John llegó a casa un poco tarde. No estaba esperando a nadie pero de todas maneras prefería estar en sus aposentos a horas más aceptadas socialmente.

Suspiró y arrastró la bolsa de comida rápida que compró hacia la cocina para cenar solo. Hacía tiempo que no consumía comida instantánea, pero bueno…es que esa sabe mejor en la soledad.

Pronto se sentó en la mesa y se preparó una sopa instantánea.

Recordó, la voz irritada de Karkat y un portazo que lo hizo llorar.

No falló en hacerlo romper en llanto de nuevo.

–"Karkat…¡Idiota!..."–

Con fuerza, dio un golpe en la mesa café con sus puños cerrados. Sus uñas estaban casi perforando la palma de su mano. No le dolía mucho por el callo que se había estado desarrollado al sostener su pesado martillo. Pero le molestaba algo por dentro, era su orgullo. ¿John Eggbert era orgulloso? Claro que sí. Sólo que nunca frente a los demás. Únicamente en el silencio de él mismo, el la soledad, podría admitirse como una persona orgullosa.

Tragó saliva y levantó la cabeza, tratando de mantener la poca compostura que Karkat le dejó desde que se fue el día de ayer.

Con los ojos mojados, abrió el paquete de sopa instantánea y lo llenó de agua para luego colocarlo en el microondas y programar los tres minutos que eran necesarios para su consumo.

Cruzó sus brazos y esperó.

Entonces fue que escuchó el sonido de una puerta que se abría. La azotaron, pisotadas apuradas se acercaban a la cocina.

John se irguió para recibir algo sorprendido a un Karkat que no lo veía a los ojos y que caminó hacia él.

–"k-karkat… ¿qué pas-?"–

Con un beso apasionado lo dejó callado. Se tragó sus palabras con sus colmillos filosos que jugueteaban con la lengua de Egbert. Las manos de Karkat lo rodearon hasta la espalda y la dejaron desnuda en cuanto John pensaba en qué decirle.

Se separó en cuanto pudo para tomar una bocanada de aire y hablar.

–"K-Karkat-"–

Él lo tomó de la barbilla y lo vio por un minuto a los ojos.

–"CALLATE…"–

Se fundió con los labios de John otra vez para continuar una de las sesiones de faje más intensas en su vida. Abrió un ojo para encontrarse con una mesa cubierta de bolsas con comida. Gruñó levemente para demostrar su descontento pero terminó siendo la cereza del pastel para la excitación de John siendo sus gemidos ensalivados, señal de una casi dolorosa erección que Karkat podía sentir chocando con su propia protuberancia.

Con una mano, tiró las bolsas al suelo y cargó a John de sus nalgas para luego tumbarlo de espaldas a la mesa.

El microondas entonces comenzó a pillar. John estaba demasiado ocupado para atenderlo, con las manos de Karkat sobre su pecho, su pene, sus piernas. John estaba siendo ocupado por alguien más.

De hecho, John estuvo demasiado ocupado toda la noche…hablando sin decir nada sobre la discusión del día de ayer. Karkat se disculpaba con pequeñas mordidas en el cuello, John aceptaba con gemidos.

En cuanto otras parejas preferían disculparse con pláticas largas y aburridas, Karkat lo llevaba al otro nivel mediante sexo de compensación.

Ya en la cama, después de haber pasado por cada mueble del departamento, John se acostaba boca arriba, suspirando después de la intensa acción de la noche.

Tenía que admitir que le encantaba que Karkat fuera un hombre de pocas palabras.


N/A:

Tenía que saber si todavía no perdía mi habilidad de hacer de una pareja absurda un fanfic (un poco) digno.

Así que hice esto. Y vaaaya que lo logré.

JohnxKarkat...djasflkdsa no sé porqué es tan...tan... pecaminosa esta pareja para mí.

–"Karkat, i am not a homosexual"– Tal vez porque trato con todas mis fuerzas apegarme al canon jaja.