Notas del autor: ¡Que tal! Si, eh vuelto, o más bien, otro capítulo más, si, ha tomado mucho tiempo, pero la verdad la facultad cada vez me exige más, si temieron que ya no escribiría, no teman, solo, bueno, estoy bastante ocupado, pero escribo entre ratos, así que de que habrá capítulos habrá


Capitulo 43


Ya pasaron un par de días desde que nos instalamos en nuestro nuevo hogar.

Luego de aquel anuncio que me dieron en la corporación, tuvimos que cambiar de morada… y vaya que cambio, Valeria me contacto al día siguiente; me conoce bien; sabía que aún seguía en shock por el hecho de que me haya regalado una casa entera… aun sigo en shock, pero ya lo eh asimilado mejor. Ella simplemente me expreso que quería guardar aquello como un regalo hasta mi cumpleaños que es en una semana.

Pero con la situación actual no podía guardarlo, y más aún que necesitaba de un cambio de morada inmediato.

Aun así, le agradecí desde lo más profundo de mi ser… ella cree que no me ha ayudado suficiente, pero aun cuando solo fuese como en los viejos tiempos, de salir a comer, cenar, o pasar el tiempo en casa, ella me ha ayudado como ninguna otra persona.

Pero ya con este par de días que han pasado, eh terminado de asimilar todo, y eh terminado de aceptar esto que mi familia me ha entregado, ahora mismo, le reportamos a Smith lo ocurrido, además de eso le ha informado al doctor encargado de Amanda del cambio de morada.

Esta vez el visitaría nuestro hogar debido a la situación actual:

-Muy bien Dufort-san, García-san ¿Puede acompañarnos? -pregunto el doctor mientras él tomaba asiento en un sillón frente a Amanda, yo iba a esperar a un lado de pie

-Claro, si de algo sirve -dije asintiendo, caminando hasta un lado de Amanda y ella sonriéndome, para luego tomar mi mano

-Según la agente Smith has mejorado bastante, aunque claro, eso fue hace algunas semanas ¿Has seguido puntual la medicación? -cuestiono tomando una pequeña libreta de su bata blanca

-Bueno… a-ha habido días que eh omitido una o dos pastillas, especialmente a la hora del a cena ¡Pero casi todos los días las eh tomado!

El entonces tomo las cajas que nos habían entregado hace ya un tiempo, cada tableta con pastillas tiene en el lado donde se sacan marcado cada día con diferentes colores, debe ser una manera para ayudar a que recuerden que días han tomado:

-Por lo visto has llegado a omitir el tratamiento un par de días -dijo anotándolo en su libreta, con un tono algo bajo

Amanda bajo sus orejas, yo solo la traje conmigo y le sonreí, ella entonces esbozo ligeramente su sonrisa:

-García-san -me llamo- Supongo que ha ayudado a su huésped en esto

-Si doctor -asentí- al principio le recordé puntual cada hora que debía tomar su medicación, pero a partir de la primer semana que tomo cada pastilla a sus horas pocas eran las veces que debía recordárselo, note como recordaba casi exactamente las horas de su medicación

-Ya veo, eso es alentador -dijo el doctor escribiendo en su libreto- Eso es una prueba a corto plazo, pero, demuestra que el medicamento está haciendo su trabajo ¿Has notado algún efecto secundario, Dufort-san?

-Para nada, lo único que eh notado es la mejoría en cuanto a mi memoria -dijo ahí sonriendo

-Muy bien, es bueno saber eso -dijo entonces escribiendo devuelta en la libreta- ¿Cuál es el rango lo que puedes recordar? ¿Puedes decirme que es lo que hiciste la semana pasada?

-Bueno -ella entonces llevo su mano a su barbilla, mirando al suelo- recuerdo… ¡Oh! ¡Mis padres me visitaron! -dijo con una sonrisa alzando sus orejas- Y también el mejor día de mi vida -ahí entonces ella me abrazo- cuando Robie se me declaro

Yo solo pude dejar escapar una pequeña carcajada y sonrojarme ligeramente, el doctor sonrió y escribió en la libreta:

-Me alegra que puedas recordar cada vez más Dufort-san, y más aún por tener a tan buena pareja, créame, García-san, pocos ayudan con esta clase de tratamientos a sus seres queridos, mucho menos aquellos como usted que era su anfitrión y eran prácticamente desconocidos, parece que la agente Smith hizo una buena decisión

-Tengo buen ojo -dijo Smith con una sonrisa desde el marco de la entrada a la sala de estar, con una taza con café- por cierto, felicidades a ambos

Yo solo sonreí asintiendo, mientras Amanda simplemente esbozo una gran sonrisa sin soltarme.

Luego de un par de preguntas más, el doctor nos dejó el suministro de dos meses del medicamento de Amanda, debido a la situación con ese grupo de trata de blancas reducirán sus visitas, aunque el próximo monitoreo será en línea, las medicinas serán las mismas, siendo igual, que debe tomar tres al día:

-¡Muchas gracias, agente Smith! ¡Hasta luego doctor Naoki! ¡Que tengan un buen día! -se despedía animosamente Amanda

-Hasta luego Amanda -se despidió Smith- por cierto, Roberto, estaremos atentos a cualquier llamado, solo necesitas contactarme

-Anotado, Smith -dije asintiendo

Luego de ello entramos de nuevo a nuestra casa, tome las cajas de las pastillas que habíamos dejado en la mesa de centro de la sala y me dirigí a la cocina, las deje sobre la barra central; una barra algo más larga que la del apartamento, que divide la cocina del comedor, es una manera de tener espacios extra sin invadir la mesa principal del comedor; ahí acomode las cajas:

-Bueno… me alegra que el doctor piense que eh mejorado -dijo tomando asiento en uno de los banquillos de la barra, yo me dirigí al refrigerador para sacar un postre- Aunque tengo que admitir que no hubiese avanzado tanto sin tu ayuda

-Solo hice lo que tenía que hacer, querida -dije sonriéndole por sobre la puerta del refrigerador, sacando de este un par de botes con helado, además de una bolsa de chocolates- aunque estamos algo cortos de suministros…

No me gusta la idea de salir, pero tenemos que hacer la compra, con lo que hay nos alcanza para dos días:

-No hay mucha comida, tendré que ir a hacer la compra más tarde

-¡Yo te acompaño! -exclamo Amanda con una sonrisa

-Querida… prefiero que te quedes, no quiero que te arriesgues

-¡Ni yo quiero que te dañen! -ella alzo la voz además de ponerse de pie, fue un movimiento abrupto, algo que no esperaba- yo… estaba pensando en lo que me dijiste en la noche, sobre el miedo… no dejare que eso me controle, que me vuelva paranoica… n-no como cuando dude de ti semanas atrás -dijo bajando su cabeza pero entonces alzándola con una mirada atrevida… un semblante serio pero de valentía- tomare las precauciones, aunque tenga que cubrir mi rostro y caminar de manera disimulada, pero no quiero que corras riesgos por mí, al menos no solo

La miré asombrado… pero alegre, nunca pensé ver un lado así de Amanda, sí que es una caja de sorpresas:

-Eres alguien valiente -dije sonriendo, caminando hacia ella para mirarla directo a sus ojos, teniendo que alzar la vista pues ella de pronto adquirió una postura firme, como hacemos los militares ante un oficial- bueno querida, tomaremos las precauciones necesarias para salir -dije sonriéndole- pero cuando volvamos y acomodemos todo empezaremos con una nueva rutina, te enseñare gran parte de lo que se en defensa personal, quiero protegerte dentro de todas mis posibilidades, y una de ella es enseñarte a cómo reaccionar y moverte en una pelea

-¿Enserio? ¿¡De verdad?! -dijo sorprendida, rompiendo su postura firme, pero mostrándose emocionada

-¡Claro que sí! ¡Pero no seré un maestro gentil! -dije tomando una postura firme, tomando este rol del líder estricto- quizás para una minotauro como tú la rutina no será tan intensa, pero en términos de humanos, alguien como yo se vería agotado

-¡Estoy lista! -dijo volviendo a su postura militar, ahí entonces reímos y ella me miro con su gran sonrisa- En la comuna de Francia entrene el combate Minos, pero una tradición es enseñarnos un poco de la teoría del combate cuerpo a cuerpo ¡Así que tengo una idea!... o e-eso creo, si es que puedo recordar algo de ello

-No te preocupes, no empezare contigo como si fueses una combatiente experimentada -dije sonriéndole- empezaremos por lo básico y algunos trucos y consejos que solo descubres en peleas, pero eso será más tarde, por ahora disfrutemos del postre

-¡Me encantaría! -exclamo eso cuando me gire y la sentí como se dejaba caer contra mi espalda, pasando sus brazos por mi cuello, abrazándome

Yo solo pude reír mientras pasaba mi mano por sobre las de ella, caminamos así hasta la cocina, e incluso no me soltaba cuando estaba tomando algunas copas de cristal y cucharas:

-¿Ocurre algo?

-Nada -dijo de pronto moviéndose, pero sin soltarme, pegando su cabeza contra la mía- solo me gusta abrazarte

Yo solo reí mientras preparaba dos copas con helado de banana, un toque de helado de vainilla y chocolate derretido, mientras hacia las mezclas tome una cuchara y con esa manche los labios de Amanda, y ella en vez de lamer el chocolate beso mi mejilla:

-Esto es un dulce beso -dijo mientras seguía abrazándome

Es adorable… demasiado.

Yo solo pude sonreír mientras sentía como mi cara aumentaba de calor… debo estar rojo como un tomate:

-Ten, para ti -dije pasándole la copa, ella simplemente la tomo con las manos que mantenía frente a mi sobre mi pecho, pues seguía abrazándome

Ahí entonces ella tomo su cuchara y tomo parte del helado con esta:

-Abre grande Robie -dijo manteniendo este abrazo, ella simplemente es adorable

Abrí la boca y probé el bocado de helado que ella me dio, fue entonces que hice lo mismo con mi helado, tomando una cucharada y llevándola a su boca, a lo que ella tomo el bocado con una sonrisa, y fue entonces que seguimos comiendo del helado del otro, pero dándonos esos bocados entre nosotros.

Podría parecer algo banal, pero incluso estos momentos Amanda los vuelve tan cálidos, aun cuando estamos de pie, ella sigue abrazándome desde atrás, aceptando el helado y dejando salir estos sonidos de alegría, compartiendo nuestro calor y hasta cierto punto sintiendo el corazón del uno y del otro:

-Oh… ya es la última cucharada -dijo tomando lo último que quedaba del helado en su copa- ¡Vamos, al mismo tiempo!

-Muy bien querida, abre grande -dije dejando la taza vacía y levantando la cuchara

Para eso Amanda rompió el abrazo, pero aun estando detrás de mí, ahí entonces nos dimos ese último bocado al mismo tiempo, fue entonces que nos miramos con grandes sonrisas, pero, así como ella me demostró su ternura y calidez, decidí de mostrar algo más apasionado.

Ahí la tome de su barbilla con delicadeza y entonces nos unimos en un beso, la tome por sorpresa por su reacción y el pequeño sonido que hizo de sorpresa, pero entonces la atraje para conmigo, colocando mi mano en su cintura para entonces con lentitud y delicadeza unirnos en un beso algo más apasionado, pronto mi lengua invadió momentáneamente su boca, luego de eso rompí el beso.

Amanda aun tenía sus ojos cerrados, pero cuando rompimos el beso ella los abrió lentamente pero pronto comenzó a parpadear varias veces, y luego enrojeció:

-R-Robie -dijo desviando al mirada, como si tratara de ocultar su sonrojo bastante notorio

-¿Acaso no te gusto? -pregunte con una sonrisa

-M-Me encanto, s-solo me tomaste por sorpresa

-Un ataque sorpresa siempre es más efectivo -dije sonriéndole, guiñándole- vamos, hay que cambiarnos

Ella me siguió tomando mi mano, pronto ambos subimos las escaleras entrando a nuestra recamara, Amanda tomo su tiempo para encontrar un cambio de ropa, mientras que yo encontré algo rápido, un pantalón de mezclilla oscuro, una camisa gris y un chaleco de cuero marrón, más aparte una gorra de tela gris y lentes oscuros, debemos tomar toda medida necesaria.

Entrando al baño comencé a retirarme la ropa, empezando por la camisa, pero justo cuando me la había quitado por completo escuche como Amanda empujaba la puerta:

-¡Robie! ¡P-Perdón! ¡M-Me distraje y-¡ P-perdona -me había girado sin la camisa puesta y solo pude ver a Amanda completamente roja, pronto cerrando al puerta

-N-No te preocupes querida, solo asegúrate de tocar

-S-Si, d-disculpa de nuevo -la escuche de nuevo tras la puerta

Debe estar algo distraída, y pensar que tenemos que salir con ropas que cubran lo suficiente, por no decir cualquier cosa que nos cubra los rostros o sea difícil que nos identifiquen con una foto.

No me tome mucho tiempo para cambiarme y pronto salir del baño con el cambio, Amanda esperaba a un lado de la puerta, ella solo me regalo su sonrisa pero notaba como aun parecía estar sonrojada, espere fuera por un par de minutos, ese tiempo lo tome para buscar en el GPS algún mercado cercano; se nota la diferencia; mientras en ese otro distrito abundaban los supermercados y habían varios a pocas cuadras, aquí son varias zonas residenciales, pero me tope con un mercado cercano, más hacia abajo, pero parece ser uno grande de varios locales:

-¡Listo Robie! -escuche a Amanda saliendo del baño, luciendo de un hermoso vestido

Es un vestido de una pieza de un tono gris con bordes negros al igual que los botones, el cuello en vez de centrado esta digamos que, hacia la izquierda, siguiendo la línea de los botones negros, demostrando ser de una tela algo más gruesa; ya está empezando a refrescar, y en Japón la temporada de invierno es bastante más fría que en México; además, el vestido se termina de ajustar a su cintura con un cinturón de los mismos tonos:

-¿Qué te parece? Lo trajo mi madre aquel día que nos visitaron

-Luces espectacular -dije sonriéndole, cualquier prenda la hace ver hermosa

Ella simplemente sonrió y entonces tomo un sombrero de ala ancha de tono gris y con un listón negro, más lentes oscuros:

-¿Esto servirá? Ya sabes… lo que dices de salir algo más discretos

-Si, eso será útil; no te preocupes Amanda -camine hasta ella para tomar su mano- me asegurare que esto sea solo cosa de unos días, atrapare a esos desgraciados y podremos salir sin temer a nada ni nadie

-Ahora mismo no temo a nada, porque estoy contigo -dijo sonriéndome- además, sé que así lo harás Robie, eres un héroe, y son ellos los que atrapan a los criminales

-Y eso hare querida, te lo juro -dije sonriéndole

Ahí compartimos un dulce beso; y antes de salir tome mi billetera; y no tomamos más tiempo para empezar nuestra caminata hacia el mercado, Amanda simplemente paso su brazo derecho entre mi brazo izquierdo, caminando así unidos, es simplemente fabuloso.

