Hace un año subí un one-shot llamado "No soy Gay" que pareció encantar a muchas personas y estas me pidieron continuación. En su momento no me apeteció la idea, pero hoy después de pensarla, tome la decisión de hacer algunos capítulos para ver que tal nos va.

Ladybug no me pertenece.

I am not Gay

Epilogo

Había nacido en Francia.

Pero Inglaterra tenía su encanto, en especial Londres.

Las calles eran diferentes a las de Paris, su gente no era muy amable y siempre usaban abrigos para cubrirse por el frio. Los taxis tenían su toque especial y habían algunas cafeterías en todos lados. Moverse por las calles era difícil si no estás acostumbrado y pocos niños se ven algunas horas del día. Aun así para Marinette era la ciudad que más amaba, en la cual había crecido y fue su inicio como Ladybug.

Había soñado con volver y pasear por sus calles.

Pero no de esta manera.

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Miro atentamente el rio sobre el cual estaba el puente, era bastante normal y sencillo, publico, visible, donde miles de ingleses pasan todos los días. Muchos habían pasado a su lado y nadie sabía que era Ladybug, al menos por ahora su identidad seguía secreta.

Hawk Moth no estaba desaparecido.

Gabriel Agreste si, este había desaparecido del mundo de la moda como el real sin dejar rastro. Al igual que su asistente quien tampoco parecía en algún lado.

Dejando a Adrien solo.

La tragedia se había disparado como pólvora causando mucha controversia. Colette rápidamente llego a Paris, llevándolos a ambos fuera de este sin muchas preguntas, al menos durante un mes no tendrían problemas, luego deberían retomar las clases en Inglaterra, ya que habían cambiado de matrícula para finalizar los últimos dos meses.

Así no perder el año.

Adrien claramente era el heredero de la industria de su padre, pero mientras tanto había pasado a uno de los gerentes generales para controlarlo. Por lo cual Adrien estaba en una especie de protección a testigos por ahora, ella simplemente lo acompaño porque era mejor que hacerlo solo. Nino y Alya no sabían mucho más que pocas cartas que enviaron y ninguna de ellos fue entregadas a su persona.

No era momento.

Inglaterra no era el mejor lugar para ir, dado que su identidad era conocida. Pero sus padres aún seguían en Estados Unidos, volver como Marinette sería solamente un tiempo, ya que si volvían a Paris seria bajo la identidad de Mark.

Era interesante volverse a poner ropa femenina, aunque era algo sport y masculina, aun parecía más una chica que un chico. Además su cabello había estado creciendo como Mark y no lo había cortado tanto, ahora estaba casi rozando sus hombros.

Tal vez lo dejaría largo y usaría una gorra.

Era estúpido.

Pero le gustaba su cabello largo.

Un toque en su hombro le hizo voltear, descubriendo que Adrien había vuelto con la bebida que le prometió. Su mirada aún estaba vacía, muy similar a la suya cuando paso todo lo de sus padres, así que no lo culpaba, solo lo acompañaba en su soledad.

Al igual que él la sano.

Era su turno de hacerlo.

—Gracias—dijo tomando su bebida de manzana.

Adrien sonrió levemente, de forma hueca y chueca, aun así bella al ser un modelo.

Ocupaba tiempo para sanar.

—Colette nos dijo que aún teníamos el día libre, podemos ir a la vieja panadería de mis padres…si bien Kagami está fuera del país, sería interesante ver a Clarissa o Bennedict para charlar—expreso de forma tranquila.

Al igual que las otras veces, Adrien asintió vagamente distraído.

Así era siempre.

Estaba tan perdido en el mundo, que aceptaba que lo llevara por todos lados en forma automática, contaba historias que este escuchaba muy poco y pasaba gran parte del día suspirando. En la noche ambos compartían cama (solo compartían mal pensados) el chico tenía varias pesadillas y ella se encargaba de consolarlo, Tikki y Plagg también eran de mucha ayuda.

Colette estaba ocupada en un trabajo importante, por lo cual siempre dejaba una gran cantidad de dinero, les advertía estudiar y luego de marchaba.

Una gran cuidadora.

Comenzó la caminata con Adrien tomado de su mano, el chico la apretó levemente y ella le sonrió, aunque este no lo hizo, pudo ver agradecimiento en sus ojos.

Lo primero que hizo cuando pudo fue mandarle mensajes a Clarissa y a Bennedict al llegar, solamente había hablado por teléfono con ellos, pero estaban emocionados de saber de ella después de tanto tiempo. Les explico cómo pudo y sin revelar nada lo pasado, a lo cual ambos se preocuparon, pero aun así Kagami había explicado parte de la situación.

Había prometido verlos.

