Antes que nada agradezco a Chronicler, mi beta que se toma el tiempo para corregime. Dicho esto disfruten el capitulo y como siempre quédense hasta el final :)

Capitulo Nueve: Carcerem Finitum.

Dicho eso el ciervo exaltado afirmó. "¡Dime qué te dijeron!"

"Los restos de Wilde se encuentran a bordo de un avión hacia Germanberg, tocarán tierra en unas horas." Explico el lobo para luego masajearse los ojos.

"Podría ser peor, en parte estoy aliviado. ¿Y ahora qué?" Preguntó el mamífero a su colega.

"Debemos de contactar al jefe encargado de la funeraria que trasladaba el cuerpo y enviarle toda la información para verificar lo sucedido, para así regresar el cuerpo." Afirmó el patólogo observando el reloj en su muñeca.

"Bien comienza con eso, yo tengo una cirugía en un rato, así que me iré a preparar" Comentó el ciervo estirándose.

"Parece que te lo tomas muy bien, extraño dado el hecho de como estabas hace unas horas. En fin no importa mejor así que para una cirugía hay que estar tranquilo." Cuestionó su amigo.

Colocando una expresión le dio la razón y salió de la habitación para alistarse para su día.

-Residencia Wilde; 12:05 PM-

En las noticias del día, todavía no hay novedades del robo al banco que sucedió ayer, el jefe Bogo de la principal comisaría de la ciudad dio una conferencia de prensa sobre dicho tema.

"¡Jefe! ¡Jefe! ¿Qué puede decirnos acerca de los delincuentes? ¿Ya tienen alguna pista?" Gritó uno de los muchos periodistas que se encontraban allí.

"Estamos llevando a cabo un interrogatorio a todos los involucrados con el suceso del día de la fecha. Estamos recogiendo toda la información necesaria." Con un gesto indicó que finalizó para darle paso a otro periodista.

"¿Qué nos puede decir de la señorita Johnson? ¿Se recuperará?"

"La mamífera Annette Johnson esta fuera de peligro, según los especialistas sufrió un impacto de una bala-dardo con una sustancia no regulada, que produce una parálisis muy similar a un estado de deceso. Fuera de eso se recuperara normalmente."

Automáticamente y como era de costumbre otro periodista saltó con una pregunta. "¿Qué nos puede decir de la persecución que sucedió luego del robo en los laboratorios en Tundratown?"

"Sin comentarios. Bien esto es todo, buenas tardes." Afirmó el búfalo para dejar el podio, como siempre sucedía los periodistas siguieron insistiendo con otras preguntas y sacando varias fotografías.

En otras noticias nuestro mamífero en el aire capturó unas escenas de la persecución que sucedió ayer por la tarde. A continuación el video.

"Como pueden apreciar podemos ver como una patrulla está persiguiendo a lo que parece ser una camioneta que se dio a la fuga luego de asaltar unos laboratorios en Tundratown. Como verán el auto está conduciendo a mucha velocidad, poniendo en riesgo a los peatones y otros conductores."

"Por ahora este es el material completo, por órdenes de la policía de Zootopia nos retiramos del lugar por seguridad. Pudimos indagar que luego de un enfrentamiento entre los delincuentes y la policía, todo termino con el arresto de 3 de los mismos y al parecer un oficial herido, todavía no hay ningún informe oficial y desde la comisaria no dicen nada concreto, se cree que el agente herido es el conocido oficial Wilde, uno de los responsables en la resolución del caso de los aulladores junto a Judy Hopps." Apareciendo una foto del zorro de su día de graduación.

"A continu…" Sin dejar que finalizara la frase el fennec apagó la televisión y dejó el control sobre la mesita delante de él.

"Estos periodistas siempre tan amarillistas." Refunfuñó Finnick

Sonado el teléfono, el pequeño zorro fue tomado por sorpresa y rápidamente lo comenzó a buscar, para su suerte no llegó a tiempo, había quedado sobre un mueble muy alto para su baja estatura. Por esto la contestadora automática tomó la llamada. "Buenos días, nos estamos comunicando de la funeraria Herbert y asociados, por favor a la brevedad necesitamos que se comunique con nosotros. Nuestros más sinceros pésame Señora Wilde. Hasta pronto."

El silencio invadió el ambiente el mamífero sintió una incomodidad muy fuerte. "Maldita suerte, Nick." Dejó salir el zorro.

El fennec estaba listo para irse pero con esa llamada sus planes fueron desechos, no podría irse sabiendo ese balde de agua fría que sería para la madre de Nick escuchar eso sola en su casa luego de todo lo que estaba pasando, así que decidió salir al pequeño porche de la casa para bajar su estrés con unos cigarrillos. Luego de dos cigarrillos antes de prender uno tercero tomó su teléfono ya que tenía nuevos mensajes, era la coneja que se disculpaba por la noche anterior, que se encontraba bien y no se preocupase, Finnick le contestó que todo estaba bien y tuvieron una leve conversación.

Pasados varios minutos distraído con su teléfono, fue sacado del mismo por palabras de Kaitlyn. "Finnick. ¿Todavía aquí?" Cuestionó la vulpina.

Guardando su teléfono tragó aire para responder. "Si, pasa que… cuando estabas afuera… bueno… ya sabes tarde o temprano pasaría, llamaron los de la funeraria para preparar todos los detalles." Terminado con una cara de tristeza.

"No lo queremos aceptar pero cuando das este paso es un antes y un después." Respondió la mamífera ahora en cuclillas a la altura de fennec, aunque el pequeño zorro era reacio a tanto afecto hizo lo que todo animal haría terminar con un leve abrazo ese momento tan sentimental. Limpiándose las lágrimas ya adentró de la casa, los dos sentados en la cocina escucharon el mensaje. Un silencio más tarde Kaitlyn tomó la palabra. "Nunca pensé que llegaría este día, enterrar a un hijo eso no es cómo funcionan las cosas. Querido, ¿te molestaría acompañarme? Tú sabes que fuiste como un hermano para Nick y no creo poder hacer esto sola, eres parte de la familia, también esta Judy pero creo que tiene muchas cosas sobre sus hombros para colocarle este peso innecesario." Finalizó sonriendo dulcemente mirando al zorro.

La realidad era que a la zorra no le faltaba verdad y Finnick sabía esto, nunca pensó que llegaría a despedir a su colega de estafas que conoció hace tantos años por cosas de la vida. Obviamente no se negaría. -¿Quién en su sano juicio podría hacerlo?- pensó. "Sí, claro, ni lo preguntes, no podría dejarte sola con esto." Afirmó el pequeño mamífero.

"Muchas gracias." Respondió la mamífera con muchos sentimientos de por medio. Respirando varias veces tomó el teléfono y se comunicó con el lugar. Una breve charla después corto la llamada suspirando hablo. "Me explicaron lo necesario, me comentaron que al ser un oficial el proceso es algo distinto, me pidieron que cuando vayamos les lleve su uniforme de gala de la fuerza, el problema con eso es que está guardado en su departamento y nuca me dio la llave, tu sabes eran tiempos complicados y nunca se dio la oportunidad cuando arreglamos nuestra relación."

Aunque eran como hermanos Nick nunca le confió la llave de su departamento al fennec ya que este en una que otra ocasión sobrepaso los límites con el viejo apartamento que supo alquilar Nick cuando dejó su casa, pero esto no detuvo al pequeño rufián a hacer una copia de la misma, no usaría el lugar indebidamente pero mejor prevenir siempre podía pasar algo. "De hecho yo tengo una copia, debería pasar por el hospital para recoger mi van y luego volver así vamos al departamento." Comentó el mamífero esperando una respuesta.