Caminamos por un par de cuadras, cerciorándome de cruzar por calles que no fuesen una principal, entre manzanas y algunos callejones; esto inclusive me ayudo a identificar tiendas más pequeñas y algunas de conveniencia.

Luego de cruzar un par de cuadras llegamos finalmente hasta el mercado, ya había algunas personas visitando puestos y haciendo su compra, nosotros no tardamos en acercarnos a uno de los primeros puestos de verduras y frutas, ahí fue que Amanda comenzó con ese riguroso proceso de aceptación de frutas y verduras.

Es simplemente adorable, me encanta verla oliendo alguna verdura, apretarla y olerla, ver como arquea su cola hacia su espalda significando que es mala, o dejando su cola suelta al aire más su linda sonrisa que significa que es una buena elección:

-¿Me compartirías tus trucos? -pregunte con una sonrisa

-¡Oh! ¡Claro! Es solo que en Francia mi madre me enseñó a escoger buenas frutas y verduras -dijo sonriendo- ella me enseñó a que esa parte es esencial para cocinar y comer bien, un solo tomate en mal estado podría echar a perder una salsa hecha con docenas de ellos

-Eso sería una desgracia, déjame ver como lo haces -dije acercándomele

Ella entonces me enseñó a como darme cuenta de que las diversas verduras son buenas o malas, sea por textura, color y aroma, pasando de verduras a frutas, pronto el encargado del puesto peso nuestras compras y pague por esto, y así seguimos entre los varios puestos.

Carnes variadas, quesos, legumbres y todo lo necesario para tener una alacena y refrigerador bien surtido para ambos; y a sabiendas que se acerca mi cumpleaños; le di un vistazo a algunos cortes de carne que se veían de buen tamaño y calidad, además de algunos mariscos que quedan excelentes al carbón, obviamente hare una carne asada para mi cumpleaños.

Luego de haber hecho la compra, retornamos a nuestro hogar, cargando entre los dos las varias bolsas con nuestras compras, Amanda caminaba tan alegre agitando su cola de lado a lado, y con una paleta en su boca que compramos en una tienda de dulces antes de irnos, simplemente sonreí ante ella, es adorable, vuelve cosas tan simples a cálidas.

Volviendo a casa guardamos toda la compra y abastecimos bien el refrigerador, y Amanda estaba a punto de preparar la comida, pero le recordé que debíamos de empezar el entrenamiento, así que solo comimos algo de fruta picada y tomamos un cambio de ropa deportivo:

-¿Lista? -dije al verla salir al patio trasero

-¡Totalmente! -dijo con una sonrisa

Ella recogió su cabello para formar una cola de caballo, para evitar molestias o que le incomodara, mientras que su ropa como el pantalón de licra y una camisa deportiva sin mangas… maldita sea, la ropa deportiva simplemente es demasiado… deja notar bien sus curvas:

-Bueno, empezaremos como si ejercitáramos normal, calentamientos y pronto a algunas repeticiones

-¡Entendido capitán! -dijo dando un saludo marcial, y pronto empezando a calentar

Empezó con un par de ejercicios para piernas y cintura, además de estiramientos de brazos, mientras que por mi parte me dirigí al cobertizo de la parte de atrás, ala abrirlo me di cuenta de que Valeria había traído todas las cosas de nuestra antigua casa que rentábamos en México, herramienta que había comprado en mis días de soldado, equipo de ejercicio, de entrenamiento de boxeo y protecciones, además de un saco de box de bastante aguante que me ah acompañado por años.

Amanda sigue estirando en el pasto del patio, pero yo logre ver un gancho en el techo del porche trasero de la casa; justo donde también está un asador metálico que compre hace tiempo y otro hecho de ladrillo algo más grande.

Sonreí a sabiendas de que lo que hizo mi hermana con esta casa es simplemente adaptado a lo que yo vislumbraba para un futuro hogar.

En el techo noté un pequeño gancho de metal del cual pude colgar el costal de box:

-Bueno, parece que has calentado suficiente -dije acercándome con Amanda, ella simplemente camino hasta mi esperando a lo que será su entrenamiento- empezaremos por lo básico, primero, la postura ideal para boxear, la guardia, como se debe golpear y todo este apartado técnico, luego de eso empezaremos contra el costal con cosas básicas ¿Estas lista?

-¡Claro que sí, vamos! -dijo emocionada con una gran sonrisa

-Muy bien, comencemos, primero que nada, la postura de guardia…

Y lo siguiente fueron horas de enseñarle a Amanda las posturas de guardia, como se lanza un buen puñetazo y como mover sus pies; o más bien, pezuñas; para mantener el equilibrio y no caer mientras se mueve o la derriben.

Claro, los minotauros tienen una composición en sus piernas algo diferentes a la de los humanos, así que me confié de como ella se sentía con mejor equilibrio, además de mezclar un par de sus posturas de guardia que hacer en el combate Minos, solo que, sin una gran espada, pronto llego el momento de golpear el costal, ya para ese momento ya habíamos hecho suficiente ejercicio, además de sombra y cuantos consejos iniciales se:

-Terminaremos con un par de golpes al costal -dije parándome a un lado de este

-¡Muy bien! ¿Lo golpeo fuerte?

-¡Claro que sí! En una pelea no debes contenerte, alguien que te ataca no se contendrá, y tu no debes de darle esa ventaja o saldrías lastimada

-Muy bien -ella entonces adopto la postura de guardia, acomodo bien sus pezuñas y lanzo un potente derechazo

Claro, olvide por un segundo que es una minotauro y que fácilmente me dobla en fuerza, el costal de boxeo salió disparado hacia arriba topando contra el muro de la casa que sigue al segundo piso, y al estar sujeto aun del gancho bajo a gran velocidad, Amanda simplemente bloqueo el golpe que le iba a dar el costal con ambos brazos adoptando una postura defensiva:

-Bien… creo que tendrás que regular un poco la fuerza contra el costal -dije caminando hasta ella- aunque tienes buenos reflejos, lo mejor era apartarse o bloquear el costal que venía con fuerza

-Lo se… aunque si me dolió un poquito -dijo sobando sus antebrazos- ¿Lo hice bien?

-Muy bien -ella entonces sonrió ampliamente- ahora quítate los guantes, ya fue suficiente por hoy, mañana continuaremos con algunas de sometimiento

-Está bien, gracias Robie, la verdad es que es divertido -dijo sonriendo mientras se retiraba el guante de su mando recha- e-espero no tener que golpear a nadie… ¡P-Pero al menos ya veo cómo puedo defenderme!

-A nadie le gusta la idea de tener que pelear por su vida, pero más vale prevenir que lamentar

Ella solo asintió y termino de retirarse los guantes de box, para luego tomar una toalla para retirarse algo de sudor con esta y un termo del cual tomo algo de agua… mientras recogía pesas, algunas pesas de tobillo que usamos para que rindieran mejor algunos ejercicios; la mire de reojo como se retiraba el sudor, e incluso levanto algo de su camisa en la zona de su abdomen para levantarlo un poco y refrescarse.

Lo sigo diciendo… tiene una figura muy bien esculpida, ni que decir de sus piernas o algo más arriba hacia su pecho… agite mi cabeza al darme cuenta de que ella también me miraba mientras recogía una de las cuerdas para saltar que usamos, espero que no me haya visto mirándola tan fijamente.

Ahí la mire de reojo y note como ella me miraba, no a mis ojos o cara, sino a mis brazos y tronco… ahí regrese mi mirada al frente mientras recogía las cuerdas y un par de pesas, creo que no soy el único, cuando termine de acomodar todo a un costado en la zona techada, realice un par de estiramientos para ya terminar, simplemente levantar mi brazo derecho y usar el otro como palanca y viceversa, mientras me estiraba hacia arriba y a los lados girando mi cintura podía ver como Amanda solo me miraba, jugueteando con sus dedos mientras en su mano tenía el termo, como si se hubiese olvidado por completo de lo que hacía:

-Muy bien Amanda, creo que será buen momento para un baño ¿No crees? -pregunte girándome de repente, sacándola del trance

-¿Eh? ¡A-¡Ah, s-si! ¡U-¡Un baño, es… si! ¡Hay que tomar uno! Hay que refrescarnos y quitar todo este sudor de encima -ella entonces rio apenada dándole un trago a su termo, es adorable, parece que si le saque una sorpresa

Ahí ambos entramos a nuestro hogar y subimos al segundo piso:

-Entra tu primero -dije mientras revisaba el armario por un cambio ideal- yo entrare de segundas

-Está bien -dijo Amanda y con un cambio en sus brazos y un par de toallas- Oye Robie y… o-olvídalo

La escuche y me gire, ella estando al a entrada del baño, me pareció curioso que me llamara y de pronto se cortara a sí misma, solo la vi sonrojarse y entrar al baño a prisas, me extrañe por eso, pero ahora solo me toca esperar.

Un par de minutos pasaron y Amanda salió del baño secando su cabello con una toalla, y ya vistiendo de unas ropas más ligeras para estar en casa:

-Preparare la comida -dijo con una sonrisa

-Está bien, gracias querida

-No es nada querido -dijo con una sonrisa

Y ahí me di un bien merecido baño… suelo usar estos momentos para reflexionar un poco.

Y pensar que estoy enseñándole a Amanda a como pelear y defenderse, esa mujer que no podría ni lastimar una mosca… malditos bastardos… pero tengo que concentrarme, esta idea la había considerado hace tiempo con ese atentado y como la violencia ha escalado aquí en Japón, es mejor que ella sepa defenderse y pueda prevenir un desastre.

Además, es una minotauro, tiene una fuerza sobrehumana, un buen golpe de ella podría mandar al suelo cualquier especie que no sea un minotauro como ella… aunque… esas especies grandes también pueden resistir más… solo debo enseñarle lo que se, todo lo necesario para defenderse eficazmente, y ya ella podrá responder a un ataque de alguien de su misma especie o alguna otra con esas características de resistencia y fuerza.

Y por mi lado, daré con esos desgraciados y aquel que trato siquiera de dañarla… lo único que puedo hacer es dar con ellos y acabarlos.

Ya después de ello simplemente tome un buen baño, seque mi cuerpo y me puse un nuevo cambio; ya bajando las escaleras me invadió el olor de la comida que se está preparando en la cocina, como es de esperarse, huele muy bien.

Me dirigí a la cocina y tome asiento en la barra para no molestar a Amanda, se ve muy concentrada en lo suyo, moviéndose de lado a lado y tarareando una canción animada mientras cocina, aunque note que lleva ahora un cambio diferente a cuando salió del baño, es algo más… corto.

Una falda de color blanco y una blusa oscura… sé que le queda corta por como revela bastante de su espalda, y eso que no la eh visto de frente:

-¡Hola Robie! -dijo girándose para regalarme su sonrisa- Ya casi esta la comida, tu solo espera ahí

-C-Claro querida -dije sonriéndole al desviar mi mirada de su abdomen y pecho

Es muy diferente a la ropa que suele usar otros días, ella pronto termino la comida, eran un par de filetes de pescado a la plancha, verduras salteadas y todo eso en una cama de arroz frito:

-Para ti -dijo colocando los platos frente a mi

-Gracias -dije asintiendo con una sonrisa

Ya cuando ella se sentó frente a mí, empezamos a comer, esa camisa le queda bastante bien, resalta bien su figura y… basta Roberto, luego te vera que la miras tan fijamente, y lo único que sabre es que muy seguramente me dará una bofetada.

Quizás fue una comida silenciosa, sin compartir muchas palabras, pero eso simplemente hacia más fácil disfrutar de la gran comida que ella prepara, además de compartir sonrisas.

Fue entonces que al terminar de comer caminamos hasta la sala de estar y nos dispusimos a ver un rato la televisión; encontramos un documental interesante de vida marina; a Amanda le pareció entretenido, y tengo que decir que tiene unas tomas preciosas del coral y animales marinos.

Amanda en vez de sentarse a mi lado se recostó a lo largo del sillón, dejando su cabeza recostada sobre mi pierna izquierda, mientras que yo acariciaba su cabeza y espalda, disfrutando de tan tierno momento.

De un momento a otro sentí mi teléfono vibrar, ahí verifiqué que era una llamada y conteste:

-¿Diga?

-Mariscal García, soy el mariscal Barrick -hablo desde el otro lado de la línea- ¿Cambio de residencia como se le indico?

-Si mariscal, ahora mismo estoy en otro hogar ¿Ocurrió algo?

-Hemos obtenido información extra de ambos informantes, requerimos su presencia a las 7 de la mañana en el edificio de la corporación, todo su equipo ya fue informado, será una semana agitada, así que requiero que descanse para que logre desempeñarse y demostrar que es digno de la división blindada

-Muy bien mariscal, estaré ahí temprano, gracias

-Bien, descanse

-Igualmente -entonces corte la llamada

-¿Ocurrió algo Robie? -cuestiono Amanda

-Una llamada de la corporación, mañana debo de estar temprano en el edificio de la corporación

-Oh… ¿Tienes una misión?

-Al parecer si -dije asintiendo- tal parece que es de aquellos que nos han seguido

-Ya veo… Solo no dejes que te lastimen -dijo entonces abrazándome- por favor

-No te preocupes querida, volveré para la hora de la cena

Ella solo siguió abrazándome y yo acariciando su cabeza y espalda.

Ya que el entrenamiento nos consumió mucho tiempo, la comida fue relativamente tarde, y cuando llego la hora de la cena tan solo fue algo simple como ensalada de atún con un toque de aderezo y lechuga, para después ir a dormir.

En mi lado de la cama me acomode al instante, pero no sin antes compartir un beso con Amanda, y entonces ceder a los reinos de Morfeo…

Arribando al edificio de la corporación me recibió el mariscal Barrick, entregándome un par de documentos, los planos de un edificio, y otro con la foto de una mujer:

-Ella es Natsude, colaboradora directa de Theobold en Japón -dijo mientras caminábamos hacia el ascensor- contadora, directora ejecutiva de empresas de lavado de ropa, pero varias empresas fantasma y sospechosa de lavado de dinero

-¿Y cómo es que no está tras las rejas?

-No se ha reunido suficiente información, o al menos, no ha sido presentada con la debida forma, esa información la reunieron nuestros agentes de Inteligencia, el edificio que le mostré es uno de los que más transita, donde se sospecha guarda una parte de sus ganancias en dinero y materia viva

-¿Personas?

-Si bien sus negocios según los papeles son de restaurantes, lavanderías, comercios y bares, la realidad es que son burdeles y centros de subastas de especies exóticas

-Hija de perra -solté en mi idioma natal salió de lo más profundo de mi ser

-Supondré que no está nada feliz con lo que escucha -dijo mientras salíamos del ascensor- la prioridad es tomarla con vida, según los informantes estará hoy por la noche en una subasta importante, capos de la mafia japonesa estarán presentes, más otros representantes de figuras políticas y corporativas importantes

-Supongo que lo preferente es tomar a todos esos sujetos con vida y adquirir la mayor información posible -comente al darme una idea de la magnitud de esto- ¿Cierto?

