Disclaimer: Shingeki no Kyojin no me pertenece ni ninguno de sus personajes, son todos propiedad de Hajime Isayama. De ser mío Rivaille tendría más protagonismo y muchas más batallas junto a Mikasa jaja.

Advertencia: Contiene spoilers del manga, si no has leído al menos hasta el capítulo 30 del mismo, es aconsejable no leerlo.

¡Hola a todos! ¿Qué tal? Este es mi primer fic de Shingeki no Kyojin, y sea posiblemente el ultimo, dado que la inspiración no suele venir mucho a mí, y el tiempo menos todavía xD, pero necesitaba escribir algo sobre estos dos desde que leí el capítulo 30 del manga (que a mi parecer fue de los mejores). Tendrá varios capítulos, 3 a lo sumo, y un epílogo. El titulo del fic viene de la canción que tiene Levi como theme song "Reluctant héroes" ( watch?v=KevuJ_fSb4k), esta de aquí; así como los diferentes títulos de los capítulos son partes de la misma canción.

alinekiryuu (Holaa! Jajajaja habrá futuros raviollis y myhouses xD (me hace muchísima gracia esos "apodos" que les ponen xD) sii, hice ese momento medio aposta, se entienden y se complementan de maravilla jiji, lo de los mini mini Rivailles también me gustó mucho, teniendo en cuenta que él es también algo mino… xD si, limes he escrito mas, pero ese fue mi primer intento de lemon, y terminé por cortar la escena, no es que sea inocente al respecto ni nada, solo que no se me da nada bien el contenido explícito jaja. Bueno, muchísimas gracias por tu apoyo a lo largo de este fic, tus reviews me hicieron reir muchas veces jajaj. Un saludo!)

puripri (Hola! Gracias, me alegro de que te gustara tanto jeje, si bueno, tenían que quedar juntos si o si jaja, la parte del lemon… mas romántica que explícita, así soy yo xD. Espero que el final te guste, muchas gracias por seguirme a lo largo del fic! Un saludo!)

kchibkn (Hola! Gracias, me alegro mucho de que te gustara y bueno tal vez escriba otro rivamika, pero tiempo al tiempo jeje. Bueno, si hubiera puesto a una Mikasa completamente enamorada de Rivaille y sin hacerle caso a Eren habría sido muy Ooc, pero te doy toda la razón con tu comentario jaja. Jeje muchas gracias de nuevo por el apoyo durante lo que duró el fic, es de agradecer! Un saludo!)

Kass-Otaku Dee Uchiha'Dragneel (hola! Jeje bueno si, ya salió mi intento de lemon, aunque realmente corté la escena ya que lo explícito no es lo mío jaja. Espero que te guste el epílogo y final de esta historia. )

Arethahiwatari (Hola! Me alegro de que el capítulo te gustara, y bueno ya solo queda el epílogo, respecto a escribir más sobre esta pareja espero que sí, sacaré tiempo de donde sea xD. Muchísimas gracias por todo el apoyo a lo largo del fic! Un saludo!)

Foreveryour (hola! Jaja mikasa aun no ama a rivaille, lo quiere y le tiene cariño, por eso hicieron lo que hicieron xD, ya se verá como acaba todo entre estos dos locuelos. Sips, fue el último, ya dije que sería un fic cortito gomen, me alegro de que el fic te gustara en general, muchas gracias por todo el apoyo! Un saludo! )

TanksAndHeals (Hola! Si, ya terminó, siento que fuera tan cortita. Veré si saco tiempo para escribir algo más sobre estos dos, aunque mañana empieza ya la universidad y mucho no voy a tener jeje. Gracias por el apoyo a lo largo de todo el fic, ayudan mucho! Un saludo!)

Sakurita-akatsuki (hola! No importa jeje, lo importante es que la historia te guste . Me alegro de que todo el fic te resultara bueno, y si, tuve que hacer una edición del último porque como ya comenté en el "aviso" narré unos hechos demasiado parecidos a otro rivamika, así que opté por reescribirlo todo de nuevo para evitar problemas ya que nunca tuve la intención de copiar ni ofender a nadie con lo escrito jeje. Aquí está el epílogo, espero también te guste, trataré de escribir mas sobre ambos, muchas gracias por el apoyo! Un saludo!)

