Pues primero que todo aclaro que los personajes de Inuyasha pertenecen a Rumiko Takahashi (si me pertenecieran "Inuyasha" sería un Hentai)

Éste es un reto para el foro "Hazme el amor" aquí les dejo el link... forum/Hazme-el-amor/152341/

Contiene algo de lenguaje explícito...

No soy buena en esto de las notas antes o después de un texto así que sin más ni más espero sinceramente que disfruten mi texto

10:30am

"¿Por qué esas cosas le pasaban a ella?" Lamentaba Rin antes de tomar otro trago.

Ya llevaba 3 shots de ese Tequila supuestamente fino que compraron para pasar el viernes y aún no se sentía muy animada. En ese momento ella y sus amigas estaban en una supuesta "Ladies Night" en una nueva disco que inauguraron en la zona y no podría sentirse más decadente aunque se tomara el trabajo de intentarlo. Desde hacía 2 años, que comenzaron su vida laboral, tenían como tradición dedicar 2 viernes de cada mes a su "Noche de chicas" donde hacían recuento de sus semanas y hablaban de sus avances amorosos... aunque todos los viernes solo se dedicaban a eso último.

Como a veces sucede en los grupos muy cercanos, comienzan a surgir parejas ente sus integrantes. Kagome y Sango estaban emparejadas con 2 de sus amigos más cercanos; Inuyasha y Miroku, haciendo que cada viernes de reunión Rin tuviese más información de la necesaria sobre la vida amorosa y sexual de sus amigas. Como la vez que Miroku pidió el día libre para sorprender a Sango en el trabajo con un arreglo floral entregado por él mismo y como al final del día las lentas y sensuales estocadas de aquel que Rin consideraba como un hermano dejaron Sango prácticamente inconsciente y tan húmeda que su líquido llegó al colchón.

O el frenético ritmo que adquiría su mejor amigo cuando hacía el amor con Kagome que mínimo 3 veces por semana despertaba húmeda y con las manos amarradas mientras Inuyasha le daba "El mejor sexo oral de su vida", aunque claro, ambas perdieron la virginidad con sus parejas actuales así que el de Inuyasha era el "mejor" y "único" sexo oral que Kagome había recibido.

Aunque en el aspecto teórico (y gracias a sus amigas) pocas cosas podrían sorprenderla, la parte práctica la asustaba... Para nadie era un secreto que Rin era virgen de la misma manera que todos sabían que estaba profundamente enamorada de Sesshomaru, su jefe y hermano mayor de aquel considerado como su mejor amigo. Era mejor conocido como "el perro de hielo", ya que más de la mitad de las mujeres de la metrópoli de Tokyo le conocían a fondo pero ninguna había logrado sacarle siquiera la llave de su apartamento o mejor dicho, el registro de la huella dactilar para accesar su penthouse.

Estar con él sin sentir incomodidad era jodidamente difícil, pero Rin podría tener un PhD sobre esa materia ya que su compañía le resultaba extrañamente agradable... por malas experiencias ella sabía que las personas que más aparentaban bondad eran aquellas que más rápido se encargan de lastimarte, Sesshomaru no era así, ella sabía cómo era él por dentro; frio y sanguinario y no le importaba ya que era eso lo que mostraba. Ella sabía que si alguien se llevaba un ataque de su parte, no podría estar sorprendido, ya que a pesar de la imperturbable coraza, él no era de falsificar emociones ni sentimientos y esa genuinidad que conocía en pocas personas le encantaba de él.

Salió de sus cavilaciones para notar que sus amigas le miraban con lástima, "¡perfecto!" pensó con sarcasmo y tomó otro shot de ese supuesto Tequila fino. Estaba segura de que era "Chamberlain" re-envasado en una botella reciclada y redecorada por el dueño del local. Estaba esperando sentirse un poco más viva hacía 30 minutos y no lograba nada... bueno, nada además de sentirse ridícula... realmente quería hablar con él

— Rin — Le llama Kagome usando su tono más conciliador — Deja de pensar en eso, ya pasó. ¿Que importa si ese tonto no fue capaz de apreciar tus sentimientos?...él se lo pierde — Pero no se lo perdía, y eso era lo que más le dolía, si él quisiera podría tener a cualquier mujer que se le antoje... a cualquiera menos ella porque no ha sido capaz de mirarla con algo más que con un ligero aprecio todos los años 9 años que la conocía.