-Así es -asintió mientras entrabamos a una oficina amplia, con una mesa en el centro y un proyector- cuantos más capturen con vida aumentara su paga, empresas y figuras políticas que no estoy permitido decir nombres están dispuestos a pagar una buena suma por esta información que ensuciara a su competencia -dijo sonriendo- ya sabe cómo es ese asunto, y si captura a Natsude con vida la recompensa será mayor, además de ganar una mejor reputación entre la blindada

-Entiendo -dije mirando la foto de la mujer

De 48 años, cabello largo y de color oscuro, ojos verdes y piel clara con algunas arrugas, además de unas ojeras particulares, quizás privación del sueño… y pensar que monstruos así podrían tener eso, esas criaturas venderían a sus propios padres por cualquier moneda.

Pocos minutos pasaron para que mi equipo arribara, una hora fue de explicación del mariscal Barrick, explicando que el edificio es un hotel de cuatro pisos, pero que tiene siete de sótano, si bien el hotel en la superficie es uno de los pocos negocios reales de Natsude, toda la red y nuestros objetivos están en el sótano, por lo que será una batalla cruenta, poco o nada de sigilo… a no ser que entremos por la cocina.

La parte trasera del edificio lleva a la cocina, esta, conecta con la misma del nivel inferior y zonas de almacenamiento, desde ahí podemos acceder al salón principal donde hacen sus reuniones y desde este controlar las salas de apuestas, por último… las jaulas… esta misión debe salir a la perfección… muy seguramente hay mujeres ahí, atrapadas, sin siquiera ver la luz del día y sujetos que están ahí para comprarlas como si fuesen objetos… esos bastardos pagaran:

-Eso es todo agentes -dijo Barrick apagando el proyector- un camión de la corporación los llevara a nuestro centro de prácticas urbanas, ahí se ha montado una recreación a escala de los niveles del hotel, la redada será a las 9 de la noche, así que tienen el tiempo ajustado para entrenar ¡Adelante!

-¡Si señor! -exclamamos casi al mismo tiempo, siendo que el desface vino por parte de Sloan y Mizuki

-¡Equipo, retirada! -ordene y estos salieron por la puerta que entramos

Sera un día agitado… solo espero que Amanda lo pase mejor…


POV Amanda


Una noticia reciente me pego con fuerza… no podía creerlo… estaba en mi asiento, casi devastada por lo que me dijeron:

-¡¿Cómo que el cumpleaños de Roberto es en una semana?! -exclame mientras Valeria estaba frente a mi comiendo un coctel de frutas que prepare hace poco, antes de que ella llegara- ¿¡Porque él no me lo dijo!?

-¿¡No te lo dijo!? ¡Yo pensaba que sí! -exclamo Valeria sorprendida- Bueno, primero que nada, cálmate, aún hay tiempo para preparar algo, estoy más que segura que Roberto ya planeaba algo, como una carne asada o una reunión con nosotros

-L-lo más seguro, pero aún me pregunto porque no me dijo… -dije lamentándome, bajando ligeramente mis orejas

-Quizás quería hacerlo una sorpresa… una sorpresa rara, sabes, la mente de mi hermano a veces es misteriosa -dijo Valeria sonriéndome- se paciente con él, recuerda que estos días han sido estresantes para él, bueno, supongo que para los dos

-S-Si… tienes razón, debe tener aún más cosas en mente… ¡Por eso debo de preparar una gran sorpresa para el! ¿Qué clase de pastel le gustan?

-Te tardabas en preguntar -dijo sonriendo, tomando otra cucharada del coctel- esto está muy bueno… ¡Vamos! Iremos de compras, podemos ir comprando ingredientes o ver algo que quizás le guste de regalo

-¡Muy bien! -dije reanimada

Llevo este vestido de dos piezas para salir además de tomar mi billetera y libreta con recetas, puede que algo se me ocurra estando en el centro comercial.

Solo me coloque un cambio de ropa tomando las mismas precauciones que con Robie, un conjunto con el que pueda cubrir mi rostro, luego de ello fui con Valeria hasta su vehículo y pronto llegamos a un centro comercial bastante grande; queda algo más lejos que en el otro barrio donde vivíamos, pero es algo más grande; ya ahí empezamos a recorrer diferentes locales:

-De primeras -dijo Valeria mientras caminábamos- el postre favorito de mi hermano es el arroz con leche, simplemente le encanta

-Ya veo -dije apuntando en mi libreta de apuntes- ¿Tienes alguna receta?

-Le pediré al receta a mamá -dijo con una sonrisa- ella prepara uno como ninguno otro, ahora, en pasteles, el de tres leches es su favorito, aunque el cheesecacke también le gusta mucho, cualquiera de los dos le encantaran

-Entiendo, si -dije apuntando- ¿Con fruta o chocolate?

-¿Por qué no ambos? -dijo sonriéndome- ambas le gustan

-Muy bien -dije escribiendo- ¡Este se ve bien! Y será divertido prepararlo

-Y le gustará aún más porque sabrá que tú lo prepararas -dijo guiñándome- como te dije, será una buena fiesta, ahora, solo tenemos que comprar todo

-¡Vamos! Tenemos mucho tiempo, Robie me llamo y dijo que llegaría tarde en la noche

-¿Una misión en BrutalCorp? -cuestiono Valeria

-Si… no me dijo mucho, solo que una redada para rescatar a mujeres secuestradas… es tan valiente -dije suspirando con una gran sonrisa- un verdadero héroe

-Y, aun así, el negaría que es un héroe -dijo sonriendo, dejando escapar una risa tenue- es alguien noble ¿No crees?

-Absolutamente -dije asintiendo- bueno ¡Vamos! Que quiero darle a mi gran héroe un gran pastel

-A tus ordenes -comento Valeria

Mientras caminaba logre ver a Harumi fuera de un local, viendo lo que parecen ser vestidos en un mostrador, le hice una seña a Valeria y ella me siguió:

-¡Hola Harumi! -salude a esta a unos pocos metros de ella- ¡Que gusto verte!

-¿Eh? ¡Oh! ¡Amanda, que bueno verte por aquí! -saludo ella, dándonos un pequeño abrazo- ¿Cómo has estado Amanda?

-Todo bien ¡Estoy de compras! Vale, ella es Harumi, la conocí hace tiempo, nos entregó muchos paquetes en el apartamento

-¡Hola! Mucho gusto -saludo Harumi dando una reverencia- Creo que Amanda me acaba de presentar

-Valeria García -dijo Vale dando una reverencia

-¿García?... No… ¡No! -exclamo con sorpresa- ¡¿Eres familiar de Roberto?! -sí que estaba sorprendida

-No solo familiar, sino que su hermana -dijo sonriendo Valeria- no nos parecemos ¿Verdad?

-¡Para nada! Bueno, sin ofender

-No pasa nada -dijo Valeria riendo ligeramente- nos lo suelen decir a menudo, es un gusto, Harumi

-Igualmente -dijo dando una reverencia- por cierto ¿Dónde han estado? No los eh visto por ningún lado, quería invitarlos a una cita doble…

-Oh… eso… bueno -dije algo nerviosa- ocurrieron algunos… detalles, simplemente cambiamos de vivienda ¡Pero te puedo pasar el nuevo número de teléfono! Así podremos ponernos en contacto y organizarnos

-Bueno, eso sería mejor, por un momento pensé que te olvidarías de mi -dijo Harumi con un tono de tristeza- ¡Pero me alegra verte amiga!

Luego de pasarle el número telefónico y la dirección de nuestro nuevo hogar, reanudamos nuestras compras, ahora, con Harumi acompañándonos.

Tomamos el tiempo necesario para comprar buenos ingredientes, lo más fresco para el mejor pastel de todos, para la mejor persona de todas, Valeria y Harumi parece que se llevan bastante bien, en lo que yo escogía ingredientes las podía escuchar charlar amistosamente:

-Y luego de eso, me han contratado para diversos proyectos en ambos países -dijo Valeria con orgullo

-¡Eso es increíble! -dijo Harumi- No pensé que alguien como arquitecto viajaría tanto

-Solo los mejores lo hacen -dijo con orgullo- por cierto, tengo que ir al baño, permítanme

-Claro -dijo Harumi con una sonrisa

-Oye, Harumi ¿De qué tienda es esa bolsa? -pregunte

-Oh ¿Esto? Es solo una tienda para damas, ya sabes, con vestidos bien adaptados

-Oh ¿Enserio? -pregunte curiosa, mientras escogía algunos otros ingredientes

-¡Si! ¡Este vestido por ejemplo! -ella lo saco, un lindo vestido de una pieza color celeste- ¡Es encantador! De seguro se me vera bien

-Es muy bonito -dije sonriéndole- tengo que ir un día ¿Tenían alguna sección para especies grandes?

-¡Claro! Incluso una minotauro aún más alta que tu atiende esa zona, si tienen ropa para ella, deben de tener algo para ti

-¡Excelente! Me encantan los vestidos, espero que haya alguno bonito y que me quede

-Venden de todo, vestidos, accesorios, hasta ropa algo más… extravagante -dijo guiñándome

-¿Extravagante? -cuestione curiosa

-Si, ya sabes, para impresionar a tu pareja -ahí gire ligeramente mi cabeza, la verdad es que no sé a qué se refiere

-Ya sabes, lencería de encaje -dijo bajando ligeramente la voz

-O-Oh -dije sonrojándome- ¿V-Venden esa clase de prendas ahí?

-Así es, lo que más me sorprende es que es para todas las especies, tienen maniquíes hasta de aracnes y sirenas ¿Acaso no has pensado en deslumbrar a tu pareja? -dijo entrecerrando sus ojos y dándome un ligero toque con su codo

-N-No, yo… bueno, digo, el -dije sonrojándome por completo, mirando a todos lados… no quisiera que Valeria me escuchara de repente hablando de esto- ¿C-Crees que le guste algo así?

-¡Claro que sí! ¿A quién no? -dijo guiñándome- digo, él te quiere ¿No? Además, eres una chica guapa, cualquier prenda te quedaría bien, y una de encaje, estoy más que segura que hasta le quitarías el semblante serio y marcial de Roberto y lo dejarías babeando

-Q-Que dices, n-no creo… -dije aun con este rubor imaginando a Robie así… aunque… podría…- Entonces… ¿Ahí venden lencería de encaje para cualquier especie?

-Parece que te interesa -dijo de nuevo entrecerrando sus ojos, yo solo reí ligeramente- además de esa hay otra tienda, pero esa es en línea, tu envías todo lo necesario para tu prenda, escoges diseños y la hacen a tu medida, además es una aracne tejedora la que lo hace, así que será algo bien hecho y cómodo

-M-Me gusta cómo suena -dije pensando en algo… si sigo así estaré tan roja como un tomate y Valeria se dará cuenta- ¿Tienes algún contacto?

-Déjame te paso el enlace de la página -ahí saqué mi libreta de apuntes y escribí la liga, fue entonces que Valeria llego y Harumi y yo disimulábamos y comenzamos a hablar de otro tema

-Muy bien chicas -escuche a Vale- ¿Continuamos?

-¡Claro! -dije con una sonrisa guardando un paquete de fresas y kiwi en la bolsa- Aun hay muchas cosas que comprar

Y ahí seguimos con las compras, entre platica, risas, ya cuando teníamos todo nos detuvimos un ratito para comer algo:

-¿Entonces sueles aterrizar en los techos o calle para tus entregas? -cuestiono Valeria

-Muchas veces, si -asintió Harumi- es algo incomodo, porque en el caso de los edificios debemos de llamar a algún encargado de este para que suba y nos abra, y en la calle esta siempre el peligro de los cables -comento mientras comía unas papas fritas- los únicos en donde es sencillo es en casas particulares o edificios habitacionales con balcones, simplemente la gente nos recibe ahí y es mucho más sencillo, pero en edificios grandes no tanto

-Interesante -asintió Valeria tomando un rollo de sushi, yo estaba comiendo algo de ramen- tomaremos eso en cuenta para algunas remodelaciones a futuro, puede ser obvio, pero al parecer nadie se tomó la molestia de considerar a las agentes de correos voladoras, quizás un área de aterrizaje exclusiva sería buena ¿No?

-¡Eso sería de maravilla! Un espacio más que suficientemente ancho para extender mis alas en lo que aterrizo, no necesitamos de una pista de aterrizaje como si fuese un avión, solo un lugar donde podamos aletear para disminuir la velocidad y luego aterrizar

-Entiendo -asintió Valeria- ordenare a mi despacho que empiecen a investigar y hacer bocetos, muchas gracias por tu ayuda, Harumi

-No es nada, conque haga mi trabajo más fácil -ella sonrió- será mejor

Y luego de un rato más de platica, salimos del centro comercial, Harumi se despidió y alzo el vuelo, mientras nosotras subimos al auto de Valeria:

-Es alguien agradable -dijo Vale- ¿Por qué no la invitamos al cumpleaños de Roberto?

-¡Si, eso fuera genial! -dije con una sonrisa- también a su casero, así podremos conocernos mejor

-Claro, supongo que ah de querer conocer a la familia y amigos de su huésped -dijo Vale con una sonrisa- en ese caso habrá que comprar mucha comida

-Bueno, un banquete para un valiente soldado es una gran manera de honrarlo -dije pensando en Robie cuando descubra la sorpresa, o bueno, mi idea es una fiesta sorpresa- Por cierto, Vale, ya que es un día entre semana puede que Robie este ocupado, cuando llegue su cumpleaños y tenga que volver del trabajo ¿Lo podrías recoger tu? Quiero que sea una fiesta sorpresa

-Por supuesto -dijo asintiendo- solo nada de fuegos artificiales o cosas de ruidos estrepitosos, recuerda de su… bueno, condición

-O-Oh, c-claro -dije parpadeando varias veces… casi lo olvidé- n-no te preocupes, no habrá ruidos estrepitosos o gente saliendo de escondites, simplemente estaremos todos esperando a la entrada de su hogar

-Muy bien -dijo sonriendo- me encargare de darle una vuelta antes de dejarlo en casa, así podrán tener todo listo

-¡Gracias Vale!

