Dragon Ball y sus personajes no me pertenecen, son propiedad de Akira Toriyama.

Capítulo 1: El Día de la Colecta.

El alboroto era generalizado a la entrada de la Preparatoria Estrella Naranja. Todos los estudiantes se movían por los bulliciosos pasillos inundados de estudiantes que, a duras penas, intentaban llegar a sus correspondientes clases antes de que la campana volviera a sonar.

Había pasado un mes desde la derrota de Majin Buu, por lo que el saiyan más fuerte de todo el universo había vuelto a su clásica rutina asistiendo a sus clases. Posiblemente, ese guerrero era la persona que más nombres tenía en toda la preparatoria, como por ejemplo: Gohan, el nerd, el sabelotodo, el chico adorable, la estrella del béisbol, el Gran Saiyaman, o el Guerrero Dorado.

Sí, solo había pasado un mes desde la derrota del monstruo rosa, por lo que Shenlong no sería llamado hasta cinco meses más tarde. Hasta entonces, los seudónimos de Gohan eran conocidos por todos los estudiantes y habitantes de Ciudad Satán.

Gohan caminaba por los pasillos de la preparatoria, después de haber bajado las escaleras procedentes de la azotea, junto con sus amigos: Sharpner, Iresa y Videl. Esta última era alguien muy especial para Gohan… Para él, ella era la persona más importante y la que más le importaba de todo el universo, junto con su familia. Era más que obvio, tanto por profesores como alumnos, incluso por los mismísimos amigos de Gohan, que entre ambos chicos había un sentimiento completamente mutuo que superaba por completo una simple amistad. Todos los que los rodeaban se percataban al instante de la coquetería que ambos compartían pero parecía que ninguno de los dos era capaz de percibir los sentimientos del otro.

Volviendo a donde estábamos, Gohan, Videl, Sharpner e Iresa caminaban por el bullicio de personas camino a su salón, donde asistirían a la primera clase después del descanso, era turno de Historia. No se demoraron mucho en conseguir acceder al lugar, donde unos cuantos alumnos charlaban entre ellos, otros se encontraban sentados escribiendo y una escasa mayoría había empezado su tradicional hora de sueño mucho antes de que el profesor comenzara su lección.

Los chicos subieron los escalones rumbo a sus respectivos lugares. Lugares que se habían visto alterados desde el final del Torneo de Artes Marciales, cambiando los lugares de Iresa y Videl, por lo que la chica de ojos azules se encontraba junto a su compañero Saiyan. Todo fue una estrategia de Iresa para intentar emparejar de una vez por todas a sus amigos.

-¡Por fin viernes! – exclamó la chica de cabello rubio estirando sus brazos hacia el techo. - ¡Esta semana ha sido realmente cansada! Merezco un buen descanso. Voy a estar todo el fin de semana sin hacer nada de la Preparatoria.

-Corroboro tu idea – dijo Sharpner a su lado -. Aún queda mucho para los exámenes finales, por dos días de descanso no va pasar nada.

-Por ahora no llevamos demasiados deberes… No seáis vagos u os costará poneros al día luego – comentó Gohan al escuchar los vagos planes de sus amigos.

-Claro, cerebrito, dedicarás todo el fin de semana para estudiar y ser el campeón de los nerds – dijo Sharpner mientras reía.

-Parece que has olvidado la fuerza de Gohan, ¿verdad, Sharpner? En el torneo mostró mucho poder – comentó Iresa poniéndole ojitos de admiración a Gohan, quien se sonrojó ligeramente.

-Deja en paz a Gohan, Shapner – espetó Videl con el ceño fruncido por el comentario de Iresa -. Lo que pasa es que le tienes enviada a Gohan por ser tan inteligente y fuerte.

-¿Yo? ¿Envidia? ¡Por favor! – dijo indignado Sharpner ligeramente avergonzado.

En ese momento se hizo el silencio en el aula, puesto que le profesor caminaba lentamente hacia su escritorio, donde dejó reposar todos sus materiales.

-Buenos días, alumnos. Antes de comenzar con mi clase, tengo que comentarles acerca de un importante evento que tendrá lugar en la Preparatoria en su próxima semana.