"Si, como tú quieras." Afirmó la vulpina.

Dicho eso Finnick salió de la cocina en dirección a la puerta principal, antes de poder salir fue frenado por la mamífera, dándose la vuelta fue tomado por sorpresa por lo que era un abrazo por parte de la misma. Entre lágrimas mencionó. "Te lo agradezco muchísimo, no sé si alguna vez podre recompensarte todo esto que estás haciendo por mí."

"Tranquila, señora Wilde, no se preocupe por nada." Respondió el pequeño mamífero algo incómodo, pero dada la situación era lo mínimo que podía esperar, el contexto era delicado y la mamífera no tenía a nadie más en estos momentos. Unos segundos después el ambiente se calmó y el zorro emprendió su camino hasta el hospital y su van. Caminado unas cuadras llegó hasta la calle principal y así entró al subterráneo, unos metros luego descendió e ingresó a los andenes a la espera del trasporte. Cuando al fin llegó se subió a uno de los bajones y se sentó en el mismo.

Frenando en la estación el tren abrió sus puertas, entraron y salieron varios mamíferos, entre ellos el fennec acelerado su paso el pequeño iba en dirección a la salida la cual lo dejaría enfrente del gran hospital. Una vez en la superficie cruzaría para ingresar al estacionamiento del hospital para así retirar su van. Saliendo del lugar con su auto tomó dirección nuevamente al barrio de la residencia Wilde. El viaje fue normal, escuchando varias de sus canciones favoritas estaba llegando a destino, aprovechando un semáforo en rojo limpió alguna porquerías que tenía en el vehículo, aunque más que sucio estaba viejo, 30 años si no es que más.

Una vez estacionado, bajó para tocar la puerta de la casa. Abriendo la misma Kaitlyn al ver este retrato recordó viejos tiempos cuando Finnick venía a buscar a Nick, tiempos difíciles.

…

Tiempo atrás

"¡Nicholas Piberius Wilde! No me des la espalda cuando te estoy hablando, jovencito, yo no te crie con esos modales." Gritó furiosa la vulpina con su pata haciendo un gesto con su dedo señalando al zorro.

"No quiero romper tu burbuja pero, como podrás ver esos modales no sirven para un zorro ¡Si todos los demás nos ven como basura!" Respondió Nick gritando.

"¿¡Eso es de lo que te ha estado llenado la cabeza ese pequeño rufián de afuera!?" Afirmó la madre del zorro.

"No, Kaitlyn, yo solo lo descubrí por las malas, Fin es un buen amigo, uno que no me juzga por lo que soy y tú tampoco deberías hacerlo con él." Afirmó el zorro casi dejando salir unas lágrimas por esos viejos recuerdos.

"¡Nicholas por favor! Escucha a tu ma…" siendo interrumpida por el vulpino que dio un portazo y rápidamente subió a la van del fennec, este al ver lo acontecido Comentó. "Nick, en esta vida solo hay una ma…"

"¡No te metas! ¡Tú solo arranca!" Gritó Nick muy molesto subiendo el volumen del estéreo.

Saliendo la mamífera con lágrimas en sus ojos se quedó viendo cómo se alejaba la camioneta.

…

Tiempo Presente

"¿Señora Wilde? ¿Se encuentra bien?" Comentó el zorro moviendo su pata frente a la zorra.

"Sí…sí, sólo viejos recuerdos, deja que tome mi abrigo y así vamos." Respondiendo tomó sus cosas y así los dos salieron en dirección al vehículo.

Una vez dentro arrancando el auto la radio se encendió, estaba sintonizado un programa informativo. -Y con eso pasamos a las noticias internacionales, el grupo extremistas Los Hijos de sırtlan atacaron un pueblo pacífico habitado en su mayoría por jabalíes, afirmando que ellos son el mamífero perfecto y el próximo paso de la evolución, el gobierno de Trakya repudio los hechos y envió ayuda a los heridos. La Organización Intercontinental de Mamíferos debatieron las represalias contra este grupo de mamíferos. El Doctor Arminius Vambéry luego de esta reunión comentó estas palabras.- "Como sabemos, nuestra sociedad no es perfecta y siempre existirán este tipo de mamíferos, creado caos basados en supersticiones, el bien común o falacias de la especie perfecta. Mis investigaciones comprueban que las historias de la especie perfecta se remontan miles de años atrás, no creo que alguna vez se pueda llegar a dejar estas ideas. Pero bueno, es así como funciona nuestra mente."

-En otras novedades, la cantante Gazelle ha sufrido una inflamación en sus cuerdas vocales y su próximo concierto está afectado por esto.-

-¿Cansado de la ciudad? ¿Sus vecinos son unos ruidosos y no puede dormir? ¡Deje de estresarse y…!- Sin dejar terminar le comercial, el fennec apagó la radio para luego comentar. "Demasiadas malas noticias."

-Apartamento de Nick; 3:35 PM-

Estando enfrente de la puerta el mamífero tomó la llave para abrirla, había muchos sentimientos y recuerdos en el aire, estar allí era fuerte. En general estaba todo ordenado, tampoco había muchas cosas y el lugar era mediano, una cocina-comedor y al fondo la habitación principal con baño en suite. Una vez adentrados en el dormitorio Finnick señaló el ropero, a lo que la vulpina lo abrió, observando la ropa que allí se encontraba fue tocando algunas, tomando una de ellas se dejó caer en la cama mientras sostenía con sus patas la camisa. "¿Por qué hijo? ¿Por qué?" Balbuceó la mamífera entre lágrimas. El pequeño zorro se acercó y sentándose a su lado puso su pata sobre la de ella para tratar de consolarla.

"¿Sabes? Yo no fui justa contigo, esos años que Nicholas se iba contigo… Tu… Yo… Tenía una opinión errada, cosas que hasta hace poco seguía sosteniendo. Lo siento tanto" Diciendo esto último Kaitlyn abrazo al zorro para luego terminar. "Espero puedas perdonarme." Susurró entre lágrimas.

"Cualquiera habría hecho lo mismo, era su hijo y yo era el que lo estaba alejando de usted. Yo debería disculparme." Afirmó Finnick.

"Nadie se lo merece, todos tienes que ser tratados por igual y no ser juzgados por un estereotipo. Y creo que ya va siendo hora de dejar el usted de lado." Termino la vulpina sonriendo.

"Me parece perfecto." Comentó el fennec también con una sonrisa. Pasado el momento sentimental la zorra se tomó un momento y termino de buscar el uniforme. Una vez que lo encontró lo tomó para revisarlo, viendo que todo estaba correcto dio una última mirada para ya dejar el apartamento, sin antes por parte de Finnick que vaciaría el refrigerador ya que se terminaría pudriendo lo que había en el mismo, así todo terminado salieron de la unidad y lentamente cerraron la puerta a la vez que no querían porque sabían que el ya no estaba entre ellos.

Al día siguiente.

-Hotel, New Wolfgton; 7:00 AM-

Como si de una norma se tratara la coneja siempre madrugaba, pero dejando de lado la habitual hora a la cual despertaba, esta mañana sería una de las pocas en cual ella sería despertada por la alarma.

…

"Sabes que me amas."

"¿Yo se eso? Sí, sí lo sé" Haciéndose esta imagen borrosa la coneja se acercaba al vacío.

"¡Nick! ¡No!" Esto se escuchaba mientras como si de una cámara lenta se tratase, se podía apenas observar como el zorro caía en lo que parecía una oscuridad interminable. La coneja dejándose llevar se dejaría caer a ese vacío, el tiempo parecería detenerse a la vez que ella se acercaba a él. En ese silencio infinito, imágenes de recuerdos surgían.

