Epilogo: Primera vez

El beso se fue encendiendo, en un momento Alec estaba sentado sobre sus piernas, con una pierna a cada lado del brujo y pasaba sus manos por su estómago y espalda

Magnus estaba perdido entre los besos y caricias de Alec algo de raciocinio entro en su mente por lo que se separó ligeramente de Alec y le dijo

-Si…si sigues así…no…no poder contenerme…

-No lo hagas –dijo en un susurro el Nephilim y con un fuerte sonrojo en sus mejillas –Quiero ser tuyo Magnus…completamente…

Magnus gimió ante la respuesta de Alec

-Entonces…deberíamos ir a la habitación –Alec asintió y ambos se pusieron de piel y caminaron hasta la cama de Magnus…no, la cama de ambos ahora.

Ya en la habitación Magnus comenzó a besar a Alec.

Alec le saco la camisa a Magnus y este hizo lo mismo y volvieron a besarse cayendo sobre el colchón

Alec se colocó sobre Magnus y siguió besándolo. Sintió como Magnus coloco las manos sobre sus caderas y se fundió en el beso, atrayéndolo hacia él, dejando el mínimo espacio entre ellos.

El Nephilim recorrió su pecho desnudo. Despues se detuvo y comenzó a desabrochar con manos temblorosas su pantalón.

Magnus aprovecho la pequeña distracción del chico para colocarse sobre él, dejando sus pantalones abiertos.

Comenzó a besar su cuello, sin prisa, adorando el cuerpo de su Ángel. Como si fuera un tesoro preciado.

Sus caderas se rozaron y Alec gimió ocasionando una risa en el brujo y un profundo sonrojo en él.

Magnus fue bajando del cuello hasta llegar a su pecho pero sin dejar de frotar sus caderas.

Se detuvo y dirigió sus manos hasta los pantalones de Alec terminando de desabrocharlos y comenzó a bajarlos dejando a Alec en ropa interior.

Su lengua comenzó a jugar con los pezones de Alec ocasionando que el joven gimiera profundamente.

Despues se separó de él y se quitó el pantalón quedando también en ropa interior.

Con suavidad Magnus se colocó entre las piernas de Alec y se acercó y su mano descendió hasta la erección de Alec comenzando a masajearla con maestría.

Los gemidos de Alec se incrementaron, comenzó a gemir incontrolablemente, un calor una tensión desconocidas completamente se acumularon en la parte inferior de su vientre. Pero antes de que terminara Magnus se detuvo ocasionando un gemido de protesta

Magnus nuevamente rio

-Paciencia querido Nephilim –dijo sonriendo y dirigió las manos hacia los calzoncillos de Alec bajándolos y sacándolos del cuerpo e hizo lo mismo con el suyo.

Alec se sonrojo, era la primera vez que veía a Magnus completamente desnudo y era maravilloso.

Magnus le sonrió y con un destello azul hizo aparecer un pequeño frasco de lubricante.

-Alexander –lo miro profundamente y Alec se estremeció al escuchar su nombre en esa situación – ¿Estás seguro que quieres hacer esto?

-Si…no quiero hacerlo con nadie más…-Magnus sonrió y asintió

-Entonces así será –destapo el frasco de lubricante y lleno sus dedos índice y corazón con él. Alec no apartaba su vista de todo lo que Magnus hacía, despues se volvió a colocar entre sus piernas y comenzó a besar su rostro, por todos lados mientras deslizaba su dedo índice dentro de él.

Alec soltó un quejido de dolor y Magnus paro por un momento, besando sus labios, despues continuo dilatándolo, introduciendo poco despues el segundo dedo.

Alec se acostumbró a la sensación rápidamente y cuando creyó que estaba listo se puso lubricante y se introdujo lentamente en él.

Alec lanzo un gemido de dolor y Magnus se detuvo, esperando a que terminara de adaptarse a él.

Cuando Alec le indico que está listo comenzó a moverse primero lentamente, y aumentando su velocidad conforme pasaba el tiempo.

Los gemidos se escuchaban en toda la habitación. Alec jamás pensó que el sexo pudiera sentirse así.

Se sentía tan pleno, tan lleno de dicha. Magnus fue delicado con él en todo momento, se aseguró que lo desfrutara plenamente.

Al final ambos terminaron con gemido ronco y Magnus se dejó caer a un lado de él jadeando.

Los cubrió con una sábana de la cama y se recostó en el pecho de Alec, escuchando los latidos de su acelerado corazón y como estos disminuyeron con el paso de los minutos.

Alec comenzó a pasar sus manos por el pelo, húmedo por el sudor y coloco sus dedos por debajo de su barbilla alzándolo y dándole un beso.

-¿Fue tan especial como siempre pensaste? –pregunto Magnus

-No –dijo Alec ocasionando que Magnus lo viera alarmado así que añadió rápidamente –fue contigo, mi novio, en nuestra casa y en nuestra cama, fue mucho mejor, fue perfecto.

La cara de Magnus brillo con una hermosa sonrisa y lo beso

-Te amo –le dijo al separarse

-Y yo a ti –respondió y lo beso nuevamente, agradeciendo que al final de todo estuvieran juntos y felices.

FIN


AU: Hace años, literalmente años que no escribía un lemon de cualquier pareja así que espero haberlo hecho bien. Y espero que les haya gustado.

Para los que pidieron un epilogo de Pain, tendran que esperar un poco, actualmente trabajo en un proyecto personal para el cumpleaños de mi tia y tengo que terminarlo, pero les prometo que lo subire.