No aguantó más y pidió el "Uninhibited", la bebida más cargada que tenían en el bar, para las tres, que, cuando llegó fue tomada por Rin como si fuera una Coca-Cola después de una sesión de gimnasio para comenzar a sentirse un poco más exaltada...

12:17am

— ¡No es justo! — Alzó la voz — ¿A quién se le ocurre entrar a su oficina con los ojos cerrados?... ¡Toda la junta directiva escuchó cuando le declaraba mis sentimientos!

— Hubiese sido solo eso... — pensó Kagome en voz alta ya que fue la primera en enterarse de la noticia gracias a Inuyasha que forma parte de la junta y sabiendo que su amiga necesitaba apoyo, decidió organizar otra salida ese viernes ya que el pasado se habían reunido.

— Osea...— continuó Rin — Le declaré que quería que tomara mi virginidad y que sentía mis pupilas dilatar cuando lo veía entrar— Dijo y después del silencio que se formó gracias a la confesión se escuchó la risa estruendosa de Sango

— Perdón, perdón... — Se disculpaba tratando de secar sus ojos— Eso no da risa — Decía avergonzada mientras bajaba la voz a lo que Rin respondió con otra risa... se estaba idiotizando, tal vez el "Chamberlain" no haya sido tan malo...

—No Sango, si da risa. Lo que no dio risa fue su respuesta, osea... me dijo: "Recoge tus cosas, dejarás tu cargo — Imitando su mirada y su tono de voz — Osea, casi salgo corriendo de ese lugar... ¡No es justo!— Terminó de decir y comenzó a tener un llanto histérico — No puedo... decir... que esperaba perder mi virginidad en su oficina... ¡Esperaba... que... la perdiéramos... en su baño privado!... ¡hasta tenía mi kit para perder la virginidad!... tenía el lubricante de la chica de naranja y una falda de sobra... ¡hasta tenía condones con sabor! — Terminó de confesar entrecortadamente para después levantar su cara y con sorprendente velocidad servirse otro trago

Ante esa confesión Kagome y Sango se miraron, Rin podía llegar a ser muy rara cuando se lo proponía...

— Pero esto no quedará así... — comenzó a decir antes de levantar su celular —lo voy a llamar para decirle sus verdades — comentó con tono decidido

No contó con que antes de llegar al número que quería llamar su "Drunk Lock" se activara imposibilitandole su propósito — ¡Mierda!— Soltó y miró a su amiga más cercana — ¡Oe Kagome!... ¿Cómo queda "x" después de ser despejada...? — Preguntó con una extraña soltura a lo que Kagome la vio incómoda... Rin siempre ha sido buena en cuestiones aritméticas. Si no podía responder ese problema, significaba que no estaba en capacidad de realizar esa llamada y mantener su dignidad (-¡JA!-)... mejor dicho, su orgullo en alto. Estaba disponiéndose a quitarle el celular cuando se ve interrumpida por la misma

— No, no es nada Kagome... ¿sabes qué? me voy a bailar... ¡Oe DJ! — Gritó a un hombre que salía del baño — ¡Ponte "I will survive"!

1:00am

"Oh, Dios" pensaron Kagome y Sango mientras veían como cantaba el coro de "Believe" con Jakotsu; un joven que a demás de tener un color parecido al salmón en sus labios, fue presentado hacía 20 minutos como el nuevo novio de Rin, momento que fue muy dramático después de que Jakotsu declarara que... a pesar de que Rin era el paquete completo, él prefería a alguien que contara con uno...

Ya llevaba como 8 tragos encima (sin contar el "Uninhibited") y no comprendían como aún podía seguir parada y bailando.

Sango miró su reloj para darse cuenta que faltaban 2 horas para que cerraran la disco y decidió pedir su quinto trago sintiéndose un poco más mareada. Odiaba admitirlo, pero "Believe" era su placer culposo y quería cantar el-repetitivo- estribillo de la canción antes de que acabase, así que decidió levantarse y con esa misma fuerza de voluntad haló a Kagome y la llevó a la pista... Al fin y al cabo se suponía que era una noche de chicas donde las tres iban a bailar y disfrutar...

2:30am

— ¡Yo no quiero agua! — Cantaban las tres a pulmón suelto mientras levantaban los vasos vacíos— ¡Yo quiero bebida! ¡Yo no quiero agua! ¡Yo quiero bebida!