"¡Zorro charlatán!"

"Tu… Tu salvaste mi vida."

"Justo cuando pensé que alguien realmente confiaba en mí."

"¡Zanahorias! ¡Hopps! ¡Judy!"

"Muy Bien, ven aquí..."

"¡Ju…dy!" El tiempo comenzó a acelerarse, el zorro cada vez estaba más lejos y la velocidad aumentaba, la respiración de la coneja aumentaba rápidamente y podía sentir su corazón salirse de su pecho. El fondo cambiaba y la oscuridad se disipaba. Cerrando los ojos la coneja se preparó para impactar, pero al abrirlos lo que la esperaba no era la muerte sino su zorro, ese momento otra vez, ese beso fugaz, con su gran sonrisa el vulpino la observaba. "Judy, creí que nunca vendrías. Ven vamos." Dicho esto el zorro tomó su pata y saltando de la camilla el cuarto se desvaneció apareciendo en una pradera, las vestimentas de Nick cambiarían y dejando la bata de hospital ahora tenía lo mismo que la primera vez que se conocieron.

"Caminemos, Judy." Afirmó dulcemente el mamífero, con sus grandes ojos fijados en los de ella. Tendiendo su pata la tomó y comenzaron a caminar.

Caminado y caminado Judy sentía algo en su interior que no podía explicar, mirando al zorro este estaba distinto algo en él era resplandeciente. "¿Nick?" Preguntó la coneja.

Este deteniéndose se puso a su altura y con su sonrisa hablo. "Zanahorias, no creo que alguna vez pueda agradecerte tanto por estos últimos meses, tú fuiste lo mejor de mi vida." Terminada la frase abrazó a la coneja muy cariñosamente y le susurró algo al oído.

"Espera, Nick, no lo entiendo." Cuestiono Judy.

"Es la hora." Afirmó Nick dando unos pasos para atrás.

"¿La hora? ¿¡La hora para qué!?" Mencionó la coneja sobresaltada.

"Adiós mi amada." Afirmó el zorro para luego de eso una gran ventisca se hiciera presente que de apoco desvaneció al mamífero, viendo esto Judy gritaría. "¡Nick…!"

Despertaría por el sonido de la alarma de su teléfono, sobresaltada sintió un agudo dolor es su espalda lo que provocó que se dejara caer en la cama. Ese sueño fue muy real fue todo de golpe, además la pobre se había quedado en una posición terrible en la soledad de la madrugada, los sentimientos la sobrepasaron y terminó durmiéndose entre lágrimas y sollozos. Trató de contenerse y seguir la filosofía de Nick pero no pudo aguantar más y lo dejó salir todo, aunque sabía que había mucho más de lo que su conejil y sentimental persona se haría notar con todo.

Ahora más cuidadosa se estiró y apagó la alarma, refregando sus ojos intentó limpiarse las lagañas y lágrimas, siendo bastante torpe bajó de la cama muy adolorida para buscar esas benditas pastillas antiinflamatorias. Encontrándolas se tragó una y algo atolondrada para caminar terminó por llegar al baño, para así darse una ducha caliente que le ayudase a terminar de despertar. También esperaba que le ayudara con tantos dolores que tenía por toda la espalda, cuello y para ser sinceros en todo el cuerpo.

Ya bajo la ducha la coneja estaba metida en sus pensamientos, más que nada en ese extraño sueño, le fue imposible no largarse a llorar con todo eso. Aprovechando el agua se retiró cuidadosamente el vendaje de su brazo, por lo grande del corte el agua ablando la sangre seca y eso provocó que sangrara otra vez, no mucho pero si lo necesario como para colocarse otro vendaje. Terminado de enjuagarse enérgicamente, la coneja se escurrió el exceso del agua y tomando una bata salió para terminar de secarse. Lo bueno de estar en un hotel es que tenía una secadora de pelaje así que fue una tarea más rápida que lo normal.

Ya totalmente seca tomó un vendaje del botiquín y simplemente se vendó su brazo colocando una gaza para evitar que saliera más sangre y ensuciar todo el vendaje. Dejando eso listo salió en busca de su maleta para sacar lo que usaría en el día, como bien le dijo Ben irían temprano a la prisión así que ya se pondría el traje para la ocasión. Toda lista se arregló unos detalles más para así salir del cuarto. A su vez el zorro se encontraba en la sala de estar que unía los cuartos donde estaba la mesa y otros muebles. Estaba mirando el cielo gris de esa mañana. "Sí, ya está lloviendo otra vez." Girando sobre sí mismo hablo. "Buenos días Judy. ¿Pasaste buena noche?" Preguntó sonriendo.

"Buenos días. No, la verdad fue regular." Respondió a coneja con cara de cansada y bajando sus orejas.

"Oh que pena oír eso. ¿Algo que pueda hacer?" Comentó el vulpino haciendo un gesto con su pata.

"No, gracias, estoy bien." Afirmó la mamífera.

"Bien. Veo que ya estas lista. ¿Te apetece desayunar? Tengo que decirlo, la cocina de este hotel es muy buena." Explicó indicando lo mismo con su rostro.

"Si, me vendría bien un buen café." Comentó Judy más animada.

"Perfecto, vamos, luego volveremos por lo que necesitemos para el resto del día." Afirmó mientras se ponía su saco que hasta el momento estaba sobre un sofá.

Saliendo de la habitación tomaron el ascensor hasta el restaurante del hotel, una vez allí fueron por una mesa. Corriendo la silla el mamífero le indicó que se sentara, sonriendo la coneja se sentó. Rápidamente se acercó un mozo para atenderlos. "Buenos días, esta mañana contamos con el bufet internacional, pueden ordenar algo para beber y servirse lo que les apetezca del bufet." Mientras explicaba esto les entrego la carta a los dos mamíferos.

"Muchas gracias." Agradeció la mamífera, con una sutil reverencia el mapache se retiró para dejarlos ver la carta.

Leyendo por unos minutos tanto Judy como Benedict eligieron que tomarían, acercándose el mozo Preguntó si ya habían decidido. "Si, yo tomaré un expresso doble, por favor." Respondió Judy entregándole la carta, asintiendo lo anoto. "¿Y usted señor?" Preguntó mirando al zorro.

"Yo beberé un Earl Grey con un poco de leche. Gracias." Afirmó entregándole la carta. Nuevamente lo anotó y luego habló. "En un momento se los traeré."

"Perfecto, no sé tú, pero me apetece darle una mirada a esas mesas, se ven muy apetecibles todos los alimentos que están allí. ¿Vamos?" Mencionó el vulpino ojeando las mesas para servirse.

Sus palabras hicieron que la coneja posara su vista también en todas las delicias que allí se encontraban. "Sí, por supuesto." Afirmó mientras bajaba de su silla en dirección a las mesas del bufet.

Cada uno por su lado fue observando que tomaría para comer, Judy vería una deliciosa tarta de zanahoria con chocolate, pero estaría indecisa al ver unos waffles de frambuesa con salsa de frutos rojos, al final rompiendo la costumbre de las zanahorias optó por los waffles. A todo esto Ben también tuvo varios platos de donde elegir, pero uno de todos ellos lo convenció. Así los dos con sus respectivos aperitivos volvieron a la mesa. Una vez sentados no fue mucho el tiempo para que el mapache trajera las bebidas, con delicadeza coloco las tazas, una tetera, cafetera y otros utensilios. "Buen provecho." Afirmó el mamífero para luego retirarse. Tomando la extravagante cajetera Judy se sirvió una buena taza. Ben dejaría reposar por unos minutos más. Apartando la taza acercaría el tazón de avena, dando unos bocados la coneja preguntaría. "¿Avena? Interesante."

