Segundo viento: Ser un Familar.

Opening: Zankoku na tenshi no teeze (Shin Seiki Evangelion opening).

Tabitha abrió los ojos poco a poco, sintiendo su cabeza doler por alguna razón. Había tenido uno de los sueños más raros que hubiera tenido nunca, pero extrañamente no era capaz de recordarlo del todo. Solo recordaba a un chico delgado y de cabello castaño, aparentemente su ahora familiar, en medio de unas extraña montañas cuadradas de acero. Había muchas explosiones y ruidos, quizá a causa de una guerra. Después de eso había un hombre de lentes y barba, parado sobre la cabeza de lo que sin duda parecía ser un demonio gigante de piel purpura y verde. Y también estaba esa…cosa… un ser tan grande como el demonio purpura, de una bizarra forma humanoide y con una máscara como la cabeza de un ave al frente. Había muchas explosiones, gritos y al final una fuerte luz. Después de eso, solo oscuridad…

La chica sacudió la cabeza suavemente, buscando alejar esas imágenes sin sentido de su mente, para después mirar a su alrededor tratando de ubicarse. Descubrió entonces que de alguna manera había llegado a su habitación y ahora estaba acostada en su cama. Su visión estaba un poco borrosa así que busco sus lentes, encontrándolos en la mesita de al lado, para después colocárselos.

"Ah, despertaste."

La puerta de su habitación se abrió, dejando ver la figura de Kirche parada en el marco de la puerta, la morena llevaba en sus manos una bandeja con platos llenos de comida y una jarra con jugo de naranja, aparentemente ya era hora de la comida o quizá más tarde.

"¿Qué paso?"

Tabitha pregunto con cierta confusión mientras se sentaba en el borde de la cama, Kirche cerró la puerta y coloco la bandeja en la mesa para después sentarse a su lado.

"Al parecer te desmayaste por usar demasiada de tu magia. El profesor Colbert dijo que tus reservas pudieron haberse drenado bastante al sellar el pacto con el dragón, por lo que el formar el vinculo con tu segundo familiar fue demasiado para ti."

Tabitha asintió, eso era muy posible, la chica sabía que su poder estaba arriba del promedio, siendo ella una maga triangular a pocos pasos de alcanzar su cuarto elemento. Aún así supuso que tener un dragón como familiar no era algo que cualquiera podría lograr, cosa que internamente la enorgullecía. Sin embargo, había algo que no encajaba en todo eso. Si sellar el pacto con el dragón la agoto tanto ¿Por qué no sintió el cansancio en ese instante? Drenar tanta magia de golpe era algo que debió haberse percatado de inmediato, y sin embargo no sintió que se hubiera desgastado tanto. Descarto esos pensamientos por el momento, era algo de lo que quizá no tendría respuesta pronto.

"¿Mis familiares?"

"Ellos están bien, ahora deben estar a las afueras de la torre."

Tabitha solo asintió para después levantarse, dispuesta a ir en busca de sus familiares, sin embargo, la morena rápidamente la sostuvo por el hombro.

"Primero come, después iras a buscarlos. No subí cinco pisos con la comida para dejar que se enfríe"

Renuentemente, la menor se sentó junto su amiga y ambas procedieron a comer. Kirche sonrió suavemente ante esto y también ante el recuerdo de lo que ocurrió después de que su amiga se desmayara. Ese chico, Shinji Ikari, en verdad era todo un misterio…


- Tiempo antes. -

Kirche se había acercado de inmediato al ver que la peliceleste se había desmayado, por fortuna el plebeyo que acababa de invocar parecía tener la delicadeza como para no dejar caer a su amiga, sujetándola suavemente con un brazo para después mirar con curiosidad la palma de su mano libre. Un pequeño brillo azulado surgió de ella, indicando que sin duda las runas del familiar se estaban grabando en él. Kirche se sorprendió un poco al ver que el castaño no parecía inmutarse por esto, simplemente mirando su palma igual que quien examinaría un bicho en el suelo. Ni siquiera parecía sentir el dolor característico que sienten los familiares cuando las runas se inscriben en el cuerpo.

Finalmente el brillo desapareció por lo que el chico abrió y cerró su palma, observando las marcas en su mano para después sonreír suavemente y soltar una risita por alguna razón. La pelirroja se acerco a su amiga y la tomo en sus brazos, el chico entregándosela sin decir una sola palabra, solo sonriendo suavemente.

"Tabitha, oye, ¿Estás bien?"

Kirche la movió un poco, tratando de despertarla, pero no tenía caso, la chica estaba profundamente dormida.

"Parece ser que está agotada, quizá no ha dormido bien últimamente."

Hablo por primera vez el chico, su voz sonando amable mientras observaba a la pequeña chica dormir. Kirche le sonrió por cortesía, aunque fuera un plebeyo, ahora era el familiar de su mejor amiga.

"Puede ser, Tabitha gusta de leer mucho, quizá se ha pasado un par de noches despierta por eso."

El profesor Colbert llego en ese instante y coloco su mano en la frente de la chica, comprobando su estado para después suspirar.