Nana-san (hola! Sii jeje, la primera vez de Mikasa, con Levi evidentemente XD. Bueno quedó medio claro que el ya algo enamorado, y la que tenía más dudas era ella, pero veremos cómo termina todo este embrollo amoroso jaja. Gracias por su apoyo! Un saludo!)

Lunatica Misa (Hola! Jajaja eso esperamos todos, que empiecen a aparecer mini mini Rivailles XD, jajaja si los experimentados dicen que son mejores, y ella no puede quejarse de nada xP. Bueno pues ya está aquí el epílogo, espero que te guste. Y gracias por seguirme a lo largo de todo el fic. Un saludo!)

MarianitaUchiha (Holaa! Muchísimas gracias, me alegro de que te gustara jeje. Bueno, tenían que celebrar de algún modo la reconquista de la muralla María, y Hanji no podía faltar con sus comentarios chistosos jajaja. Armin y muchos más ya se lo habían olido, Eren lo ve pero no quiere aceptarlo, aunque tendrá que hacerlo xD. Sii como era el último cap, y era la decisión final, pensé que ya era hora de que dieran ese graaan paso entre ellos después de tantos calentones jaja. Bueno pues, aquí está el epílogo, espero que también te guste. Muchas gracias por acompañarme con este fic! Un saludo!)

Petula Petunia (Hola! Siento mucho el mal entendido, pero bueno, ya está todo solucionado y espero que disfrutes de lo que queda de este fic. Un saludo!)

Hessefan (Hola! Te agradezco por tu extenso review, aunque creo que ya fue todo aclarado y solucionado. Siento mucho las molestias que causé de verdad, así que espero que puedas disfrutar de lo que queda de este fic. Muchas gracias y un saludo!)

Amerugui (Hola! Muchas gracias, y claro, siendo un rivamika no podía dejarlo sin final feliz (¿) para estos dos jaja, el lemon… seh, me dejé llevar más por el romanticismo del momento supongo, aunque no se me da bien lo explícito jaja. Quizás algún día haga algo más sobre ellos, buscaré el tiempo ahora que empiezo otra vez la universidad u.u'. Muchas gracias y un saludo!)

Aviso: el capítulo anterior fue reeditado. He cambiado la parte donde ambos conversaban porque como me hicieron ver en algunos reviews, tenía partes muy parecidas a un fic llamado "Después" de Petula Petunia. Mi intención no fue ofender ni mucho menos copiar, pero a mi mente venían retazos de ese fic que leí con anterioridad a la hora de inspirarme porque era muy parecido a lo que yo quería escribir y terminé haciéndolo muy similar. Por ello, pido disculpas a la autora.

Supongo que eso es todo, muchas gracias anticipadamente por tomaros el tiempo de leerlo, espero que lo disfruten, y si no es molestia me gustaría saber su opinión.


Reluctant heroes

Epílogo

Remember a day we dreamt


Las yemas ásperas de sus dedos recorrían con extremo cuidado aquella nívea superficie de piel, trazando la curvatura de los omóplatos, suavizando el tacto sobre los músculos destensados, y ejerciendo mayor presión en las manchas oscurecidas que componían el mosaico de cicatrices en su espalda.

Muchas de ellas causadas por los continuos enfrentamientos con sus enemigos, pero otras sabía, fueron infringidas por la mano del hombre, durante el tiempo que el malvivió en la calle.

Llevaba mucho tiempo acostumbrada a la misma piel, sabía de memoria la localización en su cuerpo de cada escara, y aprendía rápido la situación de las nuevas. Siempre aparecían más y más.

Dejó de tocarlo para llevar sus propios dedos a la venda que le cubría parte del bíceps izquierdo, el día anterior por la tarde regresaron de una escamosa misión que duró aproximadamente un mes. En la última batalla antes de volver a casa había perdido la concentración por un segundo, y eso le costó aquella pequeña herida, aunque por suerte resultaba apenas insignificante en comparación con muchas otras que recibió en el pasado.

