Hola a todos!! Mi nombre es Ruichi-chan, jeje

Esta es la primera historia que escribo con mi parejita favorita de Naruto: SASUSAKU..!!

Espero que les guste…y me dejen un review, jojojo~ ^.^

Bueno, la simbología:

-blablabla…-diálogos

"Pensamientos"

Flashback……………Fin Flashback. En este caso el flashback lo narrarán ambos, vale?

Es un AU…recuerden que Naruto no es mío, todo es de Masashi Kishimoto-sama…yo solo me invento la trama de esta historia sin otro fin más que el de entretenerlos un ratito ^_^

Ahora sí, Let's Read!!!

CONVIVENCIAS AMISTOSAS

Una hermosa joven de veinte años llamada Sakura preparaba todo para la llegada de su más adorado amigo; había colocado un montón de pétalos de cerezo sobre la alfombra de su habitación, prendido unos inciensos con el fantástico letrero que rezaba "olores afrodisiacos" y, por sobre todo lo demás, se había puesto un atuendo muy sexy y atrevido que, aunque no era su estilo, sabía que al chico de cabello azabache le encantaría, o al menos eso esperaba.

Había esperado durante horas la llegada de ese chico de cuerpo perfecto, piel nívea, cabello rebelde y ojos profundos como pozos negros. Sonrió para sí misma, tratando con todas sus fuerzas de no sonreír ante la perversa idea que se había ingeniado en lo más recóndito de su pervertida mente y que ahora se convertiría en realidad, si es que la suerte jugaba a su favor.

Al principio odiaba admitirlo, pero después no le quedó más remedio: se había enamorado de él, incluso antes de lo que le gustaría aceptar. Se habían conocido cuando tenían solo cinco años, en un pequeño parque frente a sus casas ya que eran vecinos; él siempre la ayudaba, la consolaba, y cuando su familia decidió mudarse le pidió que no llorara, que fuera una chica fuerte para que así, cuando volvieran a verse, fuera digna de estar con un Uchiha. Tal vez era estúpido, pero después de todo ese había sido su pilar: ser alguien digna de un Uchiha, más específicamente de Uchiha Sasuke. El destino los había vuelto a juntar durante el Instituto…claro que no de la forma en que ella hubiera esperado; de hecho, se desilusionó bastante cuando él no la reconoció. De ahí surgió una extraña amistad mezcla de rencores, confusiones y competencia: ella deseaba demostrarle que podía ganarle, que era alguien digna de un hombre mejor que él.

Claro que andar con Uzumaki Naruto no fue su idea más brillante, pero al ser el mejor amigo de Sasuke no existía mejor prospecto; por fortuna, cuando ella cayó en cuenta de que se había enamorado de él, Naruto le dijo que él también se había enamorado de otra persona: Hinata, una chica muy linda y a la que Sakura apreciaba realmente. Ella sí amaba al rubio, y el chico de ojos azules merecía lo mejor: terminaron como grandes amigos (más exactamente ella era la que lo ayudaba cuando decía un comentario indecente o deseaba precipitar las cosas con la chica ¬¬) y se lo agradecía, ya que lidiar con el Uchiha todo el tiempo era algo que necesitaba de cantidades de energía, física y mental, superiores a las que poseía cualquier ser humano.

Habían terminado el instituto sin ninguna clase de compromiso de su parte, eran amigos; de hecho ser amigos tan cercanos provocó que tuviera un club en contra de ella, que la mayor parte de las féminas del insti la odiaran…pero le daba igual. Le encantaban todas las facetas que el azabache tenía, la hacían sentir que existía el hombre perfecto…claro que un hombre así, hijo de una adinerada familia no se fijaría en ella sin una buena razón, y lamentablemente esa buena razón nunca llegó. Entraron a la misma universidad (TODAI), ambos iban a medicina: probablemente su única simpatía 100% compartida era salvar vidas. Ese era su tercer año en la carrera, sus vacaciones (si es que pueden llamarse así, ya que la tarea y el estudio nunca cesan) estaban a punto de terminar y el azabache regresaba de New York después de su corta lejanía que a ella se le antojaba eterna.

