Disclaimer! Los personajes de Naruto, lamentablemente, le pertenecen a Kishimoto-sensei. Solo me queda mi imaginación y esta historia.

«Everyone so lonely»

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Hinata se encontraba sentada sobre el pasto verde oscuro mirando, con sus ojos color perla, las estrellas estampadas en el manto azul oscuro del cielo, el cual parecía el fondo de un mar que se encontraba por encima de su cabeza. La luna estaba como siempre, plateada con la sensación que le causaba a Hinata de estar fría rodeada de soledad y oscuridad, tratando de brillar entre todo ese manto negro. Pero en esos momentos su cabeza estaba en un flash de recuerdos con los últimos sucesos de su vida en la aldea.

"- No por favor… Hanabi-chan resiste… - sollozó Hinata mientras trataba de sacar el cuerpo de su hermana menor entre los escombros de madera.

- Onee-chan ayúdame… ¡Ittai! – lloraba Hanabi sin parar. Sus ojos estaban ya rojos de lo mucho que lloraron y su rostro ya estaba bañado en lágrimas cristalinas–. Duele mucho…

Los escombros estaban aplastando su cuerpo con mucha fuerza. Sus piernas estaban durmiéndose poco a poco mientras que su abdomen se contraía con dificultad y sus pulmones estaban sin muchas posibilidades de moverse, los viejos moretones más lo que les había aparecido con la caída de una vieja choza con la cual choco fuertemente y calló todo sobre ella, pero esos dolores eran superados por otro proveniente de su espalda. Un pedazo de madera se había incrustado en su espalda rozando su columna vertebral y mientras más Hinata trataba de moverla, más rozaba con su columna pero mientras más tiempo siguiera allí debajo de todos esos escombros, la madera se hundiría más en su espalda. Ya lo sentía, el liquido frío salía de su herida y resbalaba por su piel delicada mientras que al mismo tiempo teñía su remera violeta viejo en un tono más oscuro del que ya era.

Hinata trataba por todos los medios hacer a un lado los pedazos de madera pero algunos eran muy pesados. Su cuerpo ya estaba exhausto por la pelea y por sus esfuerzos por salvar a su hermana. Ella también estaba llorando, se sentía incompetente porque a pesar de sus esfuerzos, comenzaba a pensar que no la podría salvar. Su respiración estaba muy acelerada, ya sus manos estaban muy sudorosas al igual que su cuerpo, temblaba sin parar y su corazón ya estaba latiendo muy rápido que sentía como si quisiera salir de su pecho. Además sentía como partes de su cuerpo parecían latir, a causa de la sangre que circulaba a toda rapidez hasta las extremidades de ella.

Hinata dejo de hacer todo lo posible para salvar a Hanabi y calló de rodillas exhausta frente a su hermana con la cabeza gacha y su rostro comenzando a bañarse de lágrimas, otra vez.

Hanabi con mucho esfuerzo, alcanzó las manos de su hermana entrelazándolas con las de ella, las cuales estaban frías como la porcelana.

- Onee-chan no llores… - le pidió Hanabi suavemente mientras embozaba una sonrisa.

Hinata levanto la cara y miro a su hermana con tristeza. Se llevo su mano izquierda a su rostro pasándoselo por la frente para limpiar la traspiración.

- Aguanta hermana… ya pronto te sacare de allí solo que debo ver cómo – dijo Hinata conteniendo las lágrimas y mirando para todos lados en busca de una ayuda o respuesta para sacar a Hanabi.

Hanabi respiro profundamente y lo sintió. El dolor comenzó a desaparecer. Ya sentía el frio del callejón sin salida. Sus ojos perlas comenzaban a perder su brillo y su mirada comenzaba a oscurecerse. Sentía desesperación, tenía el miedo de ser olvidada, de que nadie la tuviera en cuenta. Siempre le tuvo pavor a eso. Pero ya nada se podía hacer, el momento había llegado.

- Jaja… - rió Hanabi y Hinata la miró–. Ya no vale la pena, ya no puedo ver Onee-chan.

Hinata la miró asustada. Hanabi sonreía sin más poder. Eso causó que otra vez este en ese estado de shock, de miedo de perder o no poder hacer nada. Comenzó a respirar rápido nuevamente y sus ojos parecían desorbitados, fuera de sí. Temblaba sin para otra vez.

- Hanabi-chan… n-no digas e-es-o no puedes… - tartamudeó Hinata. Se paró y otra vez comenzó con los esfuerzos por poder salvar a su hermana pero no pudo. Se agachó un poco para susurrarle: - no te preocupes ya pronto estarás bien, solo aguanta. – y siguió con las maderas.

Hanabi asintió con la cabeza y cerró los ojos.

Su final ya se acercaba. Tenia miedo. Miedo de no saber que pasaría una vez que ya… el no saber que pasaría en el mundo cuando ella… saber si alguien en el futuro se acordaría de ella. Un sentimiento nuevo, misterioso y aterrador la perforo en el medio del pecho. Una mezcla de desesperación con terror, miedo pero al mismo tiempo alegría por saber que ya nadie tendría que preocuparse por su bienestar, preocuparse por saber si ella estaba herida, si le pasaba algo. Ya su padre no tendría que renegar con ella por el entrenamiento y Hinata ya no tendría que vivir preocupada por ella, pensando que por su culpa tenia que entrenar como loca para ser la sucesora al mandato del clan Hyuuga. Sentía como su respiración se tornaba débil, el dolor inaguantable, partes del cuerpo que no sentía ya y su corazón tratando de latir pero era inútil, cada vez más latía menos.

- Ya queda poco por sufrir… - pensó Hanabi con alivio y miedo. Sonrió.

Hinata no sabía de donde sacar fuerzas. No podía mover nada. Se llevó sus manos a su cabeza y gritó. No podía ser tan inservible, no podía mover un sencillo pedazo de madera para retirar otro. Se enojó consigo misma y la desesperación comenzó a atormentarla. Comenzó a llorar.

- Gomene Hanabi-chan… no puedo… - sollozó Hinata.

Una brisa extraña la acarició y sintió como brazos la abrazaban y labios rozándoles el oído. Por un instante sintió paz, como si alguien trataba de hacerla sentir mejor. Se volteó para atrás pero no había nadie."

¡Hola, hola!

Bueno, seguro que algunas se habran dado cuenta pero esta historia ya la había publicado anteriormente en mi vieja cuenta aquí pero como me comencé a dedicarme a otras historias, borré todo lo de Naruto para hacerlo en una nueva cuenta.

Esta historia tiene formato de viñetas, así que los capis serán cortos.

Espero que les guste, dejenme saberlo a través de reviews.

~Maru-sempai