Buenas, ¿Qué cuenta la vida? Por mi parte, cuenta que la universidad se puso inmisericorde en este mi ultimo año: actualmente estoy cursando siete materias, trabajo medio turno por las tardes, y estoy por empezar servicios sociales… es un milagro que pueda tener algo de relajación, aun si solo para jugar un poco, o ver un capitulo de una serie, o escribir algo.

Obviamente, no podré escribir tanto como me gustaría, por lo que les pido que resistan esto conmigo, una vez iniciado el 2021 (puesto que despues de este semestre sigue las residencias y la titulación) debería de poder empezar a escribir más, asumiendo que el trabajo que consiga no demande mucho tiempo y energía, así que hasta entonces, serán actualizaciones esporádicas.

Lo que si, les garantizo que en tanto uno de mis fic no diga "Complete" en estatus, podrá ser actualizado en cualquier momento, ¿cuando? Dependerá por completo de mi musa, por ejemplo, tras este fic el siguiente debería ser IS:R, luego ANL y después AC:DZ antes de volver a DXC y a este en ese orden, pero si mi inspiración no lo permite, el orden se alterará mucho.

Pero bueno, empecemos:

-Dialogo-

-Pensamientos-

-Espers-

Capitulo 2: Esto es solo el comienzo.

Era interesante cuan rápido e importante puede ser el tiempo, aun para aquellos que ya estaban muertos, o al menos, para Shiva.

Lo ultimo que vio en vida fue una brillante y mortal luz, y lo ultimo que esperaba era que su conciencia volviera a trabajar, ya ni se diga que su Magicite fuera encontrada por un niño en una era en la que la magia parecía completamente extinta.

Y las cosas se pusieron frenéticas desde entonces.

La primera semana, Jaune había estado emocionado como nunca, meditando por horas hasta que era hora de cenar, y después de eso practicando el hechizo mas sencillo que pudo obtener de la Magicite de shiva: Blizzard. Pero ver como la pequeña esfera de hielo en sus manos aumentaba de tamaño con cada día que entrenaba hasta que alcanzó el tamaño y poder adecuado compensó hasta el ultimo segundo de aburrimiento que pasó sentado con la Magicite en manos, sin moverse en lo más mínimo.

Entonces tuvo que parar por un tiempo puesto que las vacaciones habían llegado a su fin y él debía de volver a la escuela. Una escuela normal. Aun le faltaba un año y medio antes de que pudiera aplicar para una escuela de combate. Y aun con eso, su padre le prohibió a él y a sus hermanas decir o mostrar cualquier cosa relacionada con la Magicite con tal firmeza, que Jaune nunca usaría su magia en publico… al menos no sin su preciado brazal.

Warlock ("Brujo", como Jaune había llamado a su brazal) era tanto su arma como parte de su futura armadura y lo más destacable eran sus once ranuras, diez pequeñas para cristales de Dust de hielo y una más grande para la Magicite de Shiva. Esto ultimo era necesario para que Jaune pudiera invocar a Shiva en combate si se presentaba la necesidad.

Su padre le enseñó a usar Dust con su aura (la que aparentemente desbloqueó cuando invocó a Shiva por primera vez) en esas dos semanas. Con eso, Jaune podría usar un poco de magia para defenderse a si mismo y su familia (y sus padres le dejaron extremadamente claro que solamente para eso) y hacerla pasar por Dust. Sin embargo, solo le enseñó a usarlo, no a pelear con Dust.

Esto provocó que Shiva sospechara más de los padres de Jaune, pero lo dejó pasar. Ellos le habían explicado que era una tradición de la familia Arc que los niños aprendieran a defenderse a los doce años y no antes.

Pero eso no la detuvo de enseñarle ella misma.

Dust era, en opinión de Shiva, los restos de la magia de los humanos que, de alguna manera, si había solidificado en minerales, y como tal, era extremadamente compatible con la magia de los Espers. En el lapso de dos años ella le enseñó como usar su magia, a usar también el Dust, y tras eso, Jaune experimentó por su cuenta a usar ambos al mismo tiempo.