Riendo discretamente el zorro diría. "Es porridge, sí, avena hervida con leche y agua, con una buena porción de frutos secos, me sorprendió ver esta preparación, si soy sincero no es muy común por este lado del mundo."

"Oh, ya veo, algún día lo probaré." Mencionó luego de dar un trago a su café.

El tiempo pasó y así mismo terminaron de desayunar, el clima estaba peor, la lluvia había tomado fuerza. Los dos mamíferos volvieron a la habitación del hotel para tomar algunas cosas que necesitarían, ya que el clima estaba peor el vulpino sugirió a la coneja que llevara su abrigo y también una bufanda. Además de todo eso cada uno tomó su respectiva arma y placa, ya listos descendieron hasta planta baja donde Ben con anterioridad había pedido un vehículo para el viaje. Atravesando la puerta el Valet ya tenía la puerta del auto abierto, con su pata el zorro le indicó a la mamífera que subiera, tomando la llave le agradeció al valet para luego subir y emprender la marcha hasta las oficinas centrales de la FIA.

-Casa segura; 11:45 AM-

Saliendo de la ducha el conejo se terminaría de secar su pelaje, ya totalmente seco se pondría ropa más cómoda y terminaría de hacer unas cosas hasta que sus compañeros llegaran, cosa que no debería tardar mucho. Como lo calculó, unos minutos luego arribaron los otros mamíferos, una vez en el garaje todos bajaron de la camioneta, dirigiéndose a la puerta para así ingresar. Abriéndose paso por el lugar los tres mamíferos que habían estado encerrados hasta hace unas horas se ducharían para ya estar preparados a regreso de la jefa, lo mismo haría el felino que se había teñido para evitar levantar sospechas.

Habiéndose duchado, y estando ya todos más relajados, Frank le haría unos chequeos a Dmitry para ver si el suero tenía algún efecto segundario en su sistema. Una vez en el laboratorio el zorro se dispondría a tomar una muestra de sangre. "¡Maldita sea! Maldito rojo que me dejó así, en fin, es una leve fisura así que estaré con esta muñequera unas semanas. Bien, dame una pata Dmitry sostén esto así puedo continuar." Explicó mientras le indicaba donde sujetar.

Ya teniendo la muestra de sangre colocó un poco en su microscopio y reservó lo demás para otras pruebas, sentándose comenzó a observar cambiando los diferentes lentes de aumento. "Sorprendente, todavía hay unos pequeños rastros del suero." Afirmó el mamífero sorprendido. "Quítate la camisa por favor." Ordenó al lince, algo reacio al comentario el felino se la quitaría no muy a gusto.

Con su estetoscopio escucharía el corazón del mismo, mientras lo hacía noto una herida suturada desprolijamente pero lo extraño era que el corte estaba cicatrizando muy bien y teniendo en cuenta que la herida era nueva no tenía explicación. "¿Cuándo te hiciste ese corte?" Cuestiono el vulpino ártico.

"En la fundición al caer cuando peleaba con el policía zorro ese." Indicó el lince.

"¿Wilde? Sabes que murió ¿Verdad? No importa, creo que subestimamos el poder de esta droga." Afirmaba el zorro masajeándose la barbilla. "Como ya no necesitas la sutura terrible que te hiciste, te la quitare. Grapas quirúrgicas claro que sí." Mencionó el mamífero para luego tomar el teléfono y comunicarse con su hermano.

"Jawohl?" Preguntó el zorro por el otro lado del teléfono.

"Necesito tu pulso firme para ayudarme con Dmitry." Afirmó Frank.

"Okay, voy de camino." Respondió cortando el teléfono.

Momentos luego el vulpino apareció. "Muy bien ¿Que experimentaremos hoy en nuestro sujeto de pruebas felino? Doctor." Comentó con una voz exagerada.

"Aunque me gustaría hacerle unas cuantas cosas a este loco, hoy no será la ocasión solo le quitaremos unas cuantas grapas que ya no hacen falta." Indicó Frank.

"Ya de una vez déjense de tonterías y quítenmelas de una vez que quiero comer algo y beber unos tragos." Mencionó el lince bastante molesto.

"Sabes si sigues comiendo así terminaras como ese regordete de la comisaria." Afirmó David riendo, esto no le gusto para nada al felino el cual se levantaría enérgicamente de la camilla en dirección al zorro. "Piénsalo bien Dmitry, yo no soy Wilde, si tengo que hacerlo te haré sufrir." Amenazo así el mamífero.

"¡Vete al diablo zorro idiota! Tú no eres rival para mí." Contestó el lince muy dispuesto a golpear al vulpino.

"¡Por el amor de Dios! Vayan a un cuarto o algo, parecen cachorros discutiendo, ven y siéntate así terminamos con esto ya luego discuten a ver quien la tiene más grande." Gritó el ártico haciendo un gesto con sus brazos.

Quedando el ambiente incómodo, el lince volvió de mala gana para que terminaran con el asunto de su herida. Lavándose las patas se secaría para luego colocarse unos guantes de látex ayudado de su hermano que encendió la luz para tener más claridad se preparó para comenzar. "Despacio, despacio." Afirmaba el menor de los hermanos.

"Tranquilo sabes que eh estado en peores situaciones y mírate sigues aquí vivito y coleando." Habló el zorro con una pequeña sonrisa mientras con cuidado introducía la punta del instrumental indicado, una vez en la posición correcta el mamífero apretó la pinza lentamente hasta que la grapa salió, eso provocó una leve reacción en Dmitry ya que era normal que sintiera como un pinchazo. Sucesivamente las quito todas una por una mientras la dejaba en un recipiente que luego tirarían. Dejando paso a su hermano este aplicó alcohol para terminar de limpiar y evitar futuras infecciones, también colocó una pequeño vendaje para proteger la herida. Quitándose los guantes los tiró y así dejó la sala. "Spasiba!" Gritó el zorro ártico a su hermano que ya había salido.

"Siempre es un placer ayudarte Doc." Riendo con eso último.

"Una última cosa antes de dejarte ir. ¿Todavía tienes la muestra de suero que usaste?" Preguntó el vulpino.

"No, se destrozó cuando caí en la fundición, igualmente quedaba muy poco para una dosis completa, sólo serviría como refuerzo, si no recuerdo mal como eran todas las indicaciones de esa cosa." Explicó el mamífero haciendo memoria sobre el tema.

"Supongo que tendré más complicadas las cosas. Pues bien ya terminamos nos vemos luego." Indicó Frank que daría unos pasos hasta sus instrumentos para seguir analizando los datos que tenían.

…

Unas horas después la nutria llegaría al lugar, entrando iría directo a su cuarto para cambiarse y relajarse unos minutos, ya con algo más cómodo se dejaría caer sobre su cama, los minutos pasarían hasta que se seria llamada su atención por el conejo. "Lyneth. ¿Todo bien?"

"Alex. Mi querido Alex. ¿Alguna vez pensaste que esto es lo que harías con tu vida? ¿Te imaginaste que las cosas saldrían así?" Cuestiono la mamífera perdida en sus pensamientos.

Acercándose a la cama se sentó y habló. "No creo que ninguno de nosotros habría imaginado hacer lo que hacemos, trabajar con animales de diferente mentalidad, con inicios muy distintos, haber pasado de enemigos a casi ser una familia. No, ni yo ni nadie en sus más locos sueños habría pensado algo así, pero aquí estamos justos hace años por un bien mayor. ¿Pero por qué tienes estos pensamientos?"

