Ese brillo en tus ojos

Respuestas.

El día estaba siendo tal y como Hermione había esperado desde el momento en que se despertó. No sabía el motivo pero sabía que, de alguna manera, iba a resultar especial. Y ahora creía saber por qué. Vale que no se trataba de una novedad pero en las clases estaba logrando responder cada una de las preguntas o cuestiones que los profesores las ofrecían. Lo dicho, no una novedad. Pero sentía algo especial en este día y ese pensamiento conseguía que ignorase toda mirada de reproche por parte de sus compañeros. No le importaba mucho inmersa en esta sensación de plenitud al demostrarse a si misma que estaba en plena forma.

Era la mejor estudiante y disfrutaba poniendo a prueba sus conocimientos y si a los demás no les gustaba pues que hicieran algo de provecho para impedirlo. Por ejemplo podían ponerse a estudiar en serio y así responder a las preguntas antes de que ella lo hiciera.

Claro, ¿y qué más?

Algo así será imposible si mientras ella atiende a las explicaciones dadas por el profesor Snape, el resto parecía totalmente abstraído incapaz de seguir comentarios tan cansinos. Hermione no podría llegar a entender a esta clase de personas por mucho que viviese.

Claro que lo más interesante en esta clase es cuando deben realizar ejercicios prácticos y producir el tipo de pociones que les encarga Snape pero igual de importante son los comentarios y enseñanzas por su parte.

A pesar de estar inmersa en esta clase de pensamientos Hermione seguía igualmente atenta a la clase y cuando Snape terminó por comentar los ingredientes de la poción del "Filtro de los Muertos en Vida" no se le escapó la pequeña trampa que había puesto.

Al instante levantó la mano dispuesta a revelar el 'fallo' que colocó Snape para ver si estaban atentos a su explicación pero antes de que pudiera decir una sola palabra alguien se le adelantó.

¡¿Alguien se le adelantó a Hermione Granger?!

Pues sí.

-En verdad, profesor Snape. No se usa ajenjo en polvo sino en infusión mientras que las raíces de astódelo deben reducirse a polvo en vez de usarlo en trozos para la cocción.

Hermione no daba crédito a lo que había pasado. Ella que sabía la respuesta no había podido darla porque alguien se le adelantó y, lo peor de todo, fue que la dio de una manera suficiente y aburrida como si lo que estaba diciendo era algo aburrido y sin valor alguno.

No. Lo peor no era eso sino quién lo había dicho. Quién la había adelantado.

-Muy bien, señor Malfoy-. Le felicitó Snape con su habitual parsimonia.-Es bueno saber que estos conocimientos le están llegando a alguien.

Lo peor de todo no era que el resto de alumnos no le dieran mucha importancia a lo que había sucedido, vamos, que ni siquiera sus dos mejores amigos parecían muy entusiasmados viendo la cara de aburrimiento que tenían; seguramente habían pasado horas y horas hablando de quidditch. No. Lo peor era que el propio Malfoy no parecía muy entusiasmado por haber sido capaz de arrebatarle a Hermione la posibilidad de dar ella la respuesta.

Los únicos que parecían contentos por la respuesta eran los demás alumnos de la casa de Slytherin que se reían disfrutando del momento de su Rey. Y además dejando en evidencia a Hermione Granger la Gryffindor sangre sucia.

¿Qué más se podía pedir?

Girando ligeramente la cabeza para poder mirar de reojo hacia atrás a Draco no pudo evitar sentirse humillada al comprobar como el Slytherin parecía tanto o más aburrido que sus dos amigos que casi podría jurar que se iba a quedar dormido en cualquier momento.

¿Y aún así pudo responder antes que yo?

Hermione volvió su mirada hacia el frente antes de clavarla en Snape de la misma manera en que sus oídos se centraron únicamente en las palabras del profesor. Un error era más de lo que Hermione Granger iba a permitir tener y de ninguna manera iba a permitir que Draco la volviera a humillar nuevamente. Y aunque esa no pareciera que fuera su intención lo había hecho.

Su atención se afiló cuando Snape volvió a preguntar algo más y Hermione sintió como todo su cuerpo se ponía totalmente en tensión dispuesta, figurativamente, a saltarle encima justo cuando la pregunta terminase de ser realizada.

¡Muy fácil!

-Pueden usarse, independientemente del resultado que se pretenda conseguir, tres tipos de ingredientes diferentes que otorgan el mismo fin como son la coclearia, el ligústico y la tármica.

