Hola

Esta es mi primera historia, espero y sea de su agrado.

Elegí este día para publicar mi historia ya que donde vivo (México) se celebra el "Día de muertos", y como la "Diosa de la muerte" decidí hacer mi primera aparición.

Como ya mencioné en mi perfil me gustan las historias de los saiyajins donde no todo sean batallas y purgar planetas. Creo que al igual que los seres humanos, y a pesar de su carácter violento, ellos podían tener sueños y aspiraciones no tan propias de su raza.

Se supone que el planeta Vegetasei poseía una gravedad diez veces más fuerte que la Tierra. Lo cual nos haría suponer que los tsufurujins eran algo fuertes, tal vez no tan fuertes como los saiyajins pero en definitiva más fuertes que los humanos.

Cuando Goku muere y va al planeta de Kaio-sama se le dificultaba el movimiento durante los primeros días. Lo cual nos haría suponer que los tsufurujins eran más fuertes que Goku en ese entonces. Pero en el capítulo especial donde sale Bardock, se aprecia a Goku bebé, con un poder de pelea de 2 unidades y se mueve perfectamente mientras llora. Debido a estas discrepancias les comento para fines de mi historia los tsufurujins tendrán como máximo un poder de pelea de 30.

Comenzamos...

En la galaxia del sur, en un planeta llamado Plant, existía una raza conocida como los tsufurujins. Los tsufurujins eran seres muy parecidos a los humanos, sólo que estos a lo mucho llegaban a medir un metro (1.0936 yardas).

Todo era paz… Hasta aquel suceso, en el año 550. El rey de los tsufurujin de nombre Gamon, se encontraba en su habitación leyendo un libro. De pronto entró una sirvienta.

—Majestad, le llama por teléfono el consejero Nemol —Dijo la sirvienta.

—Tomaré la llamada, gracias —Recibe el teléfono— ¡Hola Nemol! ¿Cómo estás?

—Gamon, buen día, tenemos asuntos importantes que hablar —Contestó Nemol.

—Te escucho entonces —Dijo Gamon amablemente.

—No, Gamon. ¡Esto es delicado! Necesitamos hablar en persona urgentemente. Venga inmediatamente a mi oficina —Dijo regañándolo Nemol.

—Eeee… Ok. Voy en seguida —Respondió un confundido Gamon.

Gamon era el único hijo del anterior Rey el cual tenía cinco años fallecido. Nemol y el anterior rey se conocían de toda la vida. Al morir el rey, lo natural hubiese sido que Gamon eligiera nuevos consejeros, pero decidió confiar en los viejos amigos de su padre.

"Nemol siempre se comporta conmigo con tanta formalidad, me hace sentir como si yo fuera más viejo que él cuándo la realidad es otra. Aunque esta vez pareció que me ordenaba ir a su oficina, como si él fuera mi superior... ¿Qué estará pasando?" Ese fue el pensamiento de Gamon.

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Gamon caminando hacia su destino, se encontró a un Nemol ansioso que lo esperaba afuera del edificio para llevárselo a su despacho privado. Al entrar fue invitado a sentarse al lado de Meafrabus, otro consejero. Eso a Gamon le dio mala espina.

—Gamon, te cite de manera urgente debido a que tenemos asuntos muy delicados de que hablar —Dijo Nemol nervioso.

—¿Qué pasa? —Preguntó Gamon.

—Majestad, el satélite ha estado recibiendo mensajes en los cuales se solicita una reunión con usted —Dijo Meafrabus. El monarca no entendió por qué sus compatriotas estaban tan nerviosos, las audiencias eran lo más normal en la vida de un Rey.

—¿Quién la solicita? —Cuestionó Gamon.

—Saiyajins —Respondieron ambos al unísono provocando que al rey se le abrieran los ojos del terror.

—¿Se refieren a los que aniquilaron la población del planeta Rosgotk? —Preguntó asustado Gamon.

—Los mismos —Confirmaron los dos con desaliento.

—¿Qué dicen exactamente los mensajes? —Cuestionó Gamon.

—Bueno, ellos que quieren reunirse con usted. Ante la negativa de una respuesta han mandado un ultimátum... en cinco días al medio día vendrán unos representantes de los saiyajins para tratar los términos que quieren discutir. Nos solicitan las coordenadas para poder aterrizar, el ultimátum dice que de no recibir una respuesta, aterrizarán de todos modos— Le respondió Nemol.