"No lo sé, supongo que charlar con mi tío me puso melancólica, a veces me imagino lejos de todo esto en mi tranquilo pueblo, en la panadería de mi abuelo, a veces tú estás conmigo disfrutando de nuestra compañía mutua en esa vieja cabaña de mi tío en el lago." Finalizando con un profundo suspiro.

"Lo entiendo, sería algo maravillo, tener una vida tranquila y mundana, pero también sé que esos no seriamos nosotros, nuestras vidas, lo que pasamos son lo que hoy nos hacen quienes somos, si tú o yo nos habríamos quedado en nuestros pueblos, nunca nos habríamos conocido, todo lo que logramos se disiparía. Nuestro día a día es complicado pero creo, no, estoy seguro que vale cada segundo si al final estamos juntos y arreglando este mundo poco a poco." Comentó seguro de si el mamífero girando y mirando a la nutria cariñosamente.

De un rápido movimiento la mamífera tomó al conejo para acostarlo a su lado y acurrucarse en él. "Entonces eso quiere decir que me quieres. ¿Verdad?" Cuestionó mirándolo fijamente a los ojos.

"¿Tantos años y sigues preguntándolo? Pues claro que si Lyneth." Afirmó sonriendo mientras con su pata acariciaba su mejilla.

Lo que empezó como una caricia terminaría en la pata del conejo en la nuca de la nutria, este se acercaría lentamente, ella también lo haría y allí se consumaría un amoroso beso. Allí finalizaría todo, aunque la atmosfera podía extenderse no era el lugar ni el momento adecuado, así que algunos besos juguetones después los dos mamíferos salieron del cuarto para juntarse con los demás para ya tener una charla de todo lo que ahora seguía.

Ya todos reunidos la Jefa tomó la palabra. "Bien, Frank. ¿El suero sigue siendo una opción viable?

"He llegado a la conclusión de que esta fórmula es una versión muy diferente a la que Dmitry usó, su composición es muy extraña, yo diría que única. Sinceramente no tengo muy claro el porqué de dos sustancias diferentes, por un lado tenemos el suero en sí y por el otro tenemos otra sustancia en menos cantidad. También me pareció curioso el que estén separadas cada una en un maletín. Lamento informar que no creo que sea seguro probar esto, la reacción con las muestras de sangre fue más violenta que con el anterior, además los efectos fueron más fuertes." Explicaría el zorro señalando y mostrando los contenedores.

Con su pata en su mentón la nutria contemplaba sus opciones. "Lo que sacamos del banco, ese disco, puede que allí estén nuestras respuestas de cómo funciona esta versión, hay que comunicarse con Hudson." Afirmó la misma, a sus dichos el ornitorrinco encendió el televisor para usarlo de monitor en la video-llamada, conectando la computadora el zorro alistó todo para llamar. Unos segundos pasaron hasta que la llamada fuera contestada y apareciera en pantalla una silla vacía y detrás de ella una chimenea. De pronto se escuchó un fuerte grito "¡Scott! ¡Tú de que quieres la pizza!"

"Típico." Afirmó la nutria cruzada de brazos.

"Sí, quería una pizza extra grande de anchoas y mitad brócoli… ajm… media hora, perfecto… Gracias, hasta luego." Afirmaba el zorro al otro animal del otro lado de la llamada.

"¡Hijo! Pon la mesa por favor." Ordenó el vulpino que ya se podía ver apenas en la pantalla.

"¡Hudson! ¿¡Para que contestas si estás haciendo otra cosa!?" Preguntó molesta la mamífera con su pata sobre sus ojos mientras dejaba salir aire.

"Es que soy un sociópata, que más… oh espera eso era de una serie je je je, intuyo que necesitan mis habilidades, antes que nada…" Parando en seco Hudson se agachó para encender la chimenea del lugar. La nutria colocaría una expresión de -¿¡En serio!?- "Como les decía tengo interesante información del ese disco que pidieron en el banco, está terminando de subir a nuestro servidor codificado." Terminaría por explicar para luego acercarse y sentarse en su silla.

"Hudson, la verdad nunca te entenderé ni tampoco a tus casualidades, eso es por lo que nos comunicamos contigo. ¿Encontraste algo en todo eso sobre alguna droga, suero o similar?" Preguntó Lyneth.

"Por eso soy quien soy, estimada Lyneth. Bien Ahora que lo mencionas… si, vi una carpeta muy asegurada, escondida y fuertemente encriptada, pan comido, allí había mucha información de drogas y sustancias marcadas como pruebas, proyectos fallidos y demás." A la vez que explicaba se podía ver como el mamífero tecleaba y movía el mouse de un lado a otro. "ZYK-179p estimulante reactivo de tipo inyectable. Estado exitoso en conjunto del inhibidor XY-p3b. Seguido de muchos informes y datos que ya los leerán ustedes." Afirmó el vulpino ártico volviendo su vista a la mamífera y los otros.

"¡Oh sí! Eso debe ser la clave para este nuevo suero." Aseguro Frank enérgicamente.

"Antes que me olvide, estoy trabajando en la información que extraje de la comisaria, más exacto los datos del MI6 que trajo ese zorro, visto el nivel de cierre que tiene, sé que es algo muy clasificado, lo tendré listo lo antes posible." Explicó moviéndose a su otro monitor. "Oh y también tuve que contraatacar al pequeño amigo del agente, al parecer el zorro no le gusto para nada lo que paso con ustedes y quiso saber más de lo que simulamos. Debo decir que es una ardilla con talento, mucho de hecho, pero no pudo conmigo." Comentó señalándose con sus patas.

"Perfecto no queremos que descubran la verdad." Afirmó el conejo.

"Iré a leer esos datos sobre el estimulante. Un gusto ver que estás como siempre Hud, saludos a la familia." Dicho esto el vulpino ártico se retiró.

"Creo que ya todo fue dicho. Como siempre, gracias, Hudson, por ayudarnos con todo." Agradeció la nutria. Sus compañeros harían lo mismo.

"Es un placer, mis queridos mamíferos. Hasta luego." Despidiéndose con una reverencia para así cortar la llamada.

Una vez en el laboratorio el zorro ártico usaría su computadora para ingresar al servidor y analizar lo que Hudson les había dicho, de esta manera se pondría a leer por un buen rato. El tiempo paso y el mamífero ya tenía varias teorías, revisando otros informes se encontró con algunos videos, al abrirlo se encontró con una filmación muy antigua con el color distorsionado.

Una imagen con una letra del alfabeto Héladico aparecería en el medio de la pantalla, segundos después el título del video. –Informe, en formato de video, del estudio con la droga experimental ZFL-009b- Cambiando a otra planilla con una lista a la cual le seguiría una narración de fondo, todo esto en rusky.

"Sujeto número 07. Felino, un Leopardo de las nieves. Macho. El voluntario es ex militar, su estado físico es impecable, ninguna secuela de enfermedad o/y enfrentamientos, se presentó para el proyecto Salyut 4." Así finalizaría la voz.

Ahora se podría observar a unos científicos administrando la sustancia al sujeto de prueba, un momento después auscultaron al leopardo, probaron sus reflejos y la reacción de sus ojos, viendo todo correcto le indicaron que subiera a la cinta caminadora. Ya en la misma le colocaron electrodos y una máscara para medir su respiración, hecho esto el mamífero comenzaría a caminar. Poco a poco, al comando de los doctores iría subiendo la velocidad, pasando los minutos todo se veía bien pero de repente los signos vitales de leopardo comenzarían a fluctuar, ocasionado que este se desplomara en seco, rápidamente los asistentes junto a un par de médicos fueron a su ayuda.