Pero aún no lo hacía.

Hoy era un buen día.

Tanto Clarissa como Bennedict estaban al tanto de Adrien y de lo importante que era para ella, también eran personas muy carismáticas que podrían ayudarlo a olvidar todo lo malo de su vida unos momentos.

Con eso en mente apresuro el paso.

La panadería de sus padres en Inglaterra al igual que en Paris, quedaba en una esquina, era gigante y tenía incluso sillas para comer dentro. Bennedict quien había quedado de segundo a cargo junto con Margoth (la empleada más antigua con 30 años que estuvo con sus padres desde el inicio) eran que administraban ahora el local, gracias a la ayuda de Colette con el papeleo, gran parte de las ganancias era enviada a sus padres o ella para solventar sus gastos.

Al entrar el olor a pan fue nostálgico y abrumador, así que sonrió al notar que ya había pasado la hora de más ventas y estaba vacío el local, aunque en unas horas volvería a llenarse.

Fue cuando lo vio.

Con la cabellera castaña ahora corta, con ropas normales y un delantal en su cadera, aún tenía los ojos más hermosos de color gris que había visto. Diviso algunas quemaduras en sus manos por hornear y su cuerpo un poco más musculoso, seguramente había cargado varios sacos de harina.

—¡BEN!—grito alegre de verlo después de tanto tiempo.

El chico pestañeo dejando de colocar los panes en un estante, para voltear a verla con confusión.

Ella ahora tenía el cabello algo más corto que cuando lo conoció, con un pantalón abombado (era muy práctico para correr) y tenis convserse. Tenía una playera pegada al cuerpo de un video juego y con una sudadera de cuadros oscuros.

Pestañeo nuevamente, antes de que el reconocimiento pasara por su rostro.

—¡MARINETTE!—grito antes de abalanzarse sobre ella y envolverla en un fuerte abrazo.

Bennedict le recordaba ahora a su padre (luego de pasar toda la etapa de enamoramiento y conocer a Adrien) siempre olía como este, era grande y sus abrazos eran demasiado cálidos. Era parte de su familia y alguien a quien amaba con todo su corazón.

Lo había extrañado tanto.

Ambos se separaron después de darse un fuerte abrazo de oso, viéndose aún emocionados. Sabía por parte de Kagami que Bennedict aún no tenía novia, aun así siempre los sentimientos del chico fueron a ella como hermandad, había aceptado salir solamente para probar, no estaba enamorado ni nada.

Antes que todo era familia.

Era feliz verle.

De pronto una mano se posó sobre la suya, giro curiosa para ver como por primera vez de todo lo ocurrido, había una chispa en los ojos de Adrien mientras la sujetaba de su mano y la atraía a su persona.

Fastidio.

Molestia.

Enojo.

¿Celos?

Tanto ella como Bennedict pestañearon sorprendidos, pero fue el chico de Londres quien pareció entender todo y alzo sus manos en defensa.

—Tranquilo chico, Mari es como mi hermana pequeña, que la hubiera besado antes no significa que ahora este enamorado de ella—hablo Bennedict.

Terriblemente sincero como siempre.

Adrien se tensó más, mientras pasaba una mano por su cintura de forma posesiva.

Ella suspiro de forma resignada, pero internamente feliz de que Adrien volviera a mostrar emociones, además de que siempre era divertido ver al chico celoso por ella.

Costo más de dos porciones de chocolate, un chesscake fresa y varios batidos, que Adrien pudiera soltarse un poco con Bennedict. Ambos eran similares en muchas cosas, en que siempre atraían a las personas y eran de personalidad muy fresca, la luz en medio de la tormenta. Aun así Adrien era celoso, posesivo y siempre parecía abrazarla cuando este comentaba algo sobre ellos, aunque fuera en sentido familiar.

Había una chispa ese día.

Algo estaba pasando.

Adrien volvía y ella estaba feliz, así que no le regaño por los celos.

Hasta que Bennedict comenzó a contar historias vergonzosa de ella.

—No sabía que yo le gustaba, pero eso explica porque estuvo tan avergonzada cuando el pastel literalmente exploto sobre ella y los demás miembros de mi familia porque tiro accidentalmente un balón—hablo el chico sobre una de sus fiestas de cumpleaños.

Ella gimió recordando ese día tan humillante.

En cambio Adrien se rio.

Detuvo su reclamo mental, para ver fascinada como el chico volvía a reír, hace mucho no lo escuchaba reír.

Lo vio enternecida, antes de tener que marcharse fuera para contestar una llamada de Colette.

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—No deberías preocuparte…Marinette te ama—hablo Bennedict apenas la chica se marchó.

