Capítulo 18
Aclaración: Ni Elvendork Nigellus (autor original de esta historia) ni mi persona tenemos ningún derecho sobre la propiedad intelectual de Harry Potter.
Traducción aprobada por el autor original.
Dumbledore estaba sentado en su oficina calladamente, sorbiendo su Te caliente mientras esperaba que Remus Lupin llegara. Había mandado a llamar al Hombre Lobo en lo que se había enterado que uno de los jóvenes magos que habían estado en las proximidades del cementerio ese día había sido nada más y nada menos que Aries Black, el hijo del hombre que en toda Inglaterra tenia sin duda algunas en opinión de Dumbledore más motivos para desear tomar venganza en el pobre Harry Potter, inclusive después de la muerte del pobre chico.
Remus toco la puerta.
-Adelante- dijo Dumbledore y el joven mago entro a la oficina. – Ah, Hola Remus, por favor toma asiento.- con paso tranquilo Remus tomo asiento al frente del director, mientras declinaba el dulce que el viejo le ofrecía.
-Espero que hayas tenido una buena navidad?- le pregunto Dumbledore.
- Fue muy agradable profesor, gracias. ¿Cómo estuvo la suya?-
- Placentera, gracias.-
-¿En qué puedo serle de ayuda profesor?- pregunto Remus políticamente.
-Me he enterado por medio de mis fuentes en el Ministerio que Aries Black fue uno de los cuatro magos menores de edad que estuvo presente en la destrucción de la tumba de Harry Potter.- dijo Dumbledore hiendo directo al punto.
Remus frunció el ceño – Profesor ambos sabemos que el cuerpo de Harry Potter no descansa al lado de la tumba de sus padres.-
Dumbledore abrió las manos ligeramente concediéndole el punto. – Sea como sea, esa tumba es un símbolo potente para las brujas y magos en Gran Bretaña. Su destrucción solo puede tener un propósito, el de infundir terror en los corazones de la gente inocente.- paro un momento. – Me estaba preguntando si tu sabrías algo al respecto.-
Remus negó. – Ya he hablado con el ministerio, Aries fue conmigo a Godrics Hollow esa noche, Sirius tenía planificado un encuentro romántico para esa noche y no quería que el chico estuviera solo.-
Dumbledore alzo las cejas y procedió a comentar. - ¿Un encuentro romántico en la noche de navidad?-
-Usted sabe cómo es Sirius.- Y se encogió de hombros. – Quería llevar a Aries a la misa de navidad, exponerlo un poco al mundo más allá de lo que ha conocido con los Black.-
-Un propósito aplaudible.- dijo Dumbledore. - ¿Por qué lo llevaste a Godric Hollow?-
-Tengo buenos recuerdos asociados con esa iglesia, debido a los Potters.- explico Remus.
Dumbledore asintió. - ¿Viste algo interesante al momento del incidente?-
Remus negó con la cabeza. – Tan pronto como oí la explosión, toma a Aries y con aparición conjunto lo lleve a su casa, no quería tomar ningún riesgo con su seguridad.-
-Muy sensible de tu parte- comento Dumbledore mientras acariciaba su barba y pensaba. – Sirius Black es uno de los que podría tener motivos para destruir la tumba de Harry Potter. ¿Es posible que el haya aparecido por su parte en Godrics Hollow mientras tu creías que él estaba en otra parte?.-
-Me temo que eso es imposible profesor. Sirius estaba con su compañía femenina al momento de la explosión.-
-¿Cómo puedes estar seguro?- pregunto Dumbledore.