Luego de unos minutos llegamos a la casa, Valeria me ayudo a bajar todo y guardarlo, luego se retiró pues tenía asuntos de trabajo, yo por mi parte tome las dos medicinas del mediodía, más aparte verificar que todo estaba en su lugar, estaba revisando mi libreta de apuntes para recordar bien que había escrito sobre lo que Robie le gustaría, que me tope con la página que Harumi escribió:

-Ropa interior de encaje -dije mirando lo que escribí e ingresando a la página web en la laptop de Roberto en la sala

Ahí mire hacia abajo y levante ligeramente mis pechos… no es que mi cuerpo será precisamente pequeño, tengo atributos grandes:

-¡S-Se me vera bien! Soy una mujer sana y con buenos atributos, q-quizás tengan algo que me gusté -dije con este rubor presente

Según la página fue creada por una aracne tejedora, la cual conexiona cada prenda y elabora los diseños, tiene un apartado con videos guías para tomar yo misma mis medidas, además de cuáles son las medidas importantes, y de ahí hacer un encargo:

-Aunque me quedaría apretado si dejo que se acumule la leche… -suspire pensando en ese inconveniente, aunque luego vi un apartado para algunas especies, minotauros, harpías, lamias

En el apartado de minotauros productoras incluía un diseño que se adapta y puede aumentar un par de copas el busto y volver a la original sin que se vuelva más holgada:

-¡Entonces ese es para mí! -dije con una sonrisa; y tengo que admitirlo; emocionada

Ya me hacía ideas del diseño mientras tomaba mis propias medidas con una cinta de medir que encontré en la cocina… Tengo ya un día en mente para… mostrarle mi compra, solo espero que Robie le guste todo esto que preparo, y que hoy en especial tenga una misión exitosa…


POV Roberto.


Un par de disparos surcaron por mi cabeza, tome cobertura y quite el seguro a la bomba de flashbang:

-¡Flashbang fuera! -grite lanzándola al pasillo

Con la explosión salí y cuando el humo apenas se disipaba dispare sobre los dos sujetos armados, en el suelo yacía una mujer de rodillas, cubriendo su cabeza:

-Tenemos al blanco, retirada a punto de encuentro

Janet se giró y caminamos por el mismo camino en que entramos, con todos los blancos de ese camino eliminados, no hubo ninguna nueva amenaza, y llegando a la salida de emergencia por la cocina, ya nos esperaba un equipo de la corporación… ahí sonaron los silbatos y alarmas, además de que varios reflectores se escondieron:

-¡Tiempo! -grito el mariscal Barrick- ¡Bien hecho García! Regresen, debemos de hacer los preparativos

Asentí y mi equipo me siguió hasta la área de planeación, ahí estaba ya otro de los equipos de la corporación y una de las fuerzas especiales japonesas:

-Bien, ya que estamos aquí -hablo el mariscal Barrick- la misión se puede desarrollar de manera sencilla si todos los equipos actúan como se debe, mariscal García

-Mi equipo ingresara a la cocina por la entrada de descarga para los camiones de alimentos -explique sobre el plano, con todos los integrantes de cada equipo presentes, mirando con atención- nuestros colaboradores cambia formas nos abrirán paso tomando la forma y uniforme de los repartidores

Los cambia formas solo asintieron, dos seres abisales femeninos, una sentada en una especie de silla formada por su cabello y la otra flotaba de alguna manera, manteniéndose en una posición como si estuviese recostada boca abajo en una cama… los abisales son criaturas por demás fuera de este mundo:

-Una vez abran la puerta principal mi equipo accederá a la cocina junto al equipo del sargento Nakada -dije mirando al sargento del equipo RATS- las personas de la cocina del primer nivel y del sótano son civiles, solo cumplen con su trabajo aun cuando es para una criminal, serán arrestados al instante, ya estando en la cocina de la primer planta del sótano, el equipo del mariscal Ashido ingresara por la puerta principal

-Los residentes del hotel serán contenidos por la policía -explico el otro mariscal- entraremos por la entrada principal y bajaremos al sótano, ese primer piso y donde está el salón de reuniones será el primer anillo de seguridad, según inteligencia, ahí y las jaulas de mujeres serán los lugares más probables con mayor defensa, cualquier sujeto armado pasa a ser una amenaza que eliminar, todos los demás, serán retenidos y simplemente sometidos

-Cuando tengamos a los compradores y a Natsude, serán trasladados al salón de reuniones, de ahí serán sacados por la entrada principal donde ya nos esperaran los respectivos vehículos de extracción -continúe explicando- cuando el salón de reuniones este libre, paramédicos establecerán camillas y equipo de tratamiento, no sabemos si las mujeres en jaulas están en buenas condiciones físicas, si están drogadas o si están retenidas con algún tipo de artefacto -explique pasando entre planos- los paramédicos se encargaran de revisar a cada una y dar el visto bueno para que ambulancias escoltadas las saquen del lugar, luego de eso, la policía se encargara ¿Alguna duda?

No vi a nadie levantar su mano, hasta que alguien del lado del mariscal Ashido levanto su mano, una golem… la reconozco, es del equipo que participo con nosotros en la toma del almacén en medio del bosque:

-¿Usaremos explosivos para puertas blindadas?

-Los usaremos en cualquier nivel que no sean la zona de jaulas -aclare- no podemos arriesgarnos en lastimar a alguna de las mujeres retenidas o inclusive dañarlas, no sabemos que daño físico o psicológico tienen

-Entiendo, era todo por mi parte -dijo la golem dando una reverencia

-¿Algo más? -cuestione mirando a los equipos, nadie más levanto sus manos- Bien ¡Equípense, pronto partiremos!

Los equipos pronto se retiraron, ya tenían sus armas y protecciones balísticas equipadas, solo debían cambiar cargadores a los de balas reales y si acaso posibles explosivos plásticos:

-¿Se encuentran bien? -cuestione a mi equipo, estábamos tomando municiones y equipamiento extra de una mesa donde estaban las armas reales

-Mas listo que nunca -dijo Sloan cargando un lanzagranadas Milkor MGL, característicos por su cargador en forma de tambor

-¿Qué quieres hacer? ¿Volar el maldito edificio? -cuestiono Janet

-Puede que haya más de un ogro ahí abajo, además, son granadas de 40 milímetros -dijo guiñándole a la tarántula- no es una detonación grande, es algo para que les duela mucho a las especies grandes, pero sin ser un explosivo

-Eso espero, no quiero que nuestra segunda misión acabe con nosotros sepultado en un edificio -dijo la tarántula ajustando los porta cartuchos de sus antebrazos, munición extra para la escopeta

Ahí pude ver a Catalina colocándose un botiquín en su cuerpo arácnido, en la zona de su espalda, además de verificar su equipamiento, ahí toque su hombro y ella volteo de golpe, solo le sonreí, asintiendo.

Ella asintió también y tomo el subfusil:

-Si están listos vayan al vehículo -dije colocándome el casco, con la protección balística completa- tenemos trabajo que hacer

Unos minutos más y partimos de la base de la corporación sobre un camión de carga, es la fachada para no ser tan obvios, el otro equipo de la blindada se transportaba en un mercedes benz clase S, una camioneta característica; y si bien no muy discreta; para la zona en que se ubica el hotel, es bastante usual ver una.

Mientras, los del equipo RATS en un transporte policiaco del gobierno, ellos entraran cuando ya estén enterados de que estamos ahí.

Camino al edificio compartí algo de goma de mascar con mi equipo, como la última vez, todos tomaron algo, no los culpo, el estrés siempre está presente:

-¡Cinco minutos! -grito el conductor, una de las cambia formas ahora con el cuerpo de un hombre de mediana edad, y el copiloto un ogro pasado de peso

Una misión más, como docenas otras…

La puerta se abrió bruscamente y dispararon a través de ella, los disparos pasaron por la puerta, nosotros nos cubrimos tras el muro a los lados de la puerta, arroje un flashbang dentro y escuche los gritos de aquellos en el interior.

Ingrese junto a Mizuki, abrimos fuego sobre ambos hombres armados y luego vi a una mujer y hombre en el suelo, tallando sus ojos, se diferencian por sus ropajes finos y que no portaban armas; aparentemente, me acerque a la mujer, es Natsude:

-Tenemos al blanco -dije por el comunicador- esta con vida

-¡Hey, hey! -se levantó de pronto Natsude con sus manos al frente, le apuntamos pues pensamos que estaba armada, pero solo hizo un movimiento brusco- ¡Hey, no estoy armada!... bien, cálmense, tratemos esto como gente de negocios -dijo tallando sus ojos y ajustando su vestido… típico de las ratas cobardes- ¿Cuánto piden por mí? Uno, dos millones, se los duplicare -dijo con una pequeña sonrisa, pero se le notaba lo nerviosa

-¡Les daré lo mismo! -dijo el hombre, con un notorio acento ruso- ¡Lo que ella les dé, yo también! Es mucho dinero -dijo con una pequeña sonrisa- solo para ustedes dos, asegúrense de que nos quedamos libres, les pagamos… y nadie se entera de nada y podrán ir de vacaciones

-¡Exacto, es una grandiosa oferta! -dijo Natsude- de hecho -ahí entonces ella se dirigió a su escritorio, mantuve mi arma lista en caso de que intentara una idiotez, Mizuki también

Entonces Natsude saco algo de un cajón, eran dos fajos de billetes, nos los arrojo y los atrapamos:

-Son diez mil en efectivo, totalmente limpio para que gasten, es un adelanto ¿Qué dicen?

Hacia mi mejor esfuerzo para aguantar la risa.

Voltee con Mizuki con una sonrisa bajo mi casco ante la desesperación de esos dos, abrí el bolsillo de mi coraza y guarde el fajo, Mizuki imito la acción y caminamos hacia los dos, yo contra el hombre y ella hacia Natsude:

-Así debe ser, como gente civilizada, mercenarios, es sencillo de convencer- Natsude fue interrumpida por un puñetazo de Mizuki directo al estomago

-¡Cállate de una vez! ¡¿Acaso crees que ayudaría a una mierda como tú?! ¡Ahora párate y muévete! -grito con Natsude arrodillada en el suelo, recuperando el aliento, pero de pronto hizo un sonido de vomito, Mizuki le tomo las manos y la esposo

-¡Alto! ¡Me entrego! -dijo el hombre, pensando que lo golpearía… si pensaba hacerlo, pero si quiere la manera fácil, así será- Cometen un grave error

-Lo que digas -dije esposándolo- debieron pensarlo antes de hacer esta clase de crímenes

Espose al sujeto y Mizuki finalmente levanto a Natsude, la cual se quejaba y nos maldecía, expresándose muy abiertamente y a todo pulmón, ya cuando llegamos al salón de reuniones el equipo RATS aseguro la zona, mientras otros sujetos que soltaron sus armas, o eran los compradores estaban en el suelo, retenidos por completo y bajo vigilancia:

-Aquí esta nuestro VIP -dije mientras Mizuki empujaba a Natsude y la dejaba caer al suelo, por mi parte hice que el hombre se arrodillara- llévenselos a todos, empezaremos a despejar el piso de jaulas

-Entendido ¡Vengan ya! ¡Llévense a todas estas alimañas! -grito el sargento, haciendo un par de señas

Por mi parte ordene a mi equipo a reagruparnos en el pasillo central, que lleve a las partes más bajas del complejo, la puerta principal estaba resguardada por dos ogros que estaban preparados para recibirnos, pero Sloan cargo una granada diferente, con punta amarilla, al dispararla impacto directamente contra el pecho de uno de los ogros, detonándose, la explosión fue pequeña, pero suficiente para derribar a un ogro y al otro aturdirlo.

Ahí cargo hacia el ogro aturdido y lo embistió para someterlo, la criatura apenas pudo defenderse pues muy seguramente sus tímpanos seguían retumbando y pupilas en blanco:

-Despejado -dijo levantándose, con el ogro ya esposado y el otro derribado siendo sometido por Dina

-Buen tiro -dijo Catalina dándole una palmada en el hombro

-¡Avancen! ¡Janet, escudo al frente! Dina, ¡Síguela de cerca! -dije avanzando

El escudo Egida de Janet simplemente es un muro impenetrable, y sí que ha resistido varias rondas de diferentes armas, pasando un pasillo llegamos hasta otra puerta, Dina la derribo de una patada, fue tan fuerte que arranco parte del marco de la puerta, al acceder pudimos ver las jaulas… pobres mujeres.

Tal cual donde encierran animales salvajes, pero del tamaño de habitaciones:

-¿Q-Quienes son ustedes? -pregunto una mujer en una de las jaulas más cercanas a la entrada, una mujer lagarto, su ropa está hecha garras, pero no parecía lastimada

-Somos de BrutalCorp -dije acercándomele, mi equipo avanzo, descartando dos tipos que se rindieron, el piso estaba despejado- venimos a sacarlas de aquí

-Gracias… de verdad

-Apártate -dije apuntando al candado de la puerta, ella camino hasta la parte trasera de la jaula y volé el candado, pronto abrí la puerta y la mujer camino para luego dejarse caer sobre mí y llorar, yo solo pude sujetarla para que no se callera y con mi otra mano mantener mi rifle listo

-¡Muchas gracias! Yo… dios… yo no sabía que me harían todo esto… e-e-el anuncio decía que n-necesitaban equipo de limpieza… y-y yo necesitaba dinero y -su llanto se volvió incontrolable, llame a Catalina y pronto la mujer se dejó caer en el suelo, soltándome, pero llevando ambas manos a su cara

-Tranquila, ya estamos aquí -dijo Catalina- ahora, necesito asegurarme de que estas bien ¿Te duele algo? ¿Tienes algún corte o te colocaron algo?

-No… s-solo tengo hambre -dijo la mujer- desde hace unos días no nos dejaron comer…

Deje a Catalina con la mujer y ordene a Dina asegurarse que nadie más se acercara, llame al segundo equipo de la corporación, ellos bajaran para sacar a las demás mujeres en lo que despejamos los últimos pisos…

Terminado… misión cumplida a la perfección, decidí quedarme en las cercanías, ayudar con la vigilancia, ya se habían llevado a Natsude y todos los demás participantes de los sorteos, ahora solo sacaban una a una a las mujeres que estaban encerradas, elfo, humanas, lamias… hasta una Quetzalcóatl y dragonas que estaban bajo efectos de drogas… mujeres minotauro y ogro… y creer que imponentes especies serian doblegadas de esa forma.

Ellas caminaban lentamente hacia las ambulancias, con nuevas ropas o cubiertas con toallas para ayudarlas a ganar calor, algunas nos miraban con lágrimas en sus ojos, algunas alcanzaban a agradecer, otras simplemente estaban muy ocupadas al poder comer algo:

-Buen trabajo mariscal -dijo el mariscal Ashido- no tuvimos bajas y todas las mujeres fueron rescatadas

-Es lo que más me importaba -dije sonriendo bajo el casco- quizás no las sacamos antes… pero ahora podrán disfrutar de libertad

-Es lo que todos queremos -dijo dándome una palmada en mi espalda- puedes retirarte, la policía se encargara de todo esto

-Bien, solo quería cerciorarme que todo saliera bien -dije sonriendo- oh, por cierto -ahí abrí la bolsa de mi coraza, sacando el fajo de billetes- Natsude trato de sobornarme y a una de mis compañeras de equipo

-Oh, si, la agente Mizuki me lo dijo -dijo entonces tomando el fajo, revisando la cantidad- lo entregare como evidencia, hizo bien mariscal, esos cascos tienen micrófonos y cámaras, sino lo hubiese entregado por sus medios, la corporación hubiese tenido que interferir

-Lo último que quiero son problemas -dije asintiendo- me retiro

-Bien, descanse mariscal

Luego de eso me gire para con mi equipo, mi equipo estaba festejando, Sloan presumiendo a la golem como neutralizo a dos ogros con una carga pequeña y ella el que voló una puerta aturdiendo a todo un grupo de sujetos armados, Catalina resaltaba como Mizuki le asesto un gancho al hígado digno de Mike Tyson contra Natsude, solo reían y estaban conviviendo, ahí fue que recibí una llamada de Amanda:

-Hola querida -respondí

-Hola Robie… oye… ¿Tu misión tiene que ver con haber rescatado a mujeres de un hotel? -pregunto con una voz tímida

-Así es ¿Estás viendo las noticias? -dije mirando a los reporteros fuera el cerco policiaco, y un helicóptero que se mantenía sobrevolando al zona, iluminándola con un reflector

-Si… es increíble lo que haces -dijo con cierto tono de orgullo- eres todo un héroe, Robie

-Solo hago lo que debo hacer -respondí con una sonrisa, es adorable- ¿Todo bien en casa?