Y en lo que a ella respecta, sus efectos eran impresionantes.

Aunque tanto su magia como el Dust de hielo hacían practicante lo mismo, su magia producía hielo más frio y duradero, mientras que el producido por Dust era más fácil de moldear a los deseos del usuario. Uno era poderoso, y el otro era versátil. Y usándolos al mismo tiempo, Jaune logró hacer algo considerado como un desperdicio: Armas de Hielo.

Por mucho tiempo, cualquier intento por usar armas hechas de Dust o sus efectos fueron en vano, el Dust era demasiado inestable para ser la propia arma, y las armas hechas con Dust eran demasiado frágiles: el hielo hecho con Dust era más resistente que el hielo normal, pero aun era demasiado frágil para ser material de armas, y aun se podía derretir, especialmente si se usaba Dust de fuego.

La excepción eran las armas hechas con Dust de luz solida, pero aun esas eran frágiles, y solo eran opciones validad por el hecho de que estaban ideadas para ser munición o armas desechables.

Pero la fusión de Dust y magia de Jaune era diferente. Él podía hacer en un instante espadas, dagas, escudos, garras y lanzas de un hielo tan resistente que podían compararse con verdaderas armas y el propio Dust de fuego era incapaz de derretirlas rápidamente.

Aun en los tiempos antiguos, nadie había utilizado armas hechas de magia debido a lo impractico que era, aunque en esos tiempos había dos razones: o la magia del usuario era demasiado fuerte, o era demasiado débil.

Aquellos con magia débil solo podían hacer armas fragiles, similares a las que alguien podía producir con Dust hoy en día, y eso no cambiaba ni siquiera con objetos que amplificaran la magia del usuario, por lo que un arma regular era mucho mejor opción.

Por otro lado, aquellos con magia poderosa tenían que tener especial cuidado con no herirse a si mismos al tratar de darles forma y consistencia. Requería tal control sobre su magia que no podían darse el lujo de entrenar ningún tipo de combate cuerpo a mano armada, y por tanto, era mejor si usaban su magia como arma en lugar de la forma de hacer una.

En ese aspecto, Jaune era un verdadero prodigio en la magia.

Otro cantar era usar las armas.

Cuando finalmente llegó el tiempo en el que Jaune podría inscribirse en una escuela de combate, sus padres volvieron a negarse y lo inscribieron en una escuela normal. Le aseguraron a su hijo y a Shiva que era necesario para mantener su magia en secreto, que era mejor que las lecciones de combate las aprendiera después y que en su lugar se enfocara en las lecciones regulares, y que aun podía aplicar a los exámenes de ingreso a las academias de cazadores a los diecisiete años aun si no había asistido a una escuela de combate antes de eso.

Jaune, aunque triste, lo aceptó.

Shiva por el contrario estaba furiosa.

¿Qué clase de padres se negaban a ayudar a sus hijos a lograr su sueño?

Podía entender que se preocuparan por el: no había duda alguna de que ser un cazador era en extremo peligroso y la Magicite atraería todo tipo de atención indeseada, pero eso no era suficiente para ella. Un niño nunca crecería si sus padres le impedían probarse a si mismo o seguir sus sueños. Ella lo sabía muy bien.

Su madre la había nombrado la Emperatriz de los Esper con afinidad al hielo mucho antes de que falleciera, pero antes de eso le había dejado escoger lo que quería hacer hasta que llegara el tiempo de su coronación Shiva misma había hecho lo mismo con su hija antes de que cruzara el Portal para explorar Remnant. Así que, tanto como una madre como una hija, Shiva estaba furiosa con los padres de Jaune.

Cuando se negaron a entrenarlo por "estar demasiado ocupados o cansados", se enojó aun más.

Así que, por casi un año, ella trató de enseñarle tanto como pudiera, pero cuando ella estaba viva solo peleó con magia, como una maga o hechicera, un estilo que, pese a todo su talento en la magia, no era apto para Jaune.

