Nueva historia de DxD, esta vez es el turno de las maduritas de la franquicia, espero que la disfruten y se la gocen, suponiendo que sobrevivan a la hemorragia nasal que posible y en un futuro tengan.
Descargo de responsabilidad: High School DxD no me pertenece, es propiedad de Ichiei Ishibumi, yo solo creo esta historia para entretener.
- Todo va a estar bien - Persona hablando
" Esto no puede ser real" Pensamientos
"- Necesito que te encargues de esto -" recuerdo o fantasía.
MILF Cooking Club
Capítulo 1: Todos los ingredientes unidos
Su vida siempre había sido rara, difícil, pero se había sobrepuesto a cada desafío al que se había enfrentado, eso había definido en muchos aspectos su vida, aunque ciertamente nunca se espero que todo eso le llevara hasta aquí, a esta extraña recompensa en la que se veía envuelto en este momento, donde había entrado a este cuarto de hotel, con cuatro hermosas, maduras y calientes mujeres a las cuales se encontraba follando una y otra vez como si no hubiese un mañana.
¿Quien era el?, simple, era un joven con la suerte que seguramente muchos hombres desearían tener, un joven de 16 años, castaño, de ojos color miel, de cuerpo delgado pero atlético, su nombre, Issei Hyoudo, huérfano desde muy temprana edad, criado por su vecina a quien siempre vio como su Onee-chan y que luego fue lo mas cercano a una Okaa-san que llego a tener.
Pero es mejor empezar por el principio y en este caso es cuando el castaño tenía solo cuatro años, el pequeño era feliz, vivía en los suburbios de la ciudad de Kuoh, su familia era normal, sus padres Gorou y Miki Hyoudo, una pareja que intento por mucho tiempo tener un hijo hasta que finalmente su plegarias fueron escuchadas cuando a sus vidas llego el pequeño Issei, su mayor orgullo y su tesoro mas preciado.
En el mismo sector vivían todos sus amigos, empezando por sus vecinos mas cercanos, la familia Gremory, la cual se conformaba de Venelana Bael, mujer castaña, divorciada de su esposo Zeoticus Gremory quien nunca pudo soportar su actitud mojigata o al menos eso era lo que le decía, porque la realidad era muy diferente, era una mujer alegre, desinhibida que disfrutaba la vida, la verdadera razón estaba en que el le estaba siendo infiel y planeaba huir con su amante, como fuera ademas de ella estaban sus dos hijos su hijo mayor ya adulto Sirzechs Gremory junto a su joven esposa Grayfia Lucifuge quien ya esperaba a su primer hijo y luego estaba la hija menor de la hermosa castaña la cual era solo un año mayor de Issei, su nombre era Rias Gremory.
A un par de cuadras, en un edificio de apartamentos, vivía una rubia la cual era bastante popular en el barrio, principalmente por su voluptuoso cuerpo, especialmente sus enormes oppai, soltera y sin hijos pues luego de salir de la universidad, nunca se había permitido involucrarse con un hombre de nuevo, después de todo siempre supo que era lo que buscaban de ella, lo veía en sus ojos, la lujuria y el deseo de meterse entre sus piernas, su nombre, Yasaka Kitsuhime.
Y finalmente estaba una morena de hermosas facciones y un aire digno de una miko, su nombre, Shuri Himejima, divorciada y con una hija llamada Akeno Himejima que era de la misma edad de Rias, su marido se había ido hace mucho cuando se sintió sobrepasado por una verdad oculta del pasado de su mujer, algo que les hizo discutir hasta que finalmente el se fue dejando atrás no solo a Shuri, si no a su hija también, desde entonces eran solo ellas dos y aunque en ocasiones la soledad las alcanaba, nunca dejaron de sonreir y avanzar.
Gorou trabajaba en la empresa dirigida por Sirzechs, así conocieron a la familia que venía de alguna parte de Europa para dirigir a seccional de la empresa en ese país que se instalara hace años en la ciudad de Kuoh, se llevaban bien pues el pelirrojo era muy amable con sus empleados era casi como si fuera un empleado mas en lugar del jefe, especialmente con Gorou quien ademas de ser un gran trabajador se hizo su amigo muy rápido y en cuanto las mujeres de sus familias, forjaron una amistad solida y duradera ni bien se conocieron.