-Si, Valeria vino e hicimos las compras, además de que me encontré con Harumi, fue un buen día, pero me alegra más que estés bien

-Es bueno saber que tuviste un buen día, puede que hoy llegue algo tarde, si estas cansada, solo llegare, me daré un baño y me acostare a tu lado

-Está bien Robie, te esperare despierta

Yo sonreí y seguimos hablando un poco más hasta que era hora de partir a la base de la corporación, ahí dejamos todo nuestro equipamiento y ahí mismo tome uno de los transportes de la corporación, dejo a mi equipo en sus destinos y por último a mí.

Entrando a casa me di cuenta de que todo estaba apagado menos la sala de estar, ahí me asomé y pude ver a Amanda acostada de lado en el sillón de la sala, en la mesa de centro una copa llena con coctel de frutas.

Solo pude sonreír ante la tierna escena, parece que hizo lo mejor de sí misma para esperarme, me senté a su lado y con el movimiento del sillón se movió sobre este, ahí ella entonces alzo la mirada:

-¡Oh, querido, llegaste! -dijo con una sonrisa, despertando de golpe, abrazándome- P-Perdóname, me recosté solo un segundo y me quedé dormida…

-No pasa nada ¿Comemos juntos? -pregunte tomando la copa con el coctel de frutas

-Claro, me encantaría

Y así pasamos el rato, compartiendo de cucharada en cucharada el coctel de frutas, para la última comerla yo mismo, Amanda simplemente se levantó y nos dirigimos a la recamara principal.

En el baño me cambie, tome un baño rápido y simplemente me tire en la cama suspirando pesadamente, Amanda por su parte se acostó a mi lado, y se recostó de lado mientras yo solo mantenía mis ojos cerrados:

-¿Fue muy difícil? -pregunto a mi lado, ahí sentí como colocaba su mano sobre mi pecho

-Es… solo mucho estrés -dije abriendo mis ojos, y volteando con ella… está usando esas ropas holgadas, y a como esta acostada de lado, deja notar lo grande de sus atributos- avanzar con cuidado, despejar los cuartos, cuidar a tu equipo… en el momento la adrenalina te ayuda a pasarlo, pero después de todo… solo sientes cansancio

-Ya veo… es un trabajo estresante, pero ya puedes relajarte -ahí ella se acercó más hacia mí, y con su otra mano comenzó a acariciar mi cabeza, además de pegarme a ella… sus senos están demasiado cerca de mi cara- solo relájate querido ¿Así esta mejor?

-Si… gracias querida -dije sonriéndole, esto es bastante cálido, solo pude cerrar mis ojos y disfrutar de su tacto y el calor que emana… su suave respiración

-¡Oh! ¡Tengo una idea! Recuéstate boca abajo, acomódate bien

-¿Eh? ¿Por?

-Solo hazlo -dijo sonriéndole

Obedecí y me recosté boca abajo, mientras Amanda se arrodillaba en la cama:

-Mamá siempre le daba un masaje a mi padre cuando volvía del trabajo y estaba agotado, siempre lo relajaba

-Gracias querida -dije al sentir sus manos en su espalda… la verdad es que se siente bien, aplica presión con sus manos y a veces solo me da varios golpes suaves a lo largo de mi espalda- se siente… relajante

-Me alegra saber eso, querido -dijo aplicando presión en diversas partes de mi espalda, y en algunas subiendo a mis hombros y brazos- Vaya… tienes brazos muy fuertes

-Gracias -dije sonriendo con mi cara sobre la almohada- ¿Te gustan?

-Eh… yo… b-bueno, es… luces bien y eso, a eso me refiero -dijo riendo tímidamente, es adorable

Yo solo reí para mí de nuevo y simplemente deje que ella me diera un pequeño masaje, la verdad es que, si ayuda, me siento mucho más relajado… y solo siento sueño…


POV Amanda


Ya una semana ha pasado, Robie me dijo lo de su cumpleaños hace un par de días así que solo fingí sorpresa y además fuimos a comprar varias cosas, dijo que invito a su equipo de trabajo y que asistirían, así que compramos bastante carne para invitados de especies muy grandes, recuerdo un poco de cuando estaba en el edificio de MON, y especies como wyvern y aracnes, y una tarántula, son bastante grandes, y me imagino que comen mucho, así que tenemos que estar bien surtidos.

Hoy tuvo que irse a trabajar desde muy temprano, a eso de las 6 de la mañana… pobre Robie ¡Pero hoy le espera una gran sorpresa!

Valeria inclusive vino desde muy temprano, ella también compro varios cortes de carne y trajo muchos otros ingredientes:

-Vaya, sí que compraron mucha comida -dijo dejando un gran contenedor de metal en la cocina

-Los compañeros del trabajo de Robie van a venir, y me dijo que son especies muy grandes, así que hace un par de días él fue a comprar mucha más comida

-Bueno, será todo un banquete -dijo con una gran sonrisa- por suerte, vengo preparada, sabes, mi hermano es muy bueno con la parrilla; quizás cosas como emparedados, sopas y ensaladas a veces se le quemen, queden muy secos o demasiado sazonados, pero la carne asada nunca le falla, y hoy preparare uno de sus mejores platillos

-¿Cuál? -pregunte curiosa

-Un brisket ahumado por 10 horas -dijo con una sonrisa- te lo describiría, pero es simplemente imposible, por eso, tendrás que esperar

-Mon dieu ¡Suena exquisito! La carne quedaría simplemente jugosa y se cortaría como mantequilla con tanto tiempo en el ahumador

-¡Exacto! Ven, ayúdame a preparar el ahumador

Asentí y la seguí hasta el patio, pasamos al almacén del patio y ahí dentro estaba un ahumador de metal, lo cargue sin problemas y lo deje donde ella me dijo.

Algo que note es que Valeria ahora esta vestida diferente, usualmente la veo con un traje formal, pero hoy lleva un pantalón de mezclilla claro y una camisa oscura bastante curiosa, con un logo en su espalda que dice 'Hecho en México', yo solo sonreí, debe ser porque es un día especial.

Mientras ella estaba en el patio con el ahumador yo me disponía a preparar otros platillos, Vale me dio un par de recetas escritas para marinar y sazonar la carne antes de asarla, pero cuando estaba por empezar alguien llamo a la puerta.

Caminé hasta esta y la abrí, para ver a una repartidora:

-Uh… ¿Amanda Du… Duford? -dijo leyendo el papel sobre el paquete

-¡Esa soy yo! Qué bueno que llegaron temprano

-Si, firme aquí -dijo pasándome una tableta; me sorprende la tecnología, es increíble cómo puedes escribir o dibujar en uno de esos aparatos, y solo con tu dedo- disfrute su paquete

-¡Muchas gracias! -dije despidiéndome

Es el encargo que pedí hace unos días… que bueno que Valeria está ocupada ahí atrás, si no, me pondría roja aun cuando el paquete está totalmente envuelto.

Corrí hasta la recamará que comparto con Robie y lo escondí en el ropero… m-más tarde será buen tiempo para usarlo, antes Robie se merece un buen cumpleaños.

Es temprano, así que empecé también con el pastel; un cheesecacke lleva tiempo; y preparare dos, espero que sea suficiente para todos, también son de buen tamaño, al mismo tiempo preparaba algo para nosotras dos de desayunar, terminando los primeros preparativos; que era poner el brisket en el ahumador y yo con un par de pasteles que ya están en el congelador, así que nos dispusimos a desayunar:

-Por cierto, Vale ¿Invitaron a los mismos familiares que asistieron a tu cumpleaños?

-Oh, si Amanda -dijo asintiendo- algunos me enviaron mensaje que ya venían desde ayer y otros que recién tomaron el vuelo hoy, creo que si llegan a la hora

-Espero que si -dije mientras me preparaba para ayudarle a Valeria- Robie estará más que contento en ver a su familia

-Siempre lo vuelve feliz, por cierto ¿Cómo ha estado últimamente? Ya vez lo de aquella… situación y lo de su nuevo hogar ¿No se le ha pasado por la cabeza devolver la casa?

-Bueno… -dije desviando la mirada por el primer día- S-Si lo pensó el primer día, decía que no merecía todo esto, pero con el pasar de los días lo eh visto más cómodo

-No lo culpo, no es como si le hubiese regalado un chocolate -dijo Vale sonriendo para sí misma mientras marinábamos la comida y ella preparaba una salsa- puede que quizás haya sido demasiado y debí de decirle con tiempo… pero bueno, me gustan más las sorpresas, y sabiendo del peligro que corrían, es lo menos que podía hacer por ustedes

-Eres una gran persona, Valeria -dije sonriéndole- sé que Robie está más que agradecido contigo

-Yo soy la que esta agradecida con el -dijo bajando la mirada, para luego mirarme- y contigo, Amanda

Ahí le regale una sonrisa y continuamos con los preparativos de la comida, espero que todo vaya bien en el trabajo con Robie…


POV Roberto


Luego de recibir más información y cursar un par de exámenes cognitivos de la misma corporación, estábamos entrenando, esta vez, Mizuki quería aprender algunas nuevas técnicas y trucos, y que mejor que un peso pesado para enseñarle.

Luego de una sesión de llaves de sometimiento, posturas de guardia más hacia el krav maga o muay thai; que también se, pero no amaestrado tanto; algunas posturas de combate por parte del muay thai, que le permitirían lanzar golpes más contundentes que la posición normal del box, además de hace que se suelte más, es rápida, pero le falta algo más de agilidad; tienen mano pesada; pero siento que se sigue conteniendo, debe soltar toda su fuerza:

-¡Vamos Mizuki! ¡Mi abuela golpea más fuerte! -grite mientras ella golpeaba las almohadillas que tengo en mis manos- ¡Mas fuerte, no te contengas, quiero más de tu izquierda!

Ella asintió y siguió lanzando golpes manteniendo una correcta postura, si, golpea fuerte, pero tiene que golpear más fuerte y mejorar su gancho izquierdo:

-¡Atenta! -dije lanzando un codazo, ella se agacho y siguió con los golpes

No es como que estemos peleando de manera amistosa, eso le ayudara a mantenerse atenta, golpear y evadir ayuda a evitar que la gente se quede quieta, en un combate tienes que moverte rápidamente, así que esos golpes repentinos la obligan a mantenerse atenta aun cuando no la vaya a golpear de verdad, es para que desarrolle agilidad:

-Bien hecho, sigue practicando tu izquierda, la próxima vez quiero ver que tan fuerte pateas -dije luego de la sesión de puñetazos

-No se me dan las patadas, pero daré lo mejor -dijo dando una reverencia- gracias mariscal

-No es nada

-Si que entrenan mucho -escuche a Sindri a un lado del ring, por mi parte apenas bajaba de este y me retiraba los guantes

-Tenemos que, aunque no tengamos trabajo de campo no podemos descansar tanto -dije dejando ambos guantes sobre una banca, Catalina se acercó y me dio una botella de agua, antes le dio una a Mizuki- gracias, además, me gustan los deportes de contacto

-Ya veo, algún día deberías de enseñarme algunos trucos -dijo Sindri con una sonrisa- solo contra el costal, un golpe tuyo debe de doler mucho aun cuando lleve equipo de protección

-No te preocupes, seré gentil contigo -dije sonriéndole, dándole un trago al agua- Por cierto, Sindri, hoy hare una pequeña reunión por mi cumpleaños y-

-¡¿Tu cumpleaños?! -exclamo de repente- ¿¡Porque no me dijiste!? ¡Hubiese preparado un regalo!

-Está bien, no te preocupes por eso -dije sonriendo ante su clara emoción- me contento con que asistas, será solo una gran parrillada con mi familia y algunos invitados extra, mis compañeros de equipo, por ejemplo

-¿Y tus amigos? -cuestiono Sindri

-Bueno… están en México, algunos son soldados y entiendo que ellos no puedan asistir -siendo honesto, si bien no tengo problemas relacionándome con la gente, no soy de muchos amigos; conozco a personas y puedo llevarme bien con ellos, el único que podría entrar en esa definición es Pérez

-Ya veo… bueno ¡Ahí estaré! -dijo con una sonrisa- ¿Y cuantos años cumples?

-Treinta años ya… diciéndolo en voz alta me hace sentir viejo -admití sonriendo ligeramente

-Para nada, aun te quedan muchos años más -dijo dándome un ligero golpe contra mi brazo izquierdo- además luces bien, pensé que tenías un par de años menos

-Bueno, eso me alegra un poco -bromeé- por un momento pensé que las canas se me notaban mucho

-Solo son unos cuantos pelos plateados, además, te harían lucir más sabio -dijo sonriendo con sus manos sobre su cadera- por cierto ¿Irán a la galería de tiro? Llego hace un día un par de modelos de las armas de la corporación y me encantaría estrenarlas en la galería; no quisiera que alguna se encasquille seguido y me hagan revisar todos los modelos -dijo rascando su nuca preocupada

-Claro, planeábamos en ir luego de tomar una ducha

-Disculpe -escuche a Janet detrás de mí, venia junto al resto de mi equipo, ella secando su frente con una toalla- Usted es armera ¿cierto?

-¡La mejor! -dijo inflando su pecho con orgullo- ¿Necesitas algo?

-Bueno, uso algunos modelos para especies grandes de la corporación, pero aun así siento las armas algo incomodas -dijo moviendo sus garras- estas no son tan flexibles como los dedos de otras aracnes, quiero saber cuánto me costaría que fabricara una escopeta más apta

-¡Oh, claro! Sera la primera vez que diseña algo para una tarántula ¡Eso lo hace más emocionante! -dijo de pronto con esa emoción característica de ella- tendré que tomar medidas de tus garras, además de algunas sugerencia tuya -ella de pronto saco una pequeña libreta de apuntes y pluma, además de una cinta de medir- ¡Empecemos!

