N/A: Hola. Si lo se xD. Eh vuelto a mi pasion original con una meta pesada y un poco lejana...faltan 99 yaay. Espero que los disfruten mucho...ya que como son axel y roxas hare lo posible para que sea de su agrado y...pues... ah, en fin...me di cuenta que cuando escribo akuroku..o escribo de mas o no escribo nada...notaran mas abajo que me deje llevar... pero bien...

Disfruten


01. Introduccion


"No recuerdo cómo te conocí"

Roxas volteaba hacia su compañero. ¿Qué estaba diciendo?. Frunció el entrecejo, metiendo la paleta entre sus labios, lanzándole una curiosa mirada, mientras conversaban, sentados en la parte mas alta del reloj de Twilight Town.

"¿De verdad?"

"¿Tengo el tiempo para mentirte?". El tonito divertido con el que lo decía era casi tentador, Axel estaba sentado con una pierna recogida y la otra colgando en el aire. Sonriendo, estaba intentando tocar ese nervio que ponía a Roxas de un humor especial.

"Lo has tenido"

"¿Intentas hacerte el gracioso?"

"Ni empieces Axel…" Advirtió el rubio. "Porque el tema lo sacaste tu…"

El pelirrojo suspiró. "Si…al llegar tenias esa misma osadía"

"¿Qué dices?" Roxas se volvió hacia Axel algo ofendido, pero dejó eso a un lado cuando le acarició con cariño en la cabeza.

"Y eso es precisamente lo que nos atrajo de ti…"

El tacto permaneció presente sin convertirse en una invasión incomoda ni forzada. Roxas comenzó a ruborizarse cuando oyó esas palabras salir de su boca, la misma sonrisa que tanto lo habia conquistado el primer día de su entrada a la organización estaba haciendo su entrada gloriosa por sus pupilas para grabársela en las neuronas.

"Es un hombre" Le susurraba su cabeza. Pero por suerte, Roxas no alcanzaba a escucharla por completo… los ojos verdes de Axel habían hecho que en él se centrara su atención. Solo en ellos, celosos de que el destello azul pudiese desviarse hacia el atardecer.

"Hey ¿Roxas?". Con su voz regresó a la realidad, había estado quien sabe cuánto tiempo viendo en la nada y ahora estaba ruborizado de la vergüenza.

"M-mande?"

"...¿Estás bien?"

Fue repentino…Axel no se dio cuenta cuando fue que Roxas se le acercó tanto…mucho menos el momento exacto en el que lo besó.
El rubio estaba en su boca, saboreando con curiosidad las esquinas mas retiradas…ambas lenguas luchando por espacio mientras se tragaban la saliva sabor sal agridulce.
No parecían haber pensado en el futuro, ni en lo que harían después del beso…pero sus hormonas les estaban dictando otra cosa…que requería mayor cantidad de energías y esfuerzo.

"A…Axel" El rubio dijo entre suspiros…no hubo respuesta…era evidente que ese beso robado estaba pagando su recompensa.

Los tan aclamados mejores amigos decidieron entonces hacerse un poco más atrás, para no correr el riesgo de, en un descuido, caer y así despedirse en este encuentro. Con rapidez, Axel divagó en el cuerpo de su pareja para darle una sensación extra además de los besos detrás del cuello… teniendo a cambio un respirar entrecortado y gemidos placenteros que salían de la garganta del rubio.

Roxas decidió ayudar y con sus manos temblorosas comenzó a acariciar su espalda…que resultó ser un área sensible, a juzgar por los sonidos que hacia Axel, que encima de él, parecía estar completamente dedicado al trabajo de indagar en su persona.

"R…Roxas…?".

Hubo una pequeña pausa en medio del ritmo que ya había hecho diferencia de presiones entre ambas entrepiernas.

El rubio respondió con un sonido de atención.

Axel rió. "¿Estamos bien?..."

Roxas le respondió con otro beso en los labios. "Nunca lo hemos estado…"

Parece ser que nadie se dio cuenta, pero Axel y Roxas llegaron al castillo con una sonrisa diferente en los labios…habían hecho el amor por primera vez y no sería la última. Por eso se sentía un respirar diferente en el aire…ajeno a los demás, La pareja sabia que este cuento apenas estaba empezando.