Naruto no me pertenece y este fic no es con fines de lucro.

Personajes: - parlamento –

Narración: normal

Pensamientos o Inner: (paréntesis y negritas)

Flash back y re saltaciones: cursiva

Comentarios de autora: (paréntesis)

Fin o cambio de escena: *****************[][][][][][][][][]

Un Vecino poco agradable.

Capitulo 1: Un nuevo vecindario.

Pi. Piii. Piiii. Pii. Pii. pii……….

Odiaba ese sonido, el sonido de mi tonto despertador por la mañana. Lenta y perezosamente estire mi brazo para poder apagar el frustrante aparatito, que tanto me desesperaba cada mañana. Me levante despacio, que día era? A si! Era lunes, debía apresurarme o llegaría tarde, y yo Sakura Haruno no tenía permitido llegar tarde.

Aun con algo de sueño presente, me levante de la cama, y busque a tientas el baño, debido a que aun tenía los ojos cerrados por el sueño, en el camino me tropecé con lo que debía ser la ropa que llevaba puesta el día anterior, y me tuve que sostener de la cama para no caer, al fin localice la puerta del baño, de adentre y después de echarme un poco de agua fría en la cara, estaba lista para un nuevo día.

Levante la ropa que anteriormente estuvo a punto de hacerme caer, y abrí las cortinas para dejar pasar un poco de luz a mi habitación, pude observar como los vecinos salían a hacer sus actividad cotidianas. Era un buen vecindario. Apenas me había mudado en día anterior a esta pequeña casa, no era muy grande pero no muy chica, mi padre me había ayudado a conseguirla y es que era simplemente perfecta, como no era muy grande no me costaba hacer la limpieza y además estaba cerca de mi trabajo. Estaba en una colonia llena de jardines y arboles, sin mencionar que había de todo cerca, lo cual me facilitaba las cosas.

Y es que, yo ya no quería vivir con mis padres, no es que no me agradaran, pero necesitaba mi espacio, entonces apenas lo dije mi padre busco un lugar donde me pudiese sentir cómoda y claro que no estuviera muy lejos de ellos. La mudanza del día de ayer me había dejado agotada, porque aparentemente tenía más cosas de las que yo pensaba.

Me dirigí a mi closet y saque las ropas del día un pantalón de vestir negro y una blusa roja de botones, acompañada de unas zapatillas de igual color de taco bajo y me metí al baño dispuesta a tomar una relajante ducha, 15 minutos después Salí vestida y lista.

Mientras me secaba mi larga cabellera de un exótico rosa pálido, encendí la cafetera y metí un par de tostadas al horno, me cepille el cabello, me tome mi improvisado desayuno, tome mi maletín con las cosas de mi trabajo y monte mi volvo color rojo obscuro, en camino a mi trabajo a las 7:00 en punto. Hoy sería un buen día. (Que ingenua pensé al llegar ese día por la noche)


Llegue a mi trabajo y de inmediato me encontré con Ino, ella era mi amiga, la mejor, siempre había estado para mí y yo para ella, así que cuando ambas empezamos a trabajar en la misma empresa, nos volvimos aun mas unidas si es que era posible, yo había estudiado mercadotecnia y ella administración de empresas, ambas trabajábamos en LadyHand una revista para mujeres.

- valla frentona! Temprano como siempre- anuncio la rubia con arrogancia.

- pero que sorpresa! Tu siempre llegas tarde, a que se debe que estés tan temprano por aquí cerda?-

- Tsunade me pidió que terminara, unos pendientes, así que aquí me tienes- me respondió con fastidio.- ha! Y dice que te quiere ver en su oficina, ammm si ahora mismo.

Y sin más Salí disparada hacia la oficina de mi jefa, ella era muy estricta con la puntualidad, y aunque nos llevábamos bien, cuando de trabajo se trataba, Tsunade era todo un ogro.

.

-Tsunade me has llamado?- pregunte inmediatamente al entrar.

Pero lo que me encontré fue algo totalmente distinto a lo que esperaba, ahí se encontraba mi mentora, mi jefa, con los ojos hinchados y rojos, los puños cerrados sobre su escritorio, y tenía la mirada más triste que jamás le había visto.

- Sakura, pasa y cierra la puerta.

- Tsunade que ocurre?- no pude evitar sonar preocupada.