Sakura deseaba averiguar de una vez por todas si él sentía algo por ella que no fuera el deseo de molestarla, fastidiarla o controlarla. Sonrió frente al espejo de su habitación, tocándose con la yema de los dedos en punto entre sus dos cejas: esa zona estaba relajada siempre que no estaba con el Uchiha y eso la irritaba un poco. Algo en su interior le decía que era una mala idea, que mejor se vistiera decentemente y salieran a algún lado en vez de quedarse a hacer lo que ella tenía planeado hacer…se sonrojó violentamente pero estuvo complacida por su inteligencia. Ahora solo quedaba esperar a que el chico llegara…

~~O~~o~~O~~o~~O~~

Sasuke iba en el deportivo negro que había alquilado, cansado del viaje en avión. La verdad era que lo único que quería era llegar a casa y descansar. El problema era que su "querida amiga" Sakura lo había llamado esa mañana, preguntándole si realmente tenía planeado llegar ese día a Tokyo; aunque no le gustara admitirlo, el dejo de alegría que pudo percibir en su voz le alegró a él también. Esa chica de extraño pero suave y brillante cabello rosado, ojos enormes color verde brillante con unas hermosas y largas pestañas enmarcándolos, con un cuerpo perfecto, bien definido y magníficamente torneado, era en realidad la razón por la que volvía.

Su familia no era exactamente la más feliz y perfecta del mundo: sus padres se había separado cuando él tenía solo diez años, su hermano mayor estaba muy ocupado como para prestarle atención y su única amiga había quedado muy lejos de su alcance. Haruno Sakura, así era como se llamaba su ángel personal, su molestia…sonrió al recordar cuando la volvió a ver en el instituto; se quedó petrificada, observándolo como si se tratara de un espejismo o de una mala broma. Él fingió no reconocerla solo por molestarla, pero eso le costó caro: desde ese momento ella se había mostrado reacia hacia él, e incluso había salido con su mejor amigo para fastidiarlo. Si creía que podía ganarle a un Uchiha estaba muy equivocada: él no se dejaría gana, mucho menos por una testaruda y necia como ella. Se había alegrado sobremanera cuando se enteró que la relación había terminado, pero se negaba a admitir la derrota: desde ese día se había mostrado posesivo con ella, trataba de controlarla a la para que la protegía.

Se detuvo en el semáforo que estaba una cuadra antes de llegar a los edificios donde se encontraba el departamento de la ojiverde, lo cual lo hizo sonreír de nuevo. Esa era la oportunidad perfecta para aclarar las cosas, sobre todo por el pequeño incidente de la fiesta a la que fueron antes de que él se fuera de vacaciones.

Flashback

Sakura iba sentada en el asiento del copiloto de su precioso BMW, tarareando la canción que sonaba en la radio:

-Cómo puede gustarte esa canción?- le preguntó, reconociendo la letra.

-Es pegajosa- le respondió, moviendo sus hombros al ritmo de la música- "Damn with the sexy bitch, the sexy bitch. Damn with the sexy bitch, damn girl!...".

-Cállate, Sakura- le espetó: verla moverse de esa forma, sentada junto a él, con el diminuto vestido rojo que dejaba ver sus hermosas y cremosas piernas, no lo ayudaba a concentrarse en el tráfico.

-Se puede saber ahora por qué estás molesto?!- le preguntó, dejando de bailar y de cantar aunque la canción siguiera sonando.

-El tráfico está pesado, la fiesta a la que vamos de seguro va a ser un asco y tú no dejas de cantar esa estúpida canción, me faltan razones para estar molesto?!

Sakura no le contestó, aunque ganas no le faltaban. Simplemente se quedó sentada sin moverse con los brazos cruzados, mirando por la ventana para que él no viera lo mucho que le había afectado que le hablara así. Ella entendía que se molestara, pero nunca le había hablado de esa forma:- Si no querías venir a la fiesta me hubieras dicho, así no tendrías que estar ahorita conduciendo.

-No seas tonta, no iba a dejar que fueras sola a las fiestas de Sai, con eso de que son "con-bebencias" más que otra cosa…

-Yo estoy muy feliz de que nos invitara, sabes? Generalmente nunca salimos con nuestros amigos, y eso no es normal.

