Todos los personajes de esta historia pertenecen a Masashi Kishimoto.

Mi intención con esta historia es dar al manga el final que me hubiese gustado, entiendo y respeto que mucha gente quedara contenta con el final de Naruto, pero a mi parecer todo fue muy precipitado y excesivamente forzado. Esta historia pretende ser fiel a los personajes y no mirar de recrear situaciones inverosímiles, si no situaciones que por el transcurso de los 698 capítulos de manga anteriores podrían haber tenido lugar al final y pretendo ser lo más fiel posible al carácter de cada personaje. Cabe destacar que este fanfic tendrá Narusaku y que por tanto puede no ser del agrado de quienes son seguidores de otros pairings, aún así como dije anteriormente me comprometo a ser respetuoso con todos los personajes.

~Capítulo 1~

Kakashi y Sakura llegaron al borde del acantilado del valle del fin.

- ¡Están allí! – Exclamó Sakura con la vista fijada en el fondo del valle.

Bajo aquél profundo valle se podían divisar dos figuras malheridas sobre las ruinas de las estatuas que durante tantos años habían simbolizado la eterna lucha de los hermanos Ootsutsuki, ahora las estatuas habían llegado a su fin al igual que su lucha.

Sakura no vaciló ni un momento y saltó hacia sus compañeros, vio perfectamente que necesitaban de sus habilidades médicas.

- ¡Sakura-chan! – Dijo un sorprendido Naruto que no esperaba que les encontraran tan rápido.

Sakura fue incapaz de articular palabra, su rostro se entristeció al ver lo lejos que la lucha había llegado, Naruto y Sasuke estaban sin chakra, repletos de magulladuras y a ambos les faltaba un brazo. Apremió primero curar los brazos cercenados cortándoles rápidamente la hemorragia.

- ¡Gracias, Sakura-chan! – Pudo decir Naruto con una gran sonrisa.

- Sakura… yo… - Dijo Sasuke prácticamente en un susurro.

A ambos se les notaba en sus voces el peso de llevar más de 24 horas de lucha sin descanso.

- No, necesito concentrarme - Replicó Sakura sin apartar la vista de los brazos de Naruto y Sasuke.

Sasuke era consciente del infierno que había hecho pasar a Sakura por eso no podía dejar de sentirse culpable, aún después de todo y de haber intentado matarla y de menospreciarla de forma continua, ella estaba allí curándole como si nada hubiese pasado, como si nunca hubiera dejado de formar parte del equipo 7.

- Perdón… - Dijo Sasuke esta vez con una entonación más normal.

- ¿Perdón, por qué? – Le contestó Sakura que seguía concentrada en curarles y hacerles recuperar algo de chakra.

- Siento todo lo que hice… - Dijo Sasuke culpándose.

Se hizo el silencio. Sakura seguía curándolos, pero sus manos estaban temblorosas, sus ojos cerrados y a duras penas podían retener las lágrimas que estaban a punto de brotarle de aquellos ojos esmeralda.

Más te vale sentirlo… cielos… - Sakura no pudo evitar que aquellas palabras salieran entrecortadas, ahora sí, las lágrimas empezaron a acariciarle las mejillas. Naruto ante tal escena no pudo hacer otra cosa que sonreír, sabía que en gran medida esas lágrimas eran de alivio y alegría.

- Eres un problemático estúpido – Continuó Sakura entre lágrimas.

- Y tú un estúpido temerario – Dijo mirando a Naruto.

Kakashi que había decidido mantenerse al margen ya que consideraba que ese momento tenía que ser sólo para ellos tres no pudo evitar echar la vista al pasado, cuando le recibieron con una broma el día que se presentaba como su sensei. Observándolos desde la distancia no podía evitar emocionarse al ver como volvían a sonreír.

- Por fin han vuelto – Se dijo Kakashi a si mismo tapándose su ojo izquierdo como de costumbre.

- Siempre vas a tener la misma facilidad para llorar, ¿verdad Sakura-chan? – Dijo Naruto con una gran sonrisa.

- Idiota – Dijo Sakura secándose las lágrimas.

Ahora sí, el equipo 7 hacía honor a su nombre, Naruto había conseguido traer de vuelta la felicidad al equipo, pero no se haría justicia al decir que ese era el único mérito que había conseguido ese día, también puso fin a la guerra, salvó a su amigo de la oscuridad, salvó el mundo y lo que más peso quitó de su corazón y puso fin a la promesa que hizo a Sakura el día que Sasuke huyó con Orochimaru. Aunque nada de esto pasaba ahora por la cabeza de Naruto, él estaba feliz porque todo había terminado, estaba disfrutando del momento y por primera vez en mucho tiempo podía sonreír desde lo más profundo de su corazón sin ningún tipo de carga emocional.

Por fin recuperaron fuerzas y los dos guerreros se pusieron en pie.

- Ha llegado el momento - Dijo un sonriente Naruto mirando a Sasuke.

Naruto extendió su mano hacia Sasuke con los dedos índice y corazón extendidos y él los agarró.

- ¡Liberación! - Dijeron al unísono, lo que liberó a la humanidad del Tsukiyomi infinito.

Kakashi bajó a reunirse con su equipo y aunque tenía el rostro tapado como siempre, se le intuía la sonrisa.

- Es hora de reunirse con todos y volver a casa, el mundo está en deuda con vosotros, especialmente contigo Naruto. - Dijo un alegre y orgulloso Kakashi.

El equipo partió hacia donde se encontraban los aliados en el campo de batalla en el que Madara fue traicionado. Al llegar encontraron a todos fuera de la prisión en la que el gran árbol les había encerrado individualmente durante el Tsukiyomi infinito y fueron recibidos como héroes y algunos saltaron y lloraron de alegría y aquél día parecía que el sol iluminaba el mundo con más fuerza que nunca.