Remus se sonrojo un poco y explico. – Cuando lleve a Aries a casa, la joven aún se encontraba presente.-
-Ya veo- dijo el director con un suspiro resignado. – En ese caso parece que vamos a tener que buscar en otra parte por el responsable.- pauso un momento. -¿Remus, que piensa tú de Aries Black?-
-Lo encuentro un niño encantador- replico Remus. – Algo bullicioso quizás, definitivamente inclinado a jugar bromas y ser algo tremendo, pero decente. Es muy cercano a su primo Draco Malfoy y me parece que ambos están dedicados el uno al otro.- pauso un momento con cierta tristeza. – En realidad me recuerdan un poco a James y Sirius.-
-¿Alguna señal de una inclinación poco saludable a las artes oscuras?-
Remus negó con la cabeza. – Aries está un poco familiarizado con ellas, por supuesto, al igual que cualquier otro joven mago con los antecedentes familiares que él tiene, pero no e visto ninguna inclinación particular hacia las artes oscuras.-
Dumbledore asintió.- Gracias Remus, pronto estaremos hablando nuevamente.-
Remus se levantó de su silla – La estaré esperando con ansias profesor.-
1991 trajo un nuevo dolor para la familia Black, ya que la larga enfermedad de Arcturus Black llego a su fin con su muerte el lunes de pascua. Su funeral fue un evento privado y tranquilo, muy distinto a lo que había sido el de Pollux. La familia se dirigió a Francia un martes y el entierro fue previsto para el jueves, para sorpresa y confusión de Harry la muerte de Arcturus no pareció pegarle tanto como lo había hecho la muerte de Pollux, parte de eso se debió al hecho de que Arcturus había estado enfermo por un buen tiempo por lo tanto su muerte no fue del todo inesperada. Por otra parte aunque Harry tenía muchos recuerdos agradables de su tiempo en el Chateu, él nunca había pasado mucho tiempo con su bisabuelo, quien siempre había preferido mantener una relación distante y cordial, aunque en ocasiones podía llegar al nivel de afecto autentico pero nunca había llegado al nivel del amor de un abuelo y nieto como había sido su relación con Pollux. Por encima de todo fue el empuje de Melania Black quien llevo a toda la familia durante el funeral, ella llevo la muerte de su esposo con su gracia, buen humor y diligencia, encargándose ella sola de todos los preparativos.
-Tuvimos un largo y feliz matrimonio chicos.- le dijo a Harry ya Draco mientras picaban las papas para la comida del funeral. Normalmente la Granny le hubiese delegado una tarea tan insignificante a Roquefort, pero en estos momentos ella sentía que un poco de actividad física era justo lo que necesitaban los chicos para mantenerse ocupados mientras los adultos se encargaban de otras cosas. – Este año hubiese sido nuestro septuagésimo primer aniversario. Solo espero que ustedes dos sean tan afortunados con sus casamientos como yo lo fui.-
-¿No lo vas a extrañar Granny?- pregunto Harry.
-Por supuesto que lo hare.- le respondió a Harry mientras le daba una sonrisa cariñosa y revisaba la carne con vino. – Por lo menos por un tiempo-
-¿Y luego que va a pasar?- pregunto Draco confundido. - ¿Por qué no lo vas a extrañar más?-
-Porque nos reuniremos.- respondió Granny calmadamente. – Y nunca nos separaremos de nuevo.-
Arcturus fue enterrado en el pequeño cementerio en los terrenos del Chateu, el servicio fue tranquilo y dignificante, el clima fue precioso, la misma Granny se había encargado de elegir el mensaje que se grabaría en la tumba:
En los ojos de los insensatos el pareciera morir.
Su despedida es vista como miseria.
Él se está indo de nosotros a su completa destrucción:
Pero él está en paz.
Después del entierro la familia camino junta por los terrenos hasta el Chateu donde Granny dirigió un banquete del más alto nivel superando y sorprendiendo a todos.
-Madre deseo que vengas a vivir con nosotros a Inglaterra conmigo y con Nate.- dijo la Lucrecia la tía de Sirius, la hija de Granny.
-Tienes suficiente que manejar querida.- le respondió Granny dulcemente pero con firmeza. – No hay necesidad de agregar una vieja problemática a la mezcla. Soy bastante feliz aquí.-
-No me siento cómodo dejante aquí por tu cuenta Granny. – agrego Sirius desde el otro lado. Con la muerte de Arcturus, él era ahora jefe de familia y Harry ya había notado un ligero cambio en como los otros reaccionaban ante Sirius.
-Aprecio tu preocupación querido, pero de verdad es innecesaria.- replico Granny. – Tengo a Roquefort que se puede encargar de mí, tengo algunos amigos en el pueblo y tu junto con los chicos van a venir en el verano. ¿Qué más puedo necesitar?-
-En realidad señora Black.- dijo Lucius. – Como Draco va a estar asistiendo a la escuela en Septiembre hemos estado pensando en que se queda en casa durante el verano.-
Harry y Draco compartieron una mirada decaída al escuchar esto, que no pasó desapercibida por Granny.
