Eres lo que buscaba

Inuyasha y todos sus personajes son propiedad de Rumiko Takashi, o al menos hasta que tenga mucha lana, y se lo compre, quién se une.

Chapter 1: Entrada al hospital

Era de noche iba conduciendo iba corriendo sin fijarme por donde iba, las lágrimas hacían que se me dificultara la vista, no sabía a donde me dirigía, sólo sabía que no quería regresar al lugar en donde rompieron mi corazón.

Empezó a llover era como si el clima y mis emociones se hubieran puesto de acuerdo, de repente veo una luz demasiado brillante, y luego todo se torno en oscuridad.

-Doctor, apresúrese no queremos perderlo- empezó a decir una enfermera, y se escuchó un pitido.

-Ya pude estabilizarlo, pero creo que cayó en coma- dijo el doctor con pesar- saben quién es este joven.

-Según el expediente su nombre es Inuyasha Taisho- respondió una enfermera.

-Se refiere al empresario Taisho de la compañía de modelaje, Taisho´s- dijo uno de los médicos, con una alta impresión.

-Pero ¿no se supone que se iba a casar?- preguntó la enfermera- según sé su prometida es una tal Kikyo Sukimoto, deberíamos hablarle.

-Sí creo que sería lo mejor.

-Buenos días- dijo una chica con cabellos azabaches, ojos color chocolate con una brillo que quien quiera que lo mirara sonreía, tez blanca, mejillas sonrosadas, y una eterna sonrisa.

-Buenos días Kagome- respondió un doctor llamado Miroku Kazana- es un lindo día para trabajar no crees- dijo mientras su mirada, se desviaba a una médico de cabellos castaños oscuros, al igual que sus ojos cafés como el roble, con una postura que demostraba fortaleza.

-En serio, hasta cuando no dejas de verla, deberías invitarla a salir de una vez

-Sabes que no puedo, cada vez que me acerco no puedo hacer lo que tú ya sabes- eso era verdad, él siempre tenía la mala costumbre de tocar el trasero de todas.

-Sí es verdad, pero ya llevas casi medio año con cara de perro a morir- ese Miroku, nunca lo había visto tan enamorado, desde que llegó esta Sango Hiraikotsu, no era el mismo.

-Bueno cambiando de tema, te enteraste de que tenemos a una celebridad en el Hospital- me miró pícaramente, y yo simplemente me limite a negar con la cabeza- pues anoche llegó Inuyasha Taisho el de las agencias de modelaje, ahora está en coma.

-Oh enserio- dije de manera indiferente, mientras leía un expediente.

-Ciertamente, y nos dirán quién tiene que revisarlo, ya que según los que me dijeron, es que alguien de nosotros será el encargado de revisarlo- comentó con su tono misterioso.

-Yo creía que eso ya lo tenían resuelto

-No, en realidad van a poner a los mejores.

En eso llegó el jefe de médicos Suikotsu Ichima, con una especie de paleta con unos papeles, su vista de repente se dirigió hacia mí, parecía serio y sin razón alguna asintió.

-Higurashi, necesito que me acompañe- me limité a asentir, y me despedí de MIroku- como usted sabrá tenemos a un paciente en coma Inuyasha Taisho- nuevamente asentí- por eso requerimos a alguien que lo vigile, porque su estado de coma es delicado, así que la signamos a este caso.

-Pero señor Suikotsu, sabe bien que apenas comencé el año pasado a trabajar aquí- le recordé, apenas me había recibido, y la verdad tenía poca experiencia.

-Sin embargo señorita Higurashi, usted ha demostrado ser la mejor de toda su equipo, por eso le dejaré este caso, sabe que el joven Taisho aporta una suma bastante grande al Hospital Goshimboku- después de eso ya no me podía negar, sabía que esa donación se iba a el área de tratamientos especiales- aquí está el expediente y la habitación es la 116.

Después de esto me dirigí a la habitación de mi paciente, en cuanto llegué observé al joven que se encontraba en la cama, era un hombre apuesto cabellos color ébano, tez trigueña, se notaba que tenía unos músculos bien formados, era simplemente apuesto.

En ese instante sentí como alguien me estuviera respirando en el cuello, en cuanto me voltee mis ojos se abrieron como platos, ahí estaba el joven de la cama, exceptuando de que pude ver sus ojos dorados, ¿Dorados? Mi respiración se volvió entrecortada y sentía escalofríos, pero lo más curioso es que no tenía miedo.

-Hola,…- simplemente con ese saludo sentí como mi mundo se oscureció- genial ya no sabré ¿por qué, es que estoy aquí y mi cuerpo allá?

Continuará…

Les gustó, pues bueno aquí les dejo la aclaración de que Inu está vivo, pero su espíritu está atado a su cuerpo, y vaya que cuerpo ejem. Lo único que nos queda saber es que por qué Kagome puede verlo. REVIEWS por fa me dan impulso a escribir, por cierto haré conti de "La propuesta" la haré en cuanto pueda.