Todos permanecieron atentos a las palabras del profesor, hecho bastante fuera de lo normal ya que casi nadie solía escuchar las explicaciones de la clase de Historia. En esta ocasión, incluso los alumnos que estaban durmiendo, habían abierto ligeramente los ojos para enterarse de lo que se trataba ese evento.

-La semana que viene tendrá lugar "El Día de la colecta". ¿En qué consiste? Pues bien, "El Día de la colecta" es una celebración que se realiza una vez al año en la Preparatoria Estrella Naranja que tiene como objetivo obtener un beneficio económico para ser destinado a buenas acciones como ONGs u orfanatos.

Con esas palabras, los que habían abiertos los ojos, decidieron volver a cerrarlos y continuar con su larga siesta diurna.

-Los alumnos podéis participar realizando diversos espectáculos, los que sean de su gusto, ya sea obras teatrales, canciones, combates… Lo que más les guste.

Un murmullo generalizado comenzó a brotar entre la muchedumbre de estudiantes quienes conversaban con sus compañeros acerca de los posibles espectáculos que estarían dispuestos a realizar.

-Profesor, ¿es obligatorio? – preguntó Sharpner desde su asiento.

-No, no es obligatorio – comentó de mala gana por la poca participación.

-¡Sharpner! ¡Es por una buena causa! ¡Claro que participarás! – le gritó Iresa a su lado, indignada por la actuación egoísta de su amigo, haciendo que el profesor asintiera con orgullo al mirarla.

-Muy bien. Vayan diciéndome ideas.

-Nosotras cantaremos una canción – dijo una chica de cabello rojizo, Ángela, señalando a sus amigos mientras ponía una estúpida voz muy melosa.

Gohan miraba pensativo a la escena frente a él. ¿Obras teatrales? ¿Canciones? ¿Qué es todo es? ¡Él era un horrible actor! ¡No podía estar pasando eso!

-Oye, Gohan… - dijo Videl en un susurro.

-¿Sí? – preguntó él dejando atrás sus pensamientos.

-¿Qué te parece si hacemos un combate? – le preguntó su amiga con una sonrisa.

-¿Un combate? ¿Tú contra mí? – le respondió el chico con otra pregunta.

-Sí, ya sé que no soy rival para ti, pero esto es un espectáculo, lo alagaremos para que lo que pague la gente merezca la pena, ¿aceptas?

-Mmmm… De acuerdo… - comenzó a decir algo indeciso el joven, hasta que Sharpner volvió a gritar.

-¡Profesor! ¡Gohan se ofrece voluntario a hacer una obra teatral! ¡Le gusta disfrazarse y es un gran actor! – gritó entre risas provocando que algunos de los alumnos allí presentes rieran también.

-¿Es eso cierto, señor Son? – preguntó el profesor con una sonrisa mirando a Gohan -. No esperaba menos de usted.

-Em… - comenzó Gohan sin saber que decir -. Maldito, Sharpner… ¿Y ahora qué hago?

-Es cierto, profesor – comentó Videl a su lado, lo que provocó que su amigo la mirara con horror-, y yo actuaré con él.

Un enorme murmullo volvió a aparecer en el aula mientras que los estudiantes se giraban para mirar a lo que ellos consideraban ya una "pareja" oficial. Se pudo escuchar entre los alumnos un "que monos son", "que linda pareja hacen", incluso algún que otro "que suerte tiene Gohan".

Los chicos se sonrojaron fuertemente al escuchar esos comentarios, pero el profesor, atento a todo lo que ocurría, decidió salvarlos dando comienzo a la clase.

-Muy bien, entonces el señor Son y la señorita Satán harán una obra teatral. Quien quiera elaborar más actuaciones debe contactar conmigo antes de que acabe este día escolar. Comencemos la clase…

-Accediendo a Briefsbook – informó una voz robótica procedente del ordenador de Gohan.

Las clases habían concluido y el chico se había marchado a su casa en las Montañas Paoz. Debía contactar con sus amigos para el tema de la obra de teatro. Debido a la distancia, la única manera era el uso de la red social diseñada por su amiga Bulma: Briefsbook.

Grupo de Briefsbook.

Sharpner: Por fin llegaste, cerebrito.

Iresa: ¡Hola, Gohan! *emoji de corazón*

Videl: Tortugo…

Gohan: ¡Hola a todos! Perdón por la espera.

Videl: ¿Cómo vamos a llevar a cabo la obra?

