-Siempre has sido una verguenza Hinata.- dice con un tono de afirmacion.
Si ya lo sabia, siempre el era el unico en recordarmelo y nunca me dejaria de destregarlo en mi cara ni ahora ni nunca ni en esta vida ni en la otra, estamos frente a frente y bajo la mirada con miedo de que pasara algo que no queria y sucedio. Me dio una bofetada, pense que me daria un golpe en uno de mis puntos de chakra pero fue una bofetada y me dolio mas que nunca, hubiera preferido una y mil veces un golpe con el puño suave que esto, su cuerpo y fuerza era mucho mas grande lo que me hizo caer y lo mire desde abajo tirada y tocandome la mejilla por el ardor y el dolor que sentia en ella.
-¿Por que no eres como Hanabi? -otro golpe psicologico, la comparacion, que nunca entenderia que soy diferente a Hanabi-nechan, pero como quiera yo fui la que cometio el error asi que debo disculparme.
-Perdon Otou-san, no era mi intencion...
-Nunca ha sido tu intencion.- me miro con desprecio, mi propio padre. Aveces pienso... no mi ojos...- Que debil eres.
Y asi salio indignado del lugar dejandome tirada en el suelo llorando con la mejilla roja por el golpe, con mi corazon hecho trisas y mi autoestima por los suelos.
-Hinata-chan.- si esto es penoso ahora mas, mi mejor amigo esta en la puerta viendome en este estado.
-Shino-kun, esperame... ya... salgo.
Ahora tenia entrenamiento, se me habia olvidado, este enfrentamiento con mi padre hizo que todo se me olvidara, me acomode la ropa y en vano limpie mis lagrimas, trate de no verme tan mal pero no fue algo sencillo ni exitoso.
-¿Que paso?
-Se.. molesto.. fue mi culpa.
-¿Que hiciste?- siempre tan directo.
-Esto... me equivoque en la ceremonia del te.
-Es estupido, tienes 13 años no puede ser tan exigente.
-No... importa... aprendere.
Sonrio y el ya no dijo nada, sabia que no me haria cambiar de opinion, caminamos y encontramos a Kiba-kun y Akamaru-kun de ahi pasariamos a los campos de entrenamiento para ver a Kurenai-Sensei, como siempre mi amigo castaño tan perpicaz noto mi estado y platicamos del tema, se quejaban que mi padre era demasiado exigente, tal vez era verdad pero yo seria la que heredaria el Clan Hyuuga asi que tenia que se la mejor de la familia.
Mi vida pasa por mis ojos y solo veo los fracasos tal vez... no sea la mejor candidata a ser la heredera, pero algo llama mi atencion unos ojos que me miran desde lejos y es Neji-oniisan, pero aparta la mirada y se va, me entristece pensar que me odia aun.
-Rapido Hinata-chan llegaremos tarde.- dice Kiba-kun
-Si.- respondo mientras empezamos a correr por las calles de Konoha.
Despues del examen chunin Neji-niisan ha sido instalado en la casa para ser entrenado con nosotras y la verdad que es muy poderoso, Hanabi-nechan tambien lo admite, mi padre esta totalmente extasiado por que este con nosotros y no en contra de nosotros, para mi aun es dificil verlo ya que siento que aun me guarda resentimiento y que me odia pero trato de mejorar y demostrarle que no soy un fracaso, aun que la verdad pierdo, tambien trato de sacarle platica pero con su seriedad y mi tartamudeo constante es algo dificil... aun que no me rindo.
-Hinata-chan.
-Na... Naruto-kun.- estaba frente mio con su sonrisa siempre tan amplia y linda, como podia ser tan perfecto siempre verlo, me pongo roja y retrosedo, miro a Kiba-kun que se burla con Akamaru-kun mientras Shino-kun solo nos mira y sigue caminando.
-¿A entrenar?
-S...si.- juego con mis dedos y me pongo aun mas roja, bajo la mirada para disimularlo.
-Bueno, solo les quiero avisar algo Shino, Kiba-baka y Hinata-chan.
Nos acercamos un poco por la curiosidad los cuatro, mientras el hacia como si fuera a susurrarnos algo, el acercamiento me puso tensa pero trate de pasarlo a segundo plano para poder saber lo que nos diria.
-Mañana me voy a viajar con Ero-sennin a entrenar... - grito asustandonos, pero cuando recapacite todo...
-¿Estas bien Hinata-chan?- la voz de Kiba-kun me levanto.
-Mi... cabeza... ¿que sucedio?- me pare, estaba recostada en un arbol con Akamaru-kun en mis piernas.
-Te desmayaste cuando Naruto dijo que se iba.
-¿Donde esta?
-Se fue, dijo que tenia que contarselo a los demas, estaba demasiado feliz.
Era verdad... cuando entendi lo que dijo mi mundo se vino abajo, ¡se iba! ya no lo veria por no se cuanto tiempo. Tal vez en ese viaje Sakura-chan y el se harian novios... todo mi dia era un fracaso, empece a llorar y me levante de golpe, no me importo si todos me veian, soy una niña que mas da, fui corriendo a mi casa llorando y me encerre en mi cuarto.
Este dia no podia ser mas horrible por que ya terminaria. Mañana Naruto-kun se hiria y tal vez ya se olvidaria de mi... pero tenia que ser fuerte por el clan, por mi orgullo, por que cuando llegue quiero que vea a una nueva Hinata tan linda como Ino-chan, tan inteligente como Sakura-chan y tan fuerte como Ten-Ten-chan. Seque mis lagrimas y saque una libreta donde puse mi meta... ahora ese era mi entrenamiento personal, mi meta, mi todo. Tendre que ser fuerte.
-Hinata-sama.- una voz masculina me asusto, estaba en la ventana. Neji, me miraba preocupado, me quite las lagrimas y sonrei o al menos un intento de ello.
-Ne... Neji-nii..san... se va...- tal vez no sabria a lo que me referia pero necesitaba ser escuchada.
-Lo se.- brinco de la ventana a el interior de mi cuarto y se puso delante mio. Por inercia corri y lo abrace buscando consuelo, el no repondio ante eso y no me molesto, tal vez aun segui enfadado conmigo pero en ese momento yo era egoista y llorar despues de unos segundos senti que me abrazaba tambien y eso si era algo que me sorprendio y me hizo llorar aun mas.
Ese dia perdi al amor de mi vida, el se iria lejos y gane un gran amigo, Neji-oniisan que me apoyo y desde ese dia entrenabamos juntos y la verdad aun que el no hablara para mi era mucho lo que hacia por mi y me ponia feliz.