Por su parte Miki, Yasaka y Shuri habían ido a la misma universidad, ahí se conocieron y luego se hicieron amigas intimas, se lo contaban todo y se apoyaban en todo, una amistad que había continuado mas allá de la universidad hasta el día de hoy, donde seguían en contacto.
Y en el caso de los niños, los tres iban al mismo colegio y por las constantes reuniones de las mujeres, no paso mucho tiempo antes de conocerse y hacerse muy unidos, jugaban juntos, estudiaban juntos, eran los tres mosqueteros según los hombres de las familias y en el caso de las mujeres molestaban a sus hijas sobre quien de las dos se casaría con el castaño, lo cual en mas de una ocasión termino con las niñas peleando y halando de los brazos al pequeño castaño que terminaba con los ojos mareados.
Todo era perfecto en sus vidas, al menos hasta el día de ese trágico accidente que lo cambiaría todo para dos familias en especifico y todo empezó cuando los Gremory y los Hyoudo decidieron ir en un viaje para vacacionar juntos, algo que tenía emocionada a todos los participantes, pero el día en que partirían, Rias e Issei despertaron enfermos, quizás porque el día previo por la emoción se habían atiborrado de dulces lo cual les tenía realmente mal ahora, con nauseas, dolor de estomago y para colmo una fiebre considerable por culpa de su exceso.
En ese momento el viaje se vio en peligro y casi no lo hacen si no fuera porque Venelana intervino ese día, - Hijo mio, adelante, ve tu, se que esperabas este viaje para convivir con tu amigo y su familia, yo me quedare y cuidare de Rias - sonrió para su hijo mayor quien aun se sentía inseguro, especialmente porque a su lado los Hyoudo no se sentían seguros tampoco de poder ir con su hijo así de enfermo, al menos hasta que cierta peliplata hablo también.
- Yo puedo cuidar de su hijo si les parece bien, después de todo yo tampoco puedo viajar con ustedes y así pueden ir sin preocuparse - Grayfia estaba en la ultima etapa de su embarazo y un viaje así podría ser demasiado para ella y el bebe, por lo cual unos días atrás y por recomendación de su medico era mejor que se quedara en casa.
La pareja no quiso incomodar y trataron de negarse a su ofrecimiento pues no querían mortificarla, aunque ella es dijo que no era mortificación alguna, de hecho veía a Issei como su hermanito menor y lo quería mucho, por lo cual no le resultaba un problema cuidar de el, aunque claro el matrimonio Hyoudo no era el único que no estaba convencido con su ofrecimiento.
- Grayfia, ¿estas segura de esto? en tu estado sería mejor que descanses - Sirzechs estaba algo preocupado por su esposa, no quería que se forzara y le hiciera daño al bebe en el proceso, por eso estaba pensando en quedarse también, pero la peliplata negó con la cabeza mientras le sonreía.
- No te preocupes, no sera un problema para mi cuidarlo y así tengo algo que hacer durante estas semanas que estarán fuera - lo decía sonriendo tratando de convencer a su esposo, - ademas, se que has esperado este viaje por mucho tiempo, vi como tu y Gorou se emocionaban planificando todas las actividades, no quiero que te las pierdas, anda ve, yo aun estaré aquí cuando vuelvas - bromeo al final para intentar quitar hierro al asunto aunque no estaba funcionando tanto como esperaba.
Al final luego de un rato de discusiones y ayudada por Venelana finalmente lograron convencerlos a todos de no cancelar el viaje, especialmente cuando la castaña madre de Rias lanzo el ultimo golpe, - ademas sería un desperdicio haber pagado por ese viaje para al final no ir nadie - en eso tenía razón, habría sido un desperdicio innecesario de dinero y con eso en mente finalmente decidieron aceptar ir en ese viaje, aunque no fuera como lo habían planeado.
Al final los viajeros finalmente partieron despidiéndose de su familia la cual les deseo un buen viaje viéndolos alejarse en el coche que habían rentado para viajar todos juntos.
Poco sabían que sería la ultima vez que los verían vivos, pues lo siguiente que supieron de ellos es que gracias a un ebrio idiota que iba por la carretera, el auto donde ellos viajaban se había volcado en la montaña y cuando sacaron a los ocupantes, ninguno de ellos se encontraba con vida, cuando lo informaron a los que quedaban de las familias, fue el peor golpe de su vida.
