esperaba que ella no se asustara que un desconocido le hablara.

-Hola señorita.- Dijo el peliblanco.

Ante el llamado de el chico, la chica peliblanca voltea hacia el, al igual que Lincoln se sorprende de ver que la cabellera de aquel chico desconocido era blanca, igual que la de ella, ¿Coincidencia o destino?

-H… Hola.- Dijo aquella chica con un tono de voz bajo.

-¿Eres nueva por estos lares?- Pregunto Lincoln al acercarse a ella.- No me parece haberte visto antes por aquí.

-S… Si, se podría decir eso.- Respondió la chica.- Hace una semana que… Empecé a estudiar aquí y pues, realmente no… No conozco a nadie…

-He… Ya veo.- Dijo Lincoln.- Pues, ya puedes decir que conoces a alguien, Mi nombre es Lincoln, Lincoln Loud.

El chico le extiende la mano a la chica peliblanca, ella se ruboriza un poco ¿De verdad alguien se habría atrevido a hablarle? O era una alucinación por los ansiolíticos que ingirió antes de entrar a la escuela… sea de una u otra forma, estaba agradecida que por fin conocía a alguien que no la miraba como si tuviera monos en la cara.

-Mi nombre es N… Natusha, Natusha Brigfield.- Dijo La chica aceptando el apretón de manos del peliblanco.

Las manos de la chica le fascinaron al peliblanco, eran tan suaves, tan frías y adorables, todo en ella era adorable, sobre todo su carita y sus ojos de color verde esmeralda, en parte el chico deseaba conocerla mas a fondo, quizás podría charlar con ella allí, o quizás podría invitarla al salón árcade que había cerca de la escuela… O podría invitarle a jugar en su Game Boy, aunque el dudaba que esa chica tuviera una.

-Oye, si quieres podemos dar una vuelta para charlar un rato, ¿Te parece?- Pregunto Lincoln.

La chica por un momento dudo, tenía miedo de que ese chico misterioso la llevara a una trampa en donde le harían las peores bromas, pero al verlo mejor no parecía ser ese tipo de persona… Es mas no parecía que podría matar ni a una mosca.

-Ehm… Claro ¿P… Por que no?- Dijo Natusha al sonreír tímidamente.

Durante su recorrido Lincoln no solo le dio un Tour a Natusha por la escuela, si no que también le fue contando anécdotas de si mismo, haciéndola reír en varias ocasiones, definitivamente era una chica muy linda, y lo era mas cuando sonreía.

Allí la chica confirmo que aquel hombrecito de cabellera blanca no tenia malas intenciones, solo quería dar lo mejor de el para ella, eso le agrado, parecía alguien tan cálido y amigable, muchos le saludaban mientras caminaba por los pasillos, y en mas de una ocasión le presento a varia de sus amigas, de todas las que le presento, la que se hacia llamar "Jordan" era la que le había caído mejor.

El chico la llevo hasta el patio, en donde decidieron descansar en la sombra del árbol de manzanas que había en el patio trasero de la escuela después de haber comprado dos bebidas en la maquina dispensadora de la escuela.

-Así que cuéntame, Natusha, ¿Con quienes vives?- Pregunto Lincoln mientras abría su lata de gaseosa.

-¿Yo?... Yo vivo con mi hermano mayor.- Dijo Natusha.- El trabaja como un oficial de policía, ¿Y tu con quienes vives?

-Vivo con mis padres y mis diez hermanas.- Respondió Lincoln con total naturalidad.

Aquello sorprendió a la chica.

-Disculpa creo que escuche mal, ¿Acaso dijiste diez hermanas?- Pregunto Natusha.

-No, no escuchaste mal, tengo diez hermanas, Lori, Leni, Luna, Luan, Lisa, Lynn jr, Lucy, Lana, Lola y Lilly.

Natusha quedo más que sorprendida, a veces ella se veía agobiada con solo un hermano, pero con diez es para quedar asfixiada.