"Estará bien, solamente agoto sus reservas de energía, seguramente por sellar el pacto con el dragón. Debió ser una carga muy grande para ella, pero estoy seguro despertara en un par de horas."

Explico el profesor mientras sonreía y la morena no pudo más que suspirar ante esto, así que acomodo a su amiga entre sus brazos.

"La llevare a su habitación para que descanse."

Le dijo al profesor y este asintió para después mirar al chico frente a ellos.

"Disculpa jovencito, ¿Podría echar un vistazo a tu mano?"

El chico extendió su mano derecha, mostrando las runas en su palma. Colbert copio las runas en un pergamino, murmurando algo para sí mismo mientras fruncía el seño y después negaba con la cabeza.

"Muchas gracias."

"De nada."

Colbert entonces procedió a copiar las runas en el hombro del dragón, el cual solo se había acercado a ellos y miraba a la peliceleste con evidente preocupación en sus ojos esmeralda. Kirche no pudo más que sentir ternura por esto, aunque fuera un enorme reptil azul, en verdad era lindo; quizá no tanto como su hermoso Flame, pero aún así tenía su encanto.

"Estará bien."

Le dijo la pelirroja a manera de tranquilizarlo y el dragón asintió, soltando un feliz '¡Kyu, Kyu!'. Sin duda era muy mono.

"Bien, eso sería todo."

El profesor se giro al resto de la clase al terminar su labor, Kirche pudo notar que el plebeyo que había invocado Louise había despertado ya y parecía discutir algo con ella. Pobre chica, en verdad la pelirroja no tenía ninguna animosidad en su contra; la disputa entre sus familias era algo que la traía sin cuidado sinceramente. Si la molestaba era por simple y sana diversión, ya que sus rabietas de enojo se le hacían muy lindas de ver.

"Volvamos a la clase. Señorita Zerbst, por favor acuda a clases después de dejar a la señorita Tabitha en su habitación."

Y después de esto el profesor levito en el aire, siendo seguido de cerca por los demás alumnos, los cuales comenzaron a burlarse de la incapacidad para levitar de la pequeña Louise. Bueno, esos asuntos no eran de su incumbencia, por ahora lo mejor sería llevar a Tabitha a descansar, pensó la chica mientras comenzaba a caminar.

"Disculpe señorita."

Ah, era verdad, también había que ver que haría con los familiares de Tabitha. Kirche observo al chico durante unos segundos, su cara era linda aunque su físico dejaba mucho que desear. Parecía ser un poco pequeño, quizá su cuerpo aún no daba el estirón; sin embargo, había algo en su sonrisa y en su manera de mirar que la atraían fuertemente, aunque aún no sabía explicar por qué.

"¿Si, Familiar?"

Pregunto la chica y Shinji tuvo que suprimir una pequeña risa divertida. Ahora que el pacto había sido sellado a su cerebro había llegado mucha información sobre la manera en que funcionaba. Al inicio creyó que era una especie de unión entre las almas de ambos compañeros, pero al sentir como parte de esa energía trataba de someter su voluntad descubrió que tal vez no fuera algo tan puro como en un principio llego a creer. Solo basto una centésima parte de su poder para suprimir ese aspecto del pacto. Estaba seguro que si lo intentaba podría romper el vínculo que lo unía a la inexpresiva chica, pero si lo hacía podría terminar dañando el alma de la peliceleste así que por ahora decidió no ir demasiado lejos.

"Gracias a estas runas ahora soy capaz de entender un poco más la situación de por qué fui convocado a este lugar, sin embargo, me gustaría saber un par de cosas más. Me preguntaba si sería tan amable de explicarlas para mí."

Kirche se sorprendió por la manera tan educada en que este chico hablaba, si le colocaran ropa más refinada y una varita, cualquiera podría confundirlo con algún joven noble. La chica asintió simplemente.

"Sígueme entonces."

Le dijo mientras avanzaba hacia la torre en la que estaban sus dormitorios, eso hasta que escucho los sonoros pasos del dragón azul detrás de ella, por lo que se giro a mirarlo de manera complicada.

"¡Kyu!"

Exclamó el dragón alegremente mientras observaba a los humanos frente a ella, la joven dragón también tenía muchas preguntas que hacer por lo que planeaba seguirlos a donde quiera que se dirigieran.

"Lo siento amiguito, un familiar tan grande no será capaz de entrar en los dormitorios."

Dijo Kirche con cierta pena y el dragón soltó un fuerte '¡Kyu!', aparentemente molesto, cosa que comenzó a asustar a la pelirroja. Con su maestra inconsciente, no había nada que impidiera a este Familiar novato atacarlos.

"En verdad no lo digo para alejarte de tu maestro, es solo que no serás capaz de entrar al edificio, chico."

"¡Kyu! ¡Kyu!"

Kirche retrocedió un poco cuando sus palabras parecieron hacer enfadar más al dragón, por muy tierno que pareciera, un dragón era una bestia peligrosa si se le hacía enojar. Se estaba preparando para ordenarle a Flame que le lanzara una llamarada cuando el castaño camino hacía el reptil azul, sus manos en sus bolsillos mientras se reía suavemente, al parecer divertido por la escena. Kirche frunció el seño, no tenía nada de divertido ser amenazado por un dragón.

