A LOS 16

CAPITULO IV: EL PROYECTO...¿CELOSO POTTER?...BIENVENIDO PEGAMENTO MAGICO DE ALTA INTENSIDAD

- Sin contar nada, ya cállate y se acabó el tema – dijo tajante James obviando lo que su amigo había dicho y haciéndose el desentendido, el sabía que Sirius lo conocía y muy bien, no quería pensar en lo que su amigo le estaba obligando a consultarse en su cabeza, y la verdad no sabía porqué pero si le afectaba que Lily estuviera enojada con él, el hecho que ella fuera tan arisca y tan indiferente con él, que sus encantos no le causaran a ella el más mínimo interés…eso a él algo le provocaba, algo extraño…pero no quería averiguarlo, ante lo cual añadió a su amigo antes de entrar al dormitorio de los chicos – mejor vamos a la cocina, Peter y Remus deben estar allá y se me antojan unos pastelillos de calabazza y quizás algo de pollo

- Claro ¬¬ - lo miró de reojo el chico Black al ver la desición drástica de su amigo de concurrir mejor a la cocina, ir por Remus y Peter y no quedarse solos en el dormitorio, James sabía que si se quedaban solos en la habitación él no dudaría en continuar interrogándolo – pero…

- Pero nada Canuto, vamos a la cocina o Peter nos dejará sin provisiones – Zanjó el chico Potter

Habían pasado ya cinco días desde lo sucedido, y casi todo el colegio había olvidado el incidente, pero lo incluidos en el incidente aún lo recordaban y muy bien.

James se sentía extraño, hace cinco días que Evans no le hablaba ni para decirle siquiera "cerdo asqueroso! Lo que le preocupaba enormemente y no quería admitirlo pero extrañaba sus discusiones y peleas continuas, no le había dicho nada a Sirius para que no empezara con lo de: ¡Como se te ocurre semejante idea de fijarte en Evans! Y luego seguiría con "¡debes salir con Christie Nettle!". Aunque no sabía bien que sentía por Lily, quizás era solo costumbre de estar discutiendo y peleando con ella, pero aún así la extrañaba. Sin embargo Christie lo seguía buscando y por insistencia de Sirius accedió a salir con ella el viernes por la tarde, y Sirius con Agatha Monfield, amiga de Christie obviamente.

En ese instante, Remus entró por la puerta de la habitación muy feliz.

- Y tu donde estabas? – preguntó James - ¿y con quien?

- Estaba en la biblioteca con Lily y… - comenzó Remus, pero James no lo dejó terminar la oración.

- ¡¿Con Evans?! – gritó James - ¡¿Tu con Evans?! ¡Pero si no nos habla!

- Error, cornamenta, querido amigo – continuó Remus tranquilamente – no les habla a Sirius y a ti, conmigo dice que no tiene ningún problema, además somos prefectos y tenemos que llevarnos considerablemente bien y trabajar juntos por la casa. Además también estaba Kari, estábamos fijando el día para juntarnos a avanzar en el trabajo de DCAO.

- Ah – miró James ahora más tranquilo a Remus ¬¬ - ¿Evans no ha dicho nada de mi?

- No, nada – continuó Lupin – ahhh si….

James miró interesado al joven de ojos miel.

- Lily dijo: "Dile a Potter que el jueves en la biblioteca a las 5 de la tarde, Springley no aceptó cambio de parejas".

- Mmmmm – dijo James – pensé que era algo más, bueno, dile que está bien.

- Díselo tu – continuó el licántropo – ¿no tienes tanta personalidad querido amigo?

- No, o sea si, o sea no…es decir… - agregó James con cierta sinceridad y algo confundido sin saber cómo explicarle a su amigo Lunático – Tu sabes que la tengo, pero con esa pelirroja no se que me ocurre que no puedo con ella y su temperamental carácter…por lo demás! No se que se cree no hablándome – continuó alzando la voz y ya volviendo a ser el James Potter arrogante de siempre – Yo no se porqué no se acerca y me dice ella lo del horario del trabajo, que se cree despreciando hablar conmigo! Con James Potter! El sueño de toda mujer de Hogwarts ¬¬, debería sentirse alagada que le toque trabajar conmigo…

