Abre tus Ojos

Taichi escuchó un sollozo, seguido tras otros hasta que se formó un suave llanto, sintió como se le oprimía el corazón y con cierta resignación abrió la puerta que lo separaba de la castaña, y la encontró, sentada en un rincón del sucio baño de aquel motel, con su cabeza enterrada en sus rodillas, sobre sus manos sostenía una prueba de embarazo, la cual al tomarla entre sus manos se dio cuenta del resultado ¡Dios! ¿Dónde estaba el maldito padre?

Digimon no me pertenece =(


Prólogo


Miraba por la ventana del copiloto, absorta en sus pensamientos, sus manos se retorcían una a las otras, en su cara estaba dibujada una gran angustia y debajo de sus ojos había dos grandes ojeras, Mimi rió amargamente, era increíble lo injusto y cruel que era el destino con ella, al dejarle con semejante carga.

—Mimi.

Sintió como una mano mucho más grande que la suya tomaba con ligera fuerza su antebrazo, volteó un poco su rostro encontrándose con la cálida mirada de Taichi, el cual la apretó un poco más, para transmitirle todo su apoyo.

—Hemos llegado.

Ella posó su mirada en aquel lugar, estaban frente a un edificio viejo, el mas alejado de Odaiba, en lo mas alto tenia un enorme rótulo el cual simplemente decía "Motel" en letras mayúsculas y seguramente en la noche brillaba, Mimi tragó saliva y un ligero rubor cubrió sus mejillas, nunca había estado en un motel, mucho menos para lo que iba.

— ¿Bajamos?

Tras varios segundos en silencio, Mimi asintió, se deslizó de aquel carro lo mas lento que pudo, ocultó el temblor de sus manos cuando Taichi se puso a su lado, notó como el sostenía con fuerza una bolsa de la farmacia a la cual habían acudido antes de llegar a su destino.

Ella empezó a caminar seguida de su amigo, en la entrada vaciló por una parte por la vergüenza y por otra por el miedo, Taichi colocó su mano sobre su hombro y con la otra empujó la puerta.

—Tranquila, no estás sola.

En el lobby, un joven de cabellos negros y alborotados jugaba con un DS, no aparentaba mas de veinte años, cuando posó su mirada una negra ceja se alzó sarcásticamente, Mimi no pudo evitar sonrojarse una vez mas, Taichi solo pudo reprimir un insulto cuando una sonrisa sarcástica surcó los labios de aquel joven.

— ¿A caso tienen la edad suficiente para acudir a un lugar como eses?—el joven posó sus divertidos ojos en Mimi la cual se había encogido en su lugar—Me retracto, ¿Ella tiene la edad suficiente? Porque si no amigo mío, me temo que podrías ir a la cárcel, por hacerle lo que vas a hacerle.

El joven de cabellos castaños y alborotados, cerró su puño con fuerza.

—Eso no te incumbe—gruñó— ¿me darás la maldita llave o tendré que ir a otro lado?

El joven sacó una llave de un pequeño compartimiento y se la lanzo a Tai, el cual de mal humor se acercó a él para pagar el precio de la habitación, antes de poder marcharse aquel joven sacó de una gaveta una pequeña caja, la cual abrió ante la mirada atónita de los chicos sacando de ella dos preservativos.

— ¿Sabes como usarlos no?—se refirió a Tai—Son parte de la casa—Se los lanzó—Ya sabes, no queremos que nuestras sábanas queden todas sucias.

Taichi levantó u n puño con fuerza dispuesto a reventarle la nariz al estúpido ese, pero las frágiles manos de Mimi le detuvieron.

—Por favor—dijo ella suavecito—Terminemos con esto.

La habitación era pequeña, una cama matrimonial con un edredón que a simple vista se notaba lo sucio que estaba, al igual que toda la habitación.

—lo siento Mimi, esto era lo único que podía pagar.

La chica le sonrió agradecida.

—Gracias a ti, Tai.

El joven sacó de la bolsa una caja rectangular y se la entregó a Mimi, ella con sus manos aun temblando la agarró, era una prueba de embarazo, la cual decidiría su destino.

— ¿Quieres tomar agua?

—No—susurro ella y luego a paso muerto se dirigió al baño.

Por suerte el baño no olía mal, estaba sucio, lo notó en los azulejos que tenían manchas verdes, en el espejo el cual estaba empañado, el lavabo que tenía manchas negras, y un par de cucarachas que vagaban en la ducha.

Mimi no perdió el tiempo, quería largarse de ese lugar, procedió a hacerse la prueba tal y como y decía en las instrucciones, dejo la barrita encima del lavabo, y cerro sus ojos con fuerza.

—Por favor, sal negativo—cerró sus ojos con mas fuerza—por favor, Dios, solo tengo dieciséis años, por favor, por favor.


Taichi escuchó un sollozo, seguido tras otros hasta que se formó un suave llanto, sintió como se le oprimía el corazón y con cierta resignación abrió la puerta que lo separaba de la castaña, y la encontró, sentada en un rincón del sucio baño de aquel motel, con su cabeza enterrada en sus rodillas, sobre sus manos sostenía una prueba de embarazo, la cual al tomarla entre sus manos se dio cuenta del resultado ¡Dios! ¿Dónde estaba el maldito padre?


Holaaaaaa, mucho gusto soy izzie, , por favor, por favor, tengan compasion de mi =(, este es un Mimato, aunque parezca Michi al principio no lo será, para nada, se que hay muchos fan fics de Mimi embarazada pero denle una oportunidad a este, verán que no se van a arrepentir en lo absoluto, de verdad se los prometo, solo pido una oportunidad y un review claro xD en el siguiente capitulo explicare toooooodo, que paso con Mimi, porque esta en Odaiba y no en Estados unidos, etc. etc... Tambien tendremos dramas entre todos los digielegidos asi que enserio, no se lo pueden perder =D

Asi q me despido chicos y chicas y nos vemos en el siguiente =D