"Jajaja tranquila pequeña, al parecer ella aún no se ha dado cuenta de que eres una chica."

Le dijo al dragón mientras acariciaba uno de sus costados, tal como Tabitha había hecho antes, por lo que el dragón pareció relajarse, olvidándose de su enojo y dejándose acariciar.

"¿Es… una chica?"

Pregunto la pelirroja de manera confundida para luego mirar al castaño, el cual ahora acariciaba el cuello del dragón.

"Así es, de alguna manera el vinculo entre familiar y maestro me permite saber cosas como esta. Al parecer este enlace está hecho para facilitar el entendimiento entre ambas partes. Aunque en este caso, es un vínculo entre tres almas el que se formo…"

Termino de decir pareciendo pensativo y Kirche ladeo la cabeza confundida. ¿Un vinculo entre almas? ¿Es eso lo que la Invocación del Familiar generaba? Miro a Flame con curiosidad, su Familiar le devolvió la misma mirada, como preguntándole a su ama si eso era posible. Ella solo se encogió de hombros, no era una teoría tan descabellada después de todo.

"Lamento haberte confundido chica, es que te ves tan poderosa que por un momento creí que eras un dragón varón."

La dragón frente a ella la miro y pareció apenarse por sus palabras, al parecer halagada por el cumplido.

"Aun así, en verdad lo lamento, no creo que puedas seguirnos dentro con tu tamaño."

"Kyuuu…"

Kirche se sintió mal al ver como la dragón dejaba caer sus alas mientras su rostro parecía entristecerse pero no había más que pudiera hacer.

"No te preocupes, yo te explicare todo después de que me lo expliquen a mí. ¿Te parece bien?"

Irukukuu miro al castaño frente a ella, debido al vínculo del familiar, era capaz de percibir un poco de los sentimientos del joven humano, por lo que no tenía dudas de que le decía la verdad. Con un algo de resignación, la dragón asintió para después sentarse en el suelo en medio del patio, no le gustaba mucho la idea de esperar, pero era mejor que nada.

"Eres una buena chica."

Le sonrió el castaño mientras la acariciaba por última vez para después hacerle una seña a la pelirroja, pidiéndole que le indicara el camino. Kirche solo asintió y después de ordenarle a Flame que le hiciera compañía al dragón, avanzo hacía la torre. Caminaron en silencio por alrededor de quince minutos, Shinji observando con curiosidad todo a su alrededor. Ya había visto arquitecturas de este tipo durante su pasó por Europa, pero siempre habían sido castillos en ruinas o en pésimo estado, así que ver uno en plenas funciones, con personas recorriéndolo de cuando en cuando era algo nuevo para él.

El castaño ya se había hecho a la idea de que, así como este no era su mundo, estas personas no eran Lilim. Parecían haber nacido del Fruto de la Vida, pero no del mismo del que los Apóstoles y la humanidad habían nacido, estos seres no eran hijos de Adam o Lilith, sino de algo más; su energía también parecía fluir de manera diferente a la que estaba acostumbrado, aunque el chico aún no estaba del todo seguro que era lo que esto significaba.

Shinji entrecerró los ojos, gracias a Adam y Lilith sabía que había una raza con millones de años de existencia, la cual había creado a los dos primeros Apóstoles. Hasta donde sabía, esta raza había creado la Luna Blanca y la Luna Negra en donde Adam y Lilith nacieron. Estas Lunas no tenían nada que ver con los satélites naturales que orbitaban los planetas, si no que eran en realidad huevos que contenían el Fruto de la vida y el Fruto del conocimiento cada una. Esta raza antigua envió cientos de estas Lunas por todo el universo, para de esa manera expandir ambos Frutos por el cosmos, pero siempre asegurándose de que una Luna negra y una Luna Blanca no cayeran en el mismo mundo. Fue un error de cálculo lo que provoco que su planta acogiera a dos de estas Lunas, creando consigo el desastre que lo llevo a convertirse en el dios de un mundo fantasma. Aún así, Shinji se pregunto si este mundo poseería alguna de estas Lunas; de ser así, era obvio deducir que había recibido la Luna Negra, de donde la humanidad suele nacer. Sin embargo ¿Y si este mundo también había recibido dos Lunas?

El chico en verdad no quería ni imaginarlo.

Sus pensamientos quedaron de lado cuando llegaron casi a la cima de la torre, unos cinco pisos lejos del suelo. Kirche abrió la puerta con un simple movimiento de su varita y ambos entraron a la habitación, la pelirroja dejando a su amiga acostada en la cama y colocando una manta sobre ella.

"Descansa."

Le susurro mientras acariciaba un poco su cabello y le quitaba las gafas del rostro, colocándolas en la mesita al lado de la cama.

"Vamos a mi habitación."

Le dijo y el chico solo asintió, dirigiéndole una última mirada a la chica que dormía tranquilamente en la cama, sin duda era muy parecida a Ayanami, cosa que generaba un sentimiento de melancolía en él a la vez que cierta tristeza. Dejo sus pensamientos de lado, no era momento para perderse en recuerdos. Ambos salieron de la habitación, bajando al piso de inferior y recorriendo un pequeño pasillo hasta llegar a la habitación del fondo.

