La noche era mas oscura de lo usual, ya que las grises nubes cubrían el brillo de la Luna que angustiada buscaba inútilmente un espacio para iluminar con sus rayos plateados la noche. La lluvia caía con fuerza y abundancia por ese viejo bosque, que salía de su aburrida monotonía al ser recorrido por dos pequeños pies pertenecientes a un chiquillo que empapado y jadeante corría desesperado, mientras sus lagrimas se mezclaban con las gruesas gotas que surcaban sus rosadas mejillas, las cuales salían abundantes de sus ojos azul-violeta, así como la lluvia cruel que no se detenía ni un segundo y golpeaba con fuerza la piel blanca del pequeño, cayendo con timidez de las puntas del cabello negro del infante que no pasaba de los 7 años

Una Iglesia abandonada y semi en ruinas yacía en el bosque, la cual apenas y lograba proteger su interior con lo poco de techo que quedaba. El niño corrió hasta dicha iglesia, parecía ser su salvación, mientras apresuraba a sus pobres pies, portadores de unos botines negros de cinta que combinaban con los jeans azul rey y la camisa blanca que estaba manchada de un liquido rojo que olía a hierro...que olía a sangre...

El pequeño se inclino frente al altar, exhausto, jadeante y con los ojos llorosos, abrazándose a si mismo mientras veía la luz de los relámpagos chocar contra los vitrales, dándoles un aspecto terrorífico e imponente, que hacia la soledad del lugar aun mas difícil de soportar...

El pequeño se tomo con fuerza le hombro izquierdo, intentando alcanzar algo que le molestaba en su espalda mientras que con sus rosados y temblorosos labios susurraba- Dios...perdona a aquellos que nos hacen daño...aquellos que pecan, aquellos que matan, aquellos que dañan vidas... destruyéndolas o marcándolas por siempre...- comenzó a llorar, desesperado, frustrado, tratando aun de alcanzar aquella parte molesta de su espalda, mientras que con su mano izquierda tapaba su rostro cubierto de lagrimas que se escapaban entre sus finos dedos mientras el soso yaba en medio de aquella oscuridad y silencio que eran rotos por los rayos que iluminaban a una figura acercarse, sigilosa y silenciosa hasta la iglesia...

Con su sonrisa maligna y maliciosa, aquélla oscura figura se adentraba a la iglesia, disfrutando y sintiendo casa paso que daba y le acercaba había el infante que lloraba, hasta detenerse a unos metros de una forma brusca, causando que ondease un poco su gabardina negra, la cual cubría su vestimenta del mismo color, posando sus maliciosos ojos azules en el pequeño que no se percataba de su presencia, mirándolo de forma lasciva, relamiéndose los labios al estar tan deseoso de hacer suyo al inocente frente a el.

- Dios no perdona a los Ángeles caídos- Hablo al fin la misteriosa figura, acaparando toda la atención del menor, que volteo bruscamente, para horrorizarse al ver a aquel hombre de cabellos rubios que lo miraban de una forma que lo hacia sentir asco...

-no pido por mi...- susurro mientras miraba al piso, y veía caer a las frágiles gotas al suelo, donde se rompían como esferas de cristal al chocar contra el suelo-...pido por los que hacen daño...pido por mi gente...pido por que se haga justicia...- Levanto su rostro infantil y lo miro directo a los ojos, sintiendo que esa mirada llena de malicia y perversión se adentraba a su alma y la envenenaba, obligándolo a bajar la mirada de nuevo- Marcos, hermano, vete, déjame en paz...no poseo nada que puedas desear...- dijo esperanzado de que su hermano se fuera y lo dejara ahí, solo, pero lejos de aquel lugar oscuro de donde huía

Marcos comenzó a reír a carcajadas para sorpresa del pequeño que lo miraba confuso- Ajaja ...No, No, no digas eso, Nerón...estas muy equivocado...tu tienes MUCHO que desear...-Paso una mano por sus rubio cabellos, echándolos para atrás, mientras comenzaba a acercarse a Nerón- Nerón, Nerón, esa cruz en la espalda, sabes por que la tienes?... -un asentamiento de parte del pequeño pelo-negro - Entonces?...tu sabes que eres especial...sabes que tienes un poder que de quererlo, tendrías a todos a tus pies, suplicando por sus vidas! Date cuenta! Es por eso que debes volver - para a 2 metros del pequeño y extiende su mano, como en señal de que lo acompañe- Por eso debes venir conmigo...Hermano...