Venelana se desplomo en la sala de su casa luego de despedir a los oficiales y rompió en un llanto desgarrador y doloroso al saber que había perdido a su amado hijo, Rias se encerró en su cuarto a llorar, cuando su madre pudo entrar la abrazo y acompañó en su dolor por la perdida del pelirrojo.
Issei se negaba a creer que había perdido a sus padres, se escondió en su cuarto y dijo que no dejaría pasar a nadie hasta que sus padres volvieran, aun sin entender o tal vez simplemente negándose a creer que de verdad había perdido a sus seres queridos.
Sin embargo quien se llevo la peor parte fue Grayfia, al enterarse de esto ni bien lo supo se desmayo y termino en el hospital por complicaciones en el parto debido al estrés emocional que le provoco la noticia, fue un proceso largo y laborioso, el cual para cuando acabo, tenía a una Grayfia que estaba relajada pues se encontraba dormida debido a la anestesia, pero que cuando despertara le esperaba un golpe aun mas duro, su hijo, ese que esperaba junto con Sirzechs, no había sobrevivido, según los doctores el shock le causo un aborto espontaneo y no lograron salvar al niño, en un solo día, había perdido a su esposo y a su hijo no nato, algo que le causo mas dolor del que podía soportar.
En la despedida de sus seres queridos, la cual se hizo conjuntamente, estuvieron presentes sus amigas para apoyarlas, fue una sorpresa para todos, una desastrosa sorpresa que sabrían siempre les pesaría en el corazón especialmente en el pequeño castaño pues cuando lo veían no podían evitar sentir lastima por el, se había quedado solo en el mundo y con un futuro incierto.
Al menos así debía de ser, sin embargo, Grayfia no lo permitió, veía al castañito como su hermanito, ni bien lo conoció ese nene se gano un lugar en el corazón de la hermosa mujer que no le había dado a nadie mas, ni siquiera a su esposo, la hacía sonreír como nadie y por eso, verlo en el funeral despidiendo a sus padres, mientras las lagrimas caían de sus tiernos ojos color miel le rompía el corazón.
Estaba destrozada por dentro es cierto, pero ella ya era mayor, sabía como defenderse y aunque sabía que no sería fácil, saldría adelante una vez mas, pero Issei, el solo era un niño que literalmente lo había perdido todo, su mundo se trastoco de la noche a la mañana mas allá de lo que cualquier niño sería capaz de aguantar y es por eso que ella tomo una decisión en ese momento, sería ella quien velara por el, sería su hermana, su madre, su mejor amiga.
El proceso fue largo, los obstáculos legales numerosos, principalmente porque no había ningún parentesco entre ellos, pero con ayuda de una Venelana quien le dio todo su apoyo y ayuda, finalmente luego de unos meses donde la luz al final del túnel no parecía llegar, finalmente logro su cometido, se convirtió oficialmente en la tutora legal del pequeño Issei, al menos hasta que tuviera la mayoría de edad, después de eso el era libre de hacer como quisiera con su vida.
Grayfia se mudo a casa del castaño para cuidarlo y pese a que el chico por ese entonces siempre solía estar triste, ciertamente la compañía de la peliplata fue un verdadero bálsamo para su vida que poco a poco le devolvía la felicidad, su Onee-chan, esa a la que tanto amaba pues siempre jugaba con el, lo consentía y lo mimaba, ahora estaba ahí con el, para sujetar su mano en ese difícil momento de su vida, ambos se entendían perfectamente, habían pasado por el mismo dolor y conocían lo que era una perdida.
Muchos dijeron que la peliplata solo hacía esto debido al trauma de perder no solo a su esposo si no también a su no nato hijo y que buscaba en el ahora desamparado castaño un escape a su dolor, una realidad artificial que le ayudara a olvidar lo perdido, de hecho fue algo que le repitieron mientras luchaba por hacerse con la patria potestad del castañito, pero ella hizo oídos sordos a lo que le decían y continuo hasta conseguir su objetivo.
Desde ese momento cuando ambos entraron a esa casa donde vivirían ahora juntos como hermanos o a los ojos de la peliplata como madre e hijo, ambos entendieron un hecho que cambiaría la percepción de sus vidas para siempre, a partir de ese momento, serian ella y el, solos contra el mundo.
