Los personajes son propiedad de Stephenie Meyer [o algo así]. La letra es de la famosa aria de Giacomo Puccini titulada "Nessun dorma".

Esta es una pequeña escena que se me ocurriò mientras veía el final de la miniserie de Puccini, que a pesar de que no la vi completa, el solo final me llevó a las lágrimas.

Se lo dedico a mi querido champiñón sparklinghaledecullen, por su cumpleaños [un poquito atrasado :blush:]. Happy birthday!


Nessun Dorma


Una mirada. Un par de ojos esmeralda que sufren; un par de ojos chocolate inundados en lágrimas.

Un apretón de manos. Las manos grandes y fuertes de antaño, ahora débiles, son sostenidas con ternura por unas manos delicadas. Con amor, devoción. Con dolor.

El momento se acerca, pero no hay palabras que puedan decirse. Todo se ha dicho ya. Los te amo se dieron tiempo atrás. En la habitación sólo se escuchan una respiración forzada, con dificultad, y sollozos.

Él sufre. Su frente está perlada de sudor, su rostro está crispado de dolor. Los espamos recorren su cuerpo; sus inhalaciones son cada vez más espaciadas. Pero no sufre por él, puesto que ya sabía a lo que se expondría. Se aflige por ella, porque la dejará sola, porque se irá de su lado.

Ella sufre. Está desaliñada, sus ojos no brillan más; sus mejillas están marcadas por las lágrimas. También tiembla, por los sollozos. La vida se le está yendo, se esfuma junto con el hálito de vida que se escapa poco a poco de él. No quiere imaginarse un futuro sin él. No puede.

Por la ventana, además de los cálidos rayos del sol del atardecer, entra también música. Es esa música por la que en otras circunstancias dejarías de hacer lo que estuvieras haciendo para escucharla; sin embargo, ellos ni se inmutan. Están en esa burbuja, íntima y efímera, que pronto concluirá. Lo saben, por eso se aferran a ella. Con manos débiles, pero lo hacen.

Ed il mio bacio sciogliera il silenzio

che ti fa mia!

La respiración de él se ralentiza. Los sollozos de ella aumentan. Ya es hora. Él, con más de la fuerza que dispone, alza una mano temblorosa y traza tiernamente los rasgos del rostro de porcelana. Las lágrimas se agudizan.

Ella toma su mano entre las suyas, una vez más. La besa. La acerca a su corazón.

Se miran a los ojos, y el mundo ha dejado de existir. Sólo son ellos dos, y un amor que trasciende esta vida y la otra.

Dilegua, o notte!

Tramonte, stelle!

Tramonte, stelle!

All'alba vincerò!

vincerò, vincerò!

Los ojos esmeralda se cierran. La mano que ella sostiene ha perdido la poca fuerza que tenía. Lo sabe, pero no puede aceptarlo. No puede, no quiere. Se queda observándolo. No se atreve a moverse ni un milímetro. Quiere que vuelva. Pero él se ha ido. Su vida ha terminado.


Sé que es algo triste —por lo menos para mí—, pero tú sabes, Sil querida, que es con todo amor ^^ Tqm.

Ciao!

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