MIS MÁS SINCERAS DISCULPAS POR LOS ERRORES ORTOGRÁFICOS QUE TUVO EL CAPITULO, ASÍ QUE DECIDÍ REVISAR DE NUEVO EL CAPITULO Y CORREGIR LOS ERRORES, ESPERO HABER CORREGIDO TODOS Y CADA UNO

Pueblo de Kuoh

-porque siempre me caigo?-dijo una joven chica con traje de monja

-tal vez porque no puedes caminar bien con eso puesto- dijo el castaño pasando a su lado con el uniforme de la academia

-tienes razón- dijo levantándose- espera, puedes entenderme?- dijo esta sorprendida

-claro, se un poco de italiano- dijo este - pero que hace una monja aquí en Japón, que yo sepa no es exactamente cristiana-

-fue transferida a la iglesia de este pueblo, así mi nombre es Asia Argento- dijo esta haciendo una reverencia

"así que la Santa Doncella, no había sido expulsada de la iglesia?" pensó este - soy Hyudou Issei, puedes llamarme Ise si gustas- dijo a la joven monja

-entonces Ise-san usted puede llamarme Asía- dijo esta sonrientemente

-bien Asia, deberías ir a tu iglesia- dijo el castaño a la rubia

-eso trato de hacer, pero es que estoy perdida y no se a dónde ir- dijo esta tímidamente

-tranquila, yo te puedo guiar si quieres- ofreció el castaño

-en serio haría eso por mi Ise-san?- dijo esta emocionada

-claro no hay problema, todavía falta para entrar a mi academia- dijo este tranquilamente

-muchas gracias Ise-san - agradeció

Así siguieron el camino a la iglesia, durante el camino la monja oyó un sollozo de un niño herido, acudió a su ayuda y lo curo #ya saben cómo#

-vaya, eso no me lo esperaba- dijo el castaño

-ah, lo siento Ise-san, esta es una bendición que se me fue dada por Dios- dijo esta juntando sus manos en su pecho

-pues vaya bendición te dio, es muy útil si lo piensas-dijo el castaño tomando el paso

-útil- dijo casi en un susurro la rubia

-vamos rápido o te dejare atrás- dijo el castaño ya más adelantado

-haiii- dijo avanzando la rubia

Al llegar a la iglesia el castaño pudo sentir las auras de Ángeles caídos procedentes de su interior

-bueno Asia, he cumplido con lo que te ofrecí dijo este dando la vuelta

-muchas gracias Ise-san, vendrías a visitarme algún día?- dijo esta a la puerta de la iglesia

-seguro, hasta la vista- se despidió alzando la mano

"no te vas a ir así como así verdad compañero" dijo telepáticamente el dragón rojo

"claro que no, aunque obviamente llegare tarde a clases" respondió este adentrándose en la maleza y sacando su máscara de su maleta

En la iglesia

-buenas, soy Asia Argento, fue transferida a esta iglesia - dijo la rubia entrando a la capilla

-al fin llegas, porque demoraste demasiado? Bueno no importa- dijo un hombre con gabardina negra y sombrero

-discúlpeme, es que me perdí- dijo la rubia con una reverencia

-pero que primor se me fue dado jaja- dijo de manera desquiciada un peliblanco con traje de sacerdote

-quieto Freed esta es la chica por la que esperábamos, no le hagas nada- dijo fríamente el del sombrero

-hai hai- dijo con desgana el sacerdote

- Asia Argento, estarás a su cargo- dijo el de sombrero

-hai - dijo la rubia

-así que ya llego - dijo una loli rubia con dos coletas en forma de taladro

-que haces aquí Mitlet?- pregunto el del sombrero

-Raynare me envío a ver como estaban las cosas para el ritual, Donnasiege- dijo esta

- Asia Argento, Freed Sellzen, retírense- dijo y así lo hicieron, al estar solos continuaron con la charla

-podremos extraer la Sacred Gear de esa chica y así poder subir de categoría- dijo el caído

-ese Twiling Healing se nos será muy útil- dijo la loli caída

-así que ese es su plan, que patético- se oyó la voz de Dark alarmando a los dos caídos

-quien anda ahí?- dijo el caído

Del techo cayo el ahora peliblanco dando una voltereta y aterrizando en el altar de la iglesia, por causa de la luz, fue impedida la visibilidad al rostro de este

