Nota de la autora original (sinceramente ya esto es muuuuuuy viejo...):

08/07/14

Hola a todos.

Continúo desempleada. Tengo una oportunidad para un trabajo de temporada, pero aún si lo consigo el mismo no comenzará hasta finales de agosto, así que no dispongo de una gran cantidad de dinero en la actualidad. Estoy tentada a vender algunos de mis doujinshis de Tiger & Bunny en tumblr si alguien está interesado. Tengo el mismo nombre que aquí allí, y puedo linkearlos hacia los blogs con las cubiertas y descripciones de los mismos. Pay pal es el único método que tengo para aceptar los pagos, y por supuesto, tendrás que ser mayor de 18 para comprar la mayoría de ellos dado que son algo... gráficos. Hay uno o dos que estarían bien para gente menor de edad.

También me han sugerido que quizás debiera intentar vender mis historias. ¿Alguien estaría interesado en tener una copia impresa de cualquiera de mis trabajos? Si aceptan, ¿qué clase de cosas les interesaría? ¿Es suficiente con la historia o les gustaría también las notas de autor? ¿Mi horrible intento de garabatear? ¿Los fanart que me han regalado? ¿Mi (carente de valor) autógrafo? Cualquier sugerencia en la materia será bienvenida.

Suficiente de mi palabrería, ¡disfruten la historia!.

Capítulo 20.

A la mañana siguiente el Doctor Saito llegó con Karina cuando ésta trajo el desayuno. Indagaba y hablaba en lo que parecía una genuina fascinación, mientras observaba cómo Bunny dislocaba su mandíbula para comer su pez de la mañana. Y quedó absolutamente intrigado por el deseo del ser de probar la comida de Kotetsu, y casi deleitado cuando el tritón simuló, o al menos intentó, escuchar cuando Saito se dirigió a él.

Pero de todos modos, el tritón perdió la paciencia cuando el hombre se acercó a su rostro. Aunque Saito había explicado que solamente quería sentir cómo era la mandíbula de Bunny para darse una idea de la estructura de los ligamentos, el tritón no quiso saber nada con el examen, apartándose continuamente; y cuando Saito insistió, Bunny dio una sacudida y salpicó con agua todo a su alrededor, hasta que el doctor, Kotetsu, el suelo alrededor del tanque y la cama del hombre quedaron completamente mojados. Sólo Karina había sido lo suficientemente inteligente para quitarse del camino y no contuvo su risa ante la flamante empapada apariencia de ambos.

Así y todo Kotetsu no pudo enojarse, pues Karina fue lo suficientemente buena como para ayudarlo a secar todo y llevar sus ropas de cama para ser lavadas, y Saito envió a Iván a buscar algunos baldes de agua salada para reponer el tanque de Bunny. Fue el tritón quien estuvo enfurruñado hasta que la habitación se vació otra vez salvo por ellos dos.

"Tendrás que aprender a comportarte mejor con la gente si es que esto va a funcionar," dijo Kotetsu, completamente consciente que aún no le había dicho al tritón sobre su plan de sacarlo del zoológico.

Como si intentase hacer las paces con el hombre, Bunny intentó hacer algunos sonidos. Aunque Kotetsu no pudo descifrar exactamente que era lo que el tritón pretendía decir, puesto que sonaba como un desastroso intento de "gatos" o "sopa de gato" sin la "o" pero Kotetsu sonrió y lo animó a continuar. También usó la oportunidad para rever el alfabeto con el tritón y si bien el ser nombraría las letras y haría sus sonidos, todavía no estaba interesado en formar palabras.

Karina e Iván se unieron a Kotetsu nuevamente para el almuerzo; ayudándolo a armar su cama también luego que la comida acabara, pero se quedaron un tiempo más intentando persuadir al tritón para que interactuara con ellos. Consiguieron que Bunny jugara unas cuantas rondas de "piedra, papel y tijera", aunque el tritón no comprendiera la jerarquía de los símbolos aún.

