¡Holaaaa! Pues aquí de nuevo con este proyecto, como había dicho, aquí el pasivo es Levi. La verdad no puedo prometer que actualizaré muy seguido, tengo bastante carga académica en la universidad, pero siempre que pueda les dejaré algo. ¡Disfruten!

Disclaimer: Shingeki no Kyojin no me pertenece.

Advertencias: No mucho, alguna que otra escénica cachonda.

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La hora del té, momento sagrado del día. Aunque te encontraras en medio de un experimento donde se decide el destino de la humanidad, ese instante debe ser apartado para sentarse a tomar agua con sabor.

Precisamente eso mismo hacía el escuadrón de Levi en la comodidad del comedor del cuartel.

El sargento, sentado a la cabeza de la mesa parecía una fina pieza de mármol, movía su cuerpo únicamente lo necesario para saborear su bebida, con la mirada fría en la nada. Quizás recordando la noche salvaje que quisiera repetir con uno de sus subordinados, que había castigado por desobediencia y faltarle el respeto.

Auruo intentaba imitar al sargento pero se quemó la mano haciendo el ridículo frente a Petra, de nuevo.

Eld sostenía una conversación sin importancia con Gunter sobre razas de caballos.

-Esta tarde estaré libre, Eren. Yo te ayudaré con el jardín.-Petra siempre tan atenta con Eren. Por poco el sargento le arroja la taza que sostenía en la mano, más aun cuando notó la sonrisa del castaño hacia ella.

-Gra…-

-Lo hará solo. Ya que tienes tiempo libre, tengo otros encargos para ti.- Masculló Levi aun sosteniendo su taza y acuchillándola con la mirada, ardiendo en celos. Petra recordó todas, absolutamente todas las groserías aprendidas del sargento y las repitió en su mente, jamás volvería a delatarse con tiempo libre delante de él.

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El sol quemaba como una condenada hoguera, sentía la ropa pegoteada por el sudor. El olor a tierra ya le hastiaba y para rematar, aun le faltaba medio jardín por limpiar.

-Que lento eres.- Levi pasaba por ahí de manera "casual", para supervisar su trabajo/castigo. Pateó unas hojas cuidadosamente amontonadas por Eren momentos atrás, esparciendo todo por el lugar.

No sabía si era el calor sofocante, su mente corrompida o simplemente un ataque de "necesidad". Pero la visión del sargento en ese momento le pareció lo más estimulante que podría existir y sus más salvajes instintos salieron a la luz. Como bestia ciega se lanzó sobre su sargento, soportando el par de patadas que le atinó en los costados. Inevitablemente pararon al suelo los dos.

-¿¡Qué diablos estás haciendo, animal?!- Su paciencia alcanzó el límite, lo quitaría de encima si o sí.

-Tengo que limpiar el jardín, así que continuaré con usted.- Lamió con gula su cuello y le mordió. Levi quería patearle la entrepierna pero el castaño, acostumbrado a su trato, sabía perfectamente cómo manejarlo.

Se sentía sucio, casi podía percibir el polvo pegándose a su camisa, pelo y pantalón, todo empeoraba cuando veía los asquerosos rastros de tierra en el rostro del mocoso encima de él, pero al mismo tiempo se sentía como el más grande de los herejes de la higiene cuando esa imagen inmunda le provocaba sensaciones excitantes que le hacían temblar.

Bien pudo haberlo golpeado con sus brazos, cuando esa boca que antes devoró sus labios y parte de su cuello, se dirigía sin perder tiempo a su entrepierna.

Estas actividades son sagradas y se hacen en la comodidad de la cama. Estaba decidido, lo golpearía con un tubo de gas.

Vio cómo bajaba el cierre del pantalón con los dientes sosteniendo el contacto visual. ¿Quién se cree como para pretender hacer algo tan íntimo en medio de toda esa mugre?

Debía al menos pincharle un ojo.

Lamió su miembro por encima de su ropa interior.

¿Qué debía hacer?

-Nos….nos pueden…ver…sucia bestia insaciable…- ¡Ah si! Debía arrastrar las palabras más mariconas que se le ocurrieron, con la voz más aguda que podía salir de sus labios. - ¡Ah!.- El chico había comenzado con su trabajo ¿En qué momento el chiquillo liberó su miembro? Mejor dicho ¿Desde cuándo estaba duro?

Eren ni lo escuchó, poco le importaba lo que pasara, sostenía con firmeza las piernas de su superior bien abiertas, para asegurarse de que no lo estrangule con ellas después. Lamía toda la extensión deleitándose con las muecas que el sargento hacía con la cara, tan adorable.

Sintió unas manos pequeñitas aferrarse a su pelo, obligándole a engullir el miembro que tanto había degustado.

El mayor estaba desesperado por acabar y el mocoso perdiendo el tiempo. Movía su cadera contra Eren, se retorcía en el suelo sintiendo la tierra bajo él, estuvo a punto de terminar con fuertes estocadas, cuando Eren con una mano retiró las suyas, aprisionándolas contra el suelo y con la otra se aseguró de que su cadera no se moviera más.

Sacó el pene de su amante casi por completo, mirándole directamente a los ojos de forma coqueta.

-¡Ma…maldito! - Forcejeó con el menor intentando zafarse pero fue inútil, estaba débil por el casi orgasmo que tuvo. Eren no perdió más tiempo e inició unos cortos y lentos movimientos con su boca, procurando succionar la punta, pasando su lengua por toda la zona, divertido con los gestos de Levi.

-¡Ah!- Un par de minutos fueron suficientes para que Levi se descargara en su boca emitiendo el gemido más obsceno que Eren podría recordar. Se retiró sonriente tragándolo todo, por fin había cumplido su sueño de hacer algo fuera de la cama, ahora quería más. La golpiza que recibiría a continuación valdría la pena después de todo.

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¿Qué talle chic s?! Espero que lo hayan disfrutado XD No estoy tan convencida, pero espero mejorar y hacer los lemons más largos para los próximos capítulos, la historia tendrá tantos capítulos como lugares follables dentro y fuera del castillo, digamos que es algo así como el "recorrido sexual ERE/RI" jajajaja. En fin, acepto sugerencias o peticiones de lugares o situaciones. ¡Muchas gracias por leer hasta aquí!

Próximo capítulo:

"La oficina del comandante"

-No, jamás. Aquí si no, hasta Hanji entra aquí sin tocar.- Levi haría todo lo posible por no profanar el santo escritorio de caoba de su jefe.

-No hay de qué preocuparse, será rápido….-