"Estas a punto de entrar a la alcoba del amor de Kirche la Ardiente, deberías sentirte agradecido, pequeño."

Le dijo la morena con voz seductora y un guiño de ojo que Shinji pensó era extrañamente familiar. Sintió otro golpe de melancolía invadirlo al recordar que esa era la manera en que su tutora solía molestarlo de vez en cuando para conseguir apenarlo. Entraron a la habitación y Kirche le ofreció una silla mientras ella se acomodaba en su cama. Se quedaron en silencio unos segundos hasta que fue la pelirroja quien rompió el silencio.

"Antes que nada, me gustaría saber tu nombre. Me he dado cuenta de que aún no nos presentamos."

Shinji asintió ante esto, en realidad podría haber obtenido la información que quisiera si leía la mente de los demás, pero no deseaba hacer eso ya que lo consideraba una invasión al espacio personal de las personas; además, nunca lo había intentado antes en verdad. Aunque confiaba que las habilidades de Lilith y Adam serían más que suficientes para logarlo con éxito, después de lo que Amisrael le había hecho a Asuka al tratar de leer su mente Shinji no tenía el ánimo para arriesgarse a hacer algo así. Fue de esa manera que decidió lo mejor sería solamente dedicarse a sentir las emociones que surgían de los corazones de estos seres para darse una idea de qué clase de personas eran o que pensaban aproximadamente.

"Mi nombre es Ikari Shinji. Es un placer conocerla."

Dijo mientras se levantaba y hacía una pequeña reverencia a la chica, esta lo miro confundido unos segundos.

"¿Ikarishinji? Ese es un nombre curioso, ¿De casualidad eres del mismo lugar que el familiar de Louise?"

Kirche comenzó a hacer memoria, tratando de recordar el nombre del pelinegro.

"¿Cómo era?… ¡Ah, sí! Se llama Hiragasaito."

Dijo finalmente, feliz de haber sido capaz de recordar un nombre tan extraño. Shinji la miro sin entender durante unos segundos, para después negar con la cabeza. Era imposible que fueran personas del mismo mundo, Asuka era la única sobreviviente al tercer impacto y ella había muerto hacía medio siglo.

"Aunque nuestros nombres son originarios del mismo lugar, me temo que no pertenecemos al mismo mundo. Además, mi nombre se pronuncia Shinji y mi apellido es Ikari."

Explico e hizo una nota mental para hablar después con este chico, Hiraga Saito. Si su nombre era alguna indicación, parecia ser japonés; y si tomaba como referencia su vestimenta, la época a la que pertenecía podría rondar la de su planeta antes de que el tiempo dejara de ser importante.

Por su parte Kirche lo miro con la duda pintada en la cara, ¿cómo era posible que fueran del mismo lugar y a la vez de mundos diferentes? En primer lugar, ¿era acaso posible que existiera otro mundo?

Shinji pareció notar las dudas que cruzaban la cabeza de la chica por lo que se explico.

"Aunque quizá se te difícil de creer, en este universo existe una infinidad de planetas y sistemas solares. La mayoría de los mismos se encuentran vacios de cualquier tipo de vida. Aún así, existen planetas habitados por seres vivos, como es el de ustedes…"

Dijo señalándola a la morena para después señalarse a sí mismo.

"O como el mio…"

'Como el mio alguna vez fue.'

Evito decir a toda costa, no tenía caso confundir mas a la chica contándole cosas innecesarias. Kirche lo miro sorprendida durante unos instantes pero después su rostro se torno más serio.

"¿Sabes? No me importa mucho que la gente crea que soy tonta solo por mi manera de ser, pero me ofende que pienses que me creeré algo como eso."

Dijo de manera severa mientras lo miraba con aire ofendido, Shinji la observo tranquilamente, ya esperaba que la chica no fuera a creerle de buenas a primeras.

"Lo que digo no es ningún intento para burlarme de ti, sino la verdad de la situación, mi verdad. Lamento si en algún momento pareció que te estaba jugando una broma, pero puedo asegurarte que mis palabras son serías."

La chica lo miro fijamente unos instantes, buscando cualquier rastro que delatara una mentira de su parte, pero el rostro del castaño se había puesto serio también.

"¿Puedes probarlo de alguna manera?"

Pregunto y Shinji solo negó con la cabeza, no tenía nada consigo que perteneciera a su mundo y usar sus habilidades divinas no resolvería nada, no después de ver como estos humanos usaban su energía para levitar en el cielo. No sabía de que tanto eran capaces ellos así que a menos que hiciera algo verdaderamente fantástico no lograría convencer a esta chica.

"Lo lamento, por desgracia justo ahora no tengo nada más para respaldar mis palabras que mi propia promesa de que no digo una mentira. Entenderé si no puedes creerme."

Kirche lo miro seriamente unos segundos para después suspirar, esto no los llevaría a nada.

"Bien, dejemos eso de lado por el momento."