Remus blanqueó los ojos hacia arriba en señal de cansancio añadiendo - Será mejor que yo le diga que ya estás al tanto…y…Prongs…soy tu amigo, te quiero lo sabes…pero bájate un segundo de la nube…tu sabes el desprecio que Lily siente por ti y no le interesa en lo más mínimo trabajar contigo, al contrario, para ella es un castigo…por lo demás si quieres que te recuerde lo que pasó el otro día con lo de "Comelibros" que gritaste en el Gran Comedor y…

- Ya basta! Lo se! No me lo recuerdes Lunático…maldita sea eres mi maldita conciencia…- alardeaba Cornamenta para continuar – Por eso mejor escucho los consejos de Canuto, me hacen más fácil la vida…que opinas tu Canuto – esperando que su amigo de ojos azules grisáceos agregara algo detrás suyo luego de un largo rato de silencio por su parte – Canuto…Canuto… - No había respuesta – Sirius?... – aún nada – Sirius Orion Black despierta! – pero ya era demasiado tarde, su amigo se había perdido en la latosa conversación con Remus y había caído en un profundo sueño que al parecer era tan profundo que honestamente le quitaba todo su estilo con algo líquido que corría de su boca y caía sobre su cama

- Ahí tienes a tu facilitador de vida jajaja – rió divertido el chico Lupin – formando un lago en su colchón jajajajajja

James miraba a Sirius atónito conteniendo la risa…agregando – Quizás tienes razón

Ambos se miraron y rieron al unísono, entrando Peter en ese momento a la habitación con un canasto repleto de comida.

- Ha llegado la diversión – comenzó el joven Pettigrew – seducí a las Elfinas de la cocina con mi encanto y me regalaron toda esta comida

James y Remus miraron a Peter divertidos al hablar de haber seducido él a alguien y además eran ¡Elfinas!, luego miraron a Sirius babeando en la cama, se miraron entre ellos y estallaron a carcajadas…realmente no sabían quien era el más normal dentro del grupo.

Ya habían pasado los días, era jueves y la gran mayoría de las parejas habían quedado en juntarse a trabajar ese día. Lily aún no hablaba con James y éste esperaba impaciente el encuentro de la tarde, aunque ni él mismo se explicaba por qué tanta impaciencia.

En ese mismo momento en el cuarto de las chicas:

- Uffff – comenzó Ginger - ¿Qué hice yo para merecer esto?...en fin…la varita, el libro, el pergamino, la pluma, el manual Nº5, la caja, la…

- Ginger! – dijo Kari - ¿Porqué llevas tantas cosas?

- Tu sabes querida amiga, soy con Peter Pettigrew en el trabajo de DCAO para mi desgracia y nos juntaremos en la Sala Común en un rato a trabajar y como a él se le olvida todo, me pidió que yo llevara los materiales, el solo llevará su cabeza hueca (las demás rieron) y el muñequito de vidrio para el experimento.

- Entiendo xD – dijo Kari – Remus y yo nos dividimos todo , es mas simpático de lo que creí – siguió la peliverde.

- Sí – agregó Kitty entrando en la charla – Chad y yo también hemos dividido todo ¿y James y tu Lily?

- No lo sé – comenzó Lily – yo llevaré todo porque no he hablado con el egocéntrico de Potter.

- Ay Lily pobrecita, te compadezco que tengas que trabajar con ese engreído….bueno me voy, voy con el tiempo justo! nos vemos – dijo Kari algo distraída

- Y yo también – dijo Ginger – tengo que reunir paciencia antes de ir con Pettigrew, amiga te entiendo, pero lo mío es peor admítelo ¬¬…nos vemos

- Si lo de Ginger si es para tirarse de la torre de astronomía, me voy contigo Ginger! – dijo Kitty alcanzando a la colorina de ojos violeta - ¿no vas con nosotras Lily? - culminó volteándose por última vez.

- No, tengo que buscar algo mas – respondió la chica algo agotada con la situación

Las demás se fueron, y Lily al encontrar lo que buscaba y verse totalmente sola en la habitación, tomó sus cosas y también se marchó hacia su destino…"la biblioteca". Iba llena de cosas, cansada caminando por los pasillos de Hogwarts, en eso una voz le dijo por detrás:

- Hola Lily, que linda te ves – dijo Nicholas Cruise sonrojándose hasta las orejas, un chico de Ravenclaw muy apuesto que se sabía hace tiempo andaba detrás de Lily y al igual que ella era prefecto de su casa.