Boquiabierta. Así se quedó Hermione cuando volvió a escuchar la monótona voz de Draco responder a la pregunta de Snape. Y, una vez más, antes de que tuviera la oportunidad de poder dar una respuesta.

¡¡Maldito Malfoy!!

Pero esta vez se contuvo de volver su mirada porque no quería encontrarse con aquella mueca burlona dirigida hacia ella, aunque, no sabía muy bien explicar cómo podía saberlo, no sentía dicha mueca clavándose en su espalda como pensaba que estaría pasando en estos momentos.

Vale, esta situación se estaba saliendo de madre y Hermione no se encontraba muy a gusto con estos sucesos. Solamente podía soportarlos cuando era el profesor quien elegía al alumno que tenía que dar la respuesta pero no cuando eran ellos quienes tenían que darle voluntariamente.

Dos ya es mucho… tres es imposible de que suceda-, se dijo Hermione mordiéndose el interior de su boca llegando a cortar lo suficiente para que un hilillo de sangre manase de la herida.

Por lo menos sus amigos, como el resto de la clase, se habían dado cuenta de la extraña situación que se había vivido no escuchando a Hermione dar las respuestas correctas.

El murmullo que bañó la clase solamente sirvió para irritar aún más a Hermione que ya esperaba atenta a una siguiente pregunta por parte de Snape. Para su desgracia no parecía que fuera a haber ninguna pregunta próximamente ya que les fue encargado realizar una simple poción desestabilizadora.

Pero cuando la situación no parecía que fuera a mejorar, y mucho menos después de las explosiones, ¡¿explosiones por la realización de una poción desestabilizadora?!, pero a pesar de todo siempre permanecía atenta para no dejar pasar cualquier oportunidad. Una oportunidad que llegó justo antes de que la clase terminase.

La pregunta no era difícil y Hermione sabía la respuesta aunque también había sabido las otras pero aquellas no las pudo decir por no haber sido lo suficientemente rápida. Esta vez no iba a suceder lo mismo.

-Los ingredientes son unos escarabajos machacados hasta reducirlos lo más posible, bilis de armadillo y raíz de jengibre cortada en trozos. La efectividad de la "Agudizadora de Ingenio" depende de lo bien se realicen el machacado de escarabajos y que los trozos de jengibre hayan sido cortados en trozos lo más iguales posibles.

Hermione sonreía orgullosa de si misma por haber sido capaz de adelantársele a Draco en sus mismas narices. Esto le iba a servir para la próxima vez que pensase en dejarla en evidencia.

Esta vez si miró sobre su hombro para ver que cara se le había quedado a Draco al verse superado por una hija de muggles pero ante su sorpresa, que logró abrirle los ojos más de lo normal, vio como el rubio Slytherin se encontraba con los ojos cerrados un brazo apoyado sobre la mesa y la cabeza en una mano. Casi podría haber jurado que se encontraba durmiendo.

Casi.

Ante su asombrada mirada vio como se formaba una media sonrisa en los labios de Draco y pudo ver su cuerpo temblando a causa de la risa que se estaba aguantando para no romper a carcajada limpia en plena clase como un loco. Entonces los ojos de Draco se abrieron cogiendo a Hermione mirándole absorta e incrédula al intenso brillo de aquellos ojos acerados.

Esto solamente logró que la sonrisa del Slytherin se hiciera aún mayor para mortificación de Hermione.

-Vaya, señorita Granger. Parece que se hubiera tomado usted un poco de esa poción mientras todos estaban 'realizando' el ejercicio práctico-. Le dijo Snape con total desdén que arrancó unas buenas risas de los Slytherin presentes.

Con esto la clase se dio por terminada.

Hermione no escuchó ninguna de las palabras que sus amigos le dijeron en un intento por hacerla sentir bien pero ella parecía inmersa en su propio mundo mientras desahogó sus frustraciones con su pluma que no duró mucho tiempo entera en sus manos siendo partida en dos.

La clase se había vaciado de alumnos dejando solamente a Hermione, Ron y Harry aunque los dos muchachos se encontraban juntos al lado de su amiga que no parecía escuchar ninguno de sus intentos por consolarla.

¿Desde cuándo necesitaba que la estuvieran consolando? Ni que fuera una niña pequeña para ello.

