Disclaimer: Naruto ni sus personajes me pertenecen, todos pertenecen a su autor, Masashi Kishimoto.

Summary: Cupido pensó en el mejor castigo para alguien como él, y lo decidió, mando a uno de sus ángeles más bellos a dictar la sentencia. Sin duda alguna Uchiha Sasuke ya no tenía el derecho a ser amado, solo podría amarlo una persona y esa persona no iba a impresionarse de su físico, ni de su dinero o poder, nada de su exterior iba a conquistarla.

::

::

BELOVED

By: Yunmoon

.

.

Capitulo 1

::

::

Prologo

Si debía de aceptar la verdad, pues la aceptaba, estaba bien cabreado y exasperado, la chica seguía parloteando quien sabe que cosas y él ya estaba bien cabreado, sonrió con aparente calma y le tomo suavemente del brazo.

-Tienes razón, soy un desconsiderado, ¿y sabes que? También soy un imbécil y un arrogante sin contar que me importa muy poco maltratar a las mujeres, ahora lárgate, estúpida-.

La empujo fuera y cerró la puerta, maldita sea, era la ultima vez que salía con morenas, esa chica era guapa, de piel clara y un impresionante cabello negro, era preciosa, pero era jodidamente exasperante, molesta, anticuada y boba, como si se fuera a casar con ella, ya quisiera.

Se acerco al mini bar de su departamento y tomo una copa y una botella de whisky, ya estaba enojado, así que solo se emborracharía un rato y luego haber que pasaba, se tomo la primera copa y para la segunda ya estaba calmado, en la sexta ya estaba feliz y para la… no sabía cual ya estaba borracho, lo sabía, se conocía muy bien.

Se sentó, después de sentir su cuerpo tan relajado significaba que ya podía dejar de beber, se tambaleo hasta el mini bar y se tomo su tiempo para tomar una ultima copa, dejo el vaso y el whisky medio vacío y se acercó al sofá, se recostó de nuevo y esta vez cerró los ojos, una buena siesta era lo mejor.

Un rato, solo un rato.

Cuando se estaba quedando dormido escucho el sonido de unos tacones chocando contra el suelo, ¿sería de nuevo esa chica? Más le valía no haber entrado de nuevo o ya se encargaría de ella. Los tacones se detuvieron justo detrás del sofá, se exaspero, abrió los ojos y se sentó.

Oh, esa chica no era Kim, de eso estaba seguro. La chica que estaba parado frente a él no tenía el cabello negro y largo como el de Kim, ni sus orbes eran miel y su piel no era de ese tono semibronceado ni su cuerpo era como el de Kim, redondo y lleno de formas sexys.

Esta era rubia, un rubio platino que le daba un toque angelical, su cabello caía en cascada por su espalda hasta medio muslo, tenía la piel clara extremadamente clara, casi parecía brillas con la iluminación de su departamento, sus orbes eran de un color azul celeste, ni siquiera el cielo se veía tan puro como ese azul, y su cuerpo en vez de inspirar deseo inspiraba otra cosa, algo extraño, no deseaba tocarla y sentirla, solo admirarla bastaba para sentirse satisfecho, ni siquiera el vestido blanco, descaradamente suelto en unos lados y pegado en otros lograba inspirarle deseo, se sintió extraño y una paz lo inundo.

-Sasuke Uchiha, yo soy tu ángel mensajero por parte del señor Cupido, puedes llamarme Ino-.

Su voz lo hizo entrar en automático en estado de ensoñación, era como escuchar un cantico para dormir. La admiro más y aunque trato de separar la mirada no pudo.

-Hoy, me han asignado la tarea de juzgarte-.

Su voz, que era un cantico precioso, se escucho carente de vida, pero eso no le quitaba lo hermosa que era. Se levanto del sofá y ella rodeo el sofá hasta quedar de frente a él, sus ojos celestes jamás se apartaron de los del chico, lo miraban de forma profundo y enigmática, de la misma forma que él la miraba a ella.

-Tus pecados son los siguientes: Se te acusa de robar el amor de muchas mujeres, se te declaro culpable. Se te acusa de despreciar sus sentimientos de una manera cruel, se te declaro culpable. Se te acusa de jamás haber intentado amar a alguna de esas chicas, ¿cómo te declaras?-.

-Culpable-.

Soltó en automático, ¿qué rayos? ¿Por qué no había podido negarse?

