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Bueno, mi nueva máquina por fin ha llegado. Sera OotorixSakuno y espero me apoyen en este nuevo proyecto.

Espero les guste.

Gracias por leer.


Disclaimer:

Prince Of Tennis no me pertenece.


Resumen:

Estaba nerviosa porque era su primera cita con él desde que salían juntos que tan solo era una semana, sin embargo, no entendía porque llegaba tarde o mejor dicho porque se estaba comportando medio raro, entonces se dio cuenta él también estaba nervioso, sonrió infantilmente al notarlo, era raro verlo de esa manera por muchas razones... si definitivamente la cita perfecta


Cita

Sakuno dio un leve suspiro, le dolía la cabeza un poco, se había levantado demasiado temprano para buscar el atuendo perfecto, se sentía un tanto nerviosa por no decir demasiado, era su primera cita con su ahora novio así que si tenía derecho a estar nerviosa, estaba lloviendo un poco por lo que traía una somrbilla pequeña que estaba guardada en su bolso, estaba recargada en la pared de la cafetería en la que habían quedado de verse, alzo la mirada y observo a personas pasar riendo o platicando, algunas parejas compartían la sombrilla dando una imágen demasiado linda.

Miro su reloj de nueva cuenta, media hora había pasado de la hora acordada, no entendía porque llegaba tarde, a las competiciones de tenis nunca llegaba tarde, no precisamente por ser el capitán pero era algo más o menos así, miro a lo lejos la pastelería que le encantaba, dudo en ir o no ir, le apetecía un pastel para la tarde porque apostaba que él no llegaría, bueno no podía quejarse, no era fácil ser él después de todo - ¡Sakuno! - ladeo la cabeza y lo observo corriendo donde ella, se veía demasiado agitado.

Se mordio ligeramente el labio al verlo corriendo, paso por personas disculpandose con las mismas por chocar con ellas hasta que se detuvo delante de ella inclinandose para tomar aire, se veía demasiado agitado, inesperadamente sonrió ante la imágen, le gustaba verlo así quiza porque demostraba que había corrido solo para llegar a donde se encontraba, busco en su bolsa y extrajo una botella de agua, se la extendio y este la tomo con una maravillosa sonrisa que provoco un sonrojo enorme en sus mejillas.

- G-Gracias - dijo jadeando buscando recuperar el aire, tomo un poco del líquido mientras ella jugaba con sus dedos - Lo siento, me quede estudiando hasta tarde y bueno mi despertador no sonó... lo siento de verdad, es decir, no te estoy diciendo que no eres importante de hecho eres muy importante para mí, realmente no quería lle... - se inclino para rozar sus labios en un casto beso para que guardara silencio, su corazón latía demasiado cuando había dicho que era muy importante para él, lo noto sorprendido por su acción y por eso sonrió un poco.

- No pasa nada, ¿vamos? - él asintió aún medio aturdido para tomarla de la mano y comenzar a caminar pero entonces se dio cuenta de algo - ¡Te vas a resfriar! - su grito la tomo por sorpresa, lo vio despojarse de su suéter para pasarlo por sus hombros a pesar que ella tenía el suyo, negó con la cabeza pero él la tomo del mentón, estaba lloviznando, no mucho y él al parecer no se había dado cuenta - N-No esta lloviendo mucho, vas a enfermar - señalo ella pero él sostuvo su rostro con una mano mientras con la otra sujetaba su suéter.

- No quiero que enfermes - aseguro él mirandola sinceramente y dio un suspiro, lo conocía bien así que sabía que no iba a desistir, asintió y él continuo con el camino, con su mano libre busco en su bolso hasta encontrar una bufanda, lo detuvo al apretar un poco más su mano y este ladeo la cabeza momento que aprovecho para pasar la bufanda por su cuello mientras sonreía - Listo - Ootori sonrió apretando su mano para continuar con ella con dirección al cine, la primera parada de su primera cita.


Sakuno sostuvo con una mano las palomitas acarameladas mientras Ootori le indicaba su asiento, la película empezaría dentro de nada, fue entonces cuando se dio cuenta de que habían muchas chicas y casi ningún chico, miro a su novio que lucía cómodo, fue un tanto extraño ver que no había puesto una objeción cuando le señalo cual sería la película que quería ver, por el contrario le había sonreído, sin embargo, estaba medio nerviosa porque quiza no le gustaría ver lo que ella deseaba ver y deseaba que la cita fuera perfecta.

- O-Ootori, ¿de verdad quieres ver esta película? - le pregunto y él la miro encarnando una ceja - Si, es decir, tú la quieres ver para mi no es ningún sacrificio así que esta bien el verla, ¿no quieres verla? - pregunto y ella negó con la cabeza dando a entender que si quería verla pero este la sujeto de la mano tironeando de ella fuera de la sala, eso no era lo que ella quería - Bien, entonces ¿qué película quieres ver? - pregunto y ella apunto a la sala donde estaban, el peliplateado ladeo la cabeza caminando de regreso.