-quien demonios eres?- dijo la loli

-esa boquita no va con una bella loli- dijo con tono de burla

- serás cabrón- dijo esta creando una lanza de luz y arrojándola al peliblanco,

Al impactar en donde se encontraba el peliblanco se creó una cortina de humo

-vaya basura -dijo la rubia

-retirémonos de una vez- dijo Donnasiege

A las afueras de la iglesia el peliblanco se retiraba su máscara al mismo tiempo que su pelo se volvía a ver castaño y a portar su uniforme de la academia

-vaya, sí que son un dolor de muelas- dijo el castaño mientras se retiraba a su academia

Al llegar a la academia fue recibido con un sermón por parte del sensei aunque el castaño no le prestó atención

El resto del día fue tranquilo, el receso la paso descansando aunque sentía como era observado por cierta persona, pero extrañamente no era la pelirroja, disimuladamente pudo ver de quien se trataba, era Sona Sitri, la presidenta del consejo estudiantil

"no me digas que también noto mi aura "pensó el castaño" no se supone que la estoy escondiendo bien"

"es por el incremento de poder que tienes compañero, tu fuerza sigue creciendo y lo seguirá haciendo"

" esto será un problema, pero por qué ahora ?"

"tal vez se deba a la resonancia con las auras de esas demonios y los Ángeles caídos"

"tal vez, pero por el momento intentare disimular" así el castaño procedió a ir a su aula de clase

-lo notaste cierto Tsubaki?- dijo Sona a su Reina

-así es kaichou, tiene un aura muy peculiar-dijo la pelinegra a su Rey

-Tsubaki, por favor mantenlo vigilado, Rías también se debe haber fijado en el.-

-hai, kaichou-

Más tarde ese día

-ya acabo mi turno jefe- dijo el castaño saliendo de la tienda en donde trabajaba

-de acuerdo, ten cuidado de camino a casa Ise-san- dijo el dueño de la tienda

"muy bien, ahora tareas y a descansar" pensaba el castaño mientras caminaba en dirección hacia su casa

Al pasar por una casa, percibió un peculiar olor, sangre

-ahhhhh, no puede ser, creo que me divertiré primero- entrando en la casa se colocó su máscara, cambiando su tonalidad de pelo a blanco y vistiendo su vestiduras, sintiendo como el hedor aumentaba

-mmm que hace aquí un friki de mierda, eh?- el ahora peliblanco oyó una voz provenir del sillón en frente suyo, una sacerdote peliblanco con una cara de lunático

El peliblanco simplemente lo ignoro para pasar su vista a un costado de la habitación, ahí yacía un hombre empalado en la pared con signos de tortura

-ah eso?, es solo un hombre que vendió su alma al demonio- dijo el sacerdote procediendo a levantarse del sillón- no eres a los que esperaba pero igualmente voy a matarte- y procedió a sacar una pistola blanca de su vestimenta

-no es nada personal solo que me encanta matar jejejejeje- lo dijo disparando consecutivamente con una cara lunática

El peliblanco se mantuvo callado y en el mismo sitio, al terminar la oleada de tiros, el sacerdote no podía creer lo que veía, el sujeto frente a él estaba sin ningún rasguño, ni siquiera su ropa

-cómo es posible?, el gran Freed Sellzen está seguro de haberte ametrallado - dijo el ahora identificado como Freed

-eso es todo lo que tienes? Que patético- hablo el peliblanco por primera vez

-cállate- dijo el sacerdote saltando y sacando una empuñadura de la cual surgió un láser dándole forma de espada

-muere- dijo el sacerdote atacándolo desde diferentes puntos, el peliblanco los esquivaba ágilmente, al ver que no daba resultados, el sacerdote decidió tomar distancia

-eres muy lento- dijo con decepción el peliblanco

-que dices?- dijo el sacerdote jadeando un poco

-simplemente mira- señalo al piso bajo sus pies, el sacerdote pudo divisar como había rastros de las pisadas del peliblanco, las cuales indican que no se movió de su lugar

-ajaja, que excitante- dijo el sacerdote

-Sellzen-san?- dijo una monja que acababa de entrar a la habitación- que es esto?- lo dijo asustada al ver el cadáver en la pared

-ohhh, ya acabaste de colocar la barrera que te pedí?-

-si-i, pero y esto?- dijo asustada la rubia señalando el cadáver

-es lo que ves mi querida, eso le pasa por relacionarse con demonios jaja- decía el sacerdote

Al instante apareció un símbolo en el piso creando un pequeño pilar de luz, del cual salió el rubio Gremory empuñando una espada y cargando contra el sacerdote, el cual lo bloqueo con la espada de luz

-ohhh, estaba esperando su llegada demonios-kun -dijo el sacerdote

Al desaparecer el pilar de luz se divisó a otras 3 personas, Rías Gremory, Akeno Himejina, Koneko Toujo