Unos de los doctores revisaría sus ojos encontrando un derrame en uno de ellos, además de eso sus signos seguían empeorando, de golpe el video se cortaría y se mostraría otro informe. –El sujeto de prueba sufrió un desequilibrio hormonal, falla renal, un derrame cerebral leve y desarrollo una taquicardia. Conclusión la droga ZFL-009b es inviable-

Así terminaría por salir una leyenda.

–Laboratorios Lambda-

Industrias Zegna

"Wow que revelador." Afirmaría el vulpino con sus patas en la nuca, dejando esos informes se centró en el que tenía lo que lo ayudaría con la situación actual, por curiosidad buscaría si existía información en video o audio de esta investigación satisfactoria. Encontraría una grabación de audio, rápidamente la reproduciría. "Se puede apreciar como el sujeto 47 reaccionó remarcablemente bien a la ZYK-179p pero para nuestra desgracia el deterioro ha comenzado, pudimos ver nuevamente un desbalance hormonal que desencadenaría serios problemas con los funciones vitales de sujeto, estos son similares al usar cantidades diferentes como pudimos comprobar con el sujeto 42, 44 y 49 con diferencia de la rapidez del deterioro, por motivos que desconocemos a menor cantidad más rápido ocurre la falla total de órganos. Seguiremos con los esfuerzos para solucionar estos problemas." Así finalizaría la grabación.

El mamífero observo que había otra así que también la escucharía. "Hoy hicimos un gran descubrimiento, leyendo viejas anotaciones de mi antiguo compañero encontré lo que podría ser nuestra solución. La fórmula original partía de la raíz de una extraña planta, esta era usada por los habitantes del lugar con objetivos medicinales, el problema con esta raíz era que si no se sabía manipular y administrar la cantidad justa los resultados eran catastróficos, para desgracia de su compañero su ingesta fue mortal, pero entre pocos casos se recuperó y volvió a los laboratorios. Reservado como era comenzó a investigar a fondo esa raíz y allí fue cuando logró hacer una de las primeras versiones del suero estimulante, las primeras pruebas fracasaron y con el tiempo descartó la raíz. Pero eso fue lo que creímos en privado él continuó sus estudios de esa raíz y logró triunfar. Lamentablemente las cosas no salieron bien para él y tampoco para mí. Con su muerte perdimos esa información, todo estaba perdido, o eso pensé hasta que muchos años después pude descifrar el código de sus anotaciones y descubrí que la clave era un inhibidor que se obtenía llevando a cabo la extracción de unas proteínas de un sujeto en par….ti…" La grabación terminaría abruptamente.

El zorro quedaría muy impactado por los dichos del científico, siguió buscando más información sobre esto pero no había mucha más solo algunas notas inútiles y el proceso de la administración de dichas sustancias. Con toda esta información Frank tomaría una muestra de sangre para hacer algunas pruebas con el estimulante y su inhibidor, siguiendo la lógica que ahora conocía preparó varias pruebas con las medidas correctas, con otra mal y variando el uso del inhibidor.

-Oficinas centrales de la FIA; 9:25 AM-

Llegando, pararía el sedán enfrente de la casilla del guardia. "Buenos días, permítame sus papeles por favor." Ordenaría el coyote al zorro.

Entregándole su placa y un telegrama el vulpino habló. "Buen día, soy el agente Benedict Hunter del MI6, ella es la agente de policía Judy Hopps, tenemos una cita con el agente Ethan Fleishmammal."

"Un momento por favor." Diría el mamífero mientras usaba su computadora. "Todo en orden señor, pueden pasar." Afirmaría el guardia entregándole su placa, acto seguido abriría la reja para dejarlos pasar.

Arrancando manejaría hasta la entrada principal, girando aparcaría en la zona indicada a unos metros de la entrada, apagando el auto tomaría el paraguas del asiento trasero para así salir, abriendo el mismo a paso veloz llegaría al lado del pasajero para abrirle la puerta a la coneja que estaba terminado se arreglarse la bufanda. Ofreciéndole su pata, el zorro la ayudaría a bajar. "Estabas en lo correcto, que bien que traje abrigo." Comentó la mamífera frotándose las patas.

"No podías esperar menos de New Wolfgton, tiene más precipitaciones que Furden, y eso que llueve en esa ciudad." Diría el mamífero con un toque de humor.

Caminando hasta la entrada el vulpino cerraría y sacudiría el paraguas para luego ingresar por la puerta giratoria, así mismo los dos caminarían hasta la zona de ingreso. Estos serían saludados por una asistente que los guiaría hasta un detector de metales junto a un escáner magnético. "Por favor todos los objetos metálicos que tenga colóquenlo en ese recipiente sus armas también." Indicaría la mamífera.

A esto primero lo haría la coneja, su reloj, placa y arma los colocaría en el recipiente, luego pasaría por el detector de metales, también se quitaría la bufanda para ser escaneada con un detector portátil. Terminando esto tomaría sus cosas siguiendo el camino un mamífero le pediría su placa e identificación, a su vez le indicaría que colocara su palma en un escáner y mirara a la cámara. Todo esto listo le entregarían un gafete que indicaba que era una visitante en las instalaciones. Lo mismo sucedería con el zorro, pasando todo correctamente se acercaría a Judy para continuar con su camino. Ya más adentrados en el lugar se les acercaría un jaguar con una cicatriz de un zarpazo en el cuello. "El agente Benedict Hunter. Ha pasado un tiempo. Ese traje te queda muy bien." Afirmó el felino moviendo su pata de forma indicativa. "Oh ¿Y quién es la dama? ¿Tu nueva compañera? Un zorro y una coneja, quien lo diría. Un gusto conocerla." Saludaría estirando su pata amistosamente.

Riendo discretamente la coneja respondería al saludo y corregiría al mamífero. "De hecho soy la agente Judy Hopps, policía de Zootopia, estoy trabajando con Ben en un caso."

"¡Si claro! ¿Cómo pude no recordarte? Tú saliste en las noticias, ese gran caso con la vice alcaldesa y todo eso, hilarante. Yo no lo podía creer cuando nos lo comunicaron y además cayó Ramses, wow admirable trabajo. Te tengo algo de envidia. ¿Sabes?" Diría algo sobresaltado haciendo varios movimientos con sus brazos y patas. "Oh disculpen soy como un cachorro con esas cosas."

"Sí, ni lo menciones Ethan." Comentaría seriamente el vulpino, esto haría que tanto Judy como el jaguar quedaran sorprendidos pero eso no duraría mucho.

"Si, me tienes, caí totalmente, tantos años y sigo creyéndote." Mencionaría el felino exagerando un poco. "En fin, vayamos a lo que vinieron, por aquí." Indicaría moviendo su pata en dirección al camino. "Con el poco tiempo que teníamos tuvimos que correr con algunas cosas, pero lo conseguimos firmar por los de arriba, también con lo que tu solicitaste me sorprende que hayamos logrado aprobarlo, ahora en el viaje les daré más detalles."

"¿Viaje?" Preguntaría desconcertada la coneja.

"Claro. ¿Crees que traeríamos a ese tipo aquí? Ni en un millón de años, ya es riesgoso hacer lo que él quiere." Afirmaría el mamífero negando con la cabeza.

"Recuerda Judy tu misma lo dijiste -será complicado está en una prisión de máxima seguridad.- Esto fue lo fácil ahora entramos al juego." Explicaría Ben. La coneja entendería que esto era mucho más complejo de lo que ella pensaba, la FIA iba muy en serio.

