Buenas a todos, esta es la primera vez que realizo un fic, trate de que se asemejen lo más posible a los personajes, esta historia tiene mucha violencia y lemon, más lemon que violencia jeje espero les guste iré publicando de manera continua, los personajes no son míos perteneces a Yana Toboso, si así fuera Sebastian ya estaría con Ciel a estas alturas en la manga jaja, bueno disfrútenlo…

CAPITULO 1 OBLIGACION

A lo lejos de este mundo casi al llegar al otro, se encuentra la figura de un jovencito que no aparenta más de 15 años, sin embargo, se encuentra en un debate mental muy grande, llegando a la conclusión que los demonios no tienen derecho a obtener felicidad ni siquiera de manera forzada ya que por su naturaleza eso nunca se les será permitido siendo lo más parecido a esto la lujuria y obsesión, tal vez eso es lo que siente; si, sería mucho mejor sentir que solo se ha encaprichado a un ser que perteneció a su pasado y ahora su futuro, de manera tosca sale de sus pensamiento por el sonido insistente de la puerta.

-Amo me mando a llamar- Sebastian le dirigía una fría mirada a Ciel, ya no podía evitar demostrar cuanto odiaba a ese niño, lo odiaba y odiaba que lo obligara a permanecer a su lado, solo esperaba el dia que se aburriera de el esperando que fuera pronto porque sino el mismo terminaría matándolo, su orgullo como demonio había sido quebrantado el mismo dia que supo que Ciel renació como demonio y no tenía la mas minima intención de dejarlo ir, solo recordar la humillante escena en donde el estaba abatido y lleno de algo parecido a la pena por tantos años de servicio sin tener esa preciada alma, veía como ciel sonreía ante una aparente victoria, solo le hervia mas la sangre, esto ya no podía continuar.

-Iremos a cazar almas, ya es hora no lo hacemos hace días- Ignoraba esa mirada tan fría, el sabia como estaba Sebastian, pero… ¿Cómo puedes dejar algo ir cuando quizás de una manera retorcida este mismo te da felicidad?

-Yo al ser un demonio de clase alta no necesito alimentarme tan seguido a diferencia de usted, pero si es tan necesario que vaya por que no puede cuidarse solo lo hare por el maldito contrato- escupió las palabras sin más, esto ya se estaba saliendo de control.

-Deberías cuidar tus palabras demonio- no podía caer en su juego, no, no podía.

-Disculpe mi sinceridad amo- diciendo la palabra "Amo" de manera sarcástica - aunque si dijo Demonio como una ofensa debo recordarle que también es uno, y uno no puro-

-Supongo que la ofensa seria que un puro sea sometido a servir a uno que no lo es- al ver su expresión de enojo sonrió triunfante-

-Si se siente orgulloso porque me condena a servirlo, debería sentirse mejor, porque servirle a usted ha sido el peor de los castigos de mi existencia, estar a su lado es sentirse en el infierno en todos los sentidos- escupio con resentimiento el demonio.

-…- Ciel se quedo sin palabras, no sabia que decir, de alguna manera eso le dolía y mucho, en parte el tenia razón ¿Por qué debería quedarse si no hay un alma por devorar? ¿Por amor? El único sentimiento que lo estaba demostrando solo era odio, lo podía ver en sus ojos de color carmesí.

- ¿Y bien amo, a qué hora salimos? – lo dijo al volver a su apariencia de siempre con una sonrisa, de alguna manera humillarlo le hacía sentir bien.

-Quedate Sebastian, espera a que regrese- le dijo, no se rebajaría a pedirle que lo acompañe pero aunque como amo tenia el derecho no tenia ganas de soportar su cara expresándole siempre que lo hacia solo por obligación.

- ¿Si lo asesinan puedo cambiar el papel tapiz del salón no?, al fin y al cabo seria libre aunque no creo tener tanta suerte.- le decía Sebastian con una sonrisa

-…- cerro de un portazo la puerta, ¿tanto le afectaban sus palabras que ahora se quedaba calllado?

Ciel salio de su mansión, una desolada entre el infierno y el mundo de los vivos, un lugar donde Sebastian lo había llevado, un lugar con una tierra tan acida que impedia que creciera cualquier tipo de vegetación o que viviera algún tipo de animal, como el cielo siempre estaba nublado siempre parecía que llovería aunque nunca pasaba, quería que Ciel se sintiera como se estaba empezando a sentir el, lo que no conto fue que al menor le encanto ese tipo de paisaje.