Dijo para después volver a sonreír.

"Mi nombre es Kirche Augusta Frederica von Anhalt Zerbst, pero todos me conocen como Kirche la Ardiente."

Se presento mientras le hacia otro guiño de ojo y Shinji no pudo más que alzar una ceja en asombro, ese sin duda era un nombre largo y difícil de recordar.

"Es un placer conocerla, señorita Zerbst."

Dijo al fin, recordando que de esa manera era como el profesor se dirigió a ella, sin embargo, la morena solo negó con la cabeza.

"Solo llámame Kirche."

Le dijo mientras cruzaba sus piernas y recargaba su brazo en su rodilla, apoyando su barbilla en su mano.

"Entonces, ¿Qué deseas preguntarme?"

Lo que siguió a continuación fue una hora de preguntas y respuestas, siendo las preguntas hechas en su mayoría por el chico; es así como Shinji descubrió que se encontraba en una escuela de magos en el reino de Tristain, un pequeño territorio que se ubicaba en el continente de Halkeginia, justo entre el reino de Gallia y el de Germania. Al parecer los humanos de este mundo habían aprendido a usar el Fruto de la vida para realizar toda clase de acciones, las cuales habían nombrado como 'Magia', aunque si bien solo eran una minoría los que eran capaces de lograrlo, siendo dividida así la sociedad entre Magos (también llamados Nobles) y la gente común (o plebeyos). Todos los nobles eran magos, pero no todos los magos eran nobles, ya que estos podían perder su titulo si su casa caía en desgracia o ellos cometían algún acto que fuera considerado indigno de su estatus. Otra cosa que le pareció interesante era que ellos dividían el poder del fruto de la vida en cinco elementos, siendo estos el agua, la tierra, el fuego, el viento y el vacio. Shinji se pregunto qué clase de elemento sería este 'vacío', pero según la morena, ese elemento era solo un mito ya que el único que había sido capaz de usarlo era el Fundador, un poderoso mago que uso el elemento del vacío para formar la tierra y crear las leyes que regían el mundo hace miles de años, algo así como el Dios de ese mundo. Por último, descubrió que un familiar era el escudo de su maestro, por lo que debía servirle y protegerlo hasta que alguno de los dos muriera.

"Con que es así…"

Comento el chico mientras meditaba sobre toda esta nueva información, no había sacado nada en claro sobre como volver a su mundo, mas considerando que la única manera de romper el contrato era si él o su 'maestra' fallecieran. Considerando su naturaleza divina, Shinji dudo mucho que hubiera algo que fuera capaz de matarlo aparte de otro Apóstol o un Dios, y, aunque apenas y conocía nada de su 'maestra', no iba a asesinarla para logar ser libre.

"Gracias por todo tu tiempo, en verdad has resuelto muchas de mis dudas."

Dijo mientras se levantaba y hacia otra reverencia a la chica, esta solo le sonrió mientras acomodaba su cabello rojizo detrás de su hombro.

"No es nada guapo, ahora eres el familiar de mi amiga así que debo ayudarte en lo que me sea posible para que puedas hacer bien tu trabajo."

Shinji le devolvió la sonrisa mientras la miraba suavemente.

"En verdad la quieres mucho."

Tal afirmación tomo por sorpresa a Kirche por unos momentos, pero después volvió a sonreír.

"Así es. Esa chica es una pequeña solitaria a la que deseo ver sonreír, así que asegúrate de ayudarla en todo lo que puedas."

Le dijo para después sacar su varita de su amplio busto y apuntar al chico, una pequeña flama surgió de la punta de la misma.

"Pero si tratas de aprovecharte de ella de alguna forma, me asegurare de reducir tu cuerpo a cenizas."

Advirtió con un tono severo que no iba acorde a su personalidad relajada, sin embargo, Shinji solo soltó una suave risa.

"Descuida, no tengo intenciones de lastimarla de ninguna forma."

Shinji contesto mientras se levantaba, caminando hacia la salida.

"Además…"

Dijo mientras abría la puerta, dándole la espalda a la pelirroja unos segundos para después girar su cabeza, sus ojos parecían brillar con luz propia en un espeso rojo opaco similar al de la sangre, su mirada seria y su rostro mostrando una enorme determinación. Kirche se asusto un poco al ver al chico cambiar de actitud de esa manera tan repentina, ya no había rastro alguno de su gentil sonrisa o sus ojos cálidos, si no una mirada que parecía tan intensa como la que recibirías de un dragón de fuego.

"Mi deber es protegerla de ahora en adelante y eso es lo pienso hacer."

Finalizo para después cerrar la puerta suavemente, dejando a la morena paralizada en su lugar, preguntándose qué era lo que había sucedido. Finalmente la chica salió de su asombro, reincorporándose de su lugar y sonriendo ampliamente, este chico que había sido invocado por su amiga parecía ser mucho más de lo que aparentaba a simple vista. Típico de Tabitha, supuso la morena.