Llegando a un ascensor el jaguar les indicó que ingresaran primero para que luego entrar este. Ya en el interior con su identificación activaría el panel para apretar el botón del piso al que irían. "¿Subimos?" Preguntó curiosa la mamífera.

"Sí, agente Hopps, subimos." Diría el felino con una sonrisa.

Unos segundos pasaron y la puerta se abrió lo que permitió ver un gran helicóptero posado sobre una plataforma, allí la coneja entendió el por qué subían y no bajaron al subsuelo, irían volando, no conduciendo. "Por aquí." Indicaría Ethan ya afuera del ascensor en un pequeño espacio que salía a la azotea. Siguiéndolo abrieron sus paraguas para salir y llegar hasta las escaleras de la plataforma, enfrente de la aeronave el jaguar abriría la puerta para Judy, a la vez que esto pasaba el piloto comenzaría el procedimiento de arrancado. Ya los tres a bordo, el zorro le indicó a Judy que se pusiera los auriculares ajustables del helicóptero, asintiendo la misma lo hizo. "Bien, no querrás estar sin uno de estos con una pieza de maquinaria sobre tu cabeza, y más con tu capacidad auditiva." Hablaría Ben por los auriculares.

"¿Estas insinuado que mis orejas son muy grandes?" Se molestaría así la mamífera.

"¿Hablas en serio? No fue mi intención que quede claro." Afirmaría el vulpino algo incómodo.

"Por favor soy una coneja es natural que sean de este tamaño." Comentaría la coneja riendo.

Todo listo el mamífero que pilotaba hablaría por los auriculares. "Todo listo para partir."

"Aquí Murciélago 4 listo para despegar." Indicaría el zorro volador al centro de mando.

"Permiso concedido murciélago 4, tenga un buen viaje y cuidado con los vientos del sur." Respondería el centro de mando por radio. Escuchando esto comenzaría a subir la aeronave para luego tomar dirección al lugar.

"Ahora, sé que tu Benedict tienes, déjamelo remarcarlo, el acceso de seguridad más alto de lo que me podría imaginar, vaya saber que sabes vulpino, así que sé que conoces todos los detalles de Ramses, pero tú, Judy… ¿Te puedo llamar así?" Preguntaría observando a la coneja, asintiendo como respuesta el felino continuaría. "Bien, no estoy al tanto de cuanto sabes del ovino, supongo que tendrás un acceso limitado dado tu puesto como oficial, pero dado que estas en este helicóptero, trabajando con un agente del MI6 en algo grande y vestida para la ocasión, estoy seguro que mi suposición es errónea y has obtenido un nivel superior de seguridad. Así que dime. ¿Estoy bien?" Indagaría Ethan.

"Al entrar al caso obtuve el nivel 3 de seguridad." Explicó la coneja.

"Así que nivel 3. ¿En que están trabajando ustedes dos eh? No espera, no quiero saberlo ya tengo muchas cosas de que preocuparme, cuando sea el momento indicado lo revisaré." Afirmó el jaguar negando con sus patas y cabeza.

"Haces bien Ethan este caso es estresante." Mencionaría el zorro masajeando su sien.

"Entonces mejor así, volvamos con lo estábamos. Ramses es un caso complejo como dije antes, su captura fue algo muy importante para seguridad nacional, el maldito era un fantasma diciéndolo de alguna forma, como sabrás es un tirador experto pero eso no es nada, el sujeto en cuestión tiene sobre su cabeza muchos asesinatos y muchas otras porquerías que es mejor dejarlas como porquería, no querrás saber los detalles. El punto es que él trabajaba como asesino a sueldo, no un simple mercenario o matón, el mamífero era todo un profesional, varias identidades falsas, muchas cuentas con cantidades jugosas de dinero, contactos espléndidos por todo el mundo, impresionante. Tu trabajo con ese civil fue fabuloso, como diste con él, no entiendo cómo se descuidó así. ¿Qué carajos pensaba cuando le compró esas flores a un inútil como Weaselton? No me mal interpreten gracias al cielo por esa idiota comadreja, pero wow es algo impensable." Finalizaría bastante fuera de sí explicando esto.

"Bueno gracias, si la verdad que Ni… Nick me… ayudó mucho." Comentaría Judy conteniendo sus lágrimas.

"Hey, tranquila. ¿Dije algo inapropiado? ¿Estás bien? Toma, toma usa esto." Diría preocupado el felino.

"Es algo delicado… Nick, el civil, decidió formar parte de la fuerza policial y al venir a la ciudad yo solicite trabajar con ambos. Las cosas se salieron de control y por motivos fuera de nuestro control el agente Wilde falleció cumpliendo con su deber." Explicó el zorro delicadamente.

"¡Oh Mierda!" Tapándose rápidamente la boca. "Lo siento, lo siento yo y mi bocota. Lamento mucho escuchar eso, no tenía idea de lo que pasó, mis más sinceras condolencias, me imagino lo que debe ser para ustedes y yo comportándome como un cómico, espero sepan disculparme." Así se disculparía Ethan.

"Gracias, no te hagas problema, no tenías por qué saber lo que pasó." Afirmó Judy secándose algunas lágrimas, luego le entregaría el pañuelo al mamífero, el cual se reusaría a tomarlo e insistiría que se lo quedara. "A este paso tendré demasiados pañuelos, deberé darle más uso aunque será fácil dado mi propensa costumbre a llorar." Terminaría sonriendo forzándolo un poco.

"Muy bien, como te decía, Ramses es todo un caso, toma aquí encontraras más detalles." Se estiraría para entregarle unos cuantos archivos.

"Tenemos viaje por delante así que puedes leer tranquila." Diría el vulpino tronándose los dedos y estirándose un poco.

…

-Carcerem Finitum; 10:40 AM-

Sobrevolando el lugar el piloto se comunicaría con tierra. "Aquí Murciélago 4, código de autorización XXW3599QS4, solicitando permiso para aterrizar."

"Verificando código… Permiso concedido Murciélago 4, diríjase a la plataforma 2." Indicaría seguridad aérea de la prisión.

"Bienvenidos a nuestra prisión de máxima seguridad Carcerem Finitum." Afirmaría el jaguar señalando con su pata.

"Interesante." Diría el zorro observando por la ventanilla.

"Extraño nombre la verdad." Comentaría Judy también observando.

"Si, me han dicho su significado alguna veces pero nunca le di mucho interés, muchas cosas en la cabeza.

"Creo que es latilium, siempre usan frases en ese idioma." Se aventuró a decir la coneja.

"Ignorantia legis neminem excusat. Creo que así se decía. El desconocimiento de la ley no excusa a nadie o eso me dijo un viejo amigo." Recitaría el vulpino haciendo memoria.

"¿Hay algo que no puedas hacer zorro maravilla?" Mencionaría el felino sarcásticamente.

"De hecho, una vez intente huir de una patrulla en la vieja camioneta de mi abuelo, solo diré que el resultado fue muy malo, realmente malo." Así contaría esa anécdota el mamífero.

"Espera ¿Qué?" Preguntaría extrañada la coneja.

"Aunque te parezca difícil creerlo, no siempre fui un mamífero respetuoso de la ley, es más yo diría que absolutamente lo contrario. Me gustaban los problemas, pero problemas con letras mayúsculas. Algún día si te interesa podría contarte uno que otro, te aseguro que con eso verás mi imagen completa." Indicaría Ben con un gesto curioso.

"Puedo asegurar que debe ser una anécdota muy interesante, siempre cuentas muy buenas historias Benedict." Afirmaría el jaguar.

