Hola :) Les quiero agradecer MUCHÍSIMO a aquellos que han estado leyendo y siguiendo el fic, en serio que aportan mucho, más con los comentarios.

Hoy quise (mi mamá me dio la idea) publicar un capítulo "especial" de Halloween. Espero que les guste porque nunca había escrito nada así y para ser honesta, no quedé muy satisfecha con el resultado, pero en fin... Disfrutenlo.


¿HERMANA?

POV. Regina

Desde que tengo memoria, siempre he sido una buena niña, saco buenas calificaciones, hago mis deberes y siempre obedezco a mi madre, aunque no siempre esté de acuerdo con lo que ella dice.

Mi madre siempre ha tenido un temperamento serio, rara vez llega a sonreir. Todo el tiempo la pasa enojada, antes pensaba que era por mi padre, ya que la pasaban peleando, pero cuando él murió ella continuó igual. Después comencé a creer que era por mi culpa, pero con el tiempo me di cuenta que no era nadie más que ella. Ese era su carácter. Ella decidía ser así.

Al ser una niña de diez años me daba miedo hacer algo mal, temía que cualquier cosa que yo hiciera le molestara. Pero ahora, a mis 15 años, ya he aprendido a vivir así. En fin, eso es otra cosa. El punto es que unos meses después de cumplir once años, comencé a sentir algo... O alguien. Era una presencia que me acompañaba día y noche. Pero parecía cobrar fuerza cuando mi madre estaba cerca. No quise tomarle mucha importancia, tal vez solo eran ideas mías, así que continué mi vida como si nada pasara, estaba segura que tarde o temprano esa extraña sensación de alguien observandome se iría. Pasaron dos años, y justamente el día de mi cumpleaños entré a la cocina para buscar una vela, ya que la luz se había ido y yo me encontraba sola en casa. Estaba buscando en uno de los cajones cuando la encontré, tomé el encendedor que se encontraba en el mismo lugar y encendí el pabilo. La vela no alumbró mucho, pero alcancé a ver una silueta frente a mi, tan solo unos centímetros más alta que yo. Di un salto hacía atrás y la vela cayó al suelo, apagándose en cuestión de segundos. Me dio tanto miedo que salí corriendo y subí a mi habitación, abalanzandome a la cama. Comencé a llorar después de un rato, tenía mucho miedo y no por pensar que alguien había entrado a la casa. Sino porque sabía que no había nadie adentro más que yo. Tres horas después la luz regresó y 10 minutos más tarde escuche la puerta de la entrada abrirse, seguido de la voz de mi madre anunciando que ya estaba en casa, baje las escaleras y corrí lo más rápido que pude hasta ella, sorprendiendola con un abrazo y hundiendo mi cara llena de lágrimas en su hombro. Le conté lo que había pasado y dijo que era mi imaginación, que necesitaba dormir más temprano para no tener ese tipo de alucinaciones.

Curiosamente al día siguiente, me encontraba sola de nuevo y la luz volvió a irse, parecía tratarse de un deja vú, lo cual me aterraba. Pero igual fui a la cocina, a oscuras, busque la vela, el encendedor, y los encendí, sintiendo la presencia de esa persona, miré alrededor, pero no vi a nadie, solo escuché un paso y la flama de la vela se apagó, como si alguien le hubiera soplado. Me dio pánico, pero de todas formas me quedé ahí y encendí de nuevo el pabilo. Mantuve la vista en la flama, evitando mirar hacia cualquier otra parte, veía la pequeña llama titilar y cuando dejo de hacerlo, voltee para enfrente, con más seguridad, fue entonces que la vi.

Una adolescente pelirroja se encontraba parada enfrente de mi, para mi desgracia llevaba un vestido amarillento, roto y cubierto con manchas de sangre seca y tierra. Sentía que sus ojos verdosos me atravesaban y su sonrisa me hacía sentir menos fuerza y más horror. No supe qué hacer, comencé a llorar, pero no podía irme, me aterraba la idea de que si intentaba correr, ella se abalanzaría sobre mi. Permanecí mirándola, haciéndome la fuerte, de pronto se acercó y sopló a la vela, apagandola una vez más. Cuando me vi sola en la oscuridad, salí corriendo igual la vez anterior. A partir de esa noche, la seguí viendo en todas partes, pero ella no se me acercaba, solo me veía desde lejos, las únicas veces que ella se paraba junto a mi, era cuando mi mamá estaba en casa, parecia estarme protegiendo de ella. No me gustaba su presencia, pero terminé acostumbrándome a ella, a su pesada mirada que me seguía por todas partes, a sus ruidos extraños y a sus gritos nocturnos. Todo esto iba bien, hasta hace dos noches... Hace dos noches me habló por primera vez en todo este tiempo. Pero lo que me dijo, me dejó bastante inquieta, porque...

Mi hermana dice que mi mamá la mató, pero mi madre dice que no tengo ninguna hermana...

¿A quién debería creerle?


Si... Ahí termina /.\

¿Qué les pareció? Sean honestos! Daré créditos a una página de Facebook llamada "Bitch please" porque ahí fue donde publicaron la última frase que me inspiró xD (Mi hermana dice que mi mamá la mató, pero mi madre dice que no tengo ninguna hermana).

Dejen sus comentarios! POR FAVOR. Yo sé que siempre les digo lo mismo, pero siento que cuando no dejan su opinión, es como si no les gustara D: (Mandenme sus usuarios de Twitter, yo sé que quieren. El mio es *con el arroba* AelynSB)

Oh! También quería saber si hay alguien por aqui que me pueda ayudar a traducir estos OS a inglés? Porfa.

Well... Happy Halloween you all! Have fun and be safe. :*

jossedith1: Gracias por comentar. Lo siento! Yo también sufrí demasiado al escribirlo, pero quedé muy contenta con el resultado. Ojalá continúes leyendo.

Y me harías muy feliz si me mandas lo tuyo!

Besos :*