Cursiva y negrita: RECUERDOS.

¡Disfruten!

Disclaimer: Los personajes y Dragon Ball no me pertenecen son de Akira Toriyama, solo algunos de los personajes que aparecerán conforme avance son de mi autoría.

Sólo escribo por hobby. No lo hago con el fin de lucro, solo los utilizo para sacar toda mi imaginación.

Vida nueva.

Capítulo 10.

Su día de descanso fue el peor que haya tenido en su vida siendo un completo desastre como ella misma lo catalogaba. No obstante, aquel accidente no quedaría impune, tenía que vengarse de esos dos adolescentes a como dé lugar con o sin la ayuda de Gohan, le gustase o no la idea. Empero, aquel pensamiento quedo en segundo plano.

¿Cómo un día tan normal paso a ser un día tan horrible?

Si bien, habían salido de paseo para relajarse del trabajo la cual Goten se encargó de llevarlos a una feria para pasar el rato. Lo único que pedía era estar un momento a solas con Gohan, disfrutar del día a su lado, disfrutar de su compañía sin que les hicieran comentarios algo incomodos para ambos y estar fuera del alcance de esas miradas tan picaras que sus tres acompañantes les lanzaban sin discreción alguna. No había duda, que la hija de Miguel pensaba que ese día el destino estaba de su contra.

¿Pintura?

¡Cómo era posible!

Irritada, Videl respiro profundo contando hasta diez para apaciguar su enojo contra esos dos mocosos adolescentes. Gracias a esas dos personas que les tendieron la mano para ayudarlos, la ojiazul estaba realmente agradecida que ni siquiera hubo la oportunidad de presentarse como se debía. Ya que sin la ayuda de esas dos personas no hubieran podido quitarse la pintura de encima, claro que, quitarse la pintura de una vez por todas no sería tan fácil pero tardarían días en quitársela totalmente.

Sin embargo, una que otra parte de su piel y cabello seguían manchados por el pigmento azulado y sin olvidar la ropa y calzado que ambos pelinegros llevaban ese día, que por desgracia, estaban completamente arruinadas. Videl otra vez bufo por la travesura de esos dos chicos, Goten y Trunks se metieron con la persona equivocada. Se metieron ni más ni menos con Videl Satán, la hija del excampeón mundial de artes marciales, hija del hombre que a pesar de todo es respetado. Claro que no se olvidó de Shapner Asa… otro dolor de cabeza para la hija de Miguel.

Caminaba lo más rápido posible para con su encuentro con el rubio. Si no salía de un problema entraba a otro; acción que puso los ojos en blanco. En verdad, ya se le estaba agotado la paciencia. No obstante, muchas preguntas empezaban a maquilarse en la cabeza a la dueña de ojos azules, ¿Qué demonios estaba haciendo en Capsule Corp.? ¿Que pretendía Shapner estando ahí? ¿Porque precisamente ellos dos? ¿Que no se cansaba de la misma situación de estar siguiéndola por doquier? Mientras tanto, Gohan la seguía de cerca pero al igual que la chica pelinegra no entendía por qué Shapner estaba en Capsule Corp.

Incertidumbre.

Ambos pelinegros llegaron al punto de encuentro, no sin antes dirigirse una mirada fugaz que ambos comprendieron a la perfección para luego fijar nuevamente su atención al rubio quien esperaba recargado en el cofre de su convertible negro último modelo.

―Vaya, vaya ―dice al verlos llegar juntos― a quien tenemos por aquí, a la presidenta de la editorial y a su secretario sabelotodo.

― ¿Qué haces aquí, Asa? ―cruza los brazos― y para tu información es mi mano derecha, mi A-SIS-TEN-TE ―hace énfasis en lo último dicho―. Que por cierto, ya lo sabes ¿no lo crees?

―Tal vez lo mencionaste mi querida Videl, eso que importa ―dice con una sonrisa ladeada haciéndose el tonto al no entender de lo que hablaba pero dándose cuenta de la pintura que era visible en ambos pelinegros― eso es pintura... ¿azul?