- jiraiya me dejo. – dijo para después ponerse de pie y mirar hacia la ventana, mirando a un punto fijo.

No pude evitar mirarla con tristeza, bien si Tsunade era mi jefa, también era mi amiga, y varias veces había tenido peleas con ese viejo rabo verde, con quien estaba comprometida, y aunque era un pervertido, flojo y mantenido, de alguna manera un tanto masoquista Tsunade le tenía cariño. Siempre pensé que ella en algún momento se daría cuenta del tipo de hombre que era y lo dejaría, y no al contrario.

- quieres hablar sobre ello?- me acerque a ella, intentando consolarla.

- bueno no hay mucho que decir, me dijo que se iba, que necesitábamos salir con más gente, y que me podía quedar con el anillo, que solamente me podía ofrecer su amistad, y que tomo esta decisión por mi frio carácter, y que su alma era libre y yo lo ataba con tanta responsabilidad. – cerré los puños con fuerza, ese desgraciado ya me las pagaría.

- Tsunade, sabes que esto pasaría, si no era él, serias tú la que terminaría con todo esto, vamos, tu eres una mujer fuerte, bella, y exitosa, y él bueno- medite las palabras- un vago, rabo verde. De alguna manera, esto no funcionaria, lo sabes cierto?-

- solo esperaba un poco más de tiempo, yo solo quería que durara mas.- dijo cerrando los ojos, dejando que una lagrima se escapara.

- no! No puedes hacerte esto, no puedes apegarte a algo que no tiene futuro,- suavice mi tono- mira la gente es inestable, la gente no está ahí de por vida, y tienes que aprender a no apegarte tanto, y ahora que vas a hacer?-

Me miro confusa, levante un dedo cerré los ojos y con una sonrisa mencione- yo te diré lo que harás, tu seguirás adelante porque eres Tsunade senju, la editora de una gran revista, y la mujer más valerosa que jamás he conocido. – y es que era cierto, Tsunade era emprendedora y temible, nunca dudaba y siempre tenía la cabeza en alto, mas siempre supe que su única debilidad era jiraiya, y ahora que él no estaba, Tsunade solo tenía que seguir mirando al frente. Me miro y sonrió, se limpio las lágrimas y se sentó en su escritorio.

- arigatou Sakura, yo, no sé qué haría si ti.- sonreí, y ella me devolvió el gesto.

- bueno es hora de irme aun tengo trabajo que hacer,- di media vuelta y me dirigí a la puerta,- las campañas publicitarias no se haces solas, desafortunadamente- solté la ultimo en un susurro antes de salir de la oficina.

Mi día cada vez se iba poniendo cada vez más amargo, después del drama con Tsunade, me atiborra aron con trabajo, estuve como loca todo el día, no tuve tiempo ni de almorzar, más que unas galletas que saque de la máquina de golosinas. Y tuve un desagradable encuentro en el elevador con kabuto, ese pedante era también parte del área de mercadotecnia, pero el hecho de que no me agradara no era porque era competencia, no. Era porque el desgraciado en más de una vez había despreciado mi trabajo, por el simple hecho de que había sido elaborado por una mujer. Y eso me hacia despreciarlo.

Al fin termine mi turno y dispuesta a ir a mi casa a comer una buena cena, y después dormir plácidamente hasta el día siguiente, se vio ofuscada con la idea de Ino de ir a un club nocturno.

- tienes que estar bromeando, es lunes Ino! Lunes!- dije enfatizando el día, temía por mi bienestar físico y mis horas de sueño.

- hay vamos Sakura será solo un rato- mi rubia amiga me imploraba que la acompañara, ponía cara de cachorro, pero necesitaría mas que eso.

- no. Y es mi ultima respuesta, mira Ino eres mi amiga, y te quiero pero a veces tus ideas son, bastante inoportunas, no puedo con mi propia alma, estoy que muero de hambre y sueño, dejémoslo para otro día, si?- implore con lo que me quedaba de humor.

- ash! Bien será otro día- al fin dio su brazo a torcer y me dirigí a mi auto.

Iba calmadamente por las avenidas de la ciudad, cuando vi que mi cafetería favorita seguía abierta, y decidí que un cappuccino no me caería mal, para despejarme. Baje y pedí mi café, me senté en una mesa a esperar a que lo tuviesen listo. Obtuve mi café y cual niña pequeña sonreí al tenerlo en mis manos, di vuelta y jale levemente de la puerta para salir, lo siguiente que sentí fue un dolor en mi trasero, el cual había impactado contra el piso, y sentía un peso extra sobre mí. Afortunadamente mi café no sufrió daño, debido a la tapa que llevaba, pero la situación en la que me encontraba era bastante incómoda.