-Bien. Se te acusa sobre todo de no haber disfrutado de todos esos bellos corazones, se te declaro culpable. Ahora, la sentencia-.

La chica alzo las manos y sintió algo extraño en el pecho, coloco la mano sobre el corazón y ella sonrió.

-De hoy en adelante ninguna chica te amara, no tendrás el derecho de que alguien se enamore de ti, porque no has cumplido la responsabilidad de enamorarte de ninguna. La chica que se acerque a ti lo hará porque sentirá pasión por ti, no habrá amor, no habrá sentimientos más que la pasión y el deseo-.

Algo extraño se adentro a él, fue como una luz celeste y cerró los ojos, sintió dolor y se doblo por el dolor, poco a poco volvió a erguirse, ella lo continuaba mirando, bajo los brazos y volvió a sonreír.

-Pero no te preocupes, tu corazón no va a estar solitario. El señor Cupido te dará una última oportunidad, tú sabrás como tomarla. En este mundo existirá una chica que va a ser capaz de enamorarse de ti, entre ustedes no habrá ese deseo carnal hasta que consigas conquistarla, cuando la sientas por primera vez sabrás lo que es hacer el amor. Hasta ese día volveré para felicitarte por haber encontrado a tu alma gemela. Adiós-.

Ella dio la vuelta y unas enormes alas adornaron su blanquísima espalda, pero ella se detuvo y dio la vuelta, un mechón de cabello salió de su sitio, pero ella solo sonrió.

-Se me olvidaba, un hombre sin amor, se vuelve un demonio-.

Y cuando el sentimiento de paz desapareció, el cayó al suelo en un profundo sueño.

.

.

Tenía la peor resaca del mundo, nunca había tenido una resaca como esa, nunca la había tenido, jamás la había tenido. Cerró los ojos con enojo, estaba realmente cabreado.

-¿Me esta escuchando?-.

Se sorprendió al darse cuenta que estaba distraído, eso no le pasa, casi nunca la pasaba, se tranquilizo pese al dolor y miro a la chica frente a él.

-Te escucho, Kanna-.

-Como decía, la venta del complejo en Nueva York a sido realmente buena. Pronto comenzara la época cuando los chicos salen de vacaciones y piden trabajos de medio tiempo, estamos haciendo la cuenta de cuantos trabajos podemos ofrecer-.

-Bien, te encargo eso-.

-Claro. Lo olvidaba, el presupuesto me lo ha mandado ayer el señor Itachi-.

-Sobre eso, mándame una copia sobre el presupuesto de los complejos de Tokio y Ginza, hemos tenido muchos problemas con ellos-.

-Claro, se lo mandare a su correo, ¿necesita algo más?-.

-No, ya puedes continuar con tus deberes-.

-Con permiso-.

La chica salió y se permitió deslizarse por la silla, el recuerdo del extraño sueño con la chica súper guapa seguía muy presente. Había sido un sueño muy real, le daba un poco de escalofríos, la resaca volvió y se sobo el puente de la nariz, estaba realmente fatigado.

La puerta se abrió tan fuerte que la causo un fuerte dolor en la cabeza.

-¡Teme! ¿¡Puedo irme por hoy!-.

-¡Por mi vete al carajo, imbécil!-.

-¡Eres un grandísimo mal hablado, idiota-Uchiha!-.

-¡Carajo, cierra la boca!-.

-¡Me largo, solo porque no quiero ver tu cara por hoy! ¡Prefiero ver la cara de mi adorada sobrina que la tuya, teme-amargado!-.

Tan rápido como vino el idiota salió, la cabeza le zumbaba tan fuerte soltó un grito de dolor y enojo, pero las palabras volvían una y otra vez.

-Era un sueño…-.

Se convenció por todo el día, hasta que al final lo creyó.

Todo había sido solo un sueño.

Yunmoon reportandose.

Queridos lectores del SasuSaku, Yunmoon vuelve con un nuevo proyecto.

Dentro muy en el fondo de mi este fic debó llamarse "Soulmate", pero este titulo no esta tampoco mal, me ha gustado y como casi no he visto este titulo he decidido que se llame así.

Agradezco todos los reviews que me han mandado, no tengo fecha para continuar con mis antiguos fics, puede tardar, pero deseo continuarlos.

Sin más que decir me despido.

Fin del reporte.