―Lo que me haya pasado no es de tu incumbencia.

―Ve al grano Shapner, qué haces aquí ―Gohan lo mira.

―Tranquilo campesino Son ―Shapner no perdió detalle alguno en el pelinegro ya que frunció aún más el ceño, sonriendo con satisfacción por el resultado que obtuvo en el hijo de Milk, entendió perfectamente que ese tipo de comentario hacia su persona no le había agrado del todo aunque si tenía que jugar sucio, jugaría sucio de aquí en adelante― contestare sus preguntas ―encoje los hombros― solo quise venir a visitarlos porque se les extraña muchísimo en la editorial por si no lo sabían. ¿Cuánto más se tardaran estando en este lugar?

―Sólo viniste a eso ―arquea las cejas el hibrido.

―Que considerado eres, Asa ―coloca ambas manos en la cintura― será el tiempo que sea necesario.

― ¡Hablan en serio! ―demostrando asombro.

― ¿Por qué, nos tienes una sorpresa? ―dice una Videl sarcástica.

Riéndose con desmesura, Shapner entendió el sarcasmo de la chica ya que la conocía perfectamente mientras se acercaba a ellos― cariño, mi amor, mi terroncito de azúcar ―sujeta con delicadeza el mentón de la chica de ojos azules― no sabes cómo extraño verte trabajar allá, extraño tu presencia, extraño todo de ti mi dulce Videl.

La hija de Miguel se queda callada ante el comportamiento del rubio, que tramaba ¿Poner celoso a Gohan? ¿Para eso estaba ahí? Desviando la mirada hacia Gohan quien observo un semblante serio que no había visto antes ¡Por Kami-sama! sí que lo estaba logrando.

Mientras tanto, Gohan no se quedaría con los brazos cruzados ante la acción y palabras del rubio, sujetándolo del brazo, los dos se miraron con rivalidad. Mientras tanto, Shapner soltó el mentón de Videl quien retrocedió unos cuantos centímetros. Molesta consigo misma, no estaba preparada para esa jugada del rubio, no permitiéndose ella misma en ponerle un alto al atrevimiento que este mostro.

Sintiendo su sangre hervir, el primogénito de Milk hizo más fuerte el agarré. Como se atrevía a decirle eso a su novia y luego enfrente de él, no se lo permitiría, no permitiría por nada del mundo que el rubio se acercase nuevamente a la chica de ojos azules. Hasta donde él sabía, Videl sólo lo consideraba como a un hermano que nunca tuvo, pero para Videl Satán sólo era eso... un hermano. En verdad, Shapner estaba cegado por un amor no correspondido haciéndose falsas ilusiones con la hija de Mark.

Celos.

Furia.

―Aleja tus manos de ella.

― ¡Oh, vaya! ―se mofa― te crees su guardaespaldas o que.

―No, no lo soy pero espero que sea la primera y última vez que te lo diga.

El rubio sentía fuertes pulsaciones en su extremidad pero sin mostrar algún signo de dolor en su rostro siguió con su postura. Como si una bombilla de luz le iluminase sus pensamientos, cierta curiosidad empezaba a crecer muy en el fondo de su ser, pretendía suponer que el erudito ocultaba algo y precisamente la fuerza que le aplicaba en su brazo hasta casi demolerlo en miles de pedazos que un ser humano normal y corriente no era capaz de hacer tal daño. Tal magnitud de fuerza solo lo poseía un "fenómeno" como aquellos sujetos que aparecieron en los Cell Games que poseían ese tipo de fuerza tan descomunal. ¡Eso es! sonriendo para sí mismo, Shapner dibujo una sonrisa en su rostro.

Lentamente baja su brazo para que este lo soltase, la cual Gohan entendió― si no fuera por tu comportamiento Gohan ―mira a la ojiazul― diría que estas celoso de mí, de un hombre como yo con dinero y accionista de una prestigiada editorial ―vuelve a fijar su vista en el moreno―. También, me da la impresión de que ocultan algo ―levanta el dedo índice para señalarle― fácilmente te delatas. Bueno, si eso quieres ya no lo volveré hacer, no creas que me daré por vencido. Además, tenemos algo pendiente por resolver Gohansito.