Y es que al mismo tiempo que yo tire de la puerta de la cafetería, alguien más la empujo, haciendo que yo cayera y ese alguien se fuera conmigo directo al piso, levante el rostro y me encontré con unos ojos negros, un rostro níveo, y una seria expresión . Yo estaba sentada en el piso y el, se encontraba arrodillado sobre un pie, y se sostenía con su mano izquierda, mientras quela derecha estaba apoyada en mi brazo para evitar chocar contra mí.

Me quede embelesada tan solo un segundo, ese hombre era tremendamente atractivo, y justamente cuando iba a soltar una disculpa lo oí – ten más cuidado quieres?- dijo con una voz ronca y varonil, pero con un claro gesto de molestia y desagrado, como si me hubiese aventado las palabras al rostro.

Fruncí el seño, me levante rápidamente, y le solté en la cara - tu deberías tener más cuidado- respondí con el mismo tono que él había empleado antes. Salí rápidamente y subí a mi auto (pero que arrogante) pensé entes de arrancar el motor y seguir mi camino a casa. (Vamos tienes que admitir que estaba para comérselo) fruncí aun mas el seño al oír las incoherencias de mi subconsciente, y respondí en voz alta- pero no deja de lado que obviamente es un tipo de lo más grosero- por fin llegue, metí el auto, y entre a casa, ese no había sido un buen día.

No tenía ganas de preparar nada, así que saque un ramen instantáneo, lo cual inevitablemente me recordó a mi hermano: Naruto ya que si por el fuese desayunaría, comería y cenaría ramen por el resto de su vida. Mi hermano ahora se encontraba lejos, en Venecia, donde estaba haciendo un doctorado, hace tiempo que no lo veía, y mi mudanza se la comunique por medio de un correo, realmente extrañaba a ese tonto rubio idiota. Deje los pensamientos de lado y me concentre en mi cena y la engullí mientras veía algo de televisión. Después me metí en mi pijama y caí en la cama, como un peso muerto, ya mañana seria otro día.


...

Levante mi brazo para apagar el ruidoso aparato sobre mi buro, pero no lograba conseguir que se apagara, saque la cabeza de entre las cobijas, y lo pude constatar, lo que sonaba, no era mi despertador, era más un ruido seco, pasaron algunos segundos antes que mi sentido común me dijese que alguien estaba llamando a la puerta.

Solté un gruñido, y me levante, era aun más temprano de lo que me solía despertar, al ver que el sonido no cesaba, abrí la puerta, y me encontré con una joven rubia, calcule de inmediato que no debería ser más grande que yo, al abrir me miro de una manera muy graciosa, cuando me hice hacia atrás y note reflejado en un espejo, que mi cara demostraba, clara señal de "me acabo de levantar, estoy más que despeinada, y tengo baba en una de mis mejillas"

Sonreí al verme, y voltee a ver a la mujer que también me miraba divertida.

- lo siento, veo que te he despertado, pero quería venir a darte la bienvenida al vecindario, mi nombre es Temari.- dijo al mismo tiempo que me tendía una canasta de galletas.

- no te preocupes- sonreí abiertamente- muchas gracias, se ven deliciosas- dije mirando directo a la cesta.

- si las hice esta mañana- dijo mostrando una gran sonrisa- mi casa es aquella, me dijo, señalando directamente la casa que estaba enfrente mío, al otro lado de la calle.

Por breves instantes reaccione y me di cuenta que no me había presentado- Oh! Lo siento, mi nombre es Sakura- dije tendiéndole la mano, un tanto torpe.

- mucho gusto Sakura- dijo atrapando mi mano en un apretón- espero nos llevemos bien, cualquier cosa que se te ofrezca, sabes dónde encontrarme. – dijo soltando mi mano- hasta luego- y sin más se fue, no cerré la puerta hasta ver que ingresaba a su casa.