Shinji bajo las escaleras de la torre con paso lento, meditando sobre su situación. No había manera de volver a su hogar por el momento, así que decidió que lo mejor sería permanecer en este lugar y realizar sus labores como familiar. Las cosas siempre ocurrían por algún motivo, aunque sonara doloroso decirlo. El destino ya estaba escrito y si él ahora estaba aquí, en un mundo lleno de magos y sirviendo como familiar de aquella pequeña chica, alguna razón tendría que haber detrás de eso. Se detuvo de golpe al ver su reflejo en uno de los ventanales, notando que sus pupilas estaban dilatadas y brillaban tenuemente, señal de que estaba concentrando una buena parte de su poder, cosa extraña, ya que él no sentía que lo estuviera siquiera intentando. Cerró los ojos unos segundos para relajarse y controlar su energía, afortunadamente sus alas de luz no habían surgido también o hubiera tenido demasiado que explicar. Fue entonces que noto algo extraño, al parecer las runas que se habían grabado en su palma no solo habían tratado de doblegar su voluntad, si no que ahora trataban de interferir con sus sentimientos. Frunció el seño de manera irritada, estas runas solo causaban problemas, si no fuera porque destruirlas podría dañar a la peliceleste, ya se hubiera desecho de ellas.

Usando otro poco de su energía, sello el poder de las runas, solo dejando abierto el vínculo de su alma con la de la chica y su compañera dragón, eso debería ser suficiente hasta que pensara en una mejor solución. Con ese tema resuelto, llego hasta lo más bajo de la torre y salió de ella, descubriendo a la dragón jugar alegremente con el familiar de Kirche, el cual si mal no recordaba se llamaba Flame. Flame parecía estar muy divertido creando figuras con el fuego que surgía de su boca mientras la dragón lo miraba atentamente y después trataba de imitarlas, sin mucho éxito, cabe decirlo.

"¡Hey!"

Saludo el chico mientras se acercaba a ambos reptiles, estos se giraron a mirarlo para después acercarse.

"¡Ah, volviste, Kyu!"

Dijo la dragón de manera entusiasta y Shinji se detuvo de golpe, mirando incrédulo al reptil azul para después frotar sus ojos y mirar a su alrededor. No parecía haber nadie más aparte de ellos tres así que sin duda fue la dragón la que pronuncio esas palabras.

"¿Puedes hablar?"

Pregunto aún sin creer lo que había escuchado, para su sorpresa, la Dragón ladeo la cabeza, pareciendo confundida, pero después asintió. Shinji entonces dirigió su mirada a la salamandra roja que estaba a su lado, Flame observaba al dragón con ojos llenos de curiosidad. Quizá haya sido por qué no lo pregunto precisamente, pero la pelirroja nunca le menciono nada sobre que las criaturas de este mundo sabían comunicarse con los humanos. ¿O quizá era porque ellos eran familiares?

"No sabía que los seres de este mundo eran capaces de hablar con los humanos."

Comento mientras se agachaba, mirando más de cerca a Flame, para su sorpresa, este solo lo miro igual de confundido.

"¿Kyuru?"

Ok, aquí había algo raro, se dijo el castaño mientras veía a la salamandra soltar sus 'Kyuru' una y otra vez, sin nunca decir nada que pareciera remotamente cercano a una palabra. Observo de nuevo a la dragón, la cual no parecía entender la razón detrás de su asombro.

"¿Pasa algo?"

Le pregunto, su voz era suave e infantil, similar al que tendría una niña pequeña.

"¿Todas las criaturas pueden hablar con los humanos?"

Irukukuu lo miro unos segundos, tratando de comprende su pregunta, para después encogerse de hombros. Vaya, incluso hacía gestos muy humanos.

"Irukukuu no lo sabe, Irukukuu ha vivido en las montañas toda su vida así que no ha visto muchas criaturas aparte de las del bosque, pero ninguno de ellos parecía saber el lenguaje humano, kyu."

Explico la dragón y Shinji se mostro mas confundido.

"¿Entonces como es que tú lo sabes usar?"

Para su sorpresa, la dragón se levanto, colocándose en sus cuatro patas y dando pequeños saltitos que hicieron temblar la tierra levemente.

"¡Es porque Irukukuu ha observado mucho a los humanos, kyu! ¡Así que se aprendió su lenguaje, kyu!"

Ah, eso tenía sentido, supuso el chico. En los mitos y leyendas de su mundo siempre se considero a los dragones como seres de gran sabiduría, que fueran capaces de aprender el lenguaje humano con solo observarlos parecía posible.

"Eres una chica muy inteligente."

Le sonrió el chico mientras acariciaba su costado suavemente, la dragón pareció feliz con la caricia mientras se acostaba en el suelo.

"Irukukuu recibió un cumplido, kyu."

Comento de manera alegre y Shinji se pregunto qué clase de vida habría llevado, siendo que parecía ser muy inofensiva a comparación a lo que se decía sobre los dragones. Siguió acariciándola unos moemntos hasta que Irukukuu se levanto de pronto, recordando el por qué era que se había quedado afuera esperando tanto tiempo.

"¡Es verdad! El hermano prometió que le explicaría a Irukukuu lo que quería saber."

"¿El hermano?"