―Eso ya lo veremos, Shapner ―sin hacer caso a las palabras del rubio.

Videl se interpone entre los dos hombres para evitar alguna pelea que se suscitara― Vete Shapner y no vuelvas ―ordena― ¡Vete!

―De acuerdo ―la mira y se acerca para besarla cerca de la comisura de los labios; no obstante para el hermano de Goten no le pareció apropiado ese acercamiento tan provocador― nos veremos pronto, querida ―acaricia su mejilla. Videl, se había quedado sin habla. Ese atrevimiento de parte del rubio le costaría una discusión con Gohan, no había duda en eso.

El lado saiyajin de Gohan empezaba a renacer nuevamente en su interior, ese instinto que creyó muerto por años y claro que, después de mucho tiempo que no volvía a sentir tanta irá como cuando en los Cell Games si no hasta ese preciso momento con un problema llamado: Shapner Asa. Por un lado debía de tranquilizarse en no tratar de hacer una locura con Asa. Sin mirar a Videl se da la media vuelta para entrar a Capsule Corp. enfadado.

― ¡Kami-sama, ayúdame a salir de esto! ―implora mirando hacia el cielo nocturno. Siguiendo al pelinegro.

-o-

―Gohan, hablemos ―le dice siguiéndolo detrás de él.

Deteniéndose― Para qué, sí todo quedo muy claro ―dijo.

―Hay por favor, como que para que, da la cara Gohan ―frunce el ceño―. Por favor, no te comportes como un niño chiquito solo porque Asa vino a fastidiar ―cruza los brazos― ¿le vas a dar importancia a lo sucedido?, ¿estás de acuerdo que le estarás dando toda la satisfacción que busca?, eh…

―Tal vez…

Ríe― ¿te vas a rebajar a su nivel? ¡Por Kami-sama, lo que faltaba!

―Sé que no es lo correcto pero sí eso es lo que quiere Shapner, lo haré.

― ¡Óyeme, Son Gohan! Sí piensas hacerlo, estás loco ¡me escuchaste! ―dice enojada― presiento que alguien saldrá perdiendo en esto.

―Yo no seré ese quien tú dices.

―Bien, como tú quieras. Ni que yo fuera un trofeo para andarse peleando por mí ―coloca una mano en su mejilla negando con la cabeza de un lado a otro― yo no le pertenezco a nadie.

Gohan la voltea a ver estupefacto. ¿Que? ¿Qué había dicho? Su sentido auditivo había escuchado muy bien, "no le pertenecía a nadie"― Pues para él, lo eres ―la mira― ¿Crees que no me di cuenta de sus intenciones?, ¿Crees que no me di cuenta de lo que hizo ese… sujeto?, ¿Crees que no me di cuenta que no hiciste nada para ponerle un alto? ―coloca ambas manos en la nuca para reclinar la cabeza hacia atrás― ¡maldición!

Videl, desvía la mirada quedándose nuevamente callada. Por una parte, le daba la razón a Gohan, como pudo ser tan tonta de caer en ese juego de Shapner sin poder hacer nada al respecto ya que ella no era así, ciertamente, la había tomado por sorpresa. Pero sus acciones y palabras estaban claras, cometió un gran error.

Sin decir nada, Gohan decide irse para despejar y aclarar sus pensamientos pero principalmente, debía tranquilizarse para disipar su ira hacia el rubio, cerrando sus parpados inhalo hondo, prosiguiendo con su camino por el corredor que lo llevo directamente hacia la entrada de Capsule Corp., deteniéndose, Gohan da un cuarto de vuelta para dar un último vistazo relajado sus facciones sin dar vuelta al asunto continua su camino, tal vez sería mejor que las aguas se apaciguaran y darle un poco de espacio a Videl. Y dar un paseo nocturno por las calles de West Capital era lo mejor.