- Ahhhh eres tú, hola Nick! – le dijo Lily animaadamente, aunque no le gustaba, ella lo encontraba muy simpático, guapo y caballero.

- ¿Te ayudo con esos materiales? – preguntó el chico

- Muy bien, gracias, voy a la biblioteca – terminó Lily

Llegaron a la biblioteca y en una mesa se hallaba James, quien al ver llegar a Lily con Nicholas se sulfuró, pero intentó ocultar sus celos (que no entendía por qué los sentía) hasta que Lily se despidió de Nick con un tierno beso en la mejilla y el chico se fue, haciendo caso omiso a la presencia del joven Potter en el lugar.

- ¿Qué hacías con Cruise, Evans? – preguntó James con tono autoritario.

- Primero se dice "hola", Potter – dijo la pelirroja poniendo los ojos en blanco hacia arriba ya comenzando a hartarse de la situación sin siquiera haber comenzado a trabajar – y no te interesa que hacía yo con Nick

- A él le gustas, es obvio que tiene otras intenciones contigo – le dijo James haciendo un gran énfasis en el "otras intenciones"

- Tú no eres nadie en mi vida para preocuparte por mi Potter – siguió la ojiverdes – así que no lo hagas, preocúpate mejor de tu amada "Christie"

- Evans! Yo solo me preocupo por ti – le dijo afligido James

- Ya te dije que no lo hicieras, y ya, comencemos a trabajar – culminó la chica.

Lily sacó el manual Nº5 y comenzó a trabajar sin dirigir muchas palabras a James y menos aún hablar del incidente del otro día.

Mientras, en la Sala Común de Gryffindor…

- No! Peter! Cuidado! – gritaba Ginger – Noooooo!

Pero ya era demasiado tarde y Peter ya había acabado con la figura de vidrio, se habían caído al suelo ambos y la figura estaba rota, y así también había acabado la oportunidad de una buena calificación.

- Lo siento – dijo Peter avergonzado levantándose del suelo – yo la arreglaré con pegamento mágico de alta intensidad (la figura era anti-magia)

- Ok – dijo Ginger pensando para si "que hice para merecer esto" – no, no, no! Cuidado! Mejor no hagas nada Peter, que si sigues así terminaremos sin materiales, sin trabajo y sin calificación – al ver que Peter casi botaba otros materiales volteándose mejor para no ser testigo de alguna otra tontera del chico rata.

De repente Ginger que estaba de espaldas escuchó otro ruido:

Crkkkkaaaachhhh! Poinchhhh!

Peter acababa de caerse de nuevo, y en esta ocasión había derramado el pegamento mágico de alta intensidad en la alfombra de la Sala Común, y al caerse había quedado junto con su trasero regordete pegado en la alfombra. Ginger al ver esto movió los ojos en señal de "paciencia" y fue a ayudar a Peter, a despegarlo, cosa que fue imposible, lo que provocó que finalmente ella también cayera al suelo y quedara firmemente pegada entre la alfombra y Peter, con una pierna encima de Peter y un pie en la cara de éste. No tenían como despegarse y deberían esperar a que alguien se apareciera por la Sala Común (cosa que era difícil que fuera luego porque la gran mayoría de los Gryffindors y la mayoría del colegio se hallaba a la orilla del Lago y en los terrenos del colegio disfrutando la tarde libre, excepto los que estaban estudiando y haciendo trabajos) y los despegara con algún encantamiento o fuerza.

- Genial, ahora que van a pensar – dijo Ginger en tono sarcástico

Peter solo sonrió tímida y nerviosamente

En ese instante en un aula vacía del tercer piso…

- No me puedo quejar Lupin, trabajas muy bien – comenzó Kari ^^

- Gracias Merlin (Kari), tu tampoco lo haces nada mal – dijo Remus riéndose tímidamente

- ¡Cuidado! – dijeron ambos al mismo tiempo.