Estaban bailando en el centro de la pista. Ya no había tantas personas como en un inicio pero no podían darse cuenta de ese cambio. El local ya estaba a punto de cerrar y aún no sabían cómo iban a hacer para poder irse. Las luces estaban tan fuertes que Kagome juraba que iba a tener un ataque de epilepsia pero de igual manera seguía bailando, sabía que Inuyasha se enojaría si llegaba a verla en el estado en el que estaba pero no le importaba. Ya no podía responder por su cuerpo que bailaba desenfrenadamente.

Al otro lado de la disco divisó a Hitomi la novia de Souta, su hermano menor, que la reconoció enseguida. Ella era una buena chica que a penas iba por quinto semestre de Universidad, se conocía de casi toda la vida con Souta y llevaban gustándose desde que estaban en kinder aunque oficializaron su noviazgo a inicios del secundaria y llevan una relación estable ahora que están en la Universidad.

Kagome solo necesitó decirle tres incoherencias para que Hitomi, con sus ojos dulces, se ofreciera a llevarla de vuelta y ésta solo necesitó darle una mirada a Rin que estaba abrazando a una planta y susurrándole un "quiero un hijo con tus ojos ámbar" para ofrecerse a llevarla ella y a Sango que estaba rogándole a DJ que ponga "Believe" como por séptima vez en esa noche.

Hitomi agarró Kagome y la llevó a un costado de la salida con sus cosas para que la esperase. "Va una, quedan dos" pensó alegrándose mientras comenzaba a buscar a Rin. Cualquiera que conociera su situación podría intuir que ella quería mucho a Souta, al menos lo suficiente como para encargarse de esas tres muchachas que se encontraban en un estado deplorable. Cierto, pero también lo hacía con cariño... esa era una de las cosas que hizo que su novio se enamorara de ella; era tan dulce, siempre veía por los demás y ayudaba con gusto a quien creía que lo necesitara.

Al divisar a Rin comenzó a acercarse a ella que ahora lloraba mientras halaba las hojas de esa planta... giró al lugar donde había dejado a Kagome y ya no la veía...

— "Oh, Dios" — pensó— "Ésto va a ser más complicado de lo que pensé"

2:47am

"¡Quegemos vegg a Set-chomaru!" Repetían las tres que ignoraban que iban saliendo de la disco de la misma manera que ignoraban quien conducía y que estaban inclinadas encima de la otra.

Hitomi suspiró, pensaba dejarlas en la casa de Kagome pero parece ser que había perdido las llaves y su novio, Inuyasha, salió esa noche en un viaje de negocios.

Por Souta sabía quien era Sesshomaru; aunque no tenía fama de ser tan cálido como una tarde de verano, Souta aseguró que era responsable y, muy a su manera, confiable.

Era una joven Universitaria que acaba de comenzar una vida con su novio... sabía que Souta la estaba esperando y para él Kagome era su foco de admiración, no tenía que ser muy lista para saber que Kagome no quería que Souta la viera en el estado en que se encontraba. La observó a través del espejo reflector. Ahora dormitaba con la boca abierta... pudo notar un hilillo brillante caerle a Sango

"También..." recordó para si misma con júbilo "Sesshomaru vive en el mismo edificio que Inuyasha" ¡Ay, en esos momentos amaba la chismosería de su novio!, sabía donde vivía Inuyasha (y por ende, Sesshomaru) ya que tuvo la oportunidad de visitar el lugar una vez que Kagome los invitó a cenar. Vio el semáforo en verde y giro para entrar por la avenida. Se sentía mal al dejar a las tres jóvenes al cuidado de alguien ajeno a la situación, pero no podría hacer más... Bueno, podría llevarlas a su casa y ver como Kagome pasaba uno de los momentos más humillantes de su vida... si Sesshomaru no acordaba en cuidarlas, le tocaría esa última opción... ya vería que iban a hacer.

3:00am

Estacionó su carro en frente del gran edificio y se las arregló para bajarlas a las tres agarradas y extrañamente sumisas, el encargado de cuidar el lugar les abrió la puerta y muy amablemente comunicó con el señor Taisho que al escuchar el estado de su ex-secretaria, su cuñada y la mejor amiga de estas las mandó a subir con un tono no muy alegre.