-Vaya Lincoln… Tus padres no perdieron tiempo.- Dijo Natusha.

-Hehe, tienes razón, pero bueno, no me quejo, es algo caóticamente hermoso.- Dijo Lincoln.- ¿Y de donde vienes? Por tu nombre dudo que seas de Norteamérica.

La sonrisa de Natusha desapareció ante lo que dijo el peliblanco y Lincoln se percato de esto, quizás fue mala idea preguntar…

-Yo provengo de un lugar al que tú no has ido, Lincoln, un lugar muy lejano que actualmente vive cercado por la noche… Yo soy de Bosnia-Herzegovina.- Respondió la chica con un tono de voz serio.

Lincoln se sorprendió al escuchar el lugar de procedencia de la chica ¿Acaso dijo "Bosnia"? había escuchado de la situación de ese lugar por los periódicos y los noticieros de Lisa solía ver en las mañanas, desde la caída de la unión soviética en el 91 ese lugar ah estado inmerso en una guerra civil... La Guerra de los Balcanes, así se le conocía a ese conflicto.

Allí fue donde el peliblanco entendió por que ella era tan tímida, debió de vivir muchas cosas traumáticas allá...

-Vaya… No se que decir Natusha… De verdad lamento si te traje malos recuerdos.- Dijo Lincoln.

Natusha sonríe, es cierto que vivió varios eventos que dejaron una marca en su vida, más que todo aquel en donde vio la muerte muy cerca de ella… Pero al menos el chico la comprendió, quizás el no era como lo había pintado al principio.

-No te preocupes Lincoln.- Respondió Natusha.- Quizás con el tiempo pueda aprender a convivir con esos recuerdos… Pero sabes, Bosnia-Herzegovina no siempre fue una zona de muerte, hubo un tiempo en el que era una zona prospera, rebosante de vida y tranquilidad.

-¿Ah si?

-Si… Pero, luego se dio una serie de sucesos que arrastro a la nación a las fauces de la guerra… Cayo la URSS, luego la fiebre independentista se expandió por la zona de los Balcanes… los Croatas, los Bosnios, los Eslovenios... Todos querían su independencia, y eso provoco discordia entre las facciones, Con la desintegración de la URSS, a la gente no le costo conseguir armas a gran escala, por lo que pronto se armaron rebeldes paramilitares… No paso mucho antes de que estallara el conflicto en el 91.

-Eso debió ser horrible, Natusha.

-Y si que lo fue, Lincoln… Pero si no te importa, ¿Podríamos cambiar de tema? Realmente no quiero hablar de esto por ahora.

-Claro, Natusha, ¿Qué piensas hacer ahorita?- Pregunto el peliblanco para desviar el tema de conversación.

-Pues… Quería ver si me compraba el Crash Bandicoot, dicen que es un buen juego plataformero, y a mi me encantan los plataformeros.- Respondió Natusha.

-¿A ti te gustan los Videojuegos?- Pregunto Lincoln.

-Obvio, esa afición me la pego mi hermano… ¿Por qué te sorprendes?- Pregunto Natusha.

-No… Es que es muy extraño conseguir a una chica que le gusten los videojuegos.- Respondió Lincoln.- Pero no importa, supongo que debes de tener la PSX, ¿No?

-Tengo la PSX, La Súper Nintendo, La N64, y mi fiel Game Boy.- Respondido la chica.

-Vaya, vienes bien equipada.- Dijo Lincoln.- Yo también tengo la PSX, la N64 y una Game Boy, de hecho ahorita ando viciado al Pokémon Rojo.

-¡Oh! ¿Tienes la versión Rojo? Yo tengo la versión Azul.- Respondido Natusha al momento que sacaba su consola portátil.

-Genial, ¿Y ya te lo pasaste?- Pregunto el peliblanco en estado de emoción.

