Realmente me encanta escribir esto, aunque a uno no le gusto(?)... aun asi tengo a mis 3 lectores, que me hacen muy feliz QwQ

-¿Sera que te gusta Nishikino?- Pregunto Hanayo.

Yuki no podía creer lo que escuchaba, no podía creer que se la pasaba todo el día viendo a su compañera pelirroja y lo peor de todo es que tal vez sus nuevas amigas no eran las únicas que se habían dado cuenta.

-¿Qué dirían si les digo que si?- Les pregunto Yuki algo inquieta, sabia que no era tan normal pero aun asi arriesgo todo por eso.

Ambas chicas se quedaron un poco pensativas. ¿Realmente importaba que ella tuviera esos gustos? Hasta el momento había demostrado ser alguien bastante confiable y muy agradable, tenian sus dudas pero hay algo que si sabia Rin.

-Que importa Yuki. Lo que quiero decir es que no tiene nada de malo, sabemos que no es completamente normal pero eso solo son las cosas que las personas piensan. Tu debes hacer lo que quieras, siempre y cuando hagas lo correcto puede gustarte quien tu quieras. El amor es una cosa de las que nos diferencia y debemos disfrutar cada momento que nos brinda ese sentimiento nya.- Decia felizmente Rin, Hanayo se quedo impresionada con el discurso que dio.

-Rin-chan no sabia que pensabas asi.- Lo decia algo ruborizada Hanayo, era cierto que la conocia de hace años pero jamas habia dicho algo asi... prudente y buen consejo.

-Lo se, salió de alguna parte de mi Kayo-chin pero así es como lo veo.-

-Gracias Rin, pero para serles sincera no se muy bien que pensar de ella. Quiero decir, es muy linda y por lo que dicen creo que si me gusta. Por otro lado no creo que pueda simplemente hablarle a ella, siento que ella es muy diferente a mi.-

-Puede que tengas razón, después de todo ella es la única heredera de la familia Nishikino.- Yuki la miro confundida sin saber de lo que hablaba Hanayo. No conocía nada de eso, el nombre le resultaba familiar pero no sabia de donde.

-Si, tu sabes... Familia Nishikino. Rica, famosa, hospital para ricos? ¿Te suena?-

-Ahora que lo mencionas... No.- Ahora con eso dicho no recordaba nada de ese nombre pero como lo ponía Hanayo definitivamente era una de esas princesas de papi. Aunque la verdad esa cara no decía lo mismo, algo en ella decía que no estaba conforme.

-Pues ya lo sabes nya. Si pretendes acercarte a ella tal vez no sea buena idea a menos que tengas un plan.- Rin abrazaba a las 2 chicas con quien iba para tranquilizar todo el tema.- Por cierto, tenemos que ir por tus lentes nuevos Yuki.- Le dio una gran sonrisa.

-Rin-chan tiene razón, debemos ir antes de que se haga mas tarde Yuki-chan.-

-Cierto chicas, vamos aun queda un poco de camino.- Yuki estaba tan feliz de poder haber encontrado a la castaña y la pelinaranja, después de todo perder esos lentes no había sido tan malo.

En el transcurso del camino aun hablaban de lo que sentía Yuki pero siempre eran platicas que no llegaban a nada. Cuando llegaron a la óptica de Yuki al parecer le tenían unos ya preparados pues había llamado entre clases para ver si tenían unos de su graduado, afortunadamente tenían un par solo tenia que ir a recogerlos.

Después de recogerlos decidieron que ya era tiempo de volver a sus hogares por lo que tomaron caminos separados. Había sido un día muy interesante, había echo dos amigas nuevas y no les importaba nada de lo que ella prefería.

Al llegar a su casa fue a dejar sus cosas en su habitación, se cambio de ropa y dejo su uniforme lavando para bajar a la cocina para preparar su cena. Esta vez solo preparo un café con galletas de mantequilla. Fue a la sala, prendió su consola y puso a jugar algo de un Rpg. Al cabo de una horas algo estaba en su cabeza la molestaba, era como una lluvia de ideas para algo que había dejado de hacer hace mucho tiempo. Fue directo a su habitación y busco entre unas cajas que guardaba en su armario, de una de ellas saco un pequeño cuaderno de color azul marino con el titulo "Flügel der Liebe". Ese pequeño cuaderno se le había entregado por parte de su madre cuando ella tenia 12 años y no supo para que era hasta ahora.

Se fue a su escritorio y se puso a escribir, todas esas ideas que llegaban a su mente ella las plasmaba en ese cuaderno, escribir la hacia sentir bien, algo dentro de ella se sentía familiarizada con esa comodidad. Al cabo de unos 50 minutos paro de escribir, se le notaba cansada y muy satisfecha. Al terminar noto que ya era tarde así que solo alisto sus cosas para el día siguiente.

Antes de recostarse el móvil de Yuki sonó, miro la pantalla y era lo que esperaba; una llamada de su madre, ese día no podía ser mejor.

-Yuki, de nuevo te hablamos para ver como estas.- Era su padre.