Después de eso los siguientes 12 años fueron un ir y venir, adaptándose a esa nueva realidad en la que vivían por suerte no estaban solos, contaban con la ayuda de Venelana, Yasaka y Shuri que de una u otra manera querían aportar algo para ambos, lo cual fue bueno para ambos.
La peliplata encontró en las tres mujeres el apoyo que necesitaba cada vez que su resolución flaqueaba, de hecho no era la única, Venelana a veces también no soportaba a tristeza de perder a uno de sus hijos, pero salía adelante por la hija que le quedaba y eso era algo que ella intentaba hacerle entender, ella había adquirido una responsabilidad y debía ser fuerte ya no solo por ella, también por el pequeño que ahora dependía totalmente de ella.
En el caso de Issei, las dos niñas fueron su soporte, las únicas que en un principio eran capaces de sacarle una sonrisa cuando el recuerdo de sus padres era demasiado doloroso para el, se volvieron especiales para el, sus mejores amigas, sus confidentes, en cierta forma ahora eran como su familia, las protegía pues no quería perderlas como perdiera antes a sus padres.
Poco a poco se fueron adaptando a su nueva realidad y para cuando el castaño cumpliera ocho años, era muy difícil creer que Grayfia e Issei no eran familia realmente, pues se comportaban como tal, reían como tal, se cuidaban como tal, la tristeza ya no hacía parte de sus vidas y aunque en el aniversario de la muerte de sus seres queridos presentaban sus respetos, no definía sus vidas ni permitían que la tristeza los doblegara.
Eran a todas luces una familia amorosa, Grayfia lo quería mucho, lo sobreprotegía en ocasiones y lo mimaba en otras como toda una amorosa hermana incluso llegaba a creer que como algo mas, tal vez como una madre de verdad e igualmente Issei la procuraba, cuando se sentía enferma la cuidaba, si estaba cansada hacia las tareas del hogar por ella, lo cual le sacaba una sonrisa cálida a la mujer al ver la diligencia de su pequeño, ese vació que otrora dejaron los que se fueron ahora lo llenaba el otro y así siguieron los años.
Entonces cuando el chico alcanzo la adolescencia y entro a la academia empezaron los cambios que definirían su vida, empezando por su atracción hacia las mujeres, era estudioso de eso no había duda, tenía de los mejores promedios académicos gracias a que en ese ámbito Grayfia era muy estricta, pero el principal problema era las dos inigualables bellezas en la que sus mejores amigas se habían convertido.
Dos hermosas mujeres de cuerpos voluptuosos y proporcionados, rostros finos y modales envidiables, pero por sobre todo las dueñas de su corazón, cosa que le causo gran confusión y estrés pues no sabía que hacer, elegir a una implicaba hacerle daño a la otra y eso era lo ultimo que quería hacerles, se prometió jamas lastimarlas, a ellas, las dos chicas ademas de su Onee-chan que tanto le apoyaron cuando lo perdió todo y eso le generaba gran conflicto.
Entonces ocurrió algo que hasta ahora creía que solo ocurría en los animes que solía ver con las dos de niños, de alguna manera que no entendía y que si fuera honesto empezaba a creer que lo hacía el mas afortunado de los hombres, entro en una relación a tres bandas donde de alguna manera acabo con ambas chicas como sus novias, según le dijeron ellas, previamente hablaron entre ellas y habían aceptado compartirlo, la verdad para el no tenía sentido y entre mas lo pensaba, menos entendía que secuencia de eventos les llevaba a acceder a compartir al hombre que amaban y no fue ni de lejos la mayor sorpresa de todo eso.
Cuando se lo dijeron a las madres de ambas, esta aceptaron de buena gana y les desearon lo mejor, dejándolo incrédulo por su suerte, sin embargo siempre sintió que algo estaba mal en todo eso, nadie acepta algo así tan fácilmente y dada la actual situación consideraba que debió verlo venir, después de todo estaba teniendo sexo con estas hermosas mujeres maduras, por cierto, ¿acaso mencione que dos de ellas por cierto eran las suso dichas madres de sus novias?