Pestañeo confundido, dejando sus pensamientos sobre su familia fuera de su cabeza, como hizo desde que se topó con el chico.

Su confusión pareció divertir al chico, que sonrió divertido.

—Admito que Marinette siempre me pareció una hermana y si alguna vez pensé salir con ella, era porque me emocionaba la idea de que una chica tan mona estuviera interesado en mí, era una oportunidad que no pensaba desperdiciar—

Ignoro la punzada de celos y la burla de Plagg en su ropa, porque la historia aun no terminaba.

—Pero la forma en que ella te ve es diferente a como me vio alguna vez a mí, es raro, como si ambos estuvieran destinados…Marinette no puede decirlo pero si te ama y no te dejara solo en lo que fuera que pases—hablo viéndolo fijamente.

Sus ojos decían más que sus palabras.

Como si pudiera ver su alma.

Sonrió levemente.

Tal vez ahora todo era difícil y estaba acostumbrándose al nuevo ritmo de vida que tendría que llevar de ahora en adelante.

Pero sabía que Marinette estaría ahí.

Era paciente.

Le tomaba de su mano.

Se aseguraba que estuviera ahí.

—Yo también estaré para ella—expreso con tranquilidad.

Bennedict sonrió complacido, antes que Marinette llegara diciendo que Colette los buscaba para charlar. Al final si bien lo conoció entre celos, la despedida fue de forma amigable. Este explico que Clarissa estaba ocupada estos días, pero que al igual que Kagami estaba haciendo vueltas para ir a Paris cuando ellos volvieran y él guiño un ojo diciendo que estudiar en Francia le parecía interesante.

Tener caras conocidas sería bueno para empezar una nueva vida.

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—Iniciativa de héroes—hablo Adrien a su lado confundido cuando Colette le entrego una carpeta.

Marinette quiso hacer la burla de las películas de Marvel y DC, pero decidió guardarse sus comentarios. Esto era la vida real y no una historieta, por muchas similitudes que hubiera. Pero desde que conoció a los súper villanos, tuvo que prepararse para cosas que solo vería en la ficción.

Así que en su lugar vio una carpeta, donde había información clasificada y decodificada del libro de Fu, además de otras piedras que no reconocido del todo…hasta pasar a unas que uso The dragón a otros mitos que parecían leyendas de otros países.

—Desde la salida de The dragón junto con los zodiaco, alrededor del mundo otros villanos aparecieron—expreso Colette con tranquilidad.

Tikki y Plagg estaban sentados frente a ellos con pequeñas tazas de té.

—Como Fu y yo hablamos, el mal existe desde el inicio del tiempo como el bien, cuando un villano aparece, los héroes inevitablemente surgen, sea la época que sea—hablo ahora mostrando dos fotografías.

En una se observaba a un chico de piel morena, ojos de color celeste claro y cabellera negra algo alborotada, a su alrededor parecía haber una corriente de aire como torbellino y otra de fuego, mientras sus ojos brillaban levemente.

La otra mostraba a una chica que parecía tener el cabello rojizo, con ojos de forma gatuna y una cola que salía de su parte trasera, al igual que sus extremidades parecían estar cubiertas de pelo, en medio de una transformación.

—Su nombre es Haru que tiene la edad de Marinette, aunque es conocido como Elementary, el chico lucha en Japón contra una banda de criminales que parecía ir por unas reliquias del espacio y tiempo. La chica es Jennifer, es una chica que parece tener poderes de transformarse desde su infancia en cualquier animal (como cuando se transformó animan el padre de su amiga Alya) y suele luchar contra bandidos en las noches, pero también ayuda en desastres naturales—

Los dos tomaron las fotografías, antes que Tikki y Plagg se pusieran a cada lado de ellos.

—Los poderes de los elementos es bastante cliché, hay unas piedras mágicas en Japón que le dan poderes…las conocí el milenio pasado—hablo Plagg claramente aburrido.

Adrien le vio enojado.

—Los poderes de transformación son poco comunes, pero existe una familia que tenía un colgante que proviene del amazonas, que daba el poder a quien lo cargaba, de ser uno con los animales—hablo Tikki con ojos emocionados.

Marinette le vio con una leve sonrisa.

Colette asintió como si conociera esa información.

La pregunta seria.

¿Qué no conocía la chica?

—Estuve investigándolos y ambos estuvieron de acuerdo en formar parte de la iniciativa con ustedes si aceptaran, Fu también está ahora mismo preparando a tres nuevos portadores de los Kwami para ayudarles a seguir la lucha contra Hawk Moth. Además este tiene dos socios que parecen al tanto de ustedes y no harán las cosas fáciles—hablo Colette de forma seria.