Casi en el mismo momento en que Kotetsu echó el cerrojo a la puerta detrás de los chicos, Bunny salió por sí mismo del tanque y cayó al suelo. Y aunque Kotetsu y Karina habían acabado de limpiar no hacía mucho tiempo atrás, el ex-policía no protestó. En vez de eso, buscó algunas toallas del baño y se arrodilló junto al tritón, colocando una toalla sobre su regazo, otra sobre sus hombros y una pequeña sobre el rubio cabello del chico.

Bunny, por su parte, se veía azorado. Examinó la toalla sobre su regazo, echó una ojeada bajo ella y la arrojó sobre su aleta pero no volvió a tocarla cuando Kotetsu la regresó a su sitio. En cambio, su atención se volvió a la que estaba sobre sus hombros, tomándola de las puntas antes de envolverse apretadamente con ella como si fuera una manta. Pero dio un respingo cuando Kotetsu comenzó a masajear su cuero cabelludo con la otra toalla, sin comprender que el hombre estaba intentando secar su cabello.

Kotetsu rió, "¿Sintiéndote inquieto en ese pequeño tanque tuyo, Bunny?"

Sin contestar, Bunny se inclinó y comenzó a acariciar la corbata de Kotetsu. Sus dedos recorrieron toda su extensión antes de tirar de la misma.

"¡Wow!," Kotetsu exageró su reacción de sofoco. "Ten cuidado, Bunny, eso está amarrado a mi cuello."

Por un momento, Bunny pareció pensar sobre la nueva información antes de tirar de la corbata nuevamente, esta vez con un empellón más gentil, pero persistente.

Con una sonrisa, Kotetsu se acercó al tritón.

Una vez que Kotetsu estuvo cerca, Bunny soltó la corbata y puso sus manos en los hombros del japonés, usándolos como palanca para acercar al hombre aún más.

Pronto Kotetsu estuvo cerniéndose sobre Bunny, sus rostros separados por pocos centímetros. Era la perfecta oportunidad para besarse.

Pero en vez de ello, Bunny levantó una mano y acarició el rostro del hombre. Al principio el tritón apartó algunos de los mechones de Kotetsu, las puntas de sus dedos cosquilleando contra la frente del japonés, y luego los mismos se deslizaron rápidamente por su sien antes de que su mano se apoyara sobre la mejilla de Kotetsu. Ese pareció el momento adecuado para besarse, pero Bunny deslizó su mano desde la mejilla del hombre, los dedos danzando brevemente sobre sus labios, antes de lanzarse sobre el mentón, disfrutando la oportunidad de sentir la barba de Kotetsu.

Una parte del cuidador se preguntaba si Bunny había visto alguna barba antes de conocerlo a él, dado que ninguno de los científicos del zoológico que sabían sobre la existencia del ser la tenían. Además, Bunny nunca había mostrado rastro de barba incipiente alguna y eso significaba no tener que afeitarse, tanto como Kotetsu podía adivinar. ¿Quizás los tritones no tenían barba hasta muy entrada su edad, o no la tenían nunca?.

Lentamente las manos de Bunny se movieron por sobre el cuello de Kotetsu, tocándolo apenas mientras lo observaba respirar.

Aún así el rostro del tritón estaba muy cerca del de Kotetsu, no le tomaría mucho a Bunny levantar la vista, cerrar esa distancia y encontrarse con sus labios.

Con cuidado de no perder el balance, Kotetsu levantó una mano para acariciar las caderas de Bunny, las cuales, aunque húmedas todavía, se sentían más como piel que como escamas. Logró el deseado efecto de hacer que el tritón lo mirara, y esa vez Kotetsu no iba a dejar que el beso se perdiera. Capturó los labios de Bunny con los suyos propios, moviendo sus manos desde las caderas hacia la espalda del ser.

Bunny respondió inmediatamente al beso, lamiendo los labios de Kotetsu y envolviendo sus brazos en el cuello del hombre. Y allí estaba el familiar zumbido eléctrico entre sus labios, y donde fuera que se tocaran, que fue enmudeciendo a medida que el tritón se secaba para convertirse en humano.

Kotetsu rezó para saber en lo que se estaba metiendo.