Deje la canasta de galletas en la mesa y puse a preparar un café, Temari me había levantado, 2 horas antes, así que ahora tenía bastante tiempo para arreglarme, y desayunar. Tome mi café con pereza esperando que la cafeína hiciera efecto, y pensé, Temari se veía una chica bastante agradable, era bueno saber que tenía una buena vecina, después le llevaría una tarta de frutos rojos, en agradecimiento por las galletas. Entonces vi la canasta y la abrí, tome una galleta y la probé. Si definitivamente le llevaría una de mis famosas tartas en agradecimiento, las galletas estaban deliciosas.

Pasaron alrededor de 30 minutos cuando mi puerta volvió a ser tocada. Yo ya estaba cambiada y peinada, bueno, me veía mucho mejor que cuando recibí a Temari. Y dejando las cavilaciones, abrí la puerta, encontrándome con una pareja, - buenos días- articule de inmediato-

- buenos días mi nombre es Kurenai y el es mi esposo asuma. – Dijo presentándose cortésmente,- vivimos al lado, dijo señalando sobre su hombro izquierdo, el cual era mi derecha.

- mucho gusto, mi nombre es Sakura- dije finalmente

- bueno Sakura es un placer, cualquier cosa que se te ofrezca puedes venir a nuestra casa a pedirla, Kurenai está todo el día así que siempre habrá alguien que te reciba- dijo asuma, que por alguna manera me recordó mucho a mi padre.

- arigatou. Lo mismo digo, no duden en venir si necesitan algo, por el día no me encontraran, pero en las mañanas y las noches aquí me encuentro- dije amablemente.

- bueno nos vemos mucho gusto Sakura- dijo Kurenai, cuando ya se dirigían a su casa. Cuando cerré la puerta, sonreí imperceptiblemente, este era un lindo vecindario. Apenas cerré la puerta y alguien volvió a tocarla.

Abrí la puerta y encontré a una joven, de mirada suspicaz, y vestida de una manera un tanto, exhibicionista.

- Hola!- me saludo energéticamente, -vivo enfrente- me señalo la casa junto a la de Temari. – puedo pasar?- me hice a un lado para que pasara.

- mi nombre es Anko- dijo cuando se sentaba en mi comedor, muy cómodamente- vi que Temari, asuma y Kurenai vinieron a saludar, así que dije porque no?- esta chica era muy parlanchina, era mayor que yo, fácil unos 7 años, no es que yo estuviese muy joven, a mis 21 años, yo no podía decir que el mundo se me hacia viejo, pero Anko era mayor que yo, y debía admitir que era una chica atractiva.

- mi nombre es Sakura- mencione a primer momento de silencio.

- mucho gusto Sakura!- me dijo al mismo tiempo que me abrazaba efusivamente.- bueno bienvenida al vecindario!, bueno yo sé mucho de la gente que vive aquí porque soy la que más tiempo lleva en este lugar, ammm veamos- se puso una mano en el mentón dando a entender que estaba pensando- empecemos con Temari!, es una chica, yo diría que son de la misma edad, ella es agradable, aunque casi no está en casa entre semana, ella es abogada. Y no ha tenido ningún novio formal hasta ahora. Kurenai y asuma, se mudaron hace unos 2 años, son una pareja bastante aburrida, supongo que por la edad, tu sabes son los mayorcitos de la calle, asuma trabaja todo el día, el es arquitecto, y Kurenai bueno ella es ama de casa.- dijo todo explicándome un poco de la vida de mis vecinos, entonces lo comprendí, Anko era la cotilla del vecindario, era la más animada, y la que se enteraba de todo.

Yo soy dueña de una tienda de licores, es muy grande y me va bien, y dime tu a que te dedicas?- dijo parando al fin, para lo que supuse sería algo llamado "respirar"

- yo soy publicista, en realidad diseño, trabajo en ladyhand, la revista para mujeres- dije explicando brevemente-

- y dime tienes novio?-

- no por el momento no-

- mmm que lastima eres una chica bonita, bueno yo tengo un novio, se llama kakashi. – kakashi? Ese nombre lo había oído ya, pero donde? Y entonces como un flash de fotografía lo recordé. Kakashi era el nombre del hermano de Tsunade.

- kakashi senju?- pregunte para aclarar mis dudas

- si! Ese!, lo conoces- acerco su rostro, y me miro con duda.

- sí, veras, yo trabajo para Tsunade senju, su hermana, y lo había visto antes- dije rápidamente

- a si! Tsunade!- dijo mostrando una sonrisa – ella es la editora no es cierto?- solo asentí con la cabeza.- bueno me agradas Sakura! Nos llevaremos bien ya lo veras. He me tengo que ir, dijo mirando su reloj de pulso.