Se levantó de la cama con cuidado de no despertarlo, dejando caer las vaporosas sabanas blancas por sobre su piel. Finalmente se colocó ante el espejo de la habitación, totalmente desnuda.

El paso de los años también había hecho mella en ella, y las constantes batallas contra los titanes habían empezado a mostrarse como marcas imborrables en su piel. Se acarició el brazo lastimado, y lentamente sus dedos fueron descendiendo por todo él, hasta llegar a la cintura y finalmente a su plano vientre.

Mikasa se entretuvo unos segundos de más observándose en el espejo, tenía el cabello oscuro ligeramente más largo, expresión neutra, los labios rosados y sus ojos negros impasibles. Rememoró cada momento de los últimos tres años, todo pasó muy deprisa desde que había decidido entregarse a aquel hombre de mirada locuaz e irises grisáceos.

Tras aquella primera noche, el peso de sus acciones calló sobre su conciencia. Trató de pensar durante un tiempo que una noche de sexo no implicaba nada, que solo se habían desahogado uno en el otro. Se mortificó mucho tiempo por ello.

Pasó dos semanas evitándolo, hasta que finalmente Levi encontró un momento para acorralarla y preguntarle con frialdad si se arrepentía ahora. Como única respuesta lo había besado y terminaron en la misma situación bajo las sabanas. Desde entonces nunca más lo volvió a evitar.

Descubrió que aquel hombre era su válvula de escape. Cuando se sentía agobiada recurría a él, cuando reñía con Eren, Levi la calmaba con sus besos, cuando el frenesí de una misión la ponía a temblar, la fricción de sus cuerpos era su bálsamo sanador.

Sus encuentros habían empezado a tornarse frecuentes, si podían encontrarse más de una vez al día, mejor. Terminaron yendo a todas partes juntos, comían juntos, dormían juntos y amanecían uno al lado del otro. En las misiones Mikasa nunca se separaba de Rivaille, se cuidaban la espalda mutuamente.

Su relación se convirtió en un secreto a voces entre los soldados, sus conversaciones, comentarios y la actuación en diferentes situaciones pareció suponer el detonante para que sospecharan que algo más allá de la mera cordialidad entre camaradas de equipo sucedía entre los dos soldados más fuertes de la humanidad.

El primero en buscarla para interrogarla sobre si era verdad que ella y Rivaille parecían mantener una relación fue Eren, acompañado de Armin. Mikasa lo miró a los ojos, y vio en él al joven que quería, al hermano que debía proteger, pero no al hombre con el que debía estar. No lo negó, ellos se quedaron callados y la dejaron marcharse tranquilamente, más tarde se enteraría por labios de su amante que Eren había ido a confrontarse con él, para pedirle explicaciones sobre lo que sucedía con ellos dos.

Poco tiempo después Jean, Connie, Sasha y los demás también estuvieron enterados, Hanji montó tal escándalo que acabó por informar a todos aquellos que no estuviesen enterados ya. Finalmente todos aquellos que vivían en el interior de los muros sabían sobre la relación entre el sargento Rivaille y la soldado Mikasa Ackerman.

Casi tres años habían pasado desde entonces, y debía reconocer que si bien las cosas no habían cambiado tanto, su perspectiva de ver las cosas si lo había hecho.

Eren se hizo mucho mas fuerte aun, adquiriendo un poder inmenso; Armin había pasado a ser parte del grupo que organizaba las tácticas de ataque y maniobraba las estrategias por su gran habilidad demostrada en numerosas ocasiones. El resto de sus compañeros fueron ascendiendo en sus respectivas posiciones al igual que ellos dos lo habían hecho, y el contraataque contra los titanes se volvió mucho más duro y efectivo. Con la recuperación de la Muralla María, y la progresiva exterminación de su enemigo, las misiones a las afueras se alargaban meses, llegando a ver alguna de las maravillas que contaba el libro de Armin, cosa que solo la dejaba con ganas de descubrir mucho más.

- Tú vives para provocarme, ¿no es cierto Ackerman?

Su voz ronca y la mirada ávida recorriendo incansable su cuerpo expuesto. Ella le sonrió tímidamente a su reflejo en el espejo, sabía que esa era su sutil forma de darle los buenos días y decirle cuanto le gustaba estar a su lado.