-Ah, sí? Pues si tanto quieres salir a una fiesta de éstas donde todos se ponen ebrios a más no poder y empieza la orgía del año avísame; es más, si quieres te dejo dinero para el taxi de regreso o mejor dicho para el motel, ya que seguro terminas en la cama con cual…

Sintió el escozor más intenso de su vida en su mejilla izquierda; Sakura lo había abofeteado y lo miraba con intenso odio. Intentó retractarse, pero era tarde. Habían llegado al lugar de la fiesta y su amiga salió corriendo, dejándolo solo en el carro. Tardó un segundo en reponerse de la impresión, pero no tenía tiempo de hacer el tonto: estacionó el convertible en el primer lugar que encontró y salió en busca de la pelirosa. Demonios! No había sido su intención decir eso, pero no podía evitarlo: él era popular, cierto, podía fajarse y cogerse a cualquiera, cierto, pero Sakura también tenía su club de fans dispuestos para cuando a ella se le antojara. Sentía celos al pensar en que era justamente Sai el que lideraba ese estúpido club y que seguramente los había invitado con la intención de hacerle algo a la chica, a SU chica…nunca tuvo el valor de decirle que estaba loco por ella, así que desquitaba sus "necesidades" con cualquiera que le viniera en gana, aunque sabía que con eso la lastimaba. La Haruno era vírgen, tenía plena conciencia de ello, y justamente por eso no deseaba que alguien le arrebatara lo que por alguna clase de "derecho" se merecía.

Entró a la mansión de la familia de Sai: un montón de gente (algunos ya pasados de copas, después de todo se les había hecho tarde y eran ya pasadas las doce) bailaba, platicaba o simplemente tomaba. Buscó con la mirada a la chica y no tardó en encontrarla…

Sakura salió corriendo en busca de lo único que podría hacerla desahogarse un poco: Sai. Sabía perfectamente que el azabache no lo tragaba, y necesitaba hacerlo sufrir. Era idiota, ambos lo eran, cómo pudo decirle algo así?! Que ella terminaría con cualquiera en la cama en un motel era algo que no le dejaría sin cobrar; claro que él sabía que ella era vírgen ya que todo el mundo lo sabía, lo que nadie sabía era que ella se había mantenido así para que, el día en que Sasuke decidiera aceptarla, no tuviera nada de qué arrepentirse. Se entregaría en cuerpo y alma al único hombre al que había amado, aunque él ya hubiera cogido con varias antes que ella.

Lo vio, se deleitó con la manera en que los fulminaba, pero no le importó y se le aproximó más a ese chico extraño con una sonrisa más fingida que nada. Eran aproximadamente las tres, a ella también se le habían pasado las copas por el coraje y ahora bailaba sensualmente con Shikamaru; no recordaba exactamente cuando había llegado con él pero tampoco le importaba, lo único que importaba era que el Uchiha (rodeado de admiradoras como siempre) no le quitaba la vista de encima. Justo en ese instante comenzó a sonar la canción de David Guetta (leer nota) que el ojinegro odiaba tanto: con más empeño que antes se movió con Shikamaru, que también estaba algo pasado de copas y que la sujetaba contra él. Segundos más tarde le molestó la manera en que el chico trataba de manosearla, sínico como era seguro le valía lo que pensarían todos de ella cuando la fiesta terminara. Cuando sintió la mano del chico deslizarse hacia sus nalgas se enojó y trató de abofetearlo, pero Sasuke le dio un puñetazo antes y se la llevó de ahí directo al auto, ignorando las miradas y susurros de todos los presentes.

-No tengo que decirte que se acabó la fiestecita, verdad?- le dijo molesto, y ella no se atrevió a responderle.

Subieron al carro y llegaron rápido al departamento de ella, ya que el tráfico era prácticamente nulo. Cuando abrió la puerta lo dejó pasar para que tomara algo y luego se fuera a su casa. Ella alquilaba ese departamento pequeño y cómodo, pero él era rico; su familia tenía varias casas en el país y Tokyo era una de esas partes. Se volvió para enfrentarlo: entre más rápido el chico desahogara su furia mejor para ella. Cuando se giró lo vio a pocos centímetros de ella, le tomó la barbilla y la atrapó entre su cuerpo y la pared más cercana:- Me voy a New York en cinco horas, regresaré antes de las clases pero mientras tanto…no quiero que hagas más estupideces, ok?

-Estupi…Ahora resulta que lo que yo hago son estupideces, pero lo que TÚ haces es digno de festejar?

-De qué hablas?!- estaba confundido, pero si esa noche no había hecho otra cosa que no fuera cuidarla!!!

-Cuando tú te ligas a una chica, ella te baila sensualmente y luego te la llevas a la cama es digno de celebrarse, pero cuando yo quiero "eso" con alguien es una estupidez?!