Pero ambos habían alcanzado a reaccionar y habían parado la caída de la estatuilla de vidrio…Sus manos se hallaban juntas, unidas por aquella figura de vidrio y porcelana, ambos se miraron y sonrieron, hacían un buen equipo sin duda, se levantaron, dejaron la figura en la mesa, se tomaron de las manos e inconscientemente se empezaron a acercar, sus caras estaban cada vez más cerca, más, más, y más! Hasta que de pronto ambos reaccionaron y luego de dar un pequeño salto, se alejaron uno del otro avergonzados y continuaron cada cual con su trabajo sin dirigirse ninguna palabra. Luego de un rato comenzaron a hablar como si nada hubiera estado a punto de pasar y continuaron con el proyecto, ahí algo pasaba en esos corazones, pero ninguno se atrevía a dar el primer paso.

Por otro lado, otra pareja bastante más dispareja que todas las anteriores se encontraba en la Sala Común de Slytherin…ahí se hallaban Sirius y Snape haciendo su proyecto, bueno, esa era la idea…

- ¡Te dije que no hicieras eso aún Black! – gritó enojado Snape

- Tu no me dices que tengo que hacer y que no, Quejicus – le respondió Sirius con aire de superioridad.

- Tráeme algo de beber Black, tengo sed – ordenó Snape

- ¿Quien crees que soy…? – comenzó Sirius, pero no terminó la oración, se le había ocurrido una idea genial para torturar a Snape y no desaprovecharía la oportunidad – ehh….claro Quejicus, en seguida – le dijo con tono amable.

Al rato volvió Sirius con dos vasos, los cuales a pesar de su color verde, Snape no dudó en tomar el que Sirius le había ofrecido y lo tomó hasta terminárselo entero.

- Mmm…sabroso el jugo de manzana, gracias Black, veo que sirves de algo más que nada – dijo dibujando una sonrisa maliciosa en sus labios.

- Sí – respondió Sirius tratando de contener la risa, le había puesto un encantamiento al jugo de Snape y ahora éste poseía los dientes de un total color verde oscuro y en algunos dientes se dibujaban algunas letras que al leerlas en conjunto decían: "I´m Loser" (soy un perdedor).

Había sido un encantamiento rápido y sencillo, ocurrido en el momento, así que no era de gran magnitud, lo único bueno era que aunque Snape se lavara los dientes cada 5 minutos, el hechizo no se acabaría si no hasta el Cuarto día después del comienzo del encantamiento. Sirius detestaba tanto a Snape que esta broma para él no había sido más que un regalo para Severus. De pronto se le ocurrió una idea….pero para eso Snape tendría que salir de la habitación por un momento…Miró el pegamento mágico de alta intensidad, miró las manos y el pelo grasiento de Snape y sonrió para si mismo malévolamente. El concepto de Sirius era claro "Snape había nacido como un error en este mundo y sin duda alguna había que hacerle pagar por eso"

- Vuelvo en un momento Black – le dijo Snape – no hagas nada, no quiero que lo arruines todo.

-No te preocupes Quejicus – dijo Sirius tratando de mantener la paciencia…Snape se iría y podría hacerle la broma xD – yo me quedaré aquí sentadito, jejeje.

Apenas Snape se fue, Sirius fue al escritorio, tomó el pegamento mágica de alta intensidad y leyó la etiqueta que decía: "Pegamento mágico de alta intensidad. Repelente a encantamientos con varita. Pegamento transparente, pega hasta lo imposible".

Sirius abrió el pegamento y lo untó en el rededor de la pluma de Severus, le puso una gran cantidad (la cual no se notaba porque era transparente) y al escuchar que venía Snape, quien al parecer aún no se había topado con nadie que le dijera del hermoso verde de sus dientes, volvió al lugar donde estaba antes de salir de la habitación. Al llegar miró si todo estaba en su lugar y al comprobarlo tomó su pluma y comenzó a escribir (el pegamento aun no estaba seco así que solo se le escurrió por la mano y el lápiz quedo un poco adherido a su mano) el Slytherin no se había dado cuenta, pero Sirius que había estado siguiendo cada uno de sus movimientos, gritándole de pronto:

- Quejicus! Tienes algo que se mueve en tu cabeza!

Snape sin saber porque le creyó y se tocó la cabeza muy asustado con la mano que hace unos segundos sujetaba el lápiz con pegamento, se tocó la cabeza y no encontró nada, justo cuando iba a bajar la mano de su grasienta cabeza se comenzó a preocupar…Su mano y la pluma que se encontraban en su mano no bajaban, estaban pegadas en su cabellera, tan pegadas como se encontraban aún en la Sala Común de Gryffindor, Ginger y Peter.