"Entonces esperaré ansiosa." Diría Judy mirando al zorro.

Maniobrando, el pteropus llevaría el helicóptero hasta la zona indicada para finalizar aterrizando, una vez que tocó tierra, un mamífero se acercaría a abrir la puerta del mismo para recibir a los pasajeros, abriendo su paraguas tomaría la pata de la coneja, a esta le seguirían el zorro y el jaguar. Caminado guiados por el oso polar llegarían hasta la entrada. "Gracias Butler, yo seguiré desde aquí." Ordenaría Ethan al mamífero. "Sigamos por aquí." Tomando su identificación la pasaría por un escáner para abrir una puerta, entrando por la misma los dos mamíferos harían lo mismo. "Bien aquí pueden dejar sus objetos personales, es procedimiento estándar, tenemos muchas medidas de seguridad, así que armas, llaves, billetera y cualquier objeto que pude ser usado para dañar tendrá que quedarse aquí." Afirmaría el felino.

A estos dichos la coneja se sacaría su abrigo para colgarlo en un perchero que allí se encontraba, también tomaría su arma y billetera ya que no tenía nada más que fuera riesgoso. A su vez el zorro haría lo mismo, aunque le tenía más cosas que guardar, todo guardado el jaguar hablaría. "Bien ahora deberán firmar estos documentos, pueden leerlo, son varias advertencias y cláusulas de responsabilidad."

"Más procedimiento estándar, magnífico." Comentaría sarcásticamente Ben con una sonrisa.

Acercándose daría una leída a los documentos y los firmaría, siguiendo sus pasos la coneja haría lo mismo, nunca había tenido una situación así pero en sus años que soñaba con ser policía leyó mucho sobre tantas cosas y en ellas había referencia a este tipo de documentos. Ya todo firmado le entregaron los papeles al jaguar, que los archivaría. "Perfecto, ya todo está listo, sigamos nuestro camino entonces." Diría el felino.

Tomando la delantera se abriría paso por el lugar hasta llegar a la otra puerta, como siempre con su identificación la abrió, pasando todos darían unos pasos hasta el ascensor, una vez los tres en el mismo, el mamífero apoyaría su pata sobre un escáner, unos segundos después una voz se escucharía. "Acceso concedido." Finalizado el mensaje la puerta se cerraría y comenzaría a descender.

"Con máxima seguridad me imaginaba mucha seguridad pero esto es mucho más de lo que pensé." Comentaría la mamífera asombrara.

"Si Judy, en estas instalaciones tenemos a mamíferos muy peligrosos, no podemos permitirnos que pase nada, sería catastrófico." Explicaría Ethan seriamente.

Llegando a destino el ascensor frenaría y se abriría la puerta. "Nivel sub F alcanzado." Informaría una voz mecanizada.

Siguiendo su camino llegaron hasta una doble puerta, donde al abrirse una la otra se cerraba, pasando ese acceso entraron a un cuarto donde el jaguar le entregaría un maletín. "Espero que estés seguro de esto."

"Siempre." Respondería el zorro sonriendo seguro de sí. Tomando el maletín caminaría junto a la coneja hasta la última puerta, donde del otro lado los esperaría su objetivo.

El sonido de las trabas se escucharían, para que luego la gran puerta de acero se deslizara por sus guías y terminara dando paso a los dos mamíferos. "Ramses. ¿O prefieres Lombrad? Tal vez. ¿Silvestri?¿O Jakov mejor?" Preguntaría sarcásticamente Ben. "¿Tú qué opinas detective?" Refiriéndose a la mamífera.

"Silvestri me agrada." Mencionaría Judy irónicamente.

"Mi colega mencionó algo que necesito preguntarte, que tampoco me termina de quedar claro. ¿Por qué bajaste tus criterios? Con tantas opciones decidiste trabajar para una oveja bastante desequilibrada. ¿Cuánto te pagaba? Debería ser mucho… O pasó otra cosa… No me digas que la blanca y esponjosa mamífera te ofreció algo más que simples billetes, o no se rebajó tanto para ti sino que tú lo hiciste sólo por amor…" Preguntaría provocando al ovino.

"Vete a la mierda maldito bastardo." Respondería Doug algo enojado.

"¡Oh! Qué bien, ya creía que te habías quedado sordo o mudo." Comentaría el zorro exagerando su reacción.

"Tal vez sacaría beneficio de otra forma." Supondría Judy.

"Válida teoría. Así no obtendremos nada, así que recurriré a una de mis técnicas favoritas." Afirmaría el vulpino para luego quitarse el saco para dejarlo sobre una silla y así poder arremangarse las mangas de su camisa. Abriendo en maletín, tomaría unos objetos para luego hablar. "Que empiece la diversión." Terminado con una risa cínica.

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-Residencia Wilde; 7:30 PM-

Tomando una taza de té, la vulpina se encontraba sentada en un sofá, dando un sorbo seria interrumpida por el sonido del teléfono. Dejando la taza contestaría. "¿Diga?"

"¿Señora Wilde?" Preguntaría la voz del otro lado del teléfono.

"Si, ella habla." Afirmaría la mamífera

"Nos comunicamos del directorio legal del hospital central Fleming, tenemos un asunto delicado del cual hablar." Explicaría la abogada.

"¿Directorio legal? ¿Hay algún problema el seguro? Mire mi hijo tenía la cobertura policiaca, yo no sé los detalles sobre eso." Mencionaría confundida.

"No, no es nada de eso, es sobre su hijo… lo mejor será que venga para poder aclarar todo." Respondería la mamífera del directorio.

"¿Mi Nicholas? ¿Cómo? ¿Qué paso? ¿No me lo puede decir por teléfono?" Cuestionaría nerviosa la madre del zorro.

"No creo que sea un tema para discutir telefónicamente, así que le repito debe venir al hospital para tratar con esto." Indicaría nuevamente la abogada.

"No lo comprendo. ¿No pude decirme que está pasando? ¡Es mi hijo maldita sea!" Gritaría molesta la vulpina.

"Por favor tranquilícese señora Wilde, entiendo que…" Siendo interrumpida por Kaitlyn.

"¡No! ¡Usted no entiende nada! ¡Ahora dígame qué carajo está pasando!" Ordenaría furiosa.

"Señora Wilde por favor…" Nuevamente seria interrumpida.

"¿¡Sabe que!? Espero tenga una buena explicación por que ya mismo voy en camino y pienso obtener respuestas." Afirmaría furiosa cortando el teléfono fuertemente.

"¿¡Kaitlyn!? ¿Qué está pasando? ¿Quién era? ¿Por qué tantos gritos?" Preguntaría confundido el fennec.

"¡No lo sé! ¡No lo sé!" Respondería gritando para luego quebrarse y dejarse caer sobre el sofá. "No lo sé…" Repetiría llorando, viendo esto el pequeño zorro se acercaría rápidamente para intentar calmarla, una vez a su lado la zorra de aferraría a él y sollozaría. "Dijeron algo sobre Nick, pe… pe… pero no me querían explicar más… mi niño mi pobre Nicholas" Al decir esa última frase sus llantos empeorarían y el dolor llenaría toda la casa.

RenBellatrix Si, esa es la idea dejar esa intriga para hacerlos pensar mas. Y Nick, Nick se murió y hubo problemas. Lo lograron si, se escaparan y esta bien no odiarlos los malos son lo mejore jua jua jua.

si Benedict es una caja de sorpresas, me gusto mostrar sus diferentes facetas para luego mostrar ir mostrando cada vez mas y dejar verlo mas completo.

Pues aquí está el cap jeje

Feliz 2018 para ti también