Sharpner: No entiendo cómo me habéis convencido para hacer esto.

Iresa: Con mi dulce mirada…

Sharpner: *emoji vomitando*

Videl: Por favor, no se salgan del tema. ¿De qué va a tratar?

Iresa: De amor.

Sharpner: De combates.

Iresa: ¡De amor!

Sharpner: ¡No! ¡Eso es asqueroso!

Gohan: O de las dos cosas a la vez…

Videl: Continúa, Gohan.

Gohan: Mmmmmm… Podríamos hacer una de las escenas heroicas del Gran Saiyaman.

Sharpner: *emoji pensativo*¨

Iresa: *emoji de cara con corazones* Que listo eres, Gohan.

Videl: Me gusta la idea.

Sharpner: Venga, y a mí. ¿Pero qué papeles tendremos? ¿De qué tratara exactamente? ¿Cómo ensayaremos? ¿Y los efectos especiales? Me duele la cabeza…

Videl: Calma, calma.

Gohan: Mis padres se marchan todo el fin de semana a la Ciudad del Oeste con sus amigos. Podríais venir a mi casa a pasar el fin de semana y ensayaríamos aquí.

Videl: ¿No les importará?

Gohan: En absoluto.

Iresa: ¡Sí!

Sharpner: ¡Buen plan!

Videl: En ese caso de acuerdo. Hablaremos todo cuando nos veamos.

Gohan: Os espero en unas horas. Adiós.

-Desconectándose de Briefsbook – dijo la voz cuando Gohan cerró sesión.

El joven se levantó de la silla para ir a ver a sus padres y contarles acerca de lo ocurrido en la escuela. Sus padres ya se encontraban, junto a Goten, haciendo el equipaje.

-Mamá, papá. Hoy en la escuela nos han encargado preparar una obra de teatro para la semana que viene. Hemos pensado que deberíamos ensayar este fin de semana, por lo que he propuesto que, ya que os vais, vengan a casa a pasar el fin de semana para poder preparar todo. ¿Os importa?

-Por mi parte, no – dijo Goku mientras terminaba de guardar sus gi de combate.

-¿Jóvenes adolescentes con las hormonas revolucionadas pasando un fin de semana solos sin ninguna supervisión adulta? – preguntó Chichi con tono indignado.

-Aquí viene la charla. – pensó el joven saiyan.

-Sabes muy bien lo que pienso de eso, jovencito – le regañó Chichi con un dedo inquisidor apuntando al chico – Pero si es un trabajo del colegio no tengo más opción que dejarlo pasar, después de todo, es tu futuro lo que está en juego. Pero prométeme que no haréis nada extraño y que os comportaréis.

-Lo… prometo… - dijo Gohan completamente sorprendido -. ¡Qué suertudo soy! ¡Ni yo me lo creo todavía!

-¡Hola! – saludó animada Iresa bajando de la nave que Videl acababa de aterrizar en el jardín de Gohan.

Los señores Son ya habían abandonado la vivienda rumbo a West City, donde se reunirían con Bulma y su familia para pasar un fin de semana junto con sus amigos Krilin, Yamcha y demás. ¿Por qué Gohan no había asistido? Pues por lo estudios, obvio. Sabía que el fin de semana iba a tener que seguir estudiando y se negó a acompañarlos a principios de semana.

-¡Qué bonito lugar! ¡Debió haber sido maravilloso criarse aquí! ¿Verdad, Gohan? – exclamó Iresa mirando hacia todos lados y admirando la naturaleza que la rodeaba mientras avanzaba hacia el chico seguida por Sharpner y Videl.

-Sin duda es un lugar muy tranquilo, perfecto para estudiar, ahora entiendo porque eres tan cerebrito – espetó Sharpner.

-Sentíos como en vuestra casa – dijo Gohan hospitalariamente -. Podéis aprovechar estos días también para relajaos de la ciudad. Pasad, os ofreceré unas bebidas.

Los cuatros chicos entraron en la vivienda de los Son, perfectamente recogida debido a la inminente visita, y se sentaron en los sofás donde Gohan les sirvió unas Coke mientras charlaban un poco de la obra teatral.

-Está claro que Gohan será el Gran Saiyaman – comentó Iresa guiñándole un ojo.