-Llámame Granny querido, todo el mundo lo hace- le dijo a Lucius. – En cuanto a tu dilema, tengo una solución simple para ello. Que todos vengan a pasar el verano! Hay más que suficiente espacio para todo en esta vieja casa.-
Lucius se veía más que listo para negarse, pero Abraxas hablo primero, mirando de reojo a su hijo mientras lo hacía. – Pero que idea tan encantadora madam! Todos vamos a estar encantados de pasar el verano en su hermosa casa disfrutando de su exquisita cocina.-
-Está decidido entonces.- dijo Sirius con una sonrisa apenas contenible. – Todos vamos a estar viniendo para acá durante el Verano.-
-Creo que fue un bello gesto de parte de Granny- comento Narcisa que estaba acostada en la cama mientras Lucius camina molesto de une extremo al otro en la habitación. – Además hizo a los niños felices. ¿Acaso no viste la cara del pobre Draco cuando escucho lo que dijiste?-
-Si lo hice Narcisa, aun así pienso que sería muy beneficiosos para Draco pasar algún tiempo lejos de Aries, necesita hacer otros amigos. Le presente a los hijos de Crabbe y Goyle en la fiesta de navidad del ministerio y prácticamente ni les dirigió la palabra.-
Narcisa arrugo la nariz. – Si esos chicos son como sus padres, dudo que Draco tenga algo en común con ellos como para hacer amistad.-
Lucius paro de caminar y se sentó en la cama. – Son útiles Narcisa.-
-Son idiotas Lucius.-
– Amigos son una cosa y aliados otra.- dijo Lucius.
Narcisa sonrió y recorrió con su mano la mejilla de su esposo. – Has demostrado mi punto de manera hermosa querido. Draco y Aries son amigos, no corrijo, más que eso, son familia. Va haber tiempo de sobra más adelante para que ambos adquieran útiles pero estúpidos aliados querido- Lucius abrió la boca para protestar pero Narcisa coloco suavemente su dedo sobre sus labios. – Si Draco mostrara cualquier falta de habilidades para desenvolverse en ambientes sociales podría estar de acuerdo contigo, pero más bien demuestra lo contrario, se manejó tranquilamente en el Baile de Navidad del ministerio y logro encantar a varias señoritas.-
-No es correcto para un niño pasar tanto tiempo lejos de su familia.- susurro débilmente Lucius. - Últimamente Sirius Black ha visto más a mi hijo de lo que yo lo he hecho.-
Narcisa arrugo el ceño. – Sirius es mi primo y tu cuñado, difícilmente se puede considerar que esta fuera de la familia.-
-Sirius Black es un traidor a la sangre.- replico secamente Lucius.
-No te atrevas a decir semejante cosa Lucius Abraxas Malfoy!.- dijo duramente Narcisa.
- ¿Acaso has olvidado el tormento al que sometió a sus padres? Huyo de casa y se unió a la Orden del Fénix por amor a Merlín!.- dijo indignado Lucius.
-Pero al final su crianza y su sangre salieron victoriosas.- apunto Narcisa. – Se casó con tu hermana, una bruja de sangre pura y respetable, es padre de un hablador de Parsel que además tiene un talento especial por las Artes Oscuras. Sirius podrá negarlo, pero en líneas generales es más que aceptado el hecho de que se unió a las filas del Señor Oscuro.-
-No tengo ningún recuerdo de haber escuchado ni remotamente sobre el entre las filas del Señor Oscuro.- comento Lucius petulantemente.