- Que...que…¡Que me hiciste Black! –gritó Snape

- Jajaja – rió Sirius – veo que funcionó nuestro amigo "pegamento mágico de alta intensidad" querido Quejicus. Tómalo por el lado bueno, por lo menos ya no tendrás el pelo tan grasoso si no también pegajoso jajaja.

- Tu, tu, asqueroso animal….Black – dijo el joven Serpiente – me las vas a pagar, ya verás cuando me despegue, me las pagarás.

- Bueno Quejicus, yo ya me voy – dijo Sirius haciéndose el desentendido y simulando un bostezo – Estoy agotado de tantas ideas que tuve que pensar hoy, nos vemos…adiós…ahhh hoy tienes una linda sonrisa, te queda bien el verde. Ahhhh y se me olvidaba, si dices algo de esto a alguien lo lamentarás más que ahora.

Y diciendo esto salió de la Sala Común de Slytherin riéndose y se fue al lago donde estaba la mayoría del colegio, dejando a Snape con los dientes verdes, el "I´m Loser" en la dentadura y pegado con el brazo al revés y la mano pegada en la cabeza tratando de despegarse, lo mismo que ya habían dejado de intentar Ginger y Peter en la Sala Común de Gryffindor hace bastante rato, esperando que alguien llegara.

Volviendo a la biblioteca….Se encontraban Lily y James trabajando en el proyecto, en la hora que llevaban trabajando casi no se habían dirigido palabra. James, preocupado por el inminente silencio de Lily, la cual anotaba una infinidad de cosas en el pergamino, pensó en algo para hacerse notar y para que la pelirroja le dirigiera aunque sea una palabra. Tomó su varita y susurró apuntando hacia la pluma de Lily:

- Wingardium Leviosa!

En ese momento la pluma de Lily se despegó de su delgada mano y comenzó a flotar, Lily se alarmó e intentó agarrar la pluma suspendida en el aire, lo cual era imposible ya que James manejaba desde el otro extremo de la mesa con su varita los movimientos de la pluma. James miraba divertido a la chica, hasta que ésta se cansó y dejó que la pluma flotara tranquilamente. Miró a James notoriamente enojada y…

- Potter! Baja mi pluma – le dijo la prefecta enojada pero con un tono de voz bajo ya que se encontraban en la biblioteca.

- No – dijo James con una sonrisa coqueta en los labios.

- Te ordeno que la bajes – le replicó Lily

- ¿Sabes? – dijo James haciendo caso omiso a las palabras de su compañera – te ves muy guapa cuando te enojas, Evans.

- Cállate Potter – le contestó la joven de ojos verdes – vete a decirle eso a Nettle

- No, ella no me interesa – dijo James

- Pues no pareció eso el otro día en el Gran Comedor – dijo la pelirroja

James se detuvo a pensar un momento, él no había querido mencionar el incidente del otro día para no tener más problemas con Evans, pero ya que ella lo había mencionado…aprovecharía para hablar con ella sobre eso, mal que mal nunca aclararon bien las cosas. A todo esto, la pluma aún flotaba en el aire y al parecer ya había sido olvidada, Lily y James solo se miraban fuertemente a los ojos sin decir palabra alguna. Al rato después James se decidió y rompió el silencio.

- Es verdad Evans – comenzó el chico de anteojos – voy a ser sincero contigo, Sirius…

- Ya basta de culpar de todo a Black, Potter! – le dijo la muchacha – tú puedes decidir por ti mismo todo, no tienen porque obligarte, y no seas sincero porque no me interesa saber nada de tu vida amorosa y tus noviecitas. Vinimos a trabajar, no a hablar de tus damas de compañía.

- Está bien – dijo el chico de anteojos y ojos almendrados – pero…

- ¿Pero que? – le dijo duramente Lily

- ¿Me disculpas por lo del otro día? – dijo ahora con tono suave y triste James

- Pero Potter… - comenzó Lily ahora más tranquila, en un tono suave como el de James y con los ojos llorosos – ustedes no saben cómo me sentí, hay heridas que aunque se escondan nunca se olvidan, James – terminó la pelirroja derramando una tímida lágrima desde uno de sus ojos.

- Lily…yo… - dijo James

- No te preocupes Potter – le dijo la pelirroja limpiándose sus hermosos ojos verdes bañados en lágrimas – Black y tu ya están disculpados, pero no esperen que todo sea como antes.