- abrí la puerta y me despedí- he! Anko!- grite llamando su atención- no sabes nadie de la persona que vive ahí?- dije señalando la casa de al lado, pero de mi lado izquierdo, esa mañana me había entrado curiosidad, había visto un par de veces un auto estacionado ahí, pero nunca a quien vivía ahí.

- ah! Ahí vive un muchacho muy atractivo, me parece que es soltero, pero casi nunca está en su casa, solo en las noches y se va muy temprano, no te pudo decir mucho, nunca he entablado una conversación con él, solo le conozco de vista.

-! Está bien, gracias por tu visita Anko- dije finalmente para despedirme. Cerré la puerta y mire mi reloj de pared. Fruncí el seño y volví a soltar un bufido. De nuevo se me hacia tarde. Pero había valido la pena, había conocido a mis vecinos, o casi a todos ellos.

De nuevo me prepare un rápido desayuno, me peine, me maquille levemente, y monte mi auto, directo al trabajo.

- he frentona- Ino como siempre me saludaba, con esa tan característica voz, suya, la más escandalosa que yo conocía. Yo normalmente era una persona, seria, callada, cortes, un tanto tímida, y sonriente. Pero cuando me enojaba, yo era de armas tomar, y eso lo sabía bien Ino, y es que ella le encantaba, sacarme de quicio. Lo cual alentaba mi bipolaridad.

- cerda!- que milagro mira que llegar temprano 2 días seguidos es todo un logro en ti.

- mmm ni me lo recuerdes, últimamente he tenido trabajo de mas! Necesito unas vacaciones saku!- dijo haciendo una de las más inocentes caras jamás vistas.

- tú siempre necesitas vacaciones cerda- dije burlona, si, a mí también me gustaba fastidiarla de vez en cuando.

Ino me miro con el seño fruncido, pero rápidamente cambio su expresión por una ya muy conocida era la expresión del "que crees que paso Sakura".

- he frentona!, ayer decidí si ir al club ese, y adivina.

- solo dime que paso.

- pues conocí a un chico mega lindo!!- dijo al momento que le brillaban los ojos de una manera ridícula, tuve que aguantarme las ganas de reír ahí mismo.

- y bien?

- y bien que frentona?- pregunto "inocentemente"

- cuál es su nombre, como es, y cuando le romperás el corazón?- si a mí también me gustaba el cotilleo, como a cualquier mujer.

- bueno se llama Sai, es atractivo, y…… él es el indicado, ya lo veras durare con él. – dijo asumiendo una pose de victoria.

Solo mire a mi amiga con incredulidad, y es que su historia de conquistas, se reducía aun mes de noviazgo y después los cortaba, con cualquier pretexto estúpido, los bloqueaba, y no volvía a hablar de ellos.

Fue después de eso que me di cuenta que me había entretenido mucho con la cerda de mi amiga, y me despedí, sin antes decirle que a la hora del almuerzo nos veríamos de nuevo.

Llegue a mi oficina, y note la montaña de papeles sobre él, suspire con cansancio, y me dedique a hacer mi trabajo del día, debería apresurarme, porque Tsunade, se pondría histérica, si no quedaban los diseños de las paginas, antes de las fechas de impresión.

.

Levante la vista y vi a 2 chicas del área de contabilidad esperando a que les diera el paso.

- adelante, saben que no tienen que tocar, Hinata, Tenten. – dije sin despegar mis ojos de los diseños de las posibles portadas.

- gomen Sakura- se disculpo la ojiperla.

- he vamos Hinata no seas tan educada!, -dijo la castaña mientras le daba una palmada en la espalda- he Sakura venimos a entregarte el reporte de presupuesto para que lo revises de acuerdo a lo que necesites, y cuando lo tengas listo se lo llevaremos a Ino, para que lo entregue.

Nosotras nos conocimos cuando empecé a trabajar en la revista, y nos llevábamos muy bien, ellas 2 eran bastante agradables, Tenten era amistosa y alegre, y Hinata era tímida y responsable. En más de una ocasión nos habíamos ido, Hinata, Tenten, Ino y yo a tomar después del trabajo, e incluso incluíamos a Tsunade, en alguna de nuestras reuniones, éramos todo un grupito de cotilleo.