Nerón comenzó a mover la cabeza en negativa, a la vez que comenzaba a levantarse y a echarse a correr, huyendo de Marcos, gritando desesperado-NO! NO VOY A VOLVER A ESE LUGAR!- Intento huir, deseaba huir de aquel hombre tan horrible, pero su intento se vio frustrado al ser atacado por lo que parecían ser unas cuerdas negras que llevaban unas filosas puntas metálicas que le atravesaron la pierna, el hombro y crearon otras heridas mas en su pequeño cuerpo, del cual rápidamente comenzó a brotar ese liquido rojo que creo un charco, en el cual Nerón cayo, haciendo al liquido estremecer y salpicar aun mas el lugar con sangre inocente. Cuando aquellas cosas parecidas a las lanzas fueron removidas, volviendo a manos de su dueño y atacante: Marcos

El ya mencionado sonrió triunfal "Nadie escapa de mi, Nerón, NADIE" pensó, caminando hacia el pelo-negro que parecía morir desangrado en ese lugar. Antes de que el malicioso rubio pudiese estas al menos a 3 metros de Nerón, este comenzó a mover sus manos, aferrándose al suelo, para después comenzar a arrastrarse, dejando un rastro de sangre...

El mayor lo miro sorprendido-QUE CRES QUE HACES?- Marcos estaba furioso, harto para ser exactos, de que Nerón fuese tan persistente y necio...

Nerón lo ignoro, solo deseaba irse de ahí, rezando, susurrando mientras hilillos de sangre salían de su rosada boca, manchándola-no quiero morir...no quiero morir...dios manda un ángel...siempre te he sido fiel, he creído en ti cada día de conciencia y dolor en mi vida...-dio un doloroso respiro. Dios! hasta respirar le dolía!- No deseo morir, ese no es mi deseo...Dios Padre, apiadarte de mi...-Miro hacia un vitral del lugar, donde la luz de un rayo golpeo con fuerza, para que después una luz cegadora invadiese el lugar y así, Nerón perdiese la conciencia...

----0----

Otra vez estoy atrapado en esa oscuridad que odio tanto...

Estoy solo, no ay quien vea por mi...

No ay nadie para mi en el mundo...

Entonces...moriré solo...

En la triste oscuridad...

Sin alguien para mi...

Pero...Por que?...

Dime Dios...

Por que?...

------0------

El sol entraba a través de las blancas cortinas que se ondeaban ante el viento que entraba por la alta ventana que había sido abierta hacia adentro por una niña de 7 años, de cabellos castaños cortos, ojos verdes azules y piel blanca, de rasgos y peinado muy parecido a Nerón.

Ella se acerco hasta la gran cama donde estaba el ya mencionado, sentándose y hundiéndose un poco en la alconchonada cama, para mirarlo con una sonrisa y quitarle algunos cabellos de la cara.

Nerón frunció el ceño al sentir el contacto y abrió los ojos con pesadez y un dolor punzante en el cuerpo que le indicaba que lo de ayer, no era un sueño...para su desgracias y tristeza había sido real...otro escape frustrado por Marcos...Marcos...ese desgraciado...

-"Marcos...como lo odio!"-pensó el pelo-negro mientras se incorporaba, aún sin percatarse de la presencia de la niña que le miraba sonriente y divertida ante le despiste de su hermano que susurraba maldiciones contra marcos

Sonrió para sus adentros. Si, era lindo y gracias al cielo, seguía siendo el mismo. Lo miro, como se acomodaba adolorido y el despistado...aun ni la miraba...-Si, claro, buenos días hermanito- Dijo ya algo enojada ante el GRAN despiste de Nerón, el cual al fin volteo y la vio, al principio algo sorprendido al ver ahí a una de sus hermanas gemelas, pero luego sonrió ampliamente y la abrazo a pesar del dolor.