Pronto Sindri comenzó a tomar medidas de las garras de Janet, además de sus brazos, y un par de preguntas importantes:

-¿Ella fue la que fabrico su arma? -escuche a Mizuki a mi lado

-Oh, si -asentí ligeramente- es bastante hábil, además de ser una ingeniera en armamento para las armas de la corporación hace pedidos personales para agentes o compradores privados

-Eso me sería útil, quisiera una pistola con algunos cambios -dijo Mizuki- me gusta usar la M1911, aunque quisiera algo más personalizado

-Quizás me ayude a buscar un subfusil potente y que no sea demasiado grande -dijo Catalina

-Siempre me intereso tener un arma a la medida -dijo Sloan con su mano en su mandíbula

-Bueno, siempre puedo hacer nuevos encargos -escuchamos a Sindri justo detrás de nosotros

Nos tomó de sorpresa que dimos un sobresalto en conjunto, voltee con Janet y ella estaba tomando agua de un termo, justo Sindri se movió detrás de nosotros sin que nos diéramos cuenta:

-¡Ustedes solo díganme lo que necesitan y yo cumpliré con sus peticiones! -dijo Sindri emocionada

Ahí entonces comenzaron a darle la información que requería Sindri, sonreí al verla tan contenta y a mi equipo hablando con ella… puede que algunos amigos estén en México, pero aun puedo formar otros aquí en Japón, será parte de mi nueva vida.

Mientras secaba mi sudor Dina tomo asiento a mi lado:

-Mariscal -me llamo- Yo… uh… ¿Podría invitar a alguien a la fiesta?

-Claro Dina ¿Quieres que asista el mariscal Barrick? -al mencionarlo ella se sonrojo y asintió- por supuesto, será un honor tener a un mariscal de la blindada con nosotros

-Gracias mariscal… por cierto ¿Cómo se siente? -pregunto de repente

-¿A qué te refieres?

-Bueno… la situación a la que usted y su casera se encuentran, con ese grupo teniéndolos en la mira

-Admito que… sigo algo nervioso, un poco estresado -admití apoyando mis manos sobre la banca y tratando de relajar mi cuerpo- no por mi seguridad, en México debíamos de tener nervios de acero y ojos bien abiertos, nosotros y nuestras familias eran un blanco para los carteles, y debíamos de tomar toda medida posible para evitar una desgracia… pero… Amanda… ella es quien más me preocupa

-Usted la quiere mucho ¿Verdad? -cuestiono girando ligeramente su cabeza a un lado, esbozando una pequeña sonrisa

Nunca creí que hablaría de esta clase de temas con ella… o más bien con alguien siquiera de mi equipo, pero Dina es la más seria de entre todos, me sorprende este lado tan interesado de ella en cuestión de las relaciones:

-Querer se queda corto… ella simplemente es el sol radiante de cada mañana -dije sonriendo, mirando al frente hacia el ring que estaba por ser ocupado por un par de agentes- un día llegue a Japón despojado de mi orgullo… de mi seguridad, de una intención clara por continuar… de siquiera un camino… y entonces ella llego un día, quizás al principio fui algo reacio a la idea de tener una huésped bajo mi techo, pero con el tiempo me di cuenta que ella era muy especial, sus sonrisa, su actitud, la manera en que camina, ese acento tan único… todo en ella me hizo querer continuar y volver a esta clase de vida, a soñar con una nueva vida

Me detuve por un segundo cuando me di cuenta de que había hablado demasiado, o que me abrí mucho, me gire con Dina… para no solo verla a ella con una expresión de asombro, sino a Catalina con ambos codos apoyados sobre la banca y su barbilla sobre sus manos, Mizuki y Janet mirándome con un par de sonrisas y Sloan levanto su pulgar cuando noto que los miraba:

-Eso es muy bonito, no sabía de ese lado suyo tan sensible, mariscal -dijo Catalina

-Nuestros seres queridos están siempre ahí para nosotros, lo mínimo que podemos hacer es protegerlos -dijo Dina con una sonrisa… puede que ella entienda mi sentir

-Qué bonito… me trae recuerdos de cuando mi padre remembraba sus días cuando salía con mi madre -dijo Sindri, para secar un par de lágrimas que se formaron en su ojo- oh dios… ¡D-Disculpen, me pongo algo sentimental a veces!... t-te extraño papá -dijo de repente alejándose un poco para tallar su ojo

-A veces la vida nos golpea… pero debemos levantarnos -dijo Janet sonriendo- y luchar por lo que más apreciamos

Sonreí y reí para mis adentros… si, no pudo haber mejor equipo:

-Bueno ¿Qué les parece ir a la galería de tiro? Quiero practicar un poco la puntería

-¡Vamos! ¡Apuesto a que le daré a más blancos que Sloan! -exclamo Catalina

-¡Quiero ver eso enana! ¡Si pierdes, me debes una botella de un escoces autentico!

-¡Y si tu pierdes me compraras dos pasteles del Uncle Rikuro!

-¡Hecho! -grito Sloan corriendo ambos a la salida del gimnasio

-¡Hey, ustedes dos, no salgan empapados de sudor, van a apestar la armería! -grito Mizuki persiguiéndolos para luego jalarlos hacia las duchas

Yo solo pude reír ante la usual actitud de mi equipo, será un buen cumpleaños…

Las horas pasaron y el turno había terminado, avise a Valeria que tendríamos un par de varios invitados de dimensiones algo grandes; ella se emocionó porque así podría ver lo eficiente de su diseño en la casa; y además pedí un transporte especializado por una aplicación llamada 'Monster truck' es algo así como una especie de Uber, pero con transportes adaptados para especies grandes:

-¿Segura que no vienes Dina? -pregunte a como ella quería volar

-Está bien mariscal, puedo volar y seguir el transporte de ustedes

-Hace tiempo que no salimos a vuelo -dijo el mariscal Barrick colocándose unas gafas de aviador- gracias de nuevo por invitarme mariscal García

-Es un placer -dije dando una reverencia- bueno, nosotros nos retiramos

-¡Vamos, que tengo hambre! -grito Catalina

-¡Oye, vamos a festejar al mariscal, compórtate enana! -grito Mizuki

-¡Cállate, acabo de perder contra el escoces, solo quiero comer algo y llorar en una esquina!

-Eres una mala perdedora, enana -dijo Sloan con un claro tono de orgullo

-¡Ya déjame, hiciste trampa!

-¡Ya cállense los dos, sus gritos se escuchan en toda la manzana! -y la que grito tan fuerte que hasta parecía sacudir las ventanas fue Janet

-Sera mejor irnos, antes de que se maten -dije tomando el volante, mientras Valeria se sentaba a mi lado derecho

-Son agradables, aunque… ¡¿Por qué dos de ellas son tan grandes?! ¡De por si me siento pequeña a tu lado y al de Amanda!

-No es mi culpa que la corporación contrate especies tan grandes, además, tu misma dijiste que podrían darte más información sobre el diseño de moradas especializadas

-Y-Ya sé, pero no pensé que fueran tan altas… pero bueno, me alegro de que ya estés aquí hermano -dijo sonriendo- ¡Ahora a festejar! Amanda y yo preparamos todo un festín

-Eso solo me hace querer llegar pronto a casa -dije arrancando el vehículo y pronto avanzando, con el vehículo donde van los otros invitados, siguiéndonos- ya quiero verla

-Y ella a ti, son una hermosa pareja ustedes dos

-Gracias… espero que así siga -dije sonriendo al pensar en Amanda

Algunos minutos pasaron y llegamos a lo que es mi nuevo hogar, mi equipo bajo del vehículo y pague al chofer:

-¿Esta es su casa? -cuestiono Janet

-El sueldo de mariscal sí que es bastante bueno… -dijo Catalina por lo bajo- ¡Es bonita!

Escuche un fuerte aleteo y pronto Dina descendió desde los cielos, con Barrick en sus garras:

-Gracias querida, un aterrizaje suave -dijo el mariscal retirándose el equipamiento, Dina no se evitó sonreír y note como la punta de su cola se agitaba ligeramente de lado a lado, parece ser algo común en las especies con cola

-Bueno, ya estamos aquí, por favor, pasen -dije abriendo la puerta para mi equipo, aunque apenas abriéndola pude ver a mi familia, Amanda y a Harumi

-¡Feliz cumpleaños! -gritaron al unisonó

-¡Felicidades Robie! -exclamo Amanda pronto corriendo hacia mí para abrazarme… no pude tener mejor recibimiento- ¡Me alegra mucho que estés aquí! ¡Ven, preparamos todo un festín para ti! ¡Oh! ¡Y para tu equipo también! ¡Hola, mucho gusto, soy Amanda Bellerose! -saludo animadamente, parecía mucho más emocionada que de costumbre, incluso dio un par de pequeños saltos a la hora de saludar- ¡Es un placer conocerlos!

-El placer es nuestro -dijo Janet dando una reverencia al mismo tiempo que el resto de mi equipo

Pronto los presente a cada uno de ellos, y Amanda los saludo con una gran sonrisa y un apretón de manos:

-Oh, y ella es Sindri, no es parte de mi equipo, pero es una armera que trabaja en la corporación, ella ayudo en la elaboración de mi prótesis y un encargo para un arma

-¿Ayudaste a fabricar la prótesis de Robie? -cuestiono ella curiosa

-Los doctores se encargan de lo importante, circuitería y todo eso, pero yo me encargue de fabricar el armazón exterior y algunas piezas

-¡Muchas gracias! -como es habitual de ella, no se demoró en demostrar su gratitud, abrazándola y levantándola del suelo- ¡Gracias a eso Robie puede caminar! ¡Muchas gracias!

-¡Oh! ¡No hay de que! -tomo a Sindri por sorpresa entre sus brazos, pero no pareció incomodarse o enojarse, solo se sorprendió

Luego de eso ingresaron a mi hogar, saludando a mis padres y algunos tíos que también asistieron, Harumi también había asistido junto a su anfitrión y pareja, un joven llamado Uruma.

Pronto los invitados se pusieron cómodos, aunque nos movimos al patio trasero donde cabíamos mejor, y podíamos charlar sin mucho problema, será una gran reunión…


POV Narrador


El ambiente en la nueva morada del soldado se había reavivado con la llegada de este.

Siendo el cumpleañero, pronto su familia e invitados lo felicitaron, además de los llegados que el invito no tardaron en saludar a la familia del soldado, y sentir esa vibra del ambiente familiar y hasta cierto punto, el ambiente latino más animado:

-Me alegra que hayas llegado hijo -dijo la madre del soldado abrazándolo, este agachándose para alcanzar a su madre- que cumplas muchos años más, hijo

-Gracias mamá -ambos hablaron en español- espero que así sea

-Felicidades hijo, ven aquí -dijo su padre, ambos estrechando sus manos y jalándose entre sí, chocando sus hombros y dándose un par de palmadas en sus espaldas- mírate… aun es difícil creer lo mucho que crecen -dijo el padre del soldado sonriéndole

-Puede que hayas crecido mucho, pero seguirás siendo nuestro pequeño -dijo la madre del soldado acercándose a su esposo, ambos sonriéndole a Roberto

-G-Gracias mamá, papá -dijo el soldado rascando su nuca- bueno, será mejor salir, aquí esta algo apretado

El soldado siendo acompañado de cerca por Amanda y Valeria salieron hacia el patio:

-Pasen, adelante, con toda confianza -dijo la madre del soldado- la comida esta lista, pueden servirse cuanto guste

-Muchas gracias -dijo Mizuki dando una reverencia- es un placer conocerlos

-El placer es nuestro

-Huele bien -dijo Catalina- ya quiero probar algo de esa comida

-Estoy hambriento -dijo Sloan- no rechazare comida gratis

-¿Acaso no piensan en algo más que comida? -cuestiono Janet de brazos cruzados

-Solo tenemos hambre -dijo Sloan tomando un plato desechable de la mesa que está a un lado del asador, donde el soldado ayudaba a servir algunos de los cortes- anda, que tú debes estar igual

-Solo cállate -dijo Janet también tomando un plato y formando una pequeña fila tras el asador, donde Roberto estaba ayudando a servir los platos

Los primeros a quienes sirvió fue a Catalina, Sloan, Dina y Barrick; con la wyvern sirviéndole una porción doble pues la diferencias de tamaños en las especies con los humanos es bastante notable.

Siguieron Mizuki, Janet y Sindri en la fila:

-Dios santo ¡Esto está muy bueno! -exclamo Catalina probando la comida- El brisket… solo se derrite en tu boca

-Nunca pensé que podría tener una consistencia así -dijo Sloan asintiendo- Y la salchicha polaca con relleno de queso es genial

-Dejen de estar hablando con la boca llena -dijo Mizuki uniéndoseles a un lado para dejar que sirvan a la tarántula y ciclope

Pronto ya todo el equipo del soldado disfrutaba de la comida, y era notorio en sus expresiones que la comida tiene muy buen sabor:

-¿Quién es el chef? Tengo que felicitarlo -dijo Catalina preparando un taco a como les enseño el mariscal que también se sirvió un plato junto a Amanda

-¡Esa soy yo! Y bueno, también Valeria -la mencionada escucho su nombre pues estaba a unos pocos metros charlando con sus tíos, y tan solo saludo a Amanda

-Todo está muy bueno ¿Cómo hicieron que el brisket quedara así? -pregunto Sindri

-Fue un ahumado lento y largo, fueron creo que unas 10 horas de ahumado

-Oh ¿Valeria te compartió mi receta? -cuestiono Roberto, a lo que Amanda asintió- ya decía yo que me parecía similar, les quedo muy bien

-10 horas, vaya, sí que eso es mucha paciencia -asintió Sindri- cedería luego de 3 horas, pero quedo muy bueno

-Oye enana, no te acabes la salsa -dijo Sloan

-Solo me estoy sirviendo bien -dijo la saltarina cubriendo el interior del taco

-Deberías tener cuidado -dijo Roberto- es de jalapeño, y sé que en japón no se consume mucho picante

-Solo son chiles machacados, no creo que sea para tanto

Luego del primer mordisco el equipo de Roberto entre risas y alcanzando por algún vaso con agua fue testigo de cómo la pequeña aracne se coloraba su cara de su color blanco a uno rojo, mientras pedía por agua, mientras su cara ya se notaba el sudor.

Sloan y Mizuki no se evitaron burlarse, mientras que Sindri y Janet el dieron un par de vasos con agua fresca.

Luego de ese pequeño percance con la salsa; y que se dieran cuenta que no tenían que abusar del picante; siguieron disfrutando de la comida y el ambiente:

-Entonces, Sindri -hablo Amanda, mientras Roberto ya se tomaba el tiempo para saludar a cada uno de sus tíos y compartir algunas palabras con más detalle- ¿Cómo conociste a Roberto? -pregunto la minotauro desde el porche trasero de la casa, donde dejo la carne en el asador a fuego muy bajo, permitiendo que se mantenga a buena temperatura

-Solo fue un encuentro casual -dijo la ciclope con una sonrisa, mientras limpiaba su boca con una servilleta- él estaba buscando probar armas y se topó con mi puesto en la armería; hago algunas armas personalizadas; y como compartimos gustos de comics y videojuegos, bueno, deje que probara algunas de mis armas, es alguien bastante agradable

-Si, es un gran hombre y una gran pareja -dijo la minotauro volteando hacia donde está el soldado- y como tal muy cariñoso

-Me imagino, por cierto, tu nombre completo ¿Cuál es?