- Gracias – dijo James, ahora se sentía más tranquilo – eres muy linda al perdonarnos

Lily, quien en otro momento hubiera protestado por los intentos de James de hacerse el lindo, esta vez, por una extraña razón que ni ella misma sabia cual era, no dijo nada y le sonrió a James, quien le contestó la sonrisa.

- Bueno creo que ya hemos trabajado bastante por hoy – dijo Lily - ¿Podrías bajar mi pluma y luego nos marchamos?

- Jajaja, claro, la pluma – dijo James – se me había olvidado – bajó la pluma

- Jajaja ok – dijo Lily quien tomó la pluma – gracias ^_^

Ordenaron sus cosas y salieron de la biblioteca rumbo a la Sala Común de Gryffindor.

Ginger y Peter mientras, aún se encontraban en el piso de la Sala Común pegados bajo el efecto del ya conocido "pegamento mágico de alta intensidad"

- Genial, no llega nunca nadie – dijo Ginger con tono sarcástico – así como vamos estaremos pegados por el resto de nuestras vidas.

- Jeje – se limitó a decir Peter nerviosamente.

En ese momento alguien entró por el retrato de la Dama Gorda, era Sirius, que ya había vuelto del lago y que al entrar y ver a Ginger y a Peter en al alfombra pegados, muy cerca el uno del otro, inconscientemente (sin acordase que Peter en ese entonces no le podía hacer daño ni a una mosca por lo estúpido que era) pensó que Peter le quería hacer algo a Ginger y gritó:

- Colagusano! Que crees que estas tratando de hacer, como te atreves a hacerle daño a la Calabaza!

- No Sirius, no entiendes – comenzó Peter aproblemado

- Sabía que no era buena idea que trabajaran juntos, te querías aprovechar de ella, déjala en paz! – gritó Sirius a su amigo increpándolo desesperado y moviendo los brazos

- Silencio Black! – chilló Ginger – a casualidad, por un descuido de Pettigrew nos pegamos con el pegamento mágico de alta intensidad, idiota.

- Ahhh…ehhh….bueno – continuó Sirius avergonzado – yo sabía que Colagusano no había hecho nada malo, jejeje, amigo mío

- Sí, seguro – dijeron resignados Ginger y Peter el unísono.

En ese momento se abrió nuevamente el retrato de la Dama Gorda y aparecieron Lily y James, los tres presentes en la Sala Común se miraron extrañados al verlos llegar juntos y los dos que venían recién llegando miraron también extrañados, pero la escena de Peter y Ginger en el piso, no se explicaban que hacían los dos pegados en la alfombra de la Sala Común y menos aún que hacia Sirius parado como tonto delante de ellos.

- Ginger! – gritó Lily rompiendo el silencio – ¡¿Qué haces en el piso con Peter?!

- Es una larga historia – dijeron la joven de ojos violeta, Peter y Sirius al unísono

- Jajaja – veo que no pierdes el tiempo Colagusano

- Cállate Potter, esto no es lo que parece, o lo que ustedes piensan que es – gritó Ginger – yo les explicaré que pasó.

- Ginger contó a los asistentes lo ocurrido, como si estuvieran en clase de Historia de la Magia, al terminar suspiró y dijo:

- ¿Ahora nos ayudarán a salir de aquí? recuerden que este maldito pegamento es anti magia ¬¬

- Claro Calabacita – respondió Sirius – pero recuerda que te lo dije

- Uhhh si, esta bien, lo recuerdo Black – dijo entre enojada, resignada, avergonzada y cansada la joven.

- Por fin nos despegarán – dijo Peter – ya tengo acalambrada la pierna.

Justo cuando estaba intentando despegar a la Night Cat y al regordete Merodeador, el retrato de la Dama Gorda se abrió por tercera vez, y esta vez entraron cuatro personas. Eran Kari, Remus, Arabella y Kitty, que se habían encontrado cuando iban para la Sala Común. Los cuatro al entrar quedaron atónitos por la escena que veían: Sirius agarrando y tirando a Peter de los pies, James de los brazos, y Lily tirando a Ginger desde los pies también todos tratando de despegar a los dos Gryffindors.