-ALEXIA, HERMANA!- Que felicidad le daba verla, enserio que si. Desde que Gladis y Lexin, sus otros 2 hermanos gemelos se habían ido, se sentía muy solo...- No deberías estar con esa Wicca que te adopto?- Error preguntar eso. Alexia bajo la mirada. Al parecer algo en esas palabras la lastimaron...-Dije...algo malo?...Te lastime?-

-No claro que no, hermano. Como alguien como tu me va a lastimar?-le beso la mejilla- tu nunca me vas a lastimar, bobito n.n -abrazo a su hermano. Mentía. Si le había lastimado al preguntar eso. Pero no era culpa de Nerón, no, sino de aquellos que la habían abandonado...

- Hermana, que haces aquí? no deberías estar en Europa?- Ella le sonrió. Bobo, sin darse cuenta, la lastimaba con cada pregunta que hacia para saciar su curiosidad..

- La Wicca con la que vivo es muy buena conmigo. Me enseña cosas. Sabré sobre artes marciales. Puedes creerlo? En artes marciales soy su alumna mas destacada!- Alexia sonreía de oreja a oreja. Era feliz junto a su hermano-Y también me hizo el favor de traerme hasta acá, aprovechando que tendría una convención en América, me trajo para poder visitarte pero...-bajo la mirada de nuevo...Nerón comprendió que eso significaba una cosa..

-Te irás de nuevo, verdad?- Se inclino un poco, para verla a los ojos, pero esta solo agachó mas la mirada. No quería que el pequeño pelo-negro mirara sus lágrimas. Por que ella NO lloraba...verdad?

-Si, pero...-miro a su hermano, con una amplia sonrisa- Me volveré muy fuerte, y tendré mucho dinero y nos iremos los 4 hermanos a vivir a una casa. Tendremos una en un bosque, y una en un campo junto a un lago. Otra en la playa y tendremos una mansión hermosa y grande en una ciudad. Y ahí ni nuestros papas ni Marcos nos harán daño!- Nerón sonrió...Imaginar un futuro así...le era genial. Quería alejarse de sus horribles padres y de su medio hermano Marcos que solo sabia acosarlo y torturarlo...

Ambos hermanos se abrazaron. Se extrañaban demasiado.

-Alexia. Ya no quiero vivir aquí. No quiero vivir con mis papas...Marcos me lastima y ellos no parecen darse cuenta...eso...o es que prefieren ignorarlo...-

-Creo que prefieren ignorar tus molestas quejas...-Ambos niños miraron al frente y se toparon con ese par de ojos azules que tanto detestaban-...o mas bien, mas correcto, es que no existes para ellos- Si, era el, Marcos. El odioso primogénito de parte de su supuesto "papa"...

-Que quieres, Marcos?- Alexia pregunto algo altanera. Odiaba a ese chico. Se creía la gran cosa por ser el primogénito y por llevarles 6 años

-Alexia. No tienes derecho a hablarme de esa forma. Recuerda que tú tienes prohibido volver a esta casa. Solo pudiste entrar por mi gran compasión! Ajajajaja!-

A ambos pequeños se les revolvió el estomago de coraje. Era tan ególatra. Tan odiosamente arrogante y lo peor de todo es que era el favorito de todos. Podía mentirles a todos de la forma mas simple e ilógica y los demás le creerían estúpidamente.

El susodicho se acerco a los niños y tomo a Nerón de un brazo, lastimándolo y causando que pusiera una mueca de dolor.