- En ocasiones pienso que el sexo es lo único que ocupa su cabeza, sargento Rivaille.

Mikasa vió su sonrisa pretenciosa a través del espejo, y como él se levantaba de la cama en sus mismas condiciones.

- Bueno… soy un hombre. Y nunca me canso de ver lo maravillosamente bien que te mueves sobre mí.

Ella se giró para encararlo con el ceño levemente fruncido, lo tenía justamente detrás. Y en un acto instintivo le propinó un suave golpe en el hombro. – Idiota… ¿Te he despertado?

- Lo hiciste en el momento en que dejaste de acariciar mi espalda. – Dijo en un tono bajo, dándole a entender que llevaba rato despierto pero soñoliento.

De pronto él la agarró de detrás de la cabeza, enterrando sus dedos en los mechones azabache y atrayéndola hacia si para besarla. Cuando se separaron le mostró otra pequeña sonrisa. – Buenos días.

Bostezó. - ¿Café?

- No estaría mal. – Mikasa había centrado su atención de nuevo en la silueta que le devolvía el espejo, justo cuando él empezó a alejarse.

Rivaille se colocó la ropa interior y los pantalones blancos del uniforme, y procedió a bajar descalzo las escaleras para llegar hasta la cocina. Desde hacía poco más de un año, ambos habían decidido formalizar su relación – después de que se hiciera completamente publica por culpa de cierta bocazas cuatro ojos – y rentaron una casa de dos plantas dentro de la muralla Rose.

Tan distraída había estado en sí misma, que no advirtió cuando él había vuelto a ascender las escaleras con el desayuno. Mikasa tenía las manos sobre su abdomen.

- Café y tostadas. – Anunció, y depositó la bandeja rápidamente en una de las cómodas para volver al lado de su mujer y averiguar el porqué de su estado de ensimismamiento.

- Gracias. – Fue lo único que respondió, con los ojos clavados en su reflejo.

La silueta de Levi también apareció a su lado, con el ceño levemente fruncido y sus ónices grises posados en la situación de sus manos. - ¿… cuando pensabas decírmelo?

Mikasa se sobresaltó entonces, como si acabara de descubrirla en mitad de una travesura, pero supo que no tenía caso ocultarle nada a él, siempre había sabido leerla perfectamente, incluso cuando lo odiaba.

- ¿Hanji te lo ha dicho? – No era una pregunta, sino una afirmación. Y necesitaba urgentemente que ella le respondiera, aunque por fuera no mostrara un ápice de interés.

- Ayer por la tarde.

No hubo necesidad de más palabras. Rivaille supo lo que eso suponía. Se colocó tras ella, con el mentón sobre su hombro desnudo, y observando la venda que cubría parte del brazo izquierdo.

- Fuiste imprudente. – Se refería al hecho de estar desprevenida, propiciando a uno de los titanes con los que se enfrentaba a causarle aquella herida, por nimia que fuese.

- No lo sabía entonces.

El bufó, pasando su nariz por la extensión de su cuello y aspirando el aroma dulzón que desprendía su cabello. – Eso no importa, yo no puedo protegerte siempre, y confío en ti para que te mantengas con vida. Si te perdiera… - Y las palabras murieron en su boca.

Mikasa lo conocía lo suficiente como para saber la continuación de esa frase, y lo que él no había pronunciado. Si Levi se caracterizaba por algo, era por su inexpresividad, incluso en la intimidad le costaba expresar lo que en verdad sentía.

El era un hombre de acción, no de palabras.

Estaba segura de sus sentimientos por ella sin necesidad que se los recitara todos los días, para ella era suficiente con los susurros ahogados a su oído donde le confesaba su amor en los momentos de pasión.

Enmarcó su cara con ambas manos y lo acercó a su rostro para besarlo. Esos tres años habían sido fructíferos para él, quien no solo creció, sino que adquirió una altura un poco superior a la suya (dos centímetros).