Dejaron su reporte, se fueron, Y seguí con mi trabajo…..

Cuando al fin llego la hora de la comida.

Quede de verme con Ino en un pequeño restaurant, enfrente de la oficina, llamado le raviolly, donde vendían muy buena comida italiana, entre al local, y divise la rubia cabellera de Ino, junto con la de Tenten y Hinata, llegue y me senté tranquilamente.

- llegas tarde frentona!- me incrimino Ino.

- lo siento es que he tenido mucho trabajo, hasta el cuello.

- si nosotras también, no dejan de llegar cuentas, y pagos y bla bla bla- decía Tenten mientras Hinata asentía cansinamente.

-últimamente el trabajo ha estado más que pesado- suspiro Ino. Y todas nos quedamos pensando en la pila de trabajo que se acumulaba mientras hablábamos.

- Sakura y como te fue con la mudanza?- menciono Hinata quedito.

- a pues maravilloso!! La casa es muy linda y el vecindario también. Hoy ya conocí a varios de mis vecinos.- dije con entusiasmo.

- y dinos algún vecino guapo y soltero?- inquirió Ino.

- pues aun no conozco a todos, hoy conocí a una chica rubia, que vive enfrente, se llama Temari y es muy agradable, además hornea unas galletas deliciosas. También conocí a una pareja, llevan casados ya mucho tiempo y son personas muy amables, ha! Y también a Anko es la cotilla de la calle, ya saben la que se entera de todo, se fue a presentar y aunque es muy parlanchina me agrado bastante, y además está saliendo con kakashi senju, el hermano de Tsunade.

Todas denotaron sorpresa por lo ultimo- pero que pequeño es el mundo no crees?- comento Tenten.

- ha y también parece abre un chico que vive al lado, pero aun no lo conozco, Anko m comento que casi no se encuentra en casa, y a decir verdad aun no lo he visto.

- y es guapo?- Ino seguía insistiendo en el sex appeal del vecino. ( haha Ino! xDD )

- según Anko si, que es muy atractivo.- dije indiferente- pero aun no lo conozco.

- nos alegra que estés muy Feliz con tu casa Sakura- Hinata me regalo una de sus más sinceras sonrisas.

- si! Algún día habremos e ir y conocerla!- Tenten amaba organizar las reuniones, y nosotras no teníamos inconveniente alguno.

- claro, solo esperen a que termine de desempacar todo.-

-aun no terminas?- pregunto Ino

- no, pero solo me faltan unas cuantas cajas, no es mucho a decir verdad. – dije mientras agitaba mi mano, quitándole importancia.

Y nos dedicamos a disfrutar de unas deliciosas pastas, para después, regresar al trabajo.


Al fin me dirigía a casa, después de la comida, hubo una reunión, rápida en la que se decidieron algunos detalles finales para la edición, finalmente deje todo listo, y después de ir a tomar un trago con las chicas, decidí volver a casa.

Estacione mi auto, y pude notar que, en la casa de al lado, se encontraba el BMW negro, que había visto con anticipación, en aquel lugar, era obvio que esta vez el vecino se encontraba en casa, pero me sentía morir, así que decidí dejar las presentaciones para otro día, de igual forma, algún día me lo debía topar no?

Entre deje mi abrigo y mi maletín en la mesa de la entrada, y me fui a cambiar, me puse mi pijama, y me dispuse a preparar, un poco de arroz con carne para cenar, cuando alguien toco a mi puerta. Se me hizo bastante extraño, ya que era algo noche, así que con algo de curiosidad decidí ir a abrir la puerta. Pero cuando la abrí casi me desmayo de la sorpresa.

- na- Naruto? – articule después de unos minutos de labor mental.


To be continue…

Eh! Qué tal? aquí empezando a escribir mi segundo fan fiction…

Esta vez decidí un universo alterno, no suelo leer mucho esos, pero un día mientras cenaba algo, se me ocurrió esta historia, espero y sea de su agrado, como verán, es muy evidente que Sasuke es el vecino misterioso, pero el hecho de que ambos se conozcan tendrá que esperar un poco.

Iré incluyendo más personajes en la historia con el tiempo. Me gustaría saber su opinión sobre esta nueva historia, así que no duden en dejarme un review! También si tienen alguna idea respecto al fiC, díganla y pensare seriamente, ella ;D

Saquuchiha.