Con Bunny en su habitación, la capacidad de Kotetsu para conseguir víveres era casi inexistente. Hubo de sobornar a Karina para que comprara comestibles y unos cuantos artículos extra, aclarando que los crayones eran para su hija. Aunque no comprendió el motivo por el cual Karina pareció tan enojada cuando Iván se ofreció a ayudarla al escuchar que Kotetsu iba a prepararle arroz frito a la chica como paga. Prometió hacer una gran cantidad, de modo que Karina pudiera comer tanto como quisiera, pero la solución no pareció ayudar con lo que fuese que la tenía de mal humor.

Cuando estaban solos, las lecciones de Bunny continuaban desarrollándose bien. Parecía tener memorizado el alfabeto y su escritura a mano mejoraba. Una vez fuera de la satisfacción de Bunny, pues el tritón fue mucho más perfeccionista con respecto a ello que Kotetsu luego de ver la letra a mano del japonés y sus letras impresas, Kotetsu pensó que tendría que enseñarle a escribir con letra cursiva de modo que Bunny pudiera firmar con su nombre si lo necesitaba. Una vez que encontraran un nombre humano para él.

El problema mayor era conseguir que Bunny hablara, ya que el tritón parecía completamente desinteresado más allá de algunos sonidos básicos, y Kotetsu pensaba que la gente encontraría absolutamente sospechoso que el japonés tuviera de súbito un rubio amigo mudo. Y definitivamente no podría sobornar al tritón para que hablara besándolo en público. Kotetsu podría, bueno, ruborizarse hasta morir.

"Vamos, Bunny," a Kotetsu le importó muy poco el deber comenzar a rogar. "Tienes que hablar. Estaría muy feliz con algunos balbuceos a este punto."

Por respuesta, Bunny puso los ojos en blanco y volvió a hojear el diccionario. El movimiento de sus ojos indicaba que estaba leyendo pero en realidad era demasiado pronto para que hiciera eso, ¿no?.

"Bunny," Kotetsu pinchó con el dedo al tritón en su forma humana en un costado, haciéndolo otra vez cuando el mismo no le respondiera. "Bunny, vamos, háblame, Bunny." Kotetsu hizo un puchero mientras observaba al otro hombre, agradecido de haber conseguido que el tritón vistiera uno de sus boxers, el cual tenía corazones por toda su superficie. Y así y todo no podía mirar demasiado hacia abajo, porque los mismos le iban algo ajustados al chico, siendo que Kotetsu poseía una cintura más delgada. ¿Tal vez la próxima vez podría conseguir que el chico usara unos pantalones deportivos? Definitivamente serían más cómodos al menos.

"La buena comunicación es la base de una buena relación," intentó Kotetsu en vano.

Rindiéndose, Kotetsu suspiró y se echó de espaldas sobre la cama, sus brazos y piernas estirados. Se desperezó, arqueando su espalda en un intento de descontracturarla pero no tuvo éxito hasta que se retorció de lado a lado. Otro suspiro escapó de él mientras volvía a relajarse contra las almohadas.

Casi al mismo tiempo, Bunny se echó a su lado, apoyando su cabeza en el pecho de Kotetsu . Sin embargo, el tritón seguía intentando "leer" el diccionario, y estaba teniendo dificultades para hallar una manera de sostener el libro cómodamente.

"Ven, dame eso," Kotetsu sonrió, tomando el libro y sosteniéndolo de modo que ambos pudieran verlo, si bien lo acercó más hacia Bunny dado que el tritón definitivamente tenía una vista más débil cuando era humano. El hombre halló la primera palabra en la página actual y comenzó a leer en voz alta, ya que Bunny no podía, o no lo haría.

A medio camino de la tercera página, el modo en que estaban acostados y leyendo juntos trajo muchos recuerdos a Kotetsu. En los tiempos de la secundaria Tomoe y él se recostarían en una manta en las afueras de la casa y estudiarían justos del mismo modo, con Tomoe siendo la única que leyera dado que era Kotetsu quien necesitaba la instrucción. Luego, cuando Tomoe estaba embarazada ambos leerían manuales sobre bebés y libros sobre padres juntos en la cama. Más tarde, cuando Kaede era todavía muy joven, leerían cuentos de esa misma manera, acalambrados en la pequeña cuna de Kaede hasta que la niña cayese dormida, cada una de las chicas favoritas de Kotetsu teniendo su propio hombro en la que apoyar sus cabezas.