-mucho gusto exorcista renegado, soy Rías Gremory, y por haberte adentrado en mi territorio, serás castigado- dijo la pelirroja dando un paso al frente

-uyyyy pero que par de melones llevas contigo perra jajaja- dijo el sacerdote saltando hacia la pelirroja con espada de luz en mano, pero fue bloqueado por el caballero Gremory, el sacerdote retrocedió dando una voltereta esquivando un cojín lanzado por la torre peliblanca, al retroceder saco una pistola de su pantalón, la cual disparo repetidas veces, pero fueron bloqueadas por un escudo creado por la reina Gremory

-tsk, estoy en desventaja, el sacerdote saco de sus bolsillos una esfera se vendas, la cual aventó al piso, creando una pared de luz dificultando la visión, mientras ocurría eso, se escuchó el grito de cierta rubia que fue cargada por el sacerdote, el cual disparo a los demonios, los cuales al no poder ver bien, no pudieron bloquear un disparo que impacto en la loli peliblanca

-Koneko!- grito asustada Rías, al desvanecerse la luz, pudieron ver a una Koneko herida en su pierna derecha

-vaya vaya, eso es lo mejor que puede hacer la designada de este pueblo?- dijo el peliblanco enmascarado, el cual se mantenía apoyado en una pared atrás de los demonios- ni siquiera han notado mi presencia desde que llegaron- dijo moviendo la cabeza de lado a lado

-cuando?- dijo la peligro

-mucho antes de que llegaran, ustedes se centraron en el exorcista, mientras me ignoraban- dijo el enmascarado

-que hacías tú con él?- pregunto la pelirroja creando una esfera de poder de la destrucción

-en vez de atacarme, no crees que deberías preocuparte más por tu torre? Los demonios son vulnerables a la luz, si no la tratas de inmediato, podría perder la pierno, pero bueno, no es mi problema- dijo dirigiéndose a la salida- nos vemos- se despidió con el brazo, desapareciendo en un círculo mágico

-Buchou, Lucifer-sama había dicho..- dijo la reina

-se lo que dijo, retiremos y tratemos la herida de Koneko- dijo preparando un círculo mágico

- lo siento Buchou- dijo la loli con la cabeza baja

- no te preocupes Koneko, es mi culpa por confiarme- dijo mientras desaparecían en un círculo mágico

Mañana siguiente

*así que te volviste a encontrar con el* dijo el Maou lucifer en un holograma

-así es, me lo encontré de nuevo mientras peleaba con un exorcista- respondió la pelirroja

*no realizó ningún acto ofensivo?* pregunto el pelirrojo

-no, aunque es un poco raro, el afirma que estuvo antes de que llegáramos pero hasta el momento en que nos habló no había sentido su presencia-

*no es de extrañar, por algo es un asesino peligroso, supuestamente oculta su presencia con senjutsu para pasar desapercibido por su víctima, dándole el golpe final*

Al momento de escuchar senjutsu, cierta peliblanca se tenso

-nii-sama, si es tan peligroso, por qué no lo arrestan de una vez?- pregunto con curiosidad la pelirroja

*se cree que tiene relaciones estrechas con varias facciones religiosas aunque en ocasiones afirmaba no estar afiliado a ninguna facción, y si tuviera relaciones con esas facciones, su arresto puede crear un conflicto con dichas facciones, además no es tan fácil, es un experto del sigilo, incluso logro escabullirse de Grayfia cuando la envíe a perseguirlo, además de que le debo un favor *

-escapo de onee-sama?- pregunto asombrada ignorando lo último dicho por su hermano, ya que escapar de la reina más poderosa del inframundo no era cosa fácil de hacer

*así es, logro engañarla, no se sabe como pero lo hizo*

-no puede ser, y pensar que alguien así está en mi territorio- dijo Rías con un sudor frío corriendo por su frente

*Rías, te pido que tengas mucho cuidado, te lo dije y te lo vuelvo a decir, no se cuáles son sus intenciones, así que más vale ser precavidos*

-así lo haré nii-sama- se despidió la pelirroja desvaneciendo el holograma

-uffff- Rías soltó un gran suspiro apoyándose sobre su escritorio

-aquí tiene Buchou- dijo la morena sirviéndole una taza de te

-gracias Akeno- dijo bebiendo el té

En clases

Mientras el maestro explicaba la clase, el castaño hablaba internamente con su compañero dragón

- Draig, como va la supresión del aura?- pregunto el castaño

-va mejor, pero aun acurren ciertas fugas de energía- dijo el dragón frente al castaño