En el camino por un barrio Londres se estaba desarrollando un escena completamente asquerosa, un grupo de jóvenes reia al golpear en jaulas a unos gatos y cuando los sacaban les prendían fuego y veian cuanto tiempo tardaban en dejar de chillar y comenzar a pelarse hasta morir, en una jaula estaban dos gatitos y su mama, cuando sacaron al gatito su mama intento defenderlo mordiendo la mano del agresor que en un rabia incontrolable le saco con un cuchillo las vísceras a su bebe ante los ojos llorosos de una madre que en la ira se lanzo a su agresor, la agarraron golpearon y al instante le prendieron fuego mientras que su segundo hijo veía con pavor y solo lloraba y maullaba tan fuerte que consiguió que los maleantes fijaran su atención en el, del miedo el gatito solo se orino; Ciel llego en el momento de terminar de ver como un gato terminaba por quemarse, veía las vísceras de lo que parecía un gato bebe y otros 5 cuerpos botados completamente calcinados, no había que ser muy listo para darse cuenta lo que pasaba, miro a los costados y veía que había algunas personas que se iban miraban asombrados por la escena pero nadie hacia nada ante la risa de esos jóvenes que parecían disfrutar el dolor ajeno, podía oler el miedo por parte de un pequeño ser que estaba cayendo en shock y la excitación de 4 personas que disfrutaban la escena¿Es que acaso la humanidad estaba tan podrida que solo el sufrimiento y humillación del más débil y puro era lo único que les causaba satisfacción? ¿Acaso esos hombres que lo torturaron y lastimaron lo hicieron solo por placer y no por una razón en específico? Reacciono cuando estaban comenzando a quemar a ese gatito en donde después de mucho tiempo libero una furia contenida donde termino degollando y destrozando el cuerpo de 4 jovenes, se sintió tan asqueado que ni siquiera quiso devorar su alma el fuego se apago cuando la sangre baño al gatito y su maullido era tan ronco que apenas era audible, Ciel estaba como en una especie de confrontación mental tenía tanta rabia y dolor despertado, el pensaba que había dejado todo eso atrás, estaba por irse cuando de una de de las agujetas de su zapato mordía el gatito aferrándose a Ciel, lo levanto y se dispuso a irse.

Al momento que Ciel se fue tuvo un mal sabor de boca que provenía de su estomago, quizás era mejor haberlo acompañado, al fin y al cabo el siempre se caracterizo por ser un buen sirviente, ¿ni siquiera en la ausencia Ciel Phantonhive podía dejar de atormentarlo?, cuando escucho el sonido de la puerta abrirse, sonrio para sus adentros, el mocoso lo necesitaba para todo.

-¿Bocchan, tan rápido se arrepintió de salir solo?- le iba diciendo hasta que paro en seco al ver la figura que se iba mostrando, una figura de una chica con un kimono rojo sumamente escotado en donde también en la abertura se podía ver una de sus piernas y los cabellos castaños amarrados por 2 palillos y una piel clara-

-Reykor, cuanto siempo , te sienta bien el traje.

- ¿Caled, que haces aquí?- lo miraba sorprendido, eso solo podía significar una cosa…-

- Ya deberías saberlo, tu padre te esta buscando, y cuando escucho rumores de que de depredador te convertiste a esclavo primero estallo en risa, luego… bueno ya debes imaginarlo.

-No soy ningún esclavo, y deberías tener mas cuidado en como hablas ya que seria tan fácil cortarte la lengua.

-Tranquilo Reykor , mas bien estoy aquí para solucionar tus problemas, tu padre aun no sabe donde te encuentras tenemos un par de semanas para que te localice, lo hago por los viejos tiempos, ya sabes- se lo dijo acercándose peligrosamente al ojicarmin.

-Eso me parece muy bien- lo dijo seductoramente para después devorarse el uno al otro hasta que llegara Ciel.

Sebastian estaba echado en el mullido sillón de la sala pensando como debería proceder con su amo, y en toda la estrategia que de ahora en adelante debería seguir para poder ser libre cuando de repente sintió un fuerte olor a sangre y carbón, salió rápidamente solo para encontrarse con una grotesca escena.

Ciel estaba completamente manchado en sangre y podía escuchar un roco maullido casi inaudible, no quería sacar conclusiones apresuradas pero necesitaba respuestas.

-¿Amo que fue lo que sucedió?

-los quemaban- decía tan bajo pero el podía escuchar perfectamente, mientras que despacio se dirigía a su habitación con la mirada perdida hacia la nada sin pestañar-

- ¿Está usted bien?- se imaginaba lo que pasaba y una enorme ira le consumía por dentro si era lo que estaba pensando iría a matar a esos tipos con sus propias manos de una manera lenta y dolorosa-

-Se divertían haciéndolo, nadie hacia nada, medio asco comer sus almas, yo no pude-

-Ni yo lo hubiera hecho, no se preocupe- tenia que tranquilizarse, por primera vez sentía que su amo hacia algo bueno por él, él amaba a los gatos y saber que su amo mato a diestra y siniestra por esos adorables seres lo hacia sentir de una manera extraña.

-Lávalo por favor, ire al baño a vomitar- le dio al gatito que tenia en su regazo, imaginaba cuan asqueado lo pudo dejar tal escena como para que el pidiera las cosas de manera de suplica.

Desde que Ciel se convirtió en demonio, Sebastian hizo todo lo posible para no tocarlo ni mantener ningún tipo de contacto, sentía que ya no era su deber, él era un demonio también y lo que menos quería era tocar al ser que sello su destino, pero ahora las cosas tenían que cambiar ya que si todo iba de acuerdo al plan en menos de 3 semanas él podría ser libre sin contar con la venganza que consumaría a Ciel por haberlo retenido tanto tiempo, una sonrisa grotesca se dibujó en su rostro mientras terminaba de secar al gatito que tenía en sus manos.

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No se olviden comentar… y gracias por leerlo, mas adelante habrá lemon ;)