Todavía recordaba cómo se reía de él cuando le decía que a sus veintidós años estaba pegando el estirón. O en aquella ocasión que le habló de una lesión en combate donde terminó con ambas piernas rotas y una suspensión de casi medio año por incapacidad – ella se burló atribuyendo a esa rotura, parte de la culpa de su no crecimiento. Ahora él era más alto.

- Estoy bien. – Y lo dijo para reafirmar que lo estaba y borrar de su expresión aquella mueca lastimera.

- Mmmm. – El se apoderó de sus labios y se apartó de su lado, yendo directo hacia la bandeja con la comida. – Hoy mismo presentaras tu baja ante Irvin.

Mikasa asintió, y lo siguió. Levi masticaba una tostada en la boca mientras rebuscaba en su armario una camisa limpia, pero antes de agarrarla se detuvo y la miró otra vez. – Mikasa. – Llamó su atención. – Si sigues en ese estado no saldremos de casa.

Ella rió, y procedió a colocarse ropa, sabía que las amenazas de Rivaille con respecto a ese tema no eran en vano. Más de una vez lo retó, y en todas ella acabó sucumbiendo bajo suyo.

- ¿Qué es lo que te dijo Hanji exactamente? – Habló con la boca llena y abotonándose la camisa, empezando a rebuscar una de sus corbatas blancas que siempre llevaba al cuello.

Lo meditó unos segundos mientras se sentaba y tomaba un largo sorbo de su café matutino. El café nunca fue de su agrado, pero Rivaille se las ingenió para que le gustara, solo tomaba cuando él lo preparaba. - ¿Literalmente?

El se encogió de hombros ajustándose la corbatilla en el espejo. – Bien, fue algo así… "¡Enhorabuena Mikasa-chan! Ya estoy deseando ver lo increíble que es contra los titanes, aunque… seguro será tan bajito como el pequeño sargento". – Terminó entre risas, y tratando de imitar la voz chillona de la científica.

- ¡Maldita cuatro ojos! ¡He crecido!

Parecía verdaderamente molesto, Levi era ciertamente sensible con el tema de su altura. – No he terminado. – Anunció con cierto toque malicioso, y se propuso imitar a Hanji de nuevo. – "Oh, espero que herede tus facciones, y no los ojos de sardina de Levi".

El la miraba estupefacto, sentía su integridad pisoteada y manchada en el suelo. Rápidamente se encaró en el espejo y empezó a inspeccionarse la cara. – ¿Ojos de sardina? ¿A qué se refería con eso? ¿Mikasa? – Parecía cada vez mas exasperado, ¿desde cuándo tenía cara de pescado?

Como toda respuesta recibió una risotada, el moreno frunció el ceño y espetó una maldición contra la científica antes de sentarse malhumorado al lado de su mujer.

- No tendrías que haber recurrido a ella… esa loca se encargará de difundirlo a los cuatro vientos. – Y se sobó la cara ante la mirada enternecida de Mikasa.

- Si no lo ha hecho ya.

El levantó la mirada ligeramente exasperado. – Seguro que ya tenemos alguna jodida cesta de flores en la puerta dándonos la enhorabuena por esto. El viejo de Irvin me dirá que ya era hora de hacerlo abuelo o algo por el estilo.

Lo conocía lo suficiente como para saber que su presente desesperación no se debía al hecho de que pensarían y como actuarían los demás respecto a la noticia, - de hecho a él siempre le dio igual lo que pensara el resto – sino que recién ahora digería la noticia.

- Eren querrá matarte en cuanto se entere. – Dijo para quitar algo de hierro al asunto, conocía a la perfección que le tenía cierta manía a su hermano.

- Si ese idiota se enfrenta a mí lo único que recibirá será otra paliza.

Muy a su pesar, Mikasa estaba segura que el resultado de un enfrentamiento entre esos dos acabaría con la cara del castaño besando el suelo en cuestión de segundos, por muy fuerte que se volviera, la rapidez y fuerza de Rivaille estaban a otro nivel.

- No seas terco. Además, esto. – Y señaló su estomago. – Es culpa tuya.

El bufó desestimando la acusación y bebiendo su café desinteresadamente.

