Nota importante: Sailor Moon no me pertenece.

La cruel venganza.

Epilogo.

Cuatro años después. . .

El sonido del despertador sonó fuertemente en el cuarto, Darien se movió para apagarlo, a pesar de que trato de no hacer muchos movimientos despertó de todas formas a su esposa, pues fue Serena la que termino apagando el aparato.

- Cinco minutos más.- Rogo el pelinegro mientras abrazaba a su mujer.- Me gusta despertar así contigo.

- A mí también cielo.- Serena lo beso.- Pero hoy es un día muy importante. . .

- Lo sé, bien.- Darien se sentó en la cama.- ¿Visto a Endymion?

- Nada de eso, la última vez que te lo pedí porque teníamos una cita importante acabaste en el piso jugando con nuestro hijo y su juego de legos.

- Pero. . .

- Yo iré a ver a los niños, aunque Rini ya se viste sola.- Serena salió de la cama.- Tienes que ponerte tu mejor traje.

- ¿A qué hora tenemos que estar con Setsuna?

- A las diez en punto. . .

- ¡Serena!- Darien gruño.- Son las siete y quince, falta mucho tiempo.

- Pero tus hijos tienen que desayunar, y tú también.- Le guiño el ojo la rubia.- Luego te veo cielo.

Serena abandono el cuarto principal que compartía con su esposo con una gran sonrisa, en todos esos años llevaba una vida de maravilla, Rini ya iba a la escuela de prescolar y Endymion pronto iba a comenzarla también, así que tendría algo de tiempo para iniciar sus estudios en la universidad, quería estudiar arte, contaba con todo el apoyo de su marido y era lo que más la tenía contenta.

- Hola mi cielo.- Entro primero en el cuarto de su hija, Rini ya estaba fuera de la cama en pijama.- Ya estas levantada.

- Mi despertado acaba de sonar.- Le respondió la niña de poco menos de cinco años.- ¿De verdad hoy no voy a la escuela prescolar?

- No mi vida, hoy iremos a una ceremonia de inauguración.

- Papá dijo que una ceremonia de esas era para mostrar al público algo nuevo.

- Bueno así es, iremos a ver las nuevas obras que se han hecho en el orfanato de nuestra amiga Setsuna. . .

- Ella me cae bien.- Le dijo la niña de cabellos rosados.- ¿Fue ella quien me cuido cuando era muy, pero muy pequeña verdad?

Darien y ella habían decido contarle a la pequeña Rini parte de su historia, pues dado a que su esposo ayudaba constantemente al orfanato de Setsuna, ella se había vuelto una visita habitual en la casa Chiba

- Así es cielo.- Serena camino hasta el armario de la niña.- ¿Quieres el vestido azul?

- Si mamá.- La niña adoraba su vestido de marinerita azul.

- Bien, te lo dejo aquí en la cama, no olvides cepillarte los dientes y el cabello, iré a ver a tu hermano.

- Sí.

Su hija era una niña muy bien educada y responsable, Serena sabía que podía vestirse sola mientras ella luchaba con la gran tarea de hacer que Endymion despertara y poderlo vestir, entro en el cuarto de su hijo menor y como lo sospechaba seguía durmiendo.

- Mi amor.- Se acercó a la cama donde dormía Endymion.- Cielo despierta. . .

- Chocolate. . . Mucho chocolate.- Balbuceo el pequeño despertando lentamente.- Mamá estaba en el mundo del chocolate, había un rio de delicioso. . .

- ¿Cariño papá te dio chocolate antes de dormir verdad?

- Mmm. . .

- No me mientas Endymion.- Le dijo ella.- Porque hare que papá confiese.

- Si me dio una barra de chocolate.- Confeso al fin el pequeño.

- Ya veo.- Saco al pequeño de la cama.- Anda tienes que ir al baño y cepillarte los dientes, yo te espero aquí con tu ropa.

- Si mamá.

Sonrió al ver a su hijo obedecerle, fue hasta el armario del cuarto y saco el traje que había escogido la noche anterior, el pequeño volvió al poco rato, ella lo vistió lo arreglo para que fuese un hermoso caballerito.

- ¿Mamá?- La pequeña Rini, ya vestida, entro en el cuarto.- Estoy lista.