Como si no los notasen, los tres chicos que los acompañaban solo se quedaron viéndolos presenciando la pequeña escena entre los pelinegros.

―Espero que esto no termine mal ―dice el hijo de la científica.

―O peor, Trunks ―dice Goten mirando a su mejor amigo.

―Videl… ―la nombra la rubia.

La ojiazul se dio la vuelta, se había olvidado que estaban ahí presentes. Avergonzada por la situación, sale de la estancia dirigiéndose directo hacia su cuarto esperando que la situación se tranquilizase para así poder hablar civilizadamente con Gohan. Entrando a su cuarto, cierra la puerta de un portazo detrás de ella, la cual pone el seguro para que nadie la molestara, recargándose en ella cierra fuertemente sus ojos.

No es que fuese una egoísta pero ella no le pertenecía a nadie ya que no era un juguete por la cual jugasen con ella. Sin embargo, es muy diferente con Gohan ya que, ese chico le cautivo desde un principio sin que ella se diera cuenta de sus sentimientos no queriendo admitir que lo quería a su lado.

Caminando hacia el ventanal, toma el picaporte para abrir ya que la brisa golpeó su rostro al igual que su cabello corto bailaba por la intensidad que este soplaba, las cortinas de la habitación ondearon por la entrada del viento, por inercia acomodo un mechón de cabello detrás de su oreja dibujando una pequeña sonrisa en sus labios. Miro el cielo estrellado y lentamente se acercó al barandal del balcón colocando sus manos en el frío metal, sin quitarle la vista a la hermosa Luna que hacia acto de presencia en ese momento.

Paz.

Tranquilidad.

Y así se quedó por un rato deleitándose con el cielo nocturno. Ahora que estaba más tranquila, no obstante tenía todo claro, entendía los celos de Gohan hacia Shapner y por esa misma razón debía de ponerse en los zapatos de él… era posible que dos hombres peleasen por ella pero este ya no era el caso porque su corazón le pertenecía a Gohan porque claramente lo quería demasiado. Sin embargo, sí fuera en caso contrario, dos mujeres peleando por el amor del mismo hombre pero la hija de Mark comenzó a reír por tal locura tan descabellada― ¡que estupidez!, no creo que haya otra mujer más en la vida de MI Gohan ―agacha la cabeza para fijar su vista en sus manos.

Seriedad.

Miedo.

Negando con un movimiento brusco, no podía permitir que ese pensamiento la abrumara de sobremanera, si ese era el caso debía defender lo que le pertenecía aunque sonase posesiva con su novio. Dejando de sonreír, de ahora en adelante tendrían que lidiar con los celos y problemas que les deparara el destino mientras siguiesen juntos. Una relación no siempre es color de rosa y mucho menos perfecta…

-o-

Caminando por las calles, su mirada azabache miraba por doquier, Gohan trataba de distraerse viendo cada establecimiento de West Capital que se le cruzaba en el camino, había olvidado lo grande y avanzada que era esa urbe gracias a Capsule Corp. por las grandes aportaciones o más bien dicho por los grandes inventos para el área de la tecnología innovándose en ese ámbito, es gracias a la familia Brief quien es mundialmente reconocida en todo el globo terráqueo.

Deteniéndose para observar la vitrina que contenía un sinfín de artículos brillantes, inmerso en sus pensamientos, estaba dispuesto a comprar un objeto pequeño para su novia, sin ni siquiera pensarlo dos veces pone sus pies en el local. Estaba seguro que a Videl le gustara, solo debía escoger algo sencillo que fuera otra parte de ella. Después de un rato de observar todo, por fin se decidido en uno en específico, satisfecho con su compra una sonrisa se instaló en sus labios. Era momento de regresar a Capsule Corp., mirando la caja alargada que llevaba en su mano derecha, empezó su andar y al no darse cuenta por donde iba choco con una persona.

― ¡Oh! Disculpe, no me di cuenta por donde caminaba.

―No te preocupes… ―ladea la cabeza al darse cuenta quien era el chico― vaya, nos volvemos a encontrar ―sonríe.