- Jajaja ¿Qué sucede aquí chicos? – preguntó Kari

Los presentes les contaron la historia a los cuatro nuevos asistentes en la habitación y luego continuaron tratando de despegar a sus amigos con la ayuda de los recién llegados.

Luego de veinte arduos minutos de tironeo, lograron despegarlos. Ambos estaban cansados y adoloridos, mal que mal habían estado más de dos horas pegados en la alfombra de la Sala Común. Al rato después se pusieron todos a conversar de lo más natural hasta que Peter dijo:

- Lily ¿No era que estabas enojada con James y Sirius por lo del otro día?

- Cállate Colagusano – le susurró James – ya nos disculpó –terminó James con una gran sonrisa y abrazando a Lily

- ¿Verdad?, genial Evans – dijo Sirius mirando tímidamente a Lily

- Sí, pero eso no quiere decir que todo será como antes – estipuló la pelirroja – y menos que me abraces Potter – culminó apartando a James de ella.

Después de un rato cada grupo se fue a sus respectivas habitaciones con una extraña satisfacción, Night Cats y Merodeadores habían compartido sin peleas y hace muchísimo tiempo no se hallaban los nueve hablando y riendo a gusto. Pero eso no duraría mucho.

Al otro día ya era viernes, las Night Cats se levantaron muy temprano y se fueron al Gran Comedor, al acercarse a la mesa de Gryffindor las chicas se encontraron con un milagro, los merodeadores se habían levantado más temprano que de costumbre y ya se hallaban tomando desayuno. Las cinco chicas (Arabella ya se había unido a ellas) se sentaron en la mesa de Gryffindor y saludaron a los merodeadores, quienes les devolvieron el saludo.

- Hola Evans! – dijo James alegremente

- Hola Potter – dijo aún media dormida Lily que se había sentado al lado de James entre éste y Sirius, al lado de Black se sentaron Ginger y Kitty y al frente junto con Remus y Peter se hallaban Kari y Arabella.

- ¿Qué tal calabacita? – preguntó Sirius

- Bien Black, un tanto adolorida por lo de ayer pero bien – respondió la chica con un gran bostezo.

- Bueno – dijo Sirius – en todo caso te ves bien hoy – terminó sonrojándose y preguntándose para si mismo porque había dicho eso.

- Black… - comenzó Ginger

- ¿Qué? – respondió el chico de pelo negro azulado

- Cállate – dijo la chica

Sirius se quedó callado y mirando a Ginger.

Kari y Remus hablaban animadamente sobre lo bien que la habían pasado la tarde anterior y sobre el buen equipo que hacían juntos. Arabella por supuesto al ser la mejor amiga de Remus ya sabía lo que ayer había estado a punto de suceder entre sus amigos, solo los miraba entretenida con su conversación y de cuando en cuando le dirigía a Remus miradas de: "acéptalo te gusta", las cuales Lupin respondía con una mirada tímida mirando hacia abajo.

- ¿Qué nos toca ahora? – preguntó Kitty

- Defensa Contra las Artes Oscuras – dijo Lily

- Oh, bueno iré a buscar a Chad, el debe traer los materiales – contestó la chica

- Está bien – dijo Lily

Lily y James extrañamente conversaban como gente civilizada al igual que Sirius y Ginger. Peter como siempre comía en grande cantidades pero raramente cada cierto rato miraba a Ginger de reojo (que raro…que pensará ahora esta rata traicionera, que películas se estará pasando!…bueno eso lo veremos más adelante *-*). De repente, cuatro chicas, entre ellas Christie Nettle y Agatha Monfield se pararon de la mesa de Slytherin y se dirigieron a la mesa de los Gryffindor donde se encontraban los Merodeadores.

- Hola James! – le dijo Christie a James besándolo coquetamente a la orilla del labio - ¿Cómo estás?

- Ah, hola Christie – dijo James sin hacer mucho caso a las insinuaciones de la rubia Slytherin

- ¿Qué haces aquí conversando con la Sangre Sucia? jaja ¿Con la "Come Libros" esa? ¿No ves que es malo para tu imagen? – continuó la joven serpiente cruelmente mirando a Lily con superioridad.

- Tu no eres nadie para hablarme así Nettle – le dijo enojada la chica de pelo rojizo.

- Claro que si – le dijo Christie – soy una Sangre Pura, no como tú que eres una asquerosa Sangre Sucia!

CONTINUARÁ...