Su cuerpo siempre reaccionaba por su cuenta cuando entrenaban: aun cuando solo practicaba lanzando hechizos a un blanco fijo, sentía la necesidad de cargar contra el en lugar de atacar a distancia, o esquivaba un ataque imaginario en sus combates simulados.

Si ella tuviera que nombrar el estilo más apropiado para él, seria algo como un Caballero Místico, alguien que sobresaliera tanto en combate cercano como a mediano alcance.

Pero debido a eso, Shiva no podía entrenarlo tan bien como le hubiera gustado, solo podía ayudarlo con su magia y no con ningún tipo de arma. Por una vez, deseó que Ifrit estuviera con ella. Tanto como odiara a ese tonto impulsivo, él estaba bien versado en combate mano a mano y en esgrima.

Pero ahora no era momento de pensar en asuntos tan serios. No, ahora era momento de divertirse con el estado de su compañero, de su invocador de ya quince años, que trataba con todo su empeño de no vomitar dentro del Bullhead en el que hiba, alejandose de su pueblo natal, Ansel.

Era las vacaciones de verano y, como era usual, los Arc estaban en un viaje de vacaciones, solo que esta vez habían escogido permanecer en Vale en lugar de ir a Mistral. Actualmente viajaban a un denso bosque cercano a una villa pequeña pero bien protegida.

-Resiste Jaune, ya casi llegamos- le alentó Shiva con un leve tono de diversión en su voz.

-No creo que lo logre-.

Esto era otra sorpresa para ella: en tanto él estuviera tocando o llevara consigo su Magicite, ella podría hablar mentalmente con él aun si no la había invocado e inclusive sentir lo que pasaba alrededor de Jaune. Honestamente, no tenia idea de como era posible ¿Tal vez era debido a su Aura y tal vez su Semblance? Aun no sabían cual era la suya así que era muy probable que si.

En ese aspecto, ella en verdad estaba impresionada. Pensar que los humanos, desprovistos de su magia, aprenderían a manifestar sus propias almas como protección para pelear e inclusive alcanzarían algo similar a una magia personal que solo una persona podría tener… No estaba segura si había algún Esper con algo siquiera similar.

Finalmente el tortuoso viaje llegó a su fin y, tambaleándose, Jaune descendió del bullhead, alcanzando de alguna manera un bote de basura donde finalmente se permitió vomitar.

-Tranquilo Jaune- le reconfortó su padre, Julian Arc, colocando una mano en su hombro a modo de apoyo, mostrando empatía -deberías de perder tus nauseas en un par de años-.

-¿D-debería?-.

-Yo dejé de tener nauseas a los veinte años- le respondió encogiéndose de hombros -aunque tu tío aun las tiene-.

Jaune dejó caer su cabeza, deseando que él también mejorara con el tiempo.

-Ahora ven y ayudame a cargar todo- le indicó antes de camiar hacia su esposa e hijas quienes esperaban con su equipaje a sus pies.

-Voy- un tanto recuperado, Jaune se acercó a ayudarle.

Dentro de su Magicite, Shiva rió un poco antes de parar de golpe.

Sintió algo, como si alguien la estuviera llamando, o como si hubiera algo similar a ella en las cercanías.

Incapaz de verdaderamente ver fuera de la gema, se concentró tanto como pudo en tratar de identificar lo que eso era. Le tomó un par de horas en las que Jaune había ayudado a su familia a instalarse o jugó con sus hermanas, pero finalmente llegó a una conclusion.

Había una Magicite en el bosque.

(Más tarde ese mismo día)

Jaune, despierta!- llamó Shiva con tal fuerza que su durmiente invocador se despertó bastante rápido.

-¿Qué pasa Shiva?- cuestionó más dormido que despierto, dirigiendo su cansada mirada a Warlock, que usaba aun para dormir.

-Sentí algo en este bosque unas horas atrás, deberíamos ir a buscarlo-.