-demonios, y la demonios ya están sospechando, Sitri manda a su reina, mientras la Gremory me manda a su torre- dijo con un rostro de molestia

-ohhh no será que no te gusta ser acusado por mujeres? Jaja -dijo el dragón con sorna

-cállate, que ya tengo suficiente con Inoue cuando voy de visita a Asgard- dijo el castaño

- jajaja y no te olvides de Himari, o de Aine, jaja es una hecho Ise, todos mis portadores tiene un harem - se rió el dragón

- no me hagas acuerdo- dijo el castaño con un aura depresiva azul rodeándolo

-jajajaja nunca me canso de ti compañero, aunque será mejor que ya vuelvas a la realidad-

-ah?, ah si, bueno, entonces te veo luego- y despareció del interior de la Boosted Gear

En la realidad

-Hyudou-kun, pase al pizarrón a resolver el ejercicio por favor- dijo el maestro

-si sensei- las clases del castaño siguieron normalmente toda la semana, aunque se sentía incómodo, ya que por la mañana era vigilado por la reina Sitri, y por la tarde y noche por la torre Gremory, eso le impidió poder salir a dar una "vuelta" por el pueblo

Fin de semana

-Ise-san? Es usted Ise-san?- dijo la monja rubia la cual diviso al castaño en plena calle

- ah, pero si es Asia, como has estado?- pregunto el castaño mientras sostenía una bolsa

-bien, me dieron un tiempo libre y lo aproveche para venir al centro comercial-

-es así?, pero no estas acompañada?- pregunto el castaño, ya que se le hacía raro que ella anduviera libre por el ahí, sin ser acompañado siquiera por un caído, aunque sea de lejos, pero no sentía nada, ni un aura alrededor

-no, decidí venir solo, aunque me perdí al pasar viendo unas tiendas hasta que te vi Ise-san- dijo con una mirada brillante

-ahhh, hay que ver, bueno, ya que tengo tiempo libre puedo llevarte en un paseo por el centro comercial, los videojuegos y eso si gustas- ofreció el castaño

-en serio haría eso por mi Ise-san?- pregunto la rubia

-claro, no tengo ningún inconveniente con eso, además, estoy aburrido - y así pasaron la tarde por distintos lugares, el castaño gano un peluche de Raichu, el cual se la regalo a Asia, al atardecer el castaño llevo a la rubia a una zona sin mucha genta, ya que había sentido como un aura caída se los vigilaba desde hace poco tiempo

- hoy fue un día maravilloso Ise-san - dijo la rubia mientras abrazaba a su peluche

-me alegro por ti Asia, se ve que lo disfrutaste mucho- dijo el castaño mientras se sentaba en una banca cercana

-así es, en la iglesia no me permitían salir así que descubrí varias cosas nuevas, con esto aprendido, podre cumplir mi sueño al fin podre tener amigos- dijo con alegría

-es un gran sueño Asia, espero que lo consigas- dijo el castaña

-hai, y me alegra que Ise-san sea mi primer amigo-lo dijo mientras presionaba el peluche contra su pecho

-que cursilerías estas diciendo niña tonta - se oyó una voz diferente

-Raynare-sama-dijo con miedo la rubia, frente a ellos estaba Raynare con sus alas extendidas levitando en el aire

-ohhh, te escapas un momento y ya te consigues un novio, hay que ver de lo que eres capaz pequeña-

-así que al fin apareces- dijo el castaño levantándose de la banca

-eh? No te hagas el valiente muchacho- dijo con burla

-I-Ise-san que está haciendo?- dijo la rubia preocupada

-Asia, lo que vas a ver, te pido que lo mantengas en secreto- ese argumento confundió a la monja y a la caída

-oye tú, Raynare, lárgate antes de que arrepientas- dijo el castaño mirando fijamente a los ojos de ella

-ja, como si siguiera ordenes de un humano- dijo creando una lanza de luz, arrojándola al castaño

-conste que te lo advertí- el castaño coloco su mano frente a su cara, reuniendo energía en ella, y deslizándola rápidamente hacia abajo, creando una máscara, seguido por un atuendo negro, en ese momento impacta la lanza creando una cortina de humo

-Ise-san!- grito la rubia desesperada

-ja, simple humano- se mofó la pelinegra

-quien dijo que soy un simple humano?- escucho la voz proveniente a su espalda, sobre un pilar, se encontraba sentado con una pierna recogida, el ahora peliblanco

-ahora, recuerda- dijo mientras alzaba su mano en dirección a la caída, la cual no comprendió hasta que sintió un fuerte dolor de cabeza

-ahhhhhhhh- grito de dolor