—¿Cómo está eso de negativa de respuesta? ¿De qué están hablando? ¿Cuántos mensajes se han recibido? ¿Y por qué demonios me lo dicen hasta ahora? Nemol —El rey preguntó a su consejero pero este solo agacho la cara— Nemol —Insistió el rey a su consejero pero él siguió sin responder —Nemol, debes responderle a tu Rey cuando te habla— Gamon prácticamente gritó.

—No lo sé, cincuenta o sesenta, perdimos la cuenta —Respondió Nemol avergonzado.

—¿Por qué no me lo habían dicho? —Preguntó Gamon tratando de calmarse.

—Por decisión unánime de todos los consejeros, decidimos ocultarlo porque sabíamos que usted aceptaría la reunión. No consideramos prudente recibir a los extintores de una raza —Dijo Meafrabus con voz firme.

—Pues yo si lo considero prudente. Los saiyajins están solicitando de manera pacífica una reunión e ignorar el mensaje me parece un acto suicida —Dijo el rey alterándose de nuevo, ambos interlocutores agacharon la cara.

—Por amor de Kami, ¡Exijo que me digan que más me han estado ocultando! —Gritó el histérico rey.

—Solamente eso —Respondieron ambos consejeros avergonzados.

—Escúchenme, ¡No voy a tolerar otra insubordinación! Tengo que saberlo todo. Si hubiera sabido esto antes, habría respondido el mensaje aceptando la reunión que los saiyajins quieren. No supimos exactamente cuál fue la razón por la que aniquilaron a nuestros aliados del planeta Rosgotk, sin embargo creo que debemos considerarnos afortunados de que aunque posiblemente crean que he ignorado sus mensajes, todavía nos den una última oportunidad para hablar. Los guerreros de Rosgotk tenían un nivel de combate de noventa unidades, si ellos no pudieron vencerlos, nosotros mucho menos. Así que lo mejor será prepararnos para la llegada de los representantes de los saiyajins —Dijo el rey.

—Majestad, me atrevo a sugerir que nos preparemos para recibir a varios Saiyajins porque no sabemos exactamente el número de representantes que vendrán, ni si llegarán acompañados —Propuso Meafrabus.

—Tienes razón. Tenemos que limar asperezas y para eso tenemos que mostrar cordialidad, preparar varias habitaciones para recibirlos a todos, pero sobretodo un gran banquete, tengo entendido que los saiyajins adoran comer. Además, la comida limitada daría la impresión de que no queremos su visita. En cuanto a las coordenadas. ¿Dónde será buen lugar para avisarles que pueden aterrizar? —Preguntó Gamon.

—En el cuadrante dos, conozco un espacio abierto muy amplio a cinco kilómetros (3.107 millas) de aquí. Debemos tomar en cuenta que no sabemos las dimensiones de la nave o si llegaran en varias de esas —Dijo Nemol.

—Perfecto. Envíen las coordenadas del lugar. Habrá decoración con flores y pancartas para dar la bienvenida, cada tsufurujin del planeta estará presente ese día —Dijo Gamon ya totalmente calmado e incluso aparentemente entusiasta con la visita de los saiyajins.

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Y así se prepararon para ese día. Habría un gran banquete para todos, pero los mejores platillos se reservarían para los saiyajins, dudando de el gran apetito de los saiyanjins prepararon comida como para cien tsufurujins y muchas habitaciones. Cerca del lugar de aterrizaje colocaron varios vehículos que servirían de transporte para los saiyajins. A los costados del camino los tsufurujins estaban acomodados como si fueran a ver un gran desfile.

Treina minutos antes de la hora señalada los tsufurujins estaban presentes, al medio día el satélite detectó que una nave había atravesado la atmósfera.

La indignación pura se hizo presente en algunos consejeros como vieron aterrizar una nave nodriza que alguna vez fue tripulada por el Rey del planeta Rosgotk.

Comenzó a abrirse la compuerta y vieron… algo que no se imaginaban…

CONTINUARÁ…

Así empezó el primer capítulo de mi historia... espero que hubiese sido de su agrado. Los invito a dejarme su comentario

Los nombres son anagramas de frutas.

Nemol-Melon

Meafrabus-Frambuesa

Gamon-Mango

(Sin querer gamon es el nombre de una hierba)

Publicado el 02 de noviembre de 2013