-¿No puede esperar hasta mañana? Papá podría ayudarnos-.

-Es una Magicite-.

-¿Ah sí?- comentó antes de bostezar. Le tomó unos momentos procesar adecuadamente su respuesta -¡¿Una Magicite?!-.

-¡No tan fuerte, despertarás a todo el campamento!-.

-L-lo siento, pero ¿estas segura?-.

-Bastante, me tomó un buen rato pero se siente como magia sellada, y bastante familiar, podría ser una reliquia de antaño, pero estoy bastante segura de que se trata de otra Magicite-.

-¡Es asombroso! ¡Necesito despertar a Papá!-.

-¡No lo hagas Jaune!-.

-¿Por qué?-.

-Tu padre podría prohibirte el recuperarla, inclusive podría cancelar este viaje y emprender el camino de regreso a Ansel-.

-¿Por que lo haría?-.

-Yo, en verdad pienso que el no quiere que te vuelvas un cazador. Estoy segura de que si pudiera, te habría quitado mi Magicite, la única razón por la que no lo hace es que le dije que sería más seguro para los dos el que la conservaras en todo momento-.

-Eso no tiene sentido, ¿por qué querría evitar que me vuelva un cazador? Él es uno-.

-Sinceramente, no tengo idea Jaune. Pero por favor, confía en mi, necesitamos recuperarla solos. Después, una vez hayas establecido un vinculo con esa también, podrás decirle a tu padre sobre la Magicite-.

Jaune dudaba de seguir esa petición, el confiaba en su padre, pero también confiaba en Shiva: ella era su compañera, su maestra y su amiga. Lo consideró por un largo rato hasta que finalmente asintió.

-Esta bien, vamos por ella- dijo quitándose su pijama mono de Pumpkin Pete y tomando su sudadera de Pumpkin Pete.

-Gracias Jaune-.

Minutos después, completamente vestido y sujetando una linterna en su mano izquierda, Jaune avanzó atraves del denso bosque, escuchando con cuidado cada sonido a su alrededor. Aunque el bosque era un punto turístico y, como tal, "limpiado" cada cierto tiempo, aun era posible que se topara con algún Grimm.

-Así que, ¿Por donde Shiva?-.

-Por ahora sigue recto, ahora mismo es algo difícil el determinar adecuadamente donde es, pero una vez nos acerquemos debería de sentir mejor donde esta-.

-Entendido-.

Jaune trató de mantener un paso firme y de permanecer tan calmado como le fuera posible, pero la linterna solo iluminaba un par de metros a su alrededor y, pese a lo hermoso que el bosque era a la luz del día, de noche era en extremo terrorífico, casi parecía un escenario de una película de terror o un juego de supervivencia. Aunque podría ser peor: los arboles podrían no tener hoja alguna, o podría haber aullidos de (Beowulfs (o lobos como absoluto mínimo) en la distancia.

Por desgracia, distraído como estaba, se tropezó con una raíz y calló de cara al suelo, justo en una pendiente que su limitada vista pasó de largo, deslizándose un par de metros y gritando todo el trayecto hasta que finalmente alcanzó una superficie más horizontal… y se estrelló en un árbol.

-Ouch- masculló mientras se erguía, su aura manifestándose momentáneamente, curando sus casi inexistentes heridas.

-¿Estas bien?-.

-Si, aunque necesito concentrarme más por donde camino-.

-No te matará si lo haces, eso es seguro-.

Apenas y avanzó unos cuantos pasos cuando un par de aullidos atravesaron el silencio de la noche, seguido por presurosas y pesadas pisadas.

-¡Beowulfs!- exclamó alzando su brazo derecho, apuntando en frente suyo.

Poco después, tres Beowulfs regulares surgieron de entre los arboles, todos cargando contra él.

Concentrándose pese a lo aterrorizado que estaba, Jaune esperó hasta que estuvieron lo suficientemente cercas y utilizó un simple pero poderoso hechizo potenciado con Dust -¡Blizzard!-.