Shinji pregunto de manera incrédula por el apodo que la dragón le había puesto, Irukukuu asintió fuertemente.

"Irukukuu y el hermano ahora son los familiares de la pequeña hermana por lo que eso nos hace hermanos."

Explico simplemente y Shinji se quedo sin saber que decir, en verdad la manera de pensar de esta… ¿chica? ¿Dragona?... Fémina... era similar a la de una niña pequeña. Irukukuu lo miro unos segundos para después parecer repentinamente triste.

"¿El hermano no quiere ser hermano de Irukukuu?"

Shinji lo supo en el instante que observo los ojos tristes y casi suplicantes de la dragón, era imposible decirle que no a esa mirada.

"Está bien, Shinji será el hermano de Irukukuu."

Le respondió, sonriéndole suavemente mientras trataba de no reírse de lo absurdo de la situación. Estaba casi seguro que si Asuka o Misato siguieran con vida y escucharan de esto, se burlarían de él por el resto de la eternidad. El rostro de Irukukuu se ilumino de alegría mientras daba otro par de saltitos.

"¡Kyu, el hermano será hermano de Irukukuu!"

Exclamo para después acercarse al chico y comenzar a lamerlo, el castaño fue derribado al suelo después de la segunda lamida y tuvo que hacer un enorme esfuerzo para no reír fuertemente, le estaba haciendo muchas cosquillas y temía no poder parar de reír si comenzaba a hacerlo. Fue entonces que noto una presencia vagamente familiar por lo que dirigió su mirada hacía su origen, notando entre lamidas a la peliceleste que los había invocado. La chica estaba simplemente parada a unos metros de la puerta de la torre, sus ojos inexpresivos parecían estudiarlos fijamente. Irukukuu noto entonces a la chica, dejando de lamer al castaño y avanzando hacia ella.

"¡Hermana!"

Dijo alegremente mientras se detenía frente a la chica y bajaba su cabeza para observarla mejor. Tabitha solo alzo su mano y comenzó a rascar por encima del ojo de la dragón, haciendo que esta soltara soniditos de felicidad. Shinji se reincorporo y sacudió su ropa lo mejor que pudo, su camisa blanca y sus pantalones negros tenían pasto que se había pegado gracias a la saliva de Irukukuu. Entonces camino hacia la pequeña chica, esbozando una suave sonrisa para después detenerse a unos pasos de ella y hacer una leve reverencia.

"Mi nombre es Shinji Ikari. Mucho gusto en conocerte."

Se presento, asegurándose de que hacía una pausa entre su nombre y su apellido para evitar confusiones. Tabitha lo miro a los ojos unos segundos, sin dejar de acariciar a la dragón la cual parecía a punto de derretirse ante los mimos que estaba recibiendo.

"Tabitha."

Fue todo lo que dijo a manera presentación por lo que Shinji no pudo evitar mirarla confundido, estaba seguro que cuando la chica cerro el pacto del familiar se había llamado a sí misma Charlotte. Aún así, decidió no ahondar más en eso por ahora.

"Bien, señorita Tabitha, espero podamos llevarnos bien de ahora en adelante."

Finalizo las formalidades el chico, aunque la otra parte solo permaneció inmóvil, sin decir alguna palabra. Aun así, Shinji no se sintió incomodo, empezaba a darse cuenta de que esta chica parecía tener tan poca habilidad para comunicarse como su antigua amiga Rei, por lo que ya estaba acostumbrado a un comportamiento así de peculiar.

"¡Irukukuu también quiere presentarse con la hermana Tabitha!"

La dragón exclamo muy alegre y la peliceleste solo la observo fijamente, parecía estar analizando algo en su mente, por qué después de unos instantes negó con la cabeza.

"No hablar."

Dijo y la dragón se mostro confundía.

"¿Kyu?"

"Peligroso."

Shinji no pudo evitar entrecerrar sus ojos ligeramente ¿Qué tenia de peligroso que Irukukuu hablara? ¿Quizá la 'magia' de los dragones podría liberarse con palabras y la pequeña tenía miedo de ello? Era una posibilidad, pero tan lejos como parecía, las palabras de Irukukuu no mostraban tener ningún efecto en su alrededor. Repaso entonces todo lo que sabía hasta ahora sobre las criaturas de este nuevo mundo, llegando rápidamente a una conclusión que le pareció más posible.

"Supongo que un dragón que habla es algo muy raro de ver ¿no?"

Pregunto y Tabitha lo observo unos instantes para después asentir.

"Coleccionistas."

Ya lo suponía, si en verdad era tan raro como para que alguien los coleccionara, entonces eso ponía en peligro a la joven dragón.

"¿Kyu?"

Sin embargo, Irukukuu no entendía del todo a que se referían ambos, así que Shinji decidió explicarle un poco mejor.

"Parece ser que no es común ver dragones como tú, que pueden hablar con los humanos, así que es posible que traten de atraparte si se enteran de que posees esa habilidad."

Los ojos de Irukukuu se abrieron ante esto por lo que negó con la cabeza fuertemente, ella no quería ser atrapada.

"Tendrás que evitar hablar de ahora en adelante, al menos en lugares donde pueda escucharte otras personas."