-Amanda Dufort Bellerose ¿Por? -cuestiono la minotauro extrañada, entonces Sindri esbozo una gran sonrisa

-Bueno, el mariscal me encargo una vez un arma especial; una pistola semiautomática con función de disparo a ráfagas; y me pidió ponerle un grabado que dice 'Bellerose' a un lado

-¿Eh? ¿E-Enserio? -cuestiono la minotauro sorprendida y hasta algo extrañada

-Así es, me dijo que era el nombre de alguien muy especial para él, y que quería de alguna manera tenerla a su lado en sus misiones

-Robie… n-no sabía de eso

-Me pareció un lindo detalle -sonrió Sindri- ahora que te conozco ya puedo ver a quien se refería ¿Eres su huésped?

-Si, y pensar que antes solo éramos huésped y anfitrión -dijo la minotauro suspirando, mirando hacia donde está el soldado cargando a uno de sus sobrinos menores y charlando con sus primos- La vida sí que nos da sorpresas

-Ya lo creo -asintió Sindri a su lado- por cierto, todo está muy bueno, sí que cocinas bien

-¡Gracias! La verdad es que me gusta mucho cocinar, me alegra que les gustara la comida

-No se compara a la comida de otras parrilladas que eh asistido; ni siquiera la de la corporación en su aniversario 60 estuvo tan buena la comida, y eran muchos más cocineros -dijo la ciclope soltando una pequeña risa por lo bajo

-¡Amanda! Disculpa -llego la pequeña aracne dando unos pequeños saltos, acompañada por detrás de sus compañeros de equipo- ¿Aun queda algo del brisket? Mi compañera peluda aún tiene algo de hambre; esta gorda, pero según ella es de huesos anch-

Fue interrumpida por un golpe en su nuca por parte de la tarántula, a lo que la saltarina solo se quejaban mientras sobaba su nuca:

-Ella quiere saber si puede servirse otro plato… y si también yo podría

-¡No me pegues! ¡Solo bromeaba! -exclamo la saltarina sobando su nuca

-¡Pues no me gustan tus bromas! ¡Me haces ver como si estuviera gorda!

-Bueno… no es que yo mienta

Y la saltarina volvió a recibir otro golpe, mientras Amanda se veía extrañada por la manera en que convivía el equipo de Rob, por otro lado, Sindri solo aguantaba la risa:

-¡No se preocupen! Hay mucha comida, queda suficiente del brisket y los demás cortes

-Te lo agradezco -dijo Janet sonriendo

Aunque las aracnes eran las que pedían por una segunda porción, el resto del equipo de Roberto también entrego sus platos para que les sirvieran, Amanda camino hasta el asador y ahumador donde mantenía los cortes de carne a una buena temperatura para evitar que se enfriaran:

-Entonces ¿Cómo es que Roberto se volvió parte de su equipo? -cuestiono Amanda mientras servía más comida

-Nuestro equipo ya estaba conformado -hablo Janet cruzada de brazos- faltaba un mariscal y pensábamos que nos asignarían a algunos de nuestros compañeros en el entrenamiento, o que uno de nosotros seria dado con ese cargo, el llego de sorpresa

-Fue una sorpresa -comento Mizuki- pero con el tiempo pudimos ver que se merece el puesto

-Robie es alguien muy hábil, y valiente -dijo la minotauro entregando algunos platos servidos- ¿Les conto de su entrenamiento en Rusia y Medio Oriente?

-No ¡Cuéntenos! -exclamo Catalina mostrándose curiosa, y los demás de su equipo estaban escuchando con atención

-Bueno, él fue recibido por amigos de un familiar suyo que es de un puesto alto en el ejército mexicano -empezó a narrar aquello que recordaba la minotauro; no a mucho detalle; pero si lo necesario y con gran emoción- lo enviaron a rusia y un Spetsnaz lo entreno en Sambo ¡Incluso lo hicieron cazar un oso! ¡Y por supuesto el logro derrotar a la bestia! Y le dieron su aprobación, me dijo que fue muy duro, pero ese entrenamiento el hizo ganar resistencia y aprender muchas cosas, lo mismo en el medio oriente, donde le enseñaron de tácticas de supervivencia y Krav Maga, ambos le dieron un par de amuletos como prueba de que sobrevivió por ese intenso entrenamiento… solo me hace admirarlo más -dijo la minotauro suspirando con una gran sonrisa

-Vaya, eso no lo sabíamos del mariscal -comento Sloan- parece que no solo es alguien con buenos reflejos y de gran estatura

-Y tu despreciándolo, peluda -comento Catalina

-Te portaste igual aquellos días, enana

-¿Despreciándolo? -cuestiono Amanda extrañada- ¿Ocurrió algo?

Ahí entonces el equipo entero del soldado exceptuando al a wyvern y escoces se mostraron incomodas, Catalina recayendo en lo que dijo se centró en comer, mientras Amanda los miraba extrañada, cuando Catalina estaba a punto de inventar una historia, Dina hablo:

-Los primeros días de trabajo a ellas no les caía muy bien que el fuera el mariscal, así que desobedecieron algunas órdenes y no lo veían como nuestro jefe

-¡Dina! ¡No lo digas de esa manera, nos haces ver como las malas!

-Tenemos que ser honestas

Catalina se quejó ligeramente, pero luego rio de manera incomoda:

-Si… b-bueno… e-en nuestra defensa no lo conocíamos bien… pensábamos que simplemente era un amigo de los entrenadores o algo… ¡Pero nos dimos cuenta de que si es un buen líder!

-Simplemente tenía que ganarse nuestro respeto -comento la tarántula- y lo hizo… puede que no haya sido las mejores decisiones, pero el que alguien llegara de la nada y sea el responsable de nosotros sin que lo conozcamos no me agrado mucho… pero el mariscal no tardó mucho en demostrar que merece nuestro respeto, por cierto, la comida es muy buena, de verdad, mi casera casi no cocina tanta carne, y todo esto simplemente es un manjar

-¡Me alegra que les guste! Solo quería preparar lo mejor para Robie y sus compañeros -dijo la minotauro con una sonrisa- y bueno… la verdad no sé cómo puede ser un trabajo así, pero, es bueno saber que confían en Roberto

-Dígaselo a ellas, por algo lo pusieron de mariscal, pero les gusta ser dramáticas -dijo Sloan con una sonrisa

Luego de ello el soldado regreso a donde estaba Amanda y su equipo, la minotauro tan solo lo abrazo y siguieron charlando con el equipo de Roberto, de ahí siguió el momento del pastel, la familia del soldado le cantaba las mañanitas mientras que los compañeros de trabajo del soldado no sabían muy bien que hacer, simplemente se unieron a los aplausos y sonrisas además de felicitaciones, luego repartieron rebanadas del pastel a cada invitado y la fiesta continuo.

Ya para la noche algunos invitados comenzaron a retirarse, entre ellos los compañeros del trabajo de Roberto, luego siguió su familia hasta que los últimos en irse fueron sus padres y hermana:

-Hasta luego hermano -dijo Valeria dándole un abrazo- espero que te haya gustado

-Siempre disfruto pasar tiempo con mi familia -sonrió el soldado- muchas gracias a todos, de verdad

-Gracias a ti, hijo -dijo el padre de Roberto, luego de eso, ya finalmente se retiraron, con Amanda y Roberto despidiéndose desde la puerta de la casa y luego ya entrando

Si bien los invitados antes de retirarse ayudaron a recoger todo y acomodar algunos muebles y sillas, aún quedaba por limpiar platos y cubiertos.

La pareja siguió con la limpieza del hogar, empaquetando la comida sobrante, y recogiendo cubiertos, platos y vasos que usaron los invitados.

Les tomo solo algunos minutos, y mientras la minotauro terminaba de lavar sus manos, el soldado se acercó por detrás de ella, para abrazarla:

-¿Te gusto la sorpresa, Robie? -pregunto con una minotauro, colocando su mano sobre la del soldado

-Mucho, fue la mejor sorpresa de todas- el soldado se colocó de puntillas para alcanzar a besar la mejilla de la minotauro, esta sonrió

-Por cierto, aún falta mi regalo -dijo la minotauro sonriendo, y con un ligero sonrojo

-Oh, es cierto, bueno -entonces el soldado rompió el abrazo y dejo que Amanda se girara, el esperando a este

-E-Esta arriba ¡Vamos! -Amanda tomo la mano de Roberto y ambos caminaron hacia las escaleras, para llegar al segundo piso donde está la recamara de los dos, con cada paso, el nerviosismo de la minotauro subía, además de su corazón latía aún más rápido- tu espérame aquí ¡Y cierra los ojos! Es una sorpresa

-Muy bien, como tu digas -dijo el soldado cerrando los ojos

Amanda se giró y camino hacia el ropero, pero se detuvo antes y pudo ver a Roberto entreabrir sus ojos:

-¡No hagas trampas!

-Está bien, perdón -dijo riendo ligeramente el soldado, cerrando ambos ojos de nuevo- solo tengo curiosidad

-S-Solo espera, Robie

Ahí la minotauro tomo el paquete, tomo una gran bocanada de aire y lo dejo salir por su nariz, asintió para ella misma y comenzó a cambiarse de ropa ahí en el ropero, estando algo nerviosa de que el soldado se llegara a levantar y la buscara, pero Roberto solo esperaba pacientemente sentado en la cama.

Mientras la minotauro se cambiaba, colocándose las prendas de lencería su sonrojo solo aumentaba, aunque ella estaba contenta de que la tela fuese tan suave y la ropa en sí muy cómoda, cuando finalmente tenía todas las prendas puestas se detuvo en el muro antes de salir a donde el soldado esperaba, su corazón latía muy fuerte, ella casi sentía como si se le fuera a salir del pecho.

Su mente era un desastre, dándose ideas desde donde ambos se unen en un beso cálido y la noche pasa a ser la mejor para los dos… hasta el soldado rechazándola; incluso cuando el amor en ambos es tan palpable; simplemente los nervios y que es su primera vez, la consumen.

Pero ella solo cerro sus ojos y salió del muro, siendo que el soldado seguía con los ojos cerrados y algo extrañado, Amanda estaba frente a él, a un par de metros sonrojada, y con sus brazos detrás de su espalda, aunque pronto los movió al frente, sosteniendo su brazo derecho con su mano izquierda, pasando su brazo por debajo de sus senos:

-Y-Ya p-puedes abrir los o-ojos -dijo Amanda con ese gran bochorno

-No te preocupes Amanda -dijo el soldado notando el tono de nerviosismo en la voz de la minotauro- cualquier que sea el regalo, me gust-

Al abrir los ojos y ver a la mujer que ama ante él, portando esas ropas reveladoras el soldado no pudo hacer nada más que guardar silencio, pero mirarla con ambos ojos bien abiertos, Amanda esbozo una pequeña sonrisa y sus orejas bajaron ligeramente:

-¿T-Te gusta? P-Pensé que… b-bueno, t-tu y yo, ya somos muy cercanos y… b-bueno, ya sabes

-Si… yo… luces espectacular

Ante esas palabras Amanda se sentía mejor, esbozando una mayor sonrisa, pero entonces Roberto se levantó de la cama y camino hasta ella, estando ya uno frente al otro, Roberto se adelantó y tomo las manos de Amanda, jalándola hasta él y ambos uniéndose en un beso profundo, pero que pronto se volvió en uno más apasionado.

La minotauro fue tomada con la guardia baja, Roberto la sujeto de su cintura y la pego a él, para en el beso pasar del simple contacto de sus labios a los roces entre sus lenguas de ambos, pronto ambos en ocasiones emitían ligeros sonidos de placer, Amanda llevo sus manos al tronco del soldado, apretando ligeramente para sentir el cuerpo del hombre, especialmente su abdomen forjado al fuego del combate y ejercicio rutinario, mientras que Roberto acariciaba con delicadeza la cintura y cadera de la minotauro, siguiendo con ambas manos lo bien delineada de su figura esbelta.

El soldado empezó a dar pasos hacia atrás, hacia la cama, y la minotauro le siguió, ambos estaban ahí, simplemente sumidos en el momento, en el placer de sentir el calor y cuerpo del uno y del otro.

Llegando ya a la cama, Roberto se giró para luego que Amanda se dejara caer de espaldas en la cama y el soldado estando encima de ella, con ambas manos apoyadas en el colchón.

Rompieron el beso y se separaron, Amanda al notar que estaba bajo el soldado, simplemente se sonrojo, mientras que Roberto le regalo una cálida sonrisa:

-Luces… radiante, como la mujer más hermosa que eh visto en mi vida

-Robie, no digas eso, me sonrojas mucho -la minotauro simplemente llevo ambas manos a su cara, tapando el sonrojo evidente en su rostro, pero sintiéndose muy feliz por los halagos que recibe del soldado- y tu como mi caballero de armadura azul -dijo la minotauro sonriéndole al hombre que ama, retirando sus manos de su rostro- ¿P-Puedo?

Con el movimiento de sus ojos el soldado supo que ella quería ver más del tronco del soldado:

-Adelante -dijo Roberto sonriéndole

Amanda rio ligeramente y movió sus manos para desabotonar la camisa de Roberto, con los primeros botones moviendo sus manos lentamente, inclusive jugueteando con estos, pero a cómo iba por la mitad y sentía más del cuerpo del soldado, apresuro su paso, para finalmente retirarle la camisa, el soldado por un segundo separándose de su posición, donde tiene a Amanda debajo de él, y Roberto quitándose la segunda camisa blanca, tirándola por el borde de la cama y volviendo a estar sobre Amanda, la cual solo abrió ambos ojos ampliamente y pudo ver mejor el tronco musculoso del soldado, demostrando no solo los frutos de ejercicio diario y arduo, sino también sus marcas de combate.

Cuando Amanda paso sus manos desde el abdomen, hasta el pecho de Roberto, este le sonreía a la minotauro, aunque luego se preocupó un poco, especialmente por tres cicatrices algo prominentes en su abdomen, siendo las principales que aquel oso en Rusia le dejaron:

-Se que son algo vistosas… espero que no me hagan ver tan mal -comento el soldado

-Para nada, querido -dijo la minotauro sonriéndole, moviendo su mano hacia la cabeza de Roberto, sobando su mejilla suavemente- simplemente me hacen recordar el gran guerrero que eres, las batallas que has librado… y-y bueno -ahí ella hizo una seña y el soldado bajo su cabeza, para que ella pudiera hablar cerca de su oído- las cicatrices te hacen ver más varonil y sexy, mi apuesto guerrero -le susurro la minotauro al oído

Eso solo pudo acelerar aún más el corazón de Roberto que ya de por si estaba latiendo muy fuerte, este sonrió y se unieron en un beso, aun mas apasionado, y el soldado finalmente guio su mano de la cama hacia el cuerpo de Amanda, desde su cintura hasta los senos de la chica, comenzando a masajearlos, ella solo pudo gemir ligeramente, sintiendo el tacto del soldado y ese beso tan apasionado.