Una intensa corriente de hielo surgió de su mano en dirección a los grimm, pero habiendo apuntado mal, solo dos fueron atrapados en el ataque, congelándolos en el acto y, debido al impulso que llevaban terminaron por estrellarse en el suelo y un árbol con gran fuerza. Sus cabezas se rompieron y cayeron al suelo con el cuerpo de los grimm disolviéndose rápidamente, dejando solo hielo detrás.

El único restante saltó sobre Jaune, quien por los pelos logró crear un escudo de hielo tan grande como él mismo en su brazo izquierdo y se arrodilló, alzándolo sobre su cabeza. El beowulf se deslizó sobre el y rodó por el suelo un par de metros. Rápidamente Jaune volvió a apuntarle con su mano derecha.

-¡Espera Jaune! Es una buena oportunidad para practicar un poco, ¡usa un arma de hielo!-.

Los ojos del joven se abrieron con incredulidad, pero con el grimm volviendo a saltar contra él, se apresuró a crear una espada de hielo muy simple. Con habilidad apenas aceptable, bloqueó las garras con el escudo y lanzó un corte al cuello de la bestia.

Su ataque dio en el blanco.

El grimm fue empujado un poco, apenas herido pero un poco aturdido por el golpe.

Jaune parpadeó confundido y miró su arma, comprendiendo rápidamente lo que había pasado.

La hice sin filo!-.

Era muy difícil hacer un arma con magia y Dust de hielo, especialmente armas con filo. Le tomó un par de meses a Jaune hacer una verdadera espada de hielo en lugar de un garrote con forma de espada, y un par más el hacerlo rápidamente y sin problemas. Pero por lo visto, era mucho más difícil en medio de combate.

El beowulf cargó de nuevo, y esta vez Jaune se movió a un costado, torpemente golpeando al monstruo en la cabeza con su escudo para ganar un par de segundos y pasó su mano por el filo de su espada, generando una segunda capa de hielo en la hoja, esta vez procurando que pudiera cortar.

Cuando el beowulf cargó una vez más, se topó con la punta de la espada justo en medio de sus fauces abiertas. La fuerza de la carga fue tal que Jaune terminó sobre su espalda en el suelo, apenas sosteniendo sobre sí el cadáver desvaneciente del grimm.

Momentos después, Jaune finalmente pudo ponerse de pie, respirando con fuerza. Miró a su alrededor antes de dejar que sus armas desaparecieran,

-Eso fue aterrador-.

-Tal vez, pero no puedes volverte un cazador si como mínimo no puedes hacer eso. Lo hiciste bien Jaune, esa fue tu primera pelea real y ni si quiera recibiste un rasguño-.

-Fui afortunado, fueron muy pocos y los beowulfs son de los más fáciles de derrotar-.

-Cierto, pero eso no cambia el hecho de que lo hiciste bien-.

-Gracias Shiva. Ahora sigamos, mientras más rápido la encontremos, más pronto podré volver a dormir-.

Recuperando la linterna, Jaune continuó su camino por el bosque por casi media hora, sin apenas cambiar su ruta y mirando de vez en cuando el mapa del lugar en su Scroll.

-Vamos al centro del bosque, y parece que hay algo enorme ahí-.

-¿Como qué?-.

-No lo sé, tal vez es un…- Jaune alzó su vista de su Scroll, y se paró de golpe -… un árbol de verdad, de verdad grande-.

Y lo era, un árbol mucho más grande que cualquiera a su alrededor, fácil de observar aun desde lejos del bosque. Jaune no se atrevía a adivinar su tamaño, pero no le sorprendería si una villa o un pueblo pequeño pudiera ser acomodado en sus ramas.

-¿Como no lo ví antes?-.

-Nauseas-.

-...Buen punto. Así que, ¿crees que la Magicite está en ese árbol?-.

-Lo más probable, siento magia por debajo del árbol, tal vez es la razón de que creciera tanto-.