-No digas idioteces, Sakura- le dijo, apretando su agarre en la barbilla, obligándola a mirarlo y reflejarle lo mucho que odiaba la idea:- Si quieres eso con alguien, tendrá que ser alguien mejor.- le sonrió seductoramente, sonrisa que ella interpretó correctamente:

-Y de casualidad ese eres tú?- le preguntó sarcástica:- Que te jodan!

-No te reflejes, Sakura, porque a mí no me cuesta nada cogerte ahorita mismo antes de irme de viaje- le amenazó, pero ella le sonrió con suficiencia retándolo; imposible que él le hiciera algo así.

Pero contrario a lo que pensaba, el chico se abalanzó contra ella besándola, introduciendo su lengua, reclamando una respuesta. Ella gimió pero no lo apartó: deseaba demasiado eso como para negarse. Lo atrajo hacia ella, deseosa de probar algo más que sus labios, su lengua, su saliva…se separaron solo para que ella le mordiera el lóbulo. En respuesta el Uchiha la tomó de la cintura, enredando sus féminas piernas en su cintura y depositándola en el sofá. Comenzó a besarle el cuello, el nacimiento de sus pechos, mientras sus manos se ocupaban una en su seno y otra se dirigía a su entrepierna. Comenzó a acariciarla, ganándose unos sensuales y excitantes gemidos. Ya que el vestido era de licra lo único que tuvo que hacer fue subírselo para dejarlo ver su provocativa tanguita mientras la parte de arriba era bajada para dejarlo ver sus pechos ya que no llevaba sostén. Esa situación se estaba saliendo de control, y si quería irse ese día a América mejor se detenía. Se separó de ella, deleitándose con el rubor, el sudor, los suspiros agitados de la chica entes de inclinarse para susurrarle al oído:- Ahora crees que existe alguien mejor?- le mordió el lóbulo, ganándose el último gemido de la noche.

-No…-respondió ahogada, demasiado extasiada por tantas sensaciones nuevas.

-Nos vemos, Sakura…recuerda portarte bien, ya aclararemos esto cuando regrese.- Y sin más se levantó de la cama, se acomodó su ropa y, lanzándole una última mirada complacida, salió de su departamento. Sakura se quedó ahí tendida, confundida y excitada: el idiota se había aprovechado y la había tocado como jamás nadie lo había hecho. Qué se supone que significaba eso? Realmente quería averiguarlo, pero no podría hasta que regresara; también se sentía algo vacía, como si fuera su zorra personal, alguien a quien podía manosear y luego dejarla con ganas de más mientras él se despedía. Ya vería quien manda en ese juego.

Fin Flashback

Sasuke llegó por fin al edificio; aparcó su convertible, puso la alarma y subió hasta el último piso. Se detuvo frente a la puerta con el número 7 e inmediatamente salió la chica a su encuentro: Dios, qué rayos significaba eso? La pelirosa estaba ataviada únicamente con una bata cortísima de tela transparente que dejaba ver su provocativa lencería de color negro.- Qué rayos significa esto, Sakura?- le preguntó, refiriéndose a su ropa.

-Vaya, pensé que ya no llegabas y pues me cambié para dormir- le mintió, feliz de la reacción del chico. "Perfecto! Ahora solo necesito que no te vayas…", pensó la ojiverde.

Sasuke por su lado trató de no excitarse imaginando a la chica dormida con tan poca ropa, removiéndose entre las sábanas, gimiendo gracias a un sueño erótico en el que aparecieran juntos haciendo toda clase de cosas…-Si ya te ibas a dormir debiste haber llamado y no hubiera llegado.

-Pues ya no es necesario, ya estás aquí así que pasa y vemos una película, vale?- le dijo, tomándolo de la muñeca y jalándolo hacia dentro. Sasuke se sorprendió: el escenario no era precisamente como para que él fuera a verla, más bien parecía que la chica esperaba a su amante…

-Te portaste bien en mi ausencia, verdad?- le preguntó fulminándola, esperando escuchar su respuesta.

-Claro que sí! Ahora cállate, voy por las palomitas…-salió directo a la cocina mientras él tomaba asiento en el sofá frente al televisor. Le encantaba esa casa, con o sin pétalos de cerezo. La chica regresó poco después con palomitas, dos vasos con refresco y una botella de vodka.- Por si se te termina el refresco…-le sonrió pícara, sabiendo lo poco que le gustaba al chico esa bebida.