- Y hermosa como siempre.- Serena también acabo con su hijo.- Vayan a desayunar, estoy segura de que Diamante les tendrá algo delicioso.

- Si mamá.- Dijeron ambos niños al instante.

Serena volvió al cuarto principal, tenía que ducharse y vestirse, y para su alegría Darien estaba en la ducha, le puso el pestillo a la puerta del cuarto de baño, se quitó el pijama y abrió la puerta de la ducha.

- Te estaba esperando.- Darien le tendió la mano para ayudarla a entrar.

- Yo debería estar enfada contigo.

- ¿Por qué?

- Le diste chocolate a Endymion anoche. . .

- Y a Rini también pero ella no me delata.- Sonrió Darien mientras la abrazaba.

- Rini no sueña con el mundo de chocolate.

Darien estallo en carcajadas antes de comenzar a besarla en la boca el cuello y entre sus senos, Serena lo insto a seguir al buscar el miembro de su marido y comenzar a acariciarlo, sonrió al oírlo gemir.

- Traviesa.- Gruño él mientras él también la acariciaba íntimamente.

- Da. . . Darien. . .

Serena enterró las unas en la espalda de su marido cuando este la tomo contra la pared de la ducha y mientras ambos cuerpos eran bañados por el agua caliente, a pesar del tiempo que llevaban juntos ninguno parecía saciarse del otro.

- Te amo.- Gruño Darien mientras la penetraba con fuerza.

- Eres mi cielo.- Le dijo ella entre gemidos.

Al salir de la ducha ambos se secaron el uno al otro, ya habían tardado bastante así que se apresuraron, pues en cualquier momento alguno de los pequeños los podría interrumpir, y así fue cuando momentos después Serena estaba ajustando la corbata de su marido y ambos niños entraron corriendo.

- Ya desayunamos mamá.- Indico Rini.- ¿Podemos ir a ver caricaturas mientras ustedes desayunan?

- Claro cariño.

- Miren esto.- Diamante les indico la televisión cuando llegaron a la cocina.

- Tres son las mujeres muertas en el la pelea de anoche en la cárcel de máxima seguridad.- Decía un reportero.- Las identidades son las siguiente. . . Neherenia. . . Galaxia. . . Y Beryl, esta última y según fuentes cercanas habría iniciado una dispuesta con las dos mujeres anteriormente mencionadas.

- Beryl está muerta.- Murmuro Serena.- No lo puedo creer.

- Yo sí.- Le dijo Darien.- Según supe tiempo después de que la condenaron ya tenía varias enemigas dentro de la cárcel.

- Ya veo. . .

- Esa mujer tenía muchos problemas.- Comento Diamante.- Ya tenía precio sobre su cabeza.

- Entiendo.- Serena desayuno mientras pensaba en Beryl.

Si bien esa mujer les había hecho mucho daño, y ciertamente merecía pagar con la cárcel, pero nunca había esperado que la mataran, se había conformado con que en el juicio le hubiesen dado cadena perpetua como les habían indicado el policía que había llevado la investigación.

- ¿Ya estas lista mi conejita?- Le pregunto Darien de pronto.

- Si, iré por los chicos.

Unos momentos después la familia Chiba estaba yendo a la ceremonia de inauguración, Serena, que estaba sentada en el asiento del copiloto no dejaba de mirar hacia los asientos traseros, Rini iba tranquila en su lugar pero era el pequeño Endymion el que no dejaba de jugar en su puesto.

- Después de la inauguración podemos ir a comer hamburguesas al centro comercial.- Sugirió ella.

- ¿De verdad mamá?- Preguntaron ambos niños a la vez.

- ¿Tú que dices papá?

- Mmm. . . De acuerdo pero si mamá me da un beso.- Darien miro a sus hijos por el espejo retrovisor.- Ustedes tienen que convencerla.

- ¿Mamá puedes besar a papá?

- Lo voy a pensar. . .

- ¡Mamá!

- De acuerdo.- Aprovecho que tenían luz roja en el semáforo para besar a su esposo, pero antes de separarse le hablo al oído.- Chantajista. . .

- Pero te gusto.

- Mamá mira.- Rini el hablo cuando estaban bajándose del auto.- Es el tío Nicolás.