Hitomi las acompañó al último piso donde vio a Inuyasha esperándolas, al parecer el viaje terminó siendo aplazado y acabó de recibir la noticia del estado en que se encontraba Kagome mientras la esperaba para dormitar con ella antes de ir a su viaje que, tendría que aplazar por unas horas o inclusive por un día completo para cuidarlas a las tres, al darse cuenta de eso pidió un segundo a Hitomi que comenzó a admirar a su alrededor, mientras comenzaba a llamar a Shippou, su asistente

— ¿Enano?— Se escuchó la voz de Inuyasha en el pasillo que, fácilmente podría ser del tamaño de la acera de un barrio residencial — Sí, necesito que aplaces la cita de hoy para mañana... ¡ya se que es de última hora enano! no, no voy a cancelar esa cita, es muy importante ¡pero si Kagome se emborrachó enano!... ¿qué hago yo ahí?, no, Sesshomaru no va a cuidarla y de todas maneras no voy a dejarla al cuidado del iceberg... ¿¡que no puedes!? Mira chaparro, te juro que no me importa que me demandes por acoso laboral, cuando te encuentre te voy a...

— Yo las vigilo— Se escuchó una pausada voz al otro lado del pasillo. Las jóvenes que estaban inclinadas hacia la pared que se encontraba al lado del ascensor riéndose estruendosamente voltearon hacia su dueño y Rin sintió cómo la sangre comenzaba a colorear sus mejillas y de la misma manera cómo abandonaba su cuerpo a través de su nariz...

— Oh, mierda — Pensó en voz alta y continuó comentando—...Sesshomaru-sama se ve cogible— Comentario que solo por parte de las jóvenes risueñas pasó desapercibido, en cambio, los jóvenes le dedicaban una fugaz mirada mientras se sentaba en el suelo ignorante de la atención que llamaba...

Inuyasha estaba estupefacto, sabía que Sesshomaru odiaba tomar el papel de niñera y más si podía tener otra opción, así que no entendía por qué se ofrecía a cuidarlas. No gustaba mezclarse mucho con su hermano(y por circunstancias de la vida vecino) y menos que nada deseaba convertirse en una carga. Miró su reloj, faltaban dos horas para emprender camino hacia el aeropuerto, podría cuidarlas en ese tiempo... salió de sus reflexiones al ver a Hitomi acercarse a él para despedirse antes de hacer una inclinación hacia Sesshomaru e irse a su casa a descansar un rato con su novio. Al verla desaparecer se acercó a Sesshomaru para establecer las condiciones cuando recordó que había dejado a Shippou en la linea

— ¡Mierda! — Soltó antes de dejarle el día libre al enano... era un dolor en el trasero, pero a pesar de todo era un excelente asistente, ya cuando iba a establecer los términos escuchó a Rin cantando

— ¡Set-chomaru! ¡Capuio, dame un hijo tuyo!

— ¡Si oni-san! — Interviene Kagome — ¡Dale un hijo a Lin-chan!

— ¡Chi Maru-chan! Nun..ca te he viss-to con nobv-ia, a veces pienso que eres del equipo de Jak-chan

— Aeee — Dijeron Kagome y Sango en unisono — ¡Maru y Jak-chan!

— Ahora que lo pienso — Intervino Rin — Chomalu, además de sel el paquete, tiene un paquetómm... a veces me plegunto si usa relleno

— ¿Chí? — Preguntó Kagome mirando detalladamente ese punto exacto de la anatomía de su cuñado para terminar diciendo — Che ve como el paquete de mi Iñu-yacha aunque el de Inu tieñe una calactelística especial, el de Inu...

— ¡Bueno Sesshomaru! — Intervino Inuyasha alzando a Kagome y a Rin del brazo — Te lo agradezco, me voy en dos horas, así que las cuidaré en ese tiempo, más tarde te las dejo

Sesshomaru asintió y comenzó a devolverse a su hogar cuando sintió a Rin corriendo hacia él y envolver sus brazos en su cuello y enredar sus piernas en sus caderas

— ¡Ñoooo! ¡Malu, ievame comtigo!

— ¡Rin! — Intervino Inuyasha para llevarla con ellos, pero cuando se dio cuenta Sesshomaru iba rumbo a su penthouse con Rin colgada dejándolos a todos anonadados y en silencio... hasta que Sango decidió hablar

— Kag... ¿Cual esh la calactelística especial del paquete de Iñu-Yacha?