-¡¿Por debajo?! ¡¿Como voy a recuperarlo si esta debajo de eso?!-.

-Por ahora acercate, creo que podrás usar magia para escavar y llegar a la Magicite, pero necesitamos saber donde está exactamente-.

Con cuidado, Jaune se acercó al enorme árbol y empezó a rodearlo, extendiendo su brazo derecho en su dirección.

-¡Aquí!- saltó Shiva de improvisto tras casi veinte minutos -la magia se siente más fuerte aquí, justo en frente tuyo-.

-Ok, veamos si esto funciona-.

Alzando ambas manos, Jaune respiró profundo y usó magia para crear un pedazo enorme de hielo, similar a una lanza y a un taladro gigantesco. Empujó con ambas manos y un grito débil, y la "estaca" voló violentamente contra la base del árbol. El impacto produjo un ruido ensordecedor que pareció recorrer el bosque entero, y el fragmento desapareció de su vista.

Lentamente, Jaune se acercó al agujero que hizo y, alzando su linterna, iluminó su interior. Por lo visto, la base del gigantesco árbol estaba hueco, o al menos esa parte lo estaba, puesto que, de alguna manera, la madera parecía formar una especie de pasaje que se adentraba tanto en la tierra que la linterna no iluminaba su fondo.

-Bueno, aquí vamos-.

Y con eso, tocó el fragmento de hielo clavado en la enorme raíz frente suyo y usando tanto magia como Dust, creció el hielo y lo extendió al suelo, creando un poste de hielo que usó para descender lentamente.

Tras casi dos pisos de descenso entre la tierra y las raíces, Jaune llegó a otra raíz especialmente grande que sirvió de camino. Ahora estaba en lo que casi parecía ser una habitación oculta con raíces y tierra por paredes y suello, y dos formas de avanzar: una justo sobré él mismo, y otra casi en frente suyo.

-Es casi como un pasadizo o algo similar-.

-Jaune, siento la Magicite ahí dentro-.

-Bueno, ya llegamos hasta aquí, sigamos adelante- trató de calmarse a sí mismo, pero empezaba a sentirse claustrofobico, era un tanto dificil de respirar y no estaba seguro de que pudiera haber ahí abajo -¿Hay grimm subterráneos?-.

-No lo sé, nunca vi uno vivía, y aun no lees algo al respecto. Solo se cuidadoso y todo debería de salir bien-.

Asintiendo, Jaune avanzó con cuidado, escurriéndose entre la tierra y raíces más pequeñas que la que estaba bajo sus pies. En ocasiones era más facil que en otras, pero definitivamente necesitaría tomar un baño una vez volviera al campamento. Aproximadamente diez minutos más tarde, se detuvo en lo que casi pasaba por una cámara.

-No hay más camino, ¿deberé de excavar de nuevo?-.

-No estoy segura, la esencia de la Magicite se siente alrededor de nosotros, no puedo decir donde está exactamente-.

-¿En serio?- preguntó mientras alzaba su brazo derecho, permitiendole ver como la Magicite de Shiva brillaba débilmente -¡estas brillando!-.

-¿Qué?-.

-Bueno, no tú, exactamente, tu Magicite está brillando-.

-¡Eso es! ¡Usa eso, puede que te guie a la Magicite!-.

Emocionado, Jaune alzó su puño y apuntó en todas direcciones, siguiendo la intensidad que el mineral mágico producía. No le tomó mucho encontrar el punto donde brillaba con más fuerza: era un cúmulo de raíces que parecía formar un nudo.

-¡Ahí!-.

Rápidamente, Jaune creó otra lanza de hielo, esta mucho más pequeña que la anterior, y la lanzó contra el nudo, produciendo una pequeña explosión de magia, hielo, tierra y madera.

Bajando sus brazos y abriendo los ojos, Jaune sonrió al ver la Magicite que buscaba colgando de los restos de una raíz.

-¡La encontré!-.