- Y la tía Rei.- Agrego Endymion.

- Mmm. . .- Gruño muy bajito Darien.

Serena evito reír, a pesar de que entre él y su hermano se habían declarado la paz hace ya tantos años, ellos no eran precisamente los mejores amigos de la tierra, aunque soportaban estar en la misma habitación a lo menos unas cuantas horas y eso al menos la dejaba tranquila, sobre todo porque su hermano aceptaba con total naturalidad su matrimonio, mal que mal él la había entregado en la boda religiosa.

- Hola hermano.- Serena saludo a su hermano, y posteriormente saludo a su cuñada.- Hola Rei.

- Mira mamá.- Rini volvía de la mano de su prima.- También vino Rei.

- Hola pequeña.- Serena miro a su sobrina, era una copia exacta de su madre, y por eso Nicolás había insistido en ponerle el mismo nombre que la madre.

- Bienvenidos.- Setsuna se le acerco.

- ¡Plut!- Rini corrió a los brazos de la mujer.

Por alguna razón que tanto ella como Darien desconocían su hija llamaba a Setsuna de esa forma, pero la mujer parecía aceptarlo de buena forma.

- Por favor pasen.- Les dijo Setsuna.- Estamos por comenzar.

- ¿Ya llegaron Lita, Andrew y los niños?- Pregunto Darien.

- Están sentados en primera fila.

Lita y Andrew habían tenido un niño hace dos años, pero tras muchas complicaciones en el embarazo de la castaña ya no podían tener hijos biológicos, aunque su amiga había sufrido mucho al sentirse muy poca mujer para Andrew, éste la apoyo en un ciento por ciento, así que tiempo después habían decidido adoptar, ahora no solo eran padres del pequeño Andrew Jr, sino que también tenían dos hermosas niñas de un año de edad, Setsuna había recibido un par de gemelas que habían sido dejadas en la puerta del orfanato, pero no había pasado mucho tiempo antes que las bebes enamoraran tanto a Lita como Andrew.

- Darien.- Serena se quedó impresionada con el gran edificio en que se había convertido el orfanato.- Es magnífico, has sido muy generoso.

- No solo yo, tu hermano también ha contribuido.

- Y ha sido tanto.- Intervino Setsuna alegremente.- Que ahora el orfanato cuenta con una escuela, una enfermería y personal muy calificado, estoy sumamente agradecida por todos ustedes.

Unos momentos después mientras Serena estaba sentada en la prima fila junto a su adorado marido comenzó a recordar todo lo que había vivido, ahora las cosas eran muy distintas, miro hacia un lado, su hermano y Rei estaban sentados y esta tenía a su hija en los brazos, al verla ambos le sonrieron, después miro en la otra dirección y vio cuan feliz era su amiga Lita que tenía en brazos a una de las gemelas que Andrew tenia a la otra gemela y al pequeño de ambos.

- Mira.- Le hablo Darien cuando entraron en el recién inaugurado colegio del orfanato.- Se ve muy espacioso.

- Darien.- Serena se agarró del brazo de su esposo.- Gracias por todo lo que has hecho por mi todos estos años.

- Y tú por darme dos hijos preciosos a los que criar y mimar.

- Más mimar que criar, pero para eso estoy yo.- Sonrió.

- Oye, muchas veces has dicho que soy un marido maravilloso y un buen padre. . .

- Si, eres un maravilloso marido.- Serena que era más bajita que su marido le beso el mentón.

- Te amo.- Darien la abrazo y la beso con mayor fuerza, tenía en sus brazos a su esposa, su otra mitad y al fin era feliz.

Fin.

Ahora si jijiji

¿Saben? Cuando comencé a hacer este fic pensé que no iba a superar los seis u ocho capítulos, pero nunca creí que sería tanto, en fin estoy contenta de todo el apoyo que me han dado y por eso quiero agradecerlo.

¡Muchas gracias!:

Yesqui2000.

Princesa Selene Mai.

Goshy.

Jan.

Vichita DS.

Mayiloza.

Karly15.

13.

Y a muchas otras personas más que leyeron esta historia.

Por cierto estoy trabajando en otra historia que espero les guste. ¡Saludos!