-Hola papa, realmente me ha ido bien, es mi segundo día y ya tengo dos amigas nuevas.- Decía con mucha alegría la rubia.

-Me enorgulleces hija mía. Me recuerdas a tu madre cuando llegaba a un lugar nuevo, siempre era ella quien intentaba hacer amistades con todos.-

-En mi caso fue algo gracioso pero si, fue algo asi.- Reía nerviosa, no le diría que rompió sus lentes pues no quería preocuparlos y mucho menos quería hablar de eso en teléfono, les diría mejor cuando los vea.

-Bueno, tu madre te manda saludos y que espera que estes comiendo sanamente.-

-Dile que estoy comiendo cereal todos las mañanas y que cuido mi comida.-

-No esperaba menos de mi hija. Bueno, me temo que ya es hora de que nos despidamos.-

-Ok papa, espero que estén bien.-

-Igualmente hija, suerte mañana.- Cuando iban a colgar su padre le dijo algo mas. -Por cierto, no metas chicos o chicas en la casa, aun no tienes edad para eso.- Ante ese comentario por la mente de Yuki apareció la pelirroja en su habitación e hizo que se sonrojara.-

Al colgar prefirió ya no pensar en nada mas, el día había sido agotador y se recostó para descansar.

Por la mañana sonó su alarma, la apago e hizo las cosas para salir de su casa.
Cuando salió llevaba un pan tostado para comer en el camino ya que se le había antojado, mientras caminaba esperaba de nuevo encontrarse con sus amigas y así lo fue, en el mismo lugar donde había pasado el día anterior se encontraban Hanayo y Rin esperándola, corrió hacia a ellas y les dio un abrazo.

El camino fue muy regular y la platica era muy amena con los típicos temas de programas que habían visto la noche anterior. Al llegar a su aula se dieron cuenta de que era muy temprano para las 3 chicas ya que las clases comenzaban en 20 minutos por lo que decidieron seguir con la platica en su aula la cual estaba medio vacía. En un momento dado la rubia tenia que ir al tocador por lo que les aviso a sus amigas y dejo el salón. Mientras caminaba pensaba en las cosas que podrían pasar pues el argumento de Rin la ponían un poco mas confusa pues lo que había escrito era algo bastante raro en ella, hace tiempo que lo había dejado pero de la nada volvió a hacerlo como si no hubiera parado hace años. Yuki seguia en sus pensamientos cuando algo llamo su atención de forma bastante brusca, una bella melodía en piano, algo que jamás había escuchado era un deleite para sus oídos sin mencionar la voz que parecía venir del mismo paraíso, no había escuchado nada similar ni de las mismas ídolos del mundo en ese momento no había nada mas hermoso que lo que escuchaba. Busco y busco hasta dar con el lugar de donde provenía, no era raro que fuera del aula de música lo que sorprendió a Yuki fue saber quien era quien tocaba. En el piano sentada era esa chica que no dejaba de aparecer en su mente, ese cabello rojo que la hacia distinguir de todas las demás y los ojos amatistas que parecían unas piedras preciosas. Su corazón latía a mil por hora. Algo dentro de ella quería salir, era algo nuevo para ella pero era muy agradable que le causaba un calor dentro de ella. Estuvo mucho tiempo observando que fue lo suficiente como para que Maki se diera cuenta, la pelirroja se paro y fue deprisa hasta la puerta donde estaba Yuki. Yuki en cambio entro en pánico y no supo que hacer, sus piernas no respondían aunque ella quería salir corriendo. Cuando se dio cuenta tenia a la pelirroja cara a cara, eso hizo que se formara un rubor en el rostro de la rubia. "Esta molesta y esto es incomodo..." pensó para si misma, el silencio se hacia mas incomodo hasta que la pelirroja hablo.

-Entra.- Sin mas que decir le ordenaba a la rubia que aun estaba en shock.

*En el cuarderno*
Este debe ser lo mar raro que he escrito
En los libros esta escrito y con el tiempo se ha perdido.
Este sentimiento oprimido en el pecho
Me hace sentir como si fuera menos.
Algunas personas han escrito relatos sobre esto
Y en todos ellos el final no es de ensueño.

Hay personas que no están echas para amar
Pero me pregunto yo te amo para empezar.
En toda mi vida no me preocupe por lo que siento al verte
Pero ahora me pierdo ante tus ojos y aun asi no tengo suficiente.
Quiero entender lo que siento por ti
En fin, si lo entendiera no habría por que escribir.

Pediré a los dioses que si eres mi musa
De mi lado jamas te apartes nunca.
Que si estas destinada a mi
Cuidar de tu amor el cual recibí
Y que ante todo pueda despertar y ver tu rostro
Para poder perderme en esos ojos tan misteriosos.

Bueno... como siempre es muy divertido o3o Yuki es una protagonista comun y corriente pero... es muy especial. Espero que les haya gustado, a mi si (?)
Eso es una parte de lo que escribió en el cuaderno. Ya saben si les gusto dejen Review ( que me hace muy feliz) y cuidense. Nos leemos luego ^^