Siendo sincera era la primera vez que lo veía actuar de esa manera, parecía un tanto nervioso, volvieron a tomar asiento en sus asientos respectivos justo al tiempo que la película empezaba por lo que guardaron silencio, lo vio acomodarse y la sala se volvio por completo negra, ladeo un poco la cabeza para verlo mirando directamente a la pantalla, le agradaba que hiciera cosas como esas por ella, le encantaba y mucho.


Iban caminando de la mano con dirección a una cafetería para comer algo, eran como las ocho de la noche cuando él se detuvo en mitad de la calle con una sonrisa - ¿P-Puedes esperar aquí? Vuelvo rápido - señalo él y salio corriendo, ella se quedo de pie con una ceja encarnada, camino hasta la pared del local de comida y se recargo en el mismo, la lluvia seguía su curso, lloviznaba levemente pero apostaba a que llovería más fuerte en menos de una hora, por suerte sus padres estaban de viaje así que podía quedarse a dormir a altas horas de la noche.

Miro en dirección donde su novio se había marchado, la cita era perfecta por dos razones, se había esmerado en ver la película que había elegido aunque diez minutos antes del final había terminado con su cabeza reposada en su hombro y con su respiración pausada, la imágen era demasiado tierna de hecho pero tenían que salir y la segunda era porque de verdad estaba disfrutando caminando con él a su lado, cuando sus amigas le habían preguntado si de verdad era cierto el rumor de que eran novios había dicho que si y ellas habían estallado en risas.

No mentiría diciendo que no se había sentido desubicada y sabía porque, las anteriores novias de él eran más altas, como mínimo su estatura, venían de familias adineras igual que ella pero con la contraparte de que no solo eran herederas sino de que eran modelos, la verdad es que ella no tenía manera de eso así que solo era ella misma, otra razón era porque eran más voluptuosas, sin querer su mirada bajo a sus pechos y se mordio el labio, no tenía mucho pero tenía... ¡debía dejar de pensar en esas cosas porque sentía su cara hirviendo justo en ese momento!.

- ¿Estás bien? ¿Tienes fiebre? - alzo la mirada para verlo, su cabello estaba húmedo y su pecho subía y bajaba, vaya que al parecer había corrido y mucho - N-No, estoy bien - aseguro y él la tomo de la mano, camino un poco apresurado por lo que se sujeto con fuerza de su mano - ¿A d-dónde vamos? - pregunto cuando este doblo un callejón con una sonrisa en el rostro - Sorpresa - señalo y ella no se quejo, confiaba en él así que no iba a haber algún problema.


Unos minutos antes de llegar a quien sabe donde Ootori la había detenido por la mano para colocar un pañuelo alrededor de sus ojos, ahora mismo él estaba detrás de su espalda con sus brazos abrazados a su vientre mientras su mentón estaba recargado en el hueco de su cuello - ¿Sabes qué eres lo más valioso qué tengo verdad? - pregunto él y ella asintió con la cabeza, no mentía, se lo decía muy seguido, ignoraba las razones, lo no tenso por lo que llevo sus manos hasta las de él y las dejo sobre las mismas con una sonrisa.

- E-Es la primera vez que hago esto así que espero que te guste - señalo el peliplateado y ella asintió, lo sintio soltarla y en cuestión de segundos el pañuelo había caído de sus ojos, abrio los ojos y quedo maravillada por la vista, estaban en lo que parecía ser un planetario pero era diferente porque estaba adornado con algunas máquinas que creaban nieve, la estrellas tenía un brillo diferente y entonces entendio el porque de las mismas, el planetario estaba abierto pero no era solo eso si no que reflejaban luces de colores y lo entendio cuando los fuegos artificiales estallaron en el cielo.

Era solo para ella aunque más personas fuera de donde se encontraban podían disfrutar de los fuegos - E-Entendere si no te gusta, es decir, realmente no soy bueno en estas cosas pero tú... eres la elegida así que espero que te guste porque lo prepare para nuestra primera cita, bueno no con estoy te estoy diciendo que las demás no seran especiales porque lo seran, lo juro pero esta es la primera y bueno supongo que para la mujer en este caso tú debe ser especial así que... solo di que te gusta - lo vio bajar un poco la cabeza.

Era la primera vez que lo veía realmente nervioso, por lo general siempre demostraba valor, no mentía con eso pero ahora realmente parecía perdido en sus acciones, le gustaba verlo de esa manera porque demostraba que era un ser humano, lo tomo de las mejillas para que alzara el rostro y le sonrió - M-Me encanto - aseguro juntando sus labios con los de él en un cálido beso, las manos de su novio bajaron hacía su cintura mientras ella se sujetaba de su cuello, era un beso especial siendo sincera... si definitivamente la cita perfecta por que estaba con su persona especial y porque él le había demostrado cuanto la amaba con un gesto como aquel además de decirle que era la elegida, con eso tenía más que suficiente para que fuera la cita perfecta.


N/A

Espero les haya gustado.

Gracias por leer.