Los cuentos antes de dormir no duraron mucho más luego que Tomoe muriera, con Kaede insistiendo que ya era demasiado mayor para cuentos de hadas. Pero así y todo existieron unas cuantas ocasiones en las que la niña se había metido furtivamente en la cama con Kotetsu para leerle, bajo la excusa de querer practicar su lectura, usualmente durante una tormenta o cuando uno o ambos tenían un mal día.

Había pasado un largo tiempo desde que Kotetsu tuviera una cabeza sobre su hombro del mismo modo. Y la última vez que Kaede le había leído algo fue cuando estaba en el hospital luego de su herida, y la niña se había sentado en una silla a un lado de su cama, aterrada de lastimarlo.

Un suave roce a su lado le hizo comprender que había dejado de leer en algún momento. Ni siquiera podía recordar qué palabra había leído. Sus ojos tenían un exceso de lágrimas que hubo de quitarse parpadeando, tomándose un momento para deslizar una mano por el cabello de Bunny y besar su coronilla, sólo disfrutando de la cercanía.

"Se lo estás haciendo realmente difícil a este viejo, Bunny," murmuró Kotetsu. "¿Cómo se supone que voy a dejarte ir?"

Olvidando el diccionario, Bunny envolvió sus brazos alrededor de Kotetsu y se acurrucó más contra él, alentándolo silenciosamente a continuar deslizando sus dedos entre su cabello.

Permanecieron así hasta que Karina e Iván volvieron con las compras de Kotetsu. El diccionario fue puesto a un lado mientras Bunny se quitaba los boxers del hombre para volver al tanque, permaneciendo de pie y caminando muy bien por sí mismo a pesar de haberse visto tan débil antes, necesitando a Kotetsu para apoyarse.

"Eres un conejito tramposo, ¿no?," Kotetsu no podía mantener su ceño fruncido cuando Bunny le sonreía.

Una vez que el tritón estuvo en su sitio, Kotetsu echó la ropa interior en el cesto del lavado antes de dejar que Karina e Iván entraran a la habitación. "¡Hey, chicos! ¿Cómo estuvo el recado? ¿Les di suficiente dinero para todo?"

Mientras Iván le entregaba su cambio, Karina lo regañó por toda la comida basura que había en la lista, diciendo que nunca habría aceptado comprarla si hubiera mirado la lista primero antes de irse. La única cosa saludable que consiguieron fueron algunas bananas.

"¡Hey, los vegetales son saludables también!," protestó Kotetsu.

"No cuando son solamente para preparar arroz frito," dijo Karina.

"Espera a probarlo antes de juzgar," dijo Kotetsu, lavando sus manos antes de comenzar a trabajar.

Muy pronto ya estaban reunidos y comiendo el arroz frito especial de Kotetsu, Iván alabándolo mientras Karina admitía que "no estaba mal". Cuando Bunny se mostró curioso, Kotetsu le ofreció una cucharada, el tritón sorprendiéndolos a todos al comer de la cuchara mientras Kotetsu la sostenía.

"Le dejaste comer de tu cuchara..." murmuró Karina.

"¡Sabe comer de una cuchara!" exclamó Iván.

"Probablemente lo aprendió de vernos." Kotetsu no quiso contarles sobre la avena.

Cuando Bunny abrió su boca para recibir más arroz frito, Iván intentó ofrecerle una cucharada de su plato pero el tritón se mostró completamente desinteresado. Eso fue hasta que otra oferta llegó de Kotetsu.

"Lo siento, Iván," Kotetsu tuvo que resistir el querer dar palmaditas a la cabeza del alicaído chico. "Creo que a Bunny sólo le gustan mis gérmenes."

Karina lo llamó asqueroso, pero el resto de la comida transcurrió bien; la enorme cantidad de arroz frito devorada fácilmente por los cuatro.

"Ya sabe, Bunny parece entendernos muy bien ahora," dijo Iván luego de observar al tritón por un rato. "¿Cree que puede aprender cómo hablar?"