-Hehe, no… Me quede en el Puzzle de la Mansión Pokémon en la Isla canela, ¿Y tú?

-Aun no… la Calle Victoria es un lugar que te puede eliminar rápido si tu equipo no esta bien balanceado.- Respondido Lincoln.- Ya eh intentado pasar como unas seis veces y siempre me terminan dando mis pataditas.

-Hehe, A mi me sucedía lo mismo en la Torre Pokémon con tantos Pokémon tipo Fantasma… Pero sabes, allí fue donde conseguí a mi Haunter, esta al nivel 56, así que no me puedo quejar.- Respondió Natusha.

-¿Y como lograste avanzar?- Pregunto Lincoln.

-Pues no fue fácil, Si no fuera por mi Charmeleon y el Machop que capture en el Túnel Roca no hubiera podido avanzar.- Respondió Natusha.- ¿No has intentado entrenar a tu equipo? La Mansión Pokémon es excelente para eso.

-Jum… No, no lo había probado, es que me da flojera ir a la Isla Canela, pues no tengo un Pokémon en mi equipo que sepa Vuelo.- Respondió Lincoln.

-¿No tienes aunque sea un Fearow?- Pregunto la chica de cabellos blancos.

-Nah… lo que si tengo es un Fartfetch'd y un Pidgeotto, ambos al nivel 45.- Respondió Lincoln.

-¿Y no les has enseñado vuelo?

-Si, pero los tengo en el PC… Y me da flojera sacarlo por que implicaría dejar a uno de mi equipo allí.

-Hehe… Ay Lincoln, eres todo un caso.- Dijo Natusha.- Te daría un zape si no fuera por que yo también tengo las mismas mañas.

-Hehe, oye, Dijiste que mas tarde ibas a ir a la tienda de videojuegos, ¿No?

-Claro, voy a comprar el Crash Bandicoot, ¿Por?

-¿Puedo acompañarte? Es que no tengo mucho que hacer hoy.

La chica se sonrojo y sonrió, le había caído bien el peliblanco, asi que supuso que no haría daño si dejaba que la acompañara, después de todo si quería olvidar todo lo malo que vivió en la zona de guerra debía darse la oportunidad de conocer nuevas personas, ¿Qué mejor que con ese curioso y lindo chico de cabellera blanca?

-Claro, ¿Por qué no?- Respondió Natusha.- De hecho, ¿Por qué no vamos ahorita mismo? Total, el almuerzo de hoy por lo que escuche estaba horrible.

-Claro, vamos.- Dijo Lincoln al levantarse.- ¿Qué tan horrible estaba?

-Tan horrible como bailar Lambada con la mama de uno.- Respondió Natusha.

Ambos chicos salen de la escuela rumbo a la tienda de videojuegos del centro comercial, en el camino Lincoln conoció mas a esa chiquilla, era muy diferente a como la hubiera imaginado.

En confianza la chica era muy agradable, con un gran sentido del humor, se veía tan diferente a su imagen de retraída, sin dudas su rostro era más hermoso cuando se le dibujaba una sonrisa.

Era alguien a la que le fascinaba el Rock Punk y el Grunge, por lo que le conto en el camino, tiene toda la discografía de Nirvana, Blink 182, Sum 41.

Además de su fanatismo por los videojuegos, le fascinaba tocar la guitarra y cantar, aunque eran muy pocas las canciones que se sabia en ingles…

Un rato de caminata después llegan al centro comercial, no tardan mucho en llegar a la tienda de videojuegos, el chico conocía ese lugar como la palma de su mano, incluso a los empleados de aquel lugar, cuando Natusha consiguió el juego que quería y fueron a pagar en la caja, Lincoln saludo a Nate, el cajero de la tienda de 21 años de edad, trabajaba allí desde el año 1989, a veces en los torneos de videojuegos que realizaba la tienda hacia alianzas con Lincoln.