Como ya se dijo, su vida era rara, demasiado rara en mas de una forma, mas si se consideraba que en este momento las que vendrían a ser sus suegras y su Onee-chan, todas estaban en la misma cama con el, era algo que a ojos del castaño solo en las porno llegaba a pasar, si, veía porno, pero eso era cuento aparte.
Volviendo al tema, mientras continuaba con el asunto entre sus manos, recordó el segundo cambió que sin saberlo en ese momento empezaría a mover los engranes que lo trajeron hasta la situación actual.
Su Onee-chan, en busca de algo para matar el tiempo ahora que el había crecido tanto, cosa que a veces le hacía llorar cómicamente mientras le oía decir entre llantos que pronto la dejaría y Onee-chan se quedaría sola, cosa que solo se detenía cuando el la abrazaba y le prometía que nunca la dejaría, era un chantaje emocional, pero el era débil y la quería mucho como para verla así, claro que ella se aprovechaba y luego le pedía mimitos, los cuales eran los mismos que ella le daba de niño consistentes en acariciar con mimo su cabeza lo cual le permitía oírla ronronear de gusto y luego terminaban durmiendo en la misma cama mientras la peliplata le decía lo mucho que lo quería.
Considerando lo que ocurría actualmente se debió dar cuenta de que ella en serio lo quería... mucho, pero, el era inocente en muchas cosas y cuando se trataba de mujeres lo era aun mas.
Como fuera, volviendo sus recuerdos, Grayfia termino iniciando un club de cocina junto a las tres mujeres que mas convivía, Venelana, Yasaka y Shuri, le sorprendió cuando a sus 15 años le dio el anuncio de que formaría ese club junto a sus amigas, "- así mejoraran las habilidades culinarias de Onee-chan -" le saco una gota de sudor verla decirlo tan entusiasta y decidida, pero igual la apoyo en su decisión, algo que ella agradeció llenando de besos sus mejillas cosa que lo hizo reír debido a la efusividad con la que lo mimaba, ademas de premiarlo con su platillo favorito esa noche.
A partir de entonces y durante el ultimo año, una vez a la semana había visto a esas cuatro mujeres usar la cocina de su casa como el lugar para preparar diversidad de platillos de distintas regiones de la nación y también de otros países, irónicamente el participo de algunas de estas reuniones pues le llamaban la atención algunos de los platillos y también porque no decirlo, porque era un buen escape de la rutina que terminaba con un final feliz gracias a las delicias que terminaba probando.
Ahora con 16 años, su relación con las dos chicas que eran sus novias se había consolidado, no era publica pues nadie la entendería, pero si era real, sin embargo entonces llego el tercer cambió y fue este el que termino empujándolo a esta situación, aun ahora estaba seguro de que en todo esto había gato encerrado, la forma en que se dieron las cosas, ya le preguntaría a ese par si no tenían nada que ver.
Tendría que esperar al menos un par de días mas, pues resulta que sus dos novias había salido e un viaje al extranjero en un tour por ocho semanas y por lo que dijeron y mas importante como lo dijeron, ademas de como sucedieron las cosas, empezaba a sospechar de que quizás todo esto ya estaba premeditado, bueno, la mayor parte de esto al menos.
- Iseeee, son se que esta pasando por esa cabecita tuya, pero ahora solo debes concentrarte en Onee-chan - salio de sus pensamientos cuando escucho a la peliplata hablar, para luego tomar su cabeza con sus manos y hacer que la mirara antes de sonreirle y luego besarlo, si, había ocasiones en las que ella podía ser muy egoísta cuando se trataba de el, pero a ojos de Issei eso la hacía adorable y una persona tan especial en su vida.
- Ehem - entonces sonó un carraspeo a su lado llamando la atención de la pareja y vieron a las otras tres mujeres verlos acusatoriamente, bueno, mas bien a la peliplata quien solo les sonrió con suficiencia mientras sacaba la lengua de manera juguetona tratando de fingir que lo que dijo no era lo que quería, aunque claro no convencía a nadie, aun así continuo con esa actitud hasta que volvió su atención a su pareja a la cual sonrió esta vez mas amorosamente antes de hablar.