Luego de decirles que pensaran bien el asunto, se marchó como llego.

Dejándolos a ellos con varias carpetas, para que meditaran en el asunto.

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Esa noche noto que Adrien no durmió, se quedó al borde de la enorme cama viendo a la nada. Si bien era claro que ella si tenía mucho sueño, decidió sentarse al borde de la cama con este, viendo como Plagg y Tikki dormían tranquilamente en unas camas que les hicieron.

—El mundo es más grande de lo que parece—murmuro Adrien por bajo.

Lo vio de reojo.

Pero lo entendió.

Lo supo cuando vio a The dragón atacar a Londres y los doce zodiacos.

El mundo era un lugar grande, peligroso y cruel.

Puso suavemente su mano sobre la de Adrien, provocando que este le viera con curiosidad.

—Estamos juntos Adrien, el gato negro y la mariquita, si hace siglos que Tikki y Plagg están luchando al lado de los humanos, ambos podremos hacer todo posible—

La mirada de este bajo, así que suavemente la levanto por la barbilla dándole una sonrisa de ánimos.

—No lucharemos contra tu padre—

—Pero él…—

—Déjame terminar, no lucharemos contra él, vamos a rescatarlo, vamos averiguar que paso con tu madre y también ayudaremos a esos chicos Haru y Jennifer para luchar contra el mal. Somos héroes, lo supe desde el primer momento, tu eres Chat Noir un héroe me gustara o no, y yo soy Ladybug, estamos destinados a luchar juntos y vamos a lograrlo—

Vio una media sonrisa en el rostro de Adrien, antes de envolverla a ella en un abrazo, que rápidamente ella correspondió.

Ellos no estaban solos.

Adrien se estaba recuperando.

Ella lo ayudaría.

Ambos estaban el uno para el otro.

Y tenía el presentimiento que no estarían solos por mucho tiempo

.

Semanas después supo que tenía razón…

En medio de la torre Eiffel, ahora ya no había solo dos sombras en medio de esta. Detrás de ella como Ladybug, detrás de Chat Noir que estaba a su lado en forma felina y con una sonrisa igual que brillaba hasta sus ojos, ahora había tres sombras más.

Ella era la única que conocía que una de esas sombras, una con trajes naranjas y cola de zorro, era Alya como la nueva portadora del Miraculous del zorro Trixx. Era la única identidad que conocía, mientras las otras dos aun no le eran tan familiares o no le habían llamado a la una de la madrugada para contarle emocionada.

Otra sombra era un chico con ropas verdes, que era el nuevo portador de Wayzz, quien siempre era bastante recto con las normas y sonreía en pocas ocasiones. Aun no agarraba confianza. Mientras que la otra era la portadora de la abeja, una chica rubia que siempre era digna y trabajaba bien en equipo.

Junto a ellos tres, debían seguir enfrentando a Hawk Moth y sus camaradas como villanos.

Sonrió a los chicos, quienes le regresaron las miradas igual de sonrientes. Luego miro a Chat, quien aún tenía una gran carga sobre él al igual que ella, ambos se encargarían que esa carga no pasara a los demás, ambos eran los veteranos y los ayudarían.

—Hora de trabajar—anuncio.

Los tres héroes nuevos salieron volando rápidamente.

En cambio Chat Noir le tendió una mano listo para patrullar ambos juntos, ella acepto, igual era su querido novio.

Y aun ambos tenían que descubrir muchas cosas juntos.

En esta aventura que apenas iniciaba.

Fin

Fin

No es tan largo como un capitulo normal, solamente es para que la historia este abierta a una segunda temporada (la cual no tengo planeada) que podria ser escrita cuando se terminen de subir la segunda y tercera temporada de Ladybug. Esto debido a que las nuevasa temporadas ofrecen nuevos villanos y personajes, que me gustaria incluir. Pero es es todo chicos. Aqui esta el final de esta historia, espero de verdad hacer una segunda temporada al menos el siguiente año, pero hay que ver que pasa :3

Gracias por el apoyo grandisimo, en realidad me emocione mucho que en ambas plataformas donde subo la historia, fuera tan aceptada. Quien diria que esto saldria de una historia corta xD Deberia plantearme hacerlo con otras de mis historias cortas.

¿Que dicen?

Cual hisotira (de cualquier fandom que escriba) les gustaria ver en una historia larga en mi cuenta :D

Espero leerlo en sus comentarios.

Nota:

Por si no lo saben en mi perfil tengo un link de mi página en Facebook donde público mis actualizaciones y donde chateo con los chicos sobre temas de anime, manga, juegos, libros, series…etc por si alguno quiere comunicarse conmigo o visitar un rato para conocerme mejor.

Sayonara sexys lectores.