Siendo francos, a Mikasa no le sorprendía nada el estado en el que se encontraba ahora después de la extrema sesión de sexo a la que Rivaille la había sometido hacía poco más de un mes atrás.

Llevaban tres meses en una misión extramuros, separados en flancos distintos durante la mayor parte de esta. En cuanto regresaron a su casa, lo primero que hizo un insatisfecho Levi, fue arrastrarla a su habitación, cerrar con llave – si hubiese tenido un cartelito de "no molesten" lo habría colocado también - y lanzarla sobre la cama. No la dejó salir en lo que quedaba de día, y ella tampoco se resistió.

Él lo llamaba: "recuperar los días perdidos". Cuando regresaban de una larga misión, todo el mundo sabía ya que no debía molestarlos en al menos tres días, o sufrirían las consecuencias. Eren y Armin aprendieron la lección tiempo atrás de mano del propio Levi.

Tras eso, y poco tiempo después, fueron enviados a aquella última misión, donde permanecieron un mes a las afueras. A las semanas, Mikasa empezó a sentirse algo mas cansada de lo normal, acompañada de unas nauseas poco frecuentes en ella, sus movimientos eran más lentos y su marca de titanes aniquilados descendió ligeramente por su malestar.

No solo él lo notó, sino que varios más lo hicieron. Hanji le sugirió que en cuanto volvieran pasara por su despacho y revisaría si algo le había sentado mal o había enfermado, y eso fue lo primero que hizo el volver.

Después de describirle los síntomas que llevaba sufriendo ya un tiempo, la científica solo profirió una sonora risotada y le dijo: "Cariño, no es una enfermedad, es un bebe".

Mikasa quedó en shock.

- No te equivoques, Ackerman… la culpa es enteramente tuya, por ser tan jodidamente irresistible.

- Eres tú, el que apenas tiene resistencia.

- ¿Eso es un reto? – Dijo enarcando una ceja. Por supuesto ella no se había referido a su desempeño en la cama – Mikasa no tenía ninguna queja respecto a ese aspecto de su relación -, sino al hecho de que aguantaban poco tiempo en una misma habitación con la ropa puesta.

- Sabes a lo que me refiero. – Suspiró dando un sorbo a su café.

- Si… supongo que es culpa de ambos, entonces.

El silencio se hizo en la estancia durante unos segundos, ambos perdidos en sus pensamientos. Fue ella quien se decidió a romperlo. – Como sea… ¿Qué se supone que vamos a hacer ahora?

- Pues tenerlo, está claro.

- Rivaille. En menos de nueve meses va a haber un bebe merodeando por aquí.

El moreno asintió. – Con unos atractivos ojos de sardina. Lo sé.

Mikasa no pudo evitar reír por la locuacidad del hombre, siempre sabía que decir para quitarle hierro al asunto o deshacerse de su estrés.

- Esto me mantendrá mucho tiempo alejada del campo de batalla… - Y se tanteó el vientre.

- Yo lucharé por los dos. Puedo hacerlo.

Una vez acabado su desayuno, se levantó y empezó a colocarse las correas del equipo tridimensional, ajustando las correas alrededor de su cuerpo, y después hizo lo propio con la chaqueta de la legión de reconocimiento. Mikasa lo imitó.

Cuando estuvo completamente vestida, recogió entre sus manos una prenda, mirándola detenidamente y preguntándose qué tanto significaba ahora para ella. La bufanda de Eren.

Rivaille observó la ligera vacilación de la mujer, sobre si ponérsela o no. A él siempre lo había irritado verla con ella puesta, porque le recordaba constantemente al principio de empezar con todo, que Mikasa amaba a Jaeger, no a él.

Pero el tiempo había sabido modificar la balanza en su favor.

Y con el último suceso estaba más que claro por quien se había decantado al final, ella iba a tener a su hijo/a. De pronto, la divertida imagen del muchacho titán cubierto del vomito de su bebe le vino a la cabeza, haciéndolo esbozar inevitablemente una mueca de satisfacción.

Con calma se aproximó a Mikasa, tomó la roja bufanda entre sus manos y la enroscó alrededor de su cuello dejándola parcialmente sorprendida. Lo único que implicaba la prenda ahora para ella, era el lazo que la unía a su hermano adoptivo. Y no iba a obligarla a hacer que desaparecieran esos lazos solo porque empezaría una nueva vida junto a él.