Con un poco de fuerza, Jaune tomó su premio e instantáneamente, dio media vuelta.

-Salgamos de aquí antes de que de verdad me dé claustrofobia-.

Shiva soltó una risita.

(Un par de días después)

-Hogar dulce hogar- suspiró Julian apenas entró en su hogar, dejando las maletas que cargaba a un costado y fue directamente al sofá más cercano con su familia haciendo lo mismo.

-Me encantó ese lugar- comentó May Arc, su esposa, sentándose a su lado -Me gustaría volver ahí el próximo año-.

-Suena bien, ¿que dicen ustedes niños?-.

Saphron, una de las mayores, fue la primera en contestar -Me agrada la idea, ¿puedo llevar a Terra la próxima vez?-.

-Claro cariño- asintió su madre antes de mirar al resto -¿Y que dicen ustedes?-.

Todos asintieron, aunque uno en especial parecía estar conteniendo algo.

-Jaune, ¿está todo bien?-.

-Si papá, solo que tengo algo que mostrarles a todos ustedes- le respondió caminando al centro de la sala con una sonrisa de emoción en su rostro.

-¿Que es?-.

-Esto- alzó su brazo derecho y tocó la Magicite en Warlock -ven y saluda a mi familia-.

Al instante, la Magicite brilló y una esfera de luz salió de ella, tomando forma enfrente de ellos.

Nadie tenia ni la más mínima idea de que quería mostrarles con Shiva, pero miraron la esfera con atención.

Solo que la esfera no formó la pequeña mujer que todos conocían, si no una criatura con piernas cortas, dos largas orejas y lo que parecían ser dos colas. Su cuerpo estaba cubierto por completo de pelaje azulado, y en su frente, justo entre dos enormes ojos rubíes, había una gema circular que parecía ser de dicho mineral. Hasta cierto punto, parecía un conejo.

-¡Hola! Un placer conocerlos- saludó alegremente la criatura con una voz alegre y linda.

-¡Qué lindo es!- saltó Lily, la más joven de sus hermanas y atrapó al Esper en un firme abrazo, imitada instanes despues por Jeanne, la gemela de Jaune.

El resto de su familia lo miraron con confusion, y Jaune alzó su mano izquierda, mostrandoles la Magicite de Shiva.

-Encontré a Carbunkl en el bosque el segundo día, no dije nada por que no debemos de mostrar o decir nada de las Magicite a nadie que no sea familia, alguien podría haber escuchado en el campamento.

-¡¿Puedo formar un lazo con él?! ¡Por favor!-.

-Ah, lo siento Lily, pero ya me enlacé con él en cuanto toqué su Magicite, Shiva piensa que es por mi Semblance-.

Y mientras Jaune y Jeanne trataron de consolar a la deprimida niña, sus padres intercambiaron una mirada que ninguno de sus hijos notó.

(Esa misma noche)

-Extrañe mi cama- pensó Jaune en voz alta mientras se dejaba caer en su cama.

Pese a lo cansados que todos estaban por el viaje, sus hermanas jugaron o acariciaron a Carbunkl por horas hasta que llegó el momento de cenar, y ahora finalmente podía descansar en su cuarto.

-Bueno, a desempacar- pensó irguiéndose y mirando a los pies de su puerta, no encontrando su mochila ahí -cierto, la dejé en la sala-.

Suspirando, bajó al primer piso a paso lento, la tomó y empezó el camino de regreso, deteniéndose curioso ante la puerta del cuarto de sus padres, escuchandolos hablar a través de la puerta.

-¿Escuché mi nombre?- se preguntó mientras pegaba su oído a la madera.

-¡...ste paso, él de verdad entrará a una escuela de cazadores! ¡Ya era malo con solo una de esas piedras, ¿pero ahora?!- escuchó a su madre quejarse.

-Lo se cariño, por eso voy a tomar esas cosas y las voy a ocultar donde no las encuentre de nuevo-.

-¿Pero que pasa con lo que dijo Shiva? Acerca de que él tiene que estar cerca a esas cosas-.