-¿De verdad crees que el Señor Oscuro te confió todos sus secretos?- pregunto Narcisa burlonamente. – Además Sirius paso 9 años en Azkaban por el Señor Oscuro que es mucho más delo que tú puedes decir querido.-
Lucius arqueo una ceja y pregunto. - ¿Prefieres que hubiese ido a prisión, querida? Con nuestros amados Rudy y Bella…-
-No- respondió.- Narcisa remilgadamente. – Prefiero tener a mi esposo a mi lado. Pero encuentro divertido que acuses a Sirius de ser un traidor a la sangre cuando él ha sufrido mayor prejuicio y maltratos de los amantes a muggles y sangres sucias que cualquiera de nosotros.-
- ¿Y qué sucede con su comportamiento desde que fue liberado? Siempre está llevándose a los chicos a Merlín sabe dónde o a alguna loca aventura. Es bullero y desagradable, además de demasiado orgulloso de su origen Gryffindor.-
Narcisa sonrió. – Sirius es más grande que la propia vid, así que ciertamente te concedo el punto sobre su forma de ser. Siempre ha sido de esa manera. Pero eso difícilmente lo convierte en un traidor a la sangre, no ha objetado a las lecciones semanales que reciben los niños con la tía Cassie sobre magia especial, su desagrado por Dumbledore es claro y no he escuchado a ninguno de los niños hacer comentarios amigables hacia los estúpidos Muggles.-
Lucios arrugo el ceño.- Parece que hasta a ti te tienes bajo su hechizo.-
Su esposo rodo los ojos. – No creo que haya ningún encantamiento maligno al cual culpar Lucius. Sirius es mago decente, que se preocupa profundamente por Aries y Draco, ellos de manera natural devuelven el cariño. Si te gustaría recibir tu propia porción de ese cariño, podrías considerar el pasar menos tiempo atado a tu estudio o a las visitas al ministerio y pasar tiempo jugando con los niños un buen partido de Quidditch por ejemplo.-
Lucios levanto una ceja. – Yo soy un mago importante con una labor importante que llevar a cabo. Sirius Black podrá no tener nada importante que hacer con su tiempo aparte de jugar un partido de Quidditch pero ciertamente yo si tengo otras cosas que hacer.-
Su esposa suspiro.- Por supuesto querido.-
Ese Junio antes del cumpleaños de Draco la familia entera se volvió a encontrar en el Chateau, estaba un poco más llena de lo que los niños estaban acostumbrados a tener durante las festividades pero aun así la casa era lo suficientemente espaciosa y había espaciosa de sobra para todos. Granny se veía absolutamente deleitada de tener tantos huéspedes a los cuales atender, la casa estera estaba llena de buen espíritu y de alegría familiar. El hecho de que la mayoría de la familia considerada una manera divertida de pasar el tiempo el discutir como envenenar a posibles enemigos o contrabandear pociones ilegales ante los ojos del Ministerio no les parecía nada fuera de lo normal.
Como una semana antes del cumpleaños número once de Harry, fue despertado por una lechuza dando golpecitos a su ventana. Una carta atada a su pata, Harry abrió la ventana y retiro la carta, tenía el sello de Hogwarts y estaba escrita en tinta verde:
Sr. A. Black
La Habitación más Grande
El Ala Este
Chateau Noir
Provence, Fracia
Harry se echó encima su bata, deslizo sus pies en sus pantuflas y salió corriendo hacia la habitación de Sirius, la carta apretada en sus manos.
-Papá- grito saltando a la cama. –Vino! –
-La segunda regla- murmuro Sirius.
-El sol ya salió- respondió Harry. – Así que juega limpio.-
Sirius gimió y se sentó en la cama. - ¿Qué vino?.-
-¿Mi carta de Hogwarts?- Harry respondió emocionado.
Su papa bostezo y se estiro.- Ok, vamos a verla-
Harry apenas había logrado comenzar a abrir el sobre cuando la puerta del cuarto se abrió de par en par y entro Draco corriendo.
-No estabas en tu cuarto.- le dijo a Harry. – Así que pensé que te encontraría aquí.-
-Buenos días Draco.- dijo Sirius con cierta ironía.
-Buenos días tío Sirius.- respondió Draco rápidamente y se dio la vuelta de nuevo hacia Harry. - ¿Entonces tú también recibiste la tuya?-
Harry asintió y mostro su sobre semi abierto.
-Por el amor de Merlín, tan solo léanla de una vez!.- exclamo Sirius.
Los chicos abrieron sus sobres, sacaron las cartas y comenzaron a leerlas en voz alta al mismo tiempo.
-Querido Señor Black.- comenzó Harry.
-Querido Señor Malfoy.- corrigió Draco.
- Tenemos el placer de informarle de que dispone de una plaza en el colegio Hogwarts de Magia y Hechicería.- ambos chicos gritaron juntos.
-Suenan tan emocionados.- dijo Sirius sonriendo afectuosamente. - ¿Acaso estaban preocupados de que no fueran a recibirlas?-
-No, pero de igual manera es un poco emocionante verlo por escrito.- replico Draco.
-Hay una larga lista de suministros que requieren.- observo Harry.
Draco asintió. – Tendremos que ir al Callejón Diagon.-
Sirius sonrió. – De alguna manera no creo que eso vaya a ser un problema. ¿Me permiten verlas?-
Ambos chicos le dieron sus cartas y Sirius las leyó.