- Yare, yare, esta bien, entonces debes concentrarte en Onee-chan y las demás - las tres suspiraron, a veces Grayfia podía ser odiosa e irónicamente ese comportamiento siempre le salía cuando se trataba de Issei, ese comportamiento lo habían visto varias veces antes, pero al menos lograron que esta vez las incluyera en sus planes o algo así y ya suponían que eso era lo mejor que lograrían sacarle a esa egoísta mujer, por lo cual mejor decidieron poner manos a la obra y acercarse, no dejarían que la peliplata se quedara con toda la diversión, - que aguafiestas son a veces, debe ser porque ya están viejas, ¿verdad Ise-chan? - pregunto en un susurro, haciendo que el castaño sonriera nervioso y en el caso de las chicas que habían alcanzado a escucharla una vena se marcara en su frente por la molestia, ya se encargarían después de la peliplata y esa descarada lengua suya, por ahora se centrarían en lides mas placenteras para todos y en las cuales el castaño estaba incluido.
Por si parte Issei solo pudo sonreír incomodo por la interacción de las maduras mujeres, sin duda había veces en las que podían comportarse como niñas pero eso era lo que las hacía tan especiales, como fuera, al tenerlas ya juntas y cerca de el, las vio y lo único que se le ocurrió pensar era que ante el estaban los mas finos ingredientes, tan diferentes y exóticos cada uno, con diferentes formas, diferentes tamaños, diferentes sabres y aun así todos deliciosos al paladar, todos reunidos y al alcance de su mano, en definitiva, si era el hombre mas afortunado del mundo y pensando en eso volvió a lo que lo ocupaba en ese momento que no era otra cosa que las cuatro mujeres ante el.
- CONTINUARA -
Listo, con esto damos inicio a la historia que fue la mas votada de la encuesta previa, espero que la disfruten, aunque ya me imagino que para algunos se les hará demasiado corta, pero, es lo que hay, así que ni modo.
Como ven este es el prologo, capítulo piloto o como le quieran decir de esta historia y como ven presenta a los personajes, sienta los precedentes y para los que conozcan obras literarias que manejan este estilo de escritura, no hablo de escritura erótica obviamente, la historia viene arrancando por el final o bueno un punto dentro del final de la obra, que les pareció.
Ahora, se habrán dado cuenta de que Yasaka tiene apellido y para el que se lo pregunte, si, si me lo invente, tal vez algo flojo pero quería que tuviera connotación a su esencia canon, entonces el apellido Kitsuhime es una composición, Kitsu es un derivado de Kitsune=zorro, irónicamente Kitsu también significa zorro lo investigue y obviamente todo el que ha visto anime sabe que Hime=princesa, entonces en este caso el apellido significa "Princesa zorra" que mas sonó eso, me parecía mejor en mi cabeza pero bueno, ya se queda así.
Otra cosa, con este capítulo, de entrada dejo sentadas las bases de los estados de estas mujeres que formaran parte de la vida del castaño mas afortunado, ademas de Basara, carajo como no tener suerte si hasta preño a una MILF que le encanta ser su esclava sexual y es fetichista de las mas depravadas, me estoy desviando del tema, entonces a modo de resumen, si, Issei tiene dos novias, tiene un propósito, ademas de que no concibo un universo donde Issei no este con ese par, Venelana y Shuri están divorciadas, creo que es de las pocas historias donde usan el personaje de Shuri ya sea como mujer del harem o como un personaje mas de la trama ya sea como consejera, aliada o lo que sea, Yasaka es soltera, así que no, no habrá Kunou, al menos no por ahora, el que lo entendió lo entendió y Grayfia bueno digamos que se lleva la peor parte como la viuda de turno, todo esto lo explicare mas adelante, al menos eso espero, pero quiero saber que piensan ustedes, déjenmelo en los comentarios.
Supongo que no faltara a quien no le parezca, pero antes de emitir juicios, si no han leído mis otras obras, sabrán que la cosa no es seo solo porque si, hay un trasfondo e incluso a la hora del sexo no es solo mete saca y se acabo, entonces antes de criticar, denle una oportunidad a la historia que apenas ve la luz y solo es un capítulo introductorio.
Una cosa mas, como verán deje varios huecos dentro de esta suerte de prologo, que como ya dije, tienen su razón de ser, se explicara mas adelante, es algo así como todo un entretejido donde todo tiene relación o mas o menos, ya me imagino que se harán una idea de por donde va la cosa y si no, pues ya se enteraran a su debido tiempo.
Ahora si, sin mas que decir, nos leemos en el próximo capítulo.