Pero entonces Roberto corto el beso y comenzó a besar la mejilla de Amanda, para luego dirigirse al cuello de ella:

-Oh… Ah… s-se siente bien -dijo la minotauro sintiendo lo cálido de los labios del soldado en su cuello

El soldado entonces bajo su cuerpo, pegándolo más al de Amanda para con sus dos manos masajear ambos senos de la minotauro, y está sintiendo el tacto de ambas manos fuertes solo dejo caer su cabeza en el colchón y seguía gimiendo por lo bajo, sintiendo como el soldado bajaba de su cuello hacia el hombro de Amanda, para luego bajar a los senos de la chica con su boca y lengua, explorando los prominentes atributos de Amanda por encima, causándole a ella ligeros gimoteos y que se sacudiera ante lo cálido de la lengua del soldado.

Roberto se tomó un momento y dejo de lamer los senos de la chica, subió para besar suavemente la mejilla de la chica, y le retiro el sostén, para revelar los atributos de la chica que muchas veces se han ganado la atención de los ojos del soldado:

-S-Son algo grandes… -comento Amanda algo sonrojada- ¿No crees?

-Si, y me gustan mucho -dijo el soldado sonriéndole y bajando, para besar cerca de los pezones de Amanda

La minotauro ante el repentino movimiento y que el soldado la elogiara así solo pudo gemir algo más sonoro y dejarle seguir, el soldado masajeando ambos senos y lamiendo cerca de los pezones de ambos, provocándole gemidos y que Amanda se sacudiera ligeramente.

Roberto siguió así, masajeando los senos de la chica y lamiendo alrededor de los pezones de ella moviendo su lengua en forma de circulo, sabiendo que eso le provocaba a ella gemidos y sacudirse del placer, el soldado no quería detenerse:

-Así… ah… mas -decía la minotauro con ambos brazos sobre la cama, sintiendo el tacto del soldado

El soldado masajeaba y apretaba suavemente los senos de la minotauro, haciéndola gemir y retorcerse del placer.

Luego de un momento el soldado bajo más y ayudo a Amanda a subir en la cama, para el estar en el borde y bajar hasta la intimidad de la chica. Amanda sintió las manos de Roberto retirándole su prenda inferior, y ella solo se sonrojo notoriamente, bajando la mirada a donde estaba el soldado, y antes de que ella pudiera decir algo, el soldado comenzó a tocar alrededor de la zona erógena de Amanda que esta se sacudió ligeramente y dejo escapar un ligero gemido, entre toques y caricias a esa zona y los muslos de Amanda ella solo estaba sobre la cama gimoteando, con sus ojos cerrados y mordiendo ligeramente sus labios, pronto el soldado comenzó a usar su boca para complacer a su pareja y esta simplemente comenzó a gemir de manera más sonora:

-Ah… ¡Así! ¡Mas Roberto! -exclamo de repente la minotauro, mientras ella sentía como el soldado usaba su lengua para complacerla

El soldado sonrió y mantuvo el ritmo, guiándose por los gemidos de Amanda la cual estaba disfrutando cada sensación que Roberto le provocaba, llego un momento donde el soldado comenzó a moverse más rápido y usar más sus dedos para tocar el clítoris de Amanda que esta simplemente no lo pudo contener.

Sintiendo como el clímax aumentaba y ella lo sentía por toda su columna ella dejo escapar un gemido sonoro, mientras arqueaba su espalda y todo su cuerpo se sacudía del placer, el soldado siguió por unos segundos hasta que se detuvo, levantándose y ver a Amanda aun sacudiéndose por el clímax y gimoteando sobre la cama, hasta que el clímax paso y ella logro recuperarse, para volver a mostrarse apenada ante Roberto:

-Eso… ah… se sintió maravilloso -dijo Amanda sonriéndole al soldado, recuperando el aliento, ella entonces miro como el soldado se retiraba el cinturón y logro recuperarse, para sentarse al borde de la cama- no, yo me encargo -dijo Amanda tomando las manos del soldado y mirándolo a los ojos

-Muy bien -dijo Roberto apartando sus manos- adelante

Amanda sonrió y termino de retirarle el cinturón, ella noto como en esa zona frontal del pantalón el soldado tenía un bulto, ella lo toco y sintió el miembro del soldado, ella se sonrojo y alzo la mirada para reír ligeramente.

Finalmente desabotono el pantalón y bajo la cremallera de este para retirárselo, ya cuando finalmente le quito el pantalón a Roberto ella pudo ver con claridad la erección del soldado bajo sus boxers, y ya con poca paciencia los bajo, para revelar el miembro totalmente erecto de Roberto:

-Mon dieu… est très grand -exclamo la minotauro parpadeando varias veces, teniendo sus manos sobre la cadera del soldado, sin despegar su mirada

-Adoro cuando hablas en francés -comento el soldado- es simplemente… tan sexy

Amanda rio ligeramente ante el comentario y tomo el miembro del soldado, tocándolo con delicadeza, Roberto bajo su mano y la guio, haciendo que moviese su mano de abajo hacia arriba, comenzando a masturbarlo lentamente:

-Oh ¿Así se siente bien? -cuestiono Amanda mirando hacia arriba

-Si… tu tacto es tan suave

-Gracias -sonrió Amanda, su cola se sacudía de lado a lado ante la felicidad y todo lo que estaba experimentando- es tan largo y grueso… quizás… ¿C-Crees que quepa en mi boca? -pregunto Amanda con cierto tono de curiosidad y casi inocente, característico de ella

-Bueno, solo hay una manera de averiguarlo -dijo el soldado sonriéndole- solo no te atragantes

-No te preocupes -ahí ella le guiño- tendré cuidado

Amanda entonces bajo y abrió su boca, movió su cabeza hasta que introdujo el pene de Roberto en su boca, cerro sus ojos y comenzó a mover su cabeza, el soldado suspiro pesadamente y cerró los ojos, disfrutando de la sensación cálida y húmeda de la boca de Amanda, ella movió su boca lentamente hasta que ya no pudo introducir más en su boca; no era más que la punta y un par de centímetros del miembro de Roberto, ella entonces se movió hacia atrás y comenzó a imitar el movimiento que hacía con su mano hace unos momentos, pero solo con su cabeza, en ocasiones deteniéndose solo en la punta para usar su lengua, sabiendo por los sonidos de placer proviniendo de Roberto que estaba disfrutando de eso.

Ella siguió así por algunos minutos, en ocasiones deteniéndose para retomar el aliento y masturbar el miembro del soldado, ella ya se notaba muy sumida en el placer, ambos, y querían continuar, no fue hasta que trato de introducir en su boca aún más del miembro que se detuvo por la mitad dando una ligera arcada y sacándolo de inmediato de su boca:

-¿Estas bien? -pregunto el soldado al haber escuchado

-Si… Robie, quiero más -dijo la minotauro levantándose ligeramente, restregando sus senos contra el miembro del soldado, mirándolo a los ojos, mostrándole una sonrisa y mirada que solo pedía más- Por favor, quiero sentirte

-Te daré todo lo que pidas, querida -dijo el soldado acariciando la cabeza de Amanda

Ella volvió a recostarse en la cama y dejo sus piernas más abiertas, Roberto se colocó encima de la minotauro, apuntando su miembro hacia la intimidad de Amanda, y cuando ambos estaban listos el empujo hasta penetrarla, le provoco un gran gemido que Amanda se sacudió ligeramente:

-¿Te lastime, me detengo? -pregunto el soldado, pues parecía que le dolió a su pareja

-N-No espera -dijo Amanda deteniéndolo- s-solo dolió un poquito, ya se siente mejor -dijo mirándolo a los ojos- sigue

-Muy bien

Entonces el soldado comenzó a moverse, al principio se movía de manera lenta, introduciendo poco a poco más de su miembro dentro de ella; tomando su tiempo para no lastimar a su pareja; Amanda por su lado estaba aguantando el aire al inicio, pero con el tiempo el dolor y lo inconfortable paso, y empezaba a sentir placer.

Luego de esos primeros instantes con movimientos lentos y teniendo cuidado, el soldado comenzó a moverse más rápido y yendo más profundo en Amanda, la cual solo estaba gimiendo, y el soldado también sentía placer entre cada movimiento, hasta que recordó algo importante:

-Demonios… d-discúlpame, Amanda, no sé cómo olvide algo así -dijo el soldado deteniéndose abruptamente

-¿Eh? ¿P-Porque te detienes? ¿A qué te refieres? -pregunto una Amanda muy extrañada

-Es solo, olvide la protección -ahí el soldado se separó de Amanda y se dirigió a la cómoda de un lado de la cama

-¿Protección? -Amanda movió su cabeza a un lado- Pero no estoy en celo

-Bueno, recuerdo haber leído algo así -dijo el soldado a mitad del camino, la minotauro solo se levantó y tomo la mano del soldado- s-solo… bueno, ya sabes

-No tienes que preocuparte Robie -sonrió la minotauro- el celo en nosotras se da cada dos meses, y fue hace un par de semanas que tuve el mío -ella entonces jalo al soldado para hablarle cerca al oído- podemos hacerlo cuanto queramos sin preocuparnos

Roberto solo parpadeo un par de veces y esbozo una sonrisa, y pronto ambos retornaron a la posición previa.

Pero esta vez el soldado estaba haciendo movimientos mucho más rápidos y yendo muy profundo dentro de la minotauro, la cual noto este cambio y estaba gimiendo más sonoramente, Amanda levanto sus brazos y rodeo la cabeza del soldado con estos, mientras gemía:

-¡Mas… Ah… así… Oh! ¡Sigue así! -exclamo la minotauro extasiada

El soldado sonrió y mantenía el ritmo, hasta que finalmente introdujo todo su miembro dentro de ella, dando largas y profundas embestidas, Amanda lo jalo hacia ella y el soldado logro acomodarse mejor, mientras seguía moviendo su cadera rápidamente:

-Ah… ¡Oh! ¡Robie… m-me vengo! -exclamo Amanda sintiendo como el clímax estaba cerca y el soldado seguía moviéndose

-Yo también… ya casi -dijo Roberto cerca del oído de ella, mientras se acomodaba mejor para ir tan profundo y rápido como podía

Al acelerar la minotauro solo gemía más fuerte, abrazando la cabeza del soldado y rodeando con ambas piernas la cintura del soldado, evitándole a Roberto despegarse de alguna manera.

Y casi al mismo tiempo ambos se corrieron, Roberto yendo profundo dentro de Amanda, corriéndose, y la minotauro sacudiéndose por el placer.

Luego de que ambos pasaran por el clímax estaban retomando el aliento, el soldado se despegó ligeramente, Amanda seguía teniendo sus brazos alrededor del cuello del soldado y sus miradas se unieron, ambos sonriéndose:

-Te amo, Amanda

-Y yo a ti, Roberto -dijo la minotauro con una sonrisa

-Yo… solo… quiero que esto dure, mucho tiempo más, eres la mujer que amo -dijo el soldado, sumido en el momento íntimo y pasional de ambos

-Y tú el hombre que amo -respondió la minotauro, inconscientemente ambos se movían ligeramente, sus caderas respondían al estímulo, el miembro del soldado manteniéndose erecto y la minotauro moviéndose ligeramente para continuar- yo… simplemente no puedo ver un futuro sin ti, mi querido soldado

-Ni yo sin ti, mi querida flor de lis -dijo el soldado comenzando a moverse- solo, sigamos juntos, y seamos felices

-No podría decirlo mejor, querido

Y así como la noche es joven, dejaron que el placer y el deseo los guiara.

Prolongado fue ese momento pasional entre los dos, con las prendas de ambos tapizando el suelo alrededor de la cama, y esta rechinando en ocasiones cuando el soldado o la minotauro; que en más de una ocasión tomo la delantera; se movían más rápidamente.

Del cuarto solo provenían esos sonidos de placer y de alegría entre los dos, siendo íntimos y dando el siguiente paso en la relación.

Pasada la media noche, y a pocas horas de que amaneciera, ambos compartían un baño, cansados, y con el deseo de echarse a dormir en la ducha, pero ellos querían compartir la cama:

-¿C-Crees que nos hayan escuchado? -dijo Amanda recargando su espalda contra el tronco del soldado, el cual la abrazaba por detrás, manteniendo sus brazos bajo el agua

-No lo creo, pero si lo hacen, sabrán bien el amor que nos tenemos -dijo el soldado con orgullo

Amanda por su lado se mostraba apenada y sumergió ligeramente su cuerpo y cabeza en el agua:

-B-Bueno… s-solo espero que no haya quejas

-Algunas casas todavía no han sido vendidas o terminadas, no te preocupes querida, la gente en Japón no mete sus narices donde no los llaman

-E-Esta bien -la mente de la minotauro era como hace varias horas, cuando la pena le ganaba de revelarse ante el soldado con la lencería puesta, un revoltijo, pero el sentir su mano derecha entrelazada con la de Roberto la tranquilizaba- espero que hayas pasado un feliz cumpleaños, querido

-Así fue, querida -dijo el soldado para luego besar la nuca de la minotauro, y acariciarla- y no pudo haber sido mejor, te amo

-Yo también te amo, querido -dijo Amanda cerrando sus ojos, disfrutando de las caricias de Roberto, y cuando sintió como este despegaba su mano de ella, Amanda solo tomo la mano del soldado y la jalo hacia ella- no te detengas, por favor

El soldado solo sonrió y siguió acariciando la cabeza de Amanda, mientras, ella solo disfrutaba de ese momento.

Luego de salir del baño, y ambos tener un cambio más ligero; e incluso haber cambiado las sabanas de la cama y recogido sus prendas previas por el desorden anterior; ambos finalmente estaban en la cama, acostados en esa postura de cuchara, el soldado pasando su brazo derecho por sobre la cintura de Amanda, para tenerlo sobre su abdomen y pegarla más hacia él, y la minotauro simplemente sonriendo para sí misma:

-Duerme bien Robie

-Tú también, rollito de canela

Con esto último, la pareja no tardo en ceder a los reinos de Morfeo, y dormir plácidamente, luego de que ambos, dieron el siguiente paso en su relación…


Notas del autor: Vaya, vaya, pues la escena intima entre la parejita ya se dio, se que muchos la pidieron desde antes por activa o pasiva, pero pues, el amor se siembra no solo con actos lujuriosos.

Y bueno, el amor ya es muy palpable entre la parejita, así que, subir algo la temperatura entre los dos y que den el siguiente paso ya era algo de esperarse ¿No?

Espero que les haya gustado el capítulo, mas por parte de que se progresa en el conflicto y especialmente la relación de ese tierno par.

¡Hasta luego!