-Creo que les voy a dar a los sus mascotas.- dijo pensativamente. - ¿Quieren una lechuza, un sapo o un gato?-
-¡Una lechuza!- respondieron ambos chicos al unísono.
- Bueno si le compro a ambos una lechuza, espero recibir toneladas de cartas de parte de ambos.- se burló Sirius. Un brillo travieso apareció en sus ojos. – Ahora vayan a mostrarle sus cartas a la tía Cassie.-
Una semana antes de la fecha para partir hacia Hogwarts la familia se despidió de Granny y regresaron a Inglaterra. Sirius llevo a los chicos al Callejón Diagon para comprar los suministros escolares y les compro dos magníficas lechuzas águilas. Harry nombro a la suya Pollux y Draco decidió llamar a la suya Castor.
La noche antes de que Harry partiera para la escuela, Sirius fue a su cuarto y se sentó al borde de la cama.
-¿Estas nervioso?- le pregunto.
-Un poco- admitió. –Pero mayormente estoy emocionado.-
Sirius sonrió. – Vas a pasarla muy bien, contigo y con Draco ahí estoy seguro que va a ser como si los merodeadores hubiesen vuelto a nacer. Solo trata de no quemar el castillo en tu primer año.-
-Tengo planeado hacerlo para el tercer año.- respondió Harry traviesamente.
Sirius se rio entre dientes.- Por cierto, coloque algunos objetos especiales en tu baúl. Uno de ellos es un espejo yo tengo su gemelo, si quieres hablar conmigo solo tienes que decir mi nombre, es un poco más sencillo que estar esperando el correo lechuza –
-Eso es espectacular!-
-James y yo los usábamos cuando estábamos en diferentes detenciones.- explico Sirius.
-Gracias papá.- dijo Harry.
-La otra sorpresa es aún mejor, es muy especial, así que está escondida entre tus ropas. Tienes que prometerme que vas a cuidarla muy bien, nunca la vas a perder y solo Draco va a saber sobre su existencia.-
-¿Qué es?- pregunto Harry entusiasmado.
- Una capa de invisibilidad.- le dijo Sirius.
Los ojos de Harry se abrieron de sorpresa. -¡Brillante¡-
-Pertenecía a James, fue la clave de nuestros éxitos. Úsala bien pero asegúrate de mantenerla en secreto. Dumbledore se la dio a lunático y no queremos que el viejo descubra que llego a tus manos.-
Harry asintió.- No hay necesidad de crear sospechas.-
-Hay una cosa más, nosotros lo perdimos pero de repente tu puedes encontrarlo y hará de tu tiempo en Hogwarts mucho más divertido. Se llama el Mapa de los Merodeadores.-
-¿Un mapa?-
-Es un mapa especial de Hogwarts que muestra a la escuela entera.- explico Sirius. – Aun mejor muestra la identidad y la locación de cualquier persona en el castillo. No puede ser engañado o hacerle trampa, fue confiscado por Filch en nuestro último año y probablemente está todavía en su oficina.-
-¿Cómo es?- pregunto Harry.
-Solo un pedazo normal de pergamino, tócalo con tu varita y di las siguientes palabras "Juro solemnemente que mis intenciones no son buenas" entonces el mapa va aparecer, cuando hayas terminado vuelve a darle un golpecito con tu varita y di "Travesura realizada" es muy importante que no olvides esa parte, porque si no cualquiera que lo encuentre podría usarlo.-
Harry le sonrió a su papa.- ¿Tienes alguna otro tips?-
-Tan solo mantente ocupado- replico Harry despeinándole el cabello.- Intenta nuevos hechizos y experimenta un poco, recuerda se aprende más magia haciéndola que leyéndola en libros.- afectuosamente beso la cabeza del muchacho.- Ahora vete a dormir, quieres estar bien descansado para mañana.-
-Buenas noches papa.-
-Buenas noches Harry.-
Hola, he regresado después de estar desaparecida por demasiado tiempo finalmente estoy de vuelta y que mejor manera que como regalo de Fin de Año!
Por favor comprendan que en este tiempo la vida me ha tenido full, pero ya voy retomando de nuevo mi ritmo y pronto estaré posteando otro capítulo. Gracias a quienes me escribieron por privado de verdad que me ayudo a seguir….
Como siempre sus rewies serán altamente agradecidos.