Entonces sintió una presencia a su espalda y pudo escuchar de nuevo las voces de sus dos amigos aunque de una manera amortiguada por culpa de los fuertes latidos de su corazón. No necesitaba el poder escucharles en un volumen aceptable para saber que estaban despotricando contra cierta persona cuyo nombre no quería nombrar, ni siquiera pensar en él.

Por supuesto no le gustaba la idea de que él también estuviera ignorando las palabras que estaban soltando sus dos amigos porque eso significaba tener algo en común con él en estos momentos. Cuando lo tenía tan cerca de ella.

Si pensaba que la situación no podía empeorar se había equivocado al sentir el calor del aliento de Draco introducirse por su salvaje mata que llamaba cabello hasta que sus labios descansaron sobre su oreja.

No te están dando escalofríos por su culpa… o si, pero solamente porque es Draco y no porque eso signifique que pueda conseguir ponerte nerviosa y… deberías dejar de pensar sinsentidos. Todo por su culpa.

Suerte que sus dos amigos se encontraban en el lado opuesto a donde Draco se había colocado porque sino no sabría que habría pasado después de que el Slytherin hubiera hecho sus movimientos.

-Venga, Granger. Me parece muy impropio de ti el descargar tus frustraciones sobre algo tan indefenso como tu pluma-. Draco acercó aún más sus labios a la oreja de Hermione que sintió como su boca se le secaba por completo.-Alguien como tú debería tratar mejor su pobre material escolar, Granger.

Hermione no podía aceptar que si su corazón estuviera latiendo con tanta fuerza y a un ritmo enloquecedor tuviera que ser a causa de la cercanía de Draco o de cómo la hacía sentir aquella calidez sobre su piel.

La voz de Draco se hizo solamente para oídos de Hermione.

-… existen otras maneras para descargas las frustraciones como…-, lo intentó con todas sus fuerzas pero cada palabra susurrada en su oído no hacía más que redirigir toda su sangre a su rostro hasta que lo tuvo totalmente enrojecido que Ron sentiría envidia de semejante capacidad. Hermione no paraba de excusarse mentalmente e intentando no escuchar ninguna de aquellas palabras… pero seguía escuchándolas y temiendo el momento en que dejasen de ser simples palabras y se convirtieran en hechos.-… fíjate, Granger. El rojo te sienta bien-. Y ella pudo sentir la media sonrisa de su rostro acariciando su oreja como lo había hecho anteriormente su lengua.-… reparo…

Y volviéndose hacia la salida Draco con una auténtica sonrisa satisfecha en su rostro dejó a una totalmente nerviosa Hermione detrás mientras esta tenía su recién reparada pluma entre sus manos que le temblaban ligeramente.

Los insultos de Ron hacia Malfoy eran ignorados por completo y la silenciosa mirada confundida de Harry también lo era pues en su mente solamente había sitio para una persona en estos momentos.

Para una persona y para sus palabras. Palabras que prometían hechos y sensaciones que nunca antes había vivido ni soñado en experimentar.

Bajó su mirada hasta que sus ojos castaños quedaron fijos en su pluma y pudo sentirla temblar ligeramente debido a los nervios que recorrían sus manos. Nervios causados por aquella inocente pluma junto a las promesas que las palabras de Draco le iban a ofrecer.

A ella.

A Hermione Granger por parte de Draco Malfoy.

Las palabras susurrantes solamente fueron para ella y su pluma. Unas palabras que necesitaban de una respuesta por parte de Hermione. Una respuesta que cambiaría para siempre toda su vida presente y futura.

¿Tendría el valor para dar con la respuesta correcta?

Por supuesto que si, no obstante ella es Hermione Granger y su especialidad es encontrar la respuesta correcta a todas las preguntas sin importar quién las pronuncie o cuál pudiera ser el resultado de dar la respuesta.

Ella sabía cual era la respuesta que quería decir… aunque no fuera la respuesta correcta que su mente le gritaba con todas sus fuerzas. Respuesta ahogada por la que su corazón le ofrecía con una serenidad sorprendente.

-… si quiero…

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ENDorFIN

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Promesas dichas al oído que logren turbar de semejante manera solo pueden significar buenos futuros momentos para Hermione. Hehehe

Dejad una review para motivar los futuros escritos… y haber si podéis llegar a adivinar lo que le fue susurrado al oído a una nerviosa Hermione. Esa pluma… mmmmm

Nos leemos.^^