-Sí, nadie lo haría mejor que el mismo héroe de Ciudad Satán – corroboró Videl.

-Yo quiero ser el villano. – aportó Sharpner.

-En ese caso… Yo seré la acompañante de Sharpner, mientras que Videl será la chica a la que rescata Gohan – dijo Iresa mirando con una pícara sonrisa a sus dos amigos, quienes se sonrojaron levemente.

-El tema de efectos especiales será fácil – siguió hablando Sharpner mirando a Gohan-, te transformarás en eso que hiciste en el torneo y pan comido. Emitías luz y sonido.

-Vaya… Parece que se acuerdan de todo perfectamente… - pensó el saiyan –. De… acuerdo.

-En ese caso, está todo decidido. Solo queda preparar la obra al completo. – Videl estaba muy alegre con el tema de poder estar junto a Gohan estos días. Los fin de semanas siempre están separados, su relación se limitaba al colegio desde que se acabó con Majin Buu.

-Eso nos encargaremos yo y Videl. Tenemos más tacto que vosotros para escribir historias. Ahora… déjennos trabajar. – dijo Iresa mientras movía su mano hacia ellos indicando que se marcharan.

La noche empezaba a caer en los Montes Paoz. Videl e Iresa se encontraban sentadas en el césped bajo un árbol mientras discutían acerca de la obra y apuntaban en folios los guiones y detalles que podrían hacer del espectáculo algo mucho más divertido al público.

Mientras tanto, Sharpner dormía plácidamente junto al río a unos cuantos metros de las chicas, con un gorro cubriéndole el rostro de los últimos rayos solares. Gohan se encontraba un poco más allá, recostado bajo la sombra de un árbol, tumbado bocarriba y con ambos brazos cruzados tras su cabeza a modo de almohada. Tenía los ojos cerrados, junto a él, había un reproductor de música, cortesía de la Capsule Corporation, que Gohan solía usar cuando se encontraba aburrido y necesitaba algo que le entretuviera.

En ese momento, estaba sonando una canción, una canción hermosa, la favorita de Gohan. Una ligera sonrisa apareció en sus labios mientras la melodía sonaba a su lado. Alcanzó un gran punto de relajación a la vez que la hierba bajo su cuerpo lo invitaba a un tranquilo sueño.

Tell me how I'm supposed to breathe with no air?

If I should die before I wake
It's 'cause you took my breath away
Losing you is like living in a world with no air, oh

-Esta canción me recuerda tanto a Videl… - pensó el chico -. Si supiera cuanto me importa, cuanto la amo. Pero no puedo declararme para ser rechazado y que todo desaparezca…

-Esa es una bella canción.

No se había percatado de que la chica de sus pensamientos había llegado junto a él. Se había sumergido tanto en la melodía que la percepción de su ki se vio nublada por la falta de concentración.

-Oh, Videl. Sí, la verdad es que sí lo es. Sin duda, mi canción favorita – dijo el chico mientras se incorporaba, sentándose en el suelo.

-Nunca pensé que al tímido Gohan le gustara música romántica – contestó la chica con una risa.

-Hay muchas cosas que aún no sabes de mí – Gohan le siguió la gracia – Como que te amo.

-Iresa y yo ya hemos terminado la obra, ha quedado bastante bien a nuestro parecer. Es momento de que la leáis Sharpner y tú, por si hay algo que no es de su agrado.

-Claro… La leeré de inmediato.

Gohan se levantó del césped con una acrobacia digna de un saiyan de su talla, y caminó junto a la chica de sus sueños hacia la orilla del río para leer el guion junto a sus amigos. En ese pequeño trayecto, Gohan fijó la mirada en los ojos celeste de Videl, se veía tan hermosa, tan frágil, como si estuviera hecha de cristal.

-Losing you is like living in a world with no air…

FIN DEL CAPÍTULO 1.

¡Hola! Vaya, cerca de 4 meses sin subir nada… Lo siento muchísimo, pero perdí la inspiración y el tiempo al entrar en la universidad. La parte que habéis leído la tenía escrita desde el mes de agosto, me comprometo a continuarla, aunque mi expresión haya empeorado en estos meses (en mi grado universitario no somos de redactar mucho, solo números jajaja). Espero que les haya gustado el capítulo, cualquier comentario será bienvenido. Nos vemos en el próximo. ¡Adiós!