-Cállate, sabes que odio el vodka-le espetó, tomando su vaso de refresco para beber. La chica se sentó a su lado y encendió el televisor y el reproductor de DVD's. Algo en esa situación parecía divertirla mucho, pero no quería preguntar que era ya que demostraría demasiado interés. Cuando desvió la vista a la pantalla casi escupe la bebida: "Deseos Placenteros"…-Una película erótica?!!!- preguntó, repentinamente acalorado.

-Si no quieres…-le dijo ella, nerviosa repentinamente por el asco con el que el chico miraba la pantalla- podemos ver otra cosa…-pero él la detuvo antes de que presionara el botón de stop y la obligó a mirarlo.

-Solo un rato…-le dijo. Esa situación era excitante: ver una película como esa con Sakura sería magnífico. La película empezó con una intensa escena; la chica se ruborizó, pensando en que el plan le había salido por la culata. No se supone que era ella la que tenía que "emocionarse"! Era Sasuke el que debería hacerlo! El chico junto a ella respiraba normal, no daba muestras de conmoción, nada! Se sintió cohibida cuando él depositó una mano en su rodilla y comenzó a ascender, acariciando la suave piel a cada centímetro que avanzaba con tortuosa lentitud. Ella dejó escapar un gemido y se rindió: su plan se había ido a la mierda y lo poco que vio de la película la había encendido. Se giró para atrapar los labios del Uchiha en un demandante beso, uno que él respondió con urgencia. La levantó un poco solo para obligarla a sentarse encima de él; la acariciaba de manera casi ilícita; era su amiga, ella era algo más: era la chica que lo volvía loco, la que deseaba y amaba más que a nada en ese mundo, en ese momento…Se separó de ella solo para tumbarla en el sofá.

Se incorporó, la cargó en brazos y la llevó a su dormitorio: con poca delicadeza la aventó en el colchón y luego se acomodó sobre ella, abriéndole las piernas para poder ubicarse entre ellas. La Haruno gimió mientras él la acariciaba…se sentía demasiado bien, mejor que todas las fantasías que habían tenido desde que era suficientemente pervertida para idearlas. Sasuke le había abierto la bata y la observaba con…embeleso? La repentina ternura y delicadeza de sus caricias la hicieron estremecer, qué rayos le sucedía? Qué les sucedía a ambos?- Sasuke…-suspiró ella.

-Eres hermosa- le dijo, tomando una de sus manos y se la besó sin dejar de mirarla.- Demasiado para tu bien, Sakura…no entiendes lo que tengo que pasar cada vez que un chico te mira con lujuria.

-Sasuke…-gimió ella cuando él le acarició la entrepierna por encima de sus diminutas braguitas negras.

-No te imaginas la cantidad de chicos que sueñan con hacer…-le dijo mientras le quitaba la estorbosa prenda- lo que yo estoy haciendo en este preciso instante.- dicho esto volvió a besarla en los labios, con una suavidad que la conmovió. Ella solo atinó a contener las lágrimas que luchaban por salir y responderle el beso, esa delicada caricia…ese roce tan ansiado que estaba cargado de sentimientos que ella había luchado por reprimir: había perdido, él la dominaba completamente, la hacía mostrar sus debilidades con ese beso. Ella lo amaba, lo amaba tanto que dolía, era todo lo que necesitaba para poder vivir.-Por qué duele…?- preguntó ella en cuanto el beso se rompió.

-Duele?- le preguntó Sasuke, besando a continuación su mejilla ruborizada.- Qué duele, Sakura?

-Este…sentimiento- confesó ella, haciendo que el corazón del Uchiha se acelerara.

-Qué sentimiento?- tenía una idea muy cercana; si ese "sentimiento" del que la chica pelirosa hablaba era el mismo que él tenía, entonces todo quedaría solucionado, solo necesitaba que ella respondiera correctamente…

-No estoy segura- le dijo, enredando sus dedos en el cabello azabache, logrando que él la mirara; se perdió en sus orbes negras, tratando de ordenar sus ideas…-Duele porque tú no sientes lo mismo.- lo dijo tan convencida que era casi imposible refutarle- Para ti esto es solo sexo, una más de tus relaciones coitales…para mañana todo quedará olvidado, seré una más en la lista, solo que tal vez tenga la ventaja de ser tu amiga y tenga un puesto más arriba en las posiciones…claro que eso no me eleva de la categoría de zorra en la que caen todas las demás…-dijo con amargura, tratando de apartarlo de encima.