-El tío Gen te busca. Hora de que te entrene ese maniaco sexual. Dime Nerón; te enseña como revolcarte? o a gemir como la putas que ambos son?-Marco sonrió con malicia y perversidad, satisfecho al ver que Nerón comenzaba a llorar ante esos comentarios tan hierentes

- Marcos no debes ponerte así...-Marco volteo, para toparse con esos ojos plateados que se clavaban en el, de una forma tan fría y profunda que sentía como si espadas le atravesaran el alma- Si tanto deseas aprender a gemir de la forma correcta o a retozar correctamente como la meretriz que anhelas ser, por que no vas con tu querido Tío Uru a que te enseñe especial y PERSONALMENTE como se hace? Por que me temo que yo no te puedo enseñar eso. No es mi campo nn - Sonrió frió y perverso mientras pasaba su blanca mano por su cabello plateado semi albino, intimidando al rubio que aflojo su amarré del brazo de Nerón el cual, junto con Alexia, corrió hasta donde Gen, abrazándose a sus piernas y mirando a Marcos con miedo, el cual estaba que hervía de coraje, saliendo del cuarto a grandes y fuertes pasos.

Gen miro a sus pequeños sobrinos algo afligido-Lamento no haber llegado antes para impedir que ese tarado los molestara-los pequeños lo miraron y le sonrieron. Estaban felices de que hubiese llegado antes que llegase a hacerles algo mas grave...

Los tres se encaminaron hacia el jardín, escuchando las anécdotas que Alexia les contaba de forma alegre y dinámica; con una gran energía, lo cual hacia felices a Nerón y a Gen. Al llegar al jardín, Alexia se quedo boquiabierta ante lo grande que era, las hermosas flores que había, de todo tipo, tamaño y color, aparte de las diferentes estatuas que había por el lugar, las fuentes a los extremos y aquel inmenso laberinto que al cruzarlo, se hallaría una extensa piscina...

-WAAAAAAAAAAAAA O.O INCREIBLE!- Alexia dio unos pasos al frente, con los ojitos brillándole como dos estrellas mientras se iba corriendo por ahí. Sabía que lo mejor era dejar a su hermano con Gen, ya que el entrenamiento de Nerón daría inicio...

La pequeña castaña camino por el jardín, dando saltitos, corriendo un poco y jugando con las flores, alejándose bastante de donde su tío y su hermano. Era lo mejor, ya que si se quedaba cerca, podría salir lastimada por el tipo de entrenamiento que el platino y Nerón llevaban. Así, siguió su camino alegremente, hasta que se dio cuenta que se había alejado demasiado y ese terreno ya no le era familiar...El miedo la invadió...Perdida? No! Tenia que hallar de nuevo el camino, o al menos eso intento vanamente. Parecía caminar en círculos. No lograba dar de nuevo con la mansión.

Desesperación, frustración y el llanto la invadieron. Maldita su suerte. Solo eso le faltaba para ser infeliz...

-" Quiero volver. Quiero ver a mis hermanos. Quiero ver como crecen y son felices. Quiero ver eso. Quiero verlos sonreír...Quiero ver como alcanzan esa eterna felicidad..."- sus pensamientos y sollozos fueron rotos por una canción. Era una hermosa melodía...que parecía llamarla...la melodía la llamaba.

Siguió la música hasta ir a dar a una fuente que tenia por estatua la figura de una mujer sentada en una flor de loto, la cual parecía llorar por el agua que salía de sus ojos, complementando su expresión de sufrimiento. Sentado en la bardita circular que rodeaba la fuente, había un ser andrógeno de cabello hasta el hombro color azul casi blanco, mirada nostálgica, piel blanca, y labios delgados y rosados. Miraba hacia el cielo a través de los mechones que caían por sus sienes, hasta que se dio cuenta de la presencia de la niña y la miro fijamente, con sus ojos color lila, intimidándola un poco...

-Quien eres tú- le pregunto el ser, sin despegarle la vista...

-Alexia...y tú- le miraba mientras se acercaba con cautela a ese ser que tenia una presencia indefinida y especial..

-...yo...soy...

CONTINUARA XD