Shinji le dirigió una mirada de disculpa mientras acariciaba su costado, en verdad se sentía mal por la dragón al tener que negarle algo tan básico como comunicarse con los demás, pero esto parecía ser la mejor solución. Aunque él había dicho que protegería a la peliceleste, no sabía qué tipo de problemas cruzaría de ahora en adelante así que en la medida de lo posible trataría de evitar cualquier conflicto que lo obligara a revelar sus propias habilidades.

"Kyuu…"

Irukukuu volvió a dejar caer sus alas, sus ojos mostrándose tristes mientras miraba al suelo, aún así asintió para hacerles saber que aceptaría lo que le pidieron.

Tabitha observo todo el desarrollo con ojos llenos de un interés oculto, sus dos familiares parecían haber formado un vinculo en el tiempo que estuvo inconsciente, cosa que la intrigaba ¿Era esto gracias a que los tres estaban unidos por el pacto del familiar? Otra cosa que la intrigaba era como el joven humano no parecía preocupado o molesto por la situación en la que se encontraba. Ella no era lo que se podría considerar una chica común, siendo que a sus 16 años había vivido cosas que muchas otras mujeres nunca vivieron en toda su vida, aún así, incluso ella tendría sus reservas y su parte de frustración si un día fuera transportada de pronto a otro lugar para ser el familiar de una persona que no conocía de nada y no sabía que planes tenía para ella. Es por esto que la actitud relajada del chico la hacía sentir en cierta forma inquieta.

"No sé mucho sobre lo que se supone que un familiar tiene que hacer. La señorita Kirche me explico varias cosas, entre ellas que se supone debemos protegerte. ¿Es esto correcto?"

Pregunto el chico mientras la observaba, parecía casi ansioso por comenzar a cumplir sus labores como familiar, fueran cuales fueran estas. Tabitha solo se quedo quieta unos segundos, para después asentir.

"¿Hay algo más que se supone tengamos que hacer?"

Ahora, esa era una buena pregunta. Si la dragón, Irukukuu, fuera su única familiar, bien podría dejarla a su ritmo para que se construyera algún nido en las cercanías o saliera a cazar su comida, siempre y cuando no molestara a nadie ni hablara con nadie, por supuesto. Pero Shinji era un humano y los humanos tienen necesidades diferentes a los dragones, no podía simplemente dejarlo a su gusto para que sobreviviera como pudiera. La chica lo pensó durante unos segundos, podría dejarlo dormir en su habitación, no había espacio para otra cama pero supuso que de alguna manera se las arreglarían. Para la comida solo tenía que pedirles a los cocineros que le permitieran tomar algo de allí, y sus otras necesidades era cuestión de indicarle los lugares adecuados y todo estaría bien. Con eso decidido, la pequeña chica asintió.

"Conocer el lugar."

Dijo finalmente mientras caminaba hacía la entrada del castillo, Shinji comenzó a seguirla y la joven dragón estaba por hacerlo pero recordó que ella no tenia permitido entrar así que hizo un gesto de molestia y mientras se sentaba, no era justo, Irukukuu también quería conocer el lugar junto a el hermano y la hermana.

"Explora los alrededores."

Dijo de pronto la peliceleste, girando la cabeza para observar a la dragón, Irukukuu se confundió un poco pero después asintió, soltando un alegre '¡Kyu!' para al siguiente momento alzar el vuelo y perderse en las alturas. Shinji silbo por lo bajo al ver cómo su compañera familiar alcanzaba la torre más alta del castillo en poco menos de un segundo, en verdad era veloz.

"Andando."

Tabitha reanudo su marcha, siendo seguida de cerca por el castaño, el cual se preguntaba que sería lo que sucedería de ahora y si ocurriría algo que lograra sorprenderlo nuevamente.

Fin del capítulo 2

Ending: Fly me to the moon (Shin Seiki Evangelion ending versión).


Kyuto89: Gracias por el review, me alegra que te gustara la historia, espero que siga llamandote la atención durante el resto de la misma.

DragFire: Graciar por el review. Yo tambien leí ese fic ademas de Surrogate of Zero y The left ARM of God. Todos muy buenos fics, lastiman que qedaron inconclusos. Actualizare un poco lento cada capitulo ya que tengo otros proyectos personales en marcha, pero espero poder llevarlo a buen ritmo y concluirlo.

VivaNewVegas: Thanks for you Review, hope you send me a link to the fic is you do it in english.

NEROANGEL0: Gracias por el Review, espero que la continuación sea de tu agrado.

queen-chiibi: Gracias por el Review. Seeh, en la gran mayoria de los crossover de Zero no Tsukaima es Louis quien recibe el cambio de familiar, así que quize darle un poco de variedad en el mio. Además, Tabitha es mi personaje favorito asi que espero darle el merito que se merece. Y sobre como reaccionaran los demás, bien, aun falta algo de historia antes de que Shinji empiece a revelar su verdadero potencial asi que habra que esperar -w-...

Han-Ko: Continuado, gracias por el Review, espero me sigas leyendo.

Hasta el proximo capitulo.