"Nunca emite ningún sonido," Kotetsu tuvo la esperanza de no haber contestado demasiado rápidamente. "Tal vez no sea capaz de hablar como nosotros lo hacemos."

"¿Qué hay del lenguaje de signos, entonces?" preguntó Iván.

"¿Lo hablas?," preguntó Karina.

"No," Iván titubeó por un momento. "Pero alguien en el equipo tal vez sí. Y si no podemos aprender."

"Supongo que no le haría daño," admitió Karina. "Sería lindo saber qué está pensando."

"Opino igual," Kotetsu asintió, feliz de que los internos no pensaran que era extraño, "Hey, ¿qué está haciendo Saito y el resto del equipo desde que no pueden observar a Bunny; tienen vacaciones?"

"No, están analizando datos y ayudando con el acuario," explicó Karina. Debería ser mucho más confortable para Bunny una vez que esté terminado."

"Bien, eso es bueno," dijo Kotetsu. Consideró abrir la cortina para espiar el acuario pero decidió esperar ser sorprendido.


[Fecha de inicio de traducción: 17 de Julio de 2014. Hora: 20:05. Fecha de término de traducción: 22 de Julio de 2014. Hora: 11:01]


Nota de la desquiciante pseudo traductora de siempre:

¡HOOOOOOOOOLAAAAAAAAAA A TOOOODOOOOOSSSSSS! Cuánto tiempo que pasó, qué barbaridad, dejé todo tirado y flotando en la cuarta dimensión! La culpa la tiene la bella vida cotidiana y mi emperramiento en subtitular "The Rising" (que ya la habían subtitulado... Pero este es un país democrático. Y dentro de los límites de las buenas costumbres es posible que todos los que saben subtitular subtitulen subtituláriamente a cuanta cosa deseen ponerle subtítulos subtitulosos de su gusto, conveniencia, color, tamaño y gracia decorativa). Lo que quería decir es que yo también, con ayuda de mi queridísima amiga Saintseiyana Jocasta de Tebas, Webmistress del Portal "Alianza Tebana", subtitulé e hice la completa edición de la segunda película de nuestros amados T&B. Me tomó muchísimo tiempo, esfuerzo, intercambio de Whatsapps y mails a todas horas con Jocasta para finiquitar bien la traducción. Queríamos que sea neutro y preciso. Queríamos que fuese de calidad, y creo que lo logramos. No me harté de darle las gracias por su ayuda, por sus correcciones y por su inagotable paciencia conmigo, que puedo ponerme asquerosamente pesada si me lo propongo... Y bueno! El resultado está para descargar de Youtube! Subí un pequeño video preview para fanfarronear; muchas me han dicho que se han reído mucho con el mismo; y están los links de descarga de la peli en formato AVI y MP4, en un solo link o en varios. Y en lo personal, y mientras me dedicaba al proyecto, pues... murieron dos familiares de mi novia (su tía, y su abuela materna, con un mes de diferencia entre una y otra), y eso nos sacudió muchísimo a ambas, puesto que en ambos casos las muertes estuvieron precedidas por largas internaciones hospitalarias, y nadie esperaba un desenlace tan... brusco. Mi novia dejó de escribir después de que su abuela partió. Yo seguí con lo de la peli porque si no, la cabeza me iba a estallar de tanto pensar y pensar (nunca pensé con tanto detenimiento en la muerte como después de todo esto...).

AAAAAHHHHHH! Muchas gracias por los reviews, por los favoritos, los follows, los saludos, el cariño, las palabras que me hacen llegar, los PM, su paciencia, su fidelidad y por dejarme entrar en sus vidas desde mi humildísimo hobby que es la traducción! Sólo soy una mensajera, porque las historias no son mías, pero me hace requetefeliz tanta muestra de afecto por hacer estas traducciones! Y eso me mantiene en pie para seguir haciendo crecer el Fandom TaiBani en español. Gracias de nuevo, besos a todos, y me encuentran en el Face y en Youtube! (en mi perfil están los links).

Nos vemos la próxima vez que Priestess actualice (que ahora está escribiendo sobre Avatar, The Last Airbender).