- Lucharé… - Empezó con su tono grave, mientras le acomodaba la bufanda roja correctamente. – Para que puedas ver el agua de fuego, la tierra de hielo, los desiertos blancos y la inmensidad de los mares de agua salada… Para que ambos podáis.

Mikasa despegó sus labios un momento, absorta en la intensidad con que brillaban sus ojos grises antes de alejarse de ella. Recordaba que una más de una vez le habló de los escritos en el libro del abuelo de Armin, sobre sus sueños de niños de viajar libremente al exterior y ver con sus propios ojos las maravillas que se narraban en las paginas desgastadas de la novela.

Pero el nunca había mencionado tener el más mínimo interés en visitar aquellos lugares, por eso le sorprendió que lo mencionara en un momento como ese. Ella fijó su vista en las alas de la libertad que ondeaban en la espalda del hombre, y supo que lo conseguiría.

- Los tres lo haremos. – Y rápidamente le dio alcance, repuesta de su anterior estupor. – Los tres podremos verlo.

Rivaille sonrió y empezó a descender escaleras abajo. – Vamos. Ya me he preparado para la reprimenda que me dará Irvin por dejar fuera de combate a su mejor soldado.

Contenta, asintió y lo siguió un escalón por encima. Levi abrió la puerta con la galantería que lo caracterizaba y la dejó pasar a ella primero, para después salir tras suyo y cerrar la vivienda con llave.

Mikasa permanecía quieta en la calle, con los pies fijados al suelo y expresión divertida. Parecía estar aguantándose la risa.

El la observó con una ceja enarcada preguntándose la razón de su aparente cambio de actitud, cuando fijó su vista en un objeto pomposo que aparecía en el suelo, frente a sus pies.

Lo primero que vio fueron muchas flores, de todos los colores imaginables, colocadas ordenadamente dentro de una cestita de mimbre y una pequeña nota que rezaba: "Felicidades enanito. Supiste donde meterla." Demasiado tarde, Mikasa ya la había leído y las carcajadas se escapaban de sus labios.

Y por primera vez el sargento Levi Rivaille estuvo a punto de perder los estribos. Bufó sonoramente y arrugó la nota entre sus dedos, viendo con el ceño fruncido a la morena y señalando el arreglo de flores. Tsk.

- Te lo dije. La jodida cesta.

FIN. Bueno, y así termina, como previó Hanji, pronto habrá un mini mini Rivaille en camino xD. Como dije, la pareja que hacen estos dos me gustó desde el principio, además de que ambos son los soldados más fuertes de la humanidad, y bueno, todos sabemos que Mikasa parece enamorada de Eren, pero este no se cuenta para nada y solo la trata como su pesada hermana mayor jaja. Así que creo, que en cuanto conozca mejor a Rivaille se sentirá muy identificada con él, y terminaran apoyándose uno en el otro. ¡Eso espero!

Quiero agradecer a toda la gente que siguió el fic, ya sea desde el principio o se cogió al carro a la mitad, sus reviews han sido de mucho apoyo y me ayudaban a seguir escribiendo con muchas más ganas. Este es el final de "Reluctant Heroes" que espero os haya gustado, así como también que hayais disfrutado a lo largo de todo el fic. Para una no hay mejor recompensa que el disfrute de los lectores jeje.

Me alegro de haber podido actualizar justo a tiempo, mañana empiezo el segundo año de universidad, y hoy mismo me tengo que ir de casa para vivir en el piso que tengo alquilado allí para estudiar, donde no tengo internet por el momento jeje. Así que como no quería haceros esperar una semana (o el tiempo que tardara en contratar la línea y vinieran a ponérmela), me apresuré a terminarlo cuanto antes. Y lo conseguí al limite jajaj. Reitero lo muy agradecida que estoy con todos, un saludo, un abrazo y un beso!

Nuevamente les agradezco tomarse el tiempo para leer mi fic, y uno especial a la gente que dejó review o marcó como favorito.

Nos vemos, un besoo! Andy ;D