-No eres ninguna zorra, Sakura. Tú eres mi amiga, eres la mujer que me vuelve loco- lo había dicho, justo a tiempo. Vio la incredulidad de la mirada de la ojiverde, pero no la dejó interrumpirlo:- De acuerdo, lo admito: te amo desde que te conocí, de acuerdo? Yo perdí.

Sakura le sonrió antes de juntar sus frentes y cerrar los ojos, adquiriendo un rostro sereno y apacible:- Ambos perdimos…yo también te amo desde el primer momento en que te ví.

-Creo que eso te deja en una categoría mucho más alta.- le dijo sonriendo con picardía. Sakura abrió los ojos y lo miró curiosa y esperanzada:

-Qué clase de categoría?

Sasuke fingió pensarlo un segundo:- Supongo que encajas perfectamente en "El amor de mi vida".

Sasuke y Sakura se miraron fijamente antes de que sus labios se atrajeran como un imán. Ya no existía otra cosa más allá del deseo y el amor que sentían el uno por el otro. Con delicadeza el azabache se deshizo del sostén de la pelirosa, bajando su boca para besar sus pezones, los cuales se pusieron duros al poco tiempo. Sakura tampoco perdió el tiempo; se deshizo de un santiamén de la camisa oscura del Uchiha, de su cinturón y de sus pantalones. Él mismo se había quitado los zapatos y los calcetines.

Ahora estaban desnudos en la cama, medio envueltos en finas sábanas blancas. Sasuke pensó en que quedaban perfectas: reflejaban de alguna manera la pureza de la ojiverde que ahora se encontraba tendida bajo su cuerpo, temblorosa, sudorosa y ruborizada. La besó en los labios y de ahí descendió hasta sus pechos y su abdomen, dejando un húmedo rastro. Sin embargo, cuando intentó descender más la chica se lo impidió:- No lo hagas…no hoy.- "Hoy no"? Eso sonaba bastante bien. El chico esbozó una sonrisa torcida y se dirigió a devorar de nuevo los labios de la chica, acariciando con los dedos su zona más íntima mientras ella gemía y suspiraba, explorando con sus manos el bien formado cuerpo del Uchiha. Ella lo esperaba: esperaba la magnificencia de ese cuerpo atlético, delgado, equilibrado, de piel nívea…pero no podía dejar de pensar que era mejor de lo que jamás soñó. Sintió el miembro erecto de él presionar contra su abdomen, y no pudo reprimir un sonoro gemido.- Te quiero…dentro.

Sasuke no respondió: estaba muy húmeda, lista para recibirlo. Se incorporó un poco para acomodarse y, con deliberada lentitud, comenzó a penetrarla. Cuando tocó la prueba de su virginidad, sonrió mientras la rompía haciéndola por fin suya:- Eres mía…-le susurró al oído mientras terminaba de adentrarse en ella. Sakura se arqueó de placer, tratando de obtener de él todo lo posible:

-Siempre…-le respondió sonriente, sintiendo el lento vaivén del chico dentro y fuera de ella. Sasuke soltaba roncos gemidos mientras ella no paraba de gemir agudamente y gritar su nombre. La danza aumentaba de ritmo, ella se acopló perfectamente a sus movimientos pensando en la perfecta manera en que encajaban. Poco después sintió como sus paredes se contraían, atrapando el miembro del azabache. Él sintió el orgasmo de la chica, y se vino poco después dentro de ella. Se quedaron tendidos hasta que sus respiraciones se tranquilizaron, y entonces se incorporó abandonando su pequeño y curveado cuerpo para cerrar la ventana. Cuando se giró la vio envuelta en las sábanas blancas, observándolo con detenimiento y curiosidad, examinándolo:- Te gusta lo que ves?- le preguntó sínicamente, conociendo de antemano la respuesta.

-Mucho- le respondió sonriendo con una infantil inocencia. Luego le tendió los brazos para que se uniera con ella.

Sasuke solo sonrió; esa sería la primera de muchas noches que estarían juntos, de todas las noches que les quedaban por delante.

Fin

Bueno, eso es todo, jeje ^///^

Muy pervertido? Espero que no.

Les gustó? Me merezco un review?

Si es así, me encantaría leer sus opiniones..!!

Ruichi-chan, cambio y fuera..!! ^.^

VIVA EL SASUSAKU..!!