-En tanto permanezcan a un pueblo de distancia no debería de haber problemas, y si no encontraré una forma de mantenerlos lo suficientemente cerca para que no cause problemas, al menos hasta que se olvide de esa tonta idea de volverse un cazador…-.

Y Jaune no escuchó más, no por que se detuvieran, si no por que ya no podía permanecer ahí. Casi con el corazón roto, corrió a su cuarto y cerró la puerta con fuerza.

-No puedo creerlo, de verdad quieren evitar que me vuelva un cazador…-.

-Lo siento Jaune, siento que tengas que pasar por esto, pero…-.

-No puedo quedarme aquí, tengo que irme antes de que me quiten las Magicite- y con eso, fué a su librero y tomó un libro de aspecto grueso, se colgó su mochila a la espalda y, sin dudar, saltó por la ventana de su habitación (en el segundo piso), aterrizando pesadamente pero sin preocupación por algún tipo de daño gracias a su aura.

-…bien, estoy impresionada, pensé que tendría que impulsarte aunque sea un poco para que disidieras irte- admitió Shiva, impresionada.

-No puedo quedarme aquí Shiva, nunca lograré mi sueño si lo hago-.

-Eso es cierto y tienes todo mi apoyo, al igual que el apoyo de Carbunkl, pero, ¿estas seguro Jaune?-.

El adolescente se detuvo un momento y miró su casa con tristeza, pero entonces miró al libro en sus manos. Era el primer volumen de una saga de Fantasía que descubrió hace casi medio año. El libro le gustó tanto que, no solo se volvió el lugar en el que guardaba todos sus ahorros, si no que también el la motivación que necesitaba puesto que los tres personajes principales de la serie no habían tenido opción más que dejar su hogar si querían sobrevivir, de la misma manera en la que él tendría que dejar el suyo para lograr sus sueños.

Sus ojos se llenaron de determinación.

-Si, estoy seguro-.

Fin del capitulo.

Ok, en verdad necesito empezar a escribirlo en español y luego al ingles, me tomó mucho hacer lo contrario.

Sobre el capitulo, aquellos más atentos a la serie sabrán que tanto Raven como Cinder hicieron también armas con su magia con bastante facilidad, pero siento que será mejor si es algo difícil de lograr, volviéndolas, junto a mi versión de Jaune, autenticas prodigio de la magia.

Pueden pensar en la Magia de Raven y Cinder como algo similar al Ice Make de Grey Fullbuster de Fairy Tail: poderosa y versátil pero un tanto limitada (no pueden controlar sus ataques una vez lo lanzaron) y la mezcla de magia y Dust de Jaune en algo smilar a la de Sypha de la serie de Castlevania: igualmente versátil, con más posibilidades (Jaune aun podrá manipular sus ataques después de lanzarlos) pero un poco más débil, cuando se centra en el control, cuando quiere poder puro serán los hechizos de FF VI.

Si tienen curiosidad al respecto, el libro que Jaune lleva es "EL ojo del mundo" de la saga "La Rueda del Tiempo", aun no sé si voy a integrar la serie como tal al mundo de Remnant o si cambiaré los nombres, pero yo simplemente adoro la serie y en verdad creo que encaja en el personaje de Jaune el que él también lo haga.

Ahora, los review:

Ronaldc V2: Concuerdo contigo en eso ultimo. Y bueno, ¿que te pareció? Esta vez le puse más cuidado a la traducción.

Eduardo Flores: La voy a continuar, solo que ahora no he tenido mucho tiempo por el trabajo y la universidad y, aun si la cuarentena me dio algo más, la inspiración no me ha ayudado al respecto, pero debería de actualizar en un par de semanas.

Guest: la voy a continuar, definitivamente, solo tengo que terminar de pulir los detalles de la historia, pero ya tengo pensado el final, ahora mismo, el siguiente capitulo depende por completo de mi musa.

Bien, es todo por ahora, suerte a todos y cuídense.