El buen Nate le hace un descuento del 10% a Lincoln, eso significa que estaba de buen humor ese día, cuando pagaron, ambos peliblancos dieron unas vueltas por el Mall, todos les dirigían la mirada, a lo lejos parecían hermanos, aunque de cerca se notaban sus diferencias fisiológicas.

A eso de las dos de la tarde, Natusha decide que es hora de volver a casa, asi que Lincoln la acompaña a la salida del Mall.

-Bueno Lincoln, me divertí mucho contigo hoy… ¿Sabes? Eres alguien muy interesante.- Dijo Natusha mientras le sonreía.

-Yo también me divertí mucho contigo hoy, Natusha.- Respondió el peliblanco con una sonrisa.

-Por favor, dime Naty, asi suena mejor mi nombre.- Pidió la chica.

-De acuerdo, Naty.- Dijo el peliblanco.- Así que bueno… ¿Mañana podremos hablar otro rato en la escuela?

La chica de cabello blanco sonrió.

-Por supuesto, Lincoln, mañana te buscare apenas salga de clases.- Respondió la chica.- Bueno, mejor me voy ya o si no mi hermano se enojara, ¡Adiós!

La chica se despide de Lincoln y se va rumbo a su hogar, mientras que el peliblanco decide tomar el rumbo hacia su propia casa…


Después de comer aquel tentempié en la tienda decide volver a casa, al entrar ve que en el sofá, Leni y Lana estaban viendo televisión, al parecer estaban pasando un nuevo capitulo de su comiquita favorita de Nickelodeon.

-Oh. Hola Linky.- Saludo la rubia de 19 años.- ¿Cómo te fue en la escuela? Escuche que había una chica nueva… Pero supongo que eran mentirillas de Lynn jr.

Por un momento Lincoln se sintió tentado a contarle a Leni sobre el fantástico día que tuvo con Naty, pero luego recayó en que tendría que soportar los gritos agudos, acosos, consejos innecesarios… Solo de imaginar todo eso le daba jaquecas, quizás aún era muy pronto para contarles sobre Naty… es decir, de todos modos apenas la conoció hoy, ¿No? Aunque tal vez podría contarle solo a Leni, pero ella era pésima para guardar secretos…

-¿Hay una nueva chica en la escuela?- Mintió Lincoln.- Cielos, debió de ser de otra aula de clases por que no la vi.

-Quizás si eran paranoias de Lynn.- Dijo Lana.- En fin, mama dijo que fueras a verla en su habitación cuando pudieras… Creo que tiene algo para ti… No lo se.

-De acuerdo.- Dijo Lincoln.- Tomare un pequeño descanso y buscare a mama.

El chico sube al segundo piso, en donde ve a Lucy y a Luna, al parecer charlaban sobre una canción de Sum 41, el chico peliblanco solo se abstuvo de saludar y siguió su camino a su habitación.

Allí, en la comodidad de su cama el chico reflexona sobre su dia y la agradable "Cita" que tuvo con Naty, el chico sonríe, después de tanto tiempo por fin podía pensar en algo mas que no fuera estudios y en como estará Ronnie Anne, Esa chica, Naty era hermosa y agradable… Pero aun había algo que le preocupaba al peliblanco.

Ella dijo que venia de la Zona de los Balcanes, o anteriormente conocido como Yugoslavia, actualmente había una Guerra encarnizada en aquel lugar… ¿Ella sufrirá de Stress Post Traumático? ¿Qué horrores habrá vivido u visto allá?... El solo pensar en que cosas pudieron pasarle a esa hermosa dama le revolvió el estomago.

De todos modos, el peliblanco haría todo lo posible para que se sintiera cómoda con su amistad...


(Continuara)

¿Y bien? ¿Les cayo bien Natusha? por que si creen que va a ser la tipica chica timida, pues, no lo veran venir ;)

Espero que les haya gustado, en el siguiente capitulo hablaremos de las politicas economicas de Ronald Reegan :v

!Adiosito¡ :3