Tu Amante
Capitulo 1: MI EMPRESA… HANURO.
Mi nombre, Sakura Uzumaki; estoy casada desde hace 3 años con Naruto Uzumaki, mi mejor amigo desde la infancia… ¿lo amo? no… nunca lo he hecho. ¿Por qué me case con él? Era la única opción que me quedaba, él era la única persona que me quedaba. Después de que ambos perdiéramos todo, compartíamos nuestra soledad, nos acompañábamos y nos entendíamos como no lo podíamos hacer con cualquier otra persona. Él sabe que no lo amo, nunca le he mentido, y no tengo ninguna intención de hacerlo.
Naruto: Sakura ¿pasa algo? Estas demasiado pensativa amor.
Sakura: No es nada cariño, simplemente recordé a mi tía Tsunade, ha pasado mucho tiempo desde que murió, la extraño demasiado.
Naruto me abrazo como solo él sabía hacerlo, esa calidez que proyectaba era única, como si quisiera protegerme de todo lo que me hace daño, ese dolor de mi pasado que ni siquiera su amor podía desvanecer.
Naruto: sabes que siempre estaré contigo… te amo Sakura, no te dejare jamás.
Sakura: te quiero mucho Naruto.
No le mentía, nunca lo hacía, lo quiero demasiado más no le amo, él es mi familia, mi amigo e inclusive mi amante… era tal dulce y cuidadoso, tanta ternura con la que me trataba, como si fuera una frágil flor, era un amor tan delicado como apasionado, así era Naruto conmigo.
Sakura: hoy debo ir a la empresa de mi padre, parece que Ino necesita consultarme algunas cosas.
Naruto: está bien, te llevo, pasare a recogerte después, debo ir con el viejo Kakashi, parece que hay problemas en la ciudad de Konoha.
Konoha era la ciudad donde ambos nacimos, ahí fue donde conocí a Naruto, desde muy pequeños estábamos juntos. También es cierto que hace mucho dejamos Konoha y nos mudamos a la ciudad de la Arena, ocasionalmente Naruto visitaba a Kakashi por los problemas con los delincuentes, él trabajaba como agente especializado ANBU, una de las más poderosas ramas policiacas dentro de Konoha, Kakashi su mentor desde que ingreso a la academia, le quería y le tenía suficiente confianza. Yo no iba para nada a Konoha, sentía tanta rabia hacia esa ciudad que no hizo nada por detener al maldito de Madara… El asesino de mi familia. Lo único que me dejo de ellos fueron las empresas Hanuro, pero yo no me hacía cargo de ellas directamente, para ello contaba con Ino, mi mejor amiga y confidente.
Al llegar a la empresa me despedí gentilmente de Naruto, prometiéndole que cualquier dificultad que no pudiese soportar lo llamaría, como normalmente siempre lo hacía.
Tenten: Bienvenida señora Uzumaki.
Sakura: Gracias Tenten, pero no me digas señora, mejor dime Sakura no soy tan grande sabes.
Tenten: eso se le nota, es muy hermosa señora Sakura.
Sakura: Gracias Tenten, pero son solo Sakura basta; ¿sabes si Ino se encuentra en la oficina?
Tenten: si, se encuentra ahí esperándola.
Sakura: Gracias, por cierto si llega mi marido avísame por favor.
Tenten: Claro Sakura-san.
Subí por el ascensor hasta el último piso donde se encontraba la oficina de Ino y la mía, no solía ir a la empresa al menos que fuera realmente necesario, así que supuse que el problema al que se refería ella era realmente malo, al entrar a la oficina Ino se encontraba revisando algunos documentos, al verme hizo una seña para me sentara, sabía lo que significaba eso, no era solo un problema, era algo mucho peor.
Ino: tardaste en llegar
Me miro con sus facciones endurecidas, notablemente frustrada por no poder solucionar ese problema sin tener que llamarme. Pocas veces veía a Ino de esa manera, ella normalmente resolvía todo, y cuando lo hacía siempre era recibida con una sonrisa que podría tranquilizar hasta a la persona más nerviosa del mundo, con esa mirada tan cálida, sus ojos azules y su larga cabellera rubia la hacía lucir como un ángel guardia, y era mi ángel personal.
Sakura: sabes que nunca soy puntual, así que ve directo al punto. (dije seria esperando una respuesta clara de mi amiga, no me gustan los rodeos)
Ino: tenemos un problema financiero grave Sakura, él inútil de Kiba no se dio cuenta de que Gaara trabaja como espía para las empresas Uchia, y se aprovechó de ese descuido para vender un porcentaje de nuestras acciones a Sasuke Uchia, y no solo eso, sino que las acciones que vendió pertenecen a la parte de las empresas que posees en Konoha. Y por lo que se, los Uchia quieren todo lo que esté relacionado con Konoha, incluyendo tu empresa Sakura.
Intente razonar lo más rápido que podía esa información, si las acciones habían sido vendidas tenía que saber el porcentaje que había perdido y eso en que posición me dejaba con lo que había de empresas Hanuro en Konoha.
Sakura: ¿has intentado comunicarte con el presidente de las empresas Uchia?
Ino: claro que lo he intentado, por qué crees que te llame, el insiste que con la única persona con la que hará trato sería contigo, él dijo de forma muy clara que solo con un Hanuro arreglaría el asunto, y la única Hanuro que queda eres tu frentona.
Sakura: entonces tendré que recuperar esas acciones al precio que sea Ino, es lo único que me queda de mis padres y no lo pienso perder.
Ino: para empezar, debes conocer a Sasuke Uchia, es un joven empresario, tiene 28 años, su única familia es su hermano mayor, Itachi Uchia, heredo las empresas Uchia una vez que su hermano decidió que ese no era su destino, es un hombre responsable y un tanto obstinado, soltero por supuesto, y el también nació en Konoha, sus padres murieron misteriosamente al igual que los tuyos.
Sakura: ¿Y esa es razón suficiente para que este obsesionado con mi empresa en Konoha?
Ino: claro que no frentona, seguro que hay más, pero eso tendrás que averiguarlo tú misma.
Sakura: ¿Sabes cuanto fue lo que se perdió de acciones de esa empresa?
Ino: parece ser que del 70% que poseías te has quedado solo con el 35%, quedando en la misma posición que el Uchia, los dos son los dueños mayoritarios de la empresa en Konoha.
Sakura: siendo así no tengo opciones, realiza una cita para ver al tal Uchia mañana después de medio día.
Ino: tendrás que ir sola, ni Naruto ni yo podremos acompañarte.
Sakura: no tengo miedo de un niño mimado que juega a ser el jefe Ino, estaré bien, no te preocupes.
Eso me decía yo, no conocía nada de los Uchia, lo poco que llegue a escuchar de niña es que eran algo así como una raza superior en Konoha, que nunca había que meterse con ellos, que eran los peores enemigos que podrías encontrar hacían que perdieras lo más importante en tu vida, te destruían por completo, pero yo, ya había perdido todo como para sentir miedo de un mito.