Alzando la mirada, Gohan se sorprende ya que era la chica que les ayudo hace algunas horas― H-Hola…

―Se nota que vienes distraído ―entrecierra los ojos recordando su nombre ya que había escuchado a la chica ojiazul nombrarlo― ¿Gohan, no es así?

―Ah sí ―saliendo de transe― Son Gohan, mucho gusto ―extiende su brazo.

― ¿Son… Gohan? ―sorprendida― ¿Eres tú, Gohan?

―Disculpa pero… ¿te conozco? ―dice.

― ¡Claro que si me conoces, tonto! ¡Soy Lime! Soy la niña que salvaste hace muchos años atrás cuando caí al rio donde desembocaba hacia una cascada.

― ¿Lime? ―boquiabierto. Vaya, sí que no la reconoció. A decir verdad se había convertido en una hermosa mujer. Admitió.

―Sabía que esa mirada me era familiar, mi instinto no me fallaba ―corre a abrazarlo.

Gohan al sentir como aquellos brazos femeninos lo rodeaban la cual lo tomo desprevenido por la acción de la castaña la cual hizo que se sonrojase pero sin corresponder el abrazo de la chica.

―Eres un malagradecido ―separándose un poco― prometiste visitarme y nunca lo hiciste… oye ―recordando cuando lo conoció ya que lo tenía de color rubio― ¿Qué le paso a tu cabello?

―Lo… lo siento ―coloca una mano en su cabeza apenado― es una larga historia.

Alegándose un poco más― no has cambiado en absoluto ―sonríe― sigues siendo tímido y respetuoso a la vez.

El hijo de Goku solo atina a reír torpemente.

Mirando el reloj de su muñeca izquierda― bueno te dejo ―sacando una pequeña libreta de su bolsa empezando a anotar con un bolígrafo para después arrancarlo y dárselo― llámame ¿sí?, para platicar en algunos días de estos ―le guiña.

Gohan toma el papel y observa que estaba escrito el número telefónico de su amiga de la infancia.

Acercándose tímidamente se pone de puntitas para depositarle un beso en la mejilla ―nos vemos y… ya no crezcas por favor.

―Adiós, Lime ―Gohan ríe por el comentario de la chica.

-o-

Mirando el techo de su habitación llevaba varias horas sin poder conciliar el sueño ya que había sido un día de muchas "sorpresas", primero la feria, la pintura azul, Shapner, la discusión con su novia y por último el reencuentro con la castaña: Lime. Había pasado mucho tiempo sin saber de ella pero un remordimiento se instaló en su interior ya que empezaba a incomodarlo, mordiéndose el labio inferior no podía dejar de sentirse culpable de no haberla ido a visitar. Pero al verla parada enfrente de él, entendió que estaba bien y al menos noto que no estaba enojada con él por todos aquellos años sin saber de su paradero.

Empero, había otra cosa que lo aquejaba. Incorporándose en la cama, Gohan camina hacia el ventanal la cual ve su propio reflejo en el vidrio que no pasó desapercibido por él. Volviendo al asunto de Videl, claro estaba, debía hablar con la hija de Mark lo antes posible. Su corazón empezaba a latir con más rapidez, esa chica lo volvía loco y estar peleado con ella no lo soportaba.

Decisión.

Girando a su derecha, observa la caja que estaba en la mesita de noche― debo dárselo…

-o-

Eran las seis de la mañana y Videl se encontraba realizando una serie de ejercicio en el patio trasero de Capsule Corp., hacía tiempo que no le dedicaba por lo menos un rato a las artes marciales la cual era una disciplina que le gustaba con demasía. Con los audífonos puestos mientras escuchaba música para concentrarse, eleva su brazo izquierdo mientras que el otro brazo lo sujeta de la muñeca para halarlo y sintiese que el musculo se estirara, haciendo lo mismo para el otro brazo repitiendo el ejercicio varias veces. Después, Videl se inclina hacia adelante para nuevamente estirar ambos brazos para tocar las puntas de sus pies con los dedos de sus manos de igual manera repite la rutina varia veces. Y por último, eleva primero una pierna flexionando la rodilla hasta casi tocar su pecho haciendo esto y viceversa.

Quedándose en el mismo lugar, la hija de Miguel cierra sus parpados para relajar sus facciones a la vez que tranquilizaba su respiración.

Gohan llevaba observándola desde que empezó su calentamiento, lentamente se acercó y al estar detrás de la chica coloca sus manos en los ojos, acto que la chica de ojos color zafiros responde tanteando con sus manos, conocía perfectamente al dueño de esas manos. Tomándolas con cariño las aparta de su cara sin soltarlas.

Silencio.

Algunos de los dos, debía hablar.

―Podemos hablar ―dicen al mismo tiempo. Ambos pelinegros ríen.

―Tu primero, Videl ―recarga su barbilla en el hombro de la chica.

―Discúlpame, sé que debí ponerle un alto a Shapner… yo, fui una estúpida ―sonríe con amargura sin mirar al erudito― ahora comprendo que debí ponerme en tu lugar y me arrepiento de las palabras que dije ―baja la mirada― Gohan, yo… entiendo que estuvieras celoso. Pero métetelo en la cabeza, Shapner no significa nada para mí.

Gohan se queda callado, admiraba a esa mujer que siempre es tan directa con las cosas.

―No digas nada, Vi. Lo entiendo perfectamente ―soltando las manos de la chica para rodearla con sus brazos― sé que harías lo mismo por mí ¿cierto?

Videl solo asiente― De ahora en adelante, debemos ser más honesto diciéndonos las cosas ¿De acuerdo, Gohan?

―Sí, está bien… ―cambiando de tema― ibas a entrenar o algo por el estilo ―la mira de reojo.

―Emm, sí. Aunque ahora que lo recuerdo tenemos una pelea pendiente ―sonríe.

― ¿Qué? ―la deja de abrazar.

―No me digas que ya se te había olvidado ―frunce el ceño.

―N-No no es eso ―piensa― "!Rayos! ahora que hare…".

―Me lo prometiste o será que tienes miedo ―se pone de frente al saiyajin.

El primogénito de Milk debía cumplir el capricho de su querida novia― De acuerdo, tu ganas ―dice suspirando.

― ¡Muy bien! ―sonriendo― que el combate empiece, quiero saber que tan fuerte eres, Gohan.

Videl tomo distancia por unos cuantos metros del moreno, quien se posiciono con su pose de combate, esperando que el erudito hiciese lo mismo que ella. Por otra parte, Gohan se quita los lentes dando la media vuelta para dejarlos en la mesa que se encontraba cerca. Respirando hondo, se gira para seguir el mismo camino que tomo. Posicionándose en su lugar la cual, se posiciona de la misma manera que la pelinegra.

―No quiero que seas compasivo conmigo quiero que des lo mejor de ti, Gohan.

―De acuerdo ―de alguna u otra forma debía de tener cuidado con su fuerza hacia la hija de Mark. De alguna forma tenía miedo de lastimarla.

― ¡AAAAHHHH!

Continuará...

Espero les haya gustado este capítulo de mi humilde fic, así como yo disfrute escribirlo. Sinceramente me gusto este capítulo, me siento satisfecha por lo que escribí, no sé ustedes que piensen :'). Hagan sus apuestas quien ganara el duelo, Gohan o Videl *risa malvada*.

Primero que nada si en el capítulo anterior se dieron cuenta del nombre de Lime, pues que creen… Lime vino para quedarse y eso lo sabrán conforme avance la historia no quiero adelantar detalles de lo que pasará con ella. Además sabemos que es un personaje NO CANNON, ya que sólo salió en los capítulos de relleno en la saga de Cell.

Finalmente, quiero agradecer por los reviews de LDGV, Kellz19 y SViMarcy. Mil gracias por comentar me hacen muy feliz. Bueno cualquier queja, sugerencia, crítica, hasta tomatazos si gustan